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Bible Commentaries
1 Corintios 4

Exposición de Gill de toda la BibliaExposición de Gill

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Introducción

Introducci�n a 1 Corintios 4.

Los jefes principales de este cap�tulo son la cuenta que debe haber tenido de los ministros del Evangelio; advierte contra la censuriedad, juicio de erupci�n, orgullo y auto-engreimiento; las inc�modas circunstancias y la situaci�n de los ministros del Evangelio por el bien de predicarlo; El afecto paternal del ap�stol a los corintios, y su autoridad sobre ellos; Su resoluci�n en sumisi�n a la voluntad de Dios de llegar a ellos, y la manera en que podr�a esperarse que vendr�a. El ap�stol se exhorta a tener una estima adecuada a los predicadores del Evangelio, y que porque son ministros y administradores de Cristo de su gracia, y fieles en el desempe�o de su deber, 1 Corintios 4:1 . Y como para �l, a quien incluye en el n�mero de los fieles dispensadores de la Palabra, no le import� el juicio sobre �l; Tampoco deber�a pensar que se ajustar� a �l, en parte porque era humano, y surgi� de un esp�ritu malo; y en parte porque se juzg� a s� mismo; Como tambi�n porque su conciencia testific� que �l hab�a cumplido fielmente su oficina; Y adem�s, el Se�or fue su juez, 1 Corintios 4:3 que en su propio tiempo lo juzgar�a; y �l, como cualquier otro ministro fiel, tendr� alabanza de Dios, y por lo tanto, antes de ese momento, los hombres no deben ser transmitidos por los hombres, 1 Corintios 4:5 y luego da una raz�n por la que �l Hab�a mencionado su propio nombre, y el nombre de Apolos, bajo expresiones figurativas, como lo hab�a hecho en el cap�tulo anterior, que podr�an ser ejemplos de modestia y humildad para que otros se siguen, 1 Corintios 4:6, 1 Corintios 4:7 y de manera ir�nica expresa la condici�n exaltada y floreciente en la que estaban, y que m�s desean que afirmar, y lo que lleva en ella una especie de negaci�n de ella, 1 Corintios 4:8 y contin�a representando la miserable condici�n de que se encontraban los fieles predicadores y seguidores de Cristo, y que para abonar el orgullo y la hinchaz�n de estos hombres, 1 Corintios 4:9 mostrando, que Estaba lejos de ser un tiempo reinante en las iglesias de Cristo; su final al mencionar cu�l, as� como la nitidez que hab�a usado en la reprobaci�n, no era para exponerlos a verg�enza, sino por su advertencia, 1 Corintios 4:14 y que lo hizo No llevarse demasiado al tratar de manera, de manera gratuita y redonda con ellos, aparece a partir de la relaci�n espiritual que se interpuso, como padre, 1 Corintios 4:15 y, por lo tanto, se convirti� en ellos como Los ni�os se someteran a �l, e imitarlo, 1 Corintios 4:16 y una instancia de su cuidado paterno de ellos, y amarlos, fue su enviando a Timoteo entre ellos, cuyo personaje le da , y cuyo trabajo y utilidad se�ala a ellos, 1 Corintios 4:17 y cierra el cap�tulo con una promesa de venir a ellos, si fuera de acuerdo con la voluntad de Dios; y el lugar m�s bien que estaba doblado sobre �l, porque algunos hab�an dado que no vendr�a, y se regocij�; Por tanto, para probarlos, ya sea que eran solo profesores verbales o poderosos, fue deseoso de venir a ellos, 1 Corintios 4:18 Dado que la religi�n no se encontraba en hablar, sino en una La experiencia poderosa de las cosas, 1 Corintios 4:20 que tem�a que estaba deseando en algunos por su conversaci�n externa; y, por lo tanto, pone una pregunta de qu� manera eligieron que �l deber�a venir a ellos, y por lo tanto deber�a ordenar su conversaci�n y comportamiento, 1 Corintios 4:21.

Versículo 1

Deje que un hombre nos rel�jemos, ... aunque el ap�stol hab�a dicho antes de decir que �l, y otros ministros del Evangelio, no eran nada con respecto a Dios, y, con respecto a las iglesias, eran suyas, por su uso y ventaja; Sin embargo, no deb�an ser pisoteados, y tratados con desprecio, sino ser conocidos, estimados y honrados por su trabajo, y en sus respectivos lugares, estaciones y personajes; Y aunque eran m�s que los hombres, sin embargo, no deb�an ser considerados como hombres privados, y en una capacidad privada, pero como en el cargo p�blico, y como predicadores p�blicos de la Palabra; y aunque no deb�an ser considerados como se�ores y maestros sobre la herencia de Dios, sino como sirvientes, pero no como todos, o como cualquier tipo de sirvientes, sino.

como los ministros, o sirvientes, de Cristo; como calificado, llamado, y enviado por �l para predicar su evangelio; como embajadores en su nombre, de pie en su lugar y en su lugar, y lo representa, y por lo tanto por su sake ser respetado y estimado; Y como tales que lo convierten en el tema de su ministerio, predic�ndolo y �l solo lo exaltan en su persona, oficinas, sangre, justicia y sacrificio, y las almas directas para �l solo por la vida y la salvaci�n:

y los administradores de los misterios de Dios; aunque no deben ser considerados como maestros de la familia, que tienen poder para disponer de las cosas en la familia a su propio placer; Sin embargo, deben ser considerados como administradores, los m�s altos oficiales de la Casa de Dios; a cuyo cuidado se cometen las cosas secretas y ocultas de Dios; cuyo negocio es dispensar, y dar a conocer, los misterios de la gracia divina; como respetar la doctrina de la trinidad, la encarnaci�n de Cristo, la uni�n de las dos naturalezas, divinas y humanas, en su persona, la uni�n de la Iglesia para �l, y la comuni�n con �l, con muchas otras cosas contenidas en el Evangelio que son Confianza con.

Versículo 2

Adem�s, se requiere en los administradores, ... al mencionar esa parte del car�cter de los predicadores del evangelio, como los administradores, se pone en cuenta al ap�stol, y as� se�ala lo que es principalmente necesario en tales personas: como,.

que un hombre se encuentra fiel; a la confianza repostada en �l; a su se�or y maestro que lo ha nombrado a esta oficina; y a las almas que est�n bajo su cuidado, y luego se puede decir que un ministro es as�, y que es su mayor gloria, cuando predica el evangelio puro de Cristo sin ninguna mezcla humana, las doctrinas e invenciones de los hombres; y todo el evangelio, declarando todo el consejo de Dios, manteniendo nada de vuelta, que puede ser rentable a las almas; Cuando �l busca no complacer a los hombres, sino a Dios; Y no su propia gloria, y el aplauso de los hombres, sino el honor de Cristo, y el bien de las almas, y un mayordomo tan fiel fue el propio ap�stol.

