LA UNIVERSALIDAD DE LA CORRUPCION; EL REMANENTE ESCOGIDO, APARTADO DE TODA CONFIANZA HUMANA, SE VUELVE A DIOS: TRIUNFA POR LA FE SOBRE SUS ENEMIGOS: ES CONSOLADO POR LAS PROMESAS DE DIOS EN CONTESTACION A SU ORACION, Y POR LA CONFUSION DE SUS ENEMIGOS, Y PRORRUMPE EN ALABANZAS DEL CARACTER DE DIOS. 1. he venido a ser como �-A m� me pasa como a quien busca frutas despu�s de la cosecha, o uvas despu�s de la vendimia. �Que no queda racimo para comer;� no hay �primeros, frutos� (la breva, nota, Isa 28:4), �que mi alma desea.� (Maurer.) De modo que busco en vano que queden hombres buenos (v. 2). 2. (Psa 12:1.) el misericordioso-el hebreo expresa que es misericordioso y bueno en relaci�n al hombre, m�s bien que hacia Dios. 3. Para completar la maldad con sus [dos] manos-lit: �Sus manos son para maldad, para que la hagan bien� (eso es, h�bilmente y con buen �xito). el grande-lit.: �El hombre grande �l habla:� repetici�n enf�tica del sujeto. Cuanto al hombre grande, no bien expresa su deseo malo (lit., la malicia o codicia de su alma), que los jueces venales de acuerdo con su deseo se disponen a torcer la decisi�n del pleito. y lo confirman-�Y lo envuelven� (Versi�n Inglesa): �cord�n de tres dobleces no presto se rompe� (Ecclesiast�s 4:12): aqu� el �pr�ncipe,� el �juez,� y el �grande� est�n los tres en complicidad culpable. Lo envuelven, es decir: conspiran para llevar a cabo el deseo del grande con el sacrificio de la justicia. 4. El mejor � como el cambr�n-que pinchan y da�an a todos cuantos se ponen en contacto con ellos (2Sa 23:6-7; Isa 55:13; Eze 2:6). el d�a de tus atalayas-el d�a preanunciado por tus profetas (verdaderos), como el tiempo de �tu visitaci�n� con ira. (Grocio.) O bien, �el d�a cuando tus profetas falsos ser�n castigados;� los amonesta especialmente a ellos, no s�lo por estar ciegos ellos mismos, sino tambi�n por haber guiado a ciegas a otros (Calvino.) ahora-al tiempo predicho, �en aquel tiempo;� el profeta transp�rtase all�. su confusi�n-(Isa 22:5.) No sabr�n a d�nde dirigirse. 5. No cre�is en amigo-En ninguna parte se guarda fe: todos son traicioneros a uno (Jer 9:2-6). Cuando la justicia es pervertida por el grande, en ninguna parte est� segura la fe (la lealtad). As� que, en tiempos de persecuci�n por el evangelio, �los enemigos de uno son los de su propia casa� (Mat 10:35-36; Luk 12:53). ni confi�is en pr�ncipe-un consejero (Calvino) puede ayudar y aconsejar (v�ase Psa 118:8-9; Psa 146:3). La cabeza de tu familia, a quien todos los miembros de la familia naturalmente acudir�an en las emergencias. En manera similar se traduce el hebreo en Jos 22:14, y por �amigos �ntimos� en Pro 16:28. (Grocio.) la que duerme a tu lado-tu mujer (Deu 13:6). 6. hijo deshonra al padre-se describe aqu� el estado de anarqu�a antinatural en todas las relaciones de la vida, la cual va a caracterizar los �ltimos tiempos, antes que venga el Mes�as para castigar a los imp�os y salvar a Israel (v�ase Luk 21:16; 2Ti 3:1-3). 7. Yo empero a Jehov� esperar�-como si no hubiese otro alguno ante mis ojos. No debemos s�lo �poner los ojos en el Se�or,� sino tambi�n �aguardarlo.