Bible Commentaries
1 Timoteo 4

Comentario de Calvino sobre la BibliaComentario de Calvino

Versículo 1

1 Ahora el Esp�ritu claramente dijo que hab�a amonestado diligentemente a Timoteo acerca de muchas cosas; y ahora �l muestra la necesidad, porque es apropiado proveer contra el peligro que el Esp�ritu Santo advierte acercarse r�pidamente, es decir, que vendr�n falsos maestros, que sostendr�n insignificancias como la doctrina de la fe, y qui�n, colocando todo La santidad en los ejercicios externos arrojar� a la sombra la adoraci�n espiritual de Dios, que solo es legal. Y, de hecho, los siervos de Dios siempre han tenido que luchar contra personas como las que aqu� describe Pablo. Los hombres, por naturaleza, inclinados a la hipocres�a, Satan�s los convence f�cilmente de que Dios es adorado correctamente por las ceremonias y la disciplina externa; y, de hecho, sin un maestro, casi todos tienen esta convicci�n profundamente arraigada en sus corazones. Luego se agrega la astucia de Satan�s para confirmar el error: la consecuencia es que, en todas las �pocas, ha habido impostores que recomendaron la adoraci�n falsa, por la cual se enterr� la verdadera piedad. Nuevamente, esta plaga produce otra, a saber, que, en asuntos indiferentes, los hombres son sometidos a restricciones; porque el mundo f�cilmente se ve impedido de hacer lo que Dios hab�a declarado legal, a fin de que puedan tener el poder de transgredir impunemente las leyes de Dios.

Aqu� Pablo, por lo tanto, en la persona de Timoteo, advierte no solo a los efesios, sino a todas las iglesias en todo el mundo, acerca de los maestros hip�critas que, al establecer una adoraci�n falsa y al atrapar las conciencias con nuevas leyes, adulteran la verdadera adoraci�n de Dios, y corrompe la doctrina pura de la fe. Este es el objeto real del pasaje, que es especialmente necesario remarcar.

Adem�s, para que todos puedan escuchar con m�s atenci�n lo que va a decir, comienza con un prefacio, que esta es una profec�a indudable y muy clara del Esp�ritu Santo. De hecho, no hay raz�n para dudar de que extrajo todo lo dem�s del mismo Esp�ritu; pero, aunque deber�amos escucharlo siempre para comunicar la voluntad de Cristo, en un asunto de gran importancia deseaba especialmente testificar que no dijo nada sino por el Esp�ritu de profec�a. Por un anuncio solemne, por lo tanto, nos recomienda esta profec�a; y, no satisfecho con hacer esto, agrega que es claro y libre de toda ambig�edad.

En los �ltimos tiempos, en ese momento, ciertamente no pod�a esperarse que, en medio de una luz tan clara del evangelio, cualquiera se hubiera rebelado. Pero esto es lo que dice Pedro, que, como los falsos maestros antes molestaban al pueblo de Israel, nunca dejar�n de molestar a la Iglesia cristiana. ( 2 Pedro 3:3.) El significado es el mismo que si hubiera dicho: "La doctrina del evangelio est� ahora en un estado floreciente, pero Satan�s no se abstendr� de trabajar para ahogar la semilla pura por la ciza�a". . " (70) ( Mateo 13:20.)

Esta advertencia fue ventajosa en la �poca del ap�stol Pablo, ya que tanto los pastores como los dem�s pod�an prestar atenci�n a la doctrina pura, y no dejarse enga�ar. Para nosotros en el presente no es menos �til, cuando percibimos que no ha sucedido nada que no haya sido predicho por una profec�a expresa del Esp�ritu. Adem�s, aqu� podemos comentar; qu� gran cuidado ejerce Dios sobre su Iglesia, cuando advierte tan pronto de los peligros. Satan�s tiene, de hecho, m�ltiples artes para llevarnos al error y nos ataca con estratagemas asombrosas; pero, por otro lado, nos fortalece lo suficiente, si no lo hacemos por nuestra propia voluntad, elegimos ser enga�ados. Por lo tanto, no hay raz�n para quejarse de que la oscuridad es m�s poderosa que la luz, o que la verdad es vencida por la falsedad; pero, por el contrario, sufrimos el castigo de nuestro descuido e indolencia cuando nos desv�an del camino correcto de salvaci�n.

Pero los que se halagan en sus errores objetan que es casi imposible distinguir a qui�n o qu� tipo de personas describe Pablo. Como si fuera en vano, el Esp�ritu pronunci� esta profec�a y la public� mucho antes; porque, si no hubiera una marca segura, toda la advertencia actual ser�a superflua y, por consiguiente, absurda. �Pero lejos de nosotros pensar que el Esp�ritu de Dios nos da una alarma innecesaria, o no acompa�a la amenaza del peligro al mostrar c�mo debemos protegernos contra �l! Y esa calumnia es suficientemente refutada por las palabras de Pablo; porque se�ala, como con el dedo, ese mal que nos advierte que evitemos. No habla, en t�rminos generales, sobre falsos profetas, sino que describe claramente el tipo de falsa doctrina; es decir, aquello que, al vincular la piedad con elementos externos, pervertidos y profanos, como ya he dicho, la adoraci�n espiritual de Dios.

Algunos se rebelar�n por la fe. Es incierto si habla de maestros o de oyentes; pero estoy m�s dispuesto a referirme a esto �ltimo; porque luego llama a los esp�ritus maestros que son impostores. Y esto es (?????????????) m�s enf�tico, que no solo habr� quienes sembren doctrinas malvadas y corrompan la pureza de la fe, sino que nunca podr�n desear disc�pulos a quienes llaman atraer a su secta; y cuando una mentira gana as�, surge de ella mayores problemas.

