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Bible Commentaries
Romanos 8

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Introducción

Introducci�n a Romanos 8.

Como el cap�tulo anterior muestra que los santificados no est�n libres del ser del pecado en ellos, lo que es un terreno de queja general y la inquietud; Este cap�tulo muestra que los justificados se liberan de la culpa del pecado y se aseguran del castigo por ello; y tener la m�xima raz�n para regociarse y estar contento, e incluso para triunfar en un pleroforario y la plerauci�n de la fe, debido a los diversos privilegios que disfrutan, a trav�s de la gracia del Padre, del Hijo, y del Esp�ritu; y que son claramente, en gran parte, y se mencionan con severidad: comienza, Romanos 8:1, con la notificaci�n de un privilegio particular que tiene en Cristo, y, en virtud de la Uni�n a �l, seguridad de toda condena; y que se infiere de su liberaci�n segura y segura del pecado por Cristo, Romanos 8:25, las personas que comparten en este privilegio son descritas por su ser en Cristo, y por su caminata despu�s del Esp�ritu De Cristo, como consecuencia de ello: se da una raz�n que confirma este privilegio, Romanos 8:2, tomada desde el Evangelio, declarando la libertad de la ley de los santos; O por el poder y la eficacia del Esp�ritu, entreg�ndolos de la tiran�a y el dominio del pecado; o m�s bien de la santidad de la naturaleza humana de Cristo, como una rama de su justificaci�n: este privilegio se hace m�s plenamente a aparecer, y el inter�s de los santos en �l por la misi�n de Cristo, para brindar justicia eterna para ellos, que es la Fundaci�n de la misma, Romanos 8:3, la ocasi�n de la cual fue la debilidad de la ley, o m�s bien la impotencia del hombre, a trav�s de la corrupci�n de la naturaleza, para cumplir con la ley: el remitente, o la causa eficiente de esta misi�n, es Dios el Padre; La persona enviada, su propio hijo; La forma en que fue enviada, en la naturaleza humana, que ten�a la apariencia de ser pecaminoso; Lo que Dios hizo en eso, conden� el pecado en �l; que es una raz�n, por qu� no hay condenaci�n a ellos, que est�n en �l; Y el final de todo esto, Romanos 8:4 fue, que la ley de la justicia podr�a estar perfectamente cumplida por Cristo para ellos, o por ellos en �l; que se describen en parte, como en Romanos 8:1, sobre la repetici�n de qu� parte de la descripci�n, el ap�stol procede a mostrar la diferencia entre personas no regeneradas y regeneradas, Romanos 8:5, en parte por sus personajes; el que es carnal, o despu�s de la carne, el otro es espiritual, o despu�s del esp�ritu; Y por sus diferentes afectos, la que se preocupa por las cosas de la carne, la otra, las cosas del Esp�ritu; Los diferentes problemas y efecto de los cuales, a saber, a saber, una mente carnal y espiritual, Romanos 8:6, la muerte siguiendo a la One, la vida y la paz sobre el otro; Las razones de las cuales, con respecto al primero, se dan, Romanos 8:7, tomados de la enemistad de la mente carnal a Dios, y la no sujeta a la ley de Dios, y la imposibilidad de su sujeto; Y por lo tanto, nada m�s que la muerte se puede esperar; De donde se realiza esta conclusi�n, Romanos 8:8, que los hombres no regenerados no est�n en estado, ni en una capacidad para complacer a Dios, o hacer lo que es aceptable para �l, ya que es lo anterior. Disposici�n y temperamento de sus mentes: y luego en Romanos 8:9, el ap�stol regresa al argumento de donde se divide, y sugiere que, aunque hab�a dicho las cosas anteriores de los hombres no regenerados. , ten�a otros pensamientos de aquellos a quienes escribe; No estaban en la carne, ni decid�an las cosas de la carne, y as� no fueron responsables de la condenaci�n y la muerte; y que demuestra por la habitacion del esp�ritu de Dios en ellos; Para tales que no lo tengan, no tienen pruebas ni pruebas de que sean de su ser de Cristo, y por lo tanto, no tienen ninguna prueba de su seguridad de la condena; y en parte por el ser de Cristo en ellos, y cu�l es la evidencia de su ser en Cristo, y tambi�n el privilegio anterior, Romanos 8:10, cuya consecuencia es, que aunque por la raz�n del pecado es el cuerpo mortal, y muere, pero el alma vive no solo naturalmente, sino espiritualmente, por la fe en Cristo ahora, y en la gloria en lo sucesivo, en virtud de la justicia de Cristo imputada, y tambi�n lo es libre de condenaci�n y muerte; Adem�s, en virtud de la vivienda del Esp�ritu en ellos, sus cuerpos mortales se aceler�n en la resurrecci�n general, Romanos 8:11, y de todas estas bendiciones de la bondad divina, tanto en el alma como en el cuerpo. , el ap�stol infiere, que los santos est�n bajo obligaci�n, no para vivir en un carnal, sino de manera espiritual, Romanos 8:12, y a los que exhorta, Romanos 8:13 y prensas por motivos, tomados de las diferentes consecuencias de esas cosas; Muerte despu�s de vivir despu�s de la carne, y la vida a trav�s de la mortificaci�n del pecado, por el Esp�ritu de Dios: y, mientras que la caminata despu�s del Esp�ritu, por la cual hab�a descrito aquellos que est�n a salvo de la condena, se debe a su gu�a; y su ser guiado por �l, siendo una evidencia de su semejanza divina, Romanos 8:14, de ah� que pasa a considerar el privilegio de adopci�n: y que estos santos estaban interesados ??en este privilegio, �l demuestra Romanos 8:15, en parte por no tener el esp�ritu de la esclavitud que pertenece a los servidores; y en parte al tener el esp�ritu de adopci�n, que hab�a hecho a conocer esta gracia a ellos, y su inter�s en ello, y que lo hab�an recibido como un esp�ritu de adopci�n, fue evidente por su llamamiento a Dios su padre bajo su influencia; y tambi�n por el testigo que llev� a sus esp�ritus, que eran los hijos de Dios, Romanos 8:16, de los cuales estaban conscientes: y de este privilegio de adopci�n, el ap�stol concluye la herencia. , Romanos 8:17, y que es de tal naturaleza, que no hay ninguno como �l; Tanto con respecto al tema, Dios mismo; Con respecto a �l con quien son herederos, Cristo Jes�s; y la forma en que vienen a compartir la gloriosa herencia con �l, es a trav�s de sufrir con �l, y para �l; y esto no necesitan rencor para hacer, ya que no hay comparaci�n entre sus sufrimientos, y la gloria que disfrutar�n, Romanos 8:18, que ambos jud�os y gentiles estaban en la expectativa de; los �ltimos de los cuales se describen en Romanos 8:19, por su nombre, la criatura, toda la creaci�n; y por su condici�n actual, el evangelio se acerca entre ellos a la conversi�n de muchos, lo que plante� una expectativa de muchos hijos e hijas que nacen de Dios entre ellos, Romanos 8:19 y por Su antiguo estado y condici�n, Romanos 8:20, que se menciona, para ilustrar la gracia de Dios en la bendici�n actual que les otorg�, al enviarles el Evangelio; �Qu� estado fue una sujeci�n a la vanidad, a trav�s del dios de este mundo, que los llev� a cautiva a su voluntad, Romanos 8:21, y luego por la liberaci�n de ellos, estaban esperando y Expectativa de, desde la esclavitud a la libertad, Romanos 8:21, y este gimio y aflojamiento: en el nacimiento en un sentido espiritual, para los que brinda a muchos hijos a Dios entre los gentiles, el ap�stol , y otros ministros de la Palabra, que hab�an predicado el Evangelio entre ellos, fueron testigos de, Romanos 8:22, s�, no solo los gentiles, sino tambi�n los jud�os, que se describen como Tener los primeros frutos del Esp�ritu, Romanos 8:23, estaban esperando la manifestaci�n de los hijos de Dios entre los gentiles, con ellos para completar al fin el cuerpo m�stico, quien compartir� juntos la gloria antes de hablar, que su filipa y herencia les da derecho a; y por el cual hay est�mulo para esperar con la paciencia y con la esperanza, desde la conexi�n de la salvaci�n con la gracia de la esperanza; y de, la naturaleza de la cosa esperaba, lo que es invisible, pero seguro, Romanos 8:24. Por lo tanto, el ap�stol procede a considerar otro privilegio que los santos tienen, quienes est�n en el esp�ritu, y caminar despu�s del esp�ritu, el esp�ritu ayuda a sus enfermedades; En particular, en la oraci�n, de lo que, en algunos casos, se encuentran en una p�rdida, Romanos 8:26, y esto lo hace, al hacer intercesi�n por ellos; La forma en que esto se hace en ellos, es con gemidos indecibles; y la regla seg�n la cual se hace, es la voluntad de Dios, la mente del esp�ritu es conocida por el buscador de corazones, Romanos 8:27, en una palabra, tal son la privilegios de creyentes en Cristo, que todo en todo el mundo, en el cielo, en la tierra, en s� mismos y en los dem�s, ya sea bueno o malo, pr�spero o adverso, trabaje juntos por su bien, para que nada pueda salir mal con ellos en El problema, Romanos 8:28, que son descritos por su amor a Dios, y por su llamamiento efectivo, de acuerdo con su prop�sito; que se menciona, lleva al ap�stol a la fuente y la primavera de todos estos y otros privilegios, el amor eterno de Dios; Significado por su conocimiento previo de su pueblo, Romanos 8:29, que es la causa de su predestinaci�n con una conformidad con la imagen de Cristo, el primog�nito entre muchos hermanos; Con qu� predestinaci�n, llamadas, justificaci�n y glorificaci�n, se conectan inseparablemente, Romanos 8:30, de todas las bendiciones de la gracia, se puede concluir, que Dios est� al lado de tales personas, que est�n interesados ??en estos favores; Y nada debe ser temido, pero todo lo bueno es ser esperado por ellos, Romanos 8:31, que es confirmado por un argumento de mayor a menos, que si Dios ha dado su hijo para ellos, �l le dar� libremente todas las cosas, Romanos 8:32, en una visi�n de que, el ap�stol se eleva en un triunfo de fe, y desaf�a a todos los enemigos de Los santos, y niegan que cualquier cargo puede ser presentado en su contra, ya que Dios es el justificador de ellos, Romanos 8:33, o que alguna vez entrar�n en la condena, se aseguran de ella por la muerte de Cristo; y qu� seguridad a�n est� m�s fortalecida por su resurrecci�n, sesi�n a la derecha de Dios e intercesi�n para ellos, Romanos 8:34 y luego pregunta, ya que Cristo les ha mostrado un amor tanto a ellos. , por estas instancias, lo que puede separarse de �l, Romanos 8:35 y enumera varias cosas que sucedieron a los santos en esta vida, lo que, sin embargo, significa y abyecto, pueden hacerlos en La estima de los hombres, no abateamos en absoluto el amor de Cristo: que tal es su caso, que est�n expuestos a aflicciones y sufrimientos, e incluso la muerte misma, por el bien de Cristo, se demuestra Romanos 8:36, por un testimonio de Salmo 44:22, y luego una respuesta se devuelve a la pregunta anterior en lo negativo, que ninguna de las cosas mencionadas podr�a separarse Desde el amor de Cristo; tan lejos de eso, que en virtud de Cristo que los hab�a amado, eran conquistadores, y m�s que conquistadores en todas estas cosas, y sobre todos sus enemigos, Romanos 8:37 y el Cap�tulo se concluye en Romanos 8:38, con la persuasi�n completa y firme del ap�stol, que nada en todo el universo, en toda la br�jula de seres creados, ya sea lo que har�n, bueno. o malo, o cu�les son o ser�n, una enumeraci�n de muchos de los cuales se hace, debe separarlo, o cualquiera de los pueblos de Dios de su amor, que est� en Cristo Jes�s: de modo que sobre el pecado de todo, a pesar de todo, no obstante , a pesar de las diversas aflicciones que las atienden en este mundo, pero en consideraci�n de los muchos privilegios que disfrutan, y la gloria de los que son herederos, tienen una gran raz�n para regociarse, y se considera que est�n en la condici�n m�s segura y feliz.

Versículo 1

Por lo tanto, ahora, no hay condenaci�n ,. El ap�stol que tiene discursos en gran parte en el Cap�tulo anterior, con respecto a la lucha y los creyentes de combate se sienten dentro de ellos mismos, y abrieron las verdaderas causas y razones de las quejas y quejas de los santos, y lo que les da la mayor inquietud en esta vida, procede en esto a Aviso de la s�lida terreno y la base que tienen de paz espiritual y alegr�a; que surgen de su justificaci�n y adopci�n, los prop�sitos y los decretos de Dios, y en particular el amor eterno e inmutable de Dios en Cristo, la fuente, la primavera y la seguridad, de todas las bendiciones de la gracia. El cap�tulo comienza con un relato m�s c�modo de la seguridad de los creyentes en Cristo; El ap�stol no dice que no hay nada condenable en ellos, porque el pecado est� en ellos y es condenable, y condenado por ellos; y est� hiriente a su alegr�a y comodidad espiritual, aunque no puede llevarlos a una condena, debido a su ser en Cristo Jes�s: �l dice que hay ????? ?????????, "no una condena" a ellos, o una sentencia de condenaci�n contra ellos; que debe entenderse no de los ilegales, porque son responsables de muchas condenas de sus corazones, del mundo y del diablo; Pero de los justificables, justificables, y no hay ninguno, ni de Dios el Padre, porque justifica; Tampoco del Hijo, porque por su justicia est�n justificados; Tampoco del Esp�ritu Santo, quien da testimonio de sus esp�ritus, que est�n en un estado de justificaci�n: no hay una condena que se encuentra contra ellos, con respecto a sus numerosos pecados, originales y reales, aunque cada pecado merece uno; no uno de la ley de Dios, de los cuales el pecado es una transgresi�n, ya que eso es una ley condenando, sin embargo, solo para ellos que est�n bajo ella; No a ellos que son de Cristo, a quien ha redimido de �l: adem�s, dice el ap�stol, que no hay condena ahora a los santos; que "ahora" no debe ser considerado, como si supupara que antes hab�a condenado a ellos; Es cierto, de hecho, estaban en una sentencia de condena, seg�n lo considerado en Ad�n, y bajo un pacto de obras con �l, y en sus propias aprensiones cuando condenado; Pero como se considera en Cristo, ya que los electos de Dios siempre fueron, y que era su garant�a, y por eso su seguridad de toda la eternidad, nunca estaban en un estado de condena: ni supone esto, que puede haber condenaci�n a ellos en adelante. , aunque no ahora; Por pecado, la causa de la condena, se elimina; Cristo ha tenido la condena, sus pecados se merec�an en s� mismo; Su justificaci�n es de todo pecado, pasado, presente y venir; Su uni�n a Cristo es indisoluble, y ni el amor de Cristo, ni la justicia de Dios, admitir�n su condena; Para este "ahora", no es un "adverbio" del tiempo, sino una "nota de la ilaci�n"; El ap�stol inferraba este privilegio, ya sea de la gracia de Dios, que cuestiones en la vida eterna, Romanos 6:23; o de que ciertos creyentes de liberaci�n tendr�n del pecado, por lo que da gracias, Romanos 7:24; El privilegio aqu� mencionado es que "ninguna condena": a veces se pone la condena por la causa de la misma, que es pecado, original y real; Ahora, aunque los elegidos de Dios son pecadores, tanto por naturaleza como por la pr�ctica, y despu�s de la conversi�n tienen pecado en ellos, su santificaci�n es imperfecta, pero no hay ninguno en ellas con respecto a la justificaci�n; Todo se transfiere a Cristo, y ha eliminado todo; Ha adquirido el perd�n de todos por su sangre, ha abolido todo por su sacrificio, justifica de todo por su justicia, y le ahorra a su pueblo de todos sus pecados: la condena tambi�n puede considerarse con respecto a la culpa; Toda la humanidad es culpable del pecado de Ad�n, y son criaturas culpables, ya que son transgresores reales de la ley; y cuando se convence del Esp�ritu de Dios, se reconozca a s� mismos para ser as�; Y sobre la repetici�n del pecado, contrat� la culpa fresca en sus conciencias; Pero un coraz�n rociado con la sangre de Cristo, est� libre de culpabilidad; Porque toda la culpa del pecado se elimina a Cristo, y �l lo ha quitado; Por lo tanto, no hay obligaci�n de castigo en ellos, para quienes Cristo muri�: otra vez, la condena puede dise�ar la sentencia de ello: aunque la sentencia de la ley pas� a todos en Ad�n, y sobre el electo de Dios, como lo consideran en �l; Sin embargo, a medida que esta frase ha sido ejecutada en Cristo, como su garant�a, en su habitaci�n y en su lugar, no hay ninguna mentira contra ellos: una vez m�s, la condena puede significar la condenaci�n real, o la muerte eterna, los salarios del pecado, que est�n en los que est�n en Cristo nunca morir�; Se ordenan a la vida eterna, y se redimen de esta muerte; Se hacen vivos por Cristo, y tienen la vida eterna asegurada a ellos en �l, y que sin duda disfrutar�n: las personas interesadas en este privilegio se describen, como tal.

que est�n en Cristo Jes�s ; No como meras profesores est�n en Cristo, que pueden perderse y condenar: pero este ser en Cristo, respeta a esa uni�n y inter�s que los electos de Dios tienen en Cristo, desde el eterno: ser amado por �l con un amor eterno; lo comprometi� en una relaci�n conyugal; Elegido en �l antes de la fundaci�n del mundo; Unidos a �l como miembros a una cabeza; considerado en �l en el pacto de la gracia, cuando se comprometi� a ellos como su garant�a; Y as� se conservaron en �l, a pesar de su ca�da en Ad�n; Con el tiempo, lo tom� sobre su naturaleza, y los represent� en ella; Se calmaron en �l cuando colgaba sobre la cruz, fue enterrado, se levant� de nuevo, y se sent� en lugares celestiales; En consecuencia, de la uni�n a Cristo, y estar en �l, est�n seguros de toda la condena: o esto puede respetar un ser abierto y manifestativo en Cristo en la conversi�n, cuando se convierten en nuevas criaturas, pasan de la muerte a la vida, y nunca Entrar en la condena: Por lo tanto, se describen m�s adelante, como tal.

que caminan no despu�s de la carne ; por lo cual se entiende, no la ley ceremonial, sino la corrupci�n de la naturaleza, o la naturaleza corrupta del hombre, llamado "carne"; Porque propagado por la generaci�n carnal, tiene por su objeto, las cosas carnales, se descubre principalmente en la carne, y hace que las personas sean carnales y carnales; El ap�stol no dice, no hay condenaci�n a ellos que no tengan carne en ellos, ya que las personas regeneradas tienen; Tampoco a ellos que est�n en la carne, es decir, el cuerpo; Pero que caminan, no despu�s de la carne, es decir, la naturaleza corrupta; Y denota tal, que no sigue los dictados de �l, no lo convierten en su gu�a, o contin�e y persisten en una serie continua de pecado:

pero despu�s del esp�ritu , por lo cual se entiende, no la adoraci�n espiritual, en oposici�n a las ordenanzas carnales; sino, m�s bien, ya sea un principio de gracia, en oposici�n a la naturaleza corrupta, llamado "esp�ritu", del autor, sujeto y la naturaleza de la misma; O el Esp�ritu Santo de Dios, la causa eficiente de toda la gracia: caminar despu�s de �l, es hacerle nuestro gu�a, a seguir sus dictados, influencias y direcciones; Como tal, quien camina por la fe en Cristo, y en la imitaci�n de �l, en los caminos de la justicia y la santidad; Y tales personas caminan agradablemente, alegremente, y con seguridad: ahora deja que se lo observen, que esta caminata y conversaci�n de los santos, no es la causa de que no tenga condenaci�n a ellos; Pero es descriptivo de las personas interesadas en tal privilegio; y es evidencial de su derecho, as� como de su ser en Cristo: y puede observarse a�n m�s, que debe haber uni�n a Cristo, o un estar en �l, antes de que pueda estar caminando despu�s del Esp�ritu. La frase, "pero despu�s del esp�ritu", se deja fuera en la copia alejandriana, y en la vulgata latina, y las versiones sir�acas; y toda la descripci�n de las personas en algunas copias, y en la versi�n et�ope.

