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Saturday, September 28th, 2024
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
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Bible Commentaries
Comentario de Clarke Comentario Clarke
Declaración de derechos de autor
Derechos de autor=Estos archivos están en dominio público.
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Información bibliográfica
Texto de la bibliografía=Clarke, Adam. "Comentario sobre 2 Kings 25". "El Comentario de Adam Clarke". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/acc/2-kings-25.html. 1832.
Texto de la bibliografía=Clarke, Adam. "Comentario sobre 2 Kings 25". "El Comentario de Adam Clarke". https://beta.studylight.org/
Versículo 1
CAP�TULO XXVI
Nabucodonosor sitia Jerusal�n; se toma, despu�s de haber
sido severamente reducido por el hambre, etc. y Sedequ�as, esforz�ndose
a escapar, es hecho prisionero, sus hijos asesinados ante sus
ojos; luego, sac�ndole los ojos, lo encadenan y es
llevado a Babilonia , 1-7.
Nabuzar-ad�n quema el templo, derriba los muros de
Jerusal�n, y lleva cautivo al pueblo, dejando s�lo unos
pocos para labrar la tierra , 8-12.
Quita todo el bronce y todos los utensilios del templo ,13-17.
Varios de los principales hombres y nobles que se
encuentran en la ciudad, son llevados por��Nabuzaradan
al rey en �Ribla, el cual los mata a todos ,�18-21.
Nabucodonosor nombra a Gedal�as gobernador del pueblo pobre
que quedaba, contra el cual se levanta Ismael, y lo mata, y
y a otros con �l; por lo que el pueblo en general, temiendo el
resentimiento de los caldeos, huye a Egipto, 22-26.
El malvado Mercodac, rey de Babilonia, libera a Joaqu�n de la
prisi�n, lo trata con amabilidad y lo hace su amigo, 27-30.
NOTAS SOBRE EL CAP. XXVI
Vers�culo 2 Reyes 25:1 . En el noveno a�o de su reinado , En el noveno a�o de su reinado] Habi�ndose rebelado Sedequ�as contra los caldeos, Nabucodonosor, cansado de su traici�n y de la mala fe de los jud�os, determin� la subversi�n total del estado jud�o. Habiendo reunido un numeroso ej�rcito, entr� en Judea el d�cimo d�a del d�cimo mes del noveno a�o del reinado de Sedequ�as; esto, seg�n el c�mputo del arzobispo Usher, fue el jueves 30 de enero, A.M. 3414, que era un a�o sab�tico: cuando los hombres de Jerusal�n oyeron que el ej�rcito caldeo se acercaba, proclamaron la libertad de sus siervos; ver Jeremias 34:8 , seg�n la ley, �xodo 21:2 ; Deuteronomio 15:1 ; Deuteronomio 15:12 : porque Nabucodonosor, marchando con su ej�rcito contra Sedequ�as, despu�s de haber devastado todo el pa�s y tomado sus fortalezas, excepto Laquis, Azeca y Jerusal�n, vino contra esta �ltima con todas sus fuerzas.�Ver Jeremias 34:1 . El mismo d�a, seg�n el mismo autor, el asedio y la destrucci�n total de Jerusal�n fueron revelados al profeta Ezequiel, que entonces estaba en Caldea, bajo el tipo de una olla hirviente; y su esposa muri� por la noche, y se le encarg� que no llorara por ella, a causa de la extraordinaria calamidad que hab�a ca�do sobre la tierra. V�ase Ezequiel 24:1.�
Jerem�as, habiendo predicho las mismas calamidades, Jeremias 34:1 , fue encerrado en prisi�n por mandato de Sedequ�as, Jeremias 32:1 .
El fara�n Hophra o Vaphris, al o�r c�mo se presionaba a Sedequ�as, y temiendo por la seguridad de sus propios dominios en caso de que los caldeos tuvieran �xito contra Jerusal�n, decidi� socorrer a Sedequ�as. Al ver esto, los caldeos levantaron el sitio de Jerusal�n y salieron al encuentro del ej�rcito egipcio, al que derrotaron y pusieron en fuga. Jos�. Antiq., lib. 10, cap. 10. En el �nterin, los jud�os, pensando que su peligro hab�a pasado, reclamaron a sus siervos y los sometieron de nuevo al yugo� Jeremias 34:8.