Adem�s, no es un leve vicio lo que describe, sino un crimen muy atroz: la apostas�a de la fe; aunque, a primera vista, en la doctrina que nota brevemente no parece haber tanto mal. Cual es el caso �Se anula por completo la fe debido a la prohibici�n del matrimonio o de ciertos tipos de alimentos? Pero debemos tener en cuenta una raz�n m�s elevada, que los hombres pervierten e inventan a su gusto la adoraci�n a Dios, que asumen el dominio sobre las conciencias y que se atreven a prohibir el uso de las cosas buenas que el Se�or ha permitido. Tan pronto como se deteriora la pureza de la adoraci�n a Dios, ya no queda nada perfecto ni sano, y la fe misma se arruina por completo.

Por consiguiente, aunque los papistas se r�en de nosotros, cuando censuramos sus leyes tir�nicas sobre las observancias externas, sabemos que estamos abogando por una causa de mayor peso e importancia; porque la doctrina de la fe es destruida, tan pronto como la adoraci�n a Dios es infectada por tales corrupciones. La controversia no se trata de carne o pescado, o de un color negro o ceniciento, o de viernes o mi�rcoles, sino de las supersticiones locas de los hombres, que desean apaciguar a Dios con tales insignificancias, y, al inventar una adoraci�n carnal de �l, idear para ellos un �dolo en lugar de Dios. �Qui�n negar� que esto es repugnante de la fe?

Para los esp�ritus enga�adores quiere decir profetas o maestros, a quienes les da esta designaci�n, porque se jactan del Esp�ritu y, bajo este t�tulo, se insin�an en el favor del pueblo. Esto, de hecho, es cierto en todo momento, que los hombres, sean lo que sean, hablan bajo la emoci�n del esp�ritu. Pero no es el mismo esp�ritu que los excita a todos; porque a veces Satan�s es un esp�ritu mentiroso en la boca de los falsos profetas, para enga�ar a los incr�dulos, que merecen ser enga�ados. ( 1 Reyes 22:21.) Por otro lado, todo aquel que rinde el debido honor a Cristo habla por el Esp�ritu de Dios, como testifica Pablo. ( 1 Corintios 12:3.)

Ahora ese modo de expresi�n, del que estamos hablando ahora, se origin� al principio de esta circunstancia, que los siervos de Dios profesaron tener de la revelaci�n del Esp�ritu, todo lo que pronunciaron en p�blico. Esto era realmente cierto; y por eso recibieron el nombre del Esp�ritu, cuyos �rganos eran. Pero los ministros de Satan�s, por una falsa emulaci�n, como los simios, comenzaron a hacer el mismo alarde e igualmente asumieron el nombre falsamente. Por los mismos motivos, John dice:

�Prueba los esp�ritus, ya sean de Dios�. ( 1 Juan 4:1.)

Adem�s, Pablo explica su significado al agregar, a las doctrinas de los demonios; que es como si hubiera dicho: "Atender a los falsos profetas y a sus doctrinas diab�licas". Observe nuevamente que no se trata de un error de poca importancia, o uno que deber�a ocultarse, cuando las conciencias est�n sujetas a los artilugios de los hombres y, al mismo tiempo, la adoraci�n a Dios est� corrompida.

Versículo 2

2 Hablar miente en hipocres�a Si estas palabras se refieren a "demonios", entonces esta palabra significar� hombres enga�ando por instigaci�n del demonio. Pero tambi�n podemos suministrar las palabras, "de hombres hablando". Ahora desciende a un caso particular, cuando dice que "hablan mentiras en hipocres�a", y que su conciencia est� chamuscada con un hierro caliente. Y, de hecho, debe saberse que estos dos est�n tan unidos que el primero surge de este �ltimo; para las conciencias, que son malas y chamuscadas con el hierro caliente de sus cr�menes, siempre huyen a la hipocres�a como un refugio inmediato; es decir, inventan presencias hip�critas para deslumbrar a los ojos de Dios; �Y qu� m�s hacen los que se esfuerzan por apaciguar a Dios por la m�scara de las observancias externas?

Por lo tanto, la palabra hipocres�a debe explicarse de manera agradable al pasaje en el que aparece ahora; porque, primero, debe relacionarse con la doctrina, y, luego, denota ese tipo de doctrina que adultera el culto espiritual de Dios al intercambiar su pureza genuina por ejercicios corporales; y as� incluye todos los m�todos ideados por los hombres para apaciguar a Dios u obtener su favor. El significado puede resumirse as�; primero, que todos los que asumen una santidad simulada son guiados por la instigaci�n del demonio; porque Dios nunca es adorado correctamente por las ceremonias externas; para verdaderos adoradores

"Adoradlo en esp�ritu y en verdad" ( Juan 4:24)

y, en segundo lugar, que esta es una medicina in�til, por la cual los hip�critas mitigan sus dolores, o m�s bien un yeso por el cual las malas conciencias ocultan sus heridas, sin ninguna ventaja, y para su completa destrucci�n.

Versículo 3

3 Prohibiendo casarse. Despu�s de describir la clase, a continuaci�n menciona dos casos, (71) a saber, la prohibici�n del matrimonio y de algunos tipos de alimentos. Surgen de esa hipocres�a que, habiendo abandonado la verdadera santidad, busca algo m�s con el prop�sito de ocultar y disfrazar; porque aquellos que no se guardan de la ambici�n, la codicia, el odio, la crueldad y dem�s, se esfuerzan por obtener una justicia absteni�ndose de las cosas que Dios ha dejado en general. �Por qu� las leyes est�n cargadas de conciencia, sino porque se busca la perfecci�n en algo diferente de la ley de Dios? Esto no se hace sino por hip�critas, quienes, para que puedan transgredir impunemente esa justicia del coraz�n que la ley requiere, se esfuerzan por ocultar su maldad interna por esas observancias externas como velos con los que se cubren.