Versículo 2

Por la ley del Esp�ritu de la Vida en Cristo Jes�s, ... estas palabras son de interpretaci�n dif�cil. Pueden crecer el evangelio revelando y declarando la liberaci�n de la ley de Mois�s; Por lo tanto, puede haber "ninguna condena", Romanos 8:1, por ello. El Evangelio puede ser dise�ado por "la ley del Esp�ritu de la Vida en Cristo Jes�s"; que puede llamarse una ley, no como logrando la ley de las obras, por la cual est� abrogada; Tampoco, como se requiere que se realicen las condiciones, o como se deben observar las tareas, o al entregar amenazas en caso de desobediencia; Pero como es una doctrina, orden y cadena de verdades, ya que la palabra hebrea ???? significa, y que a veces se usa para el Evangelio, Isa�as 2:3 como ????? es, Romanos 3:27. Puede llamarse la ley o la doctrina "del Esp�ritu", porque el Esp�ritu es el autor de �l, y lo hace poderoso y efectivo para el bien de las almas; Por ello, el Esp�ritu de Dios se transmite en el coraz�n; y la sustancia de ello son cosas espirituales: y la "ley del esp�ritu de la vida", porque descubre el camino de la vida y la salvaci�n de Cristo; es el medio de acelerar los pecadores muertos; de la fe trabajadora en ellos, por la cual viven en Cristo, y de revivir los santos ca�dos; Y tambi�n proporciona alimentos espirituales, para el apoyo de la vida: y se puede decir que esto es "en Cristo", o por �l, en la medida en que proviene, y le corresponde; �l es la suma, la sustancia y la materia de ello:

La ley del pecado y la muerte puede tener la intenci�n de la ley de Mois�s, llamado "la ley del pecado"; No como si fuera pecaminoso, o ordenado o alentado el pecado, porque lo proh�be gravemente; Pero, porque por ello, a trav�s de la corrupci�n de la naturaleza del hombre, el pecado est� irritado y lo abund�; Es la fuerza del pecado, y por ello es el conocimiento de ello: y puede llamarse "la ley de la muerte", porque amenaz� con la muerte, en caso de desobediencia; Oraciones y adjudican a los transgresores a muerte; Y cuando se atiende con el poder, golpea a todas las esperanzas de la vida de un hombre, por obediencia; Deja a las personas muertas como las encuentra, y no le da vida, ni la esperanza; Por eso, ninguno puede vivir, o ser justificado: ahora, aunque Cristo es el autor de la liberaci�n, sin embargo, el Evangelio es el medio de revelar y declarar esta liberaci�n; que dise�a no una exenci�n de la obediencia, sino la libertad de la maldici�n y la condena de la misma; y este sentido bien est� de acuerdo con Romanos 8:1; Del mismo modo, las palabras son capaces de ser entendidas del poder y la eficacia del Esp�ritu de Dios, en la entrega de personas regeneradas del dominio y la tiran�a del pecado; y que puede considerarse como una raz�n por la que "caminan no despu�s de la carne, sino despu�s del esp�ritu", Romanos 8:1: "La vida" puede ser atribuida al Esp�ritu de Dios, o llamarse el esp�ritu de la vida, porque tiene vida en s� mismo como el padre y el hijo tienen; y es el autor de la vida a otros, de la vida natural a todos los hombres como criaturas, y de la vida espiritual a la gente de Dios en la regeneraci�n; y es un esp�ritu acelerado para ellos despu�s, ya que ser� para los cad�veres de los santos en la resurrecci�n: por "la ley" del esp�ritu puede ser significada, la energ�a y el poder del esp�ritu en la conversi�n; qu� trabajo requiere poder, y un hombre no tiene poder de s� mismo para efectuarlo; Pero hay un poder en el Esp�ritu, que funciona de manera irresistible, aunque no por ninguna fuerza o compulsi�n con la voluntad, pero lo traslad� con dulzura, poderosamente y eficazmente: y todo esto puede decirse que es "en Cristo": la La vida que el esp�ritu es el autor y el dador de, es en Cristo como jefe de su pueblo, el repositorio adecuado de toda la gracia, y la fuente de la vida; El propio esp�ritu est� en �l, tanto como Dios como al hombre, y como mediador, por lo tanto, los santos lo reciben y sus dones y las gracias de �l; y la ley del Esp�ritu, o su poder y eficacia en el trabajo, est� "en" o "por" Cristo, a trav�s de sus sufrimientos y su muerte, y en consecuencia de su mediaci�n: ahora esta eficacia poderosa y acelerante del Esp�ritu entrega a las personas regeneradas. de la fuerza y ??la tiran�a del pecado, llamadas aqu� "la ley del pecado y la muerte"; Una "ley del pecado", porque tiene poder y dominio sobre personas no regeneradas, su trono est� en el coraz�n del hombre, y sus leyes son muchas y poderosas; y "la ley de la muerte", porque su reinado es tir�nico, b�rbaro y cruel, es una muerte: y de su influencia gobernante, y el poder tir�nico, hace el esp�ritu de Dios liberar a su pueblo en la regeneraci�n; no del ser del pecado; ni de la rabia de ella, y la perturbaci�n que da; ni de tal poder, sino que pueden caer en el pecado; pero para que ese pecado no reina adecuadamente sobre ellos, ni legalmente, ni universalmente, por lo que para llevar la muerte en sus gracias, y sus personas en condena. Una vez m�s, esas palabras pueden entenderse de la santidad de la naturaleza humana de Cristo, como una rama de nuestra justificaci�n y la libertad de la culpa del pecado, y la condena por ello: para como "la ley del pecado y la muerte" puede dise�ar corrupci�n inherente , y la fuerza y ??poder de ello en los santos; As� que lo opuesto a ello, "la ley del Esp�ritu de la Vida en Cristo", puede significar la pureza y la santidad de su naturaleza humana.. Que la naturaleza humana de Cristo es pura y santa es segura, de los textos expresos de las Escrituras, de su uni�n al Hijo de Dios, desde los fines y prop�sitos de su suposici�n, de la ineficacia de las tentaciones de Satan�s, y de todo el curso de su vida. y conversaci�n; Porque aunque estaba a la semejanza de la carne pecaminosa, se consider� un pecador por parte de los hombres, asistieron con enfermedades, los efectos del pecado, aunque no pecaminosos, ten�an todos los pecados de su pueblo que le imputaban y sufr�an aflicciones, y por fin muerte; Sin embargo, su naturaleza era pura y no segu�a: porque no descend�a de Ad�n por generaci�n ordinaria; Y aunque hecho de una mujer, pero la carne que �l tom� de ella fue santificada por el Esp�ritu Santo; Su cuerpo fue preparado por Dios, y curiosamente forjado por el Esp�ritu, de quien toda su naturaleza humana recibi� una plenitud de santidad habitual: y esto puede llamarse "el esp�ritu de la vida" en �l, porque es un esp�ritu de aceleraci�n en la regeneraci�n, Justificaci�n, y la resurrecci�n de los muertos; "La ley" de ello, porque la santidad de su naturaleza radica, surge de, y es conforme a una ley que est� dentro de �l, escrita en su coraz�n; Y porque, junto con su obediencia y su muerte, tiene una fuerza, poder y autoridad, libre de condenaci�n; porque esto no es una mera calificaci�n necesaria de �l para ser el mediador, o lo que hace que su obediencia, sacrificio e intercesi�n, eficaz y valiosa, o es simplemente ejemplar para nosotros, pero es lo que nos imputa, como parte de nuestro justificaci�n. La ley requiere una naturaleza sagrada de nosotros, no tenemos uno, Cristo asumi� uno para nosotros, y tambi�n lo es el final de la ley, o responde el requisito de la ley a este respecto, as� como en todos los dem�s: y por lo tanto, Aunque la santificaci�n comenz� en nosotros, no nos libera del ser del pecado, y toda su fuerza y ??poder, pero la santificaci�n perfecta en Cristo liberas de toda la condena por ello.

Versículo 3

Porque lo que la ley no pod�a hacer, ... esto no debe entenderse de "la ley de la mente", en oposici�n a "la ley del pecado", que de hecho es muy d�bil e impotente; El hombre ten�a un poder originalmente de obedecer los comandos divinos, pero a trav�s del pecado, ha perdido su fuerza y ??poder; E incluso una mente renovada no puede realizar lo que ser�a, lo que se debe a la carne, o la naturaleza corrupta; Tiene fuertes deseos despu�s de la santidad, y manteniendo todos los mandamientos de Dios; Pero estos deseos no pueden ser cumplidos por �l, y de hecho, sin Cristo, no puede hacer nada bueno: ni la ley ceremonial est� destinada, aunque esto es d�bil, y hay muchas cosas que no pod�a hacer; No pod�a expiar y expiar al pecado; ni elimine la culpa de ella, ni limpie de la suciedad: pero la ley moral est� aqu� dise�ada; Esto, aunque puede, y el acuse de pecado, puede convencerlo, puede maldecir, condenar y condenar hasta la muerte; Sin embargo, no pod�a condenar el pecado en s�, que solo es abolido por Cristo; No puede restringir el pecado, ni cambiar una naturaleza pecaminosa, ni santifique un coraz�n impuro; ni libre de la culpa del pecado, ni consuera una mente angustiada bajo un sentido de ello, no puede sujetar a las personas, o llevarlas ante Dios, o darles la vida, o salvarse de la muerte; la raz�n es,.

en eso, o porque.

Era d�bil a trav�s de la carne. La debilidad de la ley es total y universal, no tiene fuerza en absoluto; Aunque no original y natural, pero accidental; Se debe a la carne, o la naturaleza corrupta del hombre: o m�s bien, la debilidad est� en hombres pecaminosos, y no en la ley; Y el sentido es este, que la naturaleza humana est� tan debilitada por el pecado, que es incapaz de cumplir la ley; La debilidad de la ley no es de s� misma, sino del hombre: a esto est� de acuerdo lo que dices los escritores jud�os,.

"No hay una palabra en la ley" d�bil ", o rota; por lo que cuando tengas m�s y lo observas, para que no lo encuentres fuerte, como un martillo que rompe las rocas, ??? ???? ???? ???", pero si d�bil, Es de ti mismo ". ''.

A lo que se puede agregar ese dicho habitual de los suyos, ??? ??? ??? ????, "No hay fuerza sino la ley" W; A menos que se pueda pensar al ap�stol para oponerse a esta noci�n de los suyos. Por tanto, debido a la debilidad de la ley, o de la naturaleza humana para cumplirlo,.

Dios enviando a su propio hijo a la semejanza de la carne pecaminosa, y por el pecado, conden� el pecado en la carne.. La persona que env�a es Dios, quien le dio la ley debilitada por la carne, contra quienes hemos pecado: y que es justo, puro y santo: qu� consideraciones realzan su gracia y bondad, en la misi�n de Cristo.. Esto debe ser entendido de Dios el Padre, que est� aqu� manifiestamente distinguido del Hijo; y qui�n es Dios, pero no �nicamente, ni a la exclusi�n del Hijo y el Esp�ritu; Y qui�n envi� a Cristo, aunque no individualmente, porque el "Se�or Dios y su esp�ritu lo envi�", Isa�as 48:16; Aunque, por lo que es m�s agradable que un padre env�e a su hijo, esto generalmente le est� atribuido; Y �l es la primera persona en la de Dios, es la primera en orden de trabajo, y as� en la redenci�n.. La persona enviada es su propio hijo; No por la creaci�n, ya que los �ngeles y los hombres son; ni por adopci�n, como se sienten; Tampoco lo llam�, a causa de su encarnaci�n, resurrecci�n o mediedad, porque era el Hijo de Dios antecedente a cualquiera de ellos; Pero su propio hijo propio, y no en ning�n sentido metaf�rico; Un hijo de la misma naturaleza con �l, engendrado de �l, y su hijo en esa naturaleza en la que �l es Dios.. El acto de enviar, no supone la desigualdad de la naturaleza; Porque aunque el que se env�a no es mayor, pero tan grande como �l que env�a; Dos iguales, por acuerdo, pueden enviarse unos a otros; Una persona divina puede asumir una oficina, y en virtud de esa consideraci�n se env�a, sin suponer la inferioridad de la naturaleza, como en el caso del Esp�ritu Santo; y una inferioridad en cuanto a la oficina, se permite en el caso del hijo; Dios envi� a su hijo bajo el car�cter de un sirviente, para hacer trabajo: tampoco este acto implica un cambio de lugar; De hecho, hay un "Terminus a quo", de donde fue enviado, desde el cielo, de su padre all�; y hay un "Terminus Anuncio", a lo que fue enviado a este mundo; Pero entonces esta llegada del cielo a la tierra, no fue por motivos locales, sino por la suposici�n de la naturaleza; Tampoco fue de ninguna falta de respeto a su Hijo, sino por amor a nosotros, que lo envi�; Tampoco fue enviado contra su voluntad; No mostr� ninguna renuencia a la propuesta a �l en el Consejo de Paz, sino la m�xima voluntad; Tampoco a su llegada al mundo: ni en el trabajo en s�, a la que entr�, y pas� con el mayor entusiasmo y alegr�a: ni lo supone, y aqu�, en la tierra, estar en un estado de ausencia. y separaci�n de su padre; Todav�a estaba en su seno, pero en el cielo, y su padre siempre con �l: pero supone que existi� antes de que se le enviaran; que era una persona, y distinta del Padre, o �l no pod�a ser enviado por �l; que ten�a autoridad de �l, considerado en su capacidad de oficina: en una palabra, este env�o del Hijo, dise�a la manifestaci�n de �l en la naturaleza humana; Como aparece a partir de la forma y la manera en que se envi�, "a la semejanza de la carne pecaminosa"; Lo que expresa la realidad de su encarnaci�n, de su muerte verdadera verdadera humana; porque la carne no debe tomarse estrictamente por una parte del cuerpo, ni para todo el cuerpo, sino para toda la naturaleza humana, el alma y el cuerpo; Aunque parec�a una naturaleza pecaminosa, pero no era pecaminosa: la semejanza de la que denota la apariencia externa de Cristo en �l; quien naci� de una mujer pecaminosa; Estaba sujeto a las enfermedades de la naturaleza humana, que, aunque no pecaminosas, son los efectos del pecado; Se calcul� entre los transgresores, se tradujo como uno �l mismo por los hombres, y se trat� como tal por la justicia de Dios; �l tiene todos los pecados de su pueblo en �l, por lo que fue responsable: "y" De ah� Dios ", por pecado, conden� el pecado en la carne"; No la ley, que era d�bil a trav�s de la carne; ni pecadores, que rompieron la ley; Pero el pecado en s�, la transgresi�n de la ley, todo tipo de pecado, y todo lo que es en ello, el acto de condenarlo, no dise�a la desaprobaci�n de Dios, y juzgalo para ser malvado; Esto no pudo, por ser, por ser contrario a su naturaleza, un acto de hostilidad contra �l, una violaci�n de su ley, y lo que trae arruinando a sus criaturas; Y esto lo habr�a hecho, si Cristo nunca hubiera sufrido en la carne; Y ha tomado otros m�todos, tanto entre sus propios pueblos como en el mundo, para mostrar su disgusto por el pecado: ni este acto tiene la intenci�n de la destrucci�n del poder y el dominio del pecado, en la regeneraci�n; Esta es la obra del Esp�ritu, y se hace en nuestra carne, y no en la carne de Cristo; Pero se entender� de la condena y el castigo del pecado, en la persona de Cristo: el PIE fue puesto sobre �l por el Padre, y �l lo tom� voluntariamente a s� mismo; La justicia lo encontr� all�, lo carga con �l, exige satisfacci�n y lo condena por ello; y por la presente se aceler� el pecado, el perd�n de la TI procur�, y fue, totalmente eliminado: ahora se dice que esto se hace "por pecado"; Algunos se unen a la frase con la parte anterior del texto, ya sea con la palabra "enviando", y tome el sentido de ser, que Dios envi� a su hijo por a su hijo, o por la cuenta del pecado, para quit�rselo y salvar a su pueblo. de eso; o "con carne pecaminosa", que fue tomada de una persona pecaminosa; pero se mantiene mejor como lo hace en nuestra versi�n, y puede ser renderizado "del pecado"; Porque conden� a Dios pecado de pecado en Cristo, es decir, por la venganza que lo tom�, en la estrictaci�n de su justicia, a trav�s de los sufrimientos de su Hijo, mostr� pecado para superar el pecaminoso; o m�s bien "por pecado"; Es decir, por una ofrenda para el pecado, por lo que la palabra se usa en Hebreos 10:6; y respuestas a ????, en Salmo 40:6, al estar hecho, que, el pecado fue condenado "en la carne" de Cristo, que fue puesto a muerte en la carne, "para" los pecados de su pueblo, y aburri� todo el castigo debido a ellos: de ah� aprendemos el mal del pecado, la estrictismo de la justicia y la gracia del redentor.

u Zohar en Lev. Fol. 3. 2. W Shirhashirim Rabba, Fol. 4. 4. 9. 4.

Versículo 4

Que la justicia de la ley podr�a cumplirse en nosotros, ... por la justicia de la ley, no se entiende la justicia de la ley ceremonial, aunque fue cumplida por Cristo; Pero de la ley moral, que requiere la santidad de la naturaleza, la justicia de la vida y la muerte en caso de desobediencia; La justicia activa, u obediencia a los preceptos de la ley, est� dise�ada aqu�. Esto es lo que exige la ley; La obediencia a los mandatos de ello es adecuadamente justicia; y por la obediencia de Cristo, nos hicimos justos, y esto le da el t�tulo a la vida eterna: ahora se dice que esto se "satisface en nosotros"; Esto no se cumple con nosotros en nuestras propias personas, ni puede ser; �Podr�a, �d�nde ser�a la debilidad de la ley? El hombre podr�a ser justificado, por lo que la gracia de Dios, y la justicia de Cristo, debe dejarse de lado: nunca hab�a un mero hombre que pudiera cumplirlo; Por la obediencia, no solo debe realizarse perfectamente, sino con la intensidad de la mente y el esp�ritu; Un hombre debe ser sin pecado en pensamiento, palabra y escritura; Y esto ser�a poner al hombre en un nivel con ADAM en un estado de inocencia, y los �ngeles en el cielo: tampoco se entiende de ninguna justicia inherente al hombre; La santidad interna nunca se llama la justicia de la ley; y se pod�a pensar que era justicia, pero nunca se puede contabilizar toda la justicia de la ley: y aunque es un fruto de la muerte de Cristo, es la obra del Esp�ritu, y no es la totalidad, ni ninguna parte de Nuestra justificaci�n: Pero esto se entender� de la justicia de la ley cumplida por Cristo, y nos imput�; Cristo ha cumplido toda la justicia de la ley, todos los requisitos de ello; Esto lo ha hecho en la habitaci�n y en lugar de su pueblo; y se les impuje, en virtud de una uni�n federal entre �l y de ellos, siendo la cabeza, y sus miembros; y la ley est� cumpliendo con �l, se considera a todos a medida que se cumpli�, o si por ellos; y por lo tanto, son personalmente, perfectamente, y legalmente justificados; Y este es el final de que se env�a el pecado, de pecado, y condenado en �l. El car�cter descriptivo de las personas, que parecen estar interesadas en esta bendici�n, es lo mismo con eso en Romanos 8:1,.

Quien camina no despu�s de la carne, sino despu�s del Esp�ritu:

Romanos 8:1.

Versículo 5

Porque ellos son despu�s de la carne, ... por la carne se entiende la corrupci�n de la naturaleza; y se pueden decir que son "despu�s de", no todos los que tienen carne en ellos, ya que los mejores santos lo tienen en ellos; La gracia regeneradora no lo elimina de ellos; Hay una diferencia entre estar dentro y despu�s de la carne, y la carne est� en nosotros; Pero tales que nacieron como nacieron, que no tienen nada m�s que carne o naturaleza corrupta en ellos, en quienes ese es el principio gobernante, cuyas mentes son carnales, y cuyo caminata y conversaci�n entera es, tal, est�n aqu�: y estos personas.

MUCHE las cosas de la carne: no solo las cosas corporales, pertenecientes al bienestar del cuerpo; o cosas naturales para la mejora de la mente; o cosas civiles, como riquezas, c. que puede ser de mente y buscada de manera legal, pero las cosas son pecaminosas, las lujurias, las obras y los pecados de la carne: que se les dice que se dice "la mente", ya que los juzgan a ser buenos; La doblada y la aplicaci�n de sus mentes son para ellos; Sus afectos se establecen sobre ellos; Son sol�citamente cuidadosos para proporcionarlos, y saborearlos y disfrutarlos: Tampoco se pregunten, ya que estos son naturales para ellos; Son opuestos a Dios y de manera agradable para ellos; No tienen mente, pensamiento, afecto, o gusto, por cualquier otra cosa; Y est� enteramente debido a la gracia poderosa, que cualquier mente, las cosas del Esp�ritu:

Pero ellos son despu�s del Esp�ritu; No quienes siguen los dictados de sus propios esp�ritus; o est�n reformados hacia afuera; Tampoco todos los regalos espirituales; o profesarse para tener la gracia y el esp�ritu de Dios; Pero tal que nacen de nuevo, se renovan en el esp�ritu de sus mentes, en quienes la gracia es el principio de gobierno: el trabajo del esp�ritu se inicia en ellos, aunque no perfeccionado: el propio esp�ritu mora en ellos, y caminan despu�s de �l. ; Sus mentes y conversaciones son espirituales, aunque puede haber una gran cantidad de carnalidad en sus corazones, pensamientos, palabras y acciones, que es una cuesti�n de dolor a ellos: esta mente.

las cosas del esp�ritu; las gracias del esp�ritu; bendiciones espirituales; las doctrinas del Evangelio; Los sacrificios y servicios espirituales: estos tienen cierta comprensi�n, pueden discernir la diferencia entre ellos y las cosas carnales, juzgarlas y aprobarlas como el derecho; Tener una gran estima y afecto por ellos, y probar una dulzura en ellos. No tienen ninguna mente naturalmente a estas cosas; Tampoco es el sesgo de sus mentes alteradas por s� mismos, ni podr�an; Esto es totalmente el trabajo del Esp�ritu de Dios; Y estas cosas se expresan solo porque, y como son agradables para la parte espiritual, el hombre interior.