� No teniendo esperanza de parte de hombre (vv. 5, 6), Miqueas habla en el nombre de Israel: llevado por el castigo (v. 4) a sentir su pecado (v. 9), Israel aqu� se arroja sobre el Se�or como su �nica esperanza, en paciente espera (Lam 3:26). Lo hizo Israel bajo la cautividad babil�nica; y lo har� otra vez en el futuro, cuando el Esp�ritu de gracia sea derramado sobre �l (Zec 12:10-13). 8. no te huelgues-de mi ca�da. aunque [cuando] more en tinieblas, Jehov� ser� mi luz-Israel razona as� como razon� su representante, el Mes�as, por la fe, en su hora de tinieblas y diserci�n (Isa 50:7-8, Isa 50:10). Israel se dirige a Babilonia, su enemigo triunfante (o Edom) �enemiga m�a�), en el femenino; el tipo de sus �ltimos y peores enemigos (Psa 137:7-8). aunque ca� [cuando caiga], he de levantarme-(Psa 37:24; Pro 24:16). 9. La ira de Jehov�-su castigo que me da (Lam 3:39). El verdadero penitente �acepta el castigo de su iniquidad� (Lev 26:41, Lev 26:43); los que murmuran contra Dios a�n no conocen su culpabilidad ( Job 40:4-5). soportar�-con paciencia. hasta que juzgue mi causa-en contra de mi enemigo. El pueblo de Dios confiesa su culpa ante �l; pero, con respecto a sus enemigos humanos, son inocentes e inmerecedores de sus perjuicios. �l me sacar� a luz-a la redenci�n temporal y espiritual. ver� su justicia-Su bondadosa fidelidad a sus promesas (Psa 103:17). 10. la cubrir� verg�enza-al ver cu�n completamente equivocada estaba ella al suponer que yo estaba totalmente arruinado. �D�nde est� tu Dios?-(Psa 42:3, Psa 42:10.) Si �l es �tu Dios,� como t� dices, venga �l ahora y te libre. Como dijeron tambi�n al representante de Israel, el Mes�as (Mat 27:43). Mis ojos la ver�n-justa retribuci�n en la misma especie sobre el enemigo (enemiga) que hab�a dicho: �Mire nuestro ojo a Si�n.� Si�n mirar� a su enemiga postrada, no con el gozo carnal de la venganza, sino con el gozo espiritual, al vindicar Dios su propia justicia (Isa 66:24; Rev 16:5-7). ser� hollada-ella misma, la que me hab�a hollado a m�. 11. se edificar�n tus muros-bajo Ciro, despu�s de los setenta a�os de la cautividad; y otra vez en el futuro, cuando los jud�os ser�n restaurados (Amo 9:11; Zec 12:6). ser� alejado el mandamiento-a saber, tu decreto o tu reinado tir�nico de Babilonia, ser� apartado de ti, �los estatutos que no eran buenos� (Eze 20:25). (Calvino.) (Psa 102:13-16; Isa 9:4.) El hebreo est� en contra de la traducci�n de Maurer, �el l�mite de la ciudad ser� largamente extendido,� para que quepan las gentes de todas las naciones que se congreguen en ella (v. 12; Isa 49:20; Isa 54:2). 12. En ese d�a-Una respuesta a la pregunta supuesta: �Cu�ndo ser�n edificados mis muros? �Ese d�a (cuando edifiquen tus muros) es el d�a cuando vendr�n a ti (muchos) desde Asiria �� (Ludovico de Dios.) Vendr�n los asirios (inclusive Babilonia), los que te despojaron. y las ciudades fuertes-L�ase: �Egipto.� Para encuadrarse al paralelismo, l�ase: �desde Asiria hasta Egipto.� (Matzor puede ser traducido as�.) (As� Asiria y Egipto se contrastan en Isa 19:23. (Maurer.) Calvino concuerda con la Versi�n Inglesa: ��l vendr� desde Asiria y las ciudades fuertes.� desde las � fuertes hasta el R�o-�de Egipto hasta el r�o� Eufrates (corresponde en el paralelismo a �Asiria�). (Maurer.) V�ase Isa 11:15-16; Isa 19:23-25; Isa 27:13; Hos 11:11; Zec 10:10. 