Bible Commentaries
Romanos 13

Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo TestamentoComentario de Sutcliffe

Versículos 1-14

Romanos 13:1 . Que cada alma est� sujeta a los poderes superiores, de magistrados, gobernadores, proc�nsules, reyes y emperadores. El cristiano los encuentra en el poder; nos permiten cerrar nuestras puertas por la noche, y sus tribunales est�n abiertos para reparar los agravios. Estos son los escudos del cielo a los que, bajo Dios, debemos nuestra seguridad de la anarqu�a.

Por tanto, estamos obligados a orar por los reyes; porque en el esplendor del trono tenemos gloria y defensa, y como consecuencia, debemos pagar con alegr�a todas las justas demandas de impuestos. Los impuestos no guardan proporci�n con el saqueo y la requisa de un ej�rcito invasor. Por tanto, el cristiano debe evitar los garrotes de la sedici�n y la blasfemia, y cerrar los o�dos a sus nefastos discursos. Si los impuestos legales ejercen presi�n sobre alguna clase en particular, d�jelos presentar sus peticiones como los brit�nicos y la audiencia del gobierno estar� abierta.

Por desgracia, millones han perecido, buscando ciegamente derrocar al gobierno existente de su pa�s. Esta ley, dice Cris�stomo, respeta tanto al clero como a los comerciantes. Entonces, �qu� pas� con las suposiciones de los Papas? La defensa de Belarmino ahora duerme en los folios polvorientos.

Romanos 13:2 . Por tanto, todo aquel que se opone al poder, se opone a la ordenanza de Dios, por quien reinan los reyes y los pr�ncipes decretan la justicia. Como Dios es el origen del ser, tambi�n es el origen del poder y de todo orden en la sociedad. La autoridad real de los santos patriarcas era hereditaria. Otros han triunfado en el poder por elecci�n y por victoria en la guerra. Voltaire ten�a esto �ltimo en sus ojos cuando dijo: "El primero de los reyes fue un soldado afortunado". Le premiere des rois etait un heureux soldat.

Sea como fuere, no es de los chacales disputar el poder del le�n. La pregunta que agita a muchos es si todo el poder no se origina en el pueblo; �y si un gobierno puramente democr�tico no es el gobierno m�s compatible con una naci�n? No negamos el poder de las personas, y especialmente cuando se elevan como un oc�ano tormentoso; pero una democracia es una forma incierta de gobierno y generalmente termina en un poder real.

La democracia de Grecia, floreciente durante un tiempo, arruin� a todos sus generales m�s capaces por un solo rev�s en la guerra; mientras que, por el contrario, la Francia democr�tica arruin� a sus generales por salir victoriosos, no fuera que un Dumourier o un Pichegru adquirieran demasiado poder. En la sociedad hay edad, honor, sabidur�a y propiedad, as� como la masa del pueblo; y un gobierno bien construido debe asociar todos esos poderes en uno, como es el caso del cuerpo natural del hombre.

En consecuencia, Rey, Se�ores y Comunes, obra de nuestros padres, es la asociaci�n m�s feliz de todos esos poderes; y todo sabio se reunir� en torno al trono. Bajo esta sombra no tenemos temores, excepto por el ate�smo, la blasfemia y la opresi�n de los pobres.

Los que resistan, mediante actos abiertos de alta traici�n, rebeli�n y guerra, recibir�n condenaci�n para s� mismos. ?????, en tribunales humanos, equivale a la pena de muerte por ponerse en orden militar contra el gobierno. El ladr�n arrepentido dijo, estamos en la misma condenaci�n. En muchos lugares, el t�rmino significa la sentencia final de Dios en el d�a del juicio y la condenaci�n del diablo.

Hechos 24:25 . Rom 2: 2. 1 Timoteo 3:6 .

Romanos 13:7 . Homenaje a quien homenaje. ????, el impuesto general o impuesto nacional, que fue pagado por Jos� en Bel�n. Lucas 2:2 .

Personalizado a quien personalizado. ?????, un impuesto local u ocasional, pagado por nuestro Salvador. Mateo 17:24 . De qu� sirve el ma�z del agricultor y la riqueza del comerciante, si no est�n protegidos por el poder civil. El marinero que lleva el tim�n debe estar apoyado al igual que los hombres antes del m�stil. Un comercio de contrabando es una injusticia para el estado y tambi�n para el comerciante justo.

Romanos 13:8 . No le deb�is a nadie nada, excepto la deuda de amarse unos a otros. El comerciante no debe aceptar bienes sin la probabilidad de pagarlos; y el pobre, en caso de angustia, m�s vale mendigar que contraer una deuda que nunca podr� pagar. Los pobres de Inglaterra est�n generalmente tan endeudados como las tiendas lo permitir�n, y los prestamistas no hacen m�s que aumentar sus miserias.

Romanos 13:10 . El amor no hace mal al pr�jimo; por tanto, el amor es el cumplimiento de la ley. Nada, en cuanto a Dios, puede cumplir la ley sino la justicia; pero en cuanto al hombre, si amamos a Dios, amamos tambi�n a nuestro hermano. Por lo tanto, no podemos da�arlo intencionalmente en el cuerpo o en la mente, sino que debemos ejercitar habitualmente hacia �l todos los amables oficios de caridad, benevolencia y buena voluntad. La caridad es el v�nculo de la perfecci�n, la consumaci�n de todas las dem�s gracias.

Romanos 13:11 . Conociendo el tiempo, los �ltimos tiempos, los malos tiempos. Despu�s de iluminar a los romanos con doctrinas y prescribir el c�digo moral, el ap�stol hace sonar la alarma y dice que es hora de despertar y no dormir como los dem�s. Desechemos las obras de las tinieblas en bailes, rutas, teatros, tabernas y todas las asociaciones nocturnas. Los p�jaros y las bestias son aqu� tutores del hombre, para disfrutar del reposo en el silencio y el fr�o de la noche.

Romanos 13:13 . No en la rec�mara y el desenfreno, en la indulgencia en la cama hasta las horas inoportunas y de reproche. Estos son efectos de la ociosidad y la pereza, y recuerde el afeminado que no heredar� el reino de Dios.

Luego siguen las luchas y la envidia, las facciones de la corte, las competencias comerciales y la violencia. En los consuelos filos�ficos de Boecio (con lo que se refiere a la religi�n) hemos empa�ado los retratos de las facciones envidiosas que exist�an en la corte romana; y tales vicios en la iglesia estropean toda la gloria del temperamento cristiano. Amemos con afecto mutuo y perdon�monos unos a otros, como Dios nos perdon� por amor de Cristo.

Información bibliográfica
Sutcliffe, Joseph. "Comentario sobre Romans 13". Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo Testamento. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/jsc/romans-13.html. 1835.