Bible Commentaries
Salmos 81

Comentario Bíblico de SmithComentario de Smith

Versículos 1-16

Vayamos a Salmo 81:1-16 .

El primer d�a del s�ptimo mes en el calendario jud�o, que, debido a que su calendario comienza, el calendario religioso comienza el primero de abril, por lo general coincide en alg�n lugar alrededor del primero de octubre en nuestro calendario. Hay un toque de trompetas. Se llama la Fiesta de las Trompetas para anunciar el mes sant�simo del a�o, el mes s�ptimo. Y as�, el primer d�a del s�ptimo mes, la Fiesta de las Trompetas, el sonido de las trompetas para inaugurar este mes sagrado seguido luego por Yom Kippur, el D�a de la Expiaci�n, que luego es seguido por la Fiesta de Succoth o Tabern�culos.

Y as� esta Fiesta de las Trompetas, el d�a santo, el sonido de las trompetas para el mes santo, reuniendo al pueblo en una santa convocaci�n delante de Dios. Salmo 81:1-16 es el salmo que se le�a para la Fiesta de las Trompetas. Y as�, el comienzo del salmo es una especie de proclamaci�n para este d�a que ha llegado.

Cantad con j�bilo a Dios, nuestra fortaleza; aclamad con j�bilo al Dios de Jacob. Entonad salmo, y traed el pandero, y el arpa agradable con el salterio. Tocad la trompeta en la luna nueva, y en el tiempo se�alado, en nuestro solemne d�a de fiesta. Porque este era el estatuto para Israel, y la ley de Dios para Jacob. Esto lo puso en Jos� por testimonio, cuando sali� por la tierra de Egipto, donde o� un lenguaje que no entend�a.

Retir� su hombro de la carga: sus manos fueron liberadas de las ollas. As� me llamaste en la angustia, y yo te libr�; Te respond� en el lugar secreto del trueno: te prob� en las aguas de Meriba ( Salmo 81:1-7 ).

Y as�, la primera secci�n del salmo se concluye con esto: Selah. Simplemente se detienen y piensan en eso. As� que es un llamado a la santa convocaci�n, de cantar al Se�or con salmo, pandero, arpa. El sonido de las trompetas, porque Dios lo ha establecido como estatuto en la ley de Mois�s para el pueblo.

Dios declara en el vers�culo Salmo 81:7 "Llamaste en la angustia, y te libr�. Te respond� en lo secreto del trueno. Te prob� en las aguas de Meriba". O: "Te estaba probando en las aguas de Meriba". As� que Dios les relata algunas de sus experiencias en el desierto. C�mo all� en el desierto clamaron al Se�or a causa de su sed. Y c�mo Dios les respondi� y los prob�, los prob� all� en las aguas de Meriba, que significa "aguas de contienda", porque el pueblo luch� con Dios y con Mois�s.

Ahora Dios mismo clama al pueblo y declara:

Oye, pueblo m�o, y te testificar�: Israel, si me oyeres ( Salmo 81:8 );

As� que Dios ahora est� llamando a su pueblo a escuchar lo que tiene que decir. Ante todo,

No habr� dios extra�o en ti; ni adorar�s a ning�n dios extra�o ( Salmo 81:9 ).

Dios ha declarado en la ley, el primer mandamiento, que "No tendr�s dioses ajenos delante de m�" ( �xodo 20:3 ). Ahora solemos pensar que eso establece una prioridad; Dios primero, y luego todos mis peque�os dioses despu�s. Pero, "ning�n otro dios delante de M�", es decir, en Mi presencia, no teniendo otros dioses a mi alrededor. En otras palabras, nuestro coraz�n debe estar totalmente hacia �l y nuestra adoraci�n debe ser entregada completamente a �l. No habr� dios extra�o.

Es triste y tr�gico que el pueblo no escuch� a Dios, y que su historia fue de continua idolatr�a. Desde el momento en que entraron en la tierra, comenzaron a volverse y a adorar a los dioses de los cananeos: Baal, Moloc, Mam�n, Astaret y todos los dioses y diosas de la tierra. Y comenzaron a seguir las pr�cticas del pueblo que habitaba en la tierra delante de ellos que Dios hab�a expulsado. Y as� el mandamiento de Dios, "No habr� en ti dios extra�o, ni adorar�s". Y, sin embargo, no quisieron escuchar.