13. Por gloriosa que sea la perspectiva de la restauraci�n, los jud�os no han de olvidar la visitaci�n sobre su �tierra� que han de tener a causa del �fruto (el mal resultante) de sus obras� (v�ase Pro 1:31; Isa 3:10-11; Jer 21:14). 14. Apacienta tu pueblo-Oraci�n del profeta a Dios, en nombre de su pueblo, por cuanto Dios contesta la oraci�n de fe, es prof�tica de lo que Dios har�a. Cuando Dios est� por libertar a su pueblo, incita a los amigos de su pueblo a orar por �l. apacienta-incluye tanto la idea del gobierno pastoral como de cuidado por ellos (v�ase 5:4), considerados como un reba�o (Psa 80:1; Psa 100:3). Nuestra calamidad debe ser fatal para la naci�n, a menos que t�, acord�ndote del pacto con �tu heredad� por tu inmerecida gracia, (Deu 4:20; Deu 7:6; Deu 32:9), nos restaures. con tu cayado-la vara del pastor, con la cual dirige el reba�o (Psa 23:4). No m�s ya la vara del castigo (Psa 6:9). que mora solo en la monta�a, en � Carmelo-permite que tu pueblo, que mora como si fuera en la soledad de los bosques (en el mundo, mas no del mundo), esparcido entre las varias naciones, habite en el Carmelo, eso es, donde haya tierras de frutales y vi�as. (Calvino.) M�s bien: �Pueblo � que est� por morar (eso es, para que more) separado en el bosque, en � Carmelo� (Maurer), que ya no ha de estar mezclado con los paganos, sino que ha de morar como pueblo distinto en su propia tierra. Miqueas aqu� en vista la profec�a de Balaam (v�ase 6:5, donde tambi�n se refiere a Balaam). �He aqu� el pueblo habitar� solo� (Num 23:9; v�ase Deu 33:28). �Apacentar � en la monta�a en � Carmelo,� es apacentar en los ricos pastos de los bosques del Carmelo. �Dormir en los bosques� (Eze 34:25), es la figura de la m�s perfecta seguridad. As� que la seguridad de los jud�os tanto como su distinta nacionalidad, est�n aqu� predichas. Tambi�n en Jer 49:31. pazcan en Bas�n-famoso por su ganado (Psa 22:12; Amo 4:1). Jer 50:19 es paralelo a este pasaje. Bas�n y Galaad, al este del Jord�n, fueron escogidas por Rub�n, Gad, y la media tribu de Manas�s, por ser abundantes en pastos adaptados para sus muchos ganados (N�meros 32; Deu 3:12-17). 15. les � saliste (tu)-ambos pronombres se refieren a Israel. Igualmente en el v. 19 la persona se cambia de la primera a la tercera: �nosotros,� �nuestras,� �sus pecados� (seg�n la Versi�n Inglesa). Jehov� aqu� constesta la oraci�n de Miqueas del v. 14, asegur�ndole que, como hab�a librado a su pueblo de Egipto por poder milagroso, as� otra vez en favor de ellos lo dejar�a ver. (Jer 16:14-15). 16. se avergonzar�n de todas sus valent�as-de su poder�o, que tan s�bitamente result� ineficaz: ese poder con el cual hab�an pensado que no hab�a nada que no pudiesen hacer contra el pueblo de Dios. pondr�n la mano sobre su boca-el gesto de silencio ( Job 21:5; Job 40:4; Psa 107:42; Isa 52:15). Se enmudecer�n ante la maravillosa liberaci�n de Israel, y ya no se jactar�n de que el pueblo de Dios est� destru�do. ensordecer�n sus o�dos-quedar�n tan aturdidos que no oir�n lo que se les diga. (Grocio.) Hubo tiempo cuando ansiosamente escuchaban todos los rumores, como si fuesen otros tantos avisos de victorias; pero ahora tendr�n miedo de escucharlos, porque de continuo temen nuevos desastres, cuando vean que el Dios de Israel es tan poderoso. (Calvino.) Se tapar�n los o�dos, como para no tener que o�r de los �xitos de Israel. 