Bible Commentaries
Ezequiel 19

Comentario de Calvino sobre la BibliaComentario de Calvino

Versículo 1

Aqu�, el Profeta, bajo la imagen de un le�n, nos informa que cualquier maldad que le sucedi� a los israelitas no podr�a imputarse a otros. Debemos entender entonces su intenci�n: no es sorprendente que el Esp�ritu de Dios insista en un asunto no muy oscuro, ya que nada es m�s obstinado que el orgullo de los hombres, especialmente cuando Dios los castiga, aunque pretenden humildad y modestia. se hinchan de orgullo y est�n llenos de amargura, y, por �ltimo, apenas pueden ser inducidos a confesar que Dios es justo y que merecen el castigo de su mano. Por esta raz�n, por lo tanto, Ezequiel confirma lo que vimos anteriormente, que los jud�os no estaban afligidos sin merecerlo. Pero �l usa, como he dicho, un s�mil tomado de leones. �l llama a la naci�n misma una leona: porque cuando trata de la madre del pueblo, sabemos que se considera a la descendencia. �l dice, por lo tanto, que la gente estaba llena de insolencia. La comparaci�n con un le�n a veces se toma en un buen sentido, como cuando Mois�s lo usa de la tribu de Judea, como un cachorro de le�n se acostar�, ( G�nesis 49:9), una frase utilizada en un juicio. Pero aqu� Ezequiel denota crueldad, como si hubiera dicho que todos los jud�os eran bestias feroces y salvajes. Porque bajo el nombre de madre, como dije, �l abraza a toda la naci�n. Al principio le ordena a su Profeta que lamente llorar: porque as� interpreto la palabra ????, kineh, pero a mi juicio hay una oposici�n indirecta entre esta lamentaci�n que Dios les dict� por su Profeta, y las quejas comunes que sonaban constantemente de sus lenguas. Para cuando su condici�n no solo era ruinosa, sino completamente deplorable, hicieron muchos gemidos y lamentos. Pero al mismo tiempo, nadie extendi� sus pensamientos m�s all� de la presi�n de los males presentes, todos exclamaron que eran miserables, pero nadie estaba ansioso por preguntar por qu� eran as� o de d�nde surgieron sus miserias; no, evitaron esta contemplaci�n. Luego, el Profeta los reprende indirectamente, afirmando que esta triste queja fue sugerida por Dios, pero que era muy diferente de ese lamento y aullido ordinario en el que los jud�os se deten�an ante un dolor ciego, y nunca preguntaban por qu� Dios era tan hostil con ellos. Tome, por lo tanto, un lamento, dice �l, con respecto o en contra de los pr�ncipes de Israel. De esta manera, Dios no disculpa a la gente de la culpa, solo quiere decir que no solo la gente com�n se perdi�, sino la flor misma de la naci�n y de todos los que se celebraron en honor.

Versículo 2

Luego dice que su madre se acost� entre leones, aludiendo al origen de la gente de los leones, como dijimos antes, cuando el Profeta llama a Judea descendiente de Cana�n, y la hermana de Sodoma y Samaria. Cuando ahora dice que su madre se acost� entre leones, quiere decir que se mezclaron vergonzosamente con la corrupci�n de los gentiles, para que no se diferenciaran de ellos. Pero Dios los hab�a elegido como su pueblo peculiar con la condici�n de estar separados de toda la inmundicia de los gentiles. Hubo, por lo tanto, una cierta retirada del favor de Dios cuando la madre del pueblo se acost� entre los leones, es decir, cuando todos se entregaron promiscuamente a la moral perversa y las supersticiones de los gentiles. �l dice que ella cri� cr�as, o leones j�venes, que ella produjo a estos leones; ya que su origen era impuro, siendo todos hijos de Abraham, pero, como he dicho, una raza degenerada. Luego agrega, que la cr�a del le�n, o le�n joven, creci� hasta convertirse en un le�n: luego aprendi� a capturar presas, dice �l, y a devorar a los hombres. Se refiere al rey Joacaz, hijo de Jos�as, ( 2 Reyes 23:30 :) pero antes hab�a afirmado que todo el pueblo ten�a una disposici�n de le�n, y que los pr�ncipes, que eran m�s exaltados, eran como cachorros. Como aqu� solo se presenta un le�n, debe referirse a la violencia mediante la cual ese rey malvado manifest� su verdadera disposici�n. Pero si se pregunta de d�nde sali� el le�n, la respuesta es, en medio de sus hermanos, porque todos eran cachorros de leones, o leones j�venes. No pod�an administrar el gobierno juntos ni solos, pero cada uno devor� a su hermano y se dedic� al robo y al rapine. Solo el rey, liberado de todo temor, podr�a superar al resto en rapi�a y robo con impunidad. Vemos, entonces, que no solo el rey fue condenado aqu�, sino que se convierte en el tipo de toda la naci�n; porque, como nadie pod�a contener sus pasiones, pod�a robar y devorar a la humanidad con libertad desenfrenada.