Esta era una clara amenaza de peligro, por lo que no era dif�cil para los hombres protegerse contra ella, al menos si hab�an prestado sus o�dos al Esp�ritu Santo, cuando �l dio una advertencia tan expresa. Sin embargo, vemos que la oscuridad de Satan�s generalmente prevaleci�, por lo que la clara luz de esta predicci�n sorprendente y memorable fue en vano. No mucho despu�s de la muerte del ap�stol, surgieron los Encratitas, (que tomaron su nombre de la continencia), Tatianistas, (72) Cataristas, Montanus con su secta, y finalmente los maniqueos, que ten�an una aversi�n extrema al matrimonio y al comer carne, y los condenaron como cosas profanas. Aunque fueron rechazados por la Iglesia, debido a su arrogancia, al desear someter a otros a sus opiniones, sin embargo, es evidente que aquellos que se opusieron a ellos cedieron a su error m�s de lo debido. No fue pensado por aquellos de quienes estoy hablando para imponer una ley a los cristianos; pero aun as� atribuyeron mayor peso de lo que deber�an haber hecho a observancias supersticiosas, como abstenerse del matrimonio y no probar la carne.

Tal es la disposici�n del mundo, siempre so�ando que Dios debe ser adorado de manera carnal, como si Dios fuera carnal. Las cosas empeoraron gradualmente, esta tiran�a se estableci�, que no deber�a ser legal que sacerdotes o monjes ingresen al estado de casados, y que ninguna persona deber�a atreverse a probar la carne en ciertos d�as. No injustamente, por lo tanto, sostenemos que esta predicci�n fue pronunciada contra los papistas, ya que el celibato y la abstinencia de ciertos tipos de alimentos son ordenados por ellos m�s estrictamente que cualquier mandamiento de Dios. Piensan que escapan por un artificio ingenioso, cuando torturan las palabras de Paul para dirigirlas contra los tatianistas o maniqueos, o cosas por el estilo; como si los Tatianistas no tuvieran el mismo medio de escape abierto arrojando la censura de Pablo sobre los catafrigios y sobre Montano, el autor de esa secta; o como si los catafrygianos no tuvieran el poder de presentar a los encratitas, en su habitaci�n, como los culpables. Pero Pablo no habla aqu� de personas, sino de la cosa misma; y, por lo tanto, aunque se presenten cien sectas diferentes, todas las cuales est�n acusadas de la misma hipocres�a al prohibir algunos tipos de alimentos, todos incurrir�n en la misma condena.

Por lo tanto, se deduce que los papistas se�alan en vano a los antiguos herejes, como si solo ellos fueran censurados; siempre debemos ver si no son culpables de la misma manera. Se oponen, que no se parecen a los Encratitas y Manichaens, porque no proh�ben absolutamente el uso del matrimonio y de la carne, sino que solo en ciertos d�as se limitan a la abstinencia de la carne, y hacen que el voto de celibato sea obligatorio solo para los monjes y sacerdotes y monjas. Pero esta excusa tambi�n es excesivamente fr�vola; pues, primero, sin embargo, hacen que la santidad consista en estas cosas; luego, establecieron una adoraci�n falsa y espuria de Dios; y, por �ltimo, atan las conciencias por una necesidad de la que deber�an haber sido libres.

En el quinto libro de Eusebio, hay un fragmento sacado de los escritos de Apolonio, en el que, entre otras cosas, reprocha a Montano por ser el primero que disolvi� el matrimonio y estableci� leyes para el ayuno. �l no dice que Montano prohibi� absolutamente el matrimonio o ciertos tipos de comida. Es suficiente si impone una obligaci�n religiosa a las conciencias y ordena a los hombres que adoren a Dios observando esas cosas; Porque la prohibici�n de las cosas que son indiferentes, ya sean generales o especiales, es siempre una tiran�a diab�lica. Que esto es cierto con respecto a ciertos tipos de alimentos aparecer� m�s claramente en la siguiente cl�usula,

Que Dios cre�. Es apropiado observar la raz�n, que, en el uso de varios tipos de alimentos, debemos estar satisfechos con la libertad que Dios nos ha otorgado; porque los cre� para este prop�sito. Produce una alegr�a inconcebible a todos los piadosos, cuando saben que todo tipo de alimentos que comen son puestos en sus manos por el Se�or, para que su uso sea puro y l�cito. �Qu� insolencia es en los hombres quitar lo que Dios otorga! �Crearon comida? �Pueden anular la creaci�n de Dios? Que siempre recordemos que el que cre� la comida nos dio tambi�n el uso gratuito de la misma, lo cual es en vano que los hombres intenten obstaculizar.

Para ser recibido con el D�a de Acci�n de Gracias, Dios cre� los alimentos para ser recibidos; es decir, que podamos disfrutarlo. Este fin puede ser dejado de lado por la autoridad humana. Agrega, con acci�n de gracias; porque nunca podemos rendirle a Dios ninguna recompensa por su bondad sino un testimonio de gratitud. Y por lo tanto, soporta con mayor aborrecimiento a aquellos legisladores malvados que, mediante promulgaciones nuevas y apresuradas, obstaculizan el sacrificio de alabanza que Dios requiere especialmente que le ofrezcamos. Ahora, no puede haber acci�n de gracias sin sobriedad y templanza; porque la bondad de Dios no es verdaderamente reconocida por aquel que la maltrata malvadamente.

Por creyentes �Qu� entonces? �No hace Dios que su sol salga a diario sobre lo bueno y lo malo? ( Mateo 5:45.) �No le da la tierra, por su orden, pan a los imp�os? �No son los peores hombres alimentados por su bendici�n? Cuando David dice

"Hace que la hierba crezca para el servicio de los hombres, para que pueda sacar comida de la tierra" (Salmo 104:14)

La amabilidad que describe es universal. Respondo, Pablo habla aqu� del uso legal, del cual estamos seguros ante Dios. Los hombres malvados no participan en ning�n grado, debido a su conciencia impura, que, como se dice,

"Contamina todas las cosas". ( Tito 1:15,)

Y de hecho, propiamente hablando, Dios ha designado solo a sus hijos para todo el mundo y todo lo que hay en el mundo. Por esta raz�n, tambi�n se les llama los herederos del mundo; porque al principio Ad�n fue designado para ser el se�or de todos, con esta condici�n, que deb�a continuar en obediencia a Dios. En consecuencia, su rebeli�n contra Dios lo priv� del derecho que le hab�a sido otorgado, no solo a �l sino a su posteridad. Y como todas las cosas est�n sujetas a Cristo, somos completamente restaurados por su mediaci�n, y eso a trav�s de la fe; y, por lo tanto, todo lo que disfrutan los no creyentes puede considerarse propiedad de otros, a quienes roban o roban.

