Se inculca la sujeci�n a los gobernadores civiles, desde la consideraci�n
que el gobierno civil es seg�n la ordenanza de Dios; y
que los que resisten a las autoridades leg�timamente constituidas
recibir�n condenaci�n , 1, 2.
Y los que son obedientes recibir�n alabanza , 3.
El car�cter de gobernador civil leg�timo , 4.
La necesidad de sujeci�n , 5.
La conveniencia de pagar tributo l�cito , 6, 7.
Los cristianos deben amarse unos a otros , 8-10.
La necesidad de la conversi�n inmediata a Dios se demuestra a partir de la
brevedad e incertidumbre del tiempo , 11, 12.
c�mo deben andar los gentiles para agradar a Dios, y revestirse
�de Cristo Jes�s para su salvaci�n , 13, 14.
NOTAS AL CAPITULO XIII.
Para ver con qu� propiedad introduce el ap�stol los importantes temas que trata en este cap�tulo, es necesario hacer algunas observaciones sobre las circunstancias en que entonces se encontraba la Iglesia de Dios.�Generalmente se admite que esta ep�stola fue escrita alrededor del a�o 58 de nuestro Se�or, cuatro o cinco a�os despu�s del edicto del emperador Claudio, por el cual todos los jud�os fueron desterrados de Roma. Y como en aquellos primeros tiempos generalmente se confund�a a los cristianos con los jud�os, es probable que ambos estuvieran incluidos en este decreto.�
Por qu� motivo se emiti� este edicto no aparece satisfactoriamente. Suetonio nos dice que fue porque los jud�os estaban haciendo disturbios continuos bajo su l�der Christus . ( Hechos 18:2 .)
Que los jud�os eran, en general, un pueblo inquieto y sedicioso, se desprende claramente de toda su historia. Ten�an la m�s arraigada aversi�n al gobierno pagano; y era una m�xima para ellos que el mundo hab�a sido dado a los israelitas; que ellos deb�an tener el gobierno supremo en todas partes, y que los gentiles deb�an ser sus vasallos. Con tales nociones pol�ticas, basadas en su inquietud nativa, no es de extra�ar que en varios casos dieran motivos de sospecha al gobierno romano, que se alegrar�a de tener la oportunidad de expulsar de la ciudad a las personas que consideraba peligrosas para su paz y seguridad; tampoco es irrazonable por este motivo suponer, con el Dr. Taylor, que los cristianos, bajo la noci�n de ser el pueblo peculiar de Dios, y los s�bditos de su reino solamente, podr�an estar en peligro de ser infectados con esos sentimientos revoltosos y rebeldes: por lo tanto, el ap�stol les muestra que estaban, a pesar de sus honores y privilegios como cristianos, obligados por las m�s fuertes obligaciones de conciencia a estar sujetos al gobierno civil. El juicioso comentarista a�ade: "No puedo dejar de observar la admirable habilidad y destreza con que el ap�stol ha tratado el tema. Sus puntos de vista al escribir son siempre amplios en todos los puntos; y toma en sus pensamientos e instrucciones a todas las partes que probablemente podr�an obtener alg�n beneficio de ellos. Como el cristianismo estaba creciendo entonces, y los poderes del mundo empezaban a tomar nota de �l, no era improbable que esta carta cayera en manos de los magistrados romanos. Y cuando eso ocurriera, era justo, no s�lo que vieran que el cristianismo no favorec�a la sedici�n, sino tambi�n que tuvieran la oportunidad de leer su propio deber y sus obligaciones. Pero como eran demasiado orgullosos e insolentes para permitir que se les instruyera de manera clara y directa, el ap�stol, con mano maestra, delinea e inculca con fuerza el deber del magistrado; Mientras defiende su causa con el sujeto, y establece su deber sobre la base m�s segura y s�lida, h�bilmente se pone del lado del magistrado, y vindica su poder contra cualquier sujeto que pueda haber imbuido principios sediciosos, o que pueda estar inclinado a dar al gobierno cualquier perturbaci�n; y bajo esta ventaja, lee al magistrado una fina y cercana lecci�n sobre la naturaleza y los fines del gobierno civil. Un modo de transmisi�n tan ingenioso e intachable que incluso el propio Ner�n, si esta ep�stola hubiera ca�do en sus manos, no podr�a dejar de ver su deber claramente expuesto, sin encontrar nada servil o halagador por un lado, ni ofensivo o repugnante por otro.
"El lector atento se complacer� en ver con qu� destreza, verdad y gravedad el ap�stol, en un peque�o comp�s, afirma y explica el fundamento, la naturaleza, los fines y los justos l�mites de la autoridad del magistrado, mientras defiende su causa y ense�a al s�bdito el deber y la obediencia que debe al gobierno civil" - Notas del Dr. Taylor, p�gina 352.
verso Romanos 13:1 _ Que cada alma est� sujeta a los poderes superiores...�Este es un dicho muy fuerte, y muy solemnemente presentado; y debemos considerar al ap�stol como hablando, no desde su propio juicio privado, o ense�ando una doctrina de conveniencia presente , sino declarando la mente de Dios sobre un tema de suma importancia para la paz del mundo; una doctrina que no pertenece exclusivamente a ninguna clase de personas, orden de la comunidad, o situaciones oficiales , sino a toda alma ; y, sobre los principios que establece el ap�stol, a cada alma en todas las posibles variedades de situaci�n, y en todas las ocasiones.
�Y cu�l es esta doctrina solemne? Es este: Que cada alma est� sujeta a los poderes superiores . Que todo hombre sea obediente al gobierno civil bajo el cual la providencia de Dios ha echado su suerte.
Porque no hay poder sino de Dios...�Como Dios es el origen del poder, y el Gobernador supremo del universo, �l delega autoridad a quien quiere; y aunque en muchos casos el gobernador mismo puede no ser de Dios , sin embargo, el gobierno civil es de �l; porque sin esto no podr�a haber sociedad, ni seguridad, ni propiedad privada; todo ser�a confusi�n y anarqu�a, y el mundo habitable pronto quedar�a despoblado.
En la antig�edad, Dios, de manera especial, en muchas ocasiones designaba al individuo que hab�a de gobernar; y en consecuencia gobern� por derecho divino , como en el caso de Mois�s, Josu� , los jueces hebreos y varios de los reyes israelitas . En tiempos posteriores, y hasta el d�a de hoy, lo hace por una providencia supervisora ??general que antes lo hac�a por designaci�n especial.
En todas las naciones de la tierra existe lo que puede llamarse una constituci�n , un plan por el cual se gobierna un pa�s o estado en particular; y esta constituci�n est� m�s o menos calculada para promover los intereses de la comunidad. El gobernador civil, ya sea electivo o hereditario conviene en gobernar seg�n esa constituci�n. As� podemos considerar que hay pacto y consentimiento entre el gobernante y los gobernados �y en tal caso, se puede considerar que el potentado llega a la suprema autoridad de la manera directa de la providencia de Dios; y como el gobierno civil es de Dios, que es la fuente de la ley, el orden y la regularidad, el gobernador civil, que administra las leyes de un estado de acuerdo con su constituci�n , es el ministro de Dios .�Pero se ha preguntado: si el gobernante es un hombre inmoral o libertino, �no prueba por ello que es indigno de su alto cargo, y no deber�a ser depuesto? Respondo que no: si gobierna seg�n la constituci�n , nada puede justificar la rebeli�n contra su autoridad. Puede ser irregular en su propia vida privada ; puede ser un hombre inmoral y deshonrarse por una conducta impropia: pero si gobierna de acuerdo con la ley ; si no intenta cambiar la constituci�n, ni romper el pacto entre �l y el pueblo; no hay, por tanto, fundamento legal de oposici�n a su autoridad civil, y todo acto contra �l no es s�lo rebeli�n en el peor sentido de la palabra, como es ilegal y absolutamente pecaminoso.
Nada puede justificar la oposici�n de los s�bditos al gobernante sino los intentos manifiestos de su parte de cambiar la constituci�n o gobernar en contra de la ley . Cuando el gobernante act�a as�, disuelve el pacto entre �l y su pueblo; su autoridad ya no es vinculante, porque es ilegal; y es ilegal porque obra contra las leyes de aquella constituci�n, seg�n la cual, al ser elevado al supremo poder, prometi� gobernar.�Esta conducta justifica la oposici�n a su gobierno; pero sostengo que ninguna mala conducta personal en el gobernante, ninguna inmoralidad en su propia vida, mientras gobierna de acuerdo con la ley , puede justificar ni la rebeli�n contra �l ni el desprecio de su autoridad. Por su conducta pol�tica es responsable ante su pueblo ; por su conducta moral es responsable ante Dios , su conciencia y los ministros de la religi�n .
Un rey puede ser un buen hombre moral y, sin embargo, un pr�ncipe d�bil y, de hecho, malo y peligroso . Puede ser un hombre malo y manchado de vicio en su vida privada y, sin embargo, ser un buen pr�ncipe . SAUL era un buen hombre moral , pero un mal pr�ncipe , porque se esforz� por actuar en contra de la constituci�n israelita: cambi� algunas partes esenciales de esa constituci�n, como lo he mostrado en otra parte; ( Hechos 13:22Hechos 13:22 ;) por lo tanto, fue legalmente depuesto.