Versículo 4

Luego agrega, que las naciones hab�an escuchado, y fueron tomadas en su ca�da en boxes. Aqu� Ezequiel declara que Joacaz fue arrojado del trono real, y tomado en cautiverio por los egipcios, no solo porque Dios hab�a visto su crueldad, sino porque los gentiles la hab�an observado; y era notorio entre todos ellos. De este modo, significa que la crueldad del rey Joacaz era intolerable: y lo menciona, ya que todas las naciones vecinas hab�an o�do hablar de su fama y hab�an conspirado para destruirlo; y fue llevado a su foso, y encadenado, y llevado a Egipto. Quiere decir, como dije, Joacaz, a quien el rey Fara�n-Necho tom� cautivo. (2 Reyes 23.) Porque cuando pens� que los egipcios estaban distra�dos por guerras extranjeras, aprovech� la oportunidad de reunir un ej�rcito y se esforz� por apoderarse de ciertas ciudades vecinas. Pero Fara�n, despu�s de que se desconect� de otros asuntos, ingres� a Judea, y como Joacaz no pudo resistir, fue capturado. Ahora entendemos el significado del Profeta, es decir, cuando esta primera calamidad y destrucci�n les sucedi� a los jud�os, fueron justamente castigados, porque eran leones j�venes; y un le�n hab�a surgido de ellos cuya crueldad ya era intolerable para los profanos gentiles: este es el sentido del pasaje. Ahora, si consideramos qui�n fue el padre de Joacaz, esto ser� m�s detestable. Porque sabemos que si alg�n rey sobresali� en la piedad y en todas las virtudes, Jos�as estaba entre el n�mero: y por ser el hijo tan diferente de su padre, percibimos su disposici�n perversa. No puede haber ninguna duda de que su padre deseaba instruirlo en el temor y la adoraci�n a Dios, y entrenarlo para el desempe�o del cargo real. Pero si descendemos a todo el pueblo, el prodigio ser� a�n m�s detestable. Porque sabemos con qu� fervor y celo Jos�as se esforz� por formar la moral de la gente, para que el reino se renovara por completo. Pero la gente pronto se neg�, de modo que el Esp�ritu Santo dice que su madre era una leona, y se acost� entre los leones, de donde vemos su naturaleza depravada. Ahora sigue:

Versículo 5

Ayer le�mos esa oraci�n en la que el Profeta dice que Judea produjo otro le�n despu�s de que el primero hab�a sido capturado y llevado a Egipto. Ahora bien, esto deber�a referirse al rey Joacim, quien fue nombrado por el rey Nabucodonosor, cuando hab�a arrasado una parte de Egipto, pose�a toda Judea e impuso leyes al establecer un rey, de acuerdo con los derechos de conquista. Pero como tambi�n actu� p�rfido, fue llevado al cautiverio. El Profeta, por lo tanto, significa que la naci�n no se arrepinti� a trav�s de este solo castigo; ni cambi� su disposici�n, ya que su madre era una leona: y no solo cri� leones j�venes, sino que les ense�� a agarrar a sus presas hasta que crecieran. �l dice, por lo tanto, que ella vio lo que esperaba y que su esperanza era in�til. Algunos piensan que el profeta repite aqu� el sustantivo �esperanza�: vio que su esperanza se hab�a perdido; Perd� la esperanza, digo. Pero la otra lectura es mejor: vio que hab�a esperado; es decir, ella vio que su esperanza no hab�a producido ning�n fruto por alg�n tiempo, porque el trono real permaneci� desierto; por eso ella tom� otro de sus cachorros, dice �l, y lo convirti� en un le�n. El Profeta nuevamente ense�a brevemente que toda la descendencia real era como leones j�venes. Aunque, por lo tanto, el le�n solo se llama rey, pero se dice que fue tomado de una serie de cachorros; y de ah� se deduce que esto denota la naturaleza depravada y cruel de todos. As� vemos que los jud�os son indirectamente reprendidos por no volver a la sensatez, cuando Dios los castig� severamente, y el rey Joacaz fue tomado. Como, por lo tanto, ese castigo no result� en su correcci�n, se deduce que sus disposiciones fueron depravadas; y el Profeta quiere decir esto cuando dice, que ella tom� uno de sus cachorros y nuevamente lo convirti� en un le�n. Sigue -