Y por aquellos que conocen la verdad En esta cl�usula, define qui�nes son a quienes llama "creyentes", es decir, aquellos que tienen un conocimiento de la sana doctrina; porque no hay fe sino de la palabra de Dios; para que no podamos pensar falsamente, como imaginan los papistas, que la fe es una opini�n confusa.

Versículo 4

4 Para cada criatura de Dios es bueno El uso de los alimentos debe juzgarse, en parte por su sustancia y en parte por la persona de quien lo come. El Ap�stol, por lo tanto, se vale de ambos argumentos. En lo que respecta a la comida, �l afirma que es pura, porque Dios la ha creado; y que su uso nos est� consagrado por la fe y la oraci�n. La bondad de las criaturas, que �l menciona, tiene relaci�n con los hombres, y eso no con respecto al cuerpo o la salud, sino a las conciencias. Hago este comentario, que ninguno puede entrar en especulaciones curiosas ajenas al alcance del pasaje; porque, en una sola palabra, Pablo quiere decir que las cosas que vienen de la mano de Dios, y que est�n destinadas para nuestro uso, no est�n impuras ni contaminadas ante Dios, sino que podemos comerlas libremente con respecto a la conciencia.

Si se objeta, que muchos animales fueron anteriormente declarados inmundos seg�n la Ley, y que el fruto, que fue entregado por el �rbol del conocimiento del bien y del mal, fue destructivo para el hombre; la respuesta es que las criaturas no son llamadas puras, simplemente porque son obras de Dios, sino porque, por su bondad, nos han sido dadas; porque siempre debemos mirar el nombramiento de Dios, tanto lo que �l ordena como lo que proh�be.

Versículo 5

5 Porque est� santificado por la palabra de Dios y la oraci�n Esta es la confirmaci�n de la cl�usula anterior, si se recibe con Acci�n de Gracias. Y es un argumento extra�do del contraste; porque "santo" y "profano" son cosas contrarias. Veamos ahora cu�l es la santificaci�n de todas las cosas buenas, que pertenecen al sustento de la vida presente. Pablo testifica que consiste en "la palabra de Dios y la oraci�n". Pero debe observarse que esta palabra debe ser adoptada por la fe, para que sea ventajosa; porque, aunque Dios mismo santifica todas las cosas por el Esp�ritu de su boca, no obtenemos ese beneficio sino por la fe. A esto se agrega "oraci�n"; porque, por un lado, le pedimos a Dios nuestro pan de cada d�a, de acuerdo con el mandamiento de Cristo, ( Mateo 6:11;) y, por otro lado, le damos gracias por su bondad.

Ahora, la doctrina de Pablo se basa en este principio, que no hay nada bueno, cuya posesi�n sea legal, a menos que la conciencia testifique que es legalmente nuestra. �Y qui�n de nosotros se aventurar�a a reclamar para s� mismo un solo grano de trigo, si la palabra de Dios no le hubiera ense�ado que �l es el heredero del mundo? El sentido com�n, de hecho, pronuncia que la riqueza del mundo est� naturalmente destinada a nuestro uso; pero, dado que el dominio sobre el mundo nos fue quitado en Ad�n, nuestra contaminaci�n contamina todo lo que tocamos de los dones de Dios; y, por otro lado, es impuro para nosotros, hasta que Dios amablemente nos ayude, y al incorporarnos a su Hijo, nos constituye nuevamente como se�ores del mundo, para que podamos usar legalmente como nuestra toda la riqueza. con el que nos suministra.

Justamente, por lo tanto, �conecta Pablo el disfrute legal con "la palabra", por la cual solo recuperamos lo que se perdi� en Ad�n; porque debemos reconocer a Dios como nuestro Padre, para que seamos sus herederos, y a Cristo como nuestra Cabeza, para que las cosas que son suyas se conviertan en nuestras. Por lo tanto, se debe inferir que el uso de todos los dones de Dios es inmundo, a menos que est� acompa�ado de un verdadero conocimiento y que invoque el nombre de Dios; y que es una forma bestial de comer, cuando nos sentamos a la mesa sin ninguna oraci�n; y, cuando hayamos comido al m�ximo, partiremos en completo olvido de Dios.

Y si se exige tal santificaci�n con respecto a la comida com�n, que, junto con el vientre, est� sujeta a la corrupci�n, �qu� debemos pensar sobre los sacramentos espirituales? Si "la palabra", e invocando a Dios a trav�s de la fe, no est� all�, �qu� queda que no sea profano? Aqu� debemos atender a la distinci�n entre la bendici�n de la mesa sacramental y la bendici�n de una mesa com�n; porque, en cuanto a la comida que comemos para alimentar nuestro cuerpo, la bendecimos con este prop�sito, para que podamos recibirla de una manera pura y legal; pero consagramos, de una manera m�s solemne, el pan y el vino en la Cena del Se�or, para que nos sean promesas del cuerpo y la sangre de Cristo.

Versículo 6

6 Exhibiendo estas cosas a los hermanos Mediante esta expresi�n, exhorta a Timothy a mencionar esas cosas con frecuencia; y luego repite esto por segunda y tercera vez; porque son cosas de tal naturaleza que es apropiado llamar frecuentemente al recuerdo. Y debemos hacer el contraste que est� impl�cito; porque la doctrina que recomienda aqu� no la contrasta con doctrinas falsas o malvadas, sino con trivialidades in�tiles que no edifican. Desea que esas peque�eces se entierren por completo en el olvido, cuando le ordena a Timothy que sea sincero en exhibir otras cosas.

