Vida. La Septuaginta tambi�n parece entender esto de Dios. (Calmet) &mdash Hebreo, "�El esp�ritu de qui�n vino de ti?" (Protestantes) (Haydock) �Recib� mi vida o busco tu consejo? (Calmet) &mdash- Dios no necesit� la sabidur�a de Baldad (Worthington) m�s que Job. (Haydock)
Con ellos. Los peces menores y mayores, (Menochius) o m�s bien los gigantes y otros que fueron enterrados en las aguas del diluvio, y est�n confinados en las mazmorras del infierno. Los poetas hablan de la misma manera. " Hic genus antiquum terr�, Titania pubes,
Fulmine dejecti fundo voluntur in imo.
&mdash&mdash- Aliis sub gurgite vasto,
Infectum eluitur scelus aut exuritur igni. "(Virgilio, �neid vi.)
&mdash- Homero (Il�ada viii.) Y Hes�odo (Theog.) Colocan a los gigantes en la extremidad de la tierra, en la m�s absoluta oscuridad. Ver tambi�n Proverbios ix. 18., e Isa�as xiv. 9. (Calmet)
Infierno. La tumba. &mdash San Juan (Apocalipsis ix. 11.) estiliza el abismo sin fondo; (Calmet) o su �ngel, (Haydock) Abaddon, o Apollyon. Aqu� puede llamarse destrucci�n, (Calmet) ya que todas sus v�ctimas est�n perdidas para siempre por todo lo bueno. La oscuridad de la tumba, e incluso la del infierno, no puede ocultar nada a Dios.
El polo norte, que era el �nico visible en Idumea, y segu�a inm�vil, mientras todas las estrellas realizaban sus revoluciones. (Calmet) &mdash Todo tiende al centro, (Menochius) por las leyes de la atracci�n. (Newton, & c.) (Haydock)
Fin. Hasta el fin del mundo, el oc�ano respetar� estos l�mites. (Haydock) &mdash Los fil�sofos han explicado este fen�meno. Pero a�n es cierto que el poder y la sabidur�a de Dios preservan el equilibrio, sin el cual todos regresar�an al antiguo caos. (Calmet)
Cielo. Las monta�as est�n dise�adas as� por P�ndaro; y los poetas los representan sosteniendo los cielos. Totum ferre potest humeris minitantibus orbem. (Petronio) &mdash- Sin embargo, otros entienden ese poder que mantiene todas las cosas juntas, (Calmet) o los �ngeles, a cuyo gobierno los antiguos atribu�an los cuerpos celestes. (San Gregorio; Ven. Beda, etc.)
Juntos, al principio, G�nesis i. 9. En hebreo: "Con su fuerza dividi� el mar, y con su sabidur�a traspas� a los soberbios, oa Egipto". Rahab, (Haydock) o Rachab, a menudo se pone para Egipto; (Salmo lxxxviii. 11.) y todos habr�an concluido naturalmente que la ca�da de Fara�n fue se�alada, si no se hubiera supuesto que Job vivi� antes de ese evento. Sin embargo, eso es dudoso. Isa�as (li.
9.) usa los mismos t�rminos para describir la ca�da de este tirano. (Calmet) &mdash Las olas espumosas (Menochius) tambi�n est�n sujetas a su control. (Haydock)
Cielos, con estrellas, etc., Salmo xxxii. 6., y Sabidur�a i. 7. Dios tambi�n env�a vientos para dispersar las nubes, para que aparezcan los cielos. (Calmet) &mdash Serpiente; una constelaci�n, un rayo, el diablo, o m�s bien el leviat�n, Isa�as xxvii. 1. (Drusius) (Calmet) &mdash Pero no es necesario recurrir a la alegor�a. (Calmet)
Soltar. Esta comparaci�n se aplica a menudo al habla, Deuteronomio xxxii. 2., e Isaias lv. 10. Si lo poco que sabemos de las obras de Dios nos da una idea tan exaltada de su grandeza, �qu� pensar�amos si pudi�ramos comprender plenamente sus misterios? (Calmet)
Versículo 4
Vida. La Septuaginta tambi�n parece entender esto de Dios. (Calmet) &mdash Hebreo, "�El esp�ritu de qui�n vino de ti?" (Protestantes) (Haydock) �Recib� mi vida o busco tu consejo? (Calmet) &mdash- Dios no necesit� la sabidur�a de Baldad (Worthington) m�s que Job. (Haydock)
Versículo 5
CAPITULO XXVI.