Versículo 3

Pero conmigo es una cosa muy peque�a, ... se puso de pie o nada, no ten�a ninguna cuenta con �l, de que los hombres y las censuras le pasaron por los hombres con respecto a su fidelidad en el ministerio, ni siquiera por el Corintios mismos:

que deber�a ser juzgado de ti; No es que el ap�stol rechaz�, o despreciaba el juicio de una iglesia de Cristo, correctamente dispuesta, y se reuni� con el miedo a Dios, intentar probar, y juzgar a su ministerio, y su fidelidad en �l; Pero no hizo ninguna cuenta de los suyos, y lo hab�a pedido como una mala influencia, la influencia de los falsos maestros, que hab�a insinuado muchas cosas entre ellos al prejuicio del car�cter del ap�stol; Por lo tanto, lo puso en nada y lo rechaz�, y se neg� correctamente a someterse a �l, y, de hecho, a cualquier mero juicio humano:

o del juicio del hombre: est� en el texto griego, "o del d�a del hombre": en distinci�n del d�a del Se�or, o el d�a del juicio; y porque los hombres tienen sus d�as declarados por juicio, y debido a la claridad de la evidencia, de acuerdo con qu� juicio debe proceder. Esto no es un cilicismo, como pens� Jerom, sino un hebra�smo; As� que la Septuaginta rinda ??? ????, en Jeremias 17:16.

?????? ????????, "D�a del hombre"; y muy frecuentemente en el Talmud R es la distinci�n de ???? ????, "Los juicios de Dios" y.

???? ???, "Los juicios de los hombres"; El ex el ap�stol estaba dispuesto a estar sujeto, pero no a este �ltimo; Apel� a los hombres a Dios; No le importaba lo que ning�n hombre pensaba ni dijo, o juzgado por �l; �l no solo fue indiferente al juicio de los corintios sobre �l, lo hicieron o no lo alabaron, sino de cualquier otra persona; y as� la versi�n sir�aca lo hace,.

?? ?? ?? ?? ???, "o de cualquier hombre": agrega,.

S�, no juzgo a la m�a propia; Porque, aunque como hombre espiritual, juzg� a todas las cosas, y as�, su conducta, estado y condici�n; examin� su propio coraz�n y formas, y pudo formar un juicio de lo que era e hizo; Sin embargo, eligi� no pararse y caer por su propio juicio; Y ya que no permanecer�a por su propio juicio, quien mejor se conoc�a, mucho menos estar�a sujeto a suyos, o cualquier juicio humano, que debe ser un mayor extra�o a �l; Y esto dijo, no tan consciente para s� mismo de cualquier infidelidad en su trabajo ministerial.

R T. BAB BAVA KOMA, FOM. 22. 2. 29. 1. 47. 2. 55. 2. 56. 1. 91. 1. 98. 1. Bava Metzia, FOL. 82. 2.

Versículo 4

Porque no s� nada por m� mismo, ... que debe entenderse con una restricci�n al sujeto que est� sobre, la fidelidad en el ministerio; De lo contrario, sab�a mucho por s� mismo del pecado permanente, y la corrupci�n de su naturaleza, que a veces hab�a encontrado muy fuerte y prevalente en �l, y de las enfermedades diarias de la vida; Pero en cuanto a su servicio ministerial, fue puro de la sangre de todos los hombres; Honestamente, declar� lo que sab�a para ser la mente de Dios, y no ocultaba nada que pudiera ser �til para los hombres; En esto ten�a una conciencia clara, vac�a de ofensa tanto hacia Dios como hacia los hombres,.

Sin embargo, no soy justo justificado; De toda la culpa y la culpa, que podr�a escapar de su conocimiento y observaci�n; Porque en muchas cosas, todo ofenda, y ning�n hombre puede entender todos sus errores; y puede haber algunos errores que el ap�stol no era privilegiado o consciente de; y siquiera estaba libre de todos, declara que, que una integridad tan no presente, en el desempe�o de su trabajo ministerial, no era el asunto de su justificaci�n ante Dios, ni depend�a de ella:

Pero �l que me juzga es el Se�or; O quien me adjunta a la vida eterna, justific�ndome a trav�s de la justicia de su Hijo, en la que solo deseo ser encontrada, viviendo y muriendo; O el que conoce mi coraz�n, y todos mis caminos, ser� mi juez en el �ltimo d�a; Y a su juicio, llamo y someter�, y sentarme tranquilo mientras estoy bajo todas las censuras y calumnias de los hombres. El ap�stol hizo, cuando su Se�or y Salvador hab�an hecho ante �l, quien, cuando fue revelado y reprochado por hombres, conscientes de su propia inocencia e integridad, se comprometi� a �l que juzga justicia.

Versículo 5

Por lo tanto, no juzgue nada antes que el momento, ... Esto se dice que previene el juicio de la erupci�n y el precipitado, y est� de acuerdo con eso, conoce bien la m�xima jud�a, ??? ?????? ????, "S� lento en el juicio" s; no apresuradamente para pasar la oraci�n; Es mejor dejar las cosas al gran d�a de la cuenta, que ser libre para censurarnos unos a otros. Hay un momento "fijo" para el terrible juicio, aunque de ese d�a y una hora no conoce a ning�n hombre: no juzga nada.

hasta que llegue el Se�or; que en el momento fijo ciertamente llegar� a juicio, y eso de repente, a desprevenido, en una hora, ning�n hombre sabe de:

que traer� a la luz las cosas ocultas de la oscuridad; es decir, no tanto vicios, inmoralidades, maldad de todo tipo cometido en la oscuridad, y que es una pena hablar de; Pero esas cosas ocultas de la deshonestidad, esas artes secretas y m�todos privados que los falsos maestros han hecho uso para ocultarse, y llevar a cabo sus dise�os de base a la lesi�n de la verdad, las almas de los hombres y la causa de Cristo:

y har� manifestar los consejos del coraz�n; �Cu�les fueron los puntos de vista e intenciones, los objetivos y los fines de estos hombres a tomarlos para que sean predicadores de la palabra; Cuando parezca que estas no eran la gloria de Dios, y el bien de las almas de los hombres, pero sucio lucro, aplausos populares, o alguna visi�n de este tipo de mercenarios, y siniestro final.

Y entonces cada hombre tendr� alabanza de Dios. Cada alma regenerada; todos los que son jud�os internamente; Todos los que tienen la circuncisi�n del Esp�ritu; y particularmente cada ministro fiel, que est� m�s dise�ado especialmente; A quien se le dijo: "Bien hecho, un sirviente bueno y fiel, entr� en la alegr�a de tu Se�or". El ap�stol, en estas palabras, ha respetado a los falsos maestros que buscaban el alabanza de los hombres, y no el honor que proviene de Dios; Y que los verdaderos ministros de la Palabra tendr�n otro d�a, sin embargo, despreciado y criticado por los hombres ahora.

