Bible Commentaries
1 Corintios 4

Comentario Bíblico Católico de HaydockComentario Católico de Haydock

Versículo 1

Misterios de Dios. Es decir, los dogmas de la fe, revelados por el Todopoderoso. (Estius)

Versículo 3

O por juicio humano. Literalmente, por d�a humano. El sentido, dice San Jer�nimo, es, por cualquier juicio humano, o por los hombres, cuyo juicio es en el d�a o tiempo de esta vida: pero Dios juzga en su d�a, despu�s de esta vida, y principalmente en el �ltimo d�a de esta vida. juicio. &mdash- Tampoco me juzgo a m� mismo para considerarme absolutamente seguro del estado de mi alma, o que estoy ciertamente justificado, aunque no tenga conciencia de nada, porque debo ser juzgado por un Dios omnisciente, el gran buscador de corazones, que tal vez pueda descubrir faltas que yo, parcial a m� mismo, las paso por alto. Ahora bien, si San Pablo no se atrevi� a decir que estaba justificado, �qu� presunci�n es para los dem�s pretender con absoluta certeza que son justos ante los ojos de Dios! (Witham)

Versículo 4

Porque no soy consciente. Este gran ap�stol de los gentiles, aunque consciente de no haber incumplido su deber, todav�a no se atreve a llamarse justo. Cu�n diferente es la conducta de este ap�stol, de esos imp�os impostores, que ense�an que el hombre se justifica crey�ndose as�. (Estius) &mdash- Si este ap�stol privilegiado tuvo miedo de cualquier juicio de su propio coraz�n y pensamientos, fueran puros o no, pero dej� la prueba para el d�a del juicio, el d�a de su muerte, qu� presuntuosos son ellos, que se atreven a pronunciarse sobre su elecci�n y predestinaci�n!

Versículo 5

No juzgues, etc. Les da una amonestaci�n contra los juicios imprudentes y falsos, e insin�a a los que entre ellos dijeron, este hombre es mejor, este hombre es m�s grande que tal, etc. Ver San Juan Cris�stomo. (Witham)

Versículo 6

Estas cosas, hermanos, las he transferido en una figura a m� y a Apolo. Literalmente, estas cosas las he transfigurado en m� y en Apolo, es decir, he representado las divisiones y disputas entre ustedes, como si fuera por su contienda, si yo, o Apolo, o Cefas fu�ramos los mejores predicadores, sin nombrarlos, como podr�a hacer yo, qui�nes son las verdaderas causas de estas divisiones, esforz�ndome por qui�nes deber�an ser considerados hombres de las partes m�s grandes y brillantes.

&mdash Es la opini�n de St.

Tom�s de Aquino y tambi�n de Estius, que San Pablo, Apolo y Cefas no eran las causas reales de las divisiones que exist�an entre los nuevos conversos en Corinto, pero que al hacer uso de estos nombres, deseaba ense�arles que si Era ilegal mantener estas divisiones incluso por el bien de los ap�stoles, �qu� tan lejos deber�an estar de hacer algo de este tipo por aquellos cuya autoridad era mucho menor en la Iglesia?

Pero Calmet opina que las divisiones entre los corintios se debieron ciertamente a Pablo, Apolo, Cefas y quiz�s algunos otros, cuyos nombres no se mencionan.

Versículo 7

Porque, �qui�n te distingue o te ha distinguido de otro? �l habla particularmente a esos predicadores orgullosos y vanidosos: si tienes talentos m�s grandes que otro hombre, �qui�n te los ha dado a ti oa alguien, sino Dios, que es el dador y el autor de todo don y perfecci�n? Esto no solo es cierto para el don de la predicaci�n, sino para todos los dones y gracias; de modo que San Agust�n lo utiliza en varios lugares contra los pelagianos, para mostrar que es s�lo por gracia, que un hombre es preferido antes que otro, y no por sus propios m�ritos. (Witham)

Versículo 8

Ahora est�s saciado, etc. Ustedes, grandes y vanidosos predicadores, son ricos en todo tipo, bendecidos con todos los dones, etc. T� reinas sobre las mentes de la gente, sin nosotros, no necesitas nuestra ayuda. Y quisiera Dios que reinaras, que tambi�n nosotros reinemos contigo. Desear�a que tu reinado y gobierno sobre el pueblo estuvieran bien fundamentados en la virtud y la verdad, para que pudi�ramos ser part�cipes de la misma felicidad.

San Juan Cris�stomo, f�jense, que San Pablo habla as�, es decir lo contrario, con la figura llamada iron�a: y as� tambi�n San Juan Cris�stomo entiende los dos vers�culos siguientes, como si San Pablo s�lo representara lo que esos vanidosos predicadores dijeron con desprecio hacia �l, como si fuera s�lo un ap�stol de rango inferior, no uno de los principales, ni de los doce. Y cuando dice, somos necios por causa de Cristo, a quien culpa, sabios, especialmente en Cristo.

