Bible Commentaries
Zacarías 2

La Biblia Anotada de GaebeleinAnotaciones de Gaebelein

Versículos 1-13

CAPITULO 2

1. El hombre del hilo de medir ( Zacar�as 2:1 )

2. El mensaje de la tercera visi�n nocturna ( Zacar�as 2:3 )

3. El reino glorioso ( Zacar�as 2:10 )

Zacar�as 2:1 . La tercera visi�n nocturna es una de la gloria venidera. El n�mero tres en la Palabra de Dios significa resurrecci�n, vida de entre los muertos. As� en Oseas, concerniente a Israel, �Despu�s de dos d�as nos revivir�s, y al tercer d�a nos resucitar�s� Oseas 6:2 .

En esta tercera visi�n, Zacar�as ve la gloriosa restauraci�n de Israel, que ha sido la carga de tantas profec�as, y la gloria que est� relacionada con esa restauraci�n. En esta visi�n nocturna, Zacar�as oye hablar de una restauraci�n y de una gloria que a�n no se ha cumplido en la historia del pueblo de Dios. Aquellos maestros de la Palabra que ven en las visiones nocturnas de Zacar�as nada m�s que la profec�a cumplida, no pueden responder satisfactoriamente a ciertas preguntas, y su �nico refugio debe ser la espiritualizaci�n de esta restauraci�n.

Otro pensamiento antes de abordar esta tercera visi�n. La visi�n de la restauraci�n llega despu�s de que los enemigos de Israel han sido derribados. Que la profec�a se cumpliera; profec�a sobre un remanente jud�o creyente y sufriente; profec�a concerniente a la angustia de Jacob, etc., se llevar� a cabo una restauraci�n simulada, generalmente llamada restauraci�n en la incredulidad. No puede haber ninguna duda de que tenemos el privilegio de ver el comienzo de esta restauraci�n de parte de la naci�n jud�a a la tierra de los padres en la incredulidad.

Es uno de los signos de la cercan�a de ese acontecimiento que la Iglesia espera, ora y espera: �nuestra reuni�n con �l�. El mundo y el cristiano tibio no lo ven, pero el que ama la Palabra y vive en la Palabra, tiene ojos para ver y o�do que oye, y sabe lo que vendr� pronto. La verdadera restauraci�n, sin embargo, solo vendr� como se ve tan claramente en estas visiones nocturnas despu�s de que los enemigos hayan sido vencidos, los cuernos derribados, la imagen aplastada, en otras palabras, despu�s de que el Se�or haya venido.

Primero est� el hombre con el hilo de medir. �l ser� testigo de la pr�xima ampliaci�n de Jerusal�n. Visiones similares donde tiene lugar la medici�n se encuentran en Ezequiel 41:1 , donde se mide el templo futuro, y en Apocalipsis 11:1 se le da a Juan una ca�a para medir el templo de Dios, que es el templo erigido por los jud�os en incredulidad durante el per�odo de la tribulaci�n. Aqu� est� la medida de la ciudad.

Zacar�as 2:3 . El �ngel que hab�a hablado con Zacar�as se encontr� con otro �ngel. Lleva el mensaje a Zacar�as, a quien se le llama "este joven". Se anuncia la pr�xima restauraci�n y ampliaci�n de Jerusal�n. La ciudad debe ser habitada como aldeas, lo que denota la paz y la seguridad que disfrutar� Jerusal�n en el d�a de su verdadera restauraci�n.

Ser� la tentaci�n para el enemigo, Gog y Magog, invadir la tierra. (Ver Ezequiel 38:1 ; Ezequiel 39:1 .) La invasi�n de Gog y Magog en Apocalipsis 20:1 es posterior al milenio; el de Ezequiel est� al comienzo del milenio [i.

e., fin de la tribulaci�n. Ed.]. Entonces Zacar�as oye en el mensaje que el Se�or mismo ser� un muro de fuego para Jerusal�n; �l ser� la gloria en medio de ella. Gloria y defensa se combinan, siempre van de la mano Isa�as 4:1 . Este no fue el caso en la Jerusal�n restaurada despu�s del cautiverio. Es completamente futuro.

�Qu� gloria ser� cuando todos los ojos lo vean, cuando su gloria visible se establezca una vez m�s en la tierra, desde la cual su conocimiento se esparce por la tierra hasta cubrirlo todo, como las aguas cubren el abismo! Habacuc 2:14 . Luego son convocados para regresar de la tierra del Norte. Millones de jud�os viven y sufren en la gran tierra del norte, Rusia.

En ese d�a regresar�n a la antigua patria. Ellos escapar�n de las garras de Babilonia, la Babilonia final. �l llama al remanente creyente la "ni�a de sus ojos". �l los guardar� y los guardar�.

Zacar�as 2:10 . Han llegado los tiempos del canto de Sofon�as 3:1 . Sion se regocija porque habita en medio de ellos Isa�as 12:1 . Entonces las naciones se unir�n al Se�or en ese d�a, no a la Iglesia, porque la Iglesia verdadera est� en gloria, pero se unir�n a Israel en el reino.

La tercera visi�n se cierra con una exhortaci�n similar a la de Habacuc 2:1 . Toda carne debe estar en silencio ante el Se�or. Ahora es el momento en que Dios guarda silencio. La carne habla ahora, porque es el d�a del hombre. Pero nuestro Dios vendr� y no callar� Salmo 60:1 . Entonces toda la carne, con sus frutos, tendr� que estar en silencio ante �l en ese d�a.

Información bibliográfica
Gaebelein, Arno Clemens. "Comentario sobre Zechariah 2". "La Biblia Anotada de Gaebelein". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/gab/zechariah-2.html. 1913-1922.