Bible Commentaries
1 Corintios 4

Pett's Commentary on the BibleComentario de Pett

Versículos 1-2

�Que un hombre nos considere como asistentes de Cristo y administradores de los misterios de Dios. Aqu�, adem�s, se requiere de los mayordomos que un hombre sea hallado fiel. '

Todos los maestros cristianos deben ser vistos como 'asistentes' de Cristo en la casa de Dios. La palabra para 'asistentes' se refer�a originalmente al nivel m�s bajo de esclavos de cocina en un trirreme, el m�s bajo de los m�s bajos, los que est�n en la parte inferior de la escalera. Tambi�n se us� para el asistente de la sinagoga de Nazaret que tom� el rollo de Isa�as de manos de Jes�s una vez que termin� de leer ( Lucas 4:20 ).

Hace hincapi� en la inferioridad de un superior en un campo en particular, por ejemplo, un "m�dico junior". Son aprendices y ayudantes de alguien que tiene conocimientos en su campo. Tambi�n los maestros cristianos son aprendices y ayudantes en relaci�n con Cristo, quien es la fuente de su conocimiento y entendimiento.

Tambi�n deben ser vistos como mayordomos, administradores dom�sticos de los misterios de Dios. El �nfasis en esto contin�a. No son el propietario, act�an en nombre del propietario. Son responsables de administrar lo que es suyo. Este era un tema favorito de Jes�s mismo y constantemente se refer�a a los hombres como siervos y mayordomos de Dios. Su responsabilidad, dice Pablo, es dar a conocer lo que antes estaba oculto a aquellos a quienes Dios ha elegido para revelarlo.

Era un misterio, porque aunque Dios hab�a desvelado algo de �l en el Antiguo Testamento, hab�a permanecido velado para el hombre. Pero ahora se hab�a revelado en Cristo. Y como administradores de esos misterios, era su responsabilidad develar a Cristo, y no su propia sabidur�a.

Por tanto, no deb�an ser inventores ni especuladores en asuntos religiosos. Otros hablaron de revelar 'misterios'. El mundo estaba lleno de religiones misteriosas. Pero eran misterios de su propia invenci�n, no los misterios de Dios. La responsabilidad de los mayordomos de Dios era preservar y ministrar la palabra de Dios que les hab�a sido encomendada, y dar a conocer plenamente a Cristo tal como les hab�a sido revelado.

Porque esa es la responsabilidad del mayordomo, ser fiel a su amo en relaci�n con lo que es suyo. El mayordomo de Cristo debe se�alar a Cristo y no a s� mismo, debe concentrarse en los asuntos de Cristo y no en los suyos, y debe cumplir fielmente con sus responsabilidades.

"Aqu�, adem�s, se requiere de los mayordomos que un hombre sea hallado fiel". Para cumplir con esa mayordom�a, nada era m�s esencial que que el mayordomo fuera fiel. Porque era s�lo el mayordomo fiel, que era fiel a la sabidur�a de su amo, quien realmente develar�a los misterios de su amo.

Versículos 1-5

La fidelidad requerida de los ayudantes y mayordomos de Cristo (4: 1-5).

Habiendo resumido todo en Cristo y en Dios, Pablo vuelve ahora al hecho de que todos los hombres son, por tanto, responsables ante Dios. Habla abiertamente de s� mismo como ejemplo. Pero subraya que no es m�s que un ejemplo. Todo lo que ha dicho sobre �l y Apolos, su querido amigo y colega en quien sabe que puede confiar y ser franco sin ofender, es aplicable a todos. Compara a toda la iglesia con una gran casa, la casa de Dios y de Su Hijo Jesucristo (compare Juan 8:34 ; G�latas 4:1 ; G�latas 4:26 ; G�latas 4:28 ).

Versículo 3

Pero para m� es una cosa muy peque�a que me juzguen ustedes o los d�as del hombre.

De hecho, esta relaci�n entre amo y mayordomo es tan esencial que la opini�n de cualquier otra persona deja de ser importante. Es solo ante �l a quien el mayordomo debe rendir cuentas. Los corintios pueden hacer juicios sobre �l tanto como quieran. Pueden examinar su ministerio y 'compararlo' con, juzgarlo junto ('anakrino), otros maestros, pero mientras �l sea un mayordomo fiel en la medida en que sus habilidades lo permitan, sus juicios importan poco.

Por supuesto, no est� hablando de una situaci�n en la que los Maestros est�n claramente fallando en su responsabilidad por negligencia, arrogancia o pereza. Est� hablando de juzgar a un hombre que est� haciendo lo mejor que puede con las habilidades que tiene y se est� concentrando en ser fiel a su maestro.

