Bible Commentaries
Ezequiel 23

Versículos 1-49

CAPITULO 23

Vv. 1-49. LOS PECADOS Y CASTIGOS DE ISRAEL Y JUDA, EXPLICADOS BAJO LOS NOMBRES AHOLAN Y AHOLIBAH. El estilo de im�genes es similar al del cap. 16; pero aqu� la referencia no es como all� tanto a la violaci�n del pacto matrimonial espiritual con Dios por la idolatr�a del pueblo, como por su esp�ritu mundano, y su confianza en alianzas con los paganos para su seguridad, antes que en Dios.

2. dos � hijas � de una madre�Israel y Jud�, una naci�n por nacimiento de la misma antepasada, Sara.

3. Aun tan temprano en su historia como su residencia en Egipto, ellos hab�an cometido idolatr�as (Notas, cap. 20:6-8; Josu� 24:14). en sus mocedades�una agravaci�n de su pecado. Fu� precisamente en el tiempo cuando recib�an favores extraordinarios de Dios (cap. 16:6, 22). estrujados�por los egipcios.

4. Aholah�es decir �su tienda� (puesta para culto, como el primer culto al Dios de Israel se celebraba en una tienda o tabern�culo) en contraste con Aholibah, es decir, �Mi tienda en ella�. El culto de Bethel, en Samaria, fu� de la invenci�n de ella, no del establecimiento de Dios; el culto en el templo de Jerusal�n fu� expresamente establecido por Jehov�, quien �moraba� all�, �asentando su tabern�culo entre el pueblo como suyo� ( �xodo 25:8; Lev�tico 26:11; Josu� 22:19; Salmo 76:2). la mayor�Se llama �mayor� a Samar�a, porque ella precedi� a Jud� en su apostas�a y su castigo. las cuales fueron m�as�previo a su apostas�a bajo Jeroboam, Samar�a (Israel, o las diez tribus), igualmente con Jud�, adoraba al Dios verdadero. Dios, pues, nunca renunci� a su derecho sobre Israel, mas envi� profetas, como El�as y Eliseo, para declarar su voluntad a ellos.

5. en mi poder�lit. �bajo m�, sujeta a m� como su esposo legal. sus vecinos�al nordeste el reino de Israel lindaba con el de Asiria, porque hab�a ocupado gran parte de Siria. Su vecindad geogr�fica era emblem�tica de que estaban cerca uno de otro en la corrupci�n de costumbres morales y de culto. Las alianzas de Israel con Asiria, que son el tema principal de reprobaci�n aqui, contribu�an a esto ( 2 Reyes 15:19; 2 Reyes 16:7, 2 Reyes 16:9; 2 Reyes 17:3; Oseas 8:9).

6. c�rdeno�m�s bien. �p�rpura�. [Fairbairn.] As� como las pasiones de la mujer sensual son encendidas por el atav�o vistoso y la apariencia juvenil en los hombres, as� fu� seducido Israel por la pompa y el poder de Asiria (v�ase Isa�as 10:8). caballeros�soldados de caballer�a.

7. todos los �dolos de ellos�nada hab�a que ella negara a sus amantes.

8. fornicaciones de Egipto�los becerros eregidos en Dan y Bethel por Jeroboam, que correspond�an al �dolo egipcio de forma de buey, Apis. Sus alianzas pol�ticas con Egipto tambi�n son indicadas ( Isa�as 30:2; Isa�as 31:1). Las diez tribus probablemente empezaron de nuevo los ritos egipcios a fin de atraer a los egipcios en contra de Jud� ( 2 Cr�nicas 12:2).

9. Dios, en justa retribuci�n, volvi� los objetos de su confianza en instrumentos de su castigo: Pul, Tiglath-pilneser, Esar-haddon y Salmanasar ( 2 Reyes 15:19, 2 Reyes 15:29; 2 Reyes 17:3, 2 Reyes 17:6, 2 Reyes 17:24; Esdras 4:2, Esdras 4:10). �Su pecado fu� el haber buscado tales amantes, y hab�a de ser su castigo que estos amantes llegaran a ser sus destructores� [Fairbairn.]

10. vino a ser de nombre�Vino a ser famosa; �vino a ser nombre�, fama, notoria por sus castigos como lo hab�a sido por sus pecados, de suerte que es citada como amonestaci�n para otros. entre las mujeres�es decir, pueblos vecinos.

11.Jud�, el reino del sur, aunque ten�a la �amonestaci�n� (Nota, v. 10) del reino septentrional ante su vista, en vez de sacar provecho de ella, fu� a profundidades m�s grandes en corrupci�n que Israel. Sus privilegios espirituales mayores hac�an tanto m�s grave su culpa (cap. 16:47, 51; Jeremias 3:11).