Versículo 6

Ezequiel confirma lo que ya mencion� brevemente, que este segundo le�n no era menos salvaje y cruel que el primero, del que hab�a hablado. En cuanto a la frase, camin� entre leones, significa que su gobierno era tir�nico, ya que en esa regi�n hab�a una barbaridad tan asquerosa que los reyes no eran humanos en su conducta. Como, por lo tanto, los reyes eran entonces leones en todas partes, el Profeta dice que Joacim no era diferente de ellos, sino que en todos los sentidos era su aliado. Camin�, por lo tanto, dice, en medio de los leones, ya que imit� su ferocidad, que al final expresa m�s claramente, que se convirti� en un le�n, y se le ense�� a capturar a su presa, para devorar no solo animales, pero hombres, marcando as� su extrema crueldad. Luego agrega:

Versículo 7

Nuevamente confirma lo que dijo sobre la crueldad del rey Joacim: pero la frase es mixta, ya que conserva solo una parte del s�mil, y luego habla sin una figura de palacios y ciudades. Aunque los int�rpretes se inclinan a una opini�n diferente y traducen, y toman nota de sus viudas: y si las palabras restantes hubieran sido adecuadas, esta lectura hubiera sido mejor; pero no veo c�mo se pueden unir cosas tan diferentes, como destruir ciudades y darse cuenta de las viudas. Primero, los que adoptan este comentario est�n obligados a adoptar la noci�n de que Joacim destruy� a los hombres y desvirg� a sus viudas, ya que no pod�a poseerlas en libertad hasta que fueran viudas. Todos admitir�n que esto es descabellado. Pero la palabra "aflicci�n" se adapta bastante bien. Y verdaderamente, el cap�tulo 53 de Isa�as, donde se dice que Cristo sufri� heridas por nuestros dolores, no puede explicarse mejor ( Isa�as 53:3.) Algunos traducen que experiment� penas, las conoci� o conoci� con ellos, en el significado pasivo. Pero aquellos que dicen que vio penas, o las experiment�, no consideran c�mo se adapta al pasaje; y aquellos que dicen que �l estaba al tanto de las aflicciones, es decir, las suyas, tambi�n distorsionan las palabras del Profeta. No dudo, por lo tanto, que en este pasaje signifique afligir. Respetando el sustantivo, supongo que la letra ? (l) se toma para ? (r); y en Isa�as ( Isa�as 13:22) esta palabra se usa para palacios: las bestias salvajes aullar�n, dice el Profeta, ?????????, bal-meno-thiv, es decir, en sus palacios . La palabra aqu� no puede significar viudas, y todos est�n de acuerdo en tomarla como palacios; y cuando el Profeta agrega que destruy� ciudades, el tema nos muestra que en la cl�usula anterior los palacios fueron afectados, y luego las ciudades destruidas: el Profeta afirma esto simplemente, y sin una figura, aunque pronto regresa al s�mil, que la tierra se redujo a un desierto por la voz del rugido. Nuevamente, compara al rey Joacim con un le�n; de donde se sigue, como dije, que el lenguaje del Profeta es mixto. En otra parte, tambi�n, los profetas reprenden el orgullo de su rey. (Jeremias 22:15; Jeremias 36:30.) Porque aunque era despreciable, se alz� por encima de otros reyes; por lo tanto, se burla de �l, ya que no estaba contento con la condici�n y la moderaci�n de su padre, que com�a y beb�a, es decir, viv�a como la humanidad, pero deseaba elevarse por encima de la raza de los hombres. Por esta causa, el Profeta dice ahora que las ciudades fueron destruidas por �l y los palacios afectados por �l. Hay un cambio de n�mero en los pronombres, porque el n�mero singular se pone en la palabra "palacios" y el plural en las ciudades. Pero sabemos con qu� frecuencia ocurre este cambio en el idioma hebreo; mientras que en cuanto al sentido no hay oscuridad, porque el rey Joacim era como una bestia feroz y cruel, porque destruy� ciudades y derrib� palacios. Pero luego agrega, la tierra fue arrasada y hecha solitaria por la voz de su rugido. Aqu� el Profeta se agranda con la atrocidad de ese rey, ya que solo con su rugido hab�a reducido la tierra a un desierto. No habla de garras o dientes, pero dice que todos estaban tan asustados por el sonido de su rugido que la tierra era in�til y solitaria. Agrega, la plenitud de la tierra, por la cual la Escritura generalmente denota los ornamentos de un pa�s. La palabra comprende �rboles, y frutas, y animales, as� como habitantes; porque una tierra est� vac�a y desnuda sin esa ropa; es decir, si se quitan �rboles y frutas, as� como hombres y animales, la faz de la tierra est� desierta y deformada, y su estado muestra su vac�o. Luego sigue: -