James II era un hombre de buena moral , por lo que s�, pero era un pr�ncipe malo y peligroso ; se esforz� por alterar y cambiar esencialmente la constituci�n brit�nica, tanto en la Iglesia como en el estado , por lo que fue depuesto legalmente. Ser�a f�cil, repasando la lista de nuestros propios reyes, se�alar varios que merecidamente tuvieron fama de buenos reyes , que en su vida privada fueron muy inmorales .�Por malos que pudieran ser en la vida privada, la constituci�n en sus manos siempre se consider� un dep�sito sagrado, y la conservaron fielmente y la transmitieron intacta a sus sucesores; y cuid�, mientras llevaban las riendas del gobierno, que se administrara con imparcialidad y eficacia.
Debe admitirse, sin embargo, que cuando un pr�ncipe, por muy atento que sea a las leyes, es injusto en la vida privada, su ejemplo es contagioso; la moralidad, desterrada del trono, es desaprobada por la comunidad; y la felicidad disminuye en proporci�n al aumento del vicio. Por otra parte, cuando un rey gobierna de acuerdo con la constituci�n de sus reinos y tiene su coraz�n y su vida gobernados por las leyes de su Dios, entonces es una doble bendici�n para su pueblo; mientras gobierna cuidadosamente de acuerdo con las leyes, su ejemplo piadoso es un gran medio para extender y confirmar el reino de la moralidad pura entre sus s�bditos. El vicio es desacreditador del trono, y el libertino no se atreve a esperar un lugar de confianza y seguridad (aunque en otros aspectos est� calificado para ello), porque es un hombre vicioso.
Como ya he mencionado algunos potentados por su nombre , como ejemplos aptos de las doctrinas que he estado estableciendo, mis lectores naturalmente esperar�n que, en una oportunidad tan justa, presente otro ; aquel en quien se encuentra la doble bendici�n; uno que, a trav�s de un reinado inusualmente prolongado, durante cada a�o del cual vigil� muy concienzudamente la sagrada constituci�n encomendada a su cuidado, no s�lo no perjudic� esta constituci�n, sino que se ocup� de que sus sanas leyes fueran debidamente administradas, y que en actu� con todo respeto como padre de su pueblo, y a�adi� a todo esto la m�s ejemplar conducta moral�tal vez alguna vez exhibido por un pr�ncipe, ya sea en tiempos antiguos o modernos; no s�lo desaprobando t�citamente el vicio por su conducta verdaderamente religiosa, sino por sus frecuentes proclamas que prohib�an de la manera m�s solemne quebrantar el s�bado, jurar profano e inmoralidad en general.�Se podr�a decir m�s con justicia, pero cuando he mencionado todas estas cosas (y las menciono con j�bilo y con gratitud a Dios), apenas necesito a�adir el venerable nombre de GEORGE III, rey de Gran Breta�a ; como todo lector percibir� de inmediato que la descripci�n no conviene a ning�n otro potentado. S�lo puedo observar que, a pesar de que su largo reinado ha sido un reinado de problemas y conmociones sin precedentes en el mundo, en los que su imperio siempre ha estado involucrado, sin embargo, nunca las artes �tiles, las ciencias ennoblecedoras y la religi�n pura ganaron un lugar m�s decidido y ascendencia general: y mucho de esto, bajo Dios, se debe a la manera en que este rey ha vivido, y el aliento que invariablemente dio a todo lo que ten�a una tendencia a promover los mejores intereses de su pueblo.
De hecho, se ha observado bien que, bajo la providencia reinante de Dios, fue principalmente debido a las virtudes privadas y personales del soberano que la casa de Brunswick permaneci� firmemente asentada en el trono en medio de las tormentas que surgieron de las agitaciones democr�ticas y las convulsiones revolucionarias�en Europa durante los a�os 1792-1794. La estabilidad de su trono en medio de estos peligros y angustias puede resultar una lecci�n �til para sus sucesores, y mostrarles la fuerza de un car�cter virtuoso, y que la moralidad y la religi�n forman el mejor baluarte contra esos grandes males a los que est�n expuestos todos los gobiernos humanos.�Este peque�o tributo de alabanza al car�cter y conducta del rey brit�nico, y gratitud a Dios por tal gobernador, no se sospechar� de siniestro motivo; ya que el objeto de ella es, por una providencia inescrutable, colocado en una situaci�n a la que no pueden acercarse ni la envidia, ni la adulaci�n , ni siquiera la justa alabanza, y donde la majestad del hombre se coloca en las ruinas m�s espantosas pero respetables. S�lo me queda una rebaja que hacer: si este potentado hubiera sido tan adverso a la GUERRA como lo fue a los vicios p�blicos y privados, hubiera sido el soberano m�s inmaculado que jam�s haya empu�ado un cetro o llevado una corona.
Pero para resumir el tema y concluir el argumento: deseo particularmente mostrar la absoluta ilegalidad de la rebeli�n contra un gobernante, quien, aunque puede ser incorrecto en su conducta moral, gobierna de acuerdo con las leyes; y la bendici�n adicional de tener un pr�ncipe, quien, mientras su conducta pol�tica est� regulada por los principios de la constituci�n, tiene su coraz�n y vida regulados por los dictados de la verdad eterna, tal como est� contenido en esa revelaci�n que vino de Dios.
verso Romanos 13:2 _ Quienquiera que resista el poder...�? ??????????????, El que se pone en orden contra este orden de Dios; ?? ??? ???? ???????, y los que resisten , ?? ????????????, los que se oponen obstinadamente y sin raz�n al gobernante, y se esfuerzan por desestabilizar la constituci�n y provocar cambios ilegales,
recibir�n para s� la condenaci�n...�?????, condenaci�n ; ser�n condenados tanto por el esp�ritu como por la letra de esa constituci�n, que, bajo el pretexto de defender o mejorar, indirectamente se esfuerzan por subvertir.
Verso Romanos 13:3 . Porque los gobernantes no son terror para las buenas obras...�Aqu� el ap�stol muestra al magistrado civil lo que debe ser: est� revestido de gran poder, pero ese poder le es confiado, no para terror y opresi�n del hombre recto, sino para intimidar y castigar a los malvados. Es, en una palabra, para el beneficio de la comunidad , y no para el engrandecimiento de s� mismo , que Dios ha confiado el supremo poder civil a cualquier hombre.�Si usa esto para maltratar, robar, estropear, oprimir y perseguir a sus s�bditos, no solo es un mal hombre , sino tambi�n un mal pr�ncipe . Infringe los principios esenciales del derecho y la equidad. Si persigue a sus s�bditos obedientes y leales, por cualquier motivo religioso, esto es contrario a toda ley y derecho; y el hacerlo as� lo vuelve indigno de su confianza, y deben considerarlo no como una bendici�n sino como una plaga .�Sin embargo, incluso en este caso, aunque en nuestro pa�s ser�a una violaci�n de la constituci�n, que permite a cada hombre adorar a Dios seg�n su conciencia, los verdaderamente piadosos no sentir�n que incluso esto justificar�a rebelarse contra el pr�ncipe; han de padecer con paciencia, y encomendarse ellos mismos y su causa al que juzga con justicia. Es una cosa horrible rebelarse, y son rar�simos los casos que pueden justificar la rebeli�n contra las autoridades constituidas. V�ase la doctrina sobre Romanos 13:1 .
�Entonces no tendr�s miedo del poder? Si no quieres vivir con miedo al magistrado civil, vive de acuerdo con las leyes; y puedes esperar que �l gobierne de acuerdo con las leyes, y en consecuencia, en lugar de incurrir en culpa , tendr�s alabanza . Esto se dice sobre la suposici�n de que el gobernante es �l mismo un buen hombre : as� lo suponen las leyes; y el ap�stol, sobre la cuesti�n general de la obediencia y protecci�n, asume el punto de que el magistrado es tal.
Verso Romanos 13:4 .�Porque �l es el ministro de Dios para el bien... Aqu� el ap�stol pone el car�cter del gobernante en la luz m�s fuerte posible. Es el ministro de Dios, el cargo es por designaci�n divina: el hombre que es digno del cargo actuar� en conformidad con la voluntad de Dios: y como los ojos del Se�or est�n sobre los justos, y sus o�dos abiertos a su clamor, en consecuencia el gobernante ser� el ministro de Dios para ellos para el bien.
No lleva la espada en vano... Su poder le es delegado para la defensa y el est�mulo de los buenos, y el castigo de los malvados; y tiene autoridad para castigar capitalmente, cuando la ley as� lo requiera: el t�rmino espada nos lleva a inferir esto.
Porque es ministro de Dios, vengador... ???? ???????? ????? ???????, Porque es ministro vindicativo de Dios, para ejecutar la ira; ??? ?????, para infligir el castigo a los transgresores de la ley; y esto de acuerdo con los estatutos de esa ley; porque a los ministros civiles de Dios nunca se les permite pronunciar o infligir el castigo de acuerdo con sus propias mentes o sentimientos, sino de acuerdo con las declaraciones expresas de la ley.
verso Romanos 13:5 _ Necesariamente deb�is estar sujetos ] ??????, Es necesario que est�is sujetos, no s�lo por la ira, ??? ??? ?????, a causa del castigo que ser� infligido a los malhechores, sino tambi�n por causa de la conciencia ; no s�lo para evitar el castigo, sino tambi�n para conservar una conciencia tranquila. Porque, como el gobierno civil est� establecido en el orden de Dios para el sost�n, defensa y felicidad de la sociedad, los que transgreden sus leyes, no s�lo se exponen a las penas se�aladas por los estatutos, sino tambi�n a la culpa en su propia conciencia, porque pecan contra Dios. Aqu� hay dos motivos poderosos para prevenir la infracci�n de las leyes y hacer cumplir la obediencia.