12. (vv. 6, 23). vestidos en perfecci�n�Grocio traduce: �llevando corona� o �guirnalda�, tal como llevaban los amantes al visitar a sus amadas.

13. un camino�andaban ambas por un mismo camino, al abandonar las dos a Jehov� en favor de seguridades paganas.

14. pintadas de color�el bermejo, color peculiar de los caldeos, como lo era la p�rpura de los asirios. En armon�a sorprendente con este vers�culo est� el hecho de que las esculturas asirias reci�n descubiertas, tienen bajos relieves pintados de rojo, azul y negro. Los jud�os (por ejemplo Joacim, Jeremias 22:14) copiaban �stos. (V�ase cap. 8:10)

15. tiaras pintadas en sus cabezas�m�s bien, �en turbantes amplios pintados�; lit., �redundantes con turbantes te�idos.� Los asirios se deleitaban en t�nicas, chales, cinturones, turbantes, etc., amplios, ondeantes y ricamente coloreados, variando en ornamentos de acuerdo con el rango de las personas. nacidos en tierra de Caldeos�entre los mares Negro y Caspio (nota, Isa�as 23:13). �Capitanes�; clase militar de primer rango que peleaban tres en cada carro, guiando los caballos uno de ellos, y peleando los otros dos.

16. envi�les mensajeros a la tierra de los Caldeos�(Cap. 16:29). Era ella quien buscaba a los caldeos, y no ellos a ella. Probablemente la ocasi�n fu� cuando Jud� trat� de ponerse m�s fuerte mediante una alianza caldea contra una amenaza de ataque desde Egipto (v�ase 2 Reyes 23:29; 2 Reyes 24:1). Dios hizo que el objeto de su deseo pecaminoso fuese el instrumento de su castigo. Joacim, probablemente por una estipulaci�n de tributo, alist� a Nabucodonosor contra Fara�n, de quien hab�a sido tributario antes: dejando de cumplir la estipulaci�n, trajo sobre s� la venganza de Nabucodonosor.

17. su deseo se hart� de ellos�es decir, de los caldeos; volvi�ndose nuevamente a los egipcios (v. 19), tratando con la ayuda de ellos, de librarse de sus solemnes compromisos con Babilonia (v�ase Jeremias 37:5, Jeremias 37:7; 2 Reyes 24:7).

18. mi alma se hart� de ella�lit., �fu� separada de ella�. Una justa retribuci�n porque �su alma se hab�a separado de los caldeos� (v. 17), a los cuales hab�a jurado fidelidad (cap. 17:12-19). �Descubri� describe el abierto descaro de su apostas�a.

19. Israel primero �llam� su sensualidad, practicada cuando en Egipto, �a su memoria�, y luego efectivamente volvi� a ella. N�tese el peligro de permitir que la memoria permanezca en el placer sentido en los pecados.

20. sus rufianes�los amantes de ella entre ellos (los egipcios); ella amaba en exceso a sus personas como amantes (vv. 5, 12, 16). carne�miembro viril (muy grande en el asno), como Lev�tico 15:2, Ezequiel 16:26. flujo de caballos�el flujo seminal. El caballo fu� hecho por los egipcios el s�mbolo jerogl�fico por la persona sensual.

21. tornaste a la memoria��repetiste�, [Maurer.] comprimieron tus pechos�permitiendo que sean comprimidos por los egipcios.

22. tus amantes contra ti � se hart� tu deseo�(v. 17). Tarde o temprano el amor il�cito termina en completo aborrecimiento ( 2 Samuel 13:15). Los babilonios, antes los objetos de su amor en su olvido de Dios, pero ahora, con una inconstancia caracter�stica, objetos de su odio, ser�n hechos por Dios los instrumentos de su castigo.

23. todos los Caldeos, mayordomos, etc.�todas las clases de la poblaci�n son los instrumentos de Dios para castigar a Jud� mancebos � de codiciar�iron�a fuerte; refiri�ndose al v. 12, estos �j�venes deseables�, de los cuales ella se enamor� por su presencia y vigor varonil, ser�n por esto mismo m�s capaces de castigarte.

24. carros�o, �con armamentos�; as� traduce la Versi�n de los Setenta; �hachas� [Maurer]; o, uni�ndolo con �carretas� trad�zcase �carros armados con guada�as�. [Grocio.] ruedas�la altura no com�n de �stas aumentaba su apariencia formidable (cap. 1:16-20). por sus leyes te juzgar�n�daban castigos b�rbaramente severos (Jeremias 52:9; Jeremias 29:22).