Versículo 6

Porque para ser de mente carn�tima es la muerte, ... La frase El ap�stol aqu� usa, incluye la mejor parte del hombre corrupto; la mente, la comprensi�n, el juicio, la voluntad, los afectos, los pensamientos, la raz�n y los razonamientos del hombre; y puede ser representado, "la sabidur�a", o "prudencia de la carne"; llamado, para distinguirlo de esa sabidur�a que es desde arriba; de esa sabidur�a natural y civil, que es loable; Y muestra que la parte m�s sabia del hombre no es tan carnal: todo tipo de personas indigentes de la gracia de Dios est�n preocupadas en este documento; O esto se le aplica a todos, como el sensualista, el mundano, el orgulloso fariseo y el sabio disputador de este mundo. Esta sabidur�a de la carne, o la mentalidad carnal, "es la muerte"; No es que est� familiarizado con respecto a la muerte; o que tales personas son consideradas, se esfuerzan por familiarizarse con ellos; o son deseosos de ello, y estimarlo como un privilegio; Esto solo lo hacen los hombres espirituales: pero el sentido es que estos temas en la muerte; La muerte no es el objeto, sino el fin de la mentalidad carnal; La mentalidad carnal, en la medida en que prevalece en los santos, trae una muerte sobre ellos. Es cierto, de hecho, no pueden morir una muerte espiritual, o eterna; sin embargo, a veces est�n muy muertos y sin vida en sus marcos, en el ejercicio de la gracia y el despido de servicio; que se debe frecuentemente debido a su carnalidad: y el efecto de esto debe ser la muerte en los hombres carnales; Ya que se aliena de Dios; los hace transgresores de la ley, y se desagradable para su maldici�n; Establece el alma contra, y la desvela de Cristo el camino de la vida; y si la gracia no lo impide, debe ser la causa y la causa de, y emitir en la muerte eterna; Debido a que es pecado y pecaminoso, es enemistad para Dios, se descalifica para la vida, y hace que las personas se ajusten a compa�eros por los herederos de la ira:

Pero ser de mente espiritual, es la vida y la paz; Los hombres con mentalidad espiritual son las �nicas personas vivas en sentido espiritual, ya que todas las que est�n dentro y despu�s de que la carne est� muerta; Y en la medida en que prevalece la mentalidad carnal en los profesores, hay una muerte en ellas en cuanto a todos los ejercicios espirituales; y muchas veces en cuanto a la apariencia externa, no hay diferencia entre ellos y los hombres muertos: pero los hombres espirituales son evidentemente personas vivas; Tienen un discernimiento espiritual de las cosas espirituales; Ellos respiran despu�s de ellos, saborearlos y disfrutarlos; Hablan de las cosas espirituales, y caminan de una manera espiritual; no solo est�n vivos, sino animados en el ejercicio de la gracia y la descarga del deber; y son los medios para animar a los dem�s; Y su fin ser� la vida eterna; Lo que est� seguro de la voluntad declarada y la promesa de Dios, y de la gracia de la vida y el esp�ritu de la vida que est�n en ellos. "Paz" tambi�n es otro efecto de la mentalidad espiritual; Tal disfrute de la paz de la conciencia: este es un fruto del Esp�ritu; una parte del reino de la gracia es pose�da; y las cosas con las que est�n conversantes con sus mentes son productivas de ello; El cual es el don de Dios, pasa toda la comprensi�n, y es de m�s val�a que todo el mundo: tales hombres tambi�n son de disposiciones pac�ficas en los vecinos, en los vecindarios, en las familias e iglesias; inducido a la misma por los argumentos m�s nobles; Y su fin ser� la paz, que ser� perfecta y eterna.

Versículo 7

Porque la mente carnal es enemistad contra Dios, ... estas palabras contienen una raz�n por la cual el tema de la mentalidad carnal es la muerte; Porque la mente carnal, la sabidur�a de la carne, no es solo un enemigo, sino la enmedad contra Dios: contra su ser; es razones contra ella; Desea que �l no lo fuera; Forma nociones indignas de �l; lo piensa un tal como en s� mismo; y los esfuerzos para enterrarlo en el olvido, y borrar su mente todos los memoriales de �l: est� en enemistad contra sus perfecciones; ya sea negando su omnisciencia; o atraer su justicia y fidelidad; o despreciando su bondad, y abusando de su gracia y misericordia: encuentra fallas y aborra sus decretos y prop�sitos; peleas con sus providencias; Es implacable contra su palabra y evangelio; Especialmente las doctrinas particulares de la gracia, la gracia del padre en elecci�n, el Hijo en la Redenci�n, y el Esp�ritu en la regeneraci�n; y tiene al m�ximo desprecio las ordenanzas y las personas de Cristo. Esta enemistad es universal, est� en todos los hombres en insuficiencia, ya sea directo o indirecto, oculto o m�s abierto; no se merece; Es natural y profundamente arraigado en la mente, e irreconciliable sin el poder y la gracia de Dios. Se muestra en un distanciamiento de Dios; en la celebraci�n de la amistad con el mundo, albergar a los enemigos profesos de Dios, en vivir bajo el gobierno del pecado y Satan�s; al odiar lo que Dios ama, y ??en amar lo que Dios odia; Al omitir lo que Dios ordena, y cometiendo lo que proh�be; Se manifiesta en su idioma, y ??en toda la totalidad de sus conversaciones.

Porque no est� sujeto a la ley de Dios; Los hombres carnales est�n sujetos a la sentencia de condena de la ley, pero no a sus preceptos, por obediencia a ellos; Puede haber un externo, y que sea una obediencia servil, pero no es gratuita, voluntaria, interna, y a�n menos perfecta: la mente carnal est� tan lejos de una sujeci�n obediente a la ley, que est� lejos. fuera de la ley, y la ley de eso; Lo odia y la desprecia, frustre y lo contradice en cada caso, y, tanto como en ella, lo hace vac�o; que demuestra completamente la enemistad de la mente carnal contra Dios; Por la presente, su ser se niega t�citamente, su soberan�a disput�, su imagen desfigur�, su gobierno se retir� de, y estas personas se declaran, y se declaran enemigos para �l:

ninguno de ellos puede ser; Sin regenerar la gracia, sin el poder y el esp�ritu de Dios, a menos que est� escrito sobre el coraz�n por el dedo de Dios; Para los hombres carnales est�n muertos en el pecado, y as�, sin fuerza para obedecer la ley; Y adem�s, la mente carnal, y la ley de Dios, est�n directamente contrarias de uno a otro. �D�nde est� el poder del hombre y el libre albedr�o? No es de extra�ar que la mente carnal no se incline hasta el evangelio de Cristo, cuando no lo es, y no puede estar sujeto a la ley de Dios. Por lo tanto, vemos la necesidad del poder todopoderoso, y la gracia eficaz en la conversi�n. Es el trabajo de Cristo para someter a los hombres a la ley, y que se hace cuando justifica por su justicia: agradablemente a lo que Targum en Isa�as 53:11; Parafrases, por lo tanto:

"En su sabidur�a justificar� a los justos, que ???????.

?????? ??????, "�l puede sujetos a muchos a la ley". ''.

Y en Isa�as 53:11, los transgresores que ha sometido a la ley.

Versículo 8

Entonces, lo que est�n en la carne, ... que est�n en la carne son los mismos que se dice que lo han dicho, Romanos 8:5 y est�n all� descritos. Semejante.

no puede agradar a Dios; Hombres, mientras que no se regulan, y como tales, no pueden complacer a Dios; Porque a pesar de que las personas de los elegidos de Dios lo son lo suficientemente bien, como se considera en Cristo, en quien se les encantan con un amor eterno, y fueron elegidos en �l, y todas las disposiciones de Gracia y Gloria lo hicieron en �l; Sin embargo, como se considera en s� mismos, y mientras que en la carne, no lo complace; porque est�n alejados de �l, est�n alejados de su vida, son indigentes de toda la gracia, y en particular la fe, sin las cuales es imposible complacerlo; son sucios e impuros, y por lo tanto, mientras que tales no tienen disfrute de �l, o la comuni�n con �l; Por lo tanto, env�a su esp�ritu a trabajar en ellos lo que est� lo mejor que est� orientado a la vista: pero esto no debe entenderse tanto de personas, y su no aceptabilidad para Dios, a partir de la incapacidad de los hombres no regenerados para obtener la buena voluntad de Dios, o hacer su paz con �l; que no tienen inclinaci�n a, siendo enemistad contra �l; y fueron inclinados a ello, no sabramos c�mo hacerlo; Tampoco pueden dibujar cerca de Dios para tratar con �l sobre los t�rminos de la paz; Tampoco pueden hacer lo que puede procurar la paz; Cristo es la �nica persona que puede, hacer la paz, y lo ha hecho: o m�s bien, de la impotencia de los hombres naturales para hacer cualquier cosa que sea agradable a la vista de Dios. Hay muchas cosas que le son agradables, como la oraci�n, elogio, la entrega de limosnas, manteniendo sus mandamientos, y caminando en sus caminos; Pero estos hombres no regenerados no pueden hacer de manera aceptable a Dios; porque est�n sin el esp�ritu, sin Cristo, sin fe; Y en todo lo que no tienen vistas a la gloria de Dios: no tienen gracia, ni fuerza, ni principios correctos, ni finales.

Versículo 9

Pero no est�s en la carne, sino en el Esp�ritu, ... eso es, no son hombres carnales, sino hombres espirituales; o no estamos en un estado de insrenciones, sino en un estado de gracia: la raz�n que demuestra esto es,.

Si es as�, o "ver".

que el esp�ritu de Dios mora en ti; La habitacion del Esp�ritu es un car�cter distintivo de un hombre regenerado; que debe entenderse no de su omnipresencia, ni de una participaci�n de sus dones, ya sean ordinarios o extraordinarios: ni el esp�ritu de Dios solo vive en su pueblo por sus gracias, sino en persona como en el cargo, y en una forma de favor especial; Como un esp�ritu de iluminaci�n, regeneraci�n, santificaci�n y fe, como un edred�n, un esp�ritu de adopci�n, un intercesor, y como promesa y sello de felicidad: qu� habitabilidad es personal; No es peculiar para �l a la exclusi�n del Padre y del Hijo; es expresivo de propiedad y dominio; no se limita a las almas de los hombres, porque tambi�n mora en sus cuerpos; Es operativo, poderoso y perpetuo; Es la seguridad de la perseverancia de los santos, y la promesa de su resurrecci�n y su gloria futura. Esto se le debe no a ninguna bondad en ellos, o para cualquier condici�n f�sica y preparaci�n de los suyos para recibirlo; Pero a una uni�n federal a Cristo y en relaci�n con �l, a la ascensi�n e intercesi�n de nuestro Se�or, y al amor y la gracia del Padre; Y esto demuestra que un hombre sea un hombre regenerado, estar en el esp�ritu, y no en la carne; Porque el Esp�ritu de Dios nunca es en este sentido en un hombre no regenerado, ni est� en ning�n sentido sin su gracia; de modo que la morada del esp�ritu es la gran evidencia de relaci�n con Dios, de un inter�s en Cristo y la uni�n para �l, y del estado de un hombre y condicionar a Dios-Guardia;

Ahora, si alg�n hombre no tiene el esp�ritu de Cristo, no es de suya. Por "el esp�ritu de Cristo", no se entiende el alma humana de Cristo; ni su naturaleza divina; ni su Evangelio, que es el Esp�ritu que da vida; Pero el Esp�ritu Santo, la tercera persona en la Trinidad, la misma que se llama el Esp�ritu antes; Y demuestra que Cristo sea Dios, �l procede de �l como del Padre, es enviado por �l, y con lo que la naturaleza humana de Cristo fue instalada y llena. Los jud�os x a menudo hablan de ??? ?????, o ???? ????? "El Esp�ritu del Mes�as". Ahora, para tenerlo apenas es participar de sus dones, sino de sus gracias; ser pose�do de �l como propio; Tener la comuni�n con �l, y tenerlo mordeando en nosotros. Hay algunos que no lo tienen, ni nunca lo tendr�n, siendo ninguno de Cristo; y los elegidos de Dios, mientras que en un estado no regenerado, est�n sin �l; Y mientras que, aunque son sus elegidos y adoptados, son los suyos por el regalo de su padre y su propia compra, son sus indulgadas a trav�s de su sangre, y sus justificados a trav�s de su justicia; Sin embargo, no son sus regenerados, llamados y santificados; Tampoco pueden reclamar ning�n inter�s en �l; Tampoco se sabe que son los de ellos mismos u otros; Tampoco tienen ninguna comuni�n con �l, o disfrute de �l.

x Zohar en Gen. Fol. 19. 3. 107. 3. 128. 3. Baal Hatturim en Gen. 1, 2. Caphtor, Fol. 113. 2.

Versículo 10

Y si Cristo est� en ti, ... no, como est� en todo el mundo, y en todas sus criaturas, o circunscriptivamente, y a la exclusi�n de s� mismo en otro lugar; Porque su persona est� arriba en el cielo, su sangre est� dentro de la vail, su justicia es sobre su pueblo, y su esp�ritu y gracia est�n en ellos; Y as� viene a estar en ellos, est� formado en sus corazones por el Esp�ritu de Dios en la regeneraci�n, cuando el Padre lo revela no solo para ellos, sino tambi�n en ellos; Y �l mismo entra y toma posesi�n de ellos como suya, se manifiesta a ellos, comunica su gracia, y les otorga comuni�n con �l. Este es su caso,.

El cuerpo est� muerto debido al pecado: por lo que se entiende, no el cuerpo del pecado, aunque esto se llama un cuerpo, y un cuerpo de muerte, pero no est� muerto, mucho menos, es as� como raz�n de pecado; Pero este cuerpo carnal, porque lo responsabilizaba con las aflicciones, que se llaman muertes, tiene las semillas de mortalidad en ella, y en un poco de tiempo mueran, a pesar del don de la misma a Cristo, aunque se redimiste por su sangre, y se uni� a �l; La raz�n de ello no es simplemente el decreto de Dios, ni surge de la constituci�n original del cuerpo, pero el pecado es la verdadera raz�n de ello, el pecado original y el pecado real e inverbadador, pero no por el castigo por ello, porque Cristo ha tenido que, la muerte es uno de los privilegios de los santos, es para su bien, y por lo tanto, lo desea; Pero para que puedan librarse de ella, y libres de todos esos problemas, que son las consecuencias de ello:

Pero el Esp�ritu es la vida, debido a la justicia; no el esp�ritu de Dios, que vive en s� mismo, es el autor de la vida a los dem�s, de la vida natural y espiritual, contin�a como un principio de vida en los santos, es el compromiso de la vida eterna, y es as� a ellos debido a los La justicia de Cristo ni la gracia, o la nueva criatura, que a veces se llama esp�ritu, y se puede decir que es la vida, vive a la justicia, y est� debido y respaldado por la justicia del Hijo de Dios; Pero el alma del hombre est� aqu�, en oposici�n al cuerpo, que es de naturaleza espiritual, inmaterial e inmortal; Y esto se puede decir en los creyentes para ser vida o vivir, ya que no solo vive naturalmente, sino espiritualmente; Vive una vida de santidad de Cristo, una vida de fe sobre �l, y una vida de justificaci�n por �l, y vivir� eternamente; Primero en un estado separado del cuerpo despu�s de la muerte, hasta la ma�ana de la resurrecci�n, no muere con el cuerpo, ni duerma con �l en la tumba, ni en ning�n "Limbus" o estado de Purgatorio, sino en el Para�so, en El cielo, en los brazos y la presencia de Cristo, donde no est� inactivo, sino que est� empleado en el mejor de servicio: y despu�s de la resurrecci�n, vivir� con el cuerpo en la gloria para siempre; Y esto se debe a la justicia, no a la justicia del hombre, sino la justicia imputada de Cristo; Porque as� era pecado, y la p�rdida de justicia, por lo tanto, lo que trajo la muerte en el hombre, la justicia de Cristo es aquella en la que viven los creyentes ahora, y es su derecho y el t�tulo de la vida eterna en el futuro.

Versículo 11

Pero si el Esp�ritu de �l que levant� a Jes�s de los muertos, ... estas palabras no deben entenderse como lo son por algunos, del trabajo continuo de la santificaci�n en el coraz�n por el Esp�ritu de Dios; Para la regeneraci�n, y no la santificaci�n, se indica por aceleraci�n, lo que se produce la aceleraci�n cuando el esp�ritu de Dios primero toma su vivienda en el alma; Adem�s, el ap�stol hab�a hablado de la vida del esp�ritu o alma antes; y son cuerpos mortales, y no sus almas mortales, que se dice que se aceleran, porque estos no pueden significar el cuerpo de pecado, o los restos de la corrupci�n, ya que se dice que son, y que nunca se aceleran, ni nunca pueden ser. Comprender las palabras en tal sentido, no es tan agradable para la resurrecci�n de Cristo aqu� mencionado; Mientras que la resurrecci�n de Cristo a menudo se usa como un argumento de los nuestros, que est� dise�ado aqu�, donde el ap�stol sostiene de uno a otro. El esp�ritu.

habita en los santos como sus templos: el esp�ritu que mora en ellos es: "El esp�ritu de �l que levant� a Jes�s de los muertos"; Por quien se entiende a Dios, el Padre, a quien la resurrecci�n de Cristo de los muertos est� aqu� y en otros lugares atribuidos. Se usa este "perifrasis" de �l, para expresar el poder, la justicia y la gracia de Dios en la resurrecci�n de su hijo; para mostrar que el Esp�ritu de Dios estaba preocupado en ello; y la grandeza de la persona del esp�ritu que mora en los santos; y qu� motivo tienen que creer la santificaci�n de sus almas, y la redenci�n de sus cuerpos, ya que un esp�ritu tan divino mora en ellos; por qu�,.

El que levant� a Cristo de los muertos, que es el Padre,.

Tambi�n se acelerar� con sus cuerpos mortales por su esp�ritu que mora en usted; No las almas de los santos, por estos mueren, sino que sus "cuerpos", llamados "mortales", porque se designan hasta la muerte, est�n en la sentencia de ello, y en la que ya funciona; "Tus cuerpos" y no otros; los mortales, y no espaciosos, celestes, inmortales; Lo mismo que llevan con ellos aqu�, y en los que el Esp�ritu de Dios se hab�a vuelto. Estos se aceler�n. Los jud�os frecuentemente expresan la resurrecci�n de ????? ?????, "la aceleraci�n de los muertos" algunos distinguen y entre ????? "la resurrecci�n" de los muertos, que es com�n a los malvados, y ????, "la aceleraci�n" de ellos, peculiar de la Aunque, sin embargo, se observa, esta distinci�n no siempre tiene: sin embargo, este acto de aceleraci�n parece aqu� dise�ado para expresar la peculiar bendici�n, de los santos; Porque aunque los imp�os se levantar�n de los muertos, sin embargo, no se levantar�n con los santos, ni en virtud de la Uni�n a Cristo, ni a una vida eterna de alegr�a y felicidad; En este sentido, los santos solo se calmar�n, "por el Esp�ritu"; No como instrumento, sino como un coeficiente causa con el padre y el hijo: o "debido al esp�ritu que mora en ti", los cuerpos de los santos son los templos del Esp�ritu Santo, son santificados por �l, donde �l contin�a detenerse en virtud de la Uni�n a Cristo, y en consecuencia, los acelerar� en el �ltimo d�a; As� que los jud�os dicen, que el Esp�ritu Santo aporta a la resurrecci�n de los muertos.

y vid BUTTORF. L�xico. Rab�nico. pag. 745, 746. Z Misn. Sota, c. 9. Sect. 15.

Versículo 12

Por lo tanto, los hermanos, somos deudores, ... la denominaci�n, "hermanos", no se usa, porque fueron as� por naci�n o por sangre, aunque muchos en la iglesia en Roma eran jud�os; ni simplemente en una forma familiar libre de hablar; pero m�s bien debido a la membres�a de la Iglesia, y especialmente porque estaban en la misma relaci�n espiritual con Dios y en Cristo: y el uso de �l por el ap�stol, muestra su gran humildad y condescendencia, y su amor y afecto por ellos, y est� dise�ado. para atraer su atenci�n y considerar lo que estaba a punto de decir, a ellos y de ellos; como que eran "deudores"; que se entender� de ellos no como pecadores, que, como tales, hab�an estado en gran medida en deuda, y no ten�an nada que pagar, y fueron responsables de la prisi�n del infierno; Porque ninguna mera criatura podr�a haber pagado sus deudas; Pero Cristo lo ha hecho por ellos, y en este sentido no fueron deudores: pero eran tan santos, como los hombres liberados de la condena y la muerte; La doctrina de la libertad cristiana no es licenciosa; No est� exento de la obediencia, pero cuanto m�s y mayores, los favores son los que disfrutan tales hombres, m�s obligados a ser agradecidos y obedecer; Son deudores, o obligaci�n de comerciante,.

No a la carne, para corruptar la naturaleza,.

vivir despu�s de la carne, los dictados de eso; Tampoco deben ser, tanto en la cuenta de Dios, ya que eso es enemistad para �l, y no est� sujeto a su ley; y por su propia cuenta, porque es un enemigo para ellos, les presenta el reproche y los expone a la muerte; Pero aunque no se expresa, se entiende que son deudores a Dios; a Dios el Padre, tanto como el Dios de la Naturaleza, como de la gracia, como Dios Pacto y Padre en Cristo, quien los ha bendecido con todas las bendiciones espirituales en �l; a Cristo mismo, quien los ha redimido por su sangre: y al Esp�ritu de Dios que est� en ellos, y por lo que ha estado, es, y ser� para ellos.