1. El temor al castigo; esto pesa con los imp�os.
2. El mantenimiento de una buena conciencia, que pesa poderosamente en toda persona que teme a Dios. Estos dos motivos deben insistir con frecuencia tanto entre los profesores como entre los profanos.
Verso Romanos 13:6 . Por esta causa paguen tributo tambi�n...�Debido a que el gobierno civil es una orden de Dios, y los ministros de estado deben hacer un gasto considerable para proveer a la seguridad y defensa de la comunidad, es necesario que aquellos en cuyo nombre se incurre en estos gastos debe sufragar ese gasto; y por lo tanto nada puede ser m�s razonable que una tributaci�n imparcial y moderada , mediante la cual se puedan sufragar los gastos del estado, y los diversos oficiales, ya sean civiles o militares, que est�n empleados para el servicio p�blico, sean adecuadamente remunerados.
Todo esto es justo y correcto, pero no hay ninguna insinuaci�n en las palabras del ap�stol en favor de una tributaci�n extravagante y opresiva , para el apoyo de guerras sin principios e innecesarias ; o la pensi�n de hombres corruptos o in�tiles . Los impuestos deben pagarse para el sustento de aquellos que son ministros de Dios , los funcionarios civiles necesarios, desde el rey para abajo, que est�n atendiendo CONTINUAMENTE en esto mismo . Y observe el lector que por ministros de Dios no se entienden aqu� los ministros de religi�n , sino los civiles .oficiales en todos los departamentos del estado.
Verso Romanos 13:7 .�Por lo tanto, paguen a todos sus cuotas... Este es un mandato extenso. Sed r�gidamente justos; no reteng�is ni al rey ni a sus ministros, ni a sus funcionarios de justicia y de hacienda, ni siquiera a los m�s bajos de la comunidad, lo que las leyes de Dios y de vuestra patria os obligan a pagar.
Tributo a quien tributa... ?????. Esta palabra probablemente se refiere a los impuestos que se cobraban a las personas y a las haciendas.
Aduana a quien se acostumbra... ?????. Esta palabra probablemente significa tales impuestos que se impon�an sobre los bienes, mercanc�as, etc., sobre las importaciones y exportaciones lo que com�nmente llamamos aduana. Kypke en este lugar ha citado algunas buenas autoridades para la distinci�n y el significado anteriores. Ambas palabras aparecen en la siguiente cita de Estrab�n: ?????? ??? ????????? ?? ????, ????? ?????????????- Es necesario disminuir las ADUANAS, si se imponen IMPUESTOS. Estrab�n, lib. ii., p�gina 307. V�anse otros ejemplos en Kypke.
Teme a quien teme... Es probable que la palabra ?????, que traducimos como temor, signifique esa reverencia que produce obediencia. Trata a todos los personajes oficiales con respeto, y s� obediente con tus superiores.
Honra a quien honra... La palabra ????? puede significar aqu� ese respeto exterior que el principio reverencia, del que surge, producir� generalmente. Nunca te comportes de manera grosera con ninguna persona; pero comp�rtate de manera respetuosa con los hombres que ocupan un cargo: si ni siquiera puedes respetar al hombre -pues un cargo importante puede ser ocupado por una persona indigna-, respeta el cargo, y al hombre a causa de su cargo. Si un hombre se acostumbra a faltar al respeto a los personajes oficiales, pronto se encontrar� dispuesto a prestar poco respeto u obediencia a las propias leyes.
Verso Romanos 13:8 . No deb�is a nadie nada, sino el amaros los unos a los otros...�En los vers�culos anteriores el ap�stol ha estado mostrando el deber, la reverencia y la obediencia, que todos los cristianos, desde el m�s alto hasta el m�s bajo, deben al magistrado civil; ya sea emperador, rey, proc�nsul u otro funcionario estatal; aqu� les muestra su deber entre s� : pero esto es muy diferente del que deben al gobierno civil: al primero deben sujeci�n, reverencia, obediencia y tributo; a �stos no deben m�s que el amor rec�proco y los oficios que necesariamente derivan de �l.�Por eso dice el Ap�stol: No deb�is a nadie ; como si dijera: Vosotros no deb�is a vuestros hermanos sino amor mutuo, y esto es lo que exige la ley de Dios, y en esto se cumple la ley. No est�is obligados a obedecerles como al magistrado civil; porque a �l deb�is estar necesariamente sujetos, no s�lo por temor al castigo, sino por causa de la conciencia : pero a �stos est�is ligados por amor ; y especialmente por ese amor que os impide por completo hacer cualquier cosa por la cual un hermano pueda sufrir cualquier tipo de da�o.
Verso Romanos 13:9 . Por esto, no cometer�s adulterio...�El que ama a otro no lo privar� de su mujer , de su vida , de sus bienes , de su buen nombre ; y ni siquiera permitir� que entre en su coraz�n un deseo que lo lleve a querer poseer cualquier cosa que sea propiedad de otro: porque la ley , la Sagrada Escritura, ha dicho: Amar�s a tu pr�jimo como a ti mismo .�
Es notable que ?? ????????????????, no dar�s falso testimonio , falta aqu� en ABDEFG y en varios otros MSS. Griesbach lo ha dejado fuera del texto. Falta tambi�n en el sir�aco y en varios de los padres primitivos. La generalidad de los mejores cr�ticos la consideran una lectura espuria.
Verso Romanos 13:10 . El amor no obra mal...�As� como el que ama a otro obrar� con esa persona como, en circunstancias contrarias, le gustar�a que su pr�jimo actuara con �l; por lo tanto, este amor nunca puede obrar mal hacia otro: y, en este aspecto , es decir, lo que debemos al pr�jimo, el amor es el cumplimiento de la ley .
Verso Romanos 13:11 .�Y que, conociendo el tiempo... el Dr. Taylor ha dado una juiciosa par�frasis de �ste y los siguientes versos: "Y todos los deberes de una vida virtuosa y santa debemos cumplirlos con mayor cuidado y celo, considerando la naturaleza y la brevedad de la presente estaci�n de la vida; lo que nos convencer� de que ya es hora de despertar y sacudir el sue�o, y aplicarnos con vigilancia y vigor a los deberes de nuestra vida cristiana; porque esa salvaci�n eterna, que es el objeto de nuestra fe y esperanza cristianas, y el gran motivo de nuestra religi�n, est� cada d�a m�s cerca de nosotros que cuando empezamos a profesar el cristianismo."
Algunos piensan que el pasaje debe entenderse as�: Ahora tenemos muchas ventajas que antes no ten�amos. La salvaci�n est� m�s cerca, todo el sistema cristiano est� m�s explicado y su conocimiento es m�s f�cil de adquirir que antes, por lo que se requiere que avancemos m�s en el conocimiento religioso y en la piedad pr�ctica, y durante mucho tiempo hemos sido demasiado negligentes en estos aspectos. Otros suponen que el ap�stol se refer�a a la liberaci�n de las persecuciones con las que entonces eran afligidos.
Verso Romanos 13:12 . La noche est� muy avanzada...��Si entendemos esto en referencia al estado pagano de los romanos, puede ser parafraseado as�: La noche est� muy avanzada: las tinieblas paganas est�n a punto de terminar. El d�a est� cerca: la plena manifestaci�n del Sol de justicia, en la iluminaci�n de todo el mundo gentil, se acerca r�pidamente. La manifestaci�n del Mes�as es regularmente denominada por los antiguos jud�os ??? yom, d�a, porque antes de esto todo es noche, Bereshith rabba sect. 91, fol. 89. Deshazte de las obras de las tinieblas-prep�rate para recibir esta luz naciente, y da la bienvenida a su aproximaci�n, desechando la superstici�n, la impiedad y los vicios de todo tipo: y ponte la armadura de la luz, recibe plenamente la ense�anza celestial, mediante la cual tus esp�ritus estar�n tan completamente armados contra los ataques del mal como tus cuerpos podr�an estarlo con las mejores armas y armaduras impenetrables. Este sentido parece el m�s adecuado para los vers�culos siguientes, en los que se especifican especialmente los vicios de los gentiles y se les exhorta a abandonarlos y a recibir el Evangelio de Cristo. El m�todo com�n de explicaci�n es �ste: La noche est� muy avanzada; nuestra vida imperfecta actual, llena de aflicciones, tentaciones y pruebas, est� casi agotada; el d�a de la bendici�n eterna est� cerca; est� a punto de amanecer sobre nosotros en nuestra gloriosa resurrecci�n a la vida eterna. Por tanto, desechemos: vivamos como candidatos a esta gloria eterna". Pero este sentido no puede concordar en absoluto con lo que se dice a continuaci�n, ya que los gentiles son los destinatarios m�s evidentes.
Verso Romanos 13:13 . Caminemos honestamente, como en el d�a...�Caminemos , ??????????, decentemente , de ??, bien , y ?????, semblante , h�bito o vestido . Que nuestro comportamiento sea decente, ordenado y serio; tal cual no nos avergonzaremos a los ojos del mundo entero.
No en disturbios, y embriaguezas...�?? ?????? ??? ?????? ??? ?????? � ?????, disturbios , seg�n Hesychius , significa ?????? ??????, ??????? ????????, ????, canciones sucias y disolutas , banquetes y similares. ?????? significa fiestas de borrachera , tales como las que se celebraban en honor de sus dioses, cuando despu�s de haber sacrificado (???? ?? ?????, SUIDAS) beb�an en exceso, acompa�adas de actos abominables de todo tipo. Ver Suidas y Hesychius , bajo esta palabra.
