Bible Commentaries
1 Corintios 3

Comentario de Ellicott para Lectores en InglésComentario de Ellicott

Versículo 1

III.

(1) Y yo . Una vez m�s, como en 1 Corintios 2:6 , el Ap�stol muestra c�mo los principios generales que acaba de explicar se ejemplificaron en su propia conducta. En los vers�culos finales de 1 Corintios 2 San Pablo ha enunciado que el m�todo general de ense�ar la verdad espiritual depende de los poderes receptivos de los que est�n siendo ense�ados.

Ahora procede a se�alarles que su propio car�cter, como carente de espiritualidad, fue el verdadero obst�culo para que les ense�ara la verdad espiritual superior que puede llamarse �la sabidur�a� del evangelio.

Como carnal. - Mejor, por ser carnal. Nuestra versi�n puede parecer implicar que el Ap�stol les habl� como si fueran carnales, aunque en realidad no lo eran; pero la fuerza del pasaje es que en verdad eran carnales, y que el Ap�stol les ense�� no como si fueran tales, sino como lo son. �Carnal� es aqu� lo opuesto a �espiritual� y no implica ninguna referencia a lo que com�nmente llamar�amos pecado carnal.

Beb�s en Cristo. - Esto es lo opuesto al �adulto� en 1 Corintios 2:6 , a quien se le podr�a ense�ar la �sabidur�a�. (Ver tambi�n Colosenses 1:28 , �plena Colosenses 1:28 en Cristo�). Puede ser una indicaci�n interesante de la �virilidad� de S.

El car�cter de Paul y su alta estimaci�n en los dem�s, que constantemente usa las palabras "beb�" e "infancia" en un sentido despectivo. (Ver Romanos 2:20 ; G�latas 4:3 ; Efesios 4:14 .)

Versículo 2

Leche ... carne. - El uso de la palabra "infante" sugiere naturalmente estas dos im�genes para la sabidur�a superior y para las verdades m�s simples del evangelio, respectivamente.

Hasta ahora no hab�as podido. - Mejor, porque a�n no pudiste. Hasta este punto el Ap�stol ha estado hablando de la condici�n en la que encontr� a los corintios cuando lleg� primero a Corinto, y procede de esto para reprenderlos por continuar en esta condici�n. No los culpa por haber sido "beb�s" al principio, pero s� en el siguiente pasaje los culpa por no haber salido de la infancia.

Versículos 2-3

Tampoco ahora pod�is, porque todav�a sois carnales. - Mejor, pero ni siquiera ahora puedes, porque todav�a eres carnal. Es por esta falta de crecimiento - por haber continuado hasta ahora en las mismas condiciones - que el Ap�stol les reprocha; y muestra que la falta que encuentran en �l por no haberles dado una ense�anza m�s avanzada realmente est� en su propia puerta.

Versículo 3

Por mientras. - Mejor, pues ya que la hay.

Como hombres. - Mejor, a la manera del hombre , es decir, a la manera meramente humana y no a la manera espiritualmente iluminada. En Romanos 3:5 ; G�latas 1:2 , tambi�n Romanos 15:5 , la condici�n opuesta se expresa mediante la misma part�cula griega que se usa con el nombre de nuestro Se�or, "seg�n Jesucristo".

Versículo 4

Uno dice: Yo soy de Pablo. - Estas y las siguientes palabras explican exactamente lo que el Ap�stol quiere decir con "ser carnal" y caminar de una manera meramente humana. Solo dos de las facciones, las de Pablo y las de Apolos, se mencionan como tipos del resto. El esp�ritu conflictivo era el mismo en todas y cada una de las "partes", pero la diferencia particular entre la ense�anza de la sabidur�a superior y las verdades m�s simples del evangelio se ilustra mejor con estos dos.

La selecci�n para reprender a aquellos que se llamaban a s� mismos por el propio nombre del Ap�stol fue, sin duda, la intenci�n de �l para mostrar que no se trataba de celos personales de su parte. Especialmente condena a los que magnificaron su nombre. Es solo por su Maestro que est� celoso.

�No sois carnales? - Mejor, �no sois s�lo hombres? llevando a cabo la idea expresada en 1 Corintios 3:3 .

