Bible Commentaries
Isaías 33

Comentario 'A través de la Biblia' de F.B. MeyerComentario de Meyer

Versículos 1-12

Dios exaltado en juicio

Isa�as 33:1

Aqu� tenemos la predicci�n final contra Senaquerib. Hab�a actuado de manera muy traicionera al regresar contra Jerusal�n, aunque hab�a tomado un gran rescate para no ser molestado, 2 Reyes 18:16 . En Isa�as 33:2 Isa�as recuerda la oraci�n diaria ofrecida por los sacerdotes en el Templo, cuando se enteraron del firme avance del enemigo.

Era muy cierto que las naciones hab�an huido ante el temido asirio, Isa�as 33:3 ; pero en este caso esos precedentes se revertir�an, Isa�as 33:4 , porque el Se�or aparecer�a por Su pueblo, Isa�as 33:5 .

Esa fue una dulce seguridad que el profeta le dio a Ezequ�as en Isa�as 33:6 - para sostener su esp�ritu a trav�s de la tensi�n de la invasi�n descrita en Isa�as 33:7 . Dios siempre nos da una promesa en v�speras de la prueba. Vive sus barcos antes de exponerlos a la tormenta.

Aunque Dios a veces parece estar dormido cuando llega la hora de la liberaci�n de su pueblo, no se demorar� ni un solo momento. Estar de buen �nimo; �Cabalgar� sobre las alas del viento para socorrerte!

Versículos 13-24

la recompensa de los justos

Isa�as 33:13

El fuego devorador y las quemaduras eternas de Isa�as 33:14 son claramente los emblemas de la presencia divina. Los justos moran en Dios como la zarza que fue bautizada en la gloria Shekinah y no fue consumida. El fuego de su santa presencia los santifica al mismo tiempo que los protege de sus enemigos.

Comp�rese con Salmo 15:1 . Se caracterizan por su andar, hablar, el pu�o cerrado, los o�dos tapados y los ojos cerrados. Habitan en alturas que son inaccesibles para el enemigo, y ning�n opresor puede cortarles el suministro de man� escondido o agua de vida. Ezequ�as, predice Isa�as 33:17 en Isa�as 33:17 , pronto se quitar�a el cilicio y los ciudadanos dejar�an de estar encerrados en una ciudad sitiada.

Deber�an recordar el terror de esa hora como un mal sue�o, recordado para ser descartado y olvidado. Si�n no ten�a r�o, pero Dios ser�a todo lo que un r�o era para otras ciudades, sin las desventajas del agua navegable que podr�a servir para el paso de una flota enemiga. Aseg�rese de hacer de Dios su juez, legislador y rey. Entonces, a pesar de que cojees en la debilidad, recoger�s tu parte en el gran bot�n de la victoria.

Información bibliográfica
Meyer, Frederick Brotherton. "Comentario sobre Isaiah 33". "Comentario 'A través de la Biblia' de F.B. Meyer". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/fbm/isaiah-33.html. 1914.