Bible Commentaries
2 Crónicas 13

Comentario Popular de la Biblia de KretzmannComentario de Kretzmann

Versículo 1

Ahora, en el a�o dieciocho del rey Jeroboam, habiendo muerto Roboam despu�s de un reinado de diecisiete a�os completos, comenz� a reinar Ab�as sobre Jud�.

Versículos 1-12

Advertencia de Ab�as a Israel

Versículo 2

Rein� tres a�os en Jerusal�n. El nombre de su madre tambi�n era Michaiah (o Maachah, 2 Cr�nicas 11:20 ), la hija de Uriel de Gabaa, que se hab�a casado con Tamar, la hija de Absal�n. Y hubo guerra entre Ab�as y Jeroboam, no meramente un estado de hostilidad, donde cada lado descansaba en sus brazos, sino una guerra real y amarga.

Versículo 3

Y Ab�as, aparentemente en un esfuerzo por recuperar el territorio del norte para la casa de David, prepar� la batalla con un ej�rcito de valientes hombres de guerra, tropas experimentadas y veteranas, incluso cuatrocientos mil hombres elegidos, para la mayor�a de los hombres en esos d�as. fueron entrenados en el uso de armas. Jeroboam tambi�n puso en orden de batalla contra �l con ochocientos mil hombres escogidos, que eran valientes y valientes. Fue una guerra civil en serio, sin que ning�n profeta interfiriera en favor de Israel, ya que Jeroboam, debido a su idolatr�a, hab�a perdido todos los reclamos de protecci�n.

Versículo 4

Y se levant� Ab�as sobre el monte Zemaraim, que est� en el monte Efra�n, probablemente en los alrededores de Betel, y dijo: �O�dme, Jeroboam y todo Israel!

Versículo 5

�No deb�is saber que el Se�or Dios de Israel dio el reino sobre Israel a David para siempre, 2 Samuel 7:12 , a �l y a sus hijos, por un pacto de sal? �l describi� el pacto como una promesa inmutable e irrevocable de parte de Jehov�, sustentada por la ofrenda de carne, que siempre se preparaba con sal, Lev�tico 2:13 ; N�meros 18:19 .

Versículo 6

Sin embargo, Jeroboam, hijo de Nabat, siervo de Salom�n, hijo de David, se ha levantado y se ha rebelado contra su se�or, siendo representado as� a Jeroboam como un miserable usurpador, que se hab�a aprovechado de la juventud y la inexperiencia de Roboam.

Versículo 7

Y se han reunido con �l hombres vanidosos, literalmente, "hijos de inutilidad", los hijos de Belial, compa�eros vanidosos, in�tiles, sueltos, inconstantes y poco fiables, que se han fortalecido contra Roboam, el hijo de Salom�n, cuando Roboam era joven. y de coraz�n tierno y no pudieron resistirlos, se mostraron fuertes contra �l cuando a�n era inestable e incapaz de resistirlos.

Versículo 8

Y ahora pens�is resistir, fortaleci�ndose, el reino de Jehov� en manos de los hijos de David; y vosotros sois una gran multitud, y hay con vosotros becerros de oro, que Jeroboam os hizo por dioses, siendo esta una severa censura de la crasa idolatr�a que ahora ten�a reconocimiento oficial en el reino del norte, 1 Reyes 12:28 .

Versículo 9

Como consecuencia de la crasa idolatr�a introducida por Jeroboam, �no hab�is expulsado a los sacerdotes del Se�or, a los hijos de Aar�n y a los levitas, todos ellos destituidos y expulsados ??del pa�s cuando Jeroboam eligi� sacerdotes para su cargo? culto que no eran de los hijos de Lev�, 1 Reyes 12:31 ; 2 Cr�nicas 11:14 , � y os hab�is hecho sacerdotes a la manera de las naciones de otras tierras? para que cualquiera que venga a consagrarse con un becerro y siete carneros, cambiando tambi�n los requisitos de la ley en este sentido y haci�ndolo sacerdocio de los imp�os, �xodo 29; Deuteronomio 32:21 , el mismo puede ser sacerdote de los que no son dioses.

Versículo 10

Pero en cuanto a nosotros, los miembros de la naci�n del sur, el Se�or es nuestro Dios, y no lo hemos abandonado, la observancia pura y regular de la religi�n verdadera se encontr� solo en Jud�; y los sacerdotes que ministran a Jehov� son los hijos de Aar�n, y los levitas atienden sus negocios;

Versículo 11

y queman al Se�or todas las ma�anas y todas las noches holocaustos e incienso arom�tico; los panes de la proposici�n tambi�n se pusieron en orden sobre la mesa pura, la mesa especial cubierta de oro en el Lugar Santo, y el candelero de oro con sus l�mparas para quemar todas las noches; porque mantenemos el encargo del Se�or, nuestro Dios , realizando todos los actos de adoraci�n p�blica en estricta conformidad con Sus reglamentos; pero le hab�is abandonado.