17. Lamer�n el polvo-en abyecta postraci�n como suplicantes (Isa 72:9; v�ase Isa 49:23; Isa 65:25). como las serpientes de la tierra-Como reptiles desde sus cuevas, ellos saldr�n de sus escondrijos o fortalezas (Psa 18:45), para entregarse a los conquistadores. M�s lit., �temblar�n desde.� es decir, saldr�n temblando de sus refugios. como las serpientes-(Deu 32:24.) despavorirse han de Jehov�-o bien, en su temor se volver�n apresuradamente a Jehov�. De este modo se patentiza la ant�tesis: Ellos temblar�n saliendo de sus cuevas: en azoramiento se volver�n a Jehov�, por la salvaci�n (v�ase Nota. Hos 3:5, y Jer 33:9). temer�n de ti-de ti, Jehov� (y tambi�n a Israel, por estar �l bajo tu protecci�n). Hay aqui un cambio: de hablar de Dios, para hablar a Dios. (Maurer.) O m�s bien: �Temer�n de ti, Israel.� (Henderson.) 18. Agradecido por tan inesperada gracia prometida a Israel, Miqueas prorrumpe en alabanzas a Jehov�. olvidas el pecado-no en connivencia con �l, sino perdon�ndolo; dej�ndolo sin castigar, como el viajero que pasa por alto aquello que opta por no escudri�ar (Pro 19:11). Contr�stese Amo 7:8, �mirares a los pecados,� Psa 130:3. del resto-el remanente, el cual le ser� permitido sobrevivir al juicio previo: el electo residuo de gracia (Psa 4:7; Psa 5:3, Psa 5:7-8). no retuvo � su enojo-(Psa 103:9.) amador de misericordia-el perd�n de Dios est� basado en su naturaleza, la cual se deleita en favores y misericordia, y es adverso a la ira. 19. El tornar�-a nosotros, por haberse alejado de nosotros. sujetar� nuestras iniquidades-lit., las hollar� bajo los pies, por sernos hostiles y mortales. Sin la subyugaci�n de nuestras malas propensiones, ni el perd�n nos podr�a dar paz. Cuando Dios nos quita la culpa del pecado, de modo que ya no nos condene, tambi�n quita el poder del pecado, para que no se ense�oree de nosotros. echar� en los profundos de la mar-para nunca m�s surgir a la vista, sepultados de la vista en el eterno olvido: no simplemente a la ribera, de donde puedan levantarse de nuevo. nuestras iniquidades � sus (Versi�n Inglesa) pecados-cambio de personas. Miqueas en el primer caso se identifica con su pueblo y sus pecados. 20. Otorgar�s � la verdad-cumplir�s la promesa fiel. A Jacob � a Abraham-La promesa hecha a los patriarcas, t� la cumplir�s a la posteridad de ellos. Las promesas de Dios se llaman �misericordia,� porque fluyen lentamente de la gracia; y �verdad,� porque infaliblemente se verificar�n (Luk 1:72-73; 1Th 5:24). juraste a nuestros padres-Psa 105:9-10.) La promesa a Abrah�n est� en Gen 12:2 a Isaac, en Gen 26:24; a Jacob, Gen 28:13. Esta inmutable promesa indica el convenio de que la simiente de los patriarcas nunca deber� perecer, y que debe ser restaurada a su heredad tantas veces cuantas se tornen a Dios de todo coraz�n (Deu 30:1-2).
Información bibliográfica Jamieson, Robert, D.D.; Fausset, A. R.; Brown, David. "Comentario sobre Micah 7". "Comentario Crítico y Explicativo sobre Toda la Biblia - Sin abreviar". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/jfu/micah-7.html. 1871-8.
