Bible Commentaries
2 Reyes 2

Comentario Bíblico de SmithComentario de Smith

Versículos 1-25

Y aconteci� que cuando quiso Jehov� llevar a El�as al cielo en un torbellino, El�as iba con Eliseo de Gilgal ( 2 Reyes 2:1 ).

As� que ha llegado el momento en que El�as va a partir de la tierra. Y les dimos una especie de boceto en miniatura de Elijah el domingo pasado por la noche, este personaje interesante que regresar� nuevamente. Es muy posible que est� vivo en alg�n lugar de la tierra en este momento. Porque �l ser� uno de los dos testigos que testificar�n a Israel durante este tiempo en el cual Dios va a tratar con la naci�n de Israel nuevamente por siete a�os.

Y El�as ser� uno de esos dos testigos del cap�tulo once de Apocalipsis. Y debido a que estamos tan cerca de ese tiempo, es muy posible que �l est� vivo y en alg�n lugar en este momento esperando realmente que la iglesia sea eliminada para poder comenzar su ministerio a la naci�n de Israel.
Pero hist�ricamente ha llegado el momento en que ser� arrebatado al cielo en un torbellino. Y as� lo sigui� Eliseo, y llegaron a Gilgal, que est� al norte de Jerusal�n. Est� en la monta�a de Jerusal�n all�, y probablemente est� a quince millas de Jerusal�n.

Y El�as dijo a Eliseo: Te ruego que te quedes aqu�; porque el SE�OR me ha enviado a Betel. Y Eliseo le dijo: Vive Jehov�, y vive tu alma, que no te dejar�. Fueron, pues, a Betel ( 2 Reyes 2:2 ).

Ahora en realidad se est�n mudando de Gilgal a Bethel. Van en direcci�n este y descienden hacia Jeric�. Ahora bien, cuando llegaron a Betel,

Ciertos hijos de los profetas salieron y le dijeron a Eliseo: �Sabes que hoy te van a quitar a tu amo? Y �l dijo: S�, lo s�; mant�n tu paz. Entonces El�as dijo a Eliseo, espera t� aqu�; porque voy bajando a Jeric� ( 2 Reyes 2:3-4 ).

Ahora, de Betel a Jeric� hay un valle sinuoso, y hay una distancia de cerca de dieciocho millas hasta Jeric� cuesta abajo todo el camino desde Betel.

Y cuando llegaron a Jeric�, salieron ciertos hijos de los profetas y dijeron a Eliseo: �Sabes que hoy te van a quitar a tu se�or? Y �l dijo: Lo s�; mant�n tu paz. Y El�as le dijo: Espera aqu�; porque el SE�OR me ha enviado al r�o Jord�n. Y �l dijo: Vive Jehov�, que no te dejar�. As� que los dos continuaron. Y fueron cincuenta hombres de los profetas, y se pararon a la vista de lejos, y se pararon junto al Jord�n.

Y El�as tom� su manto, y lo envolvi�, y golpe� las aguas, y se dividieron, de modo que las dos cruzaron en seco ( 2 Reyes 2:4-8 ).

Ahora, esto debe haber sido toda una experiencia ya que estos cincuenta hombres estaban mirando para ver a este profeta tomar su manto, golpear el agua y verlo dividirse para que los dos hombres cruzaran sobre tierra seca.

Y aconteci� que cuando hubieron pasado, El�as dijo a Eliseo: Pregunta qu� debo hacer por ti, antes de que me aparten de ti. Y Eliseo dijo: Te ruego que una doble porci�n de tu esp�ritu sea sobre m�. Y �l dijo: Algo dif�cil hab�is pedido; sin embargo, si me viereis cuando sea quitado de vosotros, as� os ser�; pero si no, no ser� as�. Y aconteci� que yendo ellos todav�a, y hablando, he aqu�, apareci� un carro de fuego, y los caballos de fuego, y los separaron a ambos; y El�as subi� al cielo en un torbellino.