Ser�s un buen ministro. Los hombres frecuentemente aspiran a algo m�s que aprobarse a Cristo; y, en consecuencia, muchos desean ser aplaudidos por su genio, elocuencia y conocimiento profundo. Y esa es la raz�n por la que prestan menos atenci�n a las cosas necesarias, que no tienden a provocar la admiraci�n de la gente com�n. Pero Pablo le ordena a Timoteo que se conforme con esto solo, que sea un ministro fiel de Cristo. Y, ciertamente, deber�amos considerar esto como un t�tulo mucho m�s honorable que ser llamado miles de veces m�dicos serficos y sutiles. Por lo tanto, recordemos que, dado que es el m�s alto honor de un pastor piadoso ser considerado un buen siervo de Cristo, no debe apuntar a nada m�s durante todo su ministerio; porque quien tenga cualquier otro objeto a la vista, tendr� el poder de obtener aplausos de los hombres, pero no agradar� a Dios. Por consiguiente, para que no seamos privados de una bendici�n tan grande, aprendamos a buscar nada m�s, a no considerar nada tan valioso, ya tratar todo como in�til en comparaci�n con este �nico objeto.

Nutrido La palabra griega ???????????? que es un participio en la Voz Media, tambi�n podr�a haberse traducido en un significado activo, nutritivo; pero como no hay ning�n sustantivo gobernado por el verbo, creo que esto ser�a m�s bien una construcci�n forzada; y, por lo tanto, prefiero tomarlo en un sentido pasivo, como confirmando la exhortaci�n precedente por la educaci�n de Timoteo. Como si �l hubiera dicho: �Como has sido, desde tu infancia, debidamente instruido en la fe, y, por as� decirlo, has absorbido la doctrina del sonido de la leche, y has hecho un progreso continuo hasta ahora, esfuerzo, por fieles ministraci�n, para demostrar que eres tal ". Este significado coincide tambi�n con la composici�n de la palabra ????????????

En palabras de fe y de buena doctrina. Aqu� se toma la fe por la suma de la doctrina cristiana; y lo que �l agrega inmediatamente, sobre la buena doctrina, es por el bien de la explicaci�n; (73) porque quiere decir que todas las dem�s doctrinas, por muy plausibles que sean, no son en absoluto rentables.

Lo que has seguido Esta cl�usula denota perseverancia; para muchos que, desde su infancia, hab�an aprendido puramente a Cristo, luego degeneraron en el proceso del tiempo; y el ap�stol dice que Timoteo era muy diferente a estas personas.

Versículo 7

7 Ejerc�tese a la piedad (74) Despu�s de haberle instruido sobre la doctrina, �qu� es? deber�a ser, ahora tambi�n le advierte qu� tipo de ejemplo deber�a dar a los dem�s. �l dice que debe ser empleado en "piedad"; porque, cuando dice: ejerc�tate, quiere decir que esta es su ocupaci�n adecuada, su trabajo, su principal cuidado. Como si �l hubiera dicho: �No hay raz�n por la que deba cansarse de ning�n otro prop�sito; har�s lo que sea de la mayor importancia, si te dedicas, con todo tu celo y con toda tu habilidad, solo a la piedad �. Por la palabra piedad, se refiere a la adoraci�n espiritual de Dios que consiste en la pureza de conciencia; lo cual es a�n m�s evidente por lo que sigue, cuando se contrasta con el ejercicio corporal.

Versículo 8

8 Para el ejercicio corporal es de poco beneficio. Por el ejercicio "del cuerpo", no se refiere a lo que se encuentra en la caza, en el hip�dromo, en la lucha libre, en la excavaci�n o en las ocupaciones mec�nicas; pero �l le da ese nombre a todas las acciones externas que se llevan a cabo, en aras de la religi�n, como las vigilias, los largos ayunos, la mentira en la tierra y cosas por el estilo. Sin embargo, aqu� no censura la observancia supersticiosa de esas cosas; de lo contrario, los condenar�a totalmente, como lo hace en la Ep�stola a los Colosenses, ( Colosenses 2:21), pero en la actualidad solo habla un poco de ellos y dice que son de poca ventaja. Entonces, aunque el coraz�n est� completamente erguido y el objeto sea correcto, sin embargo, en las acciones externas, Paul no encuentra nada que pueda valorar altamente.

Esta es una advertencia muy necesaria; porque el mundo siempre se inclinar� al lado de desear adorar a Dios mediante servicios externos; que es una imaginaci�n extremadamente peligrosa. Pero, por no hablar de la opini�n perversa del m�rito, nuestra naturaleza siempre nos dispone a atribuir m�s de lo que deber�amos a la austeridad de la vida; como si no fuera una porci�n ordinaria de la santidad cristiana. No puede aducirse una visi�n m�s clara de esto, que el hecho de que, poco despu�s de la publicaci�n de este comando, el mundo entero fue violado con una admiraci�n inmoderada por la forma vac�a de los ejercicios corporales. De ah� surgi� el orden de los monjes y las monjas, y casi toda la disciplina m�s excelente de la Iglesia antigua, o, al menos, esa parte que era muy apreciada por la gente com�n. Si los antiguos monjes no hubiesen so�ado que hab�a una perfecci�n indescriptiblemente divina o angelical en su austera forma de vida, nunca la habr�an perseguido con tanto ardor. De la misma manera, si los pastores no hubieran atribuido un valor indebido a las ceremonias que luego se observaron para la mortificaci�n de la carne, nunca habr�an sido tan r�gidos al exigirlas. �Y qu� dice Pablo por otro lado? Que, cuando alguien haya trabajado mucho en esos ejercicios, el beneficio ser� peque�o e insignificante; porque no son m�s que los rudimentos de la disciplina infantil.