Versículo 5

El Ap�stol ahora procede a explicar ( 1 Corintios 3:5 ) cu�l es la verdadera posici�n y obra de los ministros cristianos. Afirma que todos por igual, tanto los que ense�an las verdades m�s simples como los que se basan en ese conocimiento primario, son s�lo instrumentos en la mano de Dios; y en 1 Corintios 3:10(respondiendo a aquellos que se burlaron y despreciaron su ense�anza simple en comparaci�n con la instrucci�n superior de Apolos) se�ala que aunque todos son solo instrumentos usados ??por Dios, sin embargo, si hay alguna diferencia de honor o utilidad en los diversos tipos de obra para la cual Dios usa a sus ministros, la obra mayor es plantar la semilla o poner los cimientos. Solo puede haber una base, es igualmente necesaria e invariable, muchas otras pueden construir sobre ella, con material variado y con resultados diferentes.

�Qui�n es entonces Pablo y qui�n es Apolos? - Mejor, �qu� es entonces Apolos? �Qu� es Paul? ya estas preguntas abruptas y sorprendentes, la respuesta es: "Simplemente aquellos a quienes Cristo us�, seg�n dio a cada uno sus propios poderes peculiares como medio de su conversi�n". (Tal es la fuerza de la palabra "cre�do" aqu� como en Romanos 13:11 ). Por tanto, es absurdo que se les exalte como jefes de partido. Son s�lo instrumentos, cada uno usado como el gran Maestro pens� que era mejor.

Versículo 6

Yo plant�, Apolos reg�. - Mediante una imagen tomada de los procesos de la agricultura, el Ap�stol explica la relaci�n entre su ense�anza y la de Apolos, y c�mo todos los resultados provienen de Dios. Esta indicaci�n de que San Pablo fue el fundador, y Apolos el subsecuente instructor, de la Iglesia de Corinto, est� en completa armon�a con lo que leemos de la historia temprana de esa Iglesia en Hechos 18:27 ; Hechos 19:1 .

Despu�s de que San Pablo estuvo en Corinto ( Hechos 18:1 ), Apolos, quien hab�a sido ense�ado por Aquila y Priscila en �feso, lleg� all� y "les ayud� mucho a los que ya hab�an cre�do".

Versículo 7

Cualquier cosa , es decir, �cualquier cosa digna de menci�n� ( 1 Corintios 10:19 ; G�latas 2:6 ; G�latas 6:3 ).

Versículo 8

Son uno. - El sembrador y el bebedero son uno en el sentido de que ambos trabajan por la misma causa. "Pero", dice el Ap�stol (no "y", como en nuestra versi�n), "cada uno recibir� su recompensa de Dios, no del hombre, seg�n su trabajo". Hay una individualidad as� como una unidad en el trabajo del ministerio. Sin embargo, esto no es algo que los hombres noten, pero el gran Maestro lo reconocer�.

Versículo 9

Tres veces en este vers�culo el Ap�stol repite el nombre de Dios con �nfasis, para explicar e imprimir la afirmaci�n del vers�culo anterior, que los hombres deben reconocer la unidad, y solo Dios la diversidad, en la obra y el oficio ministerial. � Somos colaboradores de DIOS; t� eres el campo de DIOS, la casa de DIOS ". As�, la imagen se altera repentinamente de la agricultura a la arquitectura, ya que esta �ltima puede ser m�s amplia, e ilustrar� mejor la gran variedad de obras de las que el Ap�stol procede a hablar posteriormente.

Este repentino cambio de met�fora es una caracter�stica del estilo de San Pablo; un ejemplo similar se encuentra en 2 Corintios 10:4 , donde se usa la ilustraci�n dada de la arquitectura en lugar de la met�fora militar que se emplea en los primeros vers�culos de ese pasaje. Ver tambi�n 1 Corintios 9:7 , y Efesios 3:17 , y Colosenses 2:6 , donde hay la introducci�n de tres im�genes distintas en r�pida sucesi�n en tantas oraciones. Se ha sugerido que posiblemente el uso de la palabra "campo", en el griego "Georgion", fue la causa de que el nombre cristiano "George" se hiciera tan popular en la Iglesia.

Versículo 10

Seg�n la gracia de Dios. - El Ap�stol, que est� a punto de hablar de s� mismo como "un sabio constructor de obras maestras", comienza su declaraci�n con estas palabras para mostrar que no se est� entregando a la alabanza a s� mismo, sino simplemente se�alando lo que Dios le ha dado la gracia de hacer. . (Ver Romanos 1:5 ; Romanos 12:3 )

Sabio , es decir, h�bil o juicioso.

Otro edifica sobre ella. - La secuencia del trabajo aqu� es la misma que en la plantaci�n y riego de la ilustraci�n anterior. El uso de la palabra indefinida �otro� evita lo que podr�a considerarse la repetici�n invidiosamente frecuente del nombre de Apolos, y tambi�n indica que tambi�n hubo otros que vinieron despu�s de Pablo, como se desprende de 1 Corintios 4:15 . (Ver Romanos 15:20 .)