Versículo 2
Vers�culo 2 Reyes 25:2 . Y la ciudad fue sitiada.�Nabucodonosor, despu�s de derrotar al ej�rcito egipcio, volvi� a Jerusal�n y la siti� tan de cerca que, estando reducidos por el hambre y abriendo una brecha en el muro, los caldeos entraron en ella el �d�a nueve del cuarto mes , ( mi�rcoles, julio 27,) Sedequ�as y muchos otros trataron�escapar de noche.
Versículo 3
Vers�culo 2 Reyes 25:3 . 2 Reyes 25:2 .
Versículo 4
Vers�culo 2 Reyes 25:4 . 2 Reyes 25:2 .
Versículo 5
Vers�culo 2 Reyes 25:5 . El ej�rcito de los caldeos persigui�.�Sedequ�as fue apresado y llevado cautivo a Ribla en Siria, donde yac�a entonces Nabucodonosor, quien mand� matar a sus hijos delante de �l y luego le sac� los ojos; y habi�ndolo cargado de cadenas, lo envi� a Babilonia, (ver Jeremias 39:4 ; Jeremias 39:7 ; Jeremias 52:7 ; Jeremias 52:11 ), cumpliendo as� las declaraciones prof�ticas, que sus ojos deber�an ver los ojos del rey de Babilonia , Jeremias 32:4 ; pero no ver�a a Babilonia , aunque morir�a all�; Ezequiel 12:13 .
Versículo 8
Vers�culo 2 Reyes 25:8 . En el mes quinto.�El d�a s�ptimo del mes quinto , (correspondiente al mi�rcoles 24 de agosto), Nebuzarad�n hizo su entrada en la ciudad; y habiendo pasado dos d�as en hacer provisiones, el d�a diez del mismo mes (s�bado, 27 de agosto ), prendi� fuego al templo y al palacio del rey, y a las casas de la nobleza, y las quem� hasta los cimientos. ; Jeremias 52:13 , comparado con Jeremias 39:8 .�As� fue destruido el templo en el a�o und�cimo de Sedequ�as, el a�o diecinueve de Nabucodonosor, el primero de la XLVIII Olimpiada, en el a�o ciento sesenta en curso de la era de Nabonasar, cuatrocientos veinticuatro a�os tres meses y ocho d�as desde el momento en que Salom�n puso su primera piedra.
Versículo 10
Vers�culo 2 Reyes 25:10 . Derribad los muros.�En el mismo mes quinto , Jeremias 1:3 , siendo arrasados ??los muros de Jerusal�n, todos los que hab�an quedado en la ciudad, y todos los que hab�an huido antes a Nabucodonosor, y toda la gente com�n de Nabuzarad�n llev� a Babilonia la ciudad con todos los tesoros del rey, los de los nobles y todo el mobiliario del templo.�V�ase Jeremias 39:8 ; Jeremias 52:14 ; Jeremias 52:23 . Y as� fue llevada Jud� de su propia tierra, cuatrocientos sesenta y ocho a�os despu�s que David comenz� a reinar sobre ella; desde la divisi�n de las diez tribus trescientos ochenta y ocho a�os; y desde la destrucci�n del reino de Israel, ciento treinta y cuatro a�os ; AM 3416, y antes de Cristo quinientos noventa . Y as� termina lo que se llama la quinta edad del mundo . Ver los Anales de USHER .
Versículo 18
Vers�culo 2 Reyes 25:18 . Sera�as, el sumo sacerdote - Sofon�as.�La persona que aqu� se llama el segundo sacerdote era lo que los jud�os llaman sagan , una especie de diputado , que desempe�aba las funciones del sumo sacerdote cuando alguna enfermedad le imped�a asistir al servicio del templo. Ver com . 2 Reyes 23:4 .
Versículo 19
Vers�culo 2 Reyes 25:19 . Y cinco hombres de los que estaban en la presencia del rey.�Estos eran consejeros principales y oficiales de confianza.�En Jeremias 52:25 , se dice que tom� siete hombres que estaban cerca de la persona del rey, y el mismo n�mero se encuentra en �rabe en este lugar; y el caldeo no tiene menos de cincuenta hombres ; pero en Jerem�as esta, as� como todas las dem�s versiones , dice siete. Probablemente no eran m�s de cinco al principio, o, quiz�s Jerem�as cont� con los cinco al oficial que estaba puesto sobre los hombres de guerra , y el escriba principal del ej�rcito mencionado aqu�, como dos con los cinco; y as� hicieron siete en total.
