Bible Commentaries
Proverbios 31

Comentario 'A través de la Biblia' de F.B. MeyerComentario de Meyer

Versículos 1-9

la mujer digna

Proverbios 31:1

En estas palabras del rey Lemuel, notamos la influencia de una madre en la educaci�n de su hijo. Una mujer nunca est� m�s ocupada que en advertir a su hijo contra las seducciones del placer y en darle un alto sentido de lo que es correcto. Los pecados de la carne han sido la trampa peculiar de los personajes reales, impidi�ndoles defender la causa de los desolados y ministrar juicio a los pobres y necesitados.

�Qu� contraste con la gloria de la soberan�a de Jes�s! Cuando Savonarola predic� con su ardiente elocuencia en Florencia, la gente grit�: "�Jes�s es nuestro Rey, solo Jes�s!" Eso es lo que todos necesitamos. �l es el Rey de quien sus s�bditos nunca deben avergonzarse.

No podemos interpretar Proverbios 31:6 y Proverbios 31:7 como un mandato divino, sino m�s bien como una admisi�n de que el alcohol imparte un est�mulo temporal a los desesperados y moribundos. Debemos recordar Proverbios 20:1 .

A�n hablando del rey, Lemuel muestra c�mo se puede emplear mejor su influencia, Proverbios 31:8 y Proverbios 31:9 . Pero todos tenemos la misma obligaci�n y privilegio.

Versículos 10-31

"Sus obras la alaban"

Proverbios 31:10

La mujer ideal, como se describe aqu�, es una esposa. Ella es la estancia y la confianza de su marido. No solo cuando ella llega como una joven esposa a su hogar, en la gloria y la belleza de su juventud, ni solo cuando su belleza femenina despierta su admiraci�n, sino que mucho despu�s y hasta el final de la vida le hace bien. Ella siempre esta ocupada. Ella es ahorrativa al administrar sus ganancias. Si �l le trae el dinero, ella lo gasta econ�micamente para su bien com�n.

Cuando un amigo m�o ten�a sesenta a�os, su esposa lo visit� con una anualidad que ella hab�a comprado para ambos, mediante la sabia administraci�n del dinero que le hab�a confiado durante cuarenta a�os de vida matrimonial.

Es en el hogar donde se re�nen las fuerzas del hombre para la vida p�blica. La mujer del hogar comunica la inspiraci�n y la fuerza que lo hacen �conocido en las puertas�. Su lealtad, consejo y ahorro secretos y discretos inspiran un aprecio cada vez m�s profundo; para que el hombre que la eligi� en la primavera diga de ella en medio de las nieves de la vejez: "Otras mujeres pueden ser buenas y verdaderas, pero ' t� las superas a todas '".

Información bibliográfica
Meyer, Frederick Brotherton. "Comentario sobre Proverbs 31". "Comentario 'A través de la Biblia' de F.B. Meyer". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/fbm/proverbs-31.html. 1914.