Este salmo comienza y termina con Aleluya. Contiene extractos selectos de varios salmos, que han sido seleccionados como las flores de un jard�n se juntan para un ramo. Los argumentos a favor de la alabanza son tres: la gloria de Dios en la naturaleza, Salmo 135:5 ; Su trato con Israel, Salmo 135:8 ; el contraste de su naturaleza gloriosa con los �dolos, Salmo 135:15 .
Note los argumentos aducidos para estimular nuestra alabanza: que Dios es bueno; que la alabanza es agradable; que ha elegido a su pueblo para que sea su tesoro peculiar; que �l es tan grande como bueno; que tomar� nuestra parte contra nuestros enemigos, etc . La moraleja de todo esto es que si queremos alabar a Dios correctamente y con entusiasmo, debemos reunir cuidadosamente nuestros materiales y meditar en todos sus tratos con nosotros. Estos son combustible para la llama. Pero, �cu�ntos m�s razones que el salmista ten�a est�n ah� para nosotros para alabarlo, que han sido adoptado en su familia y de hecho coherederos con Cristo!
Los hombres se vuelven como los dioses a los que sirven
Salmo 135:13
�Qu� contraste entre nuestro Dios y los �dolos! Su boca habla palabras de gracia; Sus ojos siguen cada uno de nuestros movimientos y observan nuestro sue�o; Sus o�dos est�n abiertos a la m�s leve llamada. Los que lo amamos y lo adoramos nos asemejamos a �l, como el id�latra se asemeja a su �dolo de piedra.
La cu�druple divisi�n de la raza elegida merece nuestro pensamiento, Salmo 135:19 . Algunos pertenec�an a la gran comunidad de Israel, otros a la familia sacerdotal de Aar�n, algunos a las filas m�s humildes y humildes de Lev�, y algunos eran pros�litos que simplemente tem�an al Se�or; pero nadie pod�a ser excusado de la ofrenda de alabanza.
Seamos quienes seamos y seamos, nunca dejemos de agregar nuestra cuota de adoraci�n a ese c�ntico que Juan nos dice que escuch� surgir de todos en el cielo y en la tierra, debajo de la tierra y en el mar, Apocalipsis 5:13 .
Información bibliográfica Meyer, Frederick Brotherton. "Comentario sobre Psalms 135". "Comentario 'A través de la Biblia' de F.B. Meyer". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/fbm/psalms-135.html. 1914.
Versículos 1-12
El maravilloso poder de Dios
Salmo 135:1
Este salmo comienza y termina con Aleluya. Contiene extractos selectos de varios salmos, que han sido seleccionados como las flores de un jard�n se juntan para un ramo. Los argumentos a favor de la alabanza son tres: la gloria de Dios en la naturaleza, Salmo 135:5 ; Su trato con Israel, Salmo 135:8 ; el contraste de su naturaleza gloriosa con los �dolos, Salmo 135:15 .
Note los argumentos aducidos para estimular nuestra alabanza: que Dios es bueno; que la alabanza es agradable; que ha elegido a su pueblo para que sea su tesoro peculiar; que �l es tan grande como bueno; que tomar� nuestra parte contra nuestros enemigos, etc . La moraleja de todo esto es que si queremos alabar a Dios correctamente y con entusiasmo, debemos reunir cuidadosamente nuestros materiales y meditar en todos sus tratos con nosotros. Estos son combustible para la llama. Pero, �cu�ntos m�s razones que el salmista ten�a est�n ah� para nosotros para alabarlo, que han sido adoptado en su familia y de hecho coherederos con Cristo!
Versículos 13-21
Los hombres se vuelven como los dioses a los que sirven
Salmo 135:13
�Qu� contraste entre nuestro Dios y los �dolos! Su boca habla palabras de gracia; Sus ojos siguen cada uno de nuestros movimientos y observan nuestro sue�o; Sus o�dos est�n abiertos a la m�s leve llamada. Los que lo amamos y lo adoramos nos asemejamos a �l, como el id�latra se asemeja a su �dolo de piedra.
La cu�druple divisi�n de la raza elegida merece nuestro pensamiento, Salmo 135:19 . Algunos pertenec�an a la gran comunidad de Israel, otros a la familia sacerdotal de Aar�n, algunos a las filas m�s humildes y humildes de Lev�, y algunos eran pros�litos que simplemente tem�an al Se�or; pero nadie pod�a ser excusado de la ofrenda de alabanza.
Seamos quienes seamos y seamos, nunca dejemos de agregar nuestra cuota de adoraci�n a ese c�ntico que Juan nos dice que escuch� surgir de todos en el cielo y en la tierra, debajo de la tierra y en el mar, Apocalipsis 5:13 .