S T. BAB SANHED, FOM. 7. 2. Pirke Abot, c. 1. Sect. 1.

Versículo 6

Y estas cosas, hermanos, tengo en una figura transferida, ... no lo que hab�a dicho con respecto a las diferentes facciones en Corinto, un ser para Pablo, y otro para Apollos, y otro para Cephas, como si estas varias partes lo hicieran. Realmente no vamos por esos nombres, sino por los de otros, los falsos maestros; Solo el ap�stol, para rechazar todo lo que parec�a reflexi�n, puso estos, ya que la versi�n sir�aca lo hace, "Sobre" su propia "persona", y Apolos, cuanto antes y mejor poner fin a tales divisiones; Porque es cierto, de su forma de discutir y razonar, que estos no son nombres ficticios, pero estaban realmente divididos, y se pelearon entre s�, Apolos y Cephas: Pero su significado es, cuando dice,.

Tengo una figura transferida a m� mismo y a Apolos, estas cosas; que hab�a "trajo estas comparaciones", ya que la versi�n �rabe lo lee, con respecto a s� mismo y a Apollos; a saber, que uno era un sembrador, y otro un volante; que eran trabajadores y constructores, ministros o sirvientes, y los mayordomos: y estos s�miles, y una forma tan figurativa de hablar, hab�a hecho uso, como �l dice.

por tu sabor; Por el bien de los miembros de esta Iglesia, para que tengan nociones correctas de ellos, y en consecuencia las cuentan y se comportan hacia ellos: o, como agrega,.

que podr�amos aprender en nosotros no pensar en los hombres por encima de lo que est� escrito: significado, ya sea en la Palabra de Dios en general; o en algunos pasajes particulares de las Escrituras que podr�a tener respeto; o m�s bien en los lugares anteriores de esto, y el cap�tulo anterior, donde le da a los personajes mencionados anteriormente de los ministros; Donde, en los mismos ap�stoles, en sus propias palabras, de su propia cuenta, podr�an aprender, por un lado, no atribuirlos demasiado, ni, por otro lado, para restar valor a su car�cter justo y la utilidad: y tambi�n,.

que nadie de ustedes se establezca para uno contra el otro; Hable grandes palabras de vanidad y envidia, por un ministro contra otro; Cuando todos son, tengan el mismo car�cter, est�n en la misma oficina, y est�n preocupados conjuntamente en la misma causa com�n de Cristo y el bien de las almas inmortales.

Versículo 7

Porque qui�n hace que se diferencie de otro, ... esta pregunta, y lo siguiente, se ponen a los miembros de esta Iglesia, que estaban glorsificando y se jactaban de los ministros bajo los cuales se convirtieron, y por los cuales estaban bautizado, a la negligencia y desprecio de los dem�s; cuando el ap�stol les tendr�a considerar, y la diferencia se hizo entre ellos y los dem�s, se hicieron, no por el hombre, sino a Dios; que sea lo que sea bueno y beneficio que hubieran disfrutado bajo sus respectivos ministros, estaban en una forma de recibir, y de Dios; Y, por lo tanto, no deber�an gloriarse en s� mismos, ni en sus ministros, sino en Dios, que les hab�a distinguido sus favores: la diferencia se realiza entre los hombres, es de Dios; Es �l que los hace diferir del resto de la creaci�n; de los �ngeles, a quienes son inferiores; y de bestias, a quienes son superiores; y entre s� en su persona, tama�o, forma y rostro, lo cual es una diferencia f�sica o natural. Es Dios lo que los hace diferir entre s� en cosas de car�cter civil; Como reyes y sujetos, maestros y sirvientes, altos y bajos, ricos y pobres, v�nculos y libres, que pueden llamarse una diferencia pol�tica o civil; Y hay una diferencia eclesi�stica que Dios hace en su propia gente, que tienen regalos que difieren uno de otro; Hay diversidades de regalos, administraciones y operaciones entre ellos, y de todo el mismo esp�ritu: pero la gran distinci�n que Dios ha hecho entre los hombres, se encuentra en su amor especial, distintivo y eterno para algunos, y no a otros; en su elecci�n de ellos en Cristo hasta la salvaci�n eterna; en el don de ellos a Cristo en el Eterno Pacto; En la redenci�n de ellos por su sangre; en su poderosa y prevalente intercesi�n para ellos; en el llamado efectivo de Dios de ellos por su gracia; en su resurrecci�n de ellos de entre los muertos a la vida eterna, coloc�ndolos en la mano derecha de Cristo, y su entrada a la gloria eterna; cuando se mantendr� la distinci�n, como en las instancias anteriores, a lo largo de las edades infinitas de la eternidad; Todo lo que se debe, no a nada de los hombres, sino a la gracia libre, la voluntad soberana y el buen placer de Dios.

�Y qu� has hecho que no recibiste? Cualquiera de las misericandias y las bendiciones que disfruten, tienen en una forma de recibir, y de Dios el padre de todos los misericordios: se reciben todas las misericordias naturales y temporales de �l; Incluso, como respetar el cuerpo, la forma, la forma y la forma de la misma, la perfecci�n de las extremidades, la salud, la fuerza, la comida, la vestimenta, la preservaci�n de la vida, la continuidad en ser, con todas las comodidades de ello: y tal como se relacionan con el alma, su formaci�n, que es por parte del padre de los esp�ritus, sus poderes y facultades, la luz natural, la raz�n y la comprensi�n, todas sus dotaciones, habilidades, todas las partes naturales y la nitidez del ingenio; Para que ning�n hombre deber�a gloriarse en su sabidur�a, como si estuviera debido a s� mismo, cuando es todo Dios. Todas las bendiciones sobrenaturales y espirituales son recibidas de Dios; como una justicia justificante, la gracia santificadora, la remisi�n del pecado, el nuevo nombre de adopci�n, la fuerza para realizar buenas obras, para soportar y sufrir reproche y persecuci�n a Cristo, y perseverar hasta el final, con un derecho y t�tulo a la gloria eterna. .

Ahora, si lo recibiste, �por qu� la gloria de Dost Thou, como si no lo hicieras? A la gloria en cualquier misericordia, favor, o bendici�n recibida de Dios, como si no fuera recibido de �l, sino que debido al poder, la atenci�n y la industria humana, traicionas desdichadas vanidad, est�pida y m�s que brutal ignorancia, ingratitud horrible, abominable orgullo y maldad; Y es contrario a la gracia de Dios, que ense�a a los hombres humildad y gratitud. Solo a Dios, se deben atribuir todas las bendiciones de la naturaleza, la providencia y la gracia; Deber�a tener toda la gloria de ellos; Y a �l, y �l solo, los elogios se deben a ellos. Ese orgulloso arminio, Grevincovius t, en respuesta a este texto, dijo,.

"Me digo a diferir; ya que podr�a resistirme a Dios, y la predeterminaci�n divina, pero no se ha resistido, �por qu� no puedo gloria en ella a partir de mi propia?".

t contrario Ames pag. 253.