Pero la piedad es rentable para todas las cosas. Es decir, el que tiene piedad no quiere nada, aunque no tiene esas peque�as ayudas; porque la piedad sola es capaz de conducir a un hombre a la perfecci�n completa. Es el principio, el medio y el fin de la vida cristiana; y, por lo tanto, donde eso es completo, nada es imperfecto. Cristo no llev� una forma de vida tan austera como Juan el Bautista; �Era �l, por lo tanto, un poco inferior? Dejemos as� el significado resumido. �Deber�amos aplicarnos por completo a la piedad sola; porque cuando lo hemos logrado, Dios no nos pide nada m�s; y debemos prestar atenci�n a los ejercicios corporales de tal manera que no obstaculicen o retrasen la pr�ctica de la piedad ".

Lo que tiene las promesas Es un gran consuelo que Dios no desee que los piadosos carezcan de nada; porque, habiendo hecho que nuestra perfecci�n consista en la piedad, ahora la convierte en la perfecci�n de toda felicidad. Como es el comienzo de la felicidad en esta vida, �l tambi�n le extiende la promesa de la gracia divina, que solo nos hace felices, y sin la cual somos muy miserables; porque Dios testifica que, incluso en esta vida, �l ser� nuestro Padre.

Pero recordemos distinguir entre las cosas buenas del presente y de la vida futura; porque Dios nos otorga bondad en este mundo, para que solo nos de una muestra de su bondad, y con tal gusto nos pueda atraer al deseo de los beneficios celestiales, para que en ellos podamos encontrar satisfacci�n. La consecuencia es que las cosas buenas de la vida presente no solo se mezclan con muchas aflicciones, sino que, casi podemos decir, est�n abrumadas por ellas; porque no es conveniente para nosotros tener abundancia en este mundo, para que no nos entreguemos al lujo. Nuevamente, para que nadie encuentre en este pasaje los m�ritos de las obras, debemos tener en cuenta lo que ya hemos dicho, que la piedad incluye no solo una buena conciencia hacia los hombres y el temor de Dios, sino tambi�n la fe y el llamado. �l.

Versículo 9

9 Este es un dicho fiel. Ahora, al concluir el argumento, establece lo que dijo dos veces al comienzo; y parece que lo hace expresamente, porque inmediatamente se unir� a la objeci�n contraria. Sin embargo, no es sin una buena raz�n que emplea una afirmaci�n tan fuerte; porque es una paradoja fuertemente en desacuerdo con el sentimiento de la carne, que Dios provea a su pueblo, en este mundo, con todo lo necesario para una vida feliz y gozosa; ya que a menudo carecen de todas las cosas buenas y, por ese motivo, parecen haber sido abandonados por Dios. De acuerdo con esto, no satisfecho con la simple doctrina, evita todas las tentaciones opuestas de este escudo, y de esta manera instruye a los creyentes a abrir la puerta a la gracia de Dios, que nuestra incredulidad cierra; porque, sin duda, si estuvi�ramos dispuestos a recibir los beneficios de Dios, (75) usar�a una mayor liberalidad hacia nosotros.

Versículo 10

10 Porque en esto trabajamos y sufrimos reproches Esta es una anticipaci�n por la cual �l resuelve esa pregunta: "No son los creyentes los m�s miserables de todos los hombres, porque ellos est�n oprimidos por tribulaciones de todo tipo? Para mostrar, por lo tanto, que su condici�n no debe juzgarse por su apariencia externa, los distingue de los dem�s, primero en la causa y luego en el resultado. De ah� se deduce que no pierden nada de las promesas que �l ha mencionado, cuando son juzgados por la adversidad. La suma es que los creyentes no son miserables en las aflicciones, porque una buena conciencia los apoya y un final bendito y alegre los espera.

Ahora, dado que la felicidad de la vida actual consiste principalmente en dos partes, honor y conveniencias, las contrasta con dos males, trabajos y reproches, es decir, con las palabras anteriores, inconvenientes y molestias de todo tipo, como la pobreza, el fr�o, la desnudez. , hambre, destierros, despojos, encarcelamientos, flagelaciones y otras persecuciones.

Tenemos la esperanza puesta en el Dios vivo. Este consuelo se refiere a la causa; porque hasta ahora no somos miserables, cuando sufrimos a causa de la justicia, que es m�s bien un motivo justo de acci�n de gracias. Adem�s, nuestras aflicciones van acompa�adas de esperanza en el Dios viviente y, lo que es m�s, la esperanza puede considerarse como el fundamento; pero nunca se averg�enza ( Romanos 5:5) y, por lo tanto, todo lo que le sucede a los piadosos debe considerarse una ganancia.

�Qui�n es el Salvador (76) Este es el segundo consuelo, aunque depende del primero; porque la liberaci�n de la que habla puede verse como el fruto de la esperanza. Para aclarar esto, debe entenderse que este es un argumento extra�do de lo menor a lo mayor; para la palabra ????? (77) es aqu� un t�rmino general, y denota uno que defiende y preserva. �l quiere decir que la bondad de Dios se extiende a todos los hombres. Y si no hay hombre que no sienta la bondad de Dios hacia �l, y que no sea part�cipe de ella, �cu�nto m�s lo experimentar�n los piadosos que esperan en �l? �No tendr� cuidado especial en ellos? �No va a derramar m�s libremente su generosidad sobre ellos? En una palabra, �no los mantendr� a salvo en todos los aspectos?

Versículo 11

11 Instruye y ense�a estas cosas �l quiere decir que la doctrina es de tal clase, que los hombres no deben cansarse de ella, aunque la escuchen todos los d�as. Hay, sin duda, otras cosas que ense�ar; pero hay �nfasis en los demostrativos estos; porque significa que no son cosas de poca importancia, de las cuales es suficiente tomar una nota breve y pasajera; pero, por el contrario, merecen que se repitan todos los d�as, porque no se les puede inculcar demasiado. Un pastor prudente debe, por lo tanto, considerar qu� cosas son principalmente necesarias, para que pueda pensar en ellas. Tampoco hay raz�n para temer que se vuelva agotador; porque cualquiera que sea de Dios con gusto escuchar� con frecuencia aquellas cosas que necesitan ser pronunciadas tan a menudo.

