Bible Commentaries
1 Samuel 7

Sinopsis del Nuevo Testamento de DarbySinopsis de Darby

Versículos 1-17

Samuel comienza a actuar, por su testimonio, sobre la conciencia del pueblo, y a desechar lo que los debilitaba al deshonrar a Dios. Les dice que, si se vuelven a Jehov� con todo su coraz�n, tienen que desechar los dioses extra�os y servir solo a Jehov�. Una adoraci�n mezclada era intolerable. Entonces Jehov� los librar�a. El profeta Samuel es ahora el punto de encuentro entre el pueblo y Dios. Dios ahora lo reconoce solo a �l.

El arca no se encuentra de nuevo en su lugar hasta que el rey escogido de Dios se establezca en el trono; s�lo se coloca enteramente en el orden de Dios cuando el hijo de David gobierna en paz y con fuerza en Jerusal�n [1]. Se consulta una vez ( 1 Samuel 14:18-19 ), pero su presencia es sin efecto y sin poder.

Existe, pero en conexi�n con aquellos en quienes la fe y la integridad ya no se encontraron, de modo que nada result� de ello. M�s bien prob� que Dios estaba en otra parte, o al menos que obraba en otra parte.

Pero seguiremos con la historia. A la llamada de Samuel, los dioses extra�os son apartados. El pueblo se re�ne a su alrededor para que ore por ellos. No ofrecen sacrificio; sacan agua y la derraman sobre la tierra en se�al de arrepentimiento (ver 2 Samuel 14:14 ); ayunan y confiesan su pecado. Samuel los juzga all�.

Pero si Israel se re�ne, incluso para la humillaci�n, el enemigo inmediatamente se agita en oposici�n; no tolerar� ning�n acto que coloque al pueblo de Dios en una posici�n que lo reconozca como Dios. Los israelitas est�n alarmados y recurren a la intercesi�n de Samuel. Samuel ofrece un sacrificio [2], muestra de la entrega total de s� mismo al Se�or, y de la relaci�n del pueblo con �l; pero no es antes del arca.

�l ruega a Jehov�, su oraci�n es escuchada, y los filisteos son heridos delante de Israel. Y no fue un caso excepcional, aunque no perdieron nada de su formidable car�cter, ni de su odio a Israel. Samuel hace descender la bendici�n de Dios sobre el pueblo, y la mano de Jehov� estuvo contra los filisteos todos los d�as de Samuel.

Las ciudades de Israel fueron restauradas. Hubo paz entre Israel y los amorreos. Samuel juzg� a Israel en Ram� y edific� all� un altar. Todo esto es una posici�n excepcional y extraordinaria para Israel, en la que depend�a enteramente de Samuel, quien, viviendo �l mismo como patriarca, como si no hubiera tabern�culo, se convierte, por su propia relaci�n con Dios, por la fe, en sost�n y apoyo sustentador del pueblo, que en realidad no ten�a otro.

Nota 1

Compare Salmo 78:60-61 ; Salmo 132 . El arca est� en conexi�n con Sion, el asiento de la gracia real. Solo Salom�n, como hombre de paz, pudo edificar la casa.

Nota 2

Es decir, un holocausto. Esto es notable. No era sacrificio por el pecado, sino sacrificio que reconoc�a la relaci�n existente entre el pueblo y Dios. S�lo Cristo, como hemos visto en otra parte, es el verdadero holocausto.

Información bibliográfica
Darby, John. "Comentario sobre 1 Samuel 7". "Sinopsis del Nuevo Testamento de Juan Darby". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/dsn/1-samuel-7.html. 1857-67.