Con ellos. Los peces menores y mayores, (Menochius) o m�s bien los gigantes y otros que fueron enterrados en las aguas del diluvio, y est�n confinados en las mazmorras del infierno. Los poetas hablan de la misma manera. " Hic genus antiquum terr�, Titania pubes,
Fulmine dejecti fundo voluntur in imo.
&mdash&mdash- Aliis sub gurgite vasto,
Infectum eluitur scelus aut exuritur igni. "(Virgilio, �neid vi.)
&mdash- Homero (Il�ada viii.) Y Hes�odo (Theog.) Colocan a los gigantes en la extremidad de la tierra, en la m�s absoluta oscuridad. Ver tambi�n Proverbios ix. 18., e Isa�as xiv. 9. (Calmet)
Versículo 6
Infierno. La tumba. &mdash San Juan (Apocalipsis ix. 11.) estiliza el abismo sin fondo; (Calmet) o su �ngel, (Haydock) Abaddon, o Apollyon. Aqu� puede llamarse destrucci�n, (Calmet) ya que todas sus v�ctimas est�n perdidas para siempre por todo lo bueno. La oscuridad de la tumba, e incluso la del infierno, no puede ocultar nada a Dios.
Versículo 7
El polo norte, que era el �nico visible en Idumea, y segu�a inm�vil, mientras todas las estrellas realizaban sus revoluciones. (Calmet) &mdash Todo tiende al centro, (Menochius) por las leyes de la atracci�n. (Newton, & c.) (Haydock)
Versículo 8
Nubes, como en una vasija o vestido, Proverbios xxx. 4.
Versículo 9
Encima de eso. El firmamento, con toda su belleza, es como una nube para ocultar a nuestros d�biles ojos el esplendor del trono de Dios.
Versículo 10
Fin. Hasta el fin del mundo, el oc�ano respetar� estos l�mites. (Haydock) &mdash Los fil�sofos han explicado este fen�meno. Pero a�n es cierto que el poder y la sabidur�a de Dios preservan el equilibrio, sin el cual todos regresar�an al antiguo caos. (Calmet)
Versículo 11
Cielo. Las monta�as est�n dise�adas as� por P�ndaro; y los poetas los representan sosteniendo los cielos. Totum ferre potest humeris minitantibus orbem. (Petronio) &mdash- Sin embargo, otros entienden ese poder que mantiene todas las cosas juntas, (Calmet) o los �ngeles, a cuyo gobierno los antiguos atribu�an los cuerpos celestes. (San Gregorio; Ven. Beda, etc.)
Versículo 12
Juntos, al principio, G�nesis i. 9. En hebreo: "Con su fuerza dividi� el mar, y con su sabidur�a traspas� a los soberbios, oa Egipto". Rahab, (Haydock) o Rachab, a menudo se pone para Egipto; (Salmo lxxxviii. 11.) y todos habr�an concluido naturalmente que la ca�da de Fara�n fue se�alada, si no se hubiera supuesto que Job vivi� antes de ese evento. Sin embargo, eso es dudoso. Isa�as (li.
9.) usa los mismos t�rminos para describir la ca�da de este tirano. (Calmet) &mdash Las olas espumosas (Menochius) tambi�n est�n sujetas a su control. (Haydock)
Versículo 13
Cielos, con estrellas, etc., Salmo xxxii. 6., y Sabidur�a i. 7. Dios tambi�n env�a vientos para dispersar las nubes, para que aparezcan los cielos. (Calmet) &mdash Serpiente; una constelaci�n, un rayo, el diablo, o m�s bien el leviat�n, Isa�as xxvii. 1. (Drusius) (Calmet) &mdash Pero no es necesario recurrir a la alegor�a. (Calmet)
Versículo 14
Soltar. Esta comparaci�n se aplica a menudo al habla, Deuteronomio xxxii. 2., e Isaias lv. 10. Si lo poco que sabemos de las obras de Dios nos da una idea tan exaltada de su grandeza, �qu� pensar�amos si pudi�ramos comprender plenamente sus misterios? (Calmet)