Las im�genes de la magn�fica escena con la que se abre este cap�tulo est�n quiz�s tomadas del derrocamiento del fara�n en el Mar Rojo, que, cuando las ricas l�neas de un amanecer oriental iluminaban sus aguas, parec�a un mar de vidrio mezclado con fuego. As�, junto al mar cristalino del Tiempo, de cuya superficie se habr�n quitado todos los rastros de tormenta y en el que romper� la ma�ana eterna, nosotros, que por gracia hemos vencido, celebraremos la victoria final de Dios.
Cantaremos un himno en el que el hebreo y el cristiano, los hijos de la antigua dispensaci�n y de la nueva, las almas que han visto a trav�s de un espejo oscuramente y los que han visto cara a cara, se regocijar�n juntos.
Un d�a veremos la justicia de todo lo que Dios ha hecho, Apocalipsis 15:4 . Todos sus caminos son justos y verdaderos, ya sea que nuestro pobre sentido humano lo detecte o no. Atrev�monos a afirmarlo incluso ahora. Reflexiona sobre ese gran nombre: Rey de todos los tiempos , Apocalipsis 15:3 , r.
v. Solo �l es santo; necesitamos la limpieza perfecta y la justicia que �l nos da, para que nos atrevamos a estar en Su presencia. Desde esta visi�n radiante, nos volvemos tristemente hacia el destino del mundo imp�o que rechaza a Cristo. Ver Apocalipsis 15:1 ; Apocalipsis 14:1 ; Apocalipsis 13:1 ; Apocalipsis 12:1 ; Apocalipsis 11:1 ; Apocalipsis 10:1 ; Apocalipsis 9:1 ; Apocalipsis 8:1 .
Información bibliográfica Meyer, Frederick Brotherton. "Comentario sobre Revelation 15". "Comentario 'A través de la Biblia' de F.B. Meyer". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/fbm/revelation-15.html. 1914.
Versículos 1-8
el c�ntico de Mois�s y del Cordero
Apocalipsis 15:1
Las im�genes de la magn�fica escena con la que se abre este cap�tulo est�n quiz�s tomadas del derrocamiento del fara�n en el Mar Rojo, que, cuando las ricas l�neas de un amanecer oriental iluminaban sus aguas, parec�a un mar de vidrio mezclado con fuego. As�, junto al mar cristalino del Tiempo, de cuya superficie se habr�n quitado todos los rastros de tormenta y en el que romper� la ma�ana eterna, nosotros, que por gracia hemos vencido, celebraremos la victoria final de Dios.
Cantaremos un himno en el que el hebreo y el cristiano, los hijos de la antigua dispensaci�n y de la nueva, las almas que han visto a trav�s de un espejo oscuramente y los que han visto cara a cara, se regocijar�n juntos.
Un d�a veremos la justicia de todo lo que Dios ha hecho, Apocalipsis 15:4 . Todos sus caminos son justos y verdaderos, ya sea que nuestro pobre sentido humano lo detecte o no. Atrev�monos a afirmarlo incluso ahora. Reflexiona sobre ese gran nombre: Rey de todos los tiempos , Apocalipsis 15:3 , r.
v. Solo �l es santo; necesitamos la limpieza perfecta y la justicia que �l nos da, para que nos atrevamos a estar en Su presencia. Desde esta visi�n radiante, nos volvemos tristemente hacia el destino del mundo imp�o que rechaza a Cristo. Ver Apocalipsis 15:1 ; Apocalipsis 14:1 ; Apocalipsis 13:1 ; Apocalipsis 12:1 ; Apocalipsis 11:1 ; Apocalipsis 10:1 ; Apocalipsis 9:1 ; Apocalipsis 8:1 .