25. quitarte han tu nariz y tus orejas�as� castigaban a las ad�lteras entre los egipcios y caldeos. Las beldades orientales llevaban ornamentos en las orejas y nariz. �Qu� justa la retribuci�n que los rasgos m�s ornamentados fuesen as� mutilados! As� tambi�n ser� a Jud�, la ad�ltera espiritual.

26. te desnudar�n de tus vestidos�as� ella atra�a a sus amantes (cap. 16:39).

27. har� cesar de ti � tu fornicaci�n�El cautiverio ha hecho que los jud�os, siempre despu�s, aborreciesen la idolatr�a, no s�lo a su regreso de Babilonia, sino durante los �ltimos diez y ocho siglos de su dispersi�n, como hab�a sido predicho ( Oseas 3:4).

28. (Vv. 17, 18; cap. 16:37).

29. tomar�n todo lo que t� trabajaste�los frutos de su trabajo. te dejar�n desnuda�como se trataba a las cautivas.

31. su c�liz�de castigo (Salmo 11:6; Salmo 75:8; Jeremias 25:15, etc.). Tu culpa y la de Israel siendo iguales, vuestro castigo ser� igual.

34. quebrar�s sus tiestos�tan vorazmente chupar�s cada gota, como uno que bebe locamente (el efecto invariablemente atribu�do al acto de beber la copa de la ira de Dios, Jeremias 51:7; Habacuc 2:16) que romper�s los mismos pedazos de ella, es decir, no quedar� mal que t� no gustes. tus pechos arrancar�s�enfurecida contra ellos como ministros de tu adulterio.

35. te has olvidado de m��(Jeremias 2:32; Jeremias 13:25). me has echado tras tus espaldas�( 1 Reyes 14:9; Nehem�as 9:26). lleva tu � t� suciedad�una consecuencia penal de tu conducta ( Proverbios 1:31).

38-44. Un resumen de los pecados de las dos hermanas, pero especialmente los de Jud�.

36. �no juzgar�s t�?�(Nota, cap. 20:4).

38. en aquel d�a�en el mismo d�a que ellos quemaron a sus hijos a Moloc, en el valle de Gehenna, descarada e hip�critamente se presentaron como adoradores en el templo de Jehov� (Jeremias 7:9)

40. hab�a sido enviado mensajero�es decir, por Jud� (v. 16; Isa�as 57:9) alcoholaste tus ojos�( 2 Reyes 9:30, Jeremias 4:30). Pintura negra era untada en los p�rpados de las beldades para hacer m�s llamativo el blanco del ojo por el contraste; as� Jud� no dej� sin probar ning�n arte seductivo.

41. estrado�div�n. Mientras que los hombres se recostaban a la mesa, las mujeres se sentaban, puesto que para ellas era indelicado el recostarse ( Am�s 6:4). [Grocio]. mesa�es decir, el altar idol�trico. mi perfume y mi �leo�que yo te hab�a dado, que deber�as haberme ofrecido a m� (cap. 16:18, 19; Oseas 2:8; v�ase Proverbios 7:17).

42. Sabeos�No contentas con los asirios nobles y gallardos, las hermanas se atrajeron las r�sticas bandas de sabeos salteadores ( Job 1:15). sobre sus manos�sobre las manos de las hermanas, es decir, atrajeron a Samaria y Jud� a adorar los dioses de ellas.

43. cumplir�n ellos�en algunas versiones est� en forma de pregunta: �es posible que los amantes contin�en cometiendo fornicaciones con una ad�ltera tan gastada?

45. hombres justos�los caldeos; los ejecutadores de la venganza justa de Dios (cap. 16:38), no que fuesen ellos �justos� en s� ( Habacuc 1:3, Habacuc 1:12).

46. compa��as�propiamente, un consejo de jueces que imponen sentencia al criminal [Grocio.] El �traslado� y �despojos� por el ej�rcito caldeo es la ejecuci�n de la sentencia judicial de Dios.

47. con piedras�la penalidad judicial de la ad�ltera (cap. 16:41; Juan 8:5). Corresponden a las piedras arrojadas por los babilonios con sus aparatos de guerra en el asedio de Jerusal�n. casas � con fuego�cumplido ( 2 Cr�nicas 36:17, 2 Cr�nicas 36:19).

48. (v. 27). escarmentar�n � y no har�n, etc.�( Deuteronomio 13:11).

49. llevar�is los pecados de vuestros �dolos�el castigo de vuestra idolatr�a. sabr�is que yo soy el Se�or Jehov��sabr�is a expensas vuestras � mediante amargos sufrimientos.