Y Eliseo lo vio, y exclam�: Padre m�o, padre m�o, el carro de Israel y su caballer�a. Y no lo vio m�s; y tomando sus propios vestidos, los rasg� en dos pedazos. Tom� tambi�n el manto de El�as que se le hab�a ca�do mientras sub�a, y volvi� a la orilla del r�o Jord�n; Y tom� el manto de El�as que se le hab�a ca�do, y golpe� las aguas, y dijo: �D�nde est� Jehov� Dios de El�as? Y cuando �l tambi�n hubo herido, las aguas se partieron, y Eliseo pas�.

Y cuando los hijos de los profetas que estaban all� vigilando en Jeric� vieron lo que pasaba, dijeron: El esp�ritu de El�as reposa sobre Eliseo. Y vinieron a su encuentro, y se postraron en tierra ante �l ( 2 Reyes 2:9-15 ).

As� que aqu� vemos una especie de paso de un manto y unci�n de un hombre a otro. Como El�as ha terminado su ministerio y es arrebatado por el Esp�ritu al cielo, y Eliseo, pidiendo esa doble porci�n, para poder recibir ese tipo de herencia, la unci�n del Esp�ritu de Dios sobre su vida para que pueda continuar el ministerio de El�as. . Y como volv�a, tomando el manto de El�as, golpeando el agua y preguntando: �D�nde est� Jehov� Dios de El�as?
A menudo me pregunto hoy acerca de los milagros.

�D�nde est� el Dios de El�as? No estoy nada satisfecho con los programas exagerados de tantos evangelistas y la atm�sfera en la que supuestamente se llevan a cabo los milagros. Realmente no creo que Dios necesite trabajar en un ambiente de carpa de circo. Pero creo que �l puede obrar de manera muy f�cil y natural. Y que cuando tienes este ambiente s�per emocional que muchas veces Dios no siempre recibe todo el cr�dito y la gloria por lo que se logra, pero muchas veces los instrumentos manipulan tanto y a veces son tan raros que te llaman la atenci�n. y es dif�cil pensar realmente en el Se�or.

Hay hombres que buscan deliberadamente llamar la atenci�n sobre s� mismos.
Me he preguntado por qu� no vemos milagros m�s dram�ticos que s� que Dios es capaz de realizar. Entonces, en la idea, "�D�nde est� el Dios de El�as?" Est� hablando de un Dios que obra milagros visibles y obvios donde no puede haber cuestionamientos ni dudas. No puedo estar de acuerdo en que Dios releg� los milagros solo al per�odo apost�lico y antes.

Que lleg� este punto de la historia despu�s del �ltimo ap�stol donde Dios dijo: "Est� bien, ese es el �ltimo milagro y de ahora en adelante, dejaremos que se eduquen y que la iglesia se expanda por el mundo, a trav�s del genio del hombre". "
No puedo creer que la falta de milagros en realidad indique alguna falta en el poder de Dios o incluso la voluntad de Dios para realizar milagros. Y sin embargo, la �ltima vez que pregunt� al Se�or si no pod�a tener el don de hacer milagros, me respondi� que me ha guiado por un camino m�s excelente que el de hacer milagros maravillosos.

Y desde entonces, nunca m�s le he pedido el don de hacer milagros. Pero me he regocijado por el hecho de que �l ha llevado nuestra comuni�n a una verdadera comuni�n, a una unidad donde el amor de Jesucristo domina nuestra comuni�n. Y estoy satisfecho con eso.
Soy algo as� como Paul. Tres veces busqu� al Se�or para tener el don de milagros o la realizaci�n de milagros en mi vida, y Dios me respondi� m�s o menos como lo hizo con Pablo.

Algo as� como, "No me preguntes m�s sobre esto, solo si�ntete satisfecho con lo que tienes". Puedo ver que este regalo ser�a un regalo extremadamente dif�cil de manejar para una persona. Y dudo que pudiera manejarlo si lo tuviera. Porque si una persona tuviera la capacidad de obrar verdaderos milagros por el poder del Esp�ritu, todos y su hermano vendr�n tratando de capitalizar ese don en particular y llev�ndote como un fen�meno secundario por todo el pa�s.