Versículo 8

Ahora est�s lleno, ... es decir, en su propia opini�n: estas palabras, y algunas de las siguientes expresiones, son una concesi�n de ir�n. No estaban llenos de Dios, y cosas divinas; ni de Cristo, y de la gracia de su plenitud; Ni del Esp�ritu Santo, y de la fe, como se dice que Stephen y Bernab� son; ni de alegr�a y paz en creer; ni de bondad y conocimiento espiritual; Pero estaban llenos de s� mismos, y fueron levantados en sus mentes carnales con una opini�n de sus habilidades, aprendizaje, oratoria y elocuencia, de sus ministros, y de sus propias grandes mejoras en el conocimiento bajo sus ministraciones. Se imaginaron que hab�an llegado a una perfecci�n en el conocimiento y estaban llenos de ello; Y como el est�mago lleno, de donde se toma la met�fora, anula el panal, por lo que estas personas odiaban el ministerio del ap�stol y la pura predicaci�n del evangelio; Imaginando que hab�an logrado algo por encima de �l, y no se pusieron de pie en la necesidad; �Cu�ndo, ay! eran menos chicas, ni�os en comprensi�n, y necesitaban leche en lugar de carne fuerte; Hasta ahora eran de ser lo que pensaban que ser�an.

Ahora eres rico; no en la fe; ni en buenas obras; Tampoco los regalos y el conocimiento espirituales, aunque algunos de ellos fueron; Pero eso no est� previsto: el significado es que fueron ricos y abundaron en el conocimiento en su propia cuenta. Al igual que los Laodiceans, se engullieron para ser ricos y aumentaron con los bienes, cuando eran pobres, y miserables, y miserables.

Tienes reinados como reyes sin nosotros. Los santos, en el mejor sentido, son reyes, hechos por Cristo; y no solo no solo el nombre, como las insignias de regal�as, como coronas y tronos preparados para ellos, sino tambi�n reinos: tienen un reino de gracia, que ahora disfrutan y nunca se eliminar�n; en el que reinan como reyes bajo la influencia del esp�ritu de Dios, sobre las corrupciones de sus propios corazones, que se sienten bajo las restricciones de la gracia poderosa; y sobre el mundo, que tienen debajo de los pies; y sobre Satan�s, que est� destronado y expulsado de ellos; y heredar�n el reino de la gloria en lo sucesivo; Pero nada de este tipo est� aqu� destinado. El sentido de las palabras es que estas personas imaginaron que hab�an llegado a tal tono de conocimiento, como para ser independientes de los ap�stoles; No necesitaba instrucciones e instrucciones de ellos, y estaban en gran tranquilidad y facilidad de la mente, y atendidas con la prosperidad exterior, para que vivieran, como los reyes, la vida m�s feliz que podr�a desear; Sobre el cual el ap�stol expresa su deseo de su coraz�n:

Y lo har�a a Dios, rein�; no en la seguridad carnal, y en la riqueza de los disfrute mundanos, que el ap�stol no fue deseoso por s� mismo, y otros de sus compa�eros ministros; ni en un sentido espiritual, simplemente como creyentes en com�n, y como lo hizo; Pero con Cristo en su estado del Reino aqu� en la Tierra:

que tambi�n podr�amos reinar con usted; Porque todos los santos estar�n juntos cuando Cristo se lleva a s� mismo su gran poder, y reina; Todos ellos reinar�n con �l en la Tierra mil a�os; Este es un dicho fiel, nada m�s cierto, o para ser dependido, que los que sufren con �l tambi�n reinar�n con �l; Y no una parte de su gente solamente, sino todo el cuerpo: por lo tanto, el ap�stol desea, que ven�a este tiempo que reinaba para la Iglesia de Cristo, entonces �l y el resto de los ap�stoles tambi�n reinar�an: �Pero, ay! Fue un caso simple, desde la condici�n en la que estaban, de los cuales las siguientes palabras dan una narrativa, que esta vez a�n no estaba.

Versículo 9

Porque creo que Dios nos ha expuesto a los ap�stoles por �ltima vez, ... lo que significa en el tiempo, con respecto a los profetas y los patriarcas bajo la antigua dispensaci�n; y a los ap�stoles, que fueron enviados por Cristo cuando estaban en la tierra; Cuando �l, y Bernab�, y otros, hab�an recibido su misi�n desde su ascensi�n; o en estado y condici�n, que aunque estaban establecidos en primer lugar en la Iglesia, sin embargo, eran los menos en la estima de los hombres; y fueron tratados como los m�s medios, viles y abyectos de las criaturas; Fueron establecidos o aparecieron a la vista p�blica, e hicieron un stock mirando por reproches y aflicciones. Y.

Como fue designado hasta la muerte; fueron continuamente expuestos a �l; Estaban en la muerte, siempre con ellos la muerte del Se�or Jes�s; y todo el d�a mat� por su bien por su bien; Todo lo que el ap�stol no solo pensaba, sino que se cre�a, no eran cosas casuales, eventos fortuitos, sino las determinaciones y citas de Dios; y fueron provocados en su sabia providencia para responder a algunos fines valiosos, lo que lo hizo m�s f�cil debajo de ellos, y lo reconciliaron.

Porque nos hicieron un espect�culo al mundo, y a los �ngeles, y a los hombres. La palabra traducida "espect�culo" significa un "teatro"; y la alusi�n es para los teatros romanos, en los que se realizaron varios ejercicios, para la gratificaci�n de los numerosos espectadores, que se colocaron en una distancia adecuada para contemplar; Y no tanto a los gladiadores que lucharon, en tales lugares, para el desv�o de la multitud, en cuanto a aquellas personas infelices que fueron arrojadas a las bestias salvajes, sueltas sobre ellos para devorarlas; Las horronesas barbaridades estaban contempladas por la compa��a circundante con gran placer y satisfacci�n; Y un espect�culo de este tipo eran los ap�stoles en sus sufrimientos y persecuciones al mundo "entero", se distingu�an en "�ngeles" y "hombres". Por "Angels" puede ser significaba que los demonios, quienes despertaron a los pr�ncipes de este mundo contra los ap�stoles, para perseguirlos y aflictarlos; de lo que nada fue un mayor placer para estos esp�ritus envidiosos y maliciosos: aunque los buenos �ngeles tambi�n pueden ser incluidos, como testigos de la fe, el coraje y la constancia de los santos, y como edredones de ellos en todas sus tribulaciones; Pero los �ngeles malvados parecen dise�ados principalmente: y por "hombres" son significados hombres malvados, que est�n tan complacidos de contemplar las barbaries y las carniceras cometidas sobre el pueblo de Dios, ya que los romanos en sus teatros deb�an ver las escenas tr�gicas que se actuaron. all�.

