Bible Commentaries
2 Crónicas 15

Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo TestamentoComentario de Sutcliffe

Versículos 1-19

2 Cr�nicas 15:1 . Azar�as, hijo de Oded; cuyo padre se llama, para distinguirlo del sumo sacerdote de ese nombre.

2 Cr�nicas 15:3 . Durante una larga temporada, Israel, las diez tribus rebeldes, hab�a estado sin el Dios verdadero y sin un sacerdote que ense�ara a leer y exponer la ley. �Qu� pod�a esperarse en tiempos tan oscuros sino la ruina nacional?

2 Cr�nicas 15:16 . Ella hab�a hecho un �dolo en una arboleda. Maachah, reina viuda, como decimos ahora, todav�a disfrutaba del ????? Gebireh, o rango principal. Este acto de decisi�n infundir�a terror en el coraz�n de los id�latras. Nuestro erudito Selden, en su tratado sobre los dioses de Siria, una obra muy seguida en la Sinopsis de Poole, sostiene que la palabra hebrea Asera, que aqu� se traduce arboleda, debe traducirse Astart� en todos los lugares donde implica un �dolo , como en el griego. .

Dr. Wall, aprovech�ndose de Selden, alivia bastante nuestra versi�n en los siguientes lugares. �Manas�s erigi� una imagen de la arboleda en la casa del Se�or�. 2 Reyes 21:7 . Deber�a leer, imagen de Astart�. �Jos�as sac� la arboleda de la casa del Se�or y la redujo a polvo�. 2 Reyes 23:6 .

No puede ser una arboleda, sino la imagen de Astart�. "Derriba el altar de Baal y la arboleda que est� junto a �l". Jueces 6:25 . El hebreo es, "sobre �l"; la lectura correcta ser�a, "la imagen que est� sobre ella". �Acab hizo una arboleda�, es decir, una imagen de Astart�, que era el dios o diosa de su esposa Jezabel, y de sus naciones los sidonios.

1 Reyes 16:33 . "Y los profetas de los bosques, cuatrocientos;" es decir, los profetas del Astart�s o Ashtaroth. 1 Reyes 18:19 . V�ase tambi�n 1 Reyes 15:13 .

REFLEXIONES.

Asa regresando triunfante, y sin duda embriagado por la victoria y el bot�n, estaba a punto de hacer una entrada en su capital, demasiado en el esp�ritu de un conquistador carnal. Por lo tanto, el Se�or le instruy� amablemente por medio de Azar�as, el hijo de Oded, c�mo consolidar los frutos de la victoria yendo contra los enemigos espirituales de Israel y destruyendo todo vestigio de idolatr�a en su reino.

Para llevar a cabo esta obra tan deseable, se dirige a las esperanzas y temores de Asa, record�ndole las condiciones del pacto. �El Se�or est� con ustedes mientras ustedes est�n con �l. Si lo busc�is, ser� hallado por vosotros; pero si le abandon�is, �l tambi�n os abandonar� a vosotros ". De esta manera tambi�n David exhort� a Salom�n, 1 Cr�nicas 28:9 ; y as� todos los profetas buscaron reformar y convertir a sus compatriotas. Por tanto, que el cristiano se regocije con temblor, que tanto en la prosperidad como en la aflicci�n ponga el hacha en la ra�z de todo pecado.

A partir de esta victoria y del serm�n de Azar�as, Asa aprovech� la ocasi�n para seguir el ejemplo de Mois�s, Josu� y Samuel, para renovar el pacto nacional con el Se�or. Y cu�nto mejor fue esto, despu�s de una victoria tan grande, que lo que ahora llamamos una gran fiesta militar , donde sobrevienen borracheras, blasfemias y todo tipo de maldades, y donde tiene la apariencia de dar gracias al infierno por las bendiciones conferidas. Por el cielo. �Qu� puede ser tan grandioso, tan sabio y agradecido como una naci�n que aprovecha las misericordias se�aladas para acercarse a un v�nculo m�s estrecho con el cielo?

Pero el rasgo m�s glorioso en la reforma de Asa fue la eliminaci�n de su abuela de gran parte de su dignidad, porque se hab�a degradado a s� misma para ser una sacerdotisa de Astart�. Esta fue una acci�n divina; porque en la econom�a divina, el juicio debe comenzar primero en la casa de Dios. �Qu� ejemplo de justicia y de terror! Si la reina no pudiera escapar, �qu� mujer supersticiosa se atrever�a a transgredir? Qu� ejemplo a seguir para los jefes de casa.

No perdonar�a el vicio ni en la madre, ni en el sirviente, ni en el hijo, ni en s� mismo. Se�or, ay�danos, de la misma manera, a quitar todo pecado y a hacer un pacto contigo sobre los principios m�s puros y en la escala m�s amplia.

Despu�s de la renovaci�n del pacto, sigui� una gran prosperidad sobre el reino: �y cu�ndo renovaron los hombres o las naciones su pacto con el cielo sin participar de las bendiciones del pacto?

Información bibliográfica
Sutcliffe, Joseph. "Comentario sobre 2 Chronicles 15". Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo Testamento. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/jsc/2-chronicles-15.html. 1835.