Para que puedas obrar los milagros en los ojos de la gente y asombrar a la gente y dibujarlos, y luego, habi�ndolos dibujado, util�zalo como un s�per bombo para presionarlos por una ofrenda o algo as�. Ser�a extremadamente dif�cil lidiar con todas las presiones que los hombres ejercer�an sobre ti si tuvieras este don en particular.
Y mir�ndolo desde ese �ngulo, estoy muy contento de que Dios no haya respondido a mi oraci�n y me haya dado el don de obrar milagros.

Y, sin embargo, estoy seguro de que hay un lugar para ello dentro del cuerpo de Cristo, de lo contrario, el Esp�ritu nunca hubiera dado ese don para empezar. Y en este mundo esc�ptico en el que vivimos, puedo ver el valor. Y, sin embargo, me pregunto qu� tipo de hombre se necesitar�a para ser realmente capaz de manejar toda la notoriedad que se centrar�a en torno a este tipo de regalo. Ser�a dif�cil, porque sin duda, ya sabes, United Press, Associated Press, las principales cadenas estar�an all� tratando de conseguir tus entrevistas y todo lo dem�s, y envaneci�ndote, y ya sabes y exalt�ndote, y ser�a extremadamente dif�cil.

De hecho, no creo que conozca a un hombre que realmente pueda manejarlo adecuadamente.
�D�nde est� el Dios de El�as? �l no ha cambiado. �l sigue siendo el mismo. El esta todavia esta alli. Pero nuestra propia manera de vivir nos ha alejado, creo, un paso m�s all�. Nos jactamos de nuestra sociedad gloriosa y de nuestra sociedad y cultura altamente desarrolladas. Y sin embargo, dentro de la sociedad y la cultura hay tantas distracciones, cosas que hacen que tu mente se distraiga del Se�or y se centre en las cosas materiales que nos rodean.

Ahora, cuando El�as y Eliseo viajaban juntos, iban de Gilgal a Betel a Jeric� al Jord�n, Transjordania. Y caminar en la naturaleza, y cuando sales y caminas en la naturaleza virgen, llega a ti una conciencia y un conocimiento de Dios que no puedes obtener conduciendo por la autopista. Hay la capacidad de meditar y realmente tener una comuni�n cercana con Dios caminando de Bethel a Jeric�.

Pero tratas de conducir por ese camino angosto y sinuoso y tener verdadera meditaci�n y comuni�n, y terminar�s por el precipicio.
As� que la sociedad moderna y todas sus conveniencias y todas realmente tienen un efecto negativo sobre el desarrollo espiritual real; ese tipo de desarrollo espiritual que es necesario para poder manejar un don como el que ten�an El�as o Eliseo. �D�nde est� el Dios de El�as? Golpeando las aguas, se partieron.

Y as�, el mismo milagro que El�as hab�a realizado ahora lo hace Eliseo. Y aqu� est� la indicaci�n de que la oraci�n o el pedido de Eliseo fue respondido. Porque pidi� poder recibir la herencia, para poder tomar y recibir ese mismo esp�ritu de El�as, la doble porci�n de �l, que significa la herencia de este don. Y ahora que se realiza este mismo milagro, es una confirmaci�n de la afirmaci�n de su llamado.

"Y vinieron al encuentro de Eliseo y se postraron en tierra".
Ahora ves, inmediatamente te vas a enfrentar a un problema. Aqu� est�n estos tipos inclin�ndose ante �l. �C�mo vas a manejarlo? Parece que cada vez que una persona tiene el poder de Dios o los dones del Esp�ritu obrando en su vida, la gente quiere inclinarse ante ellos, y miran el instrumento y lo magnifican. Y muy pocos instrumentos pueden soportar ese tipo de cosas.