Como lo se�al� el mismo Jes�s. Justificarse a s� mismo a sus ojos significar�a poco, porque es solo Dios quien conoce el coraz�n, y lo que es muy estimado entre los hombres es abominaci�n a los ojos de Dios ( Lucas 16:15 ).

O por el d�a del hombre. Tambi�n puede ser juzgado por el mundo a la luz de sus propias perspectivas, su propia forma de vida e ideas. Porque este es el "d�a del hombre", cuando todo se juzga a la luz de lo que el hombre cree conveniente, apropiado o importante. Pero, al no comprender los caminos de Dios, no est�n en posici�n de juzgar a los siervos de Dios. De modo que no espera que esas personas le juzguen con justicia. El 'd�a del hombre', el tiempo en que las cosas se juzgan desde el punto de vista del hombre, contrasta aqu� con el 'd�a de Cristo' venidero, cuando las cosas se ver�n de manera diferente y se juzgar�n desde su punto de vista.

Versículos 3-4

Sin embargo, no quiere que piensen que est� menospreciando su juicio. As� que se�ala que ni siquiera se juzgar� a s� mismo, porque francamente no es adecuado para hacerlo. Puede estar totalmente satisfecho con lo que ense�a y c�mo se comporta como ap�stol. Puede sentir que lo ha hecho bien. Incluso puede caer en la desesperaci�n. Pero eso no declara que �l est� en lo correcto o lo incorrecto. Solo hay Uno que puede hacer eso, y ese es el Se�or (ver Proverbios 21:2 ). As� que tengan cuidado de no hacer juicios apresurados y falsos, tal como �l es.

Nuevamente debemos enfatizar que �l est� hablando de aquellos que buscan ser fieles. Es correcto juzgar a los que no son de la familia de Dios. Quienes son infieles. Es correcto instar a los mayordomos a una mayor fidelidad. Pero lo que no es correcto es juzgarlos y descartarlos compar�ndolos con otros.

"Sin embargo, por la presente no estoy justificado". Pablo sabe muy bien que el hecho de que no sepa nada contra s� mismo no significa que ser� aceptado por Dios como justo. Es solo Dios quien justifica o condena.

Versículo 5

Por tanto, no juzgu�is nada antes de que venga el Se�or, el cual aclarar� lo oculto de las tinieblas y aclarar� abiertamente los consejos del coraz�n. Y entonces cada uno recibir� su alabanza de Dios.

Hasta que venga el Se�or. No el cambio de terminolog�a. Jes�s es 'el Se�or'. No es solo un Maestro superior. Hay un solo Se�or, Jesucristo. Como Hijo, es el Se�or de la casa de Dios. Todos deben vivir a la luz de �l y de Su esperado regreso, porque entonces �l emitir� un juicio verdadero y los hombres tendr�n que dar cuenta completa de todo lo que han hecho. Compare las muchas par�bolas de Jes�s que describen exactamente esto (por ejemplo, Lucas 12:35 )

No juzgu�is nada antes de tiempo. Aqu� est� pensando principalmente en maestros como Apolos, Pedro y �l mismo, y todos sus compa�eros maestros ( 1 Corintios 3:22 ). Pero tambi�n se refiere a todos los que ense�an fielmente y son responsables ante su Se�or. No quiere decir que los corintios no debieran juzgar la rectitud de la doctrina, ni las malas acciones, ni el comportamiento inmoral.

M�s tarde demuestra que eso es responsabilidad de ellos. Solo est� diciendo que deben concentrarse en Jesucristo, considerar lo que se les da y no juzgar la idoneidad o no de Sus ayudantes y sus motivos. Es la calidad y la eficacia espiritual del servicio de los hombres lo que no debe ser juzgado. Esa es la responsabilidad del Se�or. Cuando �l venga, lo que es desconocido saldr� a la luz y los motivos y objetivos de los hombres, ocultos en sus corazones, se aclarar�n.

Entonces Dios alabar� a cada uno seg�n lo que se merece. Mucho de lo que han hecho, que los hombres admiraron y elogiaron, ser�n quemados, revelados como escoria, pero otros resistir�n el examen y saldr�n como oro y plata puros y refinados y joyas costosas ( 1 Corintios 3:13 ).