Versículo 13

Porque si vives despu�s de la carne, morir�s, ... Tales personas est�n muertas, mientras viven, y morir�n, y morir�n una segunda o una muerte eterna, si la gracia no lo impida. Se puede preguntar, si uno que haya recibido la gracia de Dios en verdad, puede vivir despu�s de la carne; La carne, o la naturaleza corrupta, aunque a�n en tal persona, no tiene el dominio sobre �l: vivir en el pecado, o en un curso continuo de pecado, es contrario a la gracia de Dios; Pero la carne puede prevalecer y influir enormemente en la vida y la conversaci�n, por un tiempo; cu�nto tiempo puede ser el caso de un verdadero creyente, bajo retrocesos, a trav�s del poder de las corrupciones y tentaciones, no se puede conocer; Pero seguro que es, que no estar� siempre as� con �l. Puede haber indagado a�n m�s, ya sea que dicho sea tan dejado para vivir despu�s de la carne, como para morir y perecer eternamente; Cristo dice expresamente, tal no morir� que vive y crea en �l; La gracia, que se implanta en sus almas, es una semilla incorruptible y nunca muriendo; La gracia y la gloria se conectan inseparablemente juntos; Pero entonces tales personas pueden morir con respecto a sus marcos, sus comodidades y el ejercicio vivo de la gracia, que parece estar aqu� destinada; Como aparece desde la pr�xima cl�usula,.

Pero si a trav�s del esp�ritu mortifica las escrituras del cuerpo, vivir�s. Esto no debe entenderse de la mortificaci�n del propio cuerpo; Tampoco dise�a ninguna maceraci�n o aflicci�n por parte de ella por ninguna severidad de la vida; ni de la destrucci�n del cuerpo del pecado por Cristo: o del ser y principios del pecado en los santos por el Esp�ritu de Cristo; que es contrario a las Escrituras, a la experiencia de los santos, que lo encuentran en ellos, con vida en ellos y a sus expectativas, mientras que en este mundo: ni es esta mortificaci�n para ser considerada como parte de la regeneraci�n, que por algunos divinos. est� hecho para consistir en un sentido del pecado, el dolor por ello, y el odio, para evitarlo, y en una expulsi�n de h�bitos e inclinaciones viciosos; Pero debe observarse, que el ap�stol est� escribiendo a las personas que ya estaban regeneradas; Tampoco exhorta a las personas a regenerarse, lo que �l har�a aqu�, si este fuera el sentido; La regeneraci�n es una obra del Esp�ritu de Dios, en la que los hombres son pasivos, mientras que en la mortificaci�n aqu� hablados de los santos est�n activos, bajo la influencia del Esp�ritu de Dios; Adem�s, la regeneraci�n se realiza a la vez, y no admite t�tulos; y en y por eso, pecado, en cuanto a su ser y principio, est� tan lejos de ser destruido, que parece m�s bien revivir en el sentido y la aprensi�n de las personas regeneradas: pero es una mortificaci�n de las actuaciones externas del pecado en el conversaci�n, llam�, "las escrituras del cuerpo": y en el claromontane ejemplar, y en la versi�n latina de la vulgata, "las escrituras de la carne": o como la versi�n sir�aca lo hace, ?????, "las conversaciones", o modales de ello, y as� la versi�n et�ope; Es decir, su curso externo de la vida: y significa un Subduito y debilitando el vigor y el poder del pecado en las vidas y conversaciones de los santos, a los que la gracia y la asistencia del esp�ritu son absolutamente necesarias; y tales que est�n habilitados para hacerlo, "vivir�" c�modamente; Tendr�n comuni�n con Cristo aqu�, y vivir�n una vida de gloria con �l en lo sucesivo. Tal forma de hablar como esto es utilizada por los jud�os; dicen que ellos.

"�Qu� har� un hombre que pueda vivir? Es respondido, ????.

????, "�l se mortificar� a s� mismo"; ''.

que el brillo explica por "se humillar� a s� mismo"; Camina humildemente ante Dios y los hombres, en su vida y conversaci�n.

un t. bab. Tamid, Fol. 32. 1. VID. T. BAB. Beracot, Fol. 63. 2. Raya Mehimna en Zohar en �xodo. Fol. 65. 3.

Versículo 14

Para tantos como los lideran por el Esp�ritu de Dios, ... no por el Esp�ritu del Mundo, o del Diablo, o por sus propios esp�ritus: el acto de l�der atribuida al Esp�ritu est� en alusi�n a los principales de personas ciegas, o tales que est�n en la oscuridad; o m�s bien a la gu�a de los ni�os y ense�arlos a ir; lo que supone la vida en aquellos que se dirigen, y cierto grado de fuerza, aunque una buena debilidad; y es una muestra de gracia poderosa y eficaz, y siempre es por su bien: el Esp�ritu de Dios los lleva del pecado, y de una dependencia de su propia justicia, en los caminos que antes no lo sab�an, y en el que deber�an ir, en los caminos de la fe y la verdad, de la justicia y la santidad, y de un derecho, aunque a veces una manera aproximada; �l los lleva a la persona, la sangre y la justicia de Cristo, y a la plenitud de la gracia en �l; en la presencia de Dios, a la casa y las ordenanzas de Dios; en las verdades del Evangelio, desde un grado de gracia a otro, y por fin a la gloria; lo que hace gradualmente, por poco y poco, los lleva a ver la iniquidad de sus corazones y naturalezas, a sostener a Cristo y la salvaci�n por �l, en las doctrinas de la gracia, y el amor y el favor de Dios, y proporcionalmente a la fuerza que da: ahora esas personas,.

Son los hijos de Dios: no en sentido tan alto como Cristo; ni en tan bajo sentido como era Ad�n, y los �ngeles son; Mucho menos en tal sentido como los magistrados malvados. ni simplemente como profesores de la religi�n en com�n; Pero por la adopci�n, no nacional, como la de los jud�os, sino especial; y que tiene alg�n acuerdo con la adopci�n civil, es de personas a una herencia, que no tienen derecho legales, y se hace libremente: aunque hay una diferencia entre el uno y el otro; Porque en la adopci�n divina, no hay necesidad de lado del adoptante; Tampoco vale la pena en el lado de la adoptada; Las calificaciones adecuadas se transmiten para el disfrute de la herencia, y que se disfruta, el padre y el primer nacimiento viven, y es una herencia que supera enormemente a todos los dem�s: ahora esta bendici�n de ser los hijos de Dios, no se debe a nosotros mismos. , ni a nuestros padres terrenales, sino a Dios; al Padre, quien predestin� a �l, y lo arregl� en el pacto de la gracia; A Cristo, es por �l, como el Hijo de Dios, es a trav�s de �l, como el mediador, y es para �l, es por su gloria; Y tambi�n al Esp�ritu de Dios, quien lo manifiesta, trabaja la fe para recibirlo, testigos y se sella hasta el pleno disfrute de ello. Este favor es un ejemplo de la gracia sorprendente, supera las otras bendiciones, hace que los santos honorural pueden ser atendidos con muchos privilegios y duran para siempre: tales que est�n en esta relaci�n con Dios, deben atribuirlo a su gracia, para exigirlo con Agradecimiento, y una conversaci�n convirti�ndose, para ser seguidores de �l, y amar, honrar y obedecerlo.

Versículo 15

Porque no he recibido el esp�ritu de la esclavitud nuevamente para temer, ... por "el esp�ritu de esclavitud", no se entiende, no el esp�ritu de Dios: porque esto es solo lo contrario de su car�cter, que es un "esp�ritu libre" , o ??? ?????, "un esp�ritu de libertad"; y es contrario a su trabajo y su oficina, que es mostrar un alma su estado de esclavitud por naturaleza y entregarlo; Y aunque el miedo puede surgir de las convicciones del pecado, pero esto elimina por los descubrimientos del amor; Adem�s, su trabajo es hacer la aplicaci�n de la gracia y la justicia a los pecadores sensibles, y para administrar la comodidad a las mentes angustiadas, y hacer que se encuentren para la gloria; Y tambi�n es contrario al car�cter de las personas en las que mora, qui�nes son los hijos de Dios; Adem�s, el Esp�ritu de Dios, como un esp�ritu de adopci�n, est� en el propio texto, se opone manifiestamente a este esp�ritu: pero por ello se pretende que el propio esp�ritu de un hombre mientras est� en un estado de ungeneraci�n, y particularmente a la vez en virtud de una obra de la ley; Y se refiere a ese esp�ritu "farisaical" que prevaleci� entre los jud�os. Los hombres en un estado de naturaleza est�n bajo un esp�ritu de esclavitud a las lujurias de la carne; Por estos, son cautivados y esclavizados, y la consecuencia de la misma es una detenci�n temerosa, cuando se condena, de la muerte, el juicio y la ira por venir. Est�n en la esclavitud al Dios de este mundo, que los llevan cautivos, y al inyectarlos en ellos temores de muerte, est�n sujetos a la esclavitud. Los jud�os en particular estaban en esclavitud a la ley, ceremonial y moral; a la ley ceremonial, como la circuncisi�n, la observaci�n de los d�as y las multitudes de los sacrificios. Esta ley fue una letra de ordenanzas contra ellos; Los oblig� a mantener toda la ley moral; Los sacrificios de ella no pod�an quitar el pecado; El incumplimiento de ella, ser punible con la muerte, debe inducir inevitablemente un "esp�ritu de esclavitud para el miedo": estaban en esclavitud a la ley moral, que naturalmente se re�nen, ya que exige una obediencia perfecta, pero no da fuerza para actuar; Como muestra a un hombre, su pecado y su miseria, pero no su remedio, ya que acusa a los cargos de pecado, y maldiciones y condena, por adem�s, un esp�ritu de esclavitud se lleva a personas a trav�s de ella, cuando buscan la justificaci�n y la salvaci�n por las obras. de ello, porque tal obedece con puntos de vista mercenarios, no del amor, sino el miedo; Y sus comodidades se elevan y se caen de acuerdo con su obediencia: ahora estos creyentes, aunque anteriormente hab�an estado bajo tal esp�ritu de esclavitud, ahora se entregaron de �l; Tampoco deber�an volver a hacerlo:

Pero he recibido el esp�ritu de adopci�n, por el cual est� dise�ado no un esp�ritu de caridad, o amor, o gracia inherente: la adopci�n no se debe a la gracia inherente, o es parte de ella: la regeneraci�n y la adopci�n difieren; La adopci�n hace a los hombres los hijos de Dios, la regeneraci�n los hace parecer que son as� d�ndoles la naturaleza de los ni�os; La adopci�n no es una obra de gracia en nosotros, sino un acto de gracia sin nosotros, teniendo todo su estado en la mente de Dios; Es antecedente a una obra de gracia, la gracia inherente es una consecuencia de la misma, aunque ning�n hombre sabe, o tiene la comodidad de su adopci�n, hasta que �l cree: m�s bien un ni�o filial como esp�ritu, tal esp�ritu como se convierte en los hijos de Dios est� aqu� significado; un esp�ritu de libertad con Dios, de la reverencia de �l, y del amor de �l, y de la obediencia a �l; saltando del afecto filial y sin puntos de vista mercenarios; Un esp�ritu manso, inofensivo e inofensivo. Aunque parece que lo mejor de todo lo entienda, el Esp�ritu Santo Santo de Dios, que se distingue del esp�ritu de los creyentes, Romanos 8:16, y se llama "el esp�ritu de su hijo" en un lugar paralelo, G�latas 4:6, y se opone a enfrentarse aqu� a un esp�ritu de esclavitud, y puede ser llamado as� porque, como un esp�ritu de gracia, fluye de la adopci�n; y es el descubridor, el aplicador, el testigo y el ratificador de la bendici�n de la adopci�n; y es el compromiso, serio o sellado de la adopci�n futura o la herencia eterna: ahora se recibe el esp�ritu como tal del Padre y el Hijo a los corazones de los creyentes, por los medios del Evangelio, con el fin de dar a conocer su adopci�n. a ellos, que es un ejemplo de gracia, y debe ser reconocido; por.

Lloramos Abba, padre: por la ayuda del esp�ritu de adopci�n; Nosotros, los santos bajo la dispensaci�n del Evangelio, en oposici�n a la legal, bajo la cual no ten�an esa libertad; "Llor" que denota una vehemencia interna y afecto de la alma, y ??un llamado hacia afuera a Dios, como padre, con confianza; "ABBA, PADRE, PADRE" es la explicaci�n de la palabra "abba", y que se agrega para la explicaci�n, y expresar la vehemencia del afecto, y la libertad y la libertad que pertenece a los ni�os: las palabras en el original son , la �nica palabra sir�aca en uso con los jud�os, el otro un griego, y denota que hay un padre de jud�os y gentiles. La palabra "abba" significa "mi padre", y es expresivo de inter�s y de fe en ella; y leer al rev�s es lo mismo que hacia adelante, Dios es el padre de su pueblo en la adversidad, as� como la prosperidad; Es la palabra usada por Cristo mismo en oraci�n, y que dirige a su pueblo a; Decir m�s, es una palabra que los jud�os no permitieron a los sirvientes, solo Freemen hiciera uso, y para ser llamado;

"Es una tradici�n; (diga que B,) que los sirvientes y las telesas, no usan para llamar a ??? ???? ????? ??????", padre, uno, o madre, uno, uno ";".

En alusi�n a la que sugiere el ap�stol, que solo los hombres, como los que tienen el esp�ritu de adopci�n, y no los sirvientes o los bondmen, pueden hacer uso de esta palabra "abba", o llamar a Dios su padre.

B T. Hieros. Niddah, siguiendo. 492. T. BAB. Beracot, Fol. 16. 2. Massecheth senachot, c. 1. Sect. 13. Maimon. Hilch. Nechalot, c. 4. Sect. 5.

Versículo 16

El Esp�ritu en s�, vale el testigo, .... Lo que el Esp�ritu de Dios testifica es,.

que somos los hijos de Dios; lo que supone el caso en cierto sentido dudoso e incierto, al menos que se llama en cuesti�n; No por otros, aunque a veces es, como por Satan�s, que no tiene que parecer extra�o, ya que llam� a cuestionar la filiaci�n de Cristo mismo, y por el mundo que los conoce no, y por los buenos, hasta que sean mejor informados: Testimonio del Esp�ritu no es la satisfacci�n de los dem�s, sino a los santos mismos; que est�n listos para dudar de ella a veces, debido a la grandeza del favor, y su propio pecado y indignidad; especialmente despu�s de retroceder; a trav�s de las tentaciones del diablo, y debido a sus numerosas pruebas y aflicciones. Ahora este testigo del Esp�ritu es establecerlo y confirmarlo; No hacer lo que Surer Surer, porque eso se mantiene en la fundaci�n segura de la predestinaci�n, en el pacto inalterable de la gracia, en la uni�n a Cristo; Redenci�n por �l, el don de Cristo y la continuidad del Esp�ritu; Pero para asegurarlos, y de su inter�s en ello; porque el testimonio se da "a nuestros esp�ritus"; As� que las palabras son le�das por las versiones sir�acas, �rabes y et�opeas, y por el lat�n vulgate; que la lectura parece mejor que.

con nuestros esp�ritus; Porque nuestros propios esp�ritus no son testigos para nosotros mismos: el Padre y el Hijo son testigos co-testigos del Esp�ritu, pero no nuestros propios esp�ritus; Los esp�ritus de los santos son ellos que reciben el testimonio del Esp�ritu de Dios, a los que se hace; No a sus o�dos, porque no es un testimonio audible; Pero a sus corazones, es interno; a sus almas renovadas, donde la fe est� forjada para recibirla; a sus entendimientos, que puedan conocerlo y ser seguro de ello; a sus esp�ritus, que son aptos para desmayarse y dudar de ello. Ahora es "el Esp�ritu en s�" que lleva a este testigo, y no a otros, o por otros, pero �l mismo en persona; Qui�n es un testigo divino, cuyo testimonio debe ser mayor que otros, y un fiel, que nunca enga�ar�; Porque testigos lo que �l sabe, y qu� es seguro y seguro: su propio ser y su habitaci�n en los santos son testigos y pruebas de su adopci�n; Sus poderosas operaciones y sus aterrizajes divinos persuad�an a una creencia de la verdad; y derramando en el extranjero el amor del padre en el coraz�n, y por la aplicaci�n de promesas del Evangelio, causa y los alienta a "llorar a Abba", padre; Que es un maravilloso ejemplo de su condescendencia y gracia.

Versículo 17

Y si los ni�os, entonces herederos, ... Los ni�os, ya sean naturales o adoptados, son herederos a sus padres, y de acuerdo con las leyes romanas, que algunos piensan que el ap�stol aqu� respeta, ya sea hombre o mujer; Pero de acuerdo con las leyes jud�as C, las hembras no hemos heredado solo en caso de falta de problema masculino; Porque aunque las hijas de Job heredadas con sus hijos, este fue un caso peculiar; Y los escritores jud�os dicen que, fue ???? ?????? ??????, "por su valor y su belleza"; Sin embargo, los ni�os adoptados entre ellos, ya sean hombres o mujeres, eran iguales a los ni�os naturales en poseer la herencia; Sin embargo, el ap�stol incluye ambos aqu�, que son todos en Cristo Jes�s, y son todos los hijos de Dios por la fe en �l, y as�.

herederos de Dios: de manera eficiente, los hace herederos; No son as� por naturaleza, ni se convierten en tales por las obras de la ley; Pero Dios su rica gracia los adopta en su familia, los engendifica de nuevo, y otorga libremente la herencia sobre ellos: o subjetivamente, son herederos de s� mismo; �l no solo los hace sus herederos, sino que �l mismo es su herencia y porci�n; Son herederos de todas las cosas que son suyas; Comparten en su amor, gracia y misericordia; y su sabidur�a, poder, verdad y fidelidad, y de hecho, cada perfecci�n de las suyas se compromete a su lado, y a su favor; Todas las cosas son las que hacen que Dios sea su Dios y su padre; El Evangelio y los Ministros de TI son suyos; El mundo y las cosas de ello, la vida y la muerte, las cosas presentes y las cosas por venir; El cielo y la felicidad, que pasan por los nombres de la gloria, las riquezas de gloria, el reino, la vida eterna y la salvaci�n, est�n representadas como cosas que deben ser heredadas por los santos. Los jud�os hablan de la heredaci�n del hombre de Dios, ya que el tono m�s alto del hombre de la grandeza puede llegar; Explicando as� y parafrasear en los nombres de los lugares de los que viajaron los israelitas, N�meros 21:18, diga e.

"Cuando un hombre se hace como un desierto, lo que es com�n a todos, la ley se le da por regalo, como se dice," y del desierto a Matta�a ": y cuando se le da por regalo, ???? ??, "Dios hereda", como se dice, "y de Mattanah a Nahaliel"; el brillo sobre �l es, la ley se convierte en �l ??? ????, "como herencia"; y cuando ????? ?? ", Dios hered� ", asciende a su grandeza, es decir, al tono m�s alto de �l, como se dice, de" Nahaliel a Bamot "; ''.

Porque cuando un hombre es digno de esto, como observa uno de sus comentaristas en este lugar, se le llama "la herencia de Dios", seg�n Deuteronomio 32:9; Pero nuestro ap�stol no habla de los santos como la herencia de Dios, que para estar seguros de que son, sino de Dios como suya; Y no de su heredar la ley, sino a Dios mismo, que es ciertamente el tono m�s alto del honor y la grandeza que los hombres pueden disfrutar. Se agrega,.

y herederos conjuntos con Cristo: es a trav�s de �l, son herederos de Dios y de la gloria; Y con �l participar�n y disfrutar�n de la herencia, lo que se asegura a ellos por sus co-herederos con �l: tampoco lo hace, en absoluto derogar del honor de Cristo, como heredero de todas las cosas, ya que �l es el primog�nito entre Muchos hermanos, y en esto, como en todas las cosas, tiene la preeminencia. Pero antes de que los santos disfruten de la herencia con Cristo, deben esperar sufrir con �l y para �l; Aunque en el tema, pueden estar seguros de esto, que se glorificar�n juntos; Sus sufrimientos se encuentran en el camino a la gloria, y la gloria es y ser� el final de sus sufrimientos:

Si es as�, ya sea que suframos con �l, para que tambi�n estemos glorificados juntos: Cristo y su gente son una, �l la cabeza, y ellos los miembros, sufren juntos; Cuando sufri�, sufrieron con �l y en �l, como su cabeza y representante; y participan de la virtud y la eficacia de sus sufrimientos; Y tambi�n sufren aflicciones, muchas de ellas al menos del mismo tipo con Cristo, solo con estas diferencias; Sus males eran penales, no; Se les asisti� con un vasto sentido de ira y terror, a menudo con, alegr�a y comodidad; Sus fueron meritoriosos, no por eso. Adem�s, muchos de sus sufrimientos son por el bien de Cristo y su Evangelio; Por otro lado, por la raz�n de esa uni�n, que es entre Cristo y los creyentes, sufre con ellos, considera sus aflicciones, y simpatiza con ellos; y la consideraci�n de esto anima enormemente y los alienta en sus sufrimientos, y especialmente cuando observan que se "glorificar�n juntos"; No con su gloria esencial, ni con su gloria mediatoria, sino con esa gloria que su padre le ha dado por ellos. Hay una glorificaci�n de los santos en Cristo, y una glorificaci�n de ellos por Cristo, y una glorificaci�n de ellos con Cristo, que consistir� con la semejanza con �l, y en la visi�n eterna y el disfrute de �l.

c Misn. Bava Bathra, c. 8. Sect. 2. T. Hieros. Bava Bathra, Fol. 16. 1. D Jarchi en Job XLII. 15. E T, BAB. NEDARIM, FOM. 55. 1. F EN YAACOB, FOM. 22. 1.