Versículo 10

Somos tontos por el amor de Dios, ... estaban tan en la estima de los hombres, por su estrecho m�rito adjuntado a un Cristo crucificado; y por predicar la doctrina de la salvaci�n por �l; y por soportar tanto reproche, aflicci�n y persecuci�n, por su bien y el Evangelio:

Pero eres sabio en Cristo. Esto se dice ir�nicamente; Porque su significado no es que fueran verdaderamente sabios en Cristo, en el conocimiento y la fe de �l, en la predicaci�n de su evangelio, o profesando su nombre; Pero estaban tan en sus propios ojos, e hicieron uso de mucha sabidur�a mundana y pol�tica carnal en su profesi�n de religi�n. Sus ministros se preocuparon por predicar, y ellos profesan a Cristo, de tal manera que retenga el favor del mundo, y para escapar del reproche y la persecuci�n.

Somos d�biles; en tu cuenta; Nuestra presencia corporal es d�bil, y el habla despreciable; Somos hombres de capacidades y habilidades importantes; Tampoco podemos expresarnos de esa manera fuerte y masculina, con aquellos trazos magistrales de elocuencia y oratoria que hacen sus ministros; O estamos presionados con enfermedades, y aflicciones y persecuciones.

Pero eres fuerte; Sus ministros son hombres de grandes partes, voz fuerte, lenguaje masculino y poderoso oratorio; Y abundas en la prosperidad externa, y est� libre de persecuci�n por la Cruz de Cristo.

Son honorables; Alto a favor de los hombres y la estima de los hombres por su sabidur�a y aprendizaje, sus riquezas y riqueza, poder y grandeza.

Pero somos despreciados; est�n en deshonra y desgracia, por el aspecto medio que hacemos, el Evangelio que predicamos, y la Cruz que llevamos.

Versículo 11

Incluso hasta esta hora actual, .... Lo que est� a punto de estar relacionado no fue lo que ve a los ap�stoles de vez en cuando, y hace un gran rato; Pero, por un tiempo considerable, y hasta la actualidad, fue m�s o menos la serie constante com�n y el curso de la vida en que se convirtieron en:

Tanto el hambre, como la sed, y est�n desnudos; Quer�a las necesidades comunes de la vida, la comida para comer, y la vestimenta para poner, y oro y plata para comprar cualquier cosa; Lo que podr�a ser, cuando, como a veces era su caso, estaban en lugares des�rticos, o en los mares; o cuando se cayeron entre ladrones; o hab�a dado todo, como lo hicieron a veces, por el alivio de los dem�s; O cuando no estuvieran, como a veces, se dieron cuenta de que, y previstas, donde ministraban, como deber�an haber sido.

Y son buffeted; No solo por Satan�s, como era el ap�stol, sino por los hombres; abrumado, azotado y golpeado por ellos; fluvi� en las sinagogas por los jud�os con cuarenta rayas, salvo uno; y golpeado con varillas por los romanos, y otros gentiles.

Y no tiene cierta vivienda; estaban en un estado inquisitado, siempre movi�ndose de un lugar a otro, y no ten�an lugar donde pudieran llamar suya; Como su Se�or y Maestro, que no ten�an d�nde colocar la cabeza; Y como algunos de los santos del Antiguo Testamento, que vagaban por pieles de ovejas y pieles de cabras, en los desiertos, y en las monta�as, en Dens y Cuevas de la Tierra.

Versículo 12

Y trabajo, trabajando con nuestras propias manos, ... como lo hizo el ap�stol en Corinto, Hechos 18:3 y en otros lugares; en parte a ministrar sus propias necesidades, y las de los dem�s; y en parte que �l podr�a no ser oneroso para las iglesias; y tambi�n para establecer un ejemplo de diligencia e industria a los dem�s; Aunque ten�a un derecho y poder para reclamar un mantenimiento de aquellos a quienes ministr�.

Siendo revulsado, bendecimos; Como comand� Cristo, Mateo 5:44 y el propio ap�stol dirigido y exhortado a, Romanos 12:14.

Ser perseguido, lo sufrimos; es decir, pacientemente; ni resisten a nuestros perseguidores, ni murmurar y reprender en nuestras circunstancias infelices; Pero tomando todo en parte, como lo que es la voluntad de Dios, y har� su gloria.

Versículo 13

Siendo difamado, caminamos, ... Siendo blasfemado, a medida que la Palabra significa, al ser malvado, nuestro buen nombre quitado, y los personajes duelen; Estamos trocando o oramos a Dios para ellos, que los convencer�a de su maldad, darles el arrepentimiento a la vida y la remisi�n de sus pecados, seg�n la direcci�n de Cristo, Mateo 5:44 y en Imitaci�n de su ejemplo, Lucas 23:34 o nosotros los rodeamos; As� que la versi�n sir�aca lo lee, ????? ?????, "Les arrojamos": no para blasfemar y hablar con nosotros, ya que ser� a su propio da�o; Les les damos palabras suaves y un lenguaje suave, sin renderizar la barandilla para la barandilla, ni la revelaci�n para la revelaci�n:

Estamos hechos como la suciedad del mundo, y la escala fuera de todas las cosas hasta este d�a; Con referencia, como algunos piensan, a Lamentaciones 3:45 o a las lustraciones y expectativas entre los paganos, que cuando cualquier calamidad estaba sobre ellos, particularmente una plaga entre ellos, sol�a tomar una de las rechazar a la gente y sacrificarlo a trav�s de la expiaci�n; o cualquier criatura viva, como una oveja que con imprecaciones que arrojan a un r�o, o en el mar, me extra�an alejado todo el contagio junto con �l; Por lo tanto, a modo de reproche, tal que estaban bajo la desgracia, y fueron expulsados, y fueron exiliados, se llamaban ?????????, "Purgaciones"; la basura de la gente, por la cual el resto se purgaron u o la referencia es a cualquier suciedad, o suciedad en com�n, arrastrada por las casas, y se arrastr� bajo pie; Y as� expresa la condici�n media y abyecta de los ap�stoles, y con qu� desd�n y desprecio fueron tratados en el mundo: todo lo que demuestra que estaban lejos de reinarse como reyes; Y mientras que este era su caso, que estaban a la cabeza del inter�s de Cristo, debe ser una vana de presunci�n de los Corintios, que reinicieron como reyes sin ellos.

u vid Turnebi adversaria, l. 19. c. 22. 26. 7. 27. 16.

Versículo 14

No escribo estas cosas para avergonzarte, ... aunque ten�an una gran raz�n para avergonzarse de la vana la opini�n que tuvieron de ellos mismos, y que sufrieron a los fieles ministros de Cristo que quieran las necesidades de la vida, cuando abundaron tanto con las cosas buenas de ello; Y aunque la opini�n del ap�stol en dar esta narrativa fue llevarlos bajo un sentido de sus fallas, y a una condena de ellos, y para verg�enza para ellos, para que su futura reforma y enmienda; Sin embargo, no fue simplemente ponerlos en rubor, sino para amonestarlos e instruirlos, que se agrand� en estas cosas:

Pero como mis hijos amados te advierto; siendo sus hijos en un sentido espiritual, para quien tuvo el amor y afecto m�s fuerte, como su padre espiritual; Y como era su lugar, y se convirti� en de pie en tal relaci�n con ellos, advirti�, amonest� y se les ocurri� en cuenta sus obligaciones y deber.

