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Saturday, September 28th, 2024
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
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Bible Commentaries
Comentario Popular de la Biblia de Kretzmann Comentario de Kretzmann
Declaración de derechos de autor
Estos archivos están en el dominio público.
Texto cortesía de BibleSupport.com. Usado con permiso.
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Texto cortesía de BibleSupport.com. Usado con permiso.
Información bibliográfica
Kretzmann, Paul E. Ph. D., D. D. "Comentario sobre 2 Chronicles 21". "Comentario Popular de Kretzmann". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/kpc/2-chronicles-21.html. 1921-23.
Kretzmann, Paul E. Ph. D., D. D. "Comentario sobre 2 Chronicles 21". "Comentario Popular de Kretzmann". https://beta.studylight.org/
Versículo 1
Ahora, Josafat durmi� con sus padres y fue sepultado con sus padres en la Ciudad de David, en los sepulcros de los reyes. Y rein� en su lugar Joram, su hijo, yerno del malvado Acab de Israel . Es posible que haya sido corregente con su padre durante un tiempo antes de esto.
Versículos 1-11
La maldad de Joram
Versículo 2
Y tuvo hermanos, los hijos de Josafat, Azar�as, Jehiel, Zacar�as, Azar�as (en hebreo, Azariahu), Miguel y Sefat�as; todos estos fueron los hijos de Josafat, rey de Israel, siendo la palabra en este caso la designaci�n del reino del sur.
Versículo 3
Y su padre les dio, les hab�a dado antes de morir, grandes obsequios de plata y oro y de cosas preciosas con ciudades cercadas en Jud�, asegurando as� a cada uno un ingreso independiente y al menos una posici�n subordinada en el reino como comandantes de ciudades fortificadas; pero el reino se lo entreg� a Joram, porque era el primog�nito, fue designado pr�ncipe heredero del reino y sucesor de Josafat, y esta decisi�n fue aceptada sin oposici�n por los otros pr�ncipes.
Versículo 4
Ahora, cuando Joram se levant� al reino de su padre, se fortaleci�, convoc� todas sus energ�as y mat� a espada a todos sus hermanos y tambi�n a los pr�ncipes de Israel, de los que sospechaba que ten�a un inter�s leal en los pr�ncipes y susceptibles de vengar su muerte. Fue un acto injustificado de crueldad tir�nica, una tragedia que mostraba la maldad de Joram.
Versículo 5
Joram ten�a treinta y dos a�os cuando comenz� a reinar, y rein� ocho a�os en Jerusal�n.
Versículo 6
Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, en toda su idolatr�a y maldad sin igual , como lo hizo la casa de Acab, cuyo esp�ritu maligno era Jezabel, la esposa de Acab; porque ten�a por mujer a la hija de Acab; e hizo lo que era malo a los ojos del Se�or, borrando as� por completo el efecto del espl�ndido ejemplo de su padre, ya que alent� la introducci�n de todas las costumbres id�latras relacionadas con la adoraci�n de las deidades paganas.
Versículo 7
Sin embargo, el Se�or no destruir�a la casa de David, ya que el comportamiento de Joram mereci� tal destino, debido al pacto que hab�a hecho con David, 2 Samuel 1, y como prometi� alumbrarlo a �l y a sus hijos. para siempre, para mantener a los descendientes de David en el trono de Jud� y as� mantener viva a su familia.
Versículo 8
En sus d�as, los edomitas, que hab�an sido derrocados por David, 2 Samuel 8:14 , se rebelaron contra el dominio de Jud� y se hicieron rey, proclam�ndose una vez m�s como un estado independiente.
Versículo 9
Entonces Joram sali� con sus pr�ncipes, los generales de su ej�rcito, y todos sus carros con �l, la divisi�n m�s fuerte de su ej�rcito; y se levant� de noche, cuando se encontr� rodeado por las fuerzas enemigas, y derrot� a los edomitas que lo rodeaban , y a los capitanes de los carros, logrando as� simplemente lograr su escape, mientras que su ej�rcito huy� r�pidamente a la seguridad de sus hogares.
Versículo 10
As� que los edomitas se rebelaron de la mano de Jud� hasta el d�a de hoy, el tiempo en que se escribi� el relato original del que se bas� el escritor inspirado, para la victoria de Amas�as sobre los edomitas, 2 Cr�nicas 25:14 , parece haber tenido sin efectos duraderos. Al mismo tiempo tambi�n Libna se rebel� bajo su mano, siendo esta una ciudad con su territorio circundante en la frontera suroeste, tanto los filisteos como los fenicios los ayudaron en su rebeli�n, porque hab�a abandonado al Se�or Dios de sus padres.