Sin embargo, lo que se dice aqu� tambi�n se aplica a todos los cristianos. Al final, tenemos que rendir cuentas ante �l por todo lo que hacemos y decimos. Entonces el juicio no se basar� en las apariencias, sino en la verdad. Lo que hemos mantenido oculto en nuestro interior quedar� al descubierto. Y para todos los suyos habr� algo de alabanza de parte de Dios, porque cualquiera que sea indigno de cualquier alabanza ha probado de ese modo que no era verdaderamente suyo.

'Las cosas ocultas de las tinieblas'. Estas son las cosas que los hombres no quieren que salgan a la luz. Todos han tenido tales cosas en sus vidas, objetivos incorrectos, motivos incorrectos, falta de aplicaci�n espiritual. Y, lamentablemente, muchas de esas cosas han sucedido en los asuntos de la iglesia. Mucho se hace por motivos incorrectos y en beneficio propio. Y podemos estar seguros de que saldr�n todos. Pero estas son cosas que solo Dios puede juzgar. Porque solo �l puede penetrar en las tinieblas.

"Los consejos del coraz�n". Lo que los hombres piensan en el fondo. Qu� se esconde detr�s de sus suaves palabras, o de su fiel y muchas veces incomprendido servicio. Todo se aclarar� abiertamente.

"Y entonces cada uno recibir� su alabanza de Dios". Entonces se dar� la recompensa. Entonces dir�: 'Bien hecho, mi buen y fiel siervo'. Comp�rese con Mateo 25:21 . Cada uno recibir� el generoso don de un sol�cito Se�or.

Versículos 6-7

'Ahora bien, hermanos, estas cosas las he transferido en una figura a m� y a Apolos por el bien de ustedes, para que en nosotros aprendan a no ir m�s all� de las cosas que est�n escritas, para que ninguno de ustedes se envanezca por el que est� contra el otro. Porque, �qui�n te hace diferir? �Y qu� tienes que no recibiste? Pero si lo recibiste, �por qu� te glor�as como si no lo hubieras recibido?

Ahora enfatiza que se ha estado usando a s� mismo y a Apolos como ilustraciones a medida que avanzaba, alterando la figura mientras lo hac�a, siempre que era necesario, para adecuarse al punto que deseaba hacer. Pero se�ala que lo que ha dicho, de hecho, deber�a aplicarse a todos los Maestros. Cada uno tiene su parte que desempe�ar, pero ninguno debe exaltarse por encima de los dem�s. Cristo y Aquel crucificado, y no alg�n Maestro, es Quien siempre debe ser central en su pensamiento y ense�anza, y espera que de ellos (Pablo y Apolos) ellos (otros maestros, o los mismos Corintios) puedan aprender a no ir. m�s all� de 'las cosas que est�n escritas'.

En vista del uso de la introducci�n regular "est� escrito", probablemente veamos en esto una referencia a las Escrituras. Las Escrituras, 'las cosas que est�n escritas', se�alan a Jesucristo como Se�or, el Siervo sufriente de Dios que finalmente fue exaltado ( Isa�as 52:13 a Isa�as 53:12 ), se�alan a Aquel a quien Dios enviar� ser hecho Se�or sobre todas las cosas ( Isa�as 11:1 ; Daniel 7:13 con Mateo 16:27 ; Ezequiel 37:25) y no deben ir m�s all� exaltando alguna sabidur�a humana o alg�n personaje humano, "envaneci�ndose a favor del uno contra el otro", con el orgullo exaltando al uno contra el otro, o introduciendo doctrinas novedosas. Deben ser buenos administradores de los misterios de Dios.

De hecho, es Dios quien les ha dado los dones espirituales (12-14; Romanos 12:6 ; Efesios 3:7 ; 1 Timoteo 4:14 ) y mientras los ejercen, el don de profec�a, la 'palabra de Dios. conocimiento ', el don del ministerio, el don de la ense�anza, recibir�n sabidur�a y conocimiento, obtendr�n entendimiento y lo impartir�n a otros.

Pero todo lo que reciban deber� ser juzgado seg�n las Escrituras. Como Pablo y Apolos, deben discernir espiritualmente ( 1 Corintios 14:29 ). Tampoco deben exaltar los canales de tal iluminaci�n, porque son meramente receptores y canales. La gloria debe ir, no a los canales, sino a la fuente, a Dios ( 1 Corintios 1:31 ). Porque si se 'hinchan' al ser hinchados por otros, expandiendo sus pechos como una rana toro, perder�n su utilidad.

Estas palabras se aplican a todos los dones. Cualesquiera que sean los talentos o dones que poseamos, proceden de Dios. Por lo tanto, debemos ejercerlos con gratitud y no con orgullo, porque no los tenemos porque de alguna manera seamos m�s merecedores que los dem�s