Bible Commentaries
1 Samuel 23

Comentario de ClarkeComentario Clarke

Versículo 1

CAP�TULO XXIII

David socorre a Keilah, asediada por los filisteos; los derrota

y libera la ciudad, 1-6.

Sa�l, al enterarse de que David estaba en Keila, decide venir y

a apoderarse de �l, 7, 8.

David pregunta al Se�or sobre la fidelidad de los hombres de

de Keila hacia �l; se le informa que si se queda en la ciudad

los hombres de Keila lo entregar�n a Sa�l, 9-12.

David y sus hombres escapan de la ciudad y llegan al

desierto de Zif, 13-15.

Jonat�n se encuentra con David en el bosque de Zif, fortalece su mano

en Dios, y renuevan su pacto, 16-18.

Los zifitas intentan entregar a David a Sa�l, pero �l y sus�

hombres escapan a Ma�n, 19-22.

Sa�l llega a Ma�n; y habiendo rodeado la monta�a en la que

se encontraban David y sus hombres debieron caer inevitablemente�

en sus manos, si no hubiera venido un mensajero a llamar a Sa�l para�

socorrer a �Jud�, entonces invadida por los filisteos, 25-27.

Sa�l abandona la persecuci�n de David y va a socorrer la tierra;

y David escapa a En-gadi, 28, 29.

NOTAS SOBRE EL CAP. XXIII

Vers�culo 1 Samuel 23:1 . Los filisteos luchan contra Keila.��Keila�era una ciudad fortificada de la tribu de Jud� cerca de Eleuteropolis, en el camino a Hebr�n.

Robar las eras. �Esta era una antigua costumbre de los filisteos, madianitas y otros. V�ase� Jueces 6:4 . Cuando el ma�z estaba maduro y apto para ser trillado, y lo hab�an recogido en las eras, que siempre estaban en el campo abierto, entonces sus enemigos se les echaban encima y los despojaban de los frutos de su cosecha.

Versículo 2

Vers�culo 1 Samuel 23:2 . Por lo tanto, David consult� al Se�or.��No se nos dice de qu� manera David hizo esta indagaci�n, pero probablemente fue por medio de Abiatar; y por lo tanto pienso, con Houbigant, que el sexto verso debe leerse inmediatamente despu�s del primero. La aventura mencionada aqu� fue verdaderamente noble. Si David no hubiera amado a su pa�s, y no hubiera estado por encima de todos los motivos de venganza privada y personal, se habr�a alegrado de esta invasi�n de Jud� por producir una fuerte distracci�n a su favor, y por embrollar a su inveterado enemigo. En la mayor�a de los casos, un hombre con los agravios de David se habr�a unido a los enemigos de su pa�s, y se habr�a vengado del autor de sus adversidades; pero �l no piensa en otra cosa que en socorrer a Keila, y usar su poder e influencia en favor de sus hermanos. Este es un raro ejemplo de hero�smo desinteresado.

El Se�or dijo: "Ve y golpea". Ahora pod�a ir con confianza, con la seguridad del �xito. Cuando Dios promete el �xito, �qui�n tiene que temer el rostro de cualquier enemigo?

Versículo 4

Vers�culo 1 Samuel 23:4 . David consult� al Se�or una vez m�s.�Esto fue para satisfacer a sus hombres, quienes hicieron las fuertes objeciones mencionadas en el vers�culo anterior.

Versículo 5

Vers�culo 1 Samuel 23:5 . Se llevaron su ganado.��El forraje y el bot�n que los filisteos hab�an tomado, conduciendo el pa�s delante de ellos alrededor de Keila.

Versículo 6

Vers�culo 1 Samuel 23:6 . Baj� con un efod. �Creo que este vers�culo deber�a ir inmediatamente despu�s 1 Samuel 23:1 .

Versículo 8

Vers�culo 1 Samuel 23:8 . Sa�l reuni� a todo el pueblo.��Es decir, a todo el pueblo de esa regi�n o distrito, para que pudieran recorrer el pa�s y perseguir a David de todos sus lugares.