No en rec�mara...�Esta no es una palabra leg�tima, y ??no transmite ning�n sentido hasta que, a partir de su conexi�n en este lugar, forzamos un significado sobre ella. La palabra original, ???????, significa fornicaciones y prostituci�n de todo tipo.
Y libertinaje...�??????????, Toda clase de inmundicias y pr�cticas sodom�ticas .
No en contiendas y envidia...�?? ????? ??? ????, No en contiendas y altercados furiosos, que deben ser consecuencia de tales pr�cticas como las mencionadas anteriormente. �Puede alguien suponer que este discurso es para los cristianos de Roma? �Que se les acusa de pr�cticas casi peculiares de los paganos ? �Y pr�cticas de lo m�s abandonadas y disolutas? Si los llamados cristianos en Roma fueran culpables de tales actos, no podr�a haber diferencia excepto en la profesi�n , entre ellos y los m�s abominables de los paganos .�Pero es imposible que tales cosas se hablen a los seguidores de Cristo; porque la misma gracia que trae el arrepentimiento permite al penitente desechar y abominar toda conducta tan viciosa y abominable.�Los consejos a los cristianos se encuentran en el cap�tulo anterior; los que se encuentran al final de este cap�tulo pertenecen �nicamente a los paganos .
Verso Romanos 13:14 . V�stanse del Se�or Jes�s...�Esto es en referencia a lo que se dice, Romanos 13:13 : Pong�monos ropas decorosas , hagamos una profesi�n diferente, un�monos con otra compa��a, y mantengamos esa profesi�n con una conducta adecuada. Revestirse o revestirse de Jesucristo significa recibir y creer en el Evangelio ; y en consecuencia tomando sus m�ximas�para el gobierno de la vida, teniendo la mente que estaba en Cristo. Los jud�os antiguos usaban con frecuencia la frase ponerse la shejin�, o majestad divina, para significar que el alma se reviste de inmortalidad y se hace apta para la gloria.
Revestirse de una persona es una frase griega que significa asumir los intereses de otro: entrar en sus puntos de vista , imitarlo y estar completamente de su lado . San Cris�stomo menciona particularmente esto como una frase com�n, ? ????? ??? ????? ?????????, tal se ha puesto tal tal ; es decir, lo sigue de cerca y lo imita .
As� Dionysius Hal ., Antiq., lib. Xi., P�gina 689, que habla de Appio y el resto de los Decemviri , dice: ?????? ????????????, ???? ??? ????????? ?????????? ??????? ???? ??????? ?????? ???????? no?????,, ' ya no eran los sirvientes de Tarquin, pero se vistieron con �l, lo imitaban y lo colocaban en cada cosa. Eusebio, en su vida de Constantino, dice lo mismo de sus hijos, se vistieron de su padre , parec�an entrar en su esp�ritu y puntos de vista, e imitarlo en todas las cosas.
El modo de hablar en s� est� tomado de la costumbre de los actores de teatro : asumieron el nombre y las vestiduras de la persona cuyo car�cter iban a representar, y se esforzaron lo m�s posible por imitarlo en su esp�ritu, palabras y acciones. Ver muchos ejemplos pertinentes en Kypke .
Y no hag�is provisi�n para la carne...�Por carne estamos aqu� para entender, no s�lo el cuerpo , sino todos los apetitos y pasiones irregulares que llevaron a las abominaciones ya citadas. No debe hacer ninguna provisi�n para el fomento y la gratificaci�n de un principio como este.
Para cumplir sus deseos...�??? ?????????, en referencia a sus lujurias ; tales como el ?????, ??????, ????? y ?????????, alboroto, embriaguez, prostituci�n e inmundicia , mencionados,� Romanos 13:13 , para hacer provisi�n para lo cual los gentiles viv�an y trabajaban , y compraban y vend�an , y tramaban y planeaban ; porque todo el negocio de su vida era satisfacer los deseos pecaminosos de la carne .
Sus fil�sofos les ense�aron poco m�s; y todo el c�rculo de sus deidades, as� como todo el esquema de su religi�n, sirvieron s�lo para excitar e inflamar tales pasiones y producir tales pr�cticas .
I. EN estos cuatro �ltimos versos hay una bella met�fora, y est� continuada y bien sostenida en cada expresi�n.
1. El ap�stol considera el estado de los gentiles bajo la noci�n de la noche , tiempo de tinieblas y tiempo de malas pr�cticas.
2. Que esta noche est� por terminar , la noche est� muy avanzada.
3. Considera que el Evangelio visita ahora a los gentiles, y la luz de un d�a glorioso que est� a punto de brillar sobre ellos.
4. �l llama a despertar a los que estaban en un estado est�pido e insensato acerca de todo bien espiritual y moral; y aquellos que fueron empleados en las pr�cticas m�s viles que podr�an envilecer y degradar a la humanidad.
5. Les ordena desechar las obras de las tinieblas, y vestirse con la armadura ????, las vestiduras de luz -de justicia: dejar de hacer el mal; para aprender a hacer el�bien. Aqu� hay una alusi�n a dejar a un lado la ropa de noche y ponerse la ropa de d�a .
6. A esto los exhorta a que caminen honradamente, decorosamente vestidos ; y no gastar su tiempo, malgastar sus bienes, destruir sus vidas y arruinar sus almas en pr�cticas tan inicuas como las que inmediatamente especifica.
7. Para que no se confundan con su significado acerca de la ropa decorosa con la que les exhorta a andar, inmediatamente se explica mediante el uso de una forma com�n de hablar, y dice, siempre siguiendo su met�fora, Vest�os del Se�or Jesucristo - recibe su doctrina, copia su ejemplo y busca las cosas que pertenecen a otra vida; porque los gentiles pensaban en poco m�s que hacer provisi�n para la carne o el cuerpo , para satisfacer sus deseos y propensiones animales.
II. Estos �ltimos versos se han hecho famosos en la Iglesia cristiana desde hace m�s de 1400 a�os, por ser el instrumento de la conversi�n de San Agust�n. Es bien sabido que este hombre fue al principio un maniqueo , en cuya doctrina continu� hasta el a�o 32 de su edad. Ten�a frecuentes conferencias y controversias sobre la religi�n cristiana con varios amigos que eran cristianos; y con su madre M�nica , que fue incesante en sus oraciones y l�grimas por su conversi�n.
La consol� mucho la seguridad que le dio San Ambrosio, obispo de Mil�n, donde su hijo Agust�n era entonces profesor de ret�rica: que una hija de tantas oraciones y temores no pod�a perecer . Frecuentemente escuchaba predicar a San Ambrosio, y estaba afectado, no solo por su elocuencia, sino por los temas importantes que discut�a; pero a�n no pod�a abandonar su manique�smo. Paseando un d�a por un jard�n con su amigo Alipio , quien al parecer hab�a estado leyendo un ejemplar de San Pablo.
La ep�stola de Pablo a los Romanos, y la hab�a dejado en un terrapl�n cerca del cual estaban entonces (aunque algunos dicen que Agust�n estaba entonces solo), le pareci� o�r una voz musical que gritaba claramente: �TOLLE et LEGE! � TOLLE y LEGE! toma y lee! toma y lee ! Mir� hacia abajo, vio el libro, lo tom� y, abri�ndolo apresuradamente, las primeras palabras que se encontraron con sus ojos fueron estas: ?? ?????? ??? ??????,��No en glotoner�as y borracheras, sino vest�os del Se�or Jesucristo. Sinti� la importancia y el poder de las palabras, e inmediatamente resolvi� convertirse en un seguidor de Cristo: en consecuencia, abraz� instant�neamente el cristianismo y despu�s lo profes� con audacia y escribi� mucho en su defensa, y se convirti� en uno de los padres latinos m�s eminentes. Tal es la sustancia de la historia que nos ha sido transmitida desde la antig�edad acerca de la conversi�n de San Agust�n. Fue nombrado obispo de Hipona en �frica, en el a�o 395, y muri� en esa ciudad, el 28 de agosto de 430, en el mismo momento en que era sitiada por los v�ndalos.
III. Despu�s de lo que he dicho en las notas, no necesito a�adir nada sobre la gran cuesti�n pol�tica de la subordinaci�n a los poderes civiles y de la conveniencia�de someterse a todas las ordenanzas del hombre por causa del Se�or . S�lo necesito observar que es en las cosas civiles que se ordena esta obediencia; en las cosas religiosas s�lo se debe obedecer a Dios.
Si el poder civil intenta usurpar el lugar del Todopoderoso, y forjar un nuevo credo, o prescribir ritos y ceremonias no autorizados por la palabra de Dios, ning�n cristiano est� obligado a obedecer. Sin embargo, incluso en este caso, como ya he se�alado, ning�n cristiano est� autorizado a rebelarse contra el poder civil; debe soportar la persecuci�n y, si es necesario, sellar la verdad con su sangre, y as� convertirse en m�rtir del Se�or Jes�s.�Esta ha sido la pr�ctica invariable de la genuina Iglesia de Cristo. Encomendaron su causa al que juzga con justicia. Ver m�s sobre este tema en Mateo 22:20.
Información bibliográfica Texto de la bibliografía=Clarke, Adam. "Comentario sobre Romans 13". "El Comentario de Adam Clarke". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/acc/romans-13.html. 1832.
Versículo 1
CAP�TULO XIII.