Ahora dijeron: [Oye,] somos cincuenta, somos hombres fuertes. Y queremos ir y queremos ver si tal vez el cuerpo de El�as cay� en alg�n lugar del desierto. ( 2 Reyes 2:16 )

No es del todo cierto, qued� atrapado en el torbellino, pero puede ser que el torbellino se lo llev� a la Tierra de Oz. Podr�a estar herido en alg�n lugar del desierto. Podr�a haber sido arrojado en alg�n lugar de una monta�a o en alg�n valle.

Eliseo dice: No tiene sentido ir. Pero lo instaron hasta que se avergonz� de todo el asunto y dijo: [Bueno, est� bien, si quieres ir, entonces] vete. Entonces enviaron cincuenta hombres y lo buscaron durante tres d�as, pero no lo encontraron. Y cuando volvieron a �l (porque se qued� all� en Jeric�), les dijo: �No os dije que no fuerais ( 2 Reyes 2:16-18 )?

Sabes, hay mucho esfuerzo desperdiciado solo porque la gente insiste en hacer algo. Y presionan y presionan y luego te averg�enzas de todo el asunto. Dices: "Est� bien, adelante". Pero sabes que no va a lograr nada.

Y los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo, [sabes,] esta es una ciudad bonita y todo: pero el suministro de agua es malo, y un lugar hermoso pero con el agua mala, las cosas se est�n muriendo. Y �l dijo: Tr�eme una vasija nueva y ponle sal. Y as� fue al manantial que alimentaba a la ciudad de Jeric�, y ech� la sal en el manantial, y las aguas del manantial se curaron y dijo: As� est�n hasta el d�a de hoy ( 2 Reyes 2:19-22 ) .

Ahora, por supuesto, esto fue escrito casi mil a�os antes de Cristo, as� que en ese momento, los manantiales que alimentaban a Jeric� todav�a estaban, ya sabes, bien. En realidad, esto fue escrito un poco m�s tarde que eso. Y as�, en el momento de la escritura hab�a pasado alg�n tiempo, todav�a eran buenos. Oye, todav�a est�n bien. Estuve all� no hace mucho y beb� del manantial. Y el agua sigue siendo buena. As� que Dios hizo un buen trabajo al sanar los manantiales que alimentan a Jeric�. El agua sigue siendo buena y, por supuesto, es una zona muy, muy fruct�fera.

Mientras sub�a de Jeric� a Betel, sali� Rut ( 2 Reyes 2:23 )

Y se traduce como "peque�os ni�os" y esto les da un concepto equivocado. Ves a un mont�n de ni�os peque�os, ya sabes, de seis, siete a�os llorando: "Oye, viejo calvo, �ad�nde vas, calvo?" Pero el idioma hebreo en realidad indica m�s un adolescente y un adolescente tard�o que solo un ni�o. Un ni�ito, estos eran ni�itos podridos, y son adolescentes burl�ndose del profeta de Dios.

Y mir�ndolos, los maldijo en el nombre de Jehov� ( 2 Reyes 2:24 ).

Ahora, es dif�cil entender por qu� har�a eso excepto que hab�a una gran irreverencia por un hombre de Dios.

Y salieron dos osos del bosque ( 2 Reyes 2:24 ),

Y es interesante que hab�a bosques en esa zona en esos tiempos. Hoy est� extremadamente yermo, ese valle que sube. Hombre, no hay nada m�s que rocas.

y desgarr� cuarenta y dos de ellos ( 2 Reyes 2:24 ).

No dice que los mataron y todo eso, sino que realmente los rasparon.

Y as� subi� de all� al monte Carmelo ( 2 Reyes 2:25 ),

Ahora eso est� claro en el �rea de Haifa en la costa.

y de all� volvi� a Samaria ( 2 Reyes 2:25 ).

Que est� como a nueve millas del Mediterr�neo, pero como a veinticinco millas del monte Carmelo, el �rea de Haifa. Est� m�s cerca de parte del monte Carmelo. Y ellos le dijeron: He aqu� ahora. Le ruego me disculpe. "

Información bibliográfica
Smith, Charles Ward. "Comentario sobre 2 Kings 2". "Comentario Bíblico de Smith". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/csc/2-kings-2.html. 2014.