Versículo 12

12 Que nadie menosprecie tu juventud. �l dice esto, tanto con respecto a los dem�s como al propio Timothy. En cuanto a los dem�s, no desea que la edad de Timoteo le impida obtener la reverencia que merece, siempre que, en otros aspectos, se conduzca como ministro de Cristo. Y, al mismo tiempo, le ordena a Timothy que le proporcione por gravedad lo que le falta en su edad. Como si hubiera dicho: "Tenga cuidado de que, por gravedad de conducta, se adquiera una reverencia tan grande, que su edad juvenil, que, en otros aspectos, lo deja a uno abierto al desprecio, no le quite nada a su autoridad". Por lo tanto, aprendemos que Timoteo a�n era joven, aunque ocupaba un lugar de distinguida excelencia entre muchos pastores; y que es un grave error estimar por la cantidad de a�os cu�nto se le debe a una persona.

Pero s� un ejemplo de los creyentes (78) Luego le informa cu�les son los verdaderos adornos; no marcas externas, como el b�culo, el anillo, el manto y cosas como bagatelas o sonajeros de ni�os; pero solidez de doctrina y santidad de vida. Cuando dice, por medio del habla y la conversaci�n, el significado es el mismo que si hubiera dicho "con palabras y acciones" y, por lo tanto, con toda la vida.

Los que siguen son partes de una conversaci�n piadosa: caridad, fe espiritual, castidad. Por la palabra esp�ritu, entiendo el ardor del celo por Dios, si no se piensa mejor interpretarlo de manera m�s general, a lo que no tengo objeci�n. La castidad no solo se contrasta con la impureza, sino que denota la pureza de toda la vida. Por lo tanto, aprendemos que act�an como una parte tonta y absurda, que se quejan de que no se les rinde honor, mientras que no tienen nada de ellos que sea digno de aplauso, sino que, por el contrario, se exponen al desprecio, tanto por su ignorancia. , y por un ejemplo detestable de la vida, o por ligereza u otras abominaciones. La �nica forma de obtener reverencia es, por excelentes virtudes, protegernos del desprecio.

Versículo 13

13 Asistir a la lectura �l conoc�a la diligencia de Timoteo y, sin embargo, le recomienda la lectura diligente de las Escrituras. �C�mo deben los pastores ense�ar a otros si no est�n ansiosos por aprender? Y si a un hombre tan bueno se le aconseja estudiar para progresar d�a a d�a, �cu�nto m�s necesitamos ese consejo? �Ay de la pereza de aquellos que no examinan los or�culos del Esp�ritu Santo de d�a y de noche, (79) para aprender de ellos c�mo descargar �su oficina!

Hasta que venga Esta referencia al tiempo le da un peso adicional a la exhortaci�n; porque, aunque Paul esperaba que fuera pronto, sin embargo, no estaba dispuesto a que Timothy permaneciera desempleado ni siquiera por un corto tiempo; �cu�nto m�s deber�amos esperar diligentemente toda nuestra vida!

Para exhortar, a la doctrina Para que no se piense que la lectura descuidada fue suficiente, �l, al mismo tiempo, muestra que debe explicarse con miras a la utilidad cuando le ordena que preste atenci�n "a la doctrina y la exhortaci�n"; como si le ordenara que aprendiera para comunicarse con los dem�s. Es apropiado, tambi�n, atender a esta orden, que coloca la lectura antes que la doctrina y la exhortaci�n; porque, sin duda, la Escritura es la fuente de toda sabidur�a, de la cual los pastores deben extraer todo lo que colocan delante de su reba�o.

Vos exceptlaria Graeca Nocturna versate manu, versate diurna ".

"Examina las modelos griegas d�a y noche".

Siempre ha sido una caracter�stica destacada en el car�cter de un buen hombre, que "su deleite est� en la ley del Se�or y en su ley medita d�a y noche". - (Salmo 1:2.) �Cu�nto m�s podemos esperar razonablemente que el siervo de Cristo, que habla a las personas en nombre de su Maestro, y cuyo oficio es "mostrarles lo que est� escrito?" en la Escritura de verdad, �( Daniel 10:21,) leer� devota y laboriosamente los or�culos de Dios! - Ed.

Versículo 14

14 No descuides el don que hay en ti. El Ap�stol exhorta a Timoteo a emplear, para la edificaci�n de la Iglesia, esa gracia con la que fue investido. Dios no desea que los talentos, que ha otorgado a nadie, para que puedan obtener ganancias, se pierdan o se oculten en la tierra sin ventaja. ( Mateo 25:18.) Descuidar un obsequio es descuidadamente mantenerlo desempleado por medio de la pereza, de modo que, al contraer el �xido, se desgasta sin generar ning�n beneficio. Por lo tanto, consideremos cada uno de nosotros qu� regalo posee, para que pueda aplicarlo diligentemente para usar.

�l dice que la gracia le fue dada por la profec�a. Como fue esto Fue porque, como ya dijimos, el Esp�ritu Santo marc� a Timoteo por revelaci�n, para que pudiera ser admitido en el rango de pastores; porque no solo hab�a sido elegido por el juicio de los hombres, de la manera ordinaria, sino que previamente hab�a sido nombrado por el Esp�ritu.

Con la imposici�n de las manos del presbiterio, dice que fue conferido "con la imposici�n de manos". con lo cual quiere decir que, junto con el ministerio, tambi�n fue adornado con los dones necesarios. Era costumbre y pr�ctica com�n de los ap�stoles ordenar a los ministros "por la imposici�n de manos". En cuanto a esta ceremonia, y su origen y significado, anteriormente he dado una breve explicaci�n de ellos, y el resto puede ser aprendido de los Institutos (Libro 4: cap. 3.)