Se inculca la sujeci�n a los gobernadores civiles, desde la consideraci�n
que el gobierno civil es seg�n la ordenanza de Dios; y
que los que resisten a las autoridades leg�timamente constituidas
recibir�n condenaci�n , 1, 2.
Y los que son obedientes recibir�n alabanza , 3.
El car�cter de gobernador civil leg�timo , 4.
La necesidad de sujeci�n , 5.
La conveniencia de pagar tributo l�cito , 6, 7.
Los cristianos deben amarse unos a otros , 8-10.
La necesidad de la conversi�n inmediata a Dios se demuestra a partir de la
brevedad e incertidumbre del tiempo , 11, 12.
c�mo deben andar los gentiles para agradar a Dios, y revestirse
�de Cristo Jes�s para su salvaci�n , 13, 14.
NOTAS AL CAPITULO XIII.
Para ver con qu� propiedad introduce el ap�stol los importantes temas que trata en este cap�tulo, es necesario hacer algunas observaciones sobre las circunstancias en que entonces se encontraba la Iglesia de Dios.�Generalmente se admite que esta ep�stola fue escrita alrededor del a�o 58 de nuestro Se�or, cuatro o cinco a�os despu�s del edicto del emperador Claudio, por el cual todos los jud�os fueron desterrados de Roma. Y como en aquellos primeros tiempos generalmente se confund�a a los cristianos con los jud�os, es probable que ambos estuvieran incluidos en este decreto.�
Por qu� motivo se emiti� este edicto no aparece satisfactoriamente. Suetonio nos dice que fue porque los jud�os estaban haciendo disturbios continuos bajo su l�der Christus . ( Hechos 18:2 .)
Que los jud�os eran, en general, un pueblo inquieto y sedicioso, se desprende claramente de toda su historia. Ten�an la m�s arraigada aversi�n al gobierno pagano; y era una m�xima para ellos que el mundo hab�a sido dado a los israelitas; que ellos deb�an tener el gobierno supremo en todas partes, y que los gentiles deb�an ser sus vasallos. Con tales nociones pol�ticas, basadas en su inquietud nativa, no es de extra�ar que en varios casos dieran motivos de sospecha al gobierno romano, que se alegrar�a de tener la oportunidad de expulsar de la ciudad a las personas que consideraba peligrosas para su paz y seguridad; tampoco es irrazonable por este motivo suponer, con el Dr. Taylor, que los cristianos, bajo la noci�n de ser el pueblo peculiar de Dios, y los s�bditos de su reino solamente, podr�an estar en peligro de ser infectados con esos sentimientos revoltosos y rebeldes: por lo tanto, el ap�stol les muestra que estaban, a pesar de sus honores y privilegios como cristianos, obligados por las m�s fuertes obligaciones de conciencia a estar sujetos al gobierno civil. El juicioso comentarista a�ade: "No puedo dejar de observar la admirable habilidad y destreza con que el ap�stol ha tratado el tema. Sus puntos de vista al escribir son siempre amplios en todos los puntos; y toma en sus pensamientos e instrucciones a todas las partes que probablemente podr�an obtener alg�n beneficio de ellos. Como el cristianismo estaba creciendo entonces, y los poderes del mundo empezaban a tomar nota de �l, no era improbable que esta carta cayera en manos de los magistrados romanos. Y cuando eso ocurriera, era justo, no s�lo que vieran que el cristianismo no favorec�a la sedici�n, sino tambi�n que tuvieran la oportunidad de leer su propio deber y sus obligaciones. Pero como eran demasiado orgullosos e insolentes para permitir que se les instruyera de manera clara y directa, el ap�stol, con mano maestra, delinea e inculca con fuerza el deber del magistrado; Mientras defiende su causa con el sujeto, y establece su deber sobre la base m�s segura y s�lida, h�bilmente se pone del lado del magistrado, y vindica su poder contra cualquier sujeto que pueda haber imbuido principios sediciosos, o que pueda estar inclinado a dar al gobierno cualquier perturbaci�n; y bajo esta ventaja, lee al magistrado una fina y cercana lecci�n sobre la naturaleza y los fines del gobierno civil. Un modo de transmisi�n tan ingenioso e intachable que incluso el propio Ner�n, si esta ep�stola hubiera ca�do en sus manos, no podr�a dejar de ver su deber claramente expuesto, sin encontrar nada servil o halagador por un lado, ni ofensivo o repugnante por otro.
"El lector atento se complacer� en ver con qu� destreza, verdad y gravedad el ap�stol, en un peque�o comp�s, afirma y explica el fundamento, la naturaleza, los fines y los justos l�mites de la autoridad del magistrado, mientras defiende su causa y ense�a al s�bdito el deber y la obediencia que debe al gobierno civil" - Notas del Dr. Taylor, p�gina 352.
verso Romanos 13:1 _ Que cada alma est� sujeta a los poderes superiores...�Este es un dicho muy fuerte, y muy solemnemente presentado; y debemos considerar al ap�stol como hablando, no desde su propio juicio privado, o ense�ando una doctrina de conveniencia presente , sino declarando la mente de Dios sobre un tema de suma importancia para la paz del mundo; una doctrina que no pertenece exclusivamente a ninguna clase de personas, orden de la comunidad, o situaciones oficiales , sino a toda alma ; y, sobre los principios que establece el ap�stol, a cada alma en todas las posibles variedades de situaci�n, y en todas las ocasiones.
�Y cu�l es esta doctrina solemne? Es este: Que cada alma est� sujeta a los poderes superiores . Que todo hombre sea obediente al gobierno civil bajo el cual la providencia de Dios ha echado su suerte.
Porque no hay poder sino de Dios...�Como Dios es el origen del poder, y el Gobernador supremo del universo, �l delega autoridad a quien quiere; y aunque en muchos casos el gobernador mismo puede no ser de Dios , sin embargo, el gobierno civil es de �l; porque sin esto no podr�a haber sociedad, ni seguridad, ni propiedad privada; todo ser�a confusi�n y anarqu�a, y el mundo habitable pronto quedar�a despoblado.
En la antig�edad, Dios, de manera especial, en muchas ocasiones designaba al individuo que hab�a de gobernar; y en consecuencia gobern� por derecho divino , como en el caso de Mois�s, Josu� , los jueces hebreos y varios de los reyes israelitas . En tiempos posteriores, y hasta el d�a de hoy, lo hace por una providencia supervisora ??general que antes lo hac�a por designaci�n especial.
En todas las naciones de la tierra existe lo que puede llamarse una constituci�n , un plan por el cual se gobierna un pa�s o estado en particular; y esta constituci�n est� m�s o menos calculada para promover los intereses de la comunidad. El gobernador civil, ya sea electivo o hereditario conviene en gobernar seg�n esa constituci�n. As� podemos considerar que hay pacto y consentimiento entre el gobernante y los gobernados �y en tal caso, se puede considerar que el potentado llega a la suprema autoridad de la manera directa de la providencia de Dios; y como el gobierno civil es de Dios, que es la fuente de la ley, el orden y la regularidad, el gobernador civil, que administra las leyes de un estado de acuerdo con su constituci�n , es el ministro de Dios .�Pero se ha preguntado: si el gobernante es un hombre inmoral o libertino, �no prueba por ello que es indigno de su alto cargo, y no deber�a ser depuesto? Respondo que no: si gobierna seg�n la constituci�n , nada puede justificar la rebeli�n contra su autoridad. Puede ser irregular en su propia vida privada ; puede ser un hombre inmoral y deshonrarse por una conducta impropia: pero si gobierna de acuerdo con la ley ; si no intenta cambiar la constituci�n, ni romper el pacto entre �l y el pueblo; no hay, por tanto, fundamento legal de oposici�n a su autoridad civil, y todo acto contra �l no es s�lo rebeli�n en el peor sentido de la palabra, como es ilegal y absolutamente pecaminoso.
Nada puede justificar la oposici�n de los s�bditos al gobernante sino los intentos manifiestos de su parte de cambiar la constituci�n o gobernar en contra de la ley . Cuando el gobernante act�a as�, disuelve el pacto entre �l y su pueblo; su autoridad ya no es vinculante, porque es ilegal; y es ilegal porque obra contra las leyes de aquella constituci�n, seg�n la cual, al ser elevado al supremo poder, prometi� gobernar.�Esta conducta justifica la oposici�n a su gobierno; pero sostengo que ninguna mala conducta personal en el gobernante, ninguna inmoralidad en su propia vida, mientras gobierna de acuerdo con la ley , puede justificar ni la rebeli�n contra �l ni el desprecio de su autoridad. Por su conducta pol�tica es responsable ante su pueblo ; por su conducta moral es responsable ante Dios , su conciencia y los ministros de la religi�n .
Un rey puede ser un buen hombre moral y, sin embargo, un pr�ncipe d�bil y, de hecho, malo y peligroso . Puede ser un hombre malo y manchado de vicio en su vida privada y, sin embargo, ser un buen pr�ncipe . SAUL era un buen hombre moral , pero un mal pr�ncipe , porque se esforz� por actuar en contra de la constituci�n israelita: cambi� algunas partes esenciales de esa constituci�n, como lo he mostrado en otra parte; ( Hechos 13:22 Hechos 13:22 ;) por lo tanto, fue legalmente depuesto.