Versículo 8

Dado que la palabra ???, nethen, a menudo se toma para "pronunciar una voz", algunos explican este pasaje, que las naciones vinieron con gran clamor contra el rey Joacim, como cuando se hace un ataque contra un salvaje bestia, los asaltantes se excitan y se animan mutuamente. Entienden que tal clamor se levant� por todos lados que se apresuraron con un consentimiento contra el rey Joacim. Pero dado que la misma palabra significa "poner", en mi opini�n, puede aplicarse adecuadamente a un abogado, ya que ellos tomaron consejo, es decir, decidieron entre ellos llevarlo cautivo. El sentido pasivo no se adapta en absoluto. Ahora, entonces, entendemos el significado del Profeta cuando dice que los gentiles hab�an resuelto contra �l, es decir, hab�an conspirado para tomarlo. Sin duda, los caldeos fueron asistidos por todos sus vecinos. Primero, sabemos que los jud�os fueron odiados por otras naciones; entonces la audacia y la precipitaci�n de este rey provocaron que muchos enviaran a buscar a los babilonios y los ayudaran ansiosamente; y debido a que apenas se atrevieron a participar en la guerra solos, conspiraron contra el rey Joacim bajo la protecci�n de otros. Hasta ahora, con respecto a otras naciones, porque esto no puede ser entendido solo por los caldeos; porque, aunque ten�an otras tribus bajo su dominio, esa monarqu�a hab�a devorado a los asirios, cuya gente formaba parte del ej�rcito caldeo. Luego, el Profeta habla de un circuito y dice que el rey Joacim estaba encerrado por todos lados: por lo tanto, esto debe atribuirse a las naciones vecinas, que no solo favorecieron a los babilonios, sino que los ayudaron con tropas y riquezas, como est� suficientemente reunido. de otros pasajes.

Finalmente, dice, expandieron su red, con lo cual se refiere a la met�fora de planes, deseos y esfuerzos. Porque antes de que las naciones vecinas declarasen abiertamente la guerra contra los jud�os, no hay duda de que tomaron consejo secreto sobre la mejor manera de atraer a los caldeos a su lado y de insinuarse por diversas artes, como si estuvieran poniendo trampas; aunque por la palabra net tambi�n podemos entender cualquier aparato que usaron para destruir al Rey Joacim. En resumen, dice que fue llevado al abismo de las naciones, es decir, fue oprimido tanto por trampas como por violencia abierta. �l usa la palabra trampa, de acuerdo con el parecido del rey con un le�n; pero no hay nada absurdo en extender la frase a cualquier violencia hostil por la cual Joiakim fue oprimido. Sigue -

