Bible Commentaries
Proverbios 24

La Biblia Anotada de GaebeleinAnotaciones de Gaebelein

Versículos 1-34

CAP�TULO 24 Continuaci�n de las instrucciones

En las instrucciones finales de este cap�tulo encontramos primero una descripci�n de los hombres malvados. Su coraz�n estudia la destrucci�n; sus labios hablan maldad. Este tema se menciona repetidamente en este cap�tulo. En Proverbios 24:15 al hombre malo que no espere al justo y no saquee su lugar de descanso.

El Se�or cuida de los justos; puede ser vencido por las desgracias siete veces, pero se levantar� de nuevo. Diferente es con el malvado cuando cae en la maldad. Sin embargo, no debe haber regocijo por la ca�da del enemigo, ni alegr�a cuando tropez�. Esto desagrada al Se�or. A�n m�s alto es el mandamiento del Nuevo Testamento, �Ama a tus enemigos; ... no paguen a nadie mal por mal; ...

vencer el mal con el bien ". No debe preocuparse por los hombres malos ni por envidia ( Proverbios 24:1 y Proverbios 24:19 ). �Por qu� los justos deben tener envidia de los malvados en su prosperidad? El Salmo trig�simo s�ptimo entra m�s plenamente en esto; pero aqu� se da la misma respuesta de manera concisa.

Los malvados no tienen recompensa; su vela se apagar�. Su calamidad se levanta repentinamente, y �qui�n conocer� la ruina de ambos? lo que significa que el Se�or y el rey tratar�n con los malvados. Otro proverbio de este cap�tulo que mencionamos: �Si desfalleces en el d�a de la adversidad, tus fuerzas son peque�as� ( Proverbios 24:10 ). La hora de la prueba es la hora que trae la prueba. Cuando la adversidad trae abatimiento, y peor a�n, murmuraciones, es una evidencia de que el coraz�n no conf�a plenamente en el Se�or.

La �ltima secci�n de este cap�tulo se introduce con la declaraci�n, "Estas cosas tambi�n pertenecen a los sabios", o como se puede traducir, "Estos tambi�n son dichos de los sabios". El cap�tulo termina con una v�vida descripci�n de los perezosos. Su campo y vi�edo dan testimonio de su car�cter. Se cultivan con espinas y se cubren con ortigas y el muro de piedra se derriba. �Y por qu� todo esto? "Sin embargo, un poco de sue�o, un poco de sue�o, un poco de cruzar las manos en el sue�o". Una ilustraci�n de este perezoso se puede encontrar mil veces en nuestra propia tierra.

Información bibliográfica
Gaebelein, Arno Clemens. "Comentario sobre Proverbs 24". "La Biblia Anotada de Gaebelein". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/gab/proverbs-24.html. 1913-1922.