James II era un hombre de buena moral , por lo que s�, pero era un pr�ncipe malo y peligroso ; se esforz� por alterar y cambiar esencialmente la constituci�n brit�nica, tanto en la Iglesia como en el estado , por lo que fue depuesto legalmente. Ser�a f�cil, repasando la lista de nuestros propios reyes, se�alar varios que merecidamente tuvieron fama de buenos reyes , que en su vida privada fueron muy inmorales .�Por malos que pudieran ser en la vida privada, la constituci�n en sus manos siempre se consider� un dep�sito sagrado, y la conservaron fielmente y la transmitieron intacta a sus sucesores; y cuid�, mientras llevaban las riendas del gobierno, que se administrara con imparcialidad y eficacia.
Debe admitirse, sin embargo, que cuando un pr�ncipe, por muy atento que sea a las leyes, es injusto en la vida privada, su ejemplo es contagioso; la moralidad, desterrada del trono, es desaprobada por la comunidad; y la felicidad disminuye en proporci�n al aumento del vicio. Por otra parte, cuando un rey gobierna de acuerdo con la constituci�n de sus reinos y tiene su coraz�n y su vida gobernados por las leyes de su Dios, entonces es una doble bendici�n para su pueblo; mientras gobierna cuidadosamente de acuerdo con las leyes, su ejemplo piadoso es un gran medio para extender y confirmar el reino de la moralidad pura entre sus s�bditos. El vicio es desacreditador del trono, y el libertino no se atreve a esperar un lugar de confianza y seguridad (aunque en otros aspectos est� calificado para ello), porque es un hombre vicioso.
Como ya he mencionado algunos potentados por su nombre , como ejemplos aptos de las doctrinas que he estado estableciendo, mis lectores naturalmente esperar�n que, en una oportunidad tan justa, presente otro ; aquel en quien se encuentra la doble bendici�n; uno que, a trav�s de un reinado inusualmente prolongado, durante cada a�o del cual vigil� muy concienzudamente la sagrada constituci�n encomendada a su cuidado, no s�lo no perjudic� esta constituci�n, sino que se ocup� de que sus sanas leyes fueran debidamente administradas, y que en actu� con todo respeto como padre de su pueblo, y a�adi� a todo esto la m�s ejemplar conducta moral�tal vez alguna vez exhibido por un pr�ncipe, ya sea en tiempos antiguos o modernos; no s�lo desaprobando t�citamente el vicio por su conducta verdaderamente religiosa, sino por sus frecuentes proclamas que prohib�an de la manera m�s solemne quebrantar el s�bado, jurar profano e inmoralidad en general.�Se podr�a decir m�s con justicia, pero cuando he mencionado todas estas cosas (y las menciono con j�bilo y con gratitud a Dios), apenas necesito a�adir el venerable nombre de GEORGE III, rey de Gran Breta�a ; como todo lector percibir� de inmediato que la descripci�n no conviene a ning�n otro potentado. S�lo puedo observar que, a pesar de que su largo reinado ha sido un reinado de problemas y conmociones sin precedentes en el mundo, en los que su imperio siempre ha estado involucrado, sin embargo, nunca las artes �tiles, las ciencias ennoblecedoras y la religi�n pura ganaron un lugar m�s decidido y ascendencia general: y mucho de esto, bajo Dios, se debe a la manera en que este rey ha vivido, y el aliento que invariablemente dio a todo lo que ten�a una tendencia a promover los mejores intereses de su pueblo.
De hecho, se ha observado bien que, bajo la providencia reinante de Dios, fue principalmente debido a las virtudes privadas y personales del soberano que la casa de Brunswick permaneci� firmemente asentada en el trono en medio de las tormentas que surgieron de las agitaciones democr�ticas y las convulsiones revolucionarias�en Europa durante los a�os 1792-1794. La estabilidad de su trono en medio de estos peligros y angustias puede resultar una lecci�n �til para sus sucesores, y mostrarles la fuerza de un car�cter virtuoso, y que la moralidad y la religi�n forman el mejor baluarte contra esos grandes males a los que est�n expuestos todos los gobiernos humanos.�Este peque�o tributo de alabanza al car�cter y conducta del rey brit�nico, y gratitud a Dios por tal gobernador, no se sospechar� de siniestro motivo; ya que el objeto de ella es, por una providencia inescrutable, colocado en una situaci�n a la que no pueden acercarse ni la envidia, ni la adulaci�n , ni siquiera la justa alabanza, y donde la majestad del hombre se coloca en las ruinas m�s espantosas pero respetables. S�lo me queda una rebaja que hacer: si este potentado hubiera sido tan adverso a la GUERRA como lo fue a los vicios p�blicos y privados, hubiera sido el soberano m�s inmaculado que jam�s haya empu�ado un cetro o llevado una corona.
Pero para resumir el tema y concluir el argumento: deseo particularmente mostrar la absoluta ilegalidad de la rebeli�n contra un gobernante, quien, aunque puede ser incorrecto en su conducta moral, gobierna de acuerdo con las leyes; y la bendici�n adicional de tener un pr�ncipe, quien, mientras su conducta pol�tica est� regulada por los principios de la constituci�n, tiene su coraz�n y vida regulados por los dictados de la verdad eterna, tal como est� contenido en esa revelaci�n que vino de Dios.
Versículo 2
verso Romanos 13:2 _ Quienquiera que resista el poder...�? ??????????????, El que se pone en orden contra este orden de Dios; ?? ??? ???? ???????, y los que resisten , ?? ????????????, los que se oponen obstinadamente y sin raz�n al gobernante, y se esfuerzan por desestabilizar la constituci�n y provocar cambios ilegales,
recibir�n para s� la condenaci�n...�?????, condenaci�n ; ser�n condenados tanto por el esp�ritu como por la letra de esa constituci�n, que, bajo el pretexto de defender o mejorar, indirectamente se esfuerzan por subvertir.
Versículo 3
Verso Romanos 13:3 . Porque los gobernantes no son terror para las buenas obras...�Aqu� el ap�stol muestra al magistrado civil lo que debe ser: est� revestido de gran poder, pero ese poder le es confiado, no para terror y opresi�n del hombre recto, sino para intimidar y castigar a los malvados. Es, en una palabra, para el beneficio de la comunidad , y no para el engrandecimiento de s� mismo , que Dios ha confiado el supremo poder civil a cualquier hombre.�Si usa esto para maltratar, robar, estropear, oprimir y perseguir a sus s�bditos, no solo es un mal hombre , sino tambi�n un mal pr�ncipe . Infringe los principios esenciales del derecho y la equidad. Si persigue a sus s�bditos obedientes y leales, por cualquier motivo religioso, esto es contrario a toda ley y derecho; y el hacerlo as� lo vuelve indigno de su confianza, y deben considerarlo no como una bendici�n sino como una plaga .�Sin embargo, incluso en este caso, aunque en nuestro pa�s ser�a una violaci�n de la constituci�n, que permite a cada hombre adorar a Dios seg�n su conciencia, los verdaderamente piadosos no sentir�n que incluso esto justificar�a rebelarse contra el pr�ncipe; han de padecer con paciencia, y encomendarse ellos mismos y su causa al que juzga con justicia. Es una cosa horrible rebelarse, y son rar�simos los casos que pueden justificar la rebeli�n contra las autoridades constituidas. V�ase la doctrina sobre Romanos 13:1 .
�Entonces no tendr�s miedo del poder? Si no quieres vivir con miedo al magistrado civil, vive de acuerdo con las leyes; y puedes esperar que �l gobierne de acuerdo con las leyes, y en consecuencia, en lugar de incurrir en culpa , tendr�s alabanza . Esto se dice sobre la suposici�n de que el gobernante es �l mismo un buen hombre : as� lo suponen las leyes; y el ap�stol, sobre la cuesti�n general de la obediencia y protecci�n, asume el punto de que el magistrado es tal.
Versículo 4
Verso Romanos 13:4 .�Porque �l es el ministro de Dios para el bien... Aqu� el ap�stol pone el car�cter del gobernante en la luz m�s fuerte posible. Es el ministro de Dios, el cargo es por designaci�n divina: el hombre que es digno del cargo actuar� en conformidad con la voluntad de Dios: y como los ojos del Se�or est�n sobre los justos, y sus o�dos abiertos a su clamor, en consecuencia el gobernante ser� el ministro de Dios para ellos para el bien.
No lleva la espada en vano... Su poder le es delegado para la defensa y el est�mulo de los buenos, y el castigo de los malvados; y tiene autoridad para castigar capitalmente, cuando la ley as� lo requiera: el t�rmino espada nos lleva a inferir esto.
Porque es ministro de Dios, vengador... ???? ???????? ????? ???????, Porque es ministro vindicativo de Dios, para ejecutar la ira; ??? ?????, para infligir el castigo a los transgresores de la ley; y esto de acuerdo con los estatutos de esa ley; porque a los ministros civiles de Dios nunca se les permite pronunciar o infligir el castigo de acuerdo con sus propias mentes o sentimientos, sino de acuerdo con las declaraciones expresas de la ley.
Versículo 5
verso Romanos 13:5 _ Necesariamente deb�is estar sujetos ] ??????, Es necesario que est�is sujetos, no s�lo por la ira, ??? ??? ?????, a causa del castigo que ser� infligido a los malhechores, sino tambi�n por causa de la conciencia ; no s�lo para evitar el castigo, sino tambi�n para conservar una conciencia tranquila. Porque, como el gobierno civil est� establecido en el orden de Dios para el sost�n, defensa y felicidad de la sociedad, los que transgreden sus leyes, no s�lo se exponen a las penas se�aladas por los estatutos, sino tambi�n a la culpa en su propia conciencia, porque pecan contra Dios. Aqu� hay dos motivos poderosos para prevenir la infracci�n de las leyes y hacer cumplir la obediencia.