Versículo 9

Vers�culo 1 Samuel 23:9 . Traed aqu� el efod.�Parece como si el mismo David, vestido con el efod, hubiera consultado al Se�or; y 1 Samuel 23:10-9 contienen las palabras de la consulta, y la respuesta del Se�or. Pero vea en 1 Samuel 23:2 .

Versículo 11

Vers�culo 1 Samuel 23:11-9 . En estos vers�culos encontramos las siguientes preguntas y respuestas: - Dijo David: �Bajar� Sa�l a Keila ? Y el Se�or dijo: �l descender�. �Me entregar�n los hombres de Keila�a m� y a mis hombres en manos de Sa�l? Y el Se�or dijo : Ellos te entregar�n .

En esta breve historia encontramos una amplia prueba de que existe tal cosa como la contingencia en los asuntos humanos; es decir, Dios ha colocado muchas cosas entre una posibilidad de ser y de no ser, dejando a la voluntad de la criatura dar la vuelta a la balanza. En las respuestas anteriores del Se�or, las siguientes condiciones evidentemente estaban impl�citas: - SI contin�as en Keila, ciertamente Sa�l descender�; y SI Sa�l desciende , los hombres de Keila�te entregar�n en sus manos.�Ahora bien, aunque el texto afirma positivamente que Sa�l vendr�a a Keila, sin embargo, no vino; y que los hombres de Keilah entregar�an a David en su mano, pero David no fue as� entregado a �l. �Y por qu�? Porque David se fue de Keila; pero si se hubiera quedado, Sa�l habr�a descendido, y los hombres de Keila�habr�an entregado a David. Podemos observar de esto que, por muy positiva que pueda parecer una declaraci�n de Dios que se refiera a cualquier cosa en la que el hombre ha de emplearse, la predicci�n no tiene por objeto suspender o destruir el libre albedr�o , sino que siempre comprende en ella alguna condici�n particular.

Versículo 12

Vers�culo 1 Samuel 23:12 . 1 Samuel 23:11 .

Versículo 14

Vers�culo 1 Samuel 23:14 . Desierto de Zif.��Zif era una ciudad en la parte sur de Judea, no lejos del Carmelo.

Versículo 16

Vers�culo 1 Samuel 23:16 . Y Jonat�n - fortaleci� su mano en Dios. �Es probable que siempre hubo una relaci�n secreta entre David y Jonat�n, y que este muy fiel amigo se enter� de los diversos planes de Sa�l para quitarle la vida. Como bien sab�a Jonat�n que Dios hab�a designado a David para el reino, vino ahora para animarlo a confiar en el Alt�simo, y para asegurarle que la mano de Sa�l no prevalecer�a contra �l; y en esta entrevista renovaron su pacto de amistad.�Ahora bien, todo esto lo pod�a hacer Jonat�n, de conformidad con su deber para con su padre y su rey . Sab�a que David hab�a entregado el reino; vio que su padre estaba gobernando inconstitucionalmente; y supo que Dios hab�a puesto a David para suceder a Sa�l. Sab�a que esto ocurrir�a en el orden de la Providencia; y ni �l ni David dieron un paso para apresurar el tiempo. Jonathan, con sus varias injerencias, impidi� que su padre empapara sus manos en sangre inocente: no podr�a haber representado un papel m�s filial y m�s leal; y por lo tanto, en su apego a David, est� completamente libre de culpa.

Versículo 25

Vers�culo 1 Samuel 23:25 . El desierto de Ma�n. �Maon era un distrito monta�oso en la parte m�s al sur de Jud�. Calmet supone que se trata de la ciudad de Menois , que Eusebio sit�a en las cercan�as de Gaza; y el Maenaemi Castrum , que el c�digo de Teodosio sit�a cerca de Beerseba.

Versículo 26

Vers�culo 1 Samuel 23:26 . Sa�l se fue a este lado de la monta�a.��Evidentemente sin saber que David y sus hombres estaban del otro lado.