Pero aunque el ap�stol usa en parte esta figura de iron�a, mezcl�ndola en su discurso, sin embargo, tambi�n representa la condici�n de todos los verdaderos ap�stoles y predicadores de Cristo crucificado, cuyas personas y doctrina fueron despreciadas, ridiculizadas y burladas por hombres que estaban sabio s�lo con sabidur�a mundana, especialmente por libertinos profanos y hombres ateos, que se burlan de toda religi�n revelada. Andar predicando con hambre, con sed, con desnudez, con miseria, con aflicciones y persecuciones, es lo que ellos piensan que es ser miserable: desprecian a hombres como los marginados, la escoria [1] y la escoria de la tierra. humanidad.

(V�ase el texto griego.) (Witham) &mdash- Habla a los corintios, que olvidando su primer fervor y la modestia cristiana que les hab�a ense�ado San Pablo, tanto con la palabra como con el ejemplo, se esforzaban por distinguirse por la reputaci�n y honor del ap�stol, que los hab�a convertido, por la antig�edad de su fe, y por otras cosas m�s fr�volas. (Calmet)

[BIBLIOGRAF�A]

Tanquam purgamenta, omnium peripsema, griego: os perikatharmata, Sordes, quisquili�, griego: panton peripsema, Scobes, ramentum. Vea al Sr. Legh, Crit. Sacra.

Versículo 9

Hizo un espect�culo. Es evidente por los escritos de San Pablo, y por innumerables otros registros, que los ap�stoles fueron hechos un espect�culo para el mundo y para los hombres; pero �c�mo, tal vez alguien pregunte, se convirtieron en un espect�culo para los �ngeles? San Juan Cris�stomo, Teod. [�Teodoreto?], Y muchos otros piensan, que el ap�stol est� aqu� hablando de los �ngeles buenos, que contemplan con placer las labores y aflicciones de los santos, sabiendo que ser� fuente de gloria; pero Estius, Vat.

[�Vatable?], Y algunos otros, opinan que aqu� se habla de los �ngeles malvados, que se regocijan por las persecuciones de los siervos de Dios y con el fin de vengarse de la destrucci�n de su imperio.

Versículos 14-17

Yo no escribo. San Pablo insin�a aqu� a los corintios que deben sonrojarse de verg�enza por descuidar a los ap�stoles, que hab�an sufrido tantas penurias por ellos, seguir a maestros carentes de honor y gloriarse de ser llamados disc�pulos de tales hombres. (Estius) &mdash- Os amonesto como mis queridos hijos, de lo que es para vuestro bien, y puedo tomarme esta libertad, como siendo vuestro padre espiritual en Cristo, por quien fuisteis hechos cristianos por primera vez.

Sed imitadores de m�, como yo tambi�n lo soy de Cristo; seguid la doctrina de Cristo, que yo sigo y os ense��. Timoteo, mi hijo amado en el Se�or, a quien te env�o, te recordar� lo que ense�o y practico. (Witham)

Versículo 18

Algunos de esos nuevos m�dicos y predicadores est�n tan engre�dos, que fingen que ya no me atrevo a acudir a ustedes, ni a defenderme: puede que tambi�n se refiera al hombre que vivi� en incesto, sus compa�eros y sus aduladores. &mdash- Pero vendr� a ustedes en breve, y luego usar� mi autoridad para darme cuenta de sus vanas palabras, ellos encontrar�n y experimentar�n ese poder que Dios me ha dado por los dones del Esp�ritu Santo, y de obrar milagros.

(Witham) &mdash- Pero vendr�. El buen efecto que produjo esta carta entre los corintios retras� su viaje previsto, de modo que no fue a Corinto hasta uno o dos a�os despu�s de que se escribiera esta carta. Escribi� su segunda ep�stola a los mismos antes de hacerles una visita, para aplicar un remedio calmante a sus mentes y corazones, afligidos con sus severas y caritativas correcciones contenidas en esta su primera ep�stola.

(Haydock) &mdash- �Qu� quieres? �O qu� disposici�n hallar� en ti? que no sea necesario que yo use la vara de castigo de las excomuniones y otras armas espirituales, sino que sea reformado antes de que yo venga, para que pueda ir a ti con esp�ritu de apacibilidad, como deseo hacerlo. (Witham)

Información bibliográfica
Haydock, George Leo. "Comentario sobre 1 Corinthians 4". "Comentario Bíblico Católico de Haydock". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/hcc/1-corinthians-4.html. 1859.