Versículo 11
Adem�s, hizo lugares altos en las monta�as de Jud�, altares en las cumbres de las monta�as dedicados a la idolatr�a, e hizo que los habitantes de Jerusal�n cometieran fornicaci�n, adulterio espiritual al rechazar a Jehov� y al servir a dioses falsos, y oblig� a Jud� a hacerlo. La historia de Joram muestra lo r�pido que los gobernantes malvados pueden deshacer la obra de reforma de muchos a�os. La incredulidad, la idolatr�a, la falsa doctrina se aceptan mucho m�s f�cilmente que la verdadera adoraci�n a Dios.
Versículo 12
Y le lleg� un escrito, Joram, de El�as, el profeta, una carta prof�tica evidentemente escrita o dictada por El�as antes de su muerte, que parece haber tenido lugar durante el reinado de Josafat, 2 Reyes 2: diciendo : As� dice el Se�or, Dios de David, tu padre, a quien solo se le deb�a atribuir la continuaci�n de la dinast�a, porque no anduviste en los caminos de Josafat, tu padre, ni en los caminos de Asa, rey de Jud�,
Versículos 12-20
El castigo del Se�or sobre Joram
Versículo 13
sino que anduviste en el camino de los reyes de Israel, en toda su iniquidad id�latra, e hiciste prostituir a Jud� y a los habitantes de Jerusal�n, en adulterio espiritual, para abandonar a Jehov� y volverse culpables de la idolatr�a de las naciones paganas. y practican las costumbres inmorales relacionadas con su religi�n, como las fornicaciones de la casa de Acab, el ejemplo extremo de maldad a este respecto, y tambi�n ha matado a sus hermanos de la casa de su padre, en un asesinato cruel y a sangre fr�a, que eras mejor que t�, no tan impregnado de idolatr�a,
Versículo 14
he aqu�, con una gran plaga, un severo azote, el Se�or herir� a tu pueblo, a tus hijos, a tus mujeres y a todos tus bienes, a saber, con invasiones devastadoras;
Versículo 15
y tendr�s una gran enfermedad por la enfermedad de tus intestinos, hasta que tus intestinos se derramen a causa de la enfermedad d�a tras d�a, durante muchos d�as, por mucho tiempo. Era una enfermedad singular y horrible, la de la pudrici�n de los intestinos en una lenta desintegraci�n.
Versículo 16
Adem�s, el Se�or, al cumplir esta profec�a, agit� contra Joram el esp�ritu de los filisteos, que hab�an estado controlados durante mucho tiempo, y de los �rabes que estaban cerca de los et�opes, los del sur de Arabia.
Versículo 17
Y subieron a Jud� y entraron en ella, forzaron su camino hacia el pa�s a pesar de todos los intentos de oposici�n, y se llevaron toda la sustancia que se encontr� en la casa del rey, saqueando incluso el palacio real y los dominios reales, y sus hijos tambi�n y sus mujeres, los miembros de su har�n, de modo que nunca le qued� un hijo salvo Joacaz, el menor de sus hijos, tambi�n llamado Ocoz�as y Azar�as.
Versículo 18
Y despu�s de todo esto, el Se�or lo golpe� en las entra�as con una enfermedad incurable, aparentemente alguna forma de disenter�a extrema.
Versículo 19
Y sucedi� que con el paso del tiempo, despu�s de dos a�os, se le cayeron las entra�as a causa de su enfermedad, ya que la horrible enfermedad hab�a carcomido hasta los intestinos; as� que muri� de dolorosas enfermedades, sufriendo fuertes dolores. Y su pueblo no le hizo fuego como el fuego de sus padres; ver 2 Cr�nicas 16:14 , donde leemos que se queman especias dulces en memoria de los muertos.
Versículo 20
De treinta y dos a�os ten�a cuando comenz� a reinar, y rein� en Jerusal�n ocho a�os, y parti� sin ser deseado; nadie lament� su muerte, fue un alivio para todo el reino. Sin embargo, lo sepultaron en la Ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes, se le neg� incluso este �ltimo honor. Como Joram, todo pueblo inicuo e id�latra est� destinado a la destrucci�n. Dios los visita con su disgusto incluso aqu� en el tiempo, y eventualmente, en la eternidad, tendr�n que soportar el castigo de sus transgresiones para siempre.