Versículo 27

Vers�culo 1 Samuel 23:27 . Lleg� un mensajero.���Mira la providencia de Dios ejercida para la salvaci�n de la vida de David! �David y sus hombres est�n casi rodeados por Sa�l y su ej�rcito, y a punto de ser capturados, cuando llega un mensajero y le informa a Sa�l que los filisteos hab�an invadido la tierra! �Pero he aqu� las obras de la Providencia! Dios ya hab�a preparado la invasi�n de la tierra por parte de los filisteos, y mantuvo a Sa�l ignorante de cu�nto David estaba en su poder; pero como sus avanzadas y exploradores debieron descubrirlo en muy poco tiempo, el mensajero llega justo en el momento oportuno para impedirlo. Aqu� David fue librado por Dios de tal manera que tambi�n hizo visible la intervenci�n divina.

Versículo 28

Vers�culo 1 Samuel 23:28 . Llamaron a ese lugar Sela-hama-lecot. �Es decir, la roca de las divisiones ; porque, dice el Targum, el coraz�n del rey estaba dividido para ir de un lado a otro . Aqu� Sa�l se vio obligado a separarse de David para ir y oponerse a los filisteos invasores.

Versículo 29

Vers�culo 1 Samuel 23:29 . Fuertes asimientos en En-gadi. �En-gadi estaba situada cerca de la costa occidental del Mar Muerto , no lejos de Jeshimon: significa literalmente el pozo del cabrito , y era conocida�por sus vi�edos , Cantares de los Cantares 1:14 . Tambi�n fue c�lebre por su b�lsamo . Se informa que es un territorio monta�oso, lleno de cavernas; y en consecuencia apropiado para David en sus circunstancias actuales.

C�mo se hac�an las eras entre los antiguos, lo aprendemos de CATO, De Re Rustica, cap. 91 y 129. Y como creo que ser�a un m�todo excelente para hacer los suelos de granero m�s duraderos y eficientes, lo expondr�: -

Aream sic facito. Locum ubi facies confodito; postea amurca conspergito bene, sinitoque combibat. Postea comminuito glebas bene. Deinde coaequato, et paviculis verberato. Postea denuo amurca conspergito, sinitoque arescat. Si ita feceris neque formicae nocebunt, neque herbae nascentur: et cum pluerit, lutum non erit. "Haz una era as�: cava bien el lugar; despu�s roc�alo bien con las l�as del aceite, y deja que se empape. A continuaci�n, se golpean los terrones muy finos, se nivela y se golpea bien con un apisonador. Una vez hecho esto, roc�alo de nuevo con los posos del aceite y d�jalo secar. Una vez hecho esto, los ratones no podr�n excavar en �l, ni crecer� la hierba a trav�s de �l, ni la lluvia disolver� la superficie para levantar barro."
Las instrucciones de COLUMELLA son casi las mismas, pero como hay algunas diferencias de importancia, voy a adjuntar su relato: -

Area quoque si terrena erit, ut sit ad trituram satis habilis, primum radatur, deinde confodiatur, permixtis paleis cum amurca, quae salem non accepit, extergatur; nam ea res a populatione murium formicarumque frumenta defendit. Tum aequate paviculis, vel molari lapide condensetur, et rursus subjectis paleis inculcetur, atque ita solibus siccanda relinquatur. De Re Rustica, lib. ii., c. 20. "Si quer�is hacer una era en el campo, para que sea apropiada para el prop�sito, primero recortad la superficie, luego dejadla bien excavada y mezclada con l�as de aceite, sin sal, con las que se ha mezclado el tamo, porque esto evita que los ratones y las hormigas escarben y da�en el ma�z. A continuaci�n, se nivela con una apisonadora o se presiona con una piedra de molino. Despu�s esparce paja por encima, p�sala y d�jala secar al sol".

Esto puede ser utilizado provechosamente dentro de las puertas, as� como en el campo; y un suelo duradero y s�lido es un asunto de gran importancia para el agricultor, ya que evita que la harina sea da�ada por la arena o el polvo.

Información bibliográfica
Texto de la bibliografía=Clarke, Adam. "Comentario sobre 1 Samuel 23". "El Comentario de Adam Clarke". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/acc/1-samuel-23.html. 1832.