Versículo 15

Porque aunque tengas diez mil instructores en Cristo, ... o "Escolares"; Por quien �l quiere decir a los falsos maestros, a quienes, por supuesto, admite ser instructores en Cristo, o ministros de su, como en 2 Corintios 11:23 y de qui�n eran muchos, y de cuyo n�mero se jactaron los corintios; aunque no eran tan numerosos como supuestos aqu�; Porque la expresi�n es hiperb�lica: tal vez se puede tener alguna referencia a la multitud de maestros de escuela, tutores y gobernadores, y que tambi�n se llamaron ????, "Padres", que aquellos que eran jud�os de esta Iglesia en Corinto tuvieron antes de que creyeran en Cristo. ; Como los miembros del Gran Sanedrim, el gran n�mero de m�dicos, los hombres sabios, los escribas y los fariseos, que fing�an instruirles: ahora, aunque se deber�a permitir, que los profesores actuales entre ellos eran instrumentales para instruirlos m�s en el conocimiento de Cristo; o como la versi�n �rabe lo lee, "en el amor de Cristo"; Sin embargo, no ten�an ninguna mano en su conversi�n; El ap�stol primero predic� el evangelio a ellos, y se puso ministerial a Cristo la fundaci�n entre ellos, y los dirigi� a �l, y fue el ministro por quien cre�an; estos maestros como m�ximo y mejor construidos en su fundaci�n, y que solo madera, heno y rastrojo; y, mientras que eran solo una especie de escolares, y no los padres, ense�aron con puntos de vista mercenarios, y por el amor de Lucre, y con la severidad, como lo hacen los hombres; Y no con un solo ojo para su bien, y con esa ternura y afecto que tiene un padre, y en qu� relaci�n se mantuvo para ellos:

sin embargo, no tienes muchos padres; Como est� en la naturaleza, por lo que est� en gracia; Cu�ntos maestros e instructores pueden tener un hijo, ya sea juntos o sucesivamente, tiene un padre, pero un padre; y cu�ntos despu�s de los instructores, ya sea nominal o realmente, los creyentes pueden tener que liderarlos, o que pretenden llevarlos a un mayor conocimiento de Cristo; Sin embargo, tienen un padre espiritual, que ha sido el feliz instrumento y los medios de su conversi�n, ya que el ap�stol Pablo era a los corintios;

porque en Cristo Jes�s te he engendrado a trav�s del Evangelio; que debe ser entendido la regeneraci�n, un nacimiento de nuevo, y desde arriba; de ser acelerado cuando muerto en traspasos y pecados; de tener a Cristo formado en el alma; de ser hecho un participante de la naturaleza divina, y una nueva criatura; que el ap�stol se atribuye a s� mismo, no como la causa eficiente de la misma, porque la regeneraci�n no es de hombres sino de Dios; no de la voluntad de la carne, de la libre albropiedad y poder de un hombre, ni de la voluntad de cualquier otro hombre, o ministro; Pero de la voluntad soberana, la gracia y la misericordia de Dios, Padre, Hijo y Esp�ritu. El padre de Cristo nos cuesta de nuevo de acuerdo con su abundante misericordia; y el hijo se acelera con quien lo har�; Y nacemos de nuevo de agua y del Esp�ritu, de la gracia del Esp�ritu; Por lo tanto, el lavado de la regeneraci�n y el trabajo renovador se le atribuyen: Pero el ap�stol habla esto de s� mismo, solo como el instrumento o el medio, que Dios hizo uso de hacer este trabajo sobre los corazones de su pueblo; y que muestran las otras frases: porque se dice que lo hace "en Cristo"; �l predic� a Cristo a ellos, y la salvaci�n por �l, y la necesidad de la fe en �l; �l les dirigi� a �l creer en �l, y era el medio de traerlos a la fe de Cristo; Y fue el poder y la gracia de Cristo que acompa�aron a su ministerio, lo que lo convirti� en un medio efectivo de su regeneraci�n y conversi�n: y que se llevaron a cabo "a trav�s del Evangelio"; no a trav�s de la predicaci�n de la ley; aunque por eso es el conocimiento del pecado, y las condenas pueden ser forjadas por tales medios; Sin embargo, estos no dejan nada m�s que un sentido de ira y condenaci�n; Tampoco es la ley que no sea una carta de asesinato: no hay regeneraci�n, sin gracia de aceleraci�n, ninguna fe ni santidad vienen de esta manera, sino a trav�s de la predicaci�n del Evangelio; En y a trav�s de lo cual, como veh�culo, el Esp�ritu de Dios se transmite en el coraz�n, como un esp�ritu de regeneraci�n y fe; y Dios de su propia voluntad y la misericordia rica, por la Palabra de la Verdad, por el evangelio de la gracia y la verdad, que vino por Cristo, as� llamado en distinci�n de la ley que vino de Mois�s, nos engendr� de nuevo como sus nuevas criaturas; Lo que muestra la utilidad del Ministerio del Evangelio, y en qu� se deben tener los ministros del Evangelio, que son padres espirituales, o los instrumentos de la conversi�n de los hombres.

Versículo 16

Por lo tanto, le suplico, ... aunque podr�a haber usado el poder y la autoridad de un padre, sin embargo, �l eligi� m�s bien de trotarlos y supl�cito; diciendo,.

ser seguidores de mi; �Para qui�n deben seguir los ni�os, pero sus padres? El lat�n vulgate, agrega, "como soy de Cristo"; As� que Chrysostom en su tiempo lo lee; Y Beza dice que lo encontr� tan escrito en un ejemplar griego; Y as� est� en uno de los stephens; Parece que se ha deslizado de 1 Corintios 11:1. Sin embargo, aunque podr�a no ser expresado ahora por el ap�stol, debe suponerse; porque nunca deseaba seguirlo m�s, o m�s lejos de lo que sigui� a Cristo; Particularmente fue deseoso de que estos sus hijos espirituales lo siguieran, y acamparan por �l en la doctrina de un Cristo crucificado, hab�a predicado entre ellos, y no los falsos ap�stoles, que hab�an representado a su ministerio como d�bil y tonto; y en su vida y conversaci�n, especialmente en su humilde carruaje y su comportamiento entre ellos, y en su tierno amor y afecto por ellos; observando su creciente orgullo, la alter�a y la vinosa opini�n de s� mismos, y esas divisiones y animosidades antinaturales que se fomentaron entre ellos; y tambi�n en el reproche y la persecuci�n alegremente y pacientemente, por el evangelio de Cristo; Un detalle de los cuales los hab�a dado en algunos vers�culos anteriores.