Versículo 18

Porque creo que los sufrimientos de este tiempo actual, ... por "este tiempo presente" pueden ser significados, la edad actual, en la que vivi� el ap�stol; que era una �poca en la que el pueblo de Dios sufri� mucho, como fue predicho por Cristo, y que fue necesario para la confirmaci�n del Evangelio; Para la gracia y la fuerza, se les dio la resistencia a sus pruebas; y el poder de Dios fue visiblemente para ser visto en el apoyo de ellos; Aunque esta no fue la �nica edad sufrida: por lo tanto, por el momento actual puede ser entendido, el momento presente de la vida aqu� en la tierra; que es un momento de sufrimiento, y que no puede ser de otra manera, considerando el mundo en el que somos, y la naturaleza de la misma, el estado y la condici�n de nuestras almas, y la constituci�n de nuestros cuerpos, y los muchos enemigos que tenemos sobre nosotros; Pero entonces este tiempo de vida actual es el �nico tiempo de sufrimiento para los santos, porque apenas antes se retira de por lo tanto, pero est�n en el cielo, donde ni los hombres malvados ni los demonios pueden alcanzarlos, donde sus almas son liberadas del pecado y la incredulidad. , de dudas y miedos, y todo lo que es angustioso; Y despu�s de la resurrecci�n, no habr� m�s enfermedades ni la muerte en sus cuerpos; Y este tiempo presente es m�s que un poco, un poco, y todos los sufrimientos estar�n en su fin; por lo que.

No son dignos de ser comparados con la gloria que se revelar� en nosotros. La felicidad futura de los santos es expresada por la gloria, de la cual la gloria de este mundo es m�s que un d�bil parecido; una gloria que ya se le da a Cristo, y se entrena en la posesi�n de; Ya es, pero al igual que a�n no se ve, pero ser� "revelado" en lo sucesivo, cuando el propio Cristo aparecer� en �l; y no solo se revelar� a los santos, como la gloria de Cristo, como mediador; Y no solo ser� visible sobre ellos, en sus cuerpos, que se har�n como el glorioso cuerpo de Cristo; Pero se revelar� en ellos, y se encuentra enormemente en la perfecci�n del conocimiento y la santidad en sus almas: ahora entre los sufrimientos de los santos en el estado actual de las cosas y su felicidad futura, ya sea con respecto a la calidad o cantidad. Sus aflicciones son "ligeras" en comparaci�n con el debido desierto del pecado, los sufrimientos de Cristo y los tormentos de los da�ados en el infierno, y cuando est�n bajo apoyo divino; Pero la gloria es pesada, es un "peso de la gloria". Los sufrimientos de los santos son, pero por un tiempo, pero su gloria es eterna; Tampoco hay una comparaci�n que se har� entre ellos a trav�s del m�rito, ya que no existe forma de proporci�n entre uno y otro, ni puede tener una influencia causal en el otro. Este es el juicio de las cosas que el ap�stol hizo: "Creo que creo" o "creo" que se dice, no como su opini�n desnuda, o como en la menor duda de la verdad de lo que dijo; Pero haber pesado deliberadamente las cosas en su mente, y razon� sobre ellos, lleg� a esta conclusi�n, que debe ser. La alusi�n es para los l�gicos, quienes se han establecido las instalaciones atraen la conclusi�n; o a los aritm�ticos, quienes, habiendo emitido la cuenta, dan la suma total. Sin embargo, despu�s de todo, la "gloria" aqu� hablada puede significar el glorioso evangelio de Cristo, que fue cada vez m�s revelado en el mundo gentil, "en" o "por nosotros" a los ap�stoles, en comparaci�n de que todos sus Los sufrimientos eran como nada.

Versículo 19

Por la expectativa seria de la criatura, ... Algunos por la criatura entienden el universo, todos los seres creados animan e inanimados, que han sufrido mucho por el pecado del hombre, son introducidos por una figura ret�rica, como esperando la liberaci�n y una restauraci�n a su patrimonio paradis�aco; Pero alguna parte del mundo se distingue manifiestamente de ellos, Romanos 8:23, otros piensan que los �ngeles est�n aqu� destinados, que est�n obligados a ministrar a hombres pecaminosos, est�n representados como gemidos y anhelos por el momento en que se traer�n a todos los hijos de Dios, que puedan ser despedidos de su servicio; Pero lo que se dice de sujeci�n a la vanidad, de la esclavitud de la corrupci�n, y de su gimesi�n y desempe�o en el dolor, nunca puede estar de acuerdo con los esp�ritus felices: otros suponen que los hombres en general est�n dise�ados, siendo por pecado en un estado de esclavitud. y la corrupci�n, sometida a vanidad, asisti� con problemas y responsabilizados con la muerte, y as� gemir bajo sus miserias actuales para la liberaci�n; Pero para desear cualquier cosa de una naturaleza espiritual no se puede atribuir a los hombres en general; y adem�s, como antes observado, algunas personas se distinguen de ellos, Romanos 8:23, otros han sido de opini�n, que la nueva criatura, o las personas renovadas, est�n aqu� destinadas, quienes se estaban agobiando Con pecado permanente, gemido bajo �l, largo para la liberaci�n de �l, y est� esperando la gloria celestial; Pero no se puede decir que estos est�n en un estado de esclavitud a la corrupci�n, ya que se liberan del dominio del pecado, y se convierten en los sirvientes de la justicia. Es lo mejor de todo por "la criatura" para entender el mundo gentil. "La criatura" aqu�, y "toda la creaci�n", Romanos 8:22, debe ser la misma; Ahora la frase.

???? ??????, "toda la creaci�n", o "cada criatura", ya que puede ser prestado, significa las naciones del mundo, en distinci�n a los jud�os; ver Marco 16:15; En comparaci�n con Mateo 28:19 y las respuestas a ????? ", las criaturas"; Por qu� nombre los jud�os a menudo en sus escritos llaman a los gentiles, para distinguirlos de los israelitas. Tome dos o tres instancias, como sigue,.

"Deja que su comercio (digamos que g), c. Estar de manera pac�fica, ?? ??????," con las criaturas "�Qu� dicen" las criaturas "dicen lo que le refiero a �l? Tal, bendito sea su padre, quien le ense�� la ley, Bendito sea su maestro que le ense�� la ley; Woe ??? ??????, "a las criaturas", porque aprenden no la ley; as�, quien ha aprendido la ley, observan lo hermosos que son sus caminos, y qu� tan bien ordenaron sus obras. ; de �l est� escrito, diciendo: "Y me dijo:" T� eres mi sirviente, Oh, Israel, en quien ser� glorificado ", Isa�as 49:3; ''.

donde las criaturas y los israelitas se distinguen evidentemente entre s�: otra vez h,.

"Woe ??? ??????", a las criaturas ", que no lo saben, ni tienen ninguna consideraci�n por el servicio de su Creador; porque es una tradici�n, (dice R. Isaac,) que" Bath Kol ", o una voz, sale todos los d�as de Mount Horeb, y dice, ay.

??? ??????, "a las criaturas", debido al servicio de su Creador ".

Y un poco despu�s,.

"Si ??????", las criaturas ", conoc�an el amor con el que el Santo Dios bendito amaba a Israel, rugir�an como los j�venes leones que lo siguieran".

Una vez mas yo,.

"Toda la oraci�n ?? ??????", de las criaturas ", es solo para la Tierra; Se�or dej� que la Tierra fuera fruct�fera, Se�or dej� que la Tierra prosperara; Toda la oraci�n ?? ?????," de los israelitas ", es solo para la casa de El Se�or, Se�or dej� que la casa del santuario se construyera ".

Ahora, lo que "la criatura", el mundo gentil, se representa como esperando seriamente, y mirando de manera inteligente, es.

la manifestaci�n de los hijos de Dios; Lo que se hace primero en su conversi�n, y luego abiertamente y m�s completamente en la aparici�n de Cristo en la ma�ana de la resurrecci�n. Hay una manifestaci�n de los hijos de Dios, en la conversi�n. Ellos que son los hijos de Dios, son sus hijos antes de la predestinaci�n divina, y a trav�s del Pacto de la Gracia; Como tales fueron dados a Cristo; Y bajo este personaje, y como parado en esta relaci�n, asumi� su naturaleza, y muri� por ellos, para reunirlos; Y, de hecho, esta relaci�n anterior es el terreno y la base del esp�ritu de Cristo que se env�a a sus corazones, para manifestar su adopci�n a ellos; Porque antes de la conversi�n, no se manifiesta, ni a s� mismos ni a otros, pero luego se hace a conocer en cierta medida. Esto puede aplicarse de manera particular a los gentiles, y los elegidos de Dios entre ellos. Eran los hijos de Dios antes de que se manifestaran como tales; Se habla de profec�a como en esa relaci�n; ver Isa�as 45:11; y parec�a ser dise�ado principalmente, si no en total, por "los hijos de Dios dispersos en el extranjero", en Juan 11:51. Estos no fueron conocidos, ni miraron por los jud�os, ser los hijos de Dios; Pero cuando el evangelio entr� entre ellos, como el poder de Dios, los manifest� para que sean tales: para que anteriormente se dijera, "no eres mi pueblo", all� se dice: "�Son los hijos de la Dios vivo ", Oseas 1:10. Pero la plena manifestaci�n de los hijos de Dios estar� en su glorificaci�n en la segunda venida de Cristo; cuando se tomar�n abiertamente a la familia de Dios, y ser�n propiedad de Cristo en esta relaci�n, antes de los �ngeles y los hombres; aparecer�n en s� mismos de otra manera que ahora lo hacen; se pondr�n en posesi�n de la herencia a los que se adoptan, y tendr�n ese honor y dignidad que pertenezcan a su personaje realmente conferidos en ellos; Para que aparezcan, no solo para ellos mismos, sino a todo el mundo, para ser lo que son: Ahora, esto, en toda la br�jula, se le podr�a decir que los gentiles est�n en la expectativa de ser estado, y esperando. Se pueden decir, en cierto sentido, esperar y esperar la manifestaci�n del Hijo de Dios mismo, el Mes�as, quien se llama "el deseo de todas las naciones", Hageo 2:7 : porque se prometi�, que "a �l deber�a la reuni�n",.

G�nesis 49:10 o, como algunos lo leen ", la expectativa de las personas", o las "naciones ser�n": tambi�n esperaron su ley, su doctrina, el Evangelio eterno, Isa�as 42: 4 , y cu�ndo se acerc� entre ellos, y se convirti� en el poder de Dios a la salvaci�n de muchos de ellos, esto plante� en ellos una expectativa seria de muchos, de multitudes de los hijos. De Dios se manifiesta entre ellos, seg�n varias profec�as del Antiguo Testamento, que habla en gran medida de este asunto; Y contin�an esperando a los que trayendo la plenitud de ellos en el �ltimo d�a, y por la gloria definitiva, que todos los hijos de Dios, ya sean jud�os o gentiles, disfrutar�n juntos.

g F. bab. Yoma, fol. 86. 1. H Zohar en �xodo. Fol. 2. 3. Bareshit Rabba Parash. 13. FOL. 11. 3.

Versículo 20

Para la criatura se hizo sujeto a la vanidad, ... Esto dise�a la vanidad y el vac�o de las mentes de los gentiles, que estaban sin Dios y Cristo, y el Esp�ritu Santo, sin la ley y el Evangelio, y la gracia de Dios; Tambi�n los enga�os vanos que ten�an de ellos mismos, de su sabidur�a, conocimiento, aprendizaje y elocuencia; Asimismo, su vano filosof�a, particularmente su olor a la idolatr�a, su polite�smo o adoraci�n de muchos dioses; junto con sus buceos y vicios, a los que fueron adictos, hasta tal t�tulo, que podr�an ser realmente decididos que se hicieron sujetos a la misma, estar bajo el gobierno de estas cosas, los esclavos a ellos, y en tal sujeci�n, como eso no pod�an liberarse de ello; aunque se dice,.

No voluntariamente, sino por la raz�n de �l, quien ha sometido lo mismo con la esperanza. Aunque eran voluntariamente vanos, sin embargo, no se hicieron voluntariamente sujetos a la vanidad; Comprometieron voluntariamente a las pr�cticas idol�tricas y otras malvadas, pero el diablo los hizo sujetos, o esclavos para ellos; Los llev� a cautiva a su voluntad y trabaj� poderosamente en ellos, por el permiso divino, para que se convirtieran en vasallos, y a sus deseos; Porque parece estar dise�ado, "por �l, que ha sometido a los mismos", y no Ad�n, por el cual el pecado entr� en el mundo.

Versículo 21

Debido a la criatura en s� misma, ... La frase en la esperanza, que se encuentra en nuestra versi�n, al final del vers�culo anterior, debe colocarse al comienzo de esto, y se lea en relaci�n con Romanos 8:19 siendo un par�ntesis, por lo tanto: "La expectativa seria de la criatura espera la manifestaci�n de los hijos de Dios, con la esperanza de que la criatura en s� tambi�n se entregue de la esclavitud de la corrupci�n"; Y as� se coloca en algunas copias, y en la versi�n sir�aca: es decir, "los gentiles" esperan con seriedad y esperan un mayor n�mero de conversos entre ellos, con la esperanza de que Ere Largo, todo el mundo gentil sea liberado de.

la esclavitud de la corrupci�n, bajo la cual en la actualidad gimi�; por lo cual se entiende, la esclavitud en la que estaban, no solo con sus lujurios pecaminosos, sino tambi�n a Satan�s el dios de este mundo; y en particular a sus �dolos, por los cuales se corrompieron a s� mismos, y a los que fueron esclavizados: esperan una liberaci�n de, por lo tanto,.

en la gloriosa libertad de los hijos de Dios; que dise�a la libertad de la gracia que los hijos de Dios tienen aqu�; y que consiste en una libertad del dominio del pecado y satan�s, de la ley y la esclavitud de la misma, en el uso gratuito de las ordenanzas del evangelio, en libertad de acceso a Dios, y una libertad del miedo a la muerte, y una libertad gloriosa. es; o la libertad de gloria que los santos disfrutar�n en el otro mundo, que se encuentra en una libertad de la prisi�n de la carne, del cuerpo del pecado y la muerte, de todos los dolores y aflicciones, de todos los reproches y persecuciones, de las tentaciones. de Satan�s, de dudas, miedos e incredulidad, y en la visi�n plena de Dios a trav�s de Cristo, y en una conversaci�n gratuita con �ngeles y santos.

Versículo 22

Porque sabemos que toda la creaci�n guaanet, ... como una mujer con ni�o, lista para ofrecer: para que se agregue,.

y Traveleth con dolor juntos hasta ahora; La regeneraci�n es debido a la gracia de Dios, que se compara con la "semilla", de la cual los hombres nacen de nuevo; Los medios de transmitirlo es el Evangelio, y los ministros son los instrumentos de las almas engendradas a Cristo, y que llevan a TRAVAIL en el nacimiento hasta que Cristo se forme en ellos: Ahora el Evangelio es llevado por los ap�stoles al mundo gentil, y ser exitoso, Era como una mujer grande con ni�o, lista para ofrecer a muchos hijos a Dios; Porque as� fue profetizado, por lo que sucedi� que "m�s son los hijos de los desolados, que los hijos de la esposa casada", Isa�as 54:1; Y estos nacimientos fueron atendidos de dolor. Los ap�stoles predicaron la palabra con mucha discusi�n, y los gentiles lo recibieron en mucha aflicci�n, aunque con la alegr�a del Esp�ritu Santo; Cuando una mujer se regocija cuando se produce un hijo, aunque el nacimiento ha asistido con dolor y trabajo. Este fue un gemido unido, y a TRAVAIL de todos los gentiles convertidos en varias partes del mundo, junto con los ministros del Evangelio, deseando seriamente m�s casos de conversi�n entre ellos; Y este deseo vehemente hab�a aparecido "hasta ahora", desde la primera vez de la predicaci�n del Evangelio entre los gentiles, a la escritura de esta ep�stola; y supone, que aunque hubo muchos nacimientos espirituales, hab�a m�s por venir; Como ha habido, y ser� m�s abundantemente, en el �ltimo d�a: y adem�s, este trabajo doloroso, y estos gemidos unidos para los nacimientos espirituales, los ap�stoles estaban bien conocidos, y por lo tanto podr�an decir: "Sabemos", c. Por su predicaci�n, entre ellos, en los que podr�an observar f�cilmente, y hacerlo en sus escritos, tome nota, cu�n con entusiasmo desezosos estaban de que el Evangelio lo predic�.

(Toda la creaci�n fue llevada bajo una maldici�n debido al pecado de Ad�n. Esta maldici�n se eliminar� en el estado eterno cuando Cristo restaurar� la creaci�n de la forma en que estaba al principio. Editor).

Versículo 23

Y no solo ellos, sino tambi�n nosotros mismos, ... no solo ellos gentiles, sino a los jud�os tambi�n:

que tienen los primeros frutos del esp�ritu: lo que significa los ap�stoles, que eran todos los jud�os, y que la mayor�a de ellos recibieron los extraordinarios dones del Esp�ritu en el d�a de "Pentecost�s", que fue el d�a de los primeros frutos, N�meros 28:26; y a lo que parece haber una alusi�n aqu�; O bien, los jud�os se convierten en general: a los jud�os se hicieron las promesas del Mes�as; a ellos �l primero vino; El Evangelio se predic� por primera vez, y algunos de ellos cre�an por primera vez en Cristo; Tuvieron la gracia de Dios comunicada a ellos en conversi�n, que recibieron como primeros frutos, con respecto a un aumento posterior; O con respecto a la gloria, como los primeros frutos, la gracia es del mismo tipo con gloria, y es una promesa y seriedad de la misma; Los santos juzgan por la gracia los primeros frutos, lo que es la gloria, y por lo tanto, mucho despu�s; Ahora de estas personas lo describieron, se dice,.

Incluso nosotros mismos gemirnos dentro de nosotros mismos; Sus gemidos estaban hacia adentro de sus corazones, no hip�critas o estaban entre s�, comunes a todos; y eso no meramente en su propia cuenta, las corrupciones de sus corazones, los sufrimientos perduraron por el evangelio, y en una expectativa anhelada para la gloria celestial, sino tambi�n por la conversi�n de los gentiles, por lo que incesantemente trabajaban , y or� la noche y el d�a;

Esperando la adopci�n, al ingenio, la redenci�n de nuestro cuerpo. La adopci�n se explica por la redenci�n del cuerpo; y por uno se puede saber qu� significa lo otro: por "la redenci�n de nuestro cuerpo" no se entiende la redenci�n de los elegidos, el cuerpo y el alma de Dios, por la sangre y la muerte de Cristo, que ya estaba terminada; y que los santos, que hab�an recibido los primeros frutos, eran participantes de ellos mismos y, por lo tanto, no se pudieron decir que lo esperaban: pero dise�a la redenci�n del cuerpo natural, por la resurrecci�n de los muertos; cuando los cuerpos de los santos se entregar�n de esa mortalidad, corrupci�n, debilidad y deshonra, bajo el cual se encuentran en la tumba; cuando ser�n refinados y espiritualizados, y liberados de todo lo que los convierte en un incumplimiento, y una inquietud a sus almas o esp�ritus ahora; o, de lo contrario, la redenci�n del cuerpo m�stico, la Iglesia, de la cual los gentiles hacen una parte considerable, y deben entenderse de una liberaci�n de la Iglesia, de las angustias y persecuciones, entonces trabaj� bajo; o m�s bien de compensar al cuerpo, la Iglesia, por una redenci�n o liberaci�n de esa parte, que se encuentra entre los gentiles, de esa vanidad y la esclavitud de la corrupci�n, a la que estaba sujeto, en la manifestaci�n y la libertad gloriosa. de los hijos de Dios: y luego, por "adopci�n", se entiende, la gracia especial de la adopci�n, manifestada a los gentiles en su llamamiento efectivo; que los jud�os que hab�an recibido los primeros frutos del esp�ritu estaban esperando, y tuvieron buenas razones para esperar, de muchas profec�as en los escritos del Antiguo Testamento; y a los que fueron los m�s alentados, por muchas apariciones de la gracia y el poder de Dios, asistiendo al Ministerio del Evangelio entre ellos; y qu� adopci�n se manifestar� m�s plenamente en la ma�ana de la resurrecci�n; Por lo tanto, tambi�n la herencia, que todo el cuerpo m�stico, la Iglesia entrar� en la posesi�n de, puede ser llamada "la adopci�n", porque los santos se adoptan; La adopci�n les da el t�tulo, ninguno, pero las adoptadas, lo disfrutar�n; y su disfrute de ella ser� la manifestaci�n completa y la finalizaci�n de la gracia de la adopci�n; Estos santos est�n esperando, tanto para ellos como para los dem�s, y vale la pena esperar; porque es "una herencia incorruptible, indefilada, que se desvanece, no se desvanece, reservada en los cielos", 1 Pedro 1:4: y hay buen terreno para esperarlo; Es un legado de su Padre Celestial, quien los ha adoptado; Es un regalo de su gracia libre; Ya est� en manos de Cristo, con quien son co-herederos; Y ya tienen el Esp�ritu, como el serio de ello.