Versículo 21
Vers�culo 2 Reyes 25:21 . El rey de Babilonia los hiri�.�Sin duda descubri� que estos hab�an aconsejado a Sedequ�as que se rebelara.
Versículo 22
Vers�culo 2 Reyes 25:22 . Hecho Gedal�as - gobernante. Esto no era dignidad real ; �l era s�lo una especie de�capataz , designado para regular a los labradores .
Versículo 23
Vers�culo 2 Reyes 25:23 . A Mizpa.�Se dice que estaba situado en el lado este del r�o Jord�n, y m�s contiguo a Babilonia, y por lo tanto el m�s apropiado para la residencia de Gedal�as, porque era el m�s cercano al lugar desde el cual iba a recibir sus instrucciones. Pero hubo varios lugares de este nombre, y no sabemos exactamente d�nde estaba situado este .
Versículo 24
Vers�culo 2 Reyes 25:24 . Gedal�as les jur�.�Se comprometi� de la manera m�s solemne a alentarlos y protegerlos.
Versículo 25
Vers�culo 2 Reyes 25:25 . Hiri� a Gedal�as.�Esto ocurri� en una fiesta que Gedal�as hab�a preparado para ellos; v�ase Jeremias 41:1. No se content� con este asesinato, sino que mat� a ochenta m�s, que ven�an con ofrendas al templo, y tom� a varios como prisioneros, entre los que se encontraban algunas de las hijas del rey, y parti� para ir a los amonitas; pero Johan�n, hijo de Carea, al enterarse de estos atropellos, reuni� a un n�mero de hombres y persigui� a Ismael, tras lo cual los prisioneros de Ismael se volvieron inmediatamente y se unieron a Johan�n, de modo que �l, y ocho de sus c�mplices, escaparon con dificultad a los amonitas.�V�ase Jeremias 41:1. Baalis, rey de los amonitas, hab�a enviado a Ismael a asesinar a Gedalias y de esto fue informado por Johanan, quien se ofreci� a impedirlo, quit�ndole la vida a este asesino. Pero Gedalia no pod�a creer que �ste albergara tan viles designios, y por ello no tom� ninguna precauci�n para salvar su vida. V�ase Jeremias 40:13 .
Versículo 27
Vers�culo 2 Reyes 25:27 . Y sucedi� que.�Nabucodonosor acababa de morir; y Evil-merodach, su hijo, sucedi� en el reino en el a�o treinta y siete de la cautividad de Joaqu�n: y en el d�a siete y veinte [Jerem�as dice cinco y veinte] del duod�cimo mes de ese a�o, (martes, 15 de abril, A.M. 3442,) sac� al largamente cautivado rey jud�o de la prisi�n; lo trat� amablemente; y desde entonces, durante su vida, lo cont� entre los amigos del rey. Esto se relata particularmente en los cuatro �ltimos versos del libro de Jerem�as.
Versículo 30
Vers�culo 2 Reyes 25:30 . Una asignaci�n continua que le dio el rey.�Vivi� en un estilo real , y ten�a su corte incluso en la ciudad de Babilonia, siendo provisto de todos los requisitos por la generosidad y la amistad del rey. Unos dos a�os despu�s de esto, Evil-merodac fue asesinado en una conspiraci�n; y se supone que Joaqu�n, entonces de unos cincuenta y ocho a�os, cay� con su amigo y protector. As� termina la cat�strofe de los reyes, el pueblo y el estado jud�os; la consecuencia de inauditas rebeliones y provocaciones contra la Majestad de los cielos.
NOTAS MASOR�TICAS SOBRE EL PRIMER Y SEGUNDO LIBRO DE LOS REYES
Ya hemos visto que los hebreos consideran estos dos libros como uno solo: -
El N�MERO de versos en ambos es mil quinientos treinta y cuatro .
SECCIONES MASORETICAS, treinta y cinco .
VERSO MEDIO, 1 Reyes 21:6 . Y �l le dijo: Porque habl� con Nabot el� Jezreelita, y le dije: Dame...