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Isaías 5

Comentario Crítico y Explicativo sobre Toda la Biblia - Sin abreviarComentario Crítico Sin Abreviar

Versículos 1-30

CAPITULO 5

Vers. 1-30. PARABOLA DE LA VI�A DE JEHOVA. Una nueva profec�a completa en s� misma. Es probable que fuese pronunciada casi al mismo tiempo que los caps. 2 y 3, durante el reinado de Uzz�as. Cf. vv. 15 y 16 con el 3:14. Sin embargo, al fin del cap�tulo, se alude generalmente a la todav�a lejana invasi�n de los asirios en un reinado posterior (cf. el v. 26 con el cap. 7:18; y el v. 25 con el cap. 9:12). Al acercarse el momento, de acuerdo con el uso prof�tico ordinario trata m�s particularmente de los detalles (caps. 7 y 8); a saber, las calamidades resultantes de la invasi�n siro israelita, y la subsiguiente de los asirios a quienes Acaz hab�a llamado en su auxilio.
1. por-m�s bien, tocante a [Gesenius], es decir, en nombre de mi amado, como su representante [Vitringa]. Isa�as insin�a la distinci�n de las Personas divinas a la vez que su unidad (cf. El con Yo, vv. 2, 3). de mi amado-inspirado por �l. O m�s bien, un dulce canto [Castalio]. Debido a una ligera variaci�n en la lecci�n. un canto de su amor [Houbigant]. �El Amado� es Jehov�, la segunda Persona, el �Angel de Dios el Padre, no en su car�cter como encarnado Mes�as, sino como Dios de los Jud�os (Exo 23:20-21; Exo 32:34; Exo 33:14). vi�a-cap. 3:14; Psa 80:8, etc.) El pueblo jud�o del pacto, separado de las naciones para su gloria, como el objeto de su peculiar cuidado (Mat 20:1; Mat 21:23). Jesucristo en la vi�a de la Iglesia del Nuevo Testamento es el mismo que el Angel del Pacto jud�o del Antiguo Testamento. recuesto, lugar f�rtil-liter. un cuerno (pico, como el shreckhorn suizo) del hijo del aceite; expresi�n po�tica, que significa muy fruct�fero, sugestiva de aislamiento, seguridad y soleado aspecto. Isa�as alude claramente a los Cantares de Salom�n (Son 6:3; Son 8:11-12) con las palabras �Su vi�a� y mi �Amado� (cf. cap. 26:20; 61:10, con Son 1:4; Son 4:10). La transici�n de �V�stago� (cap. 3:2) a �vi�a�, no es antinatural.
2. cercado-m�s bien, abri� hoyos en el suelo para plantar las vides [Maurer]. vides escogidas-en hebreo sorek; llamadas todav�a en Marruecos serki; las uvas ten�an una semilla casi imperceptible: en persa kishmish o bedana, esto es, sin semilla (Gen 49:11) torre-para vigilar sobre la vi�a contra las depredaciones de hombres y animales, y para uso del due�o (Mat 21:33). un lagar-excavado en el rocoso subsuelo de la vi�a por razones de frescura. uvas silvestres-el hebreo expresa perjudicial putrefacci�n, que corresponde al corrupto estado de los jud�os. Fruto f�tido de la vid silvestre [Maurer], en lugar de uvas escogidas. La venenosa capucha de fraile, o ac�nito [Gesenius]. Los �rabes llaman al fruto de la dulcamara uvas de lobo (Deu 32:32-33; 2Ki 4:39-41). Jer�nimo trata de explicar los detalles de la par�bola: La �cerca� son los �ngeles; las �piedras� eliminadas, los �dolos; la �torre�, el templo �en medio� de Judea; el �lagar�, el altar.
3. Ahora pues-Dios apela a ellos mismos como en el cap. 1:18; Mic 6:3. Esto mismo hace Jesucristo en Mat 21:40-41, cuando usa la misma forma de expresi�n y los obliga a pronunciar sentencia contra ellos mismos. Dios condena a los pecadores por su propia boca (Deu 32:6; Job 15:6; Luk 19:22; Rom 3:4).
4. Dios hizo todo lo que pod�a hacerse para la salvaci�n de los pecadores, en conformidad con su justicia y bondad. El Dios de la naturaleza se siente, por decirlo as�, sorprendido ante el fruto antinatural de una vi�a tan esmeradamente cuidada.