Versículos 1-20
CAPITULO 7LA UNIVERSALIDAD DE LA CORRUPCION; EL REMANENTE ESCOGIDO, APARTADO DE TODA CONFIANZA HUMANA, SE VUELVE A DIOS: TRIUNFA POR LA FE SOBRE SUS ENEMIGOS: ES CONSOLADO POR LAS PROMESAS DE DIOS EN CONTESTACION A SU ORACION, Y POR LA CONFUSION DE SUS ENEMIGOS, Y PRORRUMPE EN ALABANZAS DEL CARACTER DE DIOS.
1. he venido a ser como �-A m� me pasa como a quien busca frutas despu�s de la cosecha, o uvas despu�s de la vendimia. �Que no queda racimo para comer;� no hay �primeros, frutos� (la breva, nota, Isa 28:4), �que mi alma desea.� (Maurer.) De modo que busco en vano que queden hombres buenos (v. 2).
2. (Psa 12:1.) el misericordioso-el hebreo expresa que es misericordioso y bueno en relaci�n al hombre, m�s bien que hacia Dios.
3. Para completar la maldad con sus [dos] manos-lit: �Sus manos son para maldad, para que la hagan bien� (eso es, h�bilmente y con buen �xito). el grande-lit.: �El hombre grande �l habla:� repetici�n enf�tica del sujeto. Cuanto al hombre grande, no bien expresa su deseo malo (lit., la malicia o codicia de su alma), que los jueces venales de acuerdo con su deseo se disponen a torcer la decisi�n del pleito. y lo confirman-�Y lo envuelven� (Versi�n Inglesa): �cord�n de tres dobleces no presto se rompe� (Ecclesiast�s 4:12): aqu� el �pr�ncipe,� el �juez,� y el �grande� est�n los tres en complicidad culpable. Lo envuelven, es decir: conspiran para llevar a cabo el deseo del grande con el sacrificio de la justicia.
4. El mejor � como el cambr�n-que pinchan y da�an a todos cuantos se ponen en contacto con ellos (2Sa 23:6-7; Isa 55:13; Eze 2:6). el d�a de tus atalayas-el d�a preanunciado por tus profetas (verdaderos), como el tiempo de �tu visitaci�n� con ira. (Grocio.) O bien, �el d�a cuando tus profetas falsos ser�n castigados;� los amonesta especialmente a ellos, no s�lo por estar ciegos ellos mismos, sino tambi�n por haber guiado a ciegas a otros (Calvino.) ahora-al tiempo predicho, �en aquel tiempo;� el profeta transp�rtase all�. su confusi�n-(Isa 22:5.) No sabr�n a d�nde dirigirse.
5. No cre�is en amigo-En ninguna parte se guarda fe: todos son traicioneros a uno (Jer 9:2-6). Cuando la justicia es pervertida por el grande, en ninguna parte est� segura la fe (la lealtad). As� que, en tiempos de persecuci�n por el evangelio, �los enemigos de uno son los de su propia casa� (Mat 10:35-36; Luk 12:53). ni confi�is en pr�ncipe-un consejero (Calvino) puede ayudar y aconsejar (v�ase Psa 118:8-9; Psa 146:3). La cabeza de tu familia, a quien todos los miembros de la familia naturalmente acudir�an en las emergencias. En manera similar se traduce el hebreo en Jos 22:14, y por �amigos �ntimos� en Pro 16:28. (Grocio.) la que duerme a tu lado-tu mujer (Deu 13:6).
6. hijo deshonra al padre-se describe aqu� el estado de anarqu�a antinatural en todas las relaciones de la vida, la cual va a caracterizar los �ltimos tiempos, antes que venga el Mes�as para castigar a los imp�os y salvar a Israel (v�ase Luk 21:16; 2Ti 3:1-3).
