Bible Commentaries
Job 21

Versículos 1-34

Aqu�, como en el primer ciclo, Job respondi� no solo a Zofar, sino a todo el argumento. En primer lugar, puso en contra de su declaraci�n e ilustraciones el hecho patente para todos de que a menudo los malvados son pr�speros. Esta prosperidad la describi� en detalle. Es personal, ellos "viven" y "se vuelven poderosos". Se contin�a con sus hijos, que se establecen. Se manifiesta en sus posesiones, "sus casas est�n seguras".

"Su aumento es exitoso. Se ve en sus h�bitos, en la danza y el canto, y en las circunstancias generales de prosperidad. Es evidente en su muerte, porque no por mucho sufrimiento, sino en un momento, bajan al Seol. Todo esto es cierto a pesar de su impiedad. Han exiliado a Dios, no han buscado Su conocimiento, se han vuelto agn�sticos y han negado el beneficio de la oraci�n. Esta prosperidad, declar� Job, no se debe a ellos mismos. Su inferencia es que Dios lo hab�a otorgado y, por lo tanto, no hab�a castigado a los malvados como ellos hab�an declarado que lo hac�a.

Continuando con su respuesta, Job declar� que su filosof�a estaba totalmente equivocada al preguntar con qu� frecuencia es cierto que "se apaga la l�mpara de los imp�os". Supuso que podr�an responder que el juicio recae sobre sus hijos, y repudi� tal sugerencia declarando que el hombre que peca es el hombre que debe ser castigado, y que Dios no se complace en el castigo de la posteridad. Termin� su respuesta dirigi�ndose a ellos de manera m�s personal.

Con un toque de s�tira, sugiri� que hab�an aprendido su filosof�a de los viajeros y declar� que sus conclusiones estaban equivocadas. Por lo tanto, su intento de consuelo fue en vano, ya que sus respuestas conten�an falsedad. As� termina el segundo ciclo.