5. Os mostrar�-prestadme atenci�n. su vallado � su cerca-pues ten�a ambos; prueba del cuidado del due�o. Pero ahora ser� hollada por las bestias del campo (sus enemigos) (Psa 80:12-13).
6. mandar�-La par�bola se interrumpe en parte, y como en el vers. 7, se insin�a que Jehov� es el Due�o; pues s�lo �l, no un vi�ador cualquiera, pod�a dar semejante mandato (Mat 21:43; Luk 17:22). que no derramen lluvia simb�licamente, las ense�anzas de origen celestial proclamadas por los profetas (Amo 8:11). Esta profec�a no se cumpli� durante la cautividad de Babilonia, ya que Jerem�as, Ezequiel, Daniel, Hageo y Zacar�as profetizaron durante el cautiverio o despu�s de �l, sino en el tiempo del Evangelio.
7. Aqu� Isa�as no hace sino aplicar la par�bola. No se trata de un due�o meramente humano, ni de una vi�a literal. Ciertamente, la vi�a de Jehov�-Su �nica (Exo 19:5; Amo 3:2). deleitosa-�la planta de sus deleites�; pues as� como el vinador se tom� el trabajo de seleccionar el sorek, o vides escogidas (v. 2), otro tanto hizo Dios en la elecci�n de los jud�os. juicio-justicia. El juego de palabras es sorprendente en el hebreo. �El esperaba mishpat (juicio), mas he aqu� mispat (efusi�n de sangre); esperaba tsedaqua, (justicia) mas he aqu� tseaqua (el clamor que sigue a la anarqu�a, la codicia y la disipaci�n, vv. 8, 11, 12; comp�rese el grito de la chusma debido al cual la justicia fu� hollada en el caso de Jesucristo, Mat 27:23-24).

Vv. 8-23-SEIS AYES DISTINTOS CONTRA LOS CRIMENES.
8. (Lev 25:13; Mic 2:2). La recuperaci�n de las posesiones en el jubileo estaba destinada a servir de freno contra la avaricia. hasta acabar el t�rmino-hasta que no haya lugar para otro. �Habitar�is vosotros solos � la tierra?-el territorio.
9. a mis o�dos � Jehov�-me ha revelado, como en el cap. 22:14. asoladas-liter., hechas una desolaci�n, a saber, a causa de los pecados nacionales. grandes y hermosas-casas.
10. huebras-o yugadas; lo que una yunta de bueyes pod�a arar en un d�a. un zaque-de vino; treinta y tres y medio litros. modios-doscientos ochenta y dos litros de semilla dar�an veinte y ocho litros (Eze 45:11).
11. Segundo ay, contra la destemplanza. se levantan de ma�ana-cuando se consideraba vergonzoso el beber (Act 2:15; 1Th 5:7). Los banquetes orgi�sticos comenzaban m�s temprano que de costumbre (Ecclesiast�s 10:16, 17). que se est�n hasta la noche-est�n bebiendo todo el d�a hasta la noche.
12. La m�sica era com�n en los festines de los antiguos (cap. 24:8, 9; Amo 6:5-6) vihuelas-instrumento de doce cuerdas [Josefo, Antig�edades,Amo 8:10]. tamboriles-En hebreo, toph, el uso de los cuales ahogaba los gritos de los ni�os sacrificados a Moloch, de donde se deriva el nombre de Topheth, o sea el lugar donde se ofrec�an estos sacrificios. En �rabe duf, tambor de forma de caldero. (Es el adufe espa�ol.-Nota del traductor). flautas-o caramillos, de la ra�z hebrea, taladrar, o en otro sentido danzar (cf. Job 21:11-15), no miran � Jehov�-efecto frecuente de pasarlo en fiestas ( Job 1:5; Psa 28:5). la obra-de castigar al culpable (v. 19; cap. 10:12).
13. fu� llevado-El profeta ve lo futuro como si lo tuviera ante los ojos. porque no tuvo ciencia-a causa de su necia temeridad (v. 12; cap. 1:3; Hos 4:6; Luk 19:44). pereci� de hambre-horrible contraste con sus sibar�ticas fiestas (vv. 11, 12). multitud-de plebeyos, en contraste con los �hombres honorables� o nobles. sed-(Psa 107:4-5). En contraste con su beber (v. 11). En su deportaci�n y destierro tendr�n hambre y sed.