Versículo 24

Porque somos salvos por la esperanza, ... nosotros, que hemos recibido los primeros frutos, que estaban en una condici�n perdida de perizado, y por la naturaleza, no mejor que otros, que los gentiles, son salvos por el pecado y la ira por venir de Cristo, con Una salvaci�n espiritual y eterna. Ya estaban salvados en los preparativos y prop�sitos de Dios; en el pacto de la gracia; en los brazos y manos de Cristo, a trav�s de su compra; y como se considera en �l; y con respecto a la incidencia y aplicaci�n de la salvaci�n, en llamadas efectivas, y su derecho a la justicia de Cristo; y con respecto a la certeza de ello, en la fe y la esperanza: la forma en que se dice que se salvan, es "por", o "con esperanza"; No es que la esperanza sea la causa de la salvaci�n, sino los medios por los cuales las almas se llevan al disfrute de ello; La salvaci�n, o la gloria, es el objeto de ello:

Pero la esperanza de que se vea, no es la esperanza; Por lo que un hombre veeth por qu�, a�n lo esperaba. En la primera cl�usula, "Hope" significa la gracia misma, pero aqu� el objeto de ello; lo que se representa como invisible, a�n no se disfruta completamente, algo futuro y para ser esperado; Como la resurrecci�n de los muertos, que es el objeto de la esperanza, y es inviable, e incluso incre�ble para la raz�n carnal, y est� por venir, y la buena base existe en la revelaci�n divina, espere; Y la esperanza de que sea de gran utilidad para los santos, mientras que en este mundo de problemas: la gloria eterna y la felicidad tambi�n es objeto de la esperanza de los creyentes; Se dice que es la esperanza de su llamamiento, que son llamados por gracia a; La esperanza de la justicia, que la justicia de Cristo es el terreno y la base de; y esa esperanza bendita, la suma de su felicidad; Y la esperanza se lo present� en el cielo, donde es seguro y seguro; Todo lo que es invisible, y sin embargo, por venir; Pero buena raz�n, hay que esperarlo, ya que las Escrituras de la Verdad lo expresan claramente; Y la persona, la sangre y la justicia de Cristo, ponen una base tan s�lida para la esperanza de la misma: la copia de Alejandr�a dice: "�Por qu� �l todav�a est� esperando?" Y as�, la versi�n et�ope, con la que acepta la versi�n sir�aca, leyendo el todo, "por [si] lo vemos, �por qu� deber�amos esperarlo?".

Versículo 25

Pero si esperamos que no vemos, .... Si se trate de la hora de la muerte, o la segunda venida de Cristo, o la resurrecci�n de los muertos, y la gloria eterna; Todo lo que no est� visto por nosotros, y para ser esperado:

Entonces nosotros con paciencia esperamos; Como lo que es cierto y real, como algo valioso, que ser� satisfactorio, y se recibir� con la mayor alegr�a. Esto supone, que las personas que lo esperen lo creen, y su inter�s en ello, al menos esperan que tengan uno; que tienen una valiosa estima y afecto por ello; que no est�n en un estado de perfecci�n y felicidad; y que se sientan sueltos por las cosas de este mundo, y est�n listos para separarse con la otra, y comprender la otra: la forma de esperar es "con paciencia"; Una gracia, de la cual Dios es lo eficiente, Cristo es el ejemplar, y la palabra los medios; y que es de gran uso bajo las aflicciones de la mano de Dios, bajo los reproches y persecuciones de hombres, bajo las deserciones y la falta de respuestas en la oraci�n, bajo las tentaciones de Satan�s, y en la expectativa de la gloria celestial.

Versículo 26

Del mismo modo, el Esp�ritu tambi�n ayuda a nuestras enfermedades, ... El Esp�ritu de Dios que mora en nosotros, por a quien nos dirigimos, que es el esp�ritu de adopci�n a nosotros, quien ha sido testigo de nuestros esp�ritus, que somos los hijos de Dios. , cuyos primeros frutos hemos recibido, m�s all�, y adem�s de lo que ha hecho por nosotros ", tambi�n ayuda a nuestras enfermedades"; Mientras estamos gimiendo dentro de nosotros mismos, tanto por nosotros mismos como para otros, y estamos esperando pacientemente por lo que esperamos. El pueblo de Dios, todos ellos, m�s o menos, tienen sus enfermedades en esta vida. De hecho, no son d�biles y enfermos, en tal sentido, ya que las personas no regeneradas son, que no tienen fuerza espiritual, son ignorantes de su debilidad, no van a Cristo por fuerza, ni derivan de �l, y por lo tanto, no puede realizar nada que sea espiritualmente Bien: tampoco son todos iguales enfermos; Algunos son m�s d�biles en la fe, el conocimiento y la experiencia, que otros; Algunos son de conciencia m�s d�biles y escrupulosas que otros: algunos son m�s f�cilmente atra�dos a trav�s de la corrupci�n y la tentaci�n que otras; Algunos tienen regalos m�s d�biles, particularmente en la oraci�n, que otros, pero todos tienen sus enfermedades; No solo las aflicciones corporales, las persecuciones de los hombres y las tentaciones de Satan�s, sino las corrupciones internas, y la debilidad para oponerse a ellos, y a cumplir con su deber a Dios y al hombre; y tambi�n tienen sus enfermedades en el ejercicio de la gracia, y en el desempe�o de la obra de oraci�n; Aunque no se queda por hundirse debajo de ellos, sino que son ayudados por "el Esp�ritu": por qui�n se entiende, no a ning�n �ngel de tutelar, o el alma humana, o el don del Esp�ritu en la oraci�n, sino el Esp�ritu Santo de Dios mismo. ; La OMS, como la palabra aqu� usada significa, "ayuda entre s�", con esperanza y paciencia, gracias que �l ha implantado, y que vigoriza y atrae en acto y ejercicio; o con los santos trabajando bajo sus cargas; o con el padre y el hijo, que tambi�n son ayudantes de los santos: y esta ayuda de ellos implica, que sus enfermedades y cargas son tales como deben hundirse, a menos que sean ayudados; y que se hace por el Esp�ritu, al traer al recuerdo, y aplicando las preciosas promesas del Evangelio, derramando en el extranjero el amor de Dios en sus corazones, al actuar la parte de un edred�n para ellos, al poner la fuerza en ellos, y Al asistirlos en la oraci�n a Dios:

Porque no sabemos lo que deber�amos orar, ya que deber�amos. Los hijos de Dios no son ignorantes del objeto de la oraci�n, que es Dios, y no una criatura, Dios, como el Dios de la Naturaleza, la Providencia y la Gracia, Dios en las personas del Padre, y del Hijo, y del esp�ritu, y con miras a sus gloriosas perfecciones: ni del camino de venir a Dios en oraci�n, a trav�s de Cristo; ni de la manera de realizarlo en la fe, con fervidez, sinceridad, reverencia, humildad y sumisi�n; Tampoco a qui�n deben orar, por s� mismos, para todos los hombres, incluso los enemigos, especialmente para los santos, y los ministros del Evangelio; ni de muchas otras cosas respetando la oraci�n, ya que es tanto su deber como privilegio; su propia incapacidad, y la necesidad de la asistencia del esp�ritu en ella; Pero lo que son ignorantes es principalmente la cuesti�n de la oraci�n: de hecho, toda la Biblia es una instrucci�n en general para este trabajo, tambi�n lo es la oraci�n, Cristo ense�� a sus disc�pulos, y las diversas oraciones de los santos registraron en las Escrituras; Las promesas de Dios, y sus propias necesidades y necesidades, pueden, y hacerlas, dirigi�ndolas enormemente; En su caso, cuando bajo un sentido del pecado, para orar por un descubrimiento de la gracia perdonante; Cuando bajo la oscuridad y las deserci�n, a la luz del rostro de Dios; cuando bajo un sentido de debilidad de la gracia, y la fuerza de las corrupciones, para obtener suministros frescos de gracia y fuerza, para la comuni�n con Dios en las ordenanzas, por m�s gracia aqu�, y la gloria a continuaci�n; Pero qu� de todas las cosas parecen ser, al menos en algunas veces, en una p�rdida, es lo que orar con respecto a las cosas temporales, como las riquezas, el honor, los amigos, c. tener aflicciones presentadas, o las tentaciones cesan y con demasiada frecuencia, es que oren con una mayor importancia para las cosas menores, que para las cosas de m�s importancia; Y m�s de un celo intemperante, y con miras a uno mismo, que para la gloria de Dios:

Pero el propio esp�ritu hace la intercesi�n, para nosotros, con gemidos que no pueden ser pronunciados; no el esp�ritu de un hombre; o el don del esp�ritu en el hombre; o un hombre perdido con un extraordinario don del esp�ritu; Pero el propio Esp�ritu Santo, quien hace la intercesi�n para los santos: no en tal sentido como lo hace Cristo; porque �l intercede no con el Padre, sino con ellos, con sus esp�ritus; No en el cielo, sino en sus corazones; Y no para los pecadores, sino para los santos: ni de la manera que Cristo lo hace, no por la oraci�n vocal, como �l cuando est� en la tierra; Tampoco por ser el medio, o forma de acceso a Dios; ni presentando las oraciones de los santos, y la sangre y el sacrificio de Cristo a Dios, como lo hace Cristo en el cielo; Tampoco, como los santos hacen intercesi�n entre s�, y para otras personas: pero �l intercede por ellos, haci�ndolos interceder; �l indita sus oraciones por ellos, no en un libro, sino en sus corazones; �l les muestra su necesidad, cu�les son sus necesidades; �l los agita a la oraci�n, los suministra con argumentos, pone palabras en su boca, ampl�a sus corazones, da fuerza de fe en la oraci�n, y todo el ardor y la fervidez de la misma; �l les permite venir a Dios como su padre; y les da la libertad y la audacia en su presencia, lo que requiere un coraz�n rociado de una conciencia maligna, la fe en la sangre y la justicia de Cristo, y una visi�n de Dios, como un dios de paz, gracia y misericordia: y esta intercesi�n. hace, "con gemidos que, no pueden ser pronunciados"; No es que el esp�ritu de los gemidos de Dios, sino que agita los gemidos en los santos; que suponen una carga para ellos, y su sentido de ello, y estos se dice que son "indecibles"; Santos, bajo su influencia, orando en silencio, sin voz, como lo hizo Mois�s y Hannah, 1 Samuel 1:13, y sin embargo, con mayor y fervoroso; O, como no poder expresar completamente lo que conciben en sus mentes, cu�n grandes son sus cargas, y su sentido de sus deseos.

Versículo 27

Y �l que busca los corazones, ... esto es peculiar a Dios, y un "perifrasis" de �l; Los �ngeles, ni buenos ni malos, pueden buscar en los corazones de los hombres; Un hombre no puede conocer el coraz�n de otro, ni ning�n hombre conoce plenamente a los suyos; Esta es la prerrogativa de Dios: y.

�l sabe lo que es la mente del Esp�ritu; No es el esp�ritu de los hombres, sino de Dios: ese deseo cari�oso y el significado del Esp�ritu de Dios, en los gemidos inalterables de los santos; �l conoce el sentido sabio que hay en ellos, porque as� ??????? puede significar, y se opone a la mente carnal, o la sabidur�a de la carne, que desea cosas tontas. El buscador de corazones lo sabe, no apenas por su omnisciencia, pero lo considera, lo aprueba, asiste y le da una respuesta; que no es un peque�o est�mulo para orar, aunque sea, pero con suspiros y gemidos indecibles; Dado que el Dios omnisciente entiende, y respeta ese tipo de oraci�n: y la raz�n es que,.

Porque �l, el Esp�ritu de Dios,.

hacer la intercesi�n de los santos, seg�n la voluntad de Dios; Las personas para las que intercedan son santos: a quien Cristo se hace santificaci�n; quienes son llamados a ser santos; son santificados por el esp�ritu de Dios, y caminan despu�s de �l: ahora son los objetos del deleite de Dios, son elegidos por �l, preservados en Cristo y tienen su justicia imputada a ellos; A estos, ha dado a conocer su Evangelio, ha dado su gracia, y al finalmente la herencia; para que esa intercesi�n hecha para tales sea, sin duda, ser� considerado: se puede prestarse ", hace la intercesi�n por las cosas santas de acuerdo con Dios"; Para las bendiciones espirituales, los favores divinos, las cosas que pertenecen a Dios; o cosas divinas, que son agradables a su naturaleza y lo har�n: y, ya que es el Esp�ritu Santo lo que hace la intercesi�n, y las personas son santas para las que lo hace, y esto est� hecho para cosas santas, y todas de acuerdo con la voluntad de Dios, que el Esp�ritu de Dios debe saber plenamente, los santos pueden tener confianza en la prevalencia y el �xito de tal intercesi�n.

Versículo 28

Y sabemos que todas las cosas trabajan juntas para siempre,. Hay un bien temporal, y un bien espiritual, y un eterno.. El bien temporal es lo que los hombres del mundo est�n buscando, y en general tienen la mayor parte de, y los santos lo menos; Y, sin embargo, tienen tanto lo que es necesario, y lo que tienen, tienen con una bendici�n; E incluso a veces las aflicciones trabajan para el bien temporal de los hijos de Dios: las buenas mentiras espirituales en un ejercicio vivo de la gracia y una conformidad del alma a Dios; y es lo que menos los hombres del mundo consideran, y los santos m�s; Y, a veces, las aflicciones se cuestionan en este tipo de bien, ya que tambi�n lo hacen en el bien eterno, ya que trabajan para nosotros un peso excepcional de gloria: por "todas las cosas" pueden ser destinadas, todos los seres buenos y malos: todos los buenos seres eternos o creados. : Eterno, como Jehov�, el Padre, todas sus perfecciones, prop�sitos, promesas, disposiciones y actuaciones; Jehov�, el hijo, como el Dios poderoso, y como mediador, todo lo que �l es en s� mismo, todo lo que tiene en s� mismo, todo lo que �l ha hecho, o est� haciendo, todos sus t�tulos, personajes y relaciones; Jehov� el Esp�ritu, en su persona, oficinas y operaciones; Todos estos han trabajado juntos en el Consejo de Paz, en el Pacto de la Gracia, y en la Redenci�n; y trabajan juntos en la santificaci�n, por lo que lo har�n en la glorificaci�n, y que por el bien de los santos: todos creados, como buenos �ngeles, buenos magistrados, buenos ministros del evangelio: todos los seres malos, como demonios, persiguiendo a los magistrados. , herejes, y falsos maestros: todas las cosas, buenas y malas: todas las cosas buenas, paz y prosperidad externas, regalos externos, el Ministerio de la Palabra, la administraci�n de las ordenanzas, las censuras de la iglesia, las admoniciones y las excomembericaciones; Todas las cosas malas, pecado el mal de los males: el pecado original, o la ca�da de Ad�n, que contiene todos los dem�s pecados en ella, asistieron con circunstancias agravantes, y sigui� con consecuencias tristes, sin embargo, ha sido anulada para siempre; Por la presente, un Salvador se hizo necesario, a quien fue enviado, vino, y forj� la salvaci�n; ha tra�do una mejor justicia que Ad�n perdida; Titul� a su pueblo a una vida mejor que la suya, y los hace participantes de las riquezas de la gracia y la gloria: el pecado real, hacia adentro o hacia afuera; pecado indispensable; que se hace uso, cuando se descubre, para disminuir el orgullo, para llevar a una dependencia total de Cristo, para ense�ar a los santos a ser menos censurios, depender del poder y la gracia de Dios para mantenerlos, y para destetarlos de este mundo. , y para hacerlos deseosos de otro, donde estar�n libres de ello; pecados externos, de otros, o suyos; Los pecados de los dem�s, de los hombres malvados, que observaron, plantean una indignaci�n en los santos contra el pecado, y una preocupaci�n por la gloria de Dios, y mirar a sus propios corazones y formas, y admirar la gracia de Dios para ellos, que esto es no su caso; de los hombres buenos, que se registran, y pueden observarse, no, por ejemplo, y el est�mulo en el pecado, sino para la advertencia, y para fomentar la fe y la esperanza bajo un sentido de ello; de su propio, para la humillaci�n, que cuestiona en el debilitamiento del poder del pecado en s� mismos, y el fortalecimiento de las gracias de los dem�s: pero de todo esto no sigue, que Dios es el autor del pecado, solo que lo invadi� a prop�sitos sabios y graciosos; Tampoco debe tomar el est�mulo al pecado, para hacer el mal que pueda venir bien; Tampoco el pecado es un verdadero bien; Tampoco se dice que no hace da�o; Porque, aunque no puede obstaculizar la salvaci�n eterna del pueblo de Dios, hace mucho da�o a su paz y su comodidad; Y que se hace para trabajar en cualquier forma o forma para siempre, no se debe a su propia naturaleza e influencia, lo cual es lo suficientemente maligno, sino al poder sin l�mites y la sabidur�a no buscada de Dios: todos los males o aflicciones, espirituales y temporales, trabajar juntos para bien; todos los espirituales, como las tentaciones de Satan�s, que se hacen �tiles para la humillaci�n, para el juicio de la gracia, para mostrarnos nuestra debilidad, nuestra necesidad de Cristo y para conformarnos con �l, y tambi�n para emocionarnos a la oraci�n y la vigilancia. ; los Hidings de la cara de Dios, que hacen que su presencia sea m�s preciada cuando se disfruta, y cuanto m�s deseable.. Las aflicciones temporales, las aflicciones en el cuerpo, el nombre o el patrimonio, NAY, incluso la muerte, todos trabajan juntos por el bien del pueblo de Dios.. Los jud�os nos dicen de un Nahum, el hombre Gamzu, quien, dicen, se llamaba as�, debido a todo lo que le sucedi�, sol�a decir, ?? ? ?????, "Gam Zu Letobah", "Esto tambi�n es para siempre. ": Y les dan instancias de varias desgracias que lo llaman, sobre qu� cuenta us� estas palabras, y c�mo demostraron en el tema a su ventaja: agradablemente a esto es el consejo dado por ellos,.

"Por siempre (digamos que l) dejen que un hombre se use para decir, todo lo que el Se�or lo hace, ??? ????", lo hace por el bien ".".

Ahora que todas las cosas trabajan juntas para siempre, los santos "conocen", y est�n firmemente persuadidos de; Tanto de la palabra como las promesas de Dios, y de los casos de Jacob, Joseph, Job, y otros, y tambi�n de su propia experiencia: y se debe observar, que no se dice que todas las cosas "han" trabajado juntos. , y as� pueden, nuevamente, o que "deber�n" trabajar juntos, pero todas las cosas trabajan juntas para siempre; "Ahora" trabajan juntos, siempre est�n trabajando juntos, ya se puede observar o no: la prosperidad y la adversidad, ya sea en las cosas temporales o espirituales, trabajan "juntas", y hacen un intrincado trabajo tejido en la providencia y la gracia; que se ver� con admiraci�n otro d�a: una copia lee, "Dios trabaja juntos", o "causa que todas las cosas trabajen juntas para bien"; Y as�, la versi�n et�ope, "sabemos que Dios les ayuda a que lo ame, a todo lo bueno": y para esto de acuerdo la versi�n sir�aca ", lo sabemos para ellos que aman a Dios, �l en todo lo ayuda a ser bueno"; Y seguro que es, que Dios es la causa eficiente, eso hace que todas las cosas trabajen juntas para el bien de su pueblo. Las personas a las que trabajan todas las cosas para siempre, se describen como tales.

que ama a Dios; Un personaje, que no est� de acuerdo con todos los hijos e hijas de Ad�n: el amor a Dios no es naturalmente en los hombres; Es forjado en el alma en la regeneraci�n, y es una evidencia de ello; Crece con fe, que funciona por ello; Sin �l, una profesi�n de religi�n es vana; y donde una vez est� forjado, dura para siempre; Debe ser superlativo y universal, constante, c�lido y ardiente, abundante y sincero: tales que lo tienen, mostrarlo por un deseo de ser como a Dios y, por lo tanto, imitarlo, haciendo que su gloria sea el fin supremo de sus acciones; teniendo cuidado de no ofenderlo; Al de�arse en su presencia, en su pueblo, palabra, ordenanzas, formas y adoraci�n; y subvalorando el mundo, y todas las cosas en ella, en comparaci�n con �l; Qui�n es amado por las perfecciones de su ser, los personajes y las relaciones que se encuentra y se lleva a su pueblo, y debido al amor con el que los ha amado, y que es de hecho la primavera y la fuente de los suyos. Se describen adem�s, como tal.

Quienes son los llamados de acuerdo a su prop�sito. El llamado de Dios y de Jesucristo; no a ninguna oficina, o por el ministerio externo de la palabra solamente, sino por gracia especial; de la oscuridad a la luz, de la esclavitud a la libertad, de la compa��a de hombres pecaminosos a la comuni�n con Cristo, de una confianza en su propia justicia a una dependencia de su, a la gracia aqu�, y la gloria en lo sucesivo; que se hace de acuerdo con el prop�sito de Dios: las personas llamadas son fijadas por Dios; Ninguno se llama pero a quien Dios propuso llamar; Aquellos que se llaman no pueden asignar ninguna otra raz�n que la voluntad de Dios; y ninguna otra raz�n, pero se puede dar por qu� no se llaman a otros; El momento en que, el lugar donde, los medios por los cuales se llaman las personas, todos est�n resueltos y determinados por la voluntad, y de acuerdo con el prop�sito de Dios.