Versículo 17

Por esta causa, he enviado a Timotheus, .... Este es un ejemplo de su cuidado, preocuparse por ellos y respetarlos; que no solo le escribe, dando su mejor consejo y consejo, prometiendo venir a ellos; Pero a la vez que env�a a Timothy a ellos, cuyo car�cter se da aqu� como uno querido para �l, y en todas las cosas de confianza y fieles:

quien es mi amado hijo; Entonces, en sus ep�stolas para �l, a menudo le estiliza a su hijo, su propio hijo en la fe, su amado hijo; No es que �l fuera el instrumento de su conversi�n, porque era un disc�pulo de Cristo antes de que el ap�stol conociera con �l; ver Hechos 16:1 pero ya sea por su edad, siendo m�s joven que �l; o por su gran afecto por �l; Y principalmente porque, como hijo con un padre, le sirvi� en el Evangelio, Filipenses 2:22 y, como lo estaba familiarizado, y tanto amado por �l, podr�a razonablemente Pensar que �l bien conoc�a sus formas y m�todos de doctrina y pr�ctica.

Y fiel en el Se�or; un fiel administrador de los misterios de la gracia; fieles en el Evangelio de Cristo, y a las almas de los hombres; Un fiel ministro del Se�or; Uno que hab�a sido juzgado, probado y encontrado fiel, y por lo tanto, se le puede confiar, y depend�a de:

�Qui�n te llevar� al recuerdo de mis caminos? su forma de predicar, y las doctrinas que ense��; y cu�l deber�a ser la manera de la vida y la conversaci�n agradablemente misma, y ??a la suya propia; y todas esas reglas y �rdenes que dio por la disciplina y gesti�n de los asuntos de las iglesias; Todo lo que anteriormente le hab�a entregado, aunque, a trav�s del tiempo, y el ministerio de los falsos maestros entre ellos, los hab�a olvidado enormemente: por lo que se env�a Timoteo, no para ense�arles nuevas formas, ni, de hecho, ense�ar En absoluto, cuyos j�venes podr�an estar tentados a despreciar; Pero solo para ponerles en cuenta lo que el ap�stol que antes les hab�a ense�ado: y que son recomendados por ser tales formas,.

que sea en Cristo; Las doctrinas que hab�a predicado entre ellos, la suma y la sustancia de ellos eran Cristo, y �l crucific�; Las ordenanzas que les hab�a entregado eran lo que hab�a recibido de Cristo; Y todas las reglas y m�todos que les hab�a propuesto para la regulaci�n de su conducta, y la gesti�n de sus asuntos eclesi�sticos, fueron tales como fueron acordados de la mente de Cristo, y tendieron a su gloria; No tom� ning�n paso, ni propuso que se tomen, sino en Cristo, y por el bien de su inter�s: y agrega,.

Mientras ense�e en todas partes, en cada iglesia; La fe que entreg� en todas partes era una y la misma; El Hijo de Dios, predic� por �l, no era s� y Nay; La trompeta que sopl� siempre dio un cierto sonido; Las reglas prescritas por �l, y las �rdenes que estableci�, para la conducta de la vida, y el gobierno de las iglesias, fueron exactamente iguales en todos los lugares; No ense�� doctrinas en Corinto, ni le impartieron la observancia de ninguna regla, pero a qu� otras iglesias fueron ense�adas y dirigidas a; Su plan de doctrina y disciplina fue la misma en todas partes.

Versículo 18

Ahora algunos est�n hinchados, ... algunos con sus dones, aprendizaje y elocuencia, y con la estaci�n alta en la que estaban en la iglesia; Creyendo que deben continuar all� sin ser molestados, pens�ndolos seguros y seguros a trav�s de la ausencia del ap�stol, y que se halagaron, siempre ser�an el caso:

Como si no viniera a ti; Y otros que eran para Apolos y Cephas contra Pablo, fueron hinchados contra sus compa�eros en la misma cuenta; Esperando que nunca deban verlo m�s, para ponerlos en ninguna otra situaci�n que en lo que estaban, por demoler sus facciones y fiestas; y otros, como la persona incestuosa, y aquellos que tomaron el est�mulo al pecado por su ejemplo, tambi�n estaban hinchados sobre esta puntuaci�n, y se lamentaron, ni se arrebat�, ni se arrepintieron de sus iniquidades, sino que se mantuvieron seguras y endurecidas; Creer que el ap�stol nunca se acercar�a m�s entre ellos, para llamarlos a una explicaci�n para sus negligencias.

Versículo 19

Pero vendr� a ti en breve, ... Esto le dijo como amenazando, pero no a trav�s de la profec�a; porque no es seguro que alguna vez haya llegado a ellos despu�s de esto; Pero a modo de promesa, ya que fue entonces la verdadera intenci�n, la inclinaci�n y la resoluci�n de su mente, aunque con esta condici�n,.

Si el Se�or lo har�; que se pone correctamente, y lo que el ap�stol ten�a un considero continuo, en todas las cosas que le preocupaba; Consulte Romanos 1:10 y aunque no es absolutamente necesario que esto sea expresado por nosotros siempre en tantas palabras; Sin embargo, si eso, como la oraci�n es corta y completa, no habr�a impropiedad; Sin embargo, esto siempre debe ser el sentido de nuestras mentes y conducir en todos los asuntos de la vida; Ver Santiago 4:13.

y no sabr� el discurso de ellos que est�n hinchados, sino el poder; lo que significa principalmente los falsos maestros; y que su preocupaci�n ser�a, no tanto para observar su lenguaje magistral, la elocuencia de su discurso, la aceleraci�n de sus expresiones, la cadencia de sus palabras, cu�n bien se juntaron y cu�n plenamente pronunciada; Pero lo que hab�a vida en su ministerio, qu� poder sali� con sus palabras, y cu�n efectiva era su predicaci�n a la conversi�n de los pecadores y la edificaci�n de la Iglesia de Dios.