14. sepulcro-en hebreo sheol o cheol; en griego, hades; el mundo invisible de los esp�ritus. No es �ste el lugar de los tormentos. Po�ticamente, se representa como ensanch�ndose ilimitadamente, a fin de recibir a las innumerables huestes de jud�os que perecer�an (Num 16:30). su multitud-del pueblo jud�o. y el que en �l se holgaba-el bebedor libertino de Jerusal�n.
15. (Cf. cap. 2:9, 11, 17). Todas las clases sociales, el ��nfimo� y el �poderoso� igualmente; y as� �el honorable� y la �multitud� (v. 13).
16. Dios ser� �exaltado� en la opini�n del hombre, a causa de la manifestaci�n de su �justicia� al castigar al culpable. santificado-considerado como santo, en raz�n de sus justos procederes.
17. seg�n su costumbre-liter., de acuerdo con su propia palabra, esto es, a voluntad. En otras palabras, como en sus propios pastos [Gesenius]. Este es el significado del hebreo en Mic 2:12. Las tierras de los recabitas que habitan en tiendas de campa�a (Jer 35:7). Los pastores �rabes vagar�n por la vecindad libremente por haber quedado toda Judea tan desolada que se convertir� en un vasto campo de pastoreo. y extra�os comer�n-las desiertas tierras de los ricos (Psa 22:29), quienes entonces habr�n ido en cautividad; los extra�os, esto es, las tribus n�madas har�n pacer sus reba�os en ellas [Maurer]. En sentido figurado, los �corderos� son los p�os; las �gruesas�, los imp�os. Por esta raz�n, a los disc�pulos de Jesucristo se les llama �corderos� (Joh 21:15); por ser mansos, inofensivos, pobres y perseguidos. Cf. Eze 39:18, donde los �gordos� son los ricos y grandes (1Co 1:26-27). Los extra�os son, desde este punto de vista �las otras ovejas� que no son del �aprisco� jud�o (Joh 10:16); esto es, los gentiles, a quienes traer� Jesucristo para que sean part�cipes de los ricos privilegios (Rom 11:17) que los jud�os (las �gordas�, Eze 34:16) menospreciaron. De esta forma, �seg�n su costumbre� expresar�a que la iglesia cristiana adorar�a a Dios en libertad, desligada de la esclavitud legal (Joh 4:23; Gal 5:1).
18. (Tercer) Ay-contra la obstinada perseverancia en el pecado, cual si quisieran provocar los divinos juicios. iniquidad-la culpa que atrae castigo [Maurer]. cuerdas � coyundas de carreta-Los rabinos dicen: �Una mala inclinaci�n es al principio semejante a un delgado cabello, mas al final sem�jase a una coyunda de carreta�. La ant�tesis se refiere a las delgadas cuerdas de la sofister�a, parecidas a la telara�a (cap. 59:5; Job 8:14), con las cuales un pecado arrastra a otro pecado, hasta que, finalmente el hombre se ata a s� mismo mediante un gran delito, a manera de coyunda de carreta, con la cual se mantienen persistentemente en el pecado. de vanidad-de maldad. y el pecado-Se acercan al �pecado� y a su castigo temerariamente.
19. su obra-de venganza (v. 12). Este lenguaje es un desaf�o hecho a Dios. As� se jact� Lamech de su impunidad (Gen 4:23-24; cf. con Jer 17:15; 2Pe 3:3-4). consejo-el prop�sito de Dios de castigarlos es amenazado.
20. Cuarto ay contra los que no hacen las debidas distinciones entre lo justo y lo injusto (Rom 1:28), �mente depravada�, griego inepta para discernir: la percepci�n moral entenebrecida. lo amargo � dulce-el pecado es amargo (Jer 2:19; Jer 4:18; Act 8:23; Rom 3:14; Heb 12:15); aun cuando parezca dulce por un tiempo (Pro 9:17-18). La religi�n es dulce (Psa 119:103).
21. Quinto ay contra los que eran tan �sabios a sus ojos� que pensaban que sab�an m�s que el profeta, y as� desechaban sus amonestaciones (cap. 29:14, 15).
22, 23. Sexto ay contra los jueces corruptos, quienes eran �valientes para beber vino� (jactancia no poco com�n todav�a), aunque no lo fuesen para defender a su pa�s, bien que lo eran para obtener los medios para regalarse a s� mismos, aceptando el cohecho o �soborno�. Los dos vers�culos est�n intimamente unidos [Maurer]. mezclar bebida-no con agua, sino con especias para hacerlas embriagantes (Pro 9:2, Pro 9:5; Son 8:2). quitan su justicia-desechan los justos reclamos de aquellos que tienen la raz�n de su parte.