1. El temor al castigo; esto pesa con los imp�os.
2. El mantenimiento de una buena conciencia, que pesa poderosamente en toda persona que teme a Dios. Estos dos motivos deben insistir con frecuencia tanto entre los profesores como entre los profanos.
Versículo 6
Verso Romanos 13:6 . Por esta causa paguen tributo tambi�n...�Debido a que el gobierno civil es una orden de Dios, y los ministros de estado deben hacer un gasto considerable para proveer a la seguridad y defensa de la comunidad, es necesario que aquellos en cuyo nombre se incurre en estos gastos debe sufragar ese gasto; y por lo tanto nada puede ser m�s razonable que una tributaci�n imparcial y moderada , mediante la cual se puedan sufragar los gastos del estado, y los diversos oficiales, ya sean civiles o militares, que est�n empleados para el servicio p�blico, sean adecuadamente remunerados.
Todo esto es justo y correcto, pero no hay ninguna insinuaci�n en las palabras del ap�stol en favor de una tributaci�n extravagante y opresiva , para el apoyo de guerras sin principios e innecesarias ; o la pensi�n de hombres corruptos o in�tiles . Los impuestos deben pagarse para el sustento de aquellos que son ministros de Dios , los funcionarios civiles necesarios, desde el rey para abajo, que est�n atendiendo CONTINUAMENTE en esto mismo . Y observe el lector que por ministros de Dios no se entienden aqu� los ministros de religi�n , sino los civiles . oficiales en todos los departamentos del estado.
Versículo 7
Verso Romanos 13:7 .�Por lo tanto, paguen a todos sus cuotas... Este es un mandato extenso. Sed r�gidamente justos; no reteng�is ni al rey ni a sus ministros, ni a sus funcionarios de justicia y de hacienda, ni siquiera a los m�s bajos de la comunidad, lo que las leyes de Dios y de vuestra patria os obligan a pagar.
Tributo a quien tributa... ?????. Esta palabra probablemente se refiere a los impuestos que se cobraban a las personas y a las haciendas.
Aduana a quien se acostumbra... ?????. Esta palabra probablemente significa tales impuestos que se impon�an sobre los bienes, mercanc�as, etc., sobre las importaciones y exportaciones lo que com�nmente llamamos aduana. Kypke en este lugar ha citado algunas buenas autoridades para la distinci�n y el significado anteriores. Ambas palabras aparecen en la siguiente cita de Estrab�n: ?????? ??? ????????? ?? ????, ????? ?????????????- Es necesario disminuir las ADUANAS, si se imponen IMPUESTOS. Estrab�n, lib. ii., p�gina 307. V�anse otros ejemplos en Kypke.
Teme a quien teme... Es probable que la palabra ?????, que traducimos como temor, signifique esa reverencia que produce obediencia. Trata a todos los personajes oficiales con respeto, y s� obediente con tus superiores.
Honra a quien honra... La palabra ????? puede significar aqu� ese respeto exterior que el principio reverencia, del que surge, producir� generalmente. Nunca te comportes de manera grosera con ninguna persona; pero comp�rtate de manera respetuosa con los hombres que ocupan un cargo: si ni siquiera puedes respetar al hombre -pues un cargo importante puede ser ocupado por una persona indigna-, respeta el cargo, y al hombre a causa de su cargo. Si un hombre se acostumbra a faltar al respeto a los personajes oficiales, pronto se encontrar� dispuesto a prestar poco respeto u obediencia a las propias leyes.
Versículo 8
Verso Romanos 13:8 . No deb�is a nadie nada, sino el amaros los unos a los otros...�En los vers�culos anteriores el ap�stol ha estado mostrando el deber, la reverencia y la obediencia, que todos los cristianos, desde el m�s alto hasta el m�s bajo, deben al magistrado civil; ya sea emperador, rey, proc�nsul u otro funcionario estatal; aqu� les muestra su deber entre s� : pero esto es muy diferente del que deben al gobierno civil: al primero deben sujeci�n, reverencia, obediencia y tributo; a �stos no deben m�s que el amor rec�proco y los oficios que necesariamente derivan de �l.�Por eso dice el Ap�stol: No deb�is a nadie ; como si dijera: Vosotros no deb�is a vuestros hermanos sino amor mutuo, y esto es lo que exige la ley de Dios, y en esto se cumple la ley. No est�is obligados a obedecerles como al magistrado civil; porque a �l deb�is estar necesariamente sujetos, no s�lo por temor al castigo, sino por causa de la conciencia : pero a �stos est�is ligados por amor ; y especialmente por ese amor que os impide por completo hacer cualquier cosa por la cual un hermano pueda sufrir cualquier tipo de da�o.
Versículo 9
Verso Romanos 13:9 . Por esto, no cometer�s adulterio...�El que ama a otro no lo privar� de su mujer , de su vida , de sus bienes , de su buen nombre ; y ni siquiera permitir� que entre en su coraz�n un deseo que lo lleve a querer poseer cualquier cosa que sea propiedad de otro: porque la ley , la Sagrada Escritura, ha dicho: Amar�s a tu pr�jimo como a ti mismo .�
Es notable que ?? ????????????????, no dar�s falso testimonio , falta aqu� en ABDEFG y en varios otros MSS. Griesbach lo ha dejado fuera del texto. Falta tambi�n en el sir�aco y en varios de los padres primitivos. La generalidad de los mejores cr�ticos la consideran una lectura espuria.
Versículo 10
Verso Romanos 13:10 . El amor no obra mal...�As� como el que ama a otro obrar� con esa persona como, en circunstancias contrarias, le gustar�a que su pr�jimo actuara con �l; por lo tanto, este amor nunca puede obrar mal hacia otro: y, en este aspecto , es decir, lo que debemos al pr�jimo, el amor es el cumplimiento de la ley .
Versículo 11
Verso Romanos 13:11 .�Y que, conociendo el tiempo... el Dr. Taylor ha dado una juiciosa par�frasis de �ste y los siguientes versos: "Y todos los deberes de una vida virtuosa y santa debemos cumplirlos con mayor cuidado y celo, considerando la naturaleza y la brevedad de la presente estaci�n de la vida; lo que nos convencer� de que ya es hora de despertar y sacudir el sue�o, y aplicarnos con vigilancia y vigor a los deberes de nuestra vida cristiana; porque esa salvaci�n eterna, que es el objeto de nuestra fe y esperanza cristianas, y el gran motivo de nuestra religi�n, est� cada d�a m�s cerca de nosotros que cuando empezamos a profesar el cristianismo."
Algunos piensan que el pasaje debe entenderse as�: Ahora tenemos muchas ventajas que antes no ten�amos. La salvaci�n est� m�s cerca, todo el sistema cristiano est� m�s explicado y su conocimiento es m�s f�cil de adquirir que antes, por lo que se requiere que avancemos m�s en el conocimiento religioso y en la piedad pr�ctica, y durante mucho tiempo hemos sido demasiado negligentes en estos aspectos. Otros suponen que el ap�stol se refer�a a la liberaci�n de las persecuciones con las que entonces eran afligidos.
Versículo 12
Verso Romanos 13:12 . La noche est� muy avanzada...��Si entendemos esto en referencia al estado pagano de los romanos, puede ser parafraseado as�: La noche est� muy avanzada: las tinieblas paganas est�n a punto de terminar. El d�a est� cerca: la plena manifestaci�n del Sol de justicia, en la iluminaci�n de todo el mundo gentil, se acerca r�pidamente. La manifestaci�n del Mes�as es regularmente denominada por los antiguos jud�os ??? yom, d�a, porque antes de esto todo es noche, Bereshith rabba sect. 91, fol. 89. Deshazte de las obras de las tinieblas-prep�rate para recibir esta luz naciente, y da la bienvenida a su aproximaci�n, desechando la superstici�n, la impiedad y los vicios de todo tipo: y ponte la armadura de la luz, recibe plenamente la ense�anza celestial, mediante la cual tus esp�ritus estar�n tan completamente armados contra los ataques del mal como tus cuerpos podr�an estarlo con las mejores armas y armaduras impenetrables. Este sentido parece el m�s adecuado para los vers�culos siguientes, en los que se especifican especialmente los vicios de los gentiles y se les exhorta a abandonarlos y a recibir el Evangelio de Cristo. El m�todo com�n de explicaci�n es �ste: La noche est� muy avanzada; nuestra vida imperfecta actual, llena de aflicciones, tentaciones y pruebas, est� casi agotada; el d�a de la bendici�n eterna est� cerca; est� a punto de amanecer sobre nosotros en nuestra gloriosa resurrecci�n a la vida eterna. Por tanto, desechemos: vivamos como candidatos a esta gloria eterna". Pero este sentido no puede concordar en absoluto con lo que se dice a continuaci�n, ya que los gentiles son los destinatarios m�s evidentes.
Versículo 13
Verso Romanos 13:13 . Caminemos honestamente, como en el d�a...�Caminemos , ??????????, decentemente , de ??, bien , y ?????, semblante , h�bito o vestido . Que nuestro comportamiento sea decente, ordenado y serio; tal cual no nos avergonzaremos a los ojos del mundo entero.