Versículo 20

Para el reino de Dios, ... por "el reino de Dios" no se entiende el reino de los cielos, ni la gloria final y la felicidad de los santos; Aunque ese es un reino preparado por Dios, que le da a sus hijos, los llama a su gracia, y les dar� una entrada abundante, cuando el tiempo ya no estar� m�s con ellos; y aunque eso no se logra "en", o "por palabra", por mera charla y profesi�n; No todos los que dicen Se�or, Se�or, entrar� en �l; o que profesa el nombre de Cristo, y profetiza en �l; pero "en" o "por poder"; a trav�s del poder de Dios, comenzando, continuando y terminando una obra de gracia sobre el alma, y ??manteni�ndolo, a trav�s de la fe, a la salvaci�n: ni el reino de la gracia, o el principio interno de la gracia en el alma, que reina y por el cual Cristo reina all�, y por el cual los santos parecen ser reyes, as� como a los sacerdotes a Dios: aunque esto tampoco se miente "en Word", en una profesi�n de fe, en hablar de amor, y en hacer pretensiones a el conocimiento de las cosas divinas; ni simplemente en los hechos, y las acciones externas, en ejercicio corporal, en forma de piedad, y una ronda de religi�n, y un espect�culo de justicia;

Pero en el poder: en la piedad poderosa interna; Para la verdadera piedad es algo poderoso; La fe es poderosa, y tambi�n lo es el amor; Y as� es la oraci�n, y predicando; Y as� es toda la religi�n, interna y externa, donde est� la vida y la verdad de la gracia, y que en el ejercicio. Pero prefiero pensar que el evangelio est� aqu� destinado, a menudo en las Escrituras llamado el Reino de Dios, y las doctrinas de ello, los misterios del Reino; porque es un mensaje del rey de los reyes; los medios para establecer el reino o la gracia en el coraz�n; Sus sujetos son cosas relacionadas con el Reino de Dios; Es lo que ha tra�do la vida e inmortalidad, o una vida inmortal a la luz; y da la mejor cuenta de las glorias invisibles del estado celestial, y se�ala la mejor ubicaci�n de los santos, y el t�tulo de ello; Declarando que, excepto que un hombre nace de nuevo, y tiene una mejor justicia que la suya, incluso la de Cristo, no ver� ni entrar� en el reino de los cielos. Ahora el Evangelio no est� en "Word"; Aunque se encuentra en la Palabra de Dios, las Escrituras de la Verdad: y golosinas de la Palabra Esencial de Dios, el Se�or Jesucristo; y no se puede predicar sin palabras, incluso las palabras de los hombres; Sin embargo, no debe ser predicado con sabidur�a de las palabras, con palabras atractivas de la sabidur�a del hombre, o en las palabras que la sabidur�a del hombre se ense�a; Tampoco la eficacia de ella se encuentra en, o depende de las palabras del predicador, o en la mera persuasi�n moral: por cada vez que es efectiva, no viene "en la palabra solamente, sino tambi�n en el poder"; 1 Tesalonicenses 1:5 y por "poder" se entiende, no un poder de los milagros que trabajan los primeros predicadores del Evangelio, y por el cual fue confirmado enormemente; ni una vida piadosa y una conversaci�n que eso se aplica, y se comprometi� tanto a los ministros como a las personas; Pero la poderosa eficacia del Esp�ritu, asistiendo a la predicaci�n del Evangelio a la aceleraci�n de los pecadores muertos, la esclarecedora de los ojos ciegos y la impresi�n de o�dos sordos; El ablandamiento de los corazones duros, la entrega de personas de la esclavitud del pecado y Satan�s, la transformaci�n y renovaci�n de ellas tanto hacia adentro como hacia afuera; ya la reconfortante, amenazadora, fortalecimiento y establecimiento de los santos; Todo lo que nunca se puede atribuir al lenguaje persuasivo de los hombres, sino al poder de Dios; y cu�l es el m�s evidente cuando se observa qu� instrumentos medios y despreciables a los ojos de los hombres se utilizan: cu�les son las doctrinas que son predicadas, no ser del hombre, ni de manera agradable a su raz�n carnal, sino estimular la insensatez por �l. ; y la manera en que se propagan, no de una manera carnal, por la fuerza externa, sino por la insensibilidad de la predicaci�n: y la oposici�n lo hizo tanto por la enemigo del coraz�n del hombre, por los hombres del mundo, y Por Satan�s y sus principios y poderes.

Versículo 21

�Qu� te har�s? ... o "�C�mo va a venir a ti?" A medida que las versiones �rabes y et�op�cticas lo leyeron, ya que el ap�stol hab�a determinado a su llegada a ellos: y lo hab�a hecho menci�n, lo puso a ellos, de qu� manera los mismos elegir�an, �l deber�a venir a ellos;

�Debo venir a ti con una vara; ya sea como un maestro de escuela, al igual que sus falsos maestros, con una "ferula"; o como padre con una vara de correcci�n y castigo, asumiendo su autoridad paterna, poniendo una apariencia severa y uso de rugosidad; o m�s bien como un ap�stol con la barra apost�lica; por lo que se entiende no la excomuni�n, que es lo que pertenece a toda una comunidad, y no a ninguna persona; Pero un poder de infligir el castigo en los cuerpos de los delincuentes, al pedazos con enfermedades, e incluso con la muerte misma; porque a medida que los profetas del Antiguo Testamento tuvieron un poder de Dios de infligir enfermedades y muerte sobre los delincuentes; As� que los ap�stoles de los nuevos, como aparecen a partir de los casos de Anan�as, y Sapphira, y Elymas el hechicero:

�O enamorado, y en el esp�ritu de la mansedumbre? con el afecto de un padre, con un rostro agradable y un esp�ritu manso; En oposici�n a esa rugosidad y agudeza, ten�a una autoridad, como un ap�stol de Cristo, para usar en casos apropiados; y, por lo tanto, como este �ltimo ser�a m�s elegible por ellos, su sugerencia es que se comportar�an en consecuencia, que no podr�a haber ninguna ocasi�n para acudir a ellos de la manera anterior, que no fue deseable por �l, parece haber una alusi�n a una pr�ctica entre los jud�os, en el castigo de un borracho o una persona glotona; la regla por la cual fue esto w,.

"Ellos primero lo corrigen ?????? ?? ????" con palabras ", o" con una varilla ", como est� escrito, Deuteronomio 21:18 y lo ha castigado; pero si �l agrega y se repite ( Es decir, sigue en su pecado), luego lo apone. ''.

O m�s bien, la alusi�n es a los jueces en el Sanedrim, uno de los instrumentos o insignificaciones de cuya oficina era "una vara o personal" para herir; Se dice x de R. HONA, cuando fue al Sanedrim, sol�a decir, tr�eme los instrumentos de las Tabernae (el lugar donde se sent� el SANHEDRIM); �Qu� son? "El personal" (en la edici�n de Cocceius, es ?????, "Las varillas", y las sandalias, las trompetas y las correas); El brillo es, "la tanga" para enfrentar, "el personal" (o varillas) por vencer a los rebeldes hasta que regresan, las "trompetas" para la excomuni�n, y las "sandalias" para arrancar el zapato; cosas en las que se refer�an a los jueces de la Corte, y aqu� el ap�stol propone venir como juez; Consulte 1 Corintios 5:3.

W R. Elias en Adderret APUD TRIGLAND. De Sect. Karaeor. C. 10. p. 161. X T. BAB. SANHEDRIM, FOM. 7. 2.

Información bibliográfica
Gill, John. "Comentario sobre 1 Corinthians 4". "Exposición de Toda la Biblia de Gill". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/geb/1-corinthians-4.html. 1999.
 
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