7. Yo empero a Jehov� esperar�-como si no hubiese otro alguno ante mis ojos. No debemos s�lo �poner los ojos en el Se�or,� sino tambi�n �aguardarlo.� No teniendo esperanza de parte de hombre (vv. 5, 6), Miqueas habla en el nombre de Israel: llevado por el castigo (v. 4) a sentir su pecado (v. 9), Israel aqu� se arroja sobre el Se�or como su �nica esperanza, en paciente espera (Lam 3:26). Lo hizo Israel bajo la cautividad babil�nica; y lo har� otra vez en el futuro, cuando el Esp�ritu de gracia sea derramado sobre �l (Zec 12:10-13).
8. no te huelgues-de mi ca�da. aunque [cuando] more en tinieblas, Jehov� ser� mi luz-Israel razona as� como razon� su representante, el Mes�as, por la fe, en su hora de tinieblas y diserci�n (Isa 50:7-8, Isa 50:10). Israel se dirige a Babilonia, su enemigo triunfante (o Edom) �enemiga m�a�), en el femenino; el tipo de sus �ltimos y peores enemigos (Psa 137:7-8). aunque ca� [cuando caiga], he de levantarme-(Psa 37:24; Pro 24:16).
9. La ira de Jehov�-su castigo que me da (Lam 3:39). El verdadero penitente �acepta el castigo de su iniquidad� (Lev 26:41, Lev 26:43); los que murmuran contra Dios a�n no conocen su culpabilidad ( Job 40:4-5). soportar�-con paciencia. hasta que juzgue mi causa-en contra de mi enemigo. El pueblo de Dios confiesa su culpa ante �l; pero, con respecto a sus enemigos humanos, son inocentes e inmerecedores de sus perjuicios. �l me sacar� a luz-a la redenci�n temporal y espiritual. ver� su justicia-Su bondadosa fidelidad a sus promesas (Psa 103:17).
10. la cubrir� verg�enza-al ver cu�n completamente equivocada estaba ella al suponer que yo estaba totalmente arruinado. �D�nde est� tu Dios?-(Psa 42:3, Psa 42:10.) Si �l es �tu Dios,� como t� dices, venga �l ahora y te libre. Como dijeron tambi�n al representante de Israel, el Mes�as (Mat 27:43). Mis ojos la ver�n-justa retribuci�n en la misma especie sobre el enemigo (enemiga) que hab�a dicho: �Mire nuestro ojo a Si�n.� Si�n mirar� a su enemiga postrada, no con el gozo carnal de la venganza, sino con el gozo espiritual, al vindicar Dios su propia justicia (Isa 66:24; Rev 16:5-7). ser� hollada-ella misma, la que me hab�a hollado a m�.
11. se edificar�n tus muros-bajo Ciro, despu�s de los setenta a�os de la cautividad; y otra vez en el futuro, cuando los jud�os ser�n restaurados (Amo 9:11; Zec 12:6). ser� alejado el mandamiento-a saber, tu decreto o tu reinado tir�nico de Babilonia, ser� apartado de ti, �los estatutos que no eran buenos� (Eze 20:25). (Calvino.) (Psa 102:13-16; Isa 9:4.) El hebreo est� en contra de la traducci�n de Maurer, �el l�mite de la ciudad ser� largamente extendido,� para que quepan las gentes de todas las naciones que se congreguen en ella (v. 12; Isa 49:20; Isa 54:2).
12. En ese d�a-Una respuesta a la pregunta supuesta: �Cu�ndo ser�n edificados mis muros? �Ese d�a (cuando edifiquen tus muros) es el d�a cuando vendr�n a ti (muchos) desde Asiria �� (Ludovico de Dios.) Vendr�n los asirios (inclusive Babilonia), los que te despojaron. y las ciudades fuertes-L�ase: �Egipto.� Para encuadrarse al paralelismo, l�ase: �desde Asiria hasta Egipto.� (Matzor puede ser traducido as�.) (As� Asiria y Egipto se contrastan en Isa 19:23. (Maurer.) Calvino concuerda con la Versi�n Inglesa: ��l vendr� desde Asiria y las ciudades fuertes.� desde las � fuertes hasta el R�o-�de Egipto hasta el r�o� Eufrates (corresponde en el paralelismo a �Asiria�). (Maurer.) V�ase Isa 11:15-16; Isa 19:23-25; Isa 27:13; Hos 11:11; Zec 10:10.