Yo soy Jehov� tu Dios, que te saqu� de Egipto: abre bien tu boca, y yo la llenar� ( Salmo 81:10 ).

Dios est� declarando ahora las cosas que desea hacer por su pueblo. Y por supuesto, �l se est� dirigiendo a s� mismo a "Oh pueblo m�o". As� que �l est� declarando aquellas cosas que �l desea hacer por Su pueblo. Estoy seguro que limitamos lo que Dios har�a en nuestras vidas tantas veces.

Se nos dice en Judas: "Mant�nganse en el amor de Dios" ( Judas 1:21 ). Ahora, eso significa mantenerse en el lugar donde Dios puede demostrar el amor que tiene por usted. Si dices: "Bueno, tengo que mantenerme en el amor de Dios", pensando: "Tengo que mantenerme realmente dulce, amable, generoso y agradable para que Dios no pueda evitar amarme, "Tienes un concepto equivocado del amor de Dios.

Dios te ama para bien o para mal. El amor de Dios por ti no es causado por ti. El amor de Dios por ti se debe a Su naturaleza de amor. En realidad, no puedo hacer nada para que Dios me ame m�s. De la misma manera, no puedo hacer nada que haga que Dios me ame menos. Dios me ama.

Pero me es posible alejarme de ese amor de Dios. Ponerme en la posici�n donde Dios realmente no puede demostrar ese amor que �l tiene por m�. Y eso es lo que Jude nos est� diciendo. Y Dios est� diciendo aqu� las cosas que deseaba hacer por el pueblo. "Solo abre bien tu boca, Yo la llenar�. Yo llenar� tu vida; solo �brete completamente a M�. Y Yo llenar� tu vida".

Pero [�l dijo] mi pueblo no escuchar�a mi voz; e Israel no quiso tener nada que ver conmigo ( Salmo 81:11 ).

Aquellos que Dios hab�a escogido como Su pueblo simplemente no ten�an nada que ver con Dios. Estaban adorando a estos otros peque�os dioses.

Entonces [�l dijo] los entregu� a la lujuria de sus propios corazones ( Salmo 81:12 ):

En Romanos, el primer cap�tulo, leemos tambi�n: �Por lo cual tambi�n Dios los entreg� ( Romanos 1:24 ). Y siempre es algo tr�gico cuando Dios dice de un hombre: "Me he rendido. Por lo tanto, lo dej�". Dios le dijo a Jerem�as: �Mira, no ores m�s por su bien, porque si lo haces, no te voy a escuchar.

Dios dijo: "Efra�n est� unido a sus �dolos. D�jala en paz. Se unieron a la idolatr�a. S�lo olv�dalo.� Porque Dios dice, �Los he dejado. Ya no voy a tratar con ellos". Y, por supuesto, se nos dice que el Esp�ritu de Dios no siempre luchar� con un hombre. Y cuando Dios entrega a un hombre, siempre es algo muy tr�gico. Dios los entreg�. a la lujuria de sus propios corazones.

Crees que lo quieres tanto. Piensas que esa va a ser la respuesta de tu vida y haces todo lo que puedes para lograr o alcanzar. Y a veces Dios simplemente te da por vencido para seguir adelante y dice: "Est� bien, si quieres comerlo, c�melo, ya sabes. Pero te enfermar�". Y �l te entrega a la lujuria de tu propio coraz�n. Pero esa puede ser una de las cosas m�s tr�gicas que jam�s haya sucedido, para que obtengas el deseo de tu propio coraz�n.

Porque muchas veces deseamos cosas que en realidad no nos benefician. Dios sabe que no son buenos para nosotros. Y cuando Dios nos entrega a los deseos de nuestro propio coraz�n, muchas veces encontramos esa la experiencia m�s amarga de nuestras vidas.

anduvieron [dijo] en sus propios consejos ( Salmo 81:12 ).

Ellos no tendr�an nada que hacer conmigo. Ellos no Me seguir�an.

�Oh [Dios dijo] que mi pueblo me hubiera escuchado, e Israel hubiera andado en mis caminos! ( Salmo 81:13 )

Ahora Dios se lamenta por las personas que no andan en Sus caminos. Oh, si tan solo hubieran escuchado.