Los que piensan que el presbiterio se usa aqu� como sustantivo colectivo, para "el colegio de presb�teros o ancianos", (80) son, creo, correctos en su opini�n; aunque, despu�s de sopesar todo el asunto, reconozco que un significado diferente no es inaplicable, es decir, que el presbiterio o el anciano es el nombre de una oficina. Puso la ceremonia por el mismo acto de ordenaci�n; y, por lo tanto, el significado es que Timoteo, habiendo sido llamado al ministerio por la voz de los profetas, y despu�s de haber sido ordenado solemnemente, al mismo tiempo, recibi� la gracia del Esp�ritu Santo para el desempe�o de su cargo. Por lo tanto, inferimos que no fue una ceremonia in�til, porque Dios por su Esp�ritu, logr� esa consagraci�n que los hombres expresaron simb�licamente "por la imposici�n de manos".

Versículo 15

15 Preste atenci�n a estas cosas (81) Cuanto mayor sea la dificultad de cumplir fielmente el ministerio de la Iglesia, tanto m�s debe un pastor aplicarse con fervor y con todo su poder; y eso no solo por poco tiempo, sino con perseverancia inagotable. (82) Paul, por lo tanto, le recuerda a Timothy que este trabajo no deja espacio para la indolencia o para aflojar su trabajo, sino que exige la m�xima industria y una aplicaci�n constante.

Para que su beneficio se manifieste Al agregar estas palabras, quiere decir que debe trabajar para este prop�sito, que por su agencia la edificaci�n de la Iglesia puede ser cada vez m�s avanzada, y que los resultados correspondientes pueden ser visibles; porque no es el trabajo de un solo d�a y, por lo tanto, debe esforzarse por progresar diariamente. Algunos refieren esto a Timoteo, para que �l se beneficie m�s y m�s; pero elijo m�s bien interpretarlo como una referencia al efecto de su ministerio.

Las palabras griegas , ?? ?????, pueden traducirse a todos los hombres o en todas las cosas. Habr� as� un doble significado; o bien, "que todos puedan ver el progreso que surge de sus labores", o "que en todos los aspectos, o en todas las formas posibles (que es lo mismo), pueden ser visibles". Prefiero la �ltima vista.

Versículo 16

16 Presta atenci�n a ti mismo y a la doctrina Hay dos cosas de las que un buen pastor debe tener cuidado; ser diligente en la ense�anza y mantenerse puro. (83) No es suficiente si enmarca su vida a todo lo que es bueno y encomiable, y evita dar un mal ejemplo, si no agrega a una vida santa diligencia continua en la ense�anza; y, por otro lado, la doctrina ser� de poca utilidad, si no hay una bondad y santidad de la vida correspondiente. Con buena raz�n, por lo tanto, �insta Pablo a Timoteo a "prestar atenci�n", tanto a s� mismo personalmente como a la doctrina, para el beneficio general de la Iglesia. Por otro lado, elogia su constancia, para que nunca se canse; porque hay muchas cosas que suceden con frecuencia, que nos pueden desviar del camino correcto, si no ponemos nuestro pie firmemente para resistir.

Si haces estas cosas, te salvar�s a ti mismo y a los que te escuchan. No es un est�mulo com�n excitar la consideraci�n de los pastores, cuando aprenden que su propia salvaci�n, as� como la de la gente, depende de la industria y de la industria. perseverancia con la que se dedican a su cargo. Y como la doctrina, que construye s�lidamente, es com�nmente atendida por poca exhibici�n, Pablo dice que debe considerar lo que es rentable. Como si hubiera dicho: �Que los hombres que desean la gloria sean alimentados por su ambici�n, que se aplaudan por su ingenio; para ti, deja que sea suficiente para dedicarte a tu propia salvaci�n y la del pueblo ".

Ahora, esta exhortaci�n se aplica a todo el cuerpo de la Iglesia, para que ellos no se ofendan por la simplicidad que acelera las almas y las preserva en salud. Tampoco deber�an pensar que es extra�o que Pablo atribuya a Timoteo la obra de salvar a la Iglesia; porque, ciertamente, todo lo que se gana para Dios se salva, y es mediante la predicaci�n del evangelio que nos reunimos para Cristo. Y como la infidelidad o el descuido del pastor es ruinoso para la Iglesia, la causa de la salvaci�n se atribuye justamente a su fidelidad y diligencia. Es cierto, es solo Dios quien salva; y ni siquiera la porci�n m�s peque�a de su gloria puede ser otorgada legalmente a los hombres. Pero Dios se separa sin ninguna porci�n de su gloria cuando emplea la agencia de los hombres para otorgar la salvaci�n.

Nuestra salvaci�n es, por lo tanto, solo un don de Dios, porque de �l solo procede, y solo por su poder se realiza; y por lo tanto, solo a �l, como autor, debe atribuirse. Pero el ministerio de los hombres no est� excluido por eso, ni todo esto interfiere con la tendencia saludable de ese gobierno del cual, como Paul muestra, la prosperidad de la Iglesia depende. ( Efesios 4:11.) Adem�s, esta es completamente la obra de Dios, porque es �l quien forma buenos pastores, los gu�a por su Esp�ritu y bendice su trabajo, para que no sea ineficaz.

Si as� un buen pastor es la salvaci�n de sus oyentes, que los hombres malos y descuidados sepan que su destrucci�n debe atribuirse a quienes tienen a su cargo; porque, como la salvaci�n del reba�o es la corona del pastor, de los pastores descuidados se requerir� todo lo que perece. Una vez m�s, se dice que un pastor se salva a s� mismo cuando, al cumplir fielmente con el cargo que se le ha encomendado, cumple su vocaci�n; no solo porque evita esa terrible venganza que el Se�or amenaza con Ezequiel, - "Su sangre requerir� de tu mano" ( Ezequiel 33:8), sino porque es costumbre hablar de los creyentes que realizan su salvaci�n cuando caminan y perseveran (84) en el curso de su salvaci�n. De este modo de expresi�n hemos hablado en nuestra exposici�n de la Ep�stola a los Filipenses, ( Filipenses 2:12 .)

Información bibliográfica
Calvino, Juan. "Comentario sobre 1 Timothy 4". "Comentario de Calvino sobre la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/cal/1-timothy-4.html. 1840-57.