Pero cada uno mire c�mo sobreedifica. - Mejor, pero que cada uno vea c�mo edifica sobre �l. El argumento en este vers�culo y en el siguiente es que solo puede haber un fundamento en el edificio espiritual, a saber, el Jesucristo personal. Ese fundamento que ha puesto el Ap�stol. Nadie puede alterarlo o agregarle como base; pero puede haber una inmensa variedad de materiales con los que quienes vengan despu�s de la colocaci�n de los cimientos puedan construir la superestructura.

Por lo tanto, su propio trabajo y �c�mo� construyen ( es decir, con qu� materiales), y no el �nico fundamento de una vez por todas e inalterablemente establecido, debe ser el tema de su pensamiento y cuidado.

Versículo 12

Ahora si alg�n hombre ... - Mejor, pero si alg�n hombre.

Piedras preciosas. - No gemas, sino piedras grandes y costosas, como el m�rmol. �Heno�, hierba seca que se utiliza para rellenar las grietas de las paredes. �Rastrojo�, tallos con las mazorcas de ma�z cortadas y que se usan para hacer un techo de paja.

Se han hecho muchos intentos ingeniosos para aplicar las im�genes de este pasaje en detalle a varias doctrinas o virtudes cristianas, pero parece mejor considerarlo como un esquema amplio y que presenta al lector las dos grandes ideas del trabajo permanente y ef�mero, y el sorprendente contraste entre ellos. La verdad que se presenta es principalmente, si no exclusivamente, para los maestros. La imagen est� tomada de lo que habr�a visto el ojo de un viajero en �feso, donde St.

Pablo ahora estaba, o en Corinto, donde su carta iba a ser le�da por primera vez. Es un contraste tal como puede verse (aunque no precisamente en la misma forma sorprendente de diferencia) en el Londres de nuestros d�as. Los majestuosos palacios de m�rmol y granito, con techo y columna resplandecientes con adornos de oro y plata, y cerca de ellos las miserables chozas de los pobres y marginados, las paredes hechas de listones de madera, con los intersticios rellenos de paja y un techo de paja arriba.

Entonces surgi� ante la visi�n del Ap�stol la idea de que una ciudad fuera visitada por una gran conflagraci�n, como la desolada Corinto en la �poca de Mumio. Las mezquinas estructuras de madera perecedera y paja se consumir�an por completo, mientras que, como sucedi� realmente en Corinto, los poderosos palacios y templos permanecer�an en pie despu�s de que el fuego se hubiera agotado. As�, dice San Pablo, ser� con la obra de los maestros cristianos cuando "el d�a del Se�or se revele en fuego". El fuego de ese d�a probar� y pondr� a prueba la calidad de cada obra.

Versículo 13

Revelado por el fuego. - Mejor, revelado en fuego. Para el alcance general de este pasaje, vea 1 Corintios 3:12 arriba. El d�a de la venida del Se�or siempre se representa as� como estallando repentinamente con una r�faga de luz y un resplandor de fuego sobre la tierra. (Ver Malaqu�as 3:1 ; Malaqu�as 4:1 ; 2 Tesalonicenses 1:8 ; 2 Tesalonicenses 2:8 )

Versículo 14

Esta es la aplicaci�n general a los maestros cristianos de lo que ha sucedido antes. Los que han construido bien tendr�n su recompensa en su trabajo habiendo sobrevivido a la prueba del fuego; los que hayan construido de otra manera lo perder�n todo, su trabajo, que deber�a haber quedado como recompensa, perecer� en el fuego, y ellos mismos ser�n como hombres que solo logran escapar corriendo a trav�s de una conflagraci�n, dejando todo lo que era suyo. para ser destruido. (Ver Marco 9:49 .)

Versículo 15

As� como. - Estas palabras nos recuerdan que todo el pasaje, y especialmente la referencia al fuego, debe considerarse metaf�rico y no debe entenderse en un sentido literal y f�sico. Olvidando esto, los te�logos romanos han desarrollado a partir de estas palabras la doctrina del purgatorio.

Versículo 16

El templo de Dios. - Desde el pensamiento de los grandes edificios en general, el Ap�stol pasa al caso particular de un edificio que no s�lo es espl�ndido sino �santo� - el templo de Dios - recordando as� al lector que los ricos y valiosos metales y piedras de los que se habl� anteriormente. son para representar logros espirituales. Introduce el pasaje con las palabras "No sab�is", lo que implica que su conducta era tal que s�lo pod�an perseguir aquellos que ignoraban u olvidaban la verdad que ahora les recuerda.