13. Por gloriosa que sea la perspectiva de la restauraci�n, los jud�os no han de olvidar la visitaci�n sobre su �tierra� que han de tener a causa del �fruto (el mal resultante) de sus obras� (v�ase Pro 1:31; Isa 3:10-11; Jer 21:14).
14. Apacienta tu pueblo-Oraci�n del profeta a Dios, en nombre de su pueblo, por cuanto Dios contesta la oraci�n de fe, es prof�tica de lo que Dios har�a. Cuando Dios est� por libertar a su pueblo, incita a los amigos de su pueblo a orar por �l. apacienta-incluye tanto la idea del gobierno pastoral como de cuidado por ellos (v�ase 5:4), considerados como un reba�o (Psa 80:1; Psa 100:3). Nuestra calamidad debe ser fatal para la naci�n, a menos que t�, acord�ndote del pacto con �tu heredad� por tu inmerecida gracia, (Deu 4:20; Deu 7:6; Deu 32:9), nos restaures. con tu cayado-la vara del pastor, con la cual dirige el reba�o (Psa 23:4). No m�s ya la vara del castigo (Psa 6:9). que mora solo en la monta�a, en � Carmelo-permite que tu pueblo, que mora como si fuera en la soledad de los bosques (en el mundo, mas no del mundo), esparcido entre las varias naciones, habite en el Carmelo, eso es, donde haya tierras de frutales y vi�as. (Calvino.) M�s bien: �Pueblo � que est� por morar (eso es, para que more) separado en el bosque, en � Carmelo� (Maurer), que ya no ha de estar mezclado con los paganos, sino que ha de morar como pueblo distinto en su propia tierra. Miqueas aqu� en vista la profec�a de Balaam (v�ase 6:5, donde tambi�n se refiere a Balaam). �He aqu� el pueblo habitar� solo� (Num 23:9; v�ase Deu 33:28). �Apacentar � en la monta�a en � Carmelo,� es apacentar en los ricos pastos de los bosques del Carmelo. �Dormir en los bosques� (Eze 34:25), es la figura de la m�s perfecta seguridad. As� que la seguridad de los jud�os tanto como su distinta nacionalidad, est�n aqu� predichas. Tambi�n en Jer 49:31. pazcan en Bas�n-famoso por su ganado (Psa 22:12; Amo 4:1). Jer 50:19 es paralelo a este pasaje. Bas�n y Galaad, al este del Jord�n, fueron escogidas por Rub�n, Gad, y la media tribu de Manas�s, por ser abundantes en pastos adaptados para sus muchos ganados (N�meros 32; Deu 3:12-17).
15. les � saliste (tu)-ambos pronombres se refieren a Israel. Igualmente en el v. 19 la persona se cambia de la primera a la tercera: �nosotros,� �nuestras,� �sus pecados� (seg�n la Versi�n Inglesa). Jehov� aqu� constesta la oraci�n de Miqueas del v. 14, asegur�ndole que, como hab�a librado a su pueblo de Egipto por poder milagroso, as� otra vez en favor de ellos lo dejar�a ver. (Jer 16:14-15).