Versículo 9

�l persigue el mismo tema, diciendo que el rey Joacim, despu�s de ser tomado cautivo, fue atado con grillos y cadenas, y agreg� que fue llevado al rey de Babilonia; y en tercer lugar, fue encarcelado. �l muestra, por lo tanto, cu�n severamente Dios castig� la cruel obstinaci�n de esa naci�n: porque cuando el rey Joacim fue castigado, pens� que hab�a sido suficiente para corregirlo; pero como las personas no mejoraron con esto, la gravedad se duplic�; y aqu� Ezequiel dice que el rey Joacim fue arrojado a un calabozo fortificado. A�ade que su voz, es decir, su rugido, ya no deber�a escucharse en las monta�as de Israel. Porque a pesar de que fue reducido al estrecho, a pesar de que gran parte de su reino fue cortado, no desisti� de su ferocidad. El Profeta, por lo tanto, se burla bruscamente de su insolencia, ya que no dej� de gritar y rugir incluso en las monta�as de Israel. Sigue -

Versículo 10

Aqu� Ezequiel pone ante nuestros ojos el doble estado de los jud�os, para que puedan reconocer que cayeron en la miseria extrema, porque hab�an provocado a Dios. Porque no consideraron suficientemente su estado actual, a menos que la anterior dignidad y felicidad con que fueron adornados fuera tra�da a su memoria. Ahora, de alguna manera se hab�an vuelto insensibles a todos los males: aunque apenas quedaba nada seguro salvo Jerusal�n, no miraban hacia atr�s, sino que eran tan insensatos como cuando sus asuntos eran pr�speros. Como a�n no hab�an sido humillados por tantas matanzas, el Profeta, por un lado, les recuerda su condici�n anterior y luego les muestra c�mo hab�an ca�do. Esta comparaci�n, entonces, pens� que aguijoneaba sus conciencias bruscamente, para que por fin pudieran sentir que Dios era hostil con ellos. Ahora entendemos la intenci�n del Profeta al decir que la madre de la gente era al principio como una vid floreciente y fruct�fera. No es sorprendente que �l diga que la vid fue plantada cerca de las aguas: porque all� las vides no requieren situaciones elevadas y secas, como en climas fr�os, sino que buscan su alimento del agua, a medida que nos reunimos de muchos pasajes de las Escrituras. El Profeta, por lo tanto, se queda, que la gente en el principio era como una vid plantada en una situaci�n suave y de elecci�n. �l dice que la vid florec�a, o se ramificaba y era fruct�fera, ya que sacaba los jugos de las aguas.

Respetando la palabra "sangre", creo que quienes la toman por vigor est�n equivocados; m�s bien se refiere al nacimiento: dice, la madre de las personas en su sangre, es decir, en la generaci�n de las personas. As�, Ezequiel recuerda a los jud�os a su primer origen, como vimos anteriormente la palabra utilizada en este sentido. Cuando estabas en tu sangre, es decir, cuando naciste, ya que sabemos que este es el estado de la joven descendencia, como se explic� la met�fora en el cap�tulo diecis�is. Vive en tu sangre, dijo Dios, ( Ezequiel 16:6), ya que los jud�os todav�a estaban contaminados por no haber sido limpiados de la contaminaci�n. En resumen, la sangre se toma para nacer, como si se hubiera dicho, que los jud�os, cuando salieron a la luz por primera vez, fueron plantados para echar ra�ces, ya que Dios los llev� a la tierra de Cana�n. Aqu� �l dice que fueron tra�dos a la luz cuando Dios los restaur�. Omite el espacio de tiempo intermedio que vimos en otros lugares, porque pasa directamente desde el final hasta el principio. En general, quiere decir que los jud�os en su lugar de nacimiento fueron colocados en la tierra de Cana�n, que fue muy fruct�fera, para que pudieran producir su propio fruto, es decir, pasar su tiempo felizmente y disfrutar de una abundancia de todas las cosas. . Ahora entendemos el significado de la frase, la madre del pueblo fue plantada cerca de las aguas, como una vid floreciente y fruct�fera.