Pronto habr�a subyugado a sus enemigos, y vuelto mi mano contra sus adversarios ( Salmo 81:14 ).

Si tan s�lo Me hubieran escuchado.

Los que aborrecen a Jehov� se habr�an sometido a �l, y su tiempo hubiera durado para siempre ( Salmo 81:15 ).

Habr�an permanecido en la tierra. No habr�an ido al cautiverio. habr�a sometido a sus enemigos.

Y con lo mejor del trigo los habr�a alimentado; con miel de la roca los habr�a saciado ( Salmo 81:16 ).

Pero no escucharon a Dios, y ese es el clamor de Dios. Debido a que no le escucharon, en lugar de conocer lo mejor de Dios, en lugar de experimentar la plenitud de la demostraci�n del amor de Dios, porque no quisieron escuchar a Dios, fueron al cautiverio. Y luego fueron destruidos por sus enemigos.
Cuando lleguemos a Israel este a�o, para los m�s fuertes, planeo hacer una caminata desde Gihon Springs hasta Dung Gate, porque se han realizado muchas excavaciones arqueol�gicas nuevas el a�o pasado.

Y algunos de los descubrimientos arqueol�gicos m�s emocionantes alrededor de la ciudad de Jerusal�n se han hecho en esta ladera, ya que han descubierto �reas que datan de la �poca de David. Zonas que se remontan, en realidad, a la �poca cananea cuando los jebuseos ten�an la ciudad. Pero lo interesante, como han retrocedido en los diversos tiempos de la historia de Israel, han descubierto muchas casas que fueron derribadas por el ej�rcito de Nabucodonosor cuando este siti� a Israel en la rebeli�n de Sedequ�as.

Y en los escombros de las casas del pueblo han hallado multitud de peque�os dioses que el pueblo hab�a tallado.
Astart�, la diosa de la fertilidad con sus pechos exagerados, y todos esos �dolos que han descubierto. En total, al parecer, en todas las casas estaban llenos de estos peque�os �dolos. Lo mismo contra lo que clamaba la escritura, lo mismo contra lo que Dios estaba clamando aqu�.

"No sirv�is a dioses extra�os. O�dme. Oh, si tan s�lo me hubieran hecho caso, entonces Yo los habr�a guardado en la tierra. Los habr�a preservado. Habr�a subyugado a sus enemigos. Pero ellos no quisieron tener algo que ver conmigo". Y entonces Dios estaba llorando porque el pueblo iba a ir al cautiverio. Dios estaba llorando por todas las dificultades que se estaban trayendo porque no andaban en los caminos del Se�or.


Y estoy seguro de que mientras Dios nos mira y �l nos ve, seguimos nuestro propio camino obstinado. Y Dios puede ver a d�nde lleva ese camino. Que Dios simplemente llora cuando nos negamos a escuchar, cuando obstinadamente decimos: "Pero yo quiero esto", y estoy persiguiendo el deseo de mi propio coraz�n. Lo tr�gico cuando Dios me entrega a mi propia lujuria, la lujuria de mi propio coraz�n. Y �l solo tiene que pararse all� y llorar mientras voy al cautiverio, ya que estoy trayendo todo el dolor y el dolor sobre m� porque no lo escucho, porque no lo escucho, porque no quiere tener nada que ver con Su ley.


Y as� el lamento de Dios. Es un salmo muy hermoso, ya que vemos a Dios realmente con el coraz�n roto por el fracaso de la gente, por la adoraci�n de estos peque�os dioses. Y c�mo, en realidad, incluso en este �ltimo a�o, Dios ha permitido que se descubra la evidencia que prueba tan vitalmente este salmo y hace que todo sea tan real, ya que han descubierto las casas que fueron destruidas por los babilonios y encontraron todas estas dioses extra�os.

Y entendemos c�mo la gente se hab�a apartado de �l.
Como dijo David, ya saben, han tomado y han tallado dioses en piedra. Ojos tienen pero no pueden ver. O�dos tienen pero no pueden o�r. Y David habl� de las cosas que la gente estaba haciendo incluso en su tiempo y la insensatez de ellos. As� que esperamos ver estas ruinas cuando estemos all� esta vez. "

Información bibliográfica
Smith, Charles Ward. "Comentario sobre Psalms 81". "Comentario Bíblico de Smith". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/csc/psalms-81.html. 2014.