Bible Commentaries
Salmos 28

Sinopsis del Nuevo Testamento de DarbySinopsis de Darby

Versículos 1-9

Salmo 28 . El jud�o piadoso ruega, en el tiempo de angustia venga sobre la naci�n, para que no sea confundido con los imp�os. Si Jehov� no aparec�a en su favor, tanto estaba �l en la misma angustia que ellos, que la muerte lo arrastrar�a entre sus fauces. �l espera juicio sobre los imp�os. Desprecian a Jehov�. Jehov� debe recompensar sus acciones.

El salmo proporciona al remanente no solo el clamor, sino el testimonio prof�tico de que Jehov� lo ha o�do. El coraz�n conf�a en Jehov�, hab�a hallado ayuda, y as� gozo y alabanza. Entonces el Mes�as est� plenamente unido a los justos. Jehov� es su fuerza, �l es el Mes�as. Una vez establecido esto, se expresa el deseo prof�tico de los piadosos, seg�n el Esp�ritu de Cristo, de que Jehov� tenga a Su pueblo y bendiga Su heredad (porque la fe de la bendici�n del pacto y la relaci�n recorre toda esta parte de los Salmos), que �l tambi�n debe alimentarlos y levantarlos para siempre. Liberaci�n, bendici�n, alimentaci�n y exaltaci�n inalterable, tales son los frutos esperados de la venida de Jehov� en poder.

En los Salmos 25, 26 hemos visto los grandes principios morales de la confianza en Jehov� (aun cuando se confiesan los pecados) y la integridad. En estos �ltimos tenemos m�s el sentido personal de condici�n, y camino o fundamento de la relaci�n con Dios, bellamente mostrado en el primero. parte de Salmo 27 en el �nico deseo del coraz�n; y en la segunda parte, en la s�plica conmovedora, me ense�aste a buscar tu rostro; mi coraz�n, en aquellos tiempos de instrucciones divinas, dec�a: Lo buscar�: Se�or, �lo apartar�s ahora que estoy en aflicci�n, cuando T� me ense�aste a buscarlo y a confiar en �l? La verdad es la misma, pero en la primera parte es el �nico deseo moral del coraz�n; en el �ltimo, la exhortaci�n de Dios a hacerlo se convierte en un recurso para el alma. Jehov� mismo es su refugio, y les ha ense�ado a buscarlo.

En Salmo 28 se siente m�s la presi�n del mal, y se espera el juicio venidero y la separaci�n del remanente. Esta separaci�n caracteriza todo el testimonio de Dios relacionado con la venida del Mes�as, circunstancia que nos ayudar� a ver la unidad del remanente en la mente de Dios. No s�lo fue anunciado prof�ticamente, como en Isa�as 65 , sino que Juan el Bautista caracteriza por ello la venida del Mes�as, siendo en vano ser hijos de Abraham ( Mateo 3:9 ); como de hecho sucedi� espiritualmente: solo que �l, siendo rechazado y a�n no viniendo en poder, entonces fueron agregados como "los salvos", Hechos 2:47 , a la asamblea.

Por eso, sin embargo, Pedro lo retoma ( Hechos 2:40 ). El mismo Se�or los recibe como ovejas suyas ( Juan 10 ). Pablo tambi�n basa su argumento en Romanos 11 sobre esto.

Información bibliográfica
Darby, John. "Comentario sobre Psalms 28". "Sinopsis del Nuevo Testamento de Juan Darby". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/dsn/psalms-28.html. 1857-67.