No en disturbios, y embriaguezas...�?? ?????? ??? ?????? ??? ?????? � ?????, disturbios , seg�n Hesychius , significa ?????? ??????, ??????? ????????, ????, canciones sucias y disolutas , banquetes y similares. ?????? significa fiestas de borrachera , tales como las que se celebraban en honor de sus dioses, cuando despu�s de haber sacrificado (???? ?? ?????, SUIDAS) beb�an en exceso, acompa�adas de actos abominables de todo tipo. Ver Suidas y Hesychius , bajo esta palabra.
No en rec�mara...�Esta no es una palabra leg�tima, y ??no transmite ning�n sentido hasta que, a partir de su conexi�n en este lugar, forzamos un significado sobre ella. La palabra original, ???????, significa fornicaciones y prostituci�n de todo tipo.
Y libertinaje...�??????????, Toda clase de inmundicias y pr�cticas sodom�ticas .
No en contiendas y envidia...�?? ????? ??? ????, No en contiendas y altercados furiosos, que deben ser consecuencia de tales pr�cticas como las mencionadas anteriormente. �Puede alguien suponer que este discurso es para los cristianos de Roma? �Que se les acusa de pr�cticas casi peculiares de los paganos ? �Y pr�cticas de lo m�s abandonadas y disolutas? Si los llamados cristianos en Roma fueran culpables de tales actos, no podr�a haber diferencia excepto en la profesi�n , entre ellos y los m�s abominables de los paganos .�Pero es imposible que tales cosas se hablen a los seguidores de Cristo; porque la misma gracia que trae el arrepentimiento permite al penitente desechar y abominar toda conducta tan viciosa y abominable.�Los consejos a los cristianos se encuentran en el cap�tulo anterior; los que se encuentran al final de este cap�tulo pertenecen �nicamente a los paganos .
Versículo 14
Verso Romanos 13:14 . V�stanse del Se�or Jes�s...�Esto es en referencia a lo que se dice, Romanos 13:13 : Pong�monos ropas decorosas , hagamos una profesi�n diferente, un�monos con otra compa��a, y mantengamos esa profesi�n con una conducta adecuada. Revestirse o revestirse de Jesucristo significa recibir y creer en el Evangelio ; y en consecuencia tomando sus m�ximas�para el gobierno de la vida, teniendo la mente que estaba en Cristo. Los jud�os antiguos usaban con frecuencia la frase ponerse la shejin�, o majestad divina, para significar que el alma se reviste de inmortalidad y se hace apta para la gloria.
Revestirse de una persona es una frase griega que significa asumir los intereses de otro: entrar en sus puntos de vista , imitarlo y estar completamente de su lado . San Cris�stomo menciona particularmente esto como una frase com�n, ? ????? ??? ????? ?????????, tal se ha puesto tal tal ; es decir, lo sigue de cerca y lo imita .
As� Dionysius Hal ., Antiq., lib. Xi., P�gina 689, que habla de Appio y el resto de los Decemviri , dice: ?????? ????????????, ???? ??? ????????? ?????????? ??????? ???? ??????? ?????? ???????? no?????,, ' ya no eran los sirvientes de Tarquin, pero se vistieron con �l, lo imitaban y lo colocaban en cada cosa. Eusebio, en su vida de Constantino, dice lo mismo de sus hijos, se vistieron de su padre , parec�an entrar en su esp�ritu y puntos de vista, e imitarlo en todas las cosas.
El modo de hablar en s� est� tomado de la costumbre de los actores de teatro : asumieron el nombre y las vestiduras de la persona cuyo car�cter iban a representar, y se esforzaron lo m�s posible por imitarlo en su esp�ritu, palabras y acciones. Ver muchos ejemplos pertinentes en Kypke .
Y no hag�is provisi�n para la carne...�Por carne estamos aqu� para entender, no s�lo el cuerpo , sino todos los apetitos y pasiones irregulares que llevaron a las abominaciones ya citadas. No debe hacer ninguna provisi�n para el fomento y la gratificaci�n de un principio como este.
Para cumplir sus deseos...�??? ?????????, en referencia a sus lujurias ; tales como el ?????, ??????, ????? y ?????????, alboroto, embriaguez, prostituci�n e inmundicia , mencionados,� Romanos 13:13 , para hacer provisi�n para lo cual los gentiles viv�an y trabajaban , y compraban y vend�an , y tramaban y planeaban ; porque todo el negocio de su vida era satisfacer los deseos pecaminosos de la carne .
Sus fil�sofos les ense�aron poco m�s; y todo el c�rculo de sus deidades, as� como todo el esquema de su religi�n, sirvieron s�lo para excitar e inflamar tales pasiones y producir tales pr�cticas .
I. EN estos cuatro �ltimos versos hay una bella met�fora, y est� continuada y bien sostenida en cada expresi�n.
1. El ap�stol considera el estado de los gentiles bajo la noci�n de la noche , tiempo de tinieblas y tiempo de malas pr�cticas.
2. Que esta noche est� por terminar , la noche est� muy avanzada.
3. Considera que el Evangelio visita ahora a los gentiles, y la luz de un d�a glorioso que est� a punto de brillar sobre ellos.
4. �l llama a despertar a los que estaban en un estado est�pido e insensato acerca de todo bien espiritual y moral; y aquellos que fueron empleados en las pr�cticas m�s viles que podr�an envilecer y degradar a la humanidad.
5. Les ordena desechar las obras de las tinieblas, y vestirse con la armadura ????, las vestiduras de luz -de justicia: dejar de hacer el mal; para aprender a hacer el�bien. Aqu� hay una alusi�n a dejar a un lado la ropa de noche y ponerse la ropa de d�a .
6. A esto los exhorta a que caminen honradamente, decorosamente vestidos ; y no gastar su tiempo, malgastar sus bienes, destruir sus vidas y arruinar sus almas en pr�cticas tan inicuas como las que inmediatamente especifica.
7. Para que no se confundan con su significado acerca de la ropa decorosa con la que les exhorta a andar, inmediatamente se explica mediante el uso de una forma com�n de hablar, y dice, siempre siguiendo su met�fora, Vest�os del Se�or Jesucristo - recibe su doctrina, copia su ejemplo y busca las cosas que pertenecen a otra vida; porque los gentiles pensaban en poco m�s que hacer provisi�n para la carne o el cuerpo , para satisfacer sus deseos y propensiones animales.
II. Estos �ltimos versos se han hecho famosos en la Iglesia cristiana desde hace m�s de 1400 a�os, por ser el instrumento de la conversi�n de San Agust�n. Es bien sabido que este hombre fue al principio un maniqueo , en cuya doctrina continu� hasta el a�o 32 de su edad. Ten�a frecuentes conferencias y controversias sobre la religi�n cristiana con varios amigos que eran cristianos; y con su madre M�nica , que fue incesante en sus oraciones y l�grimas por su conversi�n.
La consol� mucho la seguridad que le dio San Ambrosio, obispo de Mil�n, donde su hijo Agust�n era entonces profesor de ret�rica: que una hija de tantas oraciones y temores no pod�a perecer . Frecuentemente escuchaba predicar a San Ambrosio, y estaba afectado, no solo por su elocuencia, sino por los temas importantes que discut�a; pero a�n no pod�a abandonar su manique�smo. Paseando un d�a por un jard�n con su amigo Alipio , quien al parecer hab�a estado leyendo un ejemplar de San Pablo.
La ep�stola de Pablo a los Romanos, y la hab�a dejado en un terrapl�n cerca del cual estaban entonces (aunque algunos dicen que Agust�n estaba entonces solo), le pareci� o�r una voz musical que gritaba claramente: �TOLLE et LEGE! � TOLLE y LEGE! toma y lee! toma y lee ! Mir� hacia abajo, vio el libro, lo tom� y, abri�ndolo apresuradamente, las primeras palabras que se encontraron con sus ojos fueron estas: ?? ?????? ??? ??????,��No en glotoner�as y borracheras, sino vest�os del Se�or Jesucristo. Sinti� la importancia y el poder de las palabras, e inmediatamente resolvi� convertirse en un seguidor de Cristo: en consecuencia, abraz� instant�neamente el cristianismo y despu�s lo profes� con audacia y escribi� mucho en su defensa, y se convirti� en uno de los padres latinos m�s eminentes. Tal es la sustancia de la historia que nos ha sido transmitida desde la antig�edad acerca de la conversi�n de San Agust�n. Fue nombrado obispo de Hipona en �frica, en el a�o 395, y muri� en esa ciudad, el 28 de agosto de 430, en el mismo momento en que era sitiada por los v�ndalos.
III. Despu�s de lo que he dicho en las notas, no necesito a�adir nada sobre la gran cuesti�n pol�tica de la subordinaci�n a los poderes civiles y de la conveniencia�de someterse a todas las ordenanzas del hombre por causa del Se�or . S�lo necesito observar que es en las cosas civiles que se ordena esta obediencia; en las cosas religiosas s�lo se debe obedecer a Dios.
Si el poder civil intenta usurpar el lugar del Todopoderoso, y forjar un nuevo credo, o prescribir ritos y ceremonias no autorizados por la palabra de Dios, ning�n cristiano est� obligado a obedecer. Sin embargo, incluso en este caso, como ya he se�alado, ning�n cristiano est� autorizado a rebelarse contra el poder civil; debe soportar la persecuci�n y, si es necesario, sellar la verdad con su sangre, y as� convertirse en m�rtir del Se�or Jes�s.�Esta ha sido la pr�ctica invariable de la genuina Iglesia de Cristo. Encomendaron su causa al que juzga con justicia. Ver m�s sobre este tema en Mateo 22:20.