K T. BAB. Taanith, fol. 21. 1. SANHEDRIN, FOM. 108. 2. COSRI, FOM. 151. 1. L T. BAB. Beracot, Fol. 60. 2.

Versículo 29

Por qui�n lo hizo anteprete, ... el conocimiento previo de Dios aqu�, no tiene la intenci�n de su presciencia de todas las cosas en el futuro; por el cual �l llega a conocer y predecir las cosas por venir, y lo que lo distingue de todos los dem�s dioses; y se llama as�, no con respecto a s� mismo, con quien est�n presentes todas las cosas, pero con respecto a nosotros, y que es eterno, universal, cierto e infalible; Porque en este sentido, lleg� a todos los hombres, y si este fuera el significado aqu�, todos los hombres estar�an predestinados, conformados a la imagen de Cristo, llamados por gracia, justificados y glorificados; Considerando que son personas especiales, a las que Dios ha conocido anteriormente: tampoco es el conocimiento de la presente disposici�n o la previsi�n de las buenas obras, la santidad, la fe y la perseverancia de los hombres, sobre los cuales Dios los predesta a la felicidad; Ya que esto har�a algo de Dios, y no su placer, la causa de la predestinaci�n; que se hizo antes, y sin alguna consideraci�n del bien o el mal, y es completamente debido a la gracia libre de Dios, y es el terreno y la base de buenas obras, fe, santidad y perseverancia en ellos: pero esto respecta al amor eterno de Dios a su propia gente, su deleite en ellos, y aprobaci�n de ellos; En este sentido, los conoc�a, los descabes�a de los Everlasting, los amaban cari�osamente, y tuvo un placer infinito en ellos; Y esta es la base de su predestinaci�n y elecci�n, de su conformidad con Cristo, de su llamamiento, justificaci�n y glorificaci�n: para estos.

Tambi�n predestin� a ser conformado a la imagen de su hijo; Tener un conocimiento perfecto, distinto, especial de ellos, se uni� al amor a ellos, �l predeterminado, o los nombr� por primera vez en su mente eterna, en sus prop�sitos eternos e inmutables y decretos a este fin, conformidad a la imagen de Cristo; que no debe ser entendido del esp�ritu de Cristo: los elegidos de Dios son elegidos para ser santos, y a trav�s de la santificaci�n del esp�ritu, pero nunca se dice que se conforman, hechos como el esp�ritu, ni el esp�ritu se llama la imagen. de Cristo; Pero esto dise�a una semejanza a Cristo como el Hijo de Dios, o la conformidad con �l en su naturaleza humana. De hecho, existe una gran disparidad entre la filiaci�n de Cristo, y de los santos; �l es el Hijo Eterno y Natural de Dios, �l es el �nico Hijo unig�nito, son adoptados, pero en algunas cosas hay una semejanza; Como �l es el Hijo de Dios, tambi�n lo son los hijos de Dios, aunque no en el mismo sentido; Como �l es un hijo amado, tambi�n lo son; Como �l es el primog�nito con respeto, son el primog�nito con respecto a los �ngeles; Como �l tiene una herencia, as� que tienen; Adem�s, tiene una gran preocupaci�n en su filiaci�n; La predestinaci�n de ellos es por �l; La bendici�n en s� se basa en la uni�n para �l, en su relaci�n conyugal, y su suposici�n de su naturaleza; Viene a ellos a trav�s de su redenci�n, y en realidad se otorga en ellos por �l; Y esta conformidad con Cristo como hijos, lo mera aparecer� completamente en lo sucesivo, cuando sean como �l, y lo vean como �l, o esto puede entenderse de la conformidad de los santos a Cristo en su naturaleza humana, tanto aqu� como en lo sucesivo: Aqu� en la santidad; La imagen de Dios estaba en su primera creaci�n, esto se desfila por el pecado; y en la regeneraci�n, la imagen de Cristo est� estampada, su gracia est� forjada en ellos, su esp�ritu se pone en ellos, para permitirles caminar en �l, y despu�s de �l: esto se completar� en lo sucesivo, y consistir� en perfecta santidad, ser liberado del mismo ser, as� como el poder y la culpa del pecado; en perfecto conocimiento de todo lo que tender� a su felicidad; y en gloria como Cristo, tanto en alma como en el cuerpo:

que podr�a ser el primog�nito entre muchos hermanos; Las personas entre las cuales Cristo es el primog�nito se describe por su relaci�n, "hermanos"; entre s�, estar relacionados con el mismo padre, regenerado por la misma gracia, llevada a la misma familia y herederos de la misma gloria; y a Cristo, qu� relaci�n, como herm�ticos, no se basa simplemente en su encarnaci�n, sino en su adopci�n; y que se evidencia por su regeneraci�n, y haciendo la voluntad de su padre; A qu� relaci�n posee, y no se averg�enza de: tambi�n se describen por su n�mero, "muchos"; Porque aunque est�n m�s, pocos, en comparaci�n con el mundo; Sin embargo, son muchos, un gran n�mero, considerado por s� mismos; Y entre estos, Cristo es el "primog�nito"; �l es el primog�nito de Dios, el engendrado del Padre, �l es el primer engendrado, y como tal, es el �nico engendrado; �l es el primog�nito de Mar�a, ella no ten�a nada delante de �l, y �l es el �nico que naci� de la manera que era; Es el primer engendrado de los muertos, su resurrecci�n se llama un engendro, y fue el primero en el tiempo que se levant� de los muertos por su propio poder, y a una vida inmortal, y la primera en la causalidad y la dignidad. Cristo es el primog�nito con respecto a todas las criaturas en general; Fue engendrado del Padre antes de que todas las criaturas fueran; �l es la primera causa de todos, el gobernador, la base y el apoyo de ellos: y �l es el primog�nito con respecto a los santos; �Qui�nes son de la misma naturaleza con �l, se hacen a los participantes de la naturaleza divina, son hijos en la misma familia, aunque no en la misma clase de socialidad: adem�s, este personaje puede considerar tanto el nacimiento como privilegio que pertenece a Cristo como Mediador; que, como el primer nacimiento, tiene la bendici�n, el gobierno, el sacerdocio y la herencia; Todo lo que se debe, y es un extremo de la predestinaci�n divina. Los escritores de M Cabal�stica entre los jud�os le dan el nombre de "primog�nito" a la segunda Sephira, n�mero o persona, "Sabidur�a", que responde al Hijo de Dios.

m vid. Cabala denudata, par. 1. p. 200. PAR. 2. p. 7.

Versículo 30

Adem�s, a quien predestin�, .... no para sufrir, que no se expresan ni dise�an, sino a la gracia y la gloria despu�s de mencionar. Esta predestinaci�n es de personas particulares, que, como consecuencia, se llaman, justifican y glorifican; Es el efecto de la gracia divina, y enteramente debi�ndose; Es la fuente de todas las otras bendiciones de la gracia, y por lo tanto se coloca a la cabeza de ellos, y las asegura a todos:

ellos tambi�n llam�; No a las aflicciones: Muchas pueden ser llamadas a aflicciones, y soportarlas, que no est�n ni justificadas ni glorificadas; Adem�s, el pueblo de Dios, aunque se encuentran con muchas aflicciones, entre su llamamiento a la gloria eterna, y su disfrute de ello, pero no est�n tanto llamados a las aflicciones, en cuanto a la paciencia debajo de ellos: su llamada es de gracia, por gracia especial, a bendiciones peculiares de gracia, y a un reino y gloria; Y este su llamamiento est� asegurado por la predestinaci�n, y se relaciona con la glorificaci�n: y a qui�n llam�,.

ellos tambi�n justific�; El significado de cu�l es, no que �l los aprobara como sincero y fiel, debido a su fe y paciencia en los sufrimientos; Para ni de sus sufrimientos, ni de su fe y paciencia en ellos, es la menor menci�n en el pasaje; Tampoco se puede producir el caso del uso de la palabra "justificada" en esta ep�stola, o en otra parte de este sentido: pero el significado es que esas personas a quienes Dios predestina y llama, los hace justos por la imputaci�n de la justicia de su hijo a ellos; que es todo, y sobre todos los que creen; por el cual est�n justificados ante Dios, y en su propia conciencia, de todo pecado, y as� asegurados de toda la ira y la condena; Por lo tanto, la glorificaci�n se mantiene inseparablemente conectada con ella:

Y a quien justific�, ellos tambi�n glorific�; lo que no est� destinado a ser hecha gloriosa bajo sufrimientos; ni de ser glorioso por los extraordinarios regalos del esp�ritu; Porque la palabra nunca se usa en este sentido, ni se dice que Dios nunca se dice que glorifique a su pueblo de esta manera; Y el ap�stol est� hablando de los santos en general, y no de los particulares: si este fuera el sentido, ninguno estar�a predestinado, llamado y justificado, pero tal que tenga los extraordinarios dones del Esp�ritu; y ninguno tendr�a los extraordinarios dones del esp�ritu, pero esas personas; Mientras que muchos han tenido esto, y sin embargo, no hay inter�s en la gracia de Dios, y la felicidad eterna: pero la gloria eterna est� aqu�, que es de lo que el ap�stol hab�a estado hablando en el contexto; es lo que los elegidos est�n predestinados y llamados. y que su justificaci�n les da un derecho y t�tulo a; y consistir� en una semejanza a Cristo, en comuni�n con �l, en una visi�n eterna de �l, y en libertad de todo lo que es malo, y en un disfrute de todo lo que es bueno; Y as�, el gran final de la gracia predestinante se responder� en ellos mencionados en el vers�culo anterior: ahora se puede decir que esta glorificaci�n ya se hace, con respecto a esa parte de los elegidos de Dios, que est�n en el cielo, heredando las promesas; y en cierto sentido es cierto tambi�n de esa parte de ellos, que est� en la tierra, que son llamados y justificados; siendo glorioso dentro de la gracia de Cristo, y arrayado y adornado con la gloriosa t�nica de su justicia; por el que tienen una v�nculo, y por el otro derecho a la gloria eterna; de los cuales esta gracia que han recibido es el comienzo, el compromiso y la seriedad: adem�s, ya est�n glorificados en Cristo, su cabeza y su representante, y en la visi�n de Dios, y con respecto a la certeza de ella, est� preparado y Listo para ellos, est� en manos de Cristo para ellos, y est� asegurado a su fe y esperanza. Es una observaci�n de un escritor jud�o N,.

"Que una cosa ????? ?????", que est� decretada por ser ", se habla de en el pasado tiempo: ''.

Este es el estilo de las Escrituras con respecto a las cosas decretas, y tal es la glorificaci�n de todos los elegidos de Dios.

n Aben Ezra, en Jon. II. 2.

Versículo 31

�Qu� diremos entonces a estas cosas? C, ya sea a estas aflicciones, �vamos a murmurar y volver a contarles? No, ya que trabajan juntos para nuestro bien, y no deben compararse con nuestra gloria futura, que es segura de si sufrimos, y para Cristo, nos glorificaremos juntos: o a estas bendiciones ahora mencionadas ahora, como la PERFECCI�N DE DIOS, PREESTINACI�N DIVINA, LLAMADA EFECTURA, JUSTIFICACI�N GRATUITA Y GLORIFICACI�N ETERNA, �Qu� se puede decir a estos? No se les puede agregar nada, son un conjunto completo de bendiciones, sin querer nada; Tampoco puede expresarse la grandeza de ellos, o la freeness de la gracia de Dios que se muestre en ellos, lo suficientemente declarado: �Qu� queda para nosotros hacer, sino estar agradecidos por ellos, y la gloria en ellos? �O qu� se puede decir "contra"? nada en absoluto, no pueden ser contradicidos o gansansid; Son verdaderos y fieles refranes; nunca se pueden hacer vac�o, y sin efecto, por infierno o tierra; Tampoco deben tener nada que decir en contra de los intereses en ellos: �O lo que se debe decir, o inferir "de"? Por qu�, el amor libre, soberano, inmutable y eterno de Dios, en proporcionar y otorgar tales beneficios; y la certeza de la salvaci�n, que est� infaliblemente asegurada por la presente:

Si Dios sea para nosotros; O, "ver que es para nosotros", tiene un afecto por nosotros, lo que parece del don de s� mismo, hijo y esp�ritu, y todas las bendiciones de la gracia y la gloria; Y est� de nuestro lado: como est� del lado de su pueblo, es evidente por su preservaci�n de ellos de los males del mundo y sus propias corrupciones; de los apoyos que les da bajo aflicciones y tentaciones; Desde su cargo de la obra de la gracia sobre ellos, a pesar de toda la oposici�n hecha a ella; y de su seguridad y seguridad que disfrutan por �l, a pesar del poder de sus enemigos; �l es para ellos, y por su lado, como eso, sin duda, los salvar�. Esto ha decidido a hacer, ha enviado a su Hijo a obtener la salvaci�n para ellos, su esp�ritu para aplicarlos a ellos, y los mantiene por su poder para el pleno disfrute de �l: y, dado que este es el caso,.

�Qui�n puede estar en contra de nosotros? Ninguno puede ser contra ellos. Hay algunos que posiblemente no pueden estar contra ellos; Si Jehov�, el Padre no est� contra ellos, el Hijo no puede estar contra ellos, ni el Esp�ritu; Los buenos �ngeles no pueden estar en contra de ellos, hasta ahora, que se regocijan a su bien, ministrarlos, y son una guardia de ellos; La ley no puede estar en contra de ellos, porque se cumple en ellos; ni la justicia, porque est� satisfecho, y todas sus demandas respondieron: y aunque puede haber algunos que puedan estar en contra de ellos, y se oponen a ellos, sin embargo, su oposici�n no es un prop�sito; Nunca prevalecer�n sobre ellos a su ruina y su destrucci�n; Como ni pecado, ni satan, ni el mundo, ni la muerte misma.

Versículo 32

El que no salv� a su propio hijo, ... se dice que Dios no salv� a los �ngeles que pecaron, ni el viejo mundo, que estaba lleno de violencia, ni sodoma y Gomorra, cuya maldad era genial, ni los egipcios y su Firstborn, neg�ndose a dejar ir a Israel, ni los propios israelitas, cuando transgredieron sus leyes, ni los hombres malvados se endurecieron en el pecado; Todo lo que no debe preguntarse; Pero que no debe salvar a "su propio hijo", su hijo propio, de la misma naturaleza con �l, e igual a �l, el hijo de su amor, y que nunca pec� contra �l, es muy incre�ble: repara muchos de los Hijos de hombres de una manera providencial, y en una forma de gracia, pero no perdi� a su propio hijo, ni le abati� nada en ning�n sentido, lo que se acord� entre ellos, con respecto a la salvaci�n de su pueblo; Como aparece por su naturaleza humana asumiendo, con todas sus debilidades y enfermedades; por su haber puesto en ella todas las iniquidades de su pueblo, y todo el castigo debido a los que le infligi�, sin la menor reducci�n; y por sus sufrimientos que no se aplazan en absoluto, m�s all� del tiempo designado; Cuando se exigi� la plena satisfacci�n por todos sus pecados, todo el pago de sus deudas a la m�xima que se insisti� en el m�ximo, y todo se realiz� de acuerdo con el m�ximo estricto de la justicia divina: y que no estaba fuera de ning�n desafecto; Tampoco porque �l mismo merec�a tal tratamiento; Pero debido al consejo, el prop�sito y la promesa de Dios, que su ley y su justicia podr�an estar plenamente satisfechos, y su pueblo se ahorr� por completo: adem�s, el sentido de la frase puede aprenderse del uso de ello en la versi�n de Septuagint de g�nesis 22:12 , "no has retenido a tu hijo, tu �nico hijo de m�", que eso hace que lo hace ??? ?????? ", no has salvado a tu amado hijo": as� que Dios no lo hizo Perfore a su hijo, porque no lo retenga:

Pero lo entreg� para todos nosotros. Es decir, Dios el Padre lo entreg�, seg�n su determinado consejo y su conocimiento previo, en manos de hombres malvados; en manos de la justicia, y hasta la muerte misma; No para todos los hombres, ya que a todos los hombres no le dan a Cristo, y todas las cosas libremente con �l, ni todas son liberadas de la condena y la muerte por �l; Por lo tanto, si fue entregado para todos los hombres, debe ser entregado en vano para algunos; Pero para "todos nosotros", o "todos nosotros", a quienes �l saben, predestinados, llamados, justificados y glorificados; y no simplemente como m�rtir, o por ejemplo solo, y por su bien, pero como su garant�a y sustituyen, en su habitaci�n y en su lugar: por lo que.

�C�mo no �l �l no con �l nos dar� todas las cosas? Cristo es el regalo libre de Dios para sus elegidos; Se le da para ser un pacto para ellos, una cabeza sobre ellos, un salvador de ellos, y como el pan de la vida para que puedan vivir sobre: ??se le da libremente; Dios nunca podr�a haber sido obligado a haberle dado; Cristo nunca podr�a haber sido merecido por ellos; nada de lo que pudieran dar o hacer podr�a haberlo puesto bajo obligaci�n de haberlo otorgado en ellos; S�, tales eran las personas, y tales personajes, por los que lo entreg�, que podr�a haber agitado justamente toda su ira contra ellos; Y, sin embargo, tal fue su gracia, que le ha dado a su propio hijo a ellos; Y no �l solo, pero "todas las cosas" con �l: todas las cosas buenas temporales, necesarias y convenientes; Todas las bendiciones espirituales, una justicia justificante, un perd�n del pecado, la gracia santificadora, la adopci�n y la vida eterna: y todos "libremente", de manera soberana, de acuerdo con su propia buena voluntad y placer, sin ninguna obligaci�n ni compulsi�n; no a rega�adientes ni naggardly, sino alegremente y alegremente, absolutamente, y sin ninguna condici�n; porque no se mueve all� por nada en ellos, o realizado por ellos.

Versículo 33

�Qui�n tendr� algo a cargo de los elegidos de Dios? .... Electo de Dios es un cierto n�mero de personas, a quienes ha amado, a partir de su buena voluntad y placer soberanos, a elegir en Cristo antes de la Fundaci�n de El mundo, hasta la vida eterna y la salvaci�n, por ciertas maneras y medios de su propia designaci�n, como santificaci�n y fe, para que sean peculiarmente suyas: �pero son estas personas con cargo con nada criminal? S�, con el pecado de Ad�n; con una falta de justicia original; con multitudes de los pecados antes de la conversi�n, algunos de ellos con uno muy grandes; Y todo, incluso despu�s de la conversi�n, con enfermedades frecuentes y retrocesos: �y no se levantar� y exhibir� cargos de esta naturaleza contra ellos? S�, incluso ahora, a menudo traen cargos contra s� mismos; Son muy aptos para cargarse unos a otros; Satan�s, el acusador de los hermanos, pone muchas cosas a su cargo con mucha frecuencia, y tambi�n lo hacen los hombres del mundo; Pero todos estos cargos no aprovechan nada, ya que ninguna de las personas divinas, el padre, el hijo y el esp�ritu, ponen nada contra ellos: no Dios el Padre, por.

Es Dios que justifica; �l contra quien se compromete el pecado, que es el legislador y el juez justo, los justifica de cada cargo; no al ense�arles el camino de la justificaci�n, ni al infundir la justicia en ellos, o por causas de cualquier obra de justicia realizada por ellos, sino al pronunciarlos justos a trav�s de la imputaci�n de la justicia de su hijo a ellos: observar que "Dios es Elegir ", como tales, son los objetos de la justificaci�n; lo que demuestra la eternidad de ello; La especialidad de ello que pertenece a personas particulares, y la seguridad eterna y la continuidad de la misma.

Versículo 34

�Qui�n es �l que condena, ... es decir, los elegidos de Dios: toda la humanidad merece la condena, y est�n bajo la sentencia de ello, como en Ad�n; Algunos est�n orientados a la condena; Todo en la impenitencia final y la incredulidad, ya est�n condenados; y el mundo entero de los imp�os ser� condenado en el �ltimo d�a; Pero ninguno de los elegidos de Dios est�, o ser� condenado: porque son amados con un amor eterno; son elegidos para la salvaci�n; Est�n en Cristo, donde no hay condenaci�n; Se llevan a creer en �l, y por �l est�n justificados de todo pecado, y as� lo est�n seguros de la condena. De hecho, se lo merecen como otros, considerados en s� mismos; y est�n bajo la sentencia de ello, como en Ad�n, con el resto de la humanidad; y en sus propios aprehensiones, cuando se convenci� del pecado, la justicia y el juicio. �Y hay ninguno que los condenar�n? S�, sus propios corazones a menudo los condenan; son muy avanzados para condenarse unos a otros; El mundo los condena, y tambi�n lo hace el dios de ello: pero ni padre, hijo, ni esp�ritu, los condenar�n; No es el Padre, porque justifica; Tampoco el hijo, por.