Versículo 12

Y he aqu�, Dios mismo est� con nosotros como nuestro Capit�n, el ej�rcito de Jud� se hab�a puesto enteramente bajo Su liderazgo y protecci�n, y Sus sacerdotes con trompetas sonando para gritar alarma contra ti, porque esa era una de las funciones de los sacerdotes, para hacer sonar las trompetas y as� invocar al Se�or para que ayude a su pueblo en la guerra, N�meros 10:9 .

Ab�as termin� con una �ltima s�plica ferviente: Oh hijos de Israel, no pele�is contra el Se�or, Dios de vuestros padres; porque no prosperar�is. Solo donde la Palabra de Dios es la l�mpara para una comunidad o naci�n, �l verdaderamente bendecir� y prosperar� a la gente.

Versículo 13

Pero Jeroboam, mientras Ab�as arengaba a su ej�rcito desde su puesto elevado, provoc� una emboscada detr�s de ellos, para sorprender al ej�rcito de Jud� en la retaguardia; as� que ellos, la divisi�n principal del ej�rcito de Israel, estaban delante de Jud�, y la emboscada estaba detr�s de ellos.

Versículos 13-22

La derrota de Jeroboam

Versículo 14

Y cuando Jud� mir� hacia atr�s, habiendo sido llamado su atenci�n sobre el destacamento enemigo en su retaguardia, he aqu�, la batalla estaba por delante y por detr�s. Y clamaron al Se�or, y los sacerdotes tocaron las trompetas, que era la prenda de la victoria y ten�a la intenci�n de tranquilizar a los soldados de Jud�.

Versículo 15

Entonces los hombres de Jud�, llenos de nuevo coraje por la conocida se�al, dieron un grito, su grito de guerra se combin� con el sonido de las trompetas; y cuando los hombres de Jud� gritaron, sucedi� que Dios hiri� a Jeroboam ya todo Israel delante de Ab�as y de Jud�. Se enfatiza particularmente que las filas de Israel se rompieron debido a la interferencia de Jehov� a favor de Jud�.

Versículo 16

Y los hijos de Israel huyeron delante de Jud�; y Dios los entreg� en sus manos.

Versículo 17

Y Ab�as y su pueblo, enardecidos por las habituales pasiones de la guerra civil, los mataron con una gran matanza; y cayeron muertos de Israel quinientos mil hombres escogidos.

Versículo 18

As� los hijos de Israel fueron derrotados en ese momento, derrotados y humillados, tambi�n debilitados por la terrible p�rdida de hombres armados, y los hijos de Jud� prevalecieron, porque confiaron en el Se�or Dios de sus padres, y no a causa de sus padres. propio valor invencible.

Versículo 19

Y Ab�as sigui� a Jeroboam, y tom� ciudades de �l: Betel con sus aldeas, sus aldeas que la rodeaban, y Jesana con sus aldeas, y Efra�n con sus aldeas, todas ciudades fronterizas que, estrictamente hablando, pertenec�an al territorio de Jud� y Benjam�n.

Versículo 20

Tampoco Jeroboam recuper� las fuerzas en los d�as de Ab�as, no pudo recuperarse del terrible golpe que hab�a recibido; y el Se�or lo hiri�, y muri�, no arrebat�ndolo de una muerte repentina, sino visit�ndolo con la desgracia y amonton�ndole un golpe tras otro, de modo que sobrevivi� a Ab�as por solo dos a�os. 1 Reyes 14:20 ; 1 Reyes 15:9 .

Versículo 21

Pero Ab�as, siempre que se adhiri� solo al Se�or, se hizo poderoso, se cas� con catorce mujeres y engendr� veintid�s hijos y diecis�is hijas, esto, por supuesto, sucedi� antes de que �l se convirtiera en rey, mucho antes de la guerra con Jeroboam. .

Versículo 22

Y el resto de los hechos de Ab�as, sus caminos y sus dichos, est�n escritos en la historia del profeta Iddo, que tambi�n se menciona en otra parte como fuente de la que se bas� el escritor sagrado. Nosotros que, por la gracia de Dios, tenemos su Palabra pura y sus sacramentos, debemos prestar atenci�n a la advertencia contenida en esta historia y tener cuidado con la apostas�a.

Información bibliográfica
Kretzmann, Paul E. Ph. D., D. D. "Comentario sobre 2 Chronicles 13". "Comentario Popular de Kretzmann". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/kpc/2-chronicles-13.html. 1921-23.