24. Liter., la lengua de fuego come (Act 2:3). la llama devora la paja-m�s bien, la hierba marchita sucumbe delante de la llama (Mat 3:12). su ra�z � su flor-tanto su oculta base como sus manifestaciones externas de prosperidad, se pudren enteramente, pereciendo una y otra ( Job 18:16; Mal 4:1). desecharon la ley de Jehov�-en su esp�ritu, en tanto que reten�an la letra.
25. se encendi� el furor-(2Ki 22:13, 2Ki 22:17). se estremecieron los montes-esto fija con alguna probabilidad la fecha de este cap�tulo, pues se refiere al terremoto de los d�as de Uzz�as (Amo 1:1; Zec 14:5). La tierra tembl� cual si tuviera conciencia de la presencia de Dios (Jer 4:24; Hab 3:6). arrojados-m�s bien, como esti�rcol (Psa 83:10). Con todo esto-La conminaci�n de estos versos de monoton�a endechosa, se repite en los cap�tulos 9:12, 17, 21; 10:4. Pese a todas las pasadas calamidades, todav�a amenazan m�s fuertes juicios, que el profeta especifica en el resto del cap�tulo (Lev 26:14, etc.)
26. Y alzar� pend�n-para llamar a las naciones hostiles a ejecutar sus juicios sobre Judea (cap. 10:5-7; 45:1). En los caps. 11:12 y 18:3, la bandera es levantada pero a fin de mostrar piedad hacia el pueblo. silbar�-(Cap. 7:18). A las abejas se las hac�a salir de la colmena al son de la flauta, o siseando o silbando (Zec 10:8). Dios reunir� las naciones de los contornos de Judea del mismo modo que a las abejas (Deu 1:44; Psa 118:12). el cabo de la tierra-a las sometidas y distantes razas de que se compon�a el ej�rcito asirio (cap. 22:6). El cumplimiento ulterior ocurri� durante el sitio del romano Tito Vespasiano. Cf. �el cabo de la tierra� (Deu 28:49). El empleo del singular (�vendr�) aqu� y en los vv. siguientes especifica a alguna naci�n o persona particular [Horsley].
27. cansado-por las largas marchas (Deu 25:18, etc.). ninguno se dormir�-no necesitar� descansar. el cinto-con que se ce��an antiguamente la suelta vestidura para poder actuar. Estaban siempre listos para marchar y entrar en batalla. ni se le romper� la correa-la suela estaba adherida a los pies mediante correas. Estar�an tan s�lidamente calzados que no se les soltaba ninguna correa de las sandalias, de forma que les impidiera la marcha.
28. entesados-listos para la batalla. u�as � pedernal-Los antiguos no herraban los caballos, de ah� el valor de los cascos duros para las grandes marchas. ruedas-de sus carros. El ej�rcito asirio ten�a numerosa caballer�a y muchos carros (cap. 22:6, 7; 36:8).
29. su bramido-su grito de guerra.
30. tribulaci�n � se oscurecer� la luz-en otras palabras, angustia y luz (es decir, esperanza y temor), sucedi�ndose estas cosas alternativamente (como suele suceder en un desordenado estado de cosas), y las tinieblas surgir�n [Maurer]. sus cielos-el t�rmino cielos significa literalmente nubes, es decir, que su cielo lo constituyen �las nubes�, m�s bien que el firmamento. Desde otro punto de vista, y tomando una ra�z hebrea diferente, significa su destrucci�n o ruina. Horsley explica la frase en esta forma: �la mar � mirar� hacia la tierra�, como una nueva imagen tomada de los marinos de un barco de cabotaje (como lo eran todos en la antig�edad) de buscar la costa m�s cercana, la cual sol�a ocultar la oscuridad de la tempestad; de manera que �nicamente las tinieblas y la angustia puede decirse que eran visibles.

Información bibliográfica
Jamieson, Robert, D.D.; Fausset, A. R.; Brown, David. "Comentario sobre Isaiah 5". "Comentario Crítico y Explicativo sobre Toda la Biblia - Sin abreviar". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/jfu/isaiah-5.html. 1871-8.