Versículo 17

Si alguno profana. - Mejor, si alguno destruye - lo contrario de "edificar", que deber�a ser obra del maestro cristiano; la imagen arquitect�nica todav�a est� a la vista.

Qu� templo sois. - Literalmente, los cuales son y e, �que� se refiere m�s a lo santo que al templo; el argumento es que como son "santos" por la morada del Esp�ritu de Dios, por lo tanto son el templo de Dios. Como Dios orden� que se infligiera el castigo de muerte a quien profanara el Templo actual (ver �xodo 28:43 ; Lev�tico 16:2 ), porque era santo para el Se�or, y Su presencia moraba all�; as� que ellos, teniendo el mismo Esp�ritu en ellos, eran tambi�n un templo santo para el Se�or, y Dios no dejar�a impune a quien destruyera o estropeara este templo espiritual.

Versículo 18

Pasando de la diferencia entre el trabajo de un maestro y el de otro, que lo ocupa desde 1 Corintios 3:5 , el Ap�stol vuelve ahora al tema del que se bifurc� all� (la magnificaci�n de un maestro sobre otro), y procede a mostrar ( 1 Corintios 3:18 ) que la mera sabidur�a humana no tiene valor en s� misma para prop�sitos espirituales y, por lo tanto, que la posesi�n de ella por s� sola no es motivo para la exaltaci�n del maestro que est� dotado de ella. Para conocer el significado completo de la "sabidur�a" de la que habla el Ap�stol aqu�, v�ase 1 Corintios 1:20 .

Que se vuelva insensato , es decir, ante los ojos del mundo, para que pueda llegar a ser "sabio" ante los ojos de Dios.

Versículo 19

Con Dios. - Mejor, a los ojos de Dios ( Romanos 2:13 ).

Porque est� escrito. - Mediante dos pasajes, uno de Job y otro de los Salmos, San Pablo prueba la verdad de su afirmaci�n anterior sobre la estimaci�n de Dios de la mera "sabidur�a mundana". Se puede notar que con la excepci�n de la referencia en Santiago 5:11 a la "proverbial paciencia" de Job, de la cual el escritor dice "hab�is o�do " (no le�do ) , esta es la �nica alusi�n al libro de Job. oa Job en el Nuevo Testamento.

Versículo 21

Por lo tanto. - No por lo mencionado, sino por presentar lo que est� por mencionar. Que cese el esp�ritu de fiesta. No se degraden llam�ndose por los nombres de ning�n hombre, porque todo es suyo, entonces los maestros solo existen para ustedes. El entusiasmo del Ap�stol, cuando habla de los privilegios de los cristianos, lo lleva m�s all� de la mera afirmaci�n necesaria para la conclusi�n l�gica del argumento, y amplia la idea que se detiene, en unas breves e impresionantes declaraciones, sobre las posesiones ilimitadas. - en la vida y en la muerte, en la vida presente y en la futura - que pertenecen a los que est�n unidos a Cristo.

Pero deben recordar que todo esto es de ellos porque ellos "son de Cristo". Son poseedores porque est�n pose�dos por �l. "Su servicio es su perfecta libertad ", como dice la Colecta en el Libro de Oraci�n en Ingl�s, o, m�s sorprendentemente, como ocurre en la versi�n latina, "A quien servir, es reinar".

Versículo 23

Y Cristo es de Dios. - Probablemente estas palabras fueron agregadas, no solo como el gran cl�max del ascenso gradual que el pensamiento y el lenguaje del Ap�stol han ido en todo el pasaje, sino como evitando cualquier peligro de la parte que se llamaba a s� misma por el nombre de Cristo, arrog�ndose cualquier cosa para ellos mismos de las palabras anteriores, "Vosotros sois de Cristo", si el pasaje hubiera concluido con ellos.

Cristo es de Dios como mediador (como Juan 14:28 ; Juan 17:3 ) No hab�a peligro, en esa temprana edad de la Iglesia, de que estas palabras fueran mal entendidas (como algunos han tratado de entenderlas mal desde entonces) como en el al menos implicando una falta de identidad absoluta entre el Hijo, en lo que respecta a su naturaleza divina, y el Padre.

Información bibliográfica
Ellicott, Charles John. "Comentario sobre 1 Corinthians 3". "Comentario de Ellicott para Lectores en Inglés". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/ebc/1-corinthians-3.html. 1905.