16. se avergonzar�n de todas sus valent�as-de su poder�o, que tan s�bitamente result� ineficaz: ese poder con el cual hab�an pensado que no hab�a nada que no pudiesen hacer contra el pueblo de Dios. pondr�n la mano sobre su boca-el gesto de silencio ( Job 21:5; Job 40:4; Psa 107:42; Isa 52:15). Se enmudecer�n ante la maravillosa liberaci�n de Israel, y ya no se jactar�n de que el pueblo de Dios est� destru�do. ensordecer�n sus o�dos-quedar�n tan aturdidos que no oir�n lo que se les diga. (Grocio.) Hubo tiempo cuando ansiosamente escuchaban todos los rumores, como si fuesen otros tantos avisos de victorias; pero ahora tendr�n miedo de escucharlos, porque de continuo temen nuevos desastres, cuando vean que el Dios de Israel es tan poderoso. (Calvino.) Se tapar�n los o�dos, como para no tener que o�r de los �xitos de Israel.
17. Lamer�n el polvo-en abyecta postraci�n como suplicantes (Isa 72:9; v�ase Isa 49:23; Isa 65:25). como las serpientes de la tierra-Como reptiles desde sus cuevas, ellos saldr�n de sus escondrijos o fortalezas (Psa 18:45), para entregarse a los conquistadores. M�s lit., �temblar�n desde.� es decir, saldr�n temblando de sus refugios. como las serpientes-(Deu 32:24.) despavorirse han de Jehov�-o bien, en su temor se volver�n apresuradamente a Jehov�. De este modo se patentiza la ant�tesis: Ellos temblar�n saliendo de sus cuevas: en azoramiento se volver�n a Jehov�, por la salvaci�n (v�ase Nota. Hos 3:5, y Jer 33:9). temer�n de ti-de ti, Jehov� (y tambi�n a Israel, por estar �l bajo tu protecci�n). Hay aqui un cambio: de hablar de Dios, para hablar a Dios. (Maurer.) O m�s bien: �Temer�n de ti, Israel.� (Henderson.)
18. Agradecido por tan inesperada gracia prometida a Israel, Miqueas prorrumpe en alabanzas a Jehov�. olvidas el pecado-no en connivencia con �l, sino perdon�ndolo; dej�ndolo sin castigar, como el viajero que pasa por alto aquello que opta por no escudri�ar (Pro 19:11). Contr�stese Amo 7:8, �mirares a los pecados,� Psa 130:3. del resto-el remanente, el cual le ser� permitido sobrevivir al juicio previo: el electo residuo de gracia (Psa 4:7; Psa 5:3, Psa 5:7-8). no retuvo � su enojo-(Psa 103:9.) amador de misericordia-el perd�n de Dios est� basado en su naturaleza, la cual se deleita en favores y misericordia, y es adverso a la ira.
19. El tornar�-a nosotros, por haberse alejado de nosotros. sujetar� nuestras iniquidades-lit., las hollar� bajo los pies, por sernos hostiles y mortales. Sin la subyugaci�n de nuestras malas propensiones, ni el perd�n nos podr�a dar paz. Cuando Dios nos quita la culpa del pecado, de modo que ya no nos condene, tambi�n quita el poder del pecado, para que no se ense�oree de nosotros. echar� en los profundos de la mar-para nunca m�s surgir a la vista, sepultados de la vista en el eterno olvido: no simplemente a la ribera, de donde puedan levantarse de nuevo. nuestras iniquidades � sus (Versi�n Inglesa) pecados-cambio de personas. Miqueas en el primer caso se identifica con su pueblo y sus pecados.
20. Otorgar�s � la verdad-cumplir�s la promesa fiel. A Jacob � a Abraham-La promesa hecha a los patriarcas, t� la cumplir�s a la posteridad de ellos. Las promesas de Dios se llaman �misericordia,� porque fluyen lentamente de la gracia; y �verdad,� porque infaliblemente se verificar�n (Luk 1:72-73; 1Th 5:24). juraste a nuestros padres-Psa 105:9-10.) La promesa a Abrah�n est� en Gen 12:2 a Isaac, en Gen 26:24; a Jacob, Gen 28:13. Esta inmutable promesa indica el convenio de que la simiente de los patriarcas nunca deber� perecer, y que debe ser restaurada a su heredad tantas veces cuantas se tornen a Dios de todo coraz�n (Deu 30:1-2).