Es Cristo lo que muri�: que muri�, est� seguro; La muerte que muri� fue la muerte de la cruz; Las personas a las que murieron eran los elegidos de Dios; La raz�n de su muerte por ellos era hacer expiaci�n por sus pecados; Esto sucedi� a pasar por su sustituci�n en su habitaci�n y en su lugar; Esta muerte de su fue, pero una vez, pero de una eterna eterna, y por lo tanto una seguridad total de todas las condena: por el pecado, la causa de la condena, se elimin� por ella; La condena en s� fue llevada por Cristo en su lugar; La ley y la justicia de Dios estaban satisfechas; El perd�n del pecado fue obtenido por su sangre; y la justificaci�n completa obtenida por su obediencia activa y pasiva; Todo lo que se confirma por su resurrecci�n, sesi�n a la mano derecha de Dios e intercesi�n: por lo que se agrega,.

S�, m�s bien eso se levanta de nuevo. Como la muerte, por lo que la resurrecci�n de Cristo, es la seguridad de los elegidos de Dios de la condena; En la medida en que Cristo se levant� de nuevo, como conquistador sobre la muerte, y sobre el pecado, la picadura de la muerte, y sobre Satan�s, que ten�a el poder de la muerte; y tambi�n como garant�a, habiendo dado satisfacci�n a la ley y la justicia: se comprometi� como una garant�a para su pueblo; Dios en la justicia, y de acuerdo con su justa ley, se ocup� de �l, y por �l como tal; �l satisfizo a ambos, y por lo tanto fue liberado por ellos; Por lo tanto, ni la ley ni la justicia pueden condenar; Adem�s, se levant� de nuevo como persona com�n, jefe y representante de su pueblo, y por su justificaci�n: se mantuvo por primera vez acusado de todos sus pecados, que por su padre, y con su propio consentimiento, se le imput�; Fue condenado y sufri� la muerte por ellos; Cuando se levant� de entre los muertos, fue justificado y absuelto de todos ellos; Y toda su gente fue justificada en �l, y con �l: s�, la resurrecci�n de Cristo es m�s bien una mayor seguridad de la condena, que su muerte; La muerte de Cristo aceler� el pecado, pero su resurrecci�n trajo la justicia eterna; A pesar de la muerte de Cristo, no hab�a vuelto a resucitar, deber�amos haber estado en nuestros pecados, y por lo que era responsable de la condena; La muerte de Cristo mostr� que fue arrestado y condenado, pero su resurrecci�n muestra que se le da de alta, y nosotros, en �l:

Qui�n est� incluso en la mano derecha de Dios. La ascensi�n de Cristo, su entrada al cielo y su sesi�n a la derecha de Dios, tambi�n son una seguridad muy considerable de los elegidos de Dios de la condena; Porque cuando ascendi� de la Tierra al cielo en la naturaleza humana, acompa�ada por los �ngeles, de los cuales ellos y sus disc�pulos eran testigos, llev� al cautiverio cautivo o triunf� a los que llevaban a sus pueblos cautivos, como pecado, Satan�s, la ley, la muerte, y todos los dem�s enemigos de los suyos; entr� en el cielo para prepararlo para ellos, tomar posesi�n de ella en su nombre, aparecer en presencia de Dios para ellos, y, como habiendo obtenido la redenci�n eterna de ellos, donde fue recibido con una bienvenida, como la garant�a. y la cabeza de los elegidos, y luego se sent� a la mano derecha de Dios; Lo que demuestra que hab�a hecho su trabajo, y a la satisfacci�n, est� avanzada sobre todo, se le da el poder, todas las cosas se ponen debajo de �l, y se dirige a todas las cosas a la iglesia: y desde que est� en la mano derecha. de Dios, como defensor e intercesor para su pueblo, no ser� de ning�n prop�sito, y sin �xito, que Satan�s, o cualquier otro enemigo, est� en su mano derecha para resistirlos:

quien tambi�n hace la intercesi�n por nosotros; que se hace, no por la oraci�n vocal, como en los d�as de su carne en la tierra; o como suplicante de un juez enojado; o como controvertido: un punto en la corte del cielo; Pero por la aparici�n de su persona por nosotros, por la presentaci�n de su sacrificio, al ofrecer las oraciones y alabanzas de su pueblo, al declararlo como su voluntad, que tales y tales bendiciones se les otorgan a ellos, y al verlo. , que los beneficios de su muerte se aplican a aquellos, para quienes fueron dise�ados; La intercesi�n de Cristo procede al pie de una satisfacci�n hecha; Siempre contin�a, y siempre es prevalente, y tambi�n lo tiene una influencia considerable para asegurar la condena. El ap�stol, en este vers�culo, parece tener un pasaje en Job 34:29; �Qu� rinden la Septuagint, "y �l da paz, y qui�n es el que condena?".

Versículo 35

�Qui�n nos separar� del amor de Cristo? .... por "el amor de Cristo" no se entiende que el amor de los santos a Cristo, sino su amor a ellos; De hecho, es el objeto de su amor, y tan fuerte es su amor para �l, que nunca puede ser destruido; Porque aunque puede haber una reducci�n en el fervor, nunca se puede perder; Sin embargo, esto nunca se llama el amor de Cristo: adem�s, el ap�stol no est� hablando de su amor a Cristo, sino del amor de Dios y de Cristo a ellos, a lo largo del contexto; Y su dise�o es, para fortalecer la fe del pueblo de Dios, y consolar a sus almas, bajo sus diversas aflicciones: ahora nada m�s efectivamente sirve de manera eficaz, que el amor de Cristo; Y las cosas aqu� en la actualizaci�n son tales, como lo disponen de inyectar dudas y temores, sobre inter�s en el amor de Cristo, y del amor de Dios en Cristo, ya que se interpreta en algunos siguientes vers�culos: adem�s, la separaci�n aqu� interrog�. no es de Cristo de nosotros, sino de nosotros de �l; Mientras que era nuestro amor a Cristo, que est� aqu�, deber�a haber sido puesto, �qui�n lo separar� de nosotros, y no a nosotros desde el amor de Cristo? Que Cristo ama a los electo de Dios, de los que se hablan las personas aqu� mencionadas, es evidente de su compromiso para ellos, defendiendo a sus personas, asumiendo su naturaleza, muriendo en su habitaci�n y se ensa, pagando sus deudas y redimiendo a sus personas, Al preparar un lugar para ellos, intercediendo por ellos, al suministrarlos con toda la gracia, y usarlos de la manera m�s libre y familiar; Lo que el amor de su es maravilloso, inconcebible, e inconcebible, especial y peculiar, libre, libre e inmerecido, excedente, sin cambios, inmutable, duradero, y para siempre. Este es el v�nculo de la Uni�n a Cristo; y la uni�n que se hace por ella se excede cerca y cercana; es real; Perfecto, e indisoluble, nada puede separarse de �l: no.

tribulaci�n; o "aflicci�n", que surge de su amor, y es el fruto de ello; Y a pesar de eso, �l descansa en su amor; Esto no se quita, pero a menudo se disfruta sensiblemente, en medio de las aflicciones:

o angustia; Ya sea de cuerpo o mente; situaci�n en los asuntos y circunstancias de la vida, o en el truco de la mente, en el ejercicio de la gracia y el cumplimiento del derecho; Porque "aunque no creemos, sin embargo, se abiere fiel", 2 Timoteo 2:13, a su pacto y promesas:

o persecuci�n: del mundo; Porque esto es m�s bien una evidencia de que Cristo les ha amado los elegidos y los llam�, porque el mundo los odia:

o hambre: el deseo de las necesidades de la vida, como alimento y bebida; Estar expuesto a un gran hambre y sed, que a veces ha sido el mont�n de los queridos hijos de Dios:

o desnudez; la falta de ropa adecuada, o el uso de prendas comunes; vagando por pieles de ovejas y pieles de cabra, que ha sido el caso de algunos, de los cuales el mundo no era digno, y por eso no hay prueba de separaci�n del amor de Cristo:

o peligro; peligros de diferentes trimestres, por diferentes personas y formas; como el ap�stol Pablo ten�a juicio de, que era altamente en el amor de Cristo, 1 Corintios 11:26;

o espada; Es decir, la muerte por la espada; Que James de la muerte del hermano de John muri�, Hechos 12:13: ahora, aunque esto puede separar la cabeza del cuerpo y separar el alma y el cuerpo, pero a�n no puede separarse del amor de Cristo.

Versículo 36

Como est� escrito, por su bien, somos asesinados, ... Este pasaje es una cita de Salmo 44:22; Y el significado es que, por el bien de Dios, y su adoraci�n pura, los santos del Antiguo Testamento con frecuencia se pusieron a muerte, o se expusieron a las persecuciones de los hombres, que a menudo se emit�an en la muerte; A medida que los santos del Nuevo Testamento han sido, por el bien de Cristo y su Evangelio, incluso.

todo el d�a largo; Es decir, fueron responsables de la muerte durante todo el d�a; O todos los d�as, uno u otro de ellos se puso a muerte:

Nos contabilizamos como ovejas para la matanza; se calmaron como aptos para nada m�s, y se expusieron continuamente: se utilizaron como ovejas, como si estuvieran hechas por ning�n otro uso y servicio, pero ser sacrificadas; Por lo tanto, se les llama, "el reba�o de matanza", Zacar�as 11:7; Y, a medida que esto expresa la brutalidad de sus perseguidores, por lo que su inofensiva, la mansedumbre, la humildad y la paciencia en los sufrimientos, est�n debajo de ellos como corderos u ovejas. Este testimonio se produce, para mostrar que la muerte sufrida ha sido el lote com�n de los santos en todas las edades: y est� dise�ado para animar al pueblo de Dios bajo la dispensaci�n del evangelio, sufrir con alegr�a; La alusi�n puede ser para los corderos y las ovejas diarias muertas por sacrificio; ya sea a los corderos del sacrificio asesinado por la ma�ana y la tarde; o a otros que fueron asesinados en cualquier parte del d�a de la ma�ana a la noche, por otros sacrificios, en la corte del tabern�culo y el templo.

Versículo 37

No, en todas estas cosas, ... Las palabras anteriores se insertan en un par�ntesis, estas son una respuesta a la pregunta en Romanos 8:35 ", �qu� nos separar� del amor? de Cristo? �Deber� la tribulaci�n? " C. "No", no ser�, ni ninguna de las otras cosas mencionadas: "En todas estas cosas" aflicciones, angustias, persecuciones, hambruna, desnudez, espada, o cualquier otra cosa del mismo tipo:

Somos m�s que conquistadores; No solo sobre el pecado y Satan�s, sino el mundo, los reproches, las aflicciones y las persecuciones de ella; que se someten alegremente y valientemente, ya que no solo son conquistadores, sino "m�s que conquistadores": se han superado anteriormente, lo tienen extremadamente lo mejor de ello; porque no solo dan paciencia aflicciones y persecuciones, sino que glorientan en ellos; Su experiencia, fe y alegr�a, a menudo se incrementa por ellos; Han solicitado en alg�n momento, e incluso cansaron a sus perseguidores; Han recibido la victoria con facilidad, sobre Satan�s y sus emisarios infernales, por la sangre del Cordero, y la palabra de su testimonio: Pero esto no se debe a s� mismos, o a trav�s de su propia fuerza, sino.

a trav�s de �l que nos amaba; lo que significa Dios el Padre, cuyo amor se menciona en los siguientes vers�culos, o m�s bien el Se�or Jesucristo; Y as�, algunas copias lo expresan, "a trav�s de Cristo que nos am�": "a trav�s de �l", quien tiene la victoria sobre todos los enemigos de su pueblo, y los desarrolla a los coaters en sus conquistas; "A trav�s de �l", que puede ayudarlos, y tiene la fuerza suficiente para llevarlos a trav�s, y los trae m�s que conquistadores; Qui�n los ha amado, todav�a los ama, y ??cuyo amor se involucra con su poder para pararlos y protegerlos contra todos sus enemigos.

Versículo 38

Porque estoy persuadido, ... estas palabras con lo siguiente, expresan la fuerte persuasi�n y la plena seguridad de la fe, el ap�stol hizo que nada lo que pudiera separarlo a �l y al resto del pueblo de Dios, de su amor hacia ellos en Cristo Jes�s. . Esta persuasi�n no solo se considera, sino a otras; y no es conjetural, sino cierto; y que no surgi� de ninguna revelaci�n especial y extraordinaria, sino que se basa en la naturaleza del amor de Dios mismo, la seguridad de la misma en Cristo, y de las personas de los elegidos de Dios en �l; Sobre la predestinaci�n eterna, y los prop�sitos inalterables de Dios; sobre la promesa y juramento de Dios; por la adopci�n, y los testigos graciosos, asistencias y habitacion del esp�ritu; y se incrementa enormemente por la consideraci�n de la muerte, la resurrecci�n y la intercesi�n de Cristo. Las cosas enumeradas, que no pueden separarse del amor de Dios, son las siguientes:

muerte; La muerte separa a los hombres del mundo, sus habitaciones y sustancias mundanas; Separa el alma del cuerpo, y un amigo de otro; y en proceso de tiempo, puede despegar todos los pensamientos y afectos para los amigos difuntos, pero no puede separarse del amor de Dios; Est� tan lejos de ello, que deja que el alma llegue al m�ximo el disfrute de ello: y como la muerte corporal, por lo que ning�n otro tipo de muerte puede hacerlo; Porque si la muerte del cuerpo no puede, la muerte de las aflicciones nunca puede; Y en cuanto a una muerte moral o espiritual, y una eterna, estos nunca pasar�n a los hijos de Dios:

ni la vida; Esta vida natural y temporal, que es fr�gil y mortal; El amor de Dios es mejor que esta vida, y esto en s� mismo es el efecto del favor divino; Por lo que esto nunca puede separarse del amor de Dios, ni nada en �l: la vida de los creyentes est� llena de problemas y ejercicios, y asisti� con mucha imperfecci�n y pecado; Pero nada lo hace, o puede alienar los afectos de Dios de sus hijos; Porque aunque los ejerce con los juicios de la vida, y los castiga por sus pecados, sin embargo, su bondad amorosa no se quita de ellos:

ni �ngeles; por quien son los �ngeles malvados, los demonios; Para los buenos �ngeles, nunca intentan separar a Dios y a su pueblo; Se regocijan a su bien, el ministro de ellos, son sus guardianes, mientras que aqu�, a la muerte, llevan sus almas al cielo, y en el �ltimo d�a reunir�n a todos los elegidos juntos; Pero los �ngeles malvados se esfuerzan, por las tentaciones al pecado y las acusaciones para ello; revolviendo las herej�as y las persecuciones, para destruirlos, pero no puede tener �xito; Porque los santos est�n sobre el coraz�n de Dios, est�n en las manos de Cristo, y en �l la roca; Y el Esp�ritu de Dios est� en ellos, que es mayor que el que est� en el mundo:

ni principados: magistrados civiles; Aunque los pueden separarlos de su compa��a, y los ech� como maldad; puede separarlos en las prisiones uno de otro; y el alma y el cuerpo separados, matando a este �ltimo, lo cual es todo lo que pueden hacer; Sin embargo, no pueden separar ni alma ni cuerpo del amor de Dios: los jud�os a menudo dicen, que si todas las naciones del mundo se reunieran juntas, no pod�an extinguirnos ni causar para cesar, o quitar el amor que est� entre Dios y su pueblo Israel P:

ni poderes; o bien lo mismo con el primero; o falsos maestros que ten�an el poder de los milagros de trabajo en confirmaci�n de sus doctrinas, por las cuales enga�aban a muchos; Y si hubiera sido posible, habr�a enga�ado a los elegidos de Dios, pero eso era imposible:

ni cosas presentes; Mals actuales, las aflicciones de la vida actual; Dios no deja de amar cuando aflige a su pueblo; S�, las aflicciones primaveras de su amor, y en ellas, �l mismo manifiesta su amor a ellos; Est�n anulados por su bien, y se emiten en la gloria eterna. Las tentaciones actuales tambi�n pueden ser destinadas. Los mejores santos han sido expuestos a ellos; El mismo Cristo no estaba exento de ellos; Estos no, ni no pueden separarse del amor de Dios; Lo que se manifiesta del respeto que Dios y Cristo tienen que tentar a los tentados, simpatizando con ellos, apoyando y sucursales de ellos, reprendiendo el tentador y entregando de ellos. Las deserciones actuales, o las hidings de la cara de Dios, que a menudo es el caso de sus queridos hijos, no puede tener tal efecto; Su relaci�n con Dios todav�a contin�a; Tienen una gran falta de inter�s, son grabados en las palmas de sus manos, se establecen como un sello en su coraz�n, y �l les lleva un fuerte afecto; Sin embargo, por razones sabias, se complace por un momento para esconderse de ellos: S�, el cuerpo actual del pecado y los santos de muerte contin�an con ellos en esta vida, no pueden separarlos; El pecado ha separado a los �ngeles de Dios, que se rebel� contra �l; Condujo a Ad�n del jard�n del Ed�n, y excluir� a los malvados de la presencia divina a toda la eternidad; y a menudo se separa entre Dios y su propia gente, con respecto a la comuni�n, pero nunca con respecto a la uni�n a �l, o inter�s en �l; porque �l sab�a lo que ser�an cuando �l les hiciera el amor; Su amor rompi� todas las corrupciones de la naturaleza y los pecados de la vida en su conversi�n; y parece continuar lo mismo de las fuertes expresiones de su gracia a ellos, a pesar de todas sus reincidentes; Podr�a pecar separado en este sentido, nadie seguir�a siendo objeto de su amor. Ahora, esto no supone que Dios ama el pecado, ni le da ning�n est�mulo; Porque aunque no puede separarse de inter�s en Dios, pero lo hace desde el disfrute de �l. Una vez m�s, se pueden dise�ar cosas buenas, las cosas buenas de esta vida, los disfruidores temporales; Estos se dan en el amor; Y aunque pueden ser pocos, est�n de misericordia, y con una bendici�n; Y la gran misericordia de todos es, que estos no son todos, ni se quitan el valor y la estima por el amor de Dios, lo que es mejor para ellos que todas las cosas de la vida; Y aunque "la prosperidad de los tontos los destruir�", Proverbios 1:32, la prosperidad de los santos nunca ser� su ruina:

ni cosas por venir; Ya sea bueno o malo, pr�spero o adverso; M�s aflicciones, frescas dificultades con el cuerpo del pecado; una hora de tentaci�n, y tiempo de angustia que es venir sobre toda la tierra; o los malos d�as de vejez; Dios nunca se ir�, ni abandonar� a su pueblo, ni causar� que su bondad amorosa se vaya de ellos, en cualquier estado o condici�n en que pueden entrar: la versi�n latina de la Vulgata agrega, "ni fortaleza"; y la versi�n et�ope, "ni poderes"; y una copia lo agrega al comienzo de Romanos 8:39 ", ni poder".

n targum en cant. viii. 7. Oh Shemot Rabba, Sect. 49. Fol. 144. 1. P Bemidbar Rabba, Sect. 2. Fol. 179. 4.

Versículo 39

Ni la altura, ni la profundidad, ... ni el cielo, la tierra, ni el infierno, ni ninguno de los habitantes de ninguno de los dos, ni nada en el momento; No hay lugar alto o bajo, para ser arrojado de uno, o en el otro; ni la altura del honor y la prosperidad, o la profundidad de la mezquindad y la adversidad; ni la altura del poder, o la profundidad de la pol�tica en hombres o demonios;

ni ninguna otra criatura. Esto lleva en toda la br�jula de seres creados en el cielo, la tierra y el mar; y expresa m�s fuertemente la insuperabilidad de los santos del amor de Dios, por cualquier cosa o criatura, lo que sea; nada en todo el universo.

Ser� capaz de separarnos el amor de Dios, que est� en Cristo Jes�s, nuestro Se�or: por "el amor de Dios", no se entiende el amor de los santos a Dios; Porque aunque esto a veces se llama el amor de Dios, es de �l, como el autor de ella, y para �l, como el objeto de �l, y se puede decir que est� en Cristo, o por �l, y nunca se puede perder. ; Sin embargo, el ap�stol no habr�a expresado una confianza tan fuerte y la plena persuasi�n sobre esto, y preferir�a haber dicho, hubiera sido su significado, que nada podr� separar nuestro amor de Dios, o Dios de nuestro amor, y no nosotros. del amor de Dios; Adem�s, est� hablando de ese amor por el cual estamos m�s que conquistadores, y pretende manifiestamente el amor con el que Dios ama a su pueblo, particularmente el amor de Dios el Padre: Y esto es "en Cristo Jes�s nuestro Se�or"; lo ha expresado en Y a trav�s de Cristo, en elegirlos y bendici�ndolos en �l, y envi�ndole a morir por ellos; Y todav�a contin�a en �l, y est� en �l como su Se�or, cabeza, esposo y redentor; y es una raz�n por la que nada puede separarlos de �l: que debe entenderse, no de los efectos del amor, y la aplicaci�n de ella, que puede ser suspendida por un tiempo; ni de la manifestaci�n y la sensaci�n de la misma, que los creyentes pueden estar sin por un rato; Ni de cualquier tipo de separaci�n de Dios, para los santos, se pueden separar de �l, con respecto a la comuni�n y la comuni�n sensible �ntimas; Pero el sentido de este pasaje es que nunca se pueden separar del amor de Dios, por lo que esa uni�n que se hace entre Dios y que puedan disolverse, o dejan de tener alguna participaci�n o inter�s en su amor. Este, el ap�stol fue persuadido nunca podr�a ser.

Información bibliográfica
Gill, John. "Comentario sobre Romans 8". "Exposición de Toda la Biblia de Gill". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/geb/romans-8.html. 1999.
 
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