Versículo 11

�l agrega, ella ten�a ramas, es decir, ramas de vid, para los cetros de aquellos que llevan el gobierno. Los que traducen con o por encima de los cetros de los gobernantes no me parecen comprender el significado del Profeta. No tengo dudas de que tiene la intenci�n de que los cetros se hayan recogido de estas ramas de vid, o m�s bien de que est�n tan formados como para ser como cetros reales. Aunque esta traducci�n parece bastante tosca, el sentido no es dudoso; porque el Profeta quiere decir que los reyes fueron tomados del pueblo como ramas de la vid, ya que Dios eligi� al rey de David a Sedequ�as. En este sentido, dice que las ramas de la vid se convirtieron en cetros de los gobernantes. Luego agrega, su estatura era notable, que ella era notable por su nobleza incluso en la multitud de las ramas de la vid. Esto se extiende a todo el cuerpo de las personas. Como se hace menci�n del rey, no hay duda de que Dios elogia su gracia hacia todo el pueblo, cuya seguridad y felicidad se colocaron en el rey, como vimos en otros lugares. Pero �l afirma m�s claramente que la gente hab�a aumentado, por lo que sobresalieron en poblaci�n, poder y riqueza. En general, el Profeta ense�a que los jud�os fueron adornados desde el principio con todo tipo de ventajas, ya que los mejores dones de Dios brillaban all�, y su dignidad era notable, y su opulencia era grande, ya que une la multitud de las ramas o la vid. ramas con su altura.

Versículo 12

Pasemos ahora a la segunda cl�usula. �l dice que la vid fue arrancada por la ira, arrojada al suelo y secada por el viento del este, y que sus ramas se partieron y se marchitaron, y fueron consumidas por el fuego. Ahora he explicado brevemente el significado del Profeta. Como los jud�os se hab�an vuelto est�pidos en su calamidad, y no se humillaban de manera tan suplicante como para volar a la misericordia de Dios, el Profeta corrige su letargo cuando les muestra su origen. Ahora dice que fueron reducidos a la miseria extrema por un asalto repentino; porque un cambio que tuvo lugar en un corto espacio de tiempo deber�a afectarlos r�pidamente; pero si hubieran disminuido lentamente, el cambio no habr�a sido tan notable: pero cuando la vid fue alcanzada por un rayo, desgarrada, marchitada y quemada, esa matanza instant�nea, como he dicho, demostr� que no fue por casualidad, pero por la evidente ira de Dios. Por esta raz�n, dice que la vid fue desgarrada violentamente y arrojada al suelo. Si la vid se hubiera secado gradualmente, no habr�a sido tan maravillosa; pero su repentina ruptura deber�a haberlos hecho conscientes de la ira de Dios, hacia la cual se hab�an vuelto insensibles. Esta es la raz�n por la cual el Profeta agrega un s�mil a otro. El arranque habr�a sido suficiente; pero agrega, fue arrojado al suelo, que deber�a marchitarse por completo. Agrega, el viento del este, que destruye tanto las frutas como los �rboles, como es suficientemente evidente en muchos pasajes; y no solo eso, sino que dice que las ramas se rompieron, arrancaron y se marchitaron: finalmente, se consumieron con fuego. En fin, la mano de Dios apareci� visiblemente en esa horrible matanza de la gente, cuando fueron desgarrados , cortado, marchito y quemado. Sigue -

Versículo 13

El Profeta parece aqu� inconsistente consigo mismo, ya que estas dos cl�usulas est�n abiertamente en desacuerdo, que la vid no solo estaba marchita, sino quemada, y aun as� plantada en un lugar des�rtico; porque si se marchitara, no podr�a echar ra�ces nuevamente; pero el ardor elimin� la m�s m�nima esperanza; porque cuando las ramitas se redujeron a cenizas, �qui�n vio una vid brotar y crecer de sus cenizas? Pero cuando el Profeta dice que la vid se marchit� y se quem�, se refiere a la conclusi�n a la que los hombres deben llegar por sus propios sentidos cuando la ciudad se arruin� por completo; porque eso fue en verdad un espect�culo horrible, cuando la gente se hizo tributaria despu�s de que su rey fuera tomado, el templo, saqueado, la ciudad arruinada y su seguridad depend�a de la lujuria de su conquistador. Dado que, por lo tanto, ni el nombre real y la dignidad, ni la libertad y la seguridad, permanecieron, y especialmente cuando fueron conducidos al matadero, �no fue su ruina muy parecida a un incendio? Ahora, por lo tanto, vemos por qu� el Profeta dijo que la vid se rasg� y se quem�, porque esa destrucci�n m�s severa elimin� toda esperanza de restauraci�n por un corto tiempo. Por lo tanto, habl� de acuerdo con el sentido com�n: luego tuvo en cuenta esa forma de ruina horrible, o m�s bien deformidad, que era como una quema y una destrucci�n final de la gente. Pero ahora, cuando dice que la vid fue plantada nuevamente, elogia la misericordia de Dios, quien deseaba que quedara algo de semilla para la producci�n de plantas j�venes; Como se dice en el primer cap�tulo de Isa�as, para que no te encuentres como Sodoma y Gomorra, alguna peque�a semilla ha sido maravillosamente preservada. Aunque, por lo tanto, la gente fue quemada despu�s de ser violentamente arrancada, y toda su vida sometida a la voluntad del m�s orgulloso, de los conquistadores, sin embargo, Dios tom� algunas ramas o ramas de vid, que �l plant�, para poder propagar una nueva naci�n. , que se hizo a la vuelta del pueblo.

Pero �l dice que esas ramas de vid fueron plantadas en el desierto en la tierra seca y sedienta, ya que Dios preserva la religi�n de su pueblo incluso en la muerte. Por lo tanto, compara su exilio con un desierto y un desierto. A primera vista puede parecer absurdo que Chaldaea se asemeje a un desierto, ya que sabemos que ese distrito es notable por su fertilidad y otras ventajas; sabemos tambi�n que estaba bien regado, aunque llamado seco. Pero el Profeta aqu� no considera el car�cter material del pa�s, sino la condici�n de las personas en �l. Aunque Chaldaea era muy encantadora y estaba llena de todo tipo de frutas, sin embargo, dado que las personas fueron cruelmente oprimidas y tratadas con desprecio, de ah� que la tierra se llamara desierto. Decimos que ninguna prisi�n es hermosa, por lo que su exilio no podr�a ser agradable para los hijos de Israel; porque estaban avergonzados de su vida y no se atrevieron a levantar la vista. Como, entonces, se ahogaron en un profundo abismo de males, la tierra era para ellos un desierto; por lo tanto no hubo esplendor, dignidad u opulencia; y la libertad, la m�s preciosa de todas las bendiciones, les fue arrebatada. Ahora vemos el sentido de las palabras. Se sigue a lo largo -

Versículo 14

Aqu� el Profeta se acerca al final de sus penas, cuando Sedequ�as fue arrastrado al cautiverio, y as� se aboli� la independencia del pueblo. Dios hab�a plantado anteriormente esa vid, o al menos algunas de las ramas, en un lugar des�rtico, ya que las primeras cuatro tribus, y luego las siete, fueron llevadas y, por �ltimo, la mayor parte de la tribu de Judea; pero lo poco que qued� con el rey Sedequ�as pereci�. �l dice, por lo tanto, que el fuego sali� de las ramas de la vid: as� muestra que la �ltima matanza procedi� solo de la gente misma; y para que no pronuncien sus quejas habituales, el Profeta se encuentra con ellos dici�ndoles que fueron consumidos por el fuego intestinal; es decir, su matanza no pod�a atribuirse a sus conquistadores caldeos, sino a ellos mismos; porque el rey Sedequ�as, por su propia perfidia, hab�a agitado al rey de Babilonia contra s� mismo; porque podr�a haber pasado su tiempo en su reino, pero no pudo evitar arrojar el yugo; por esta raz�n se arm� contra el rey de Babilonia, porque fue un rompedor de tratados: y as� el Profeta dice, con propiedad, que sali� fuego de una vara, o ramita de sus ramas, y de ah� el fruto del toda la vid fue consumida; es decir, el remanente se perdi� por culpa de ese rey p�rfido. Ahora agrega, no hab�a cetro para gobernar entre sus barras. Por lo tanto, parece que la exposici�n que he avanzado se adapta mejor y es totalmente genuina. Primero dijo que las varillas eran para un cetro de los gobernantes; pero aqu� dice que no hab�a cetro para ellos entre estas barras. Lo que sigue trataremos ma�ana.

Información bibliográfica
Calvino, Juan. "Comentario sobre Ezekiel 19". "Comentario de Calvino sobre la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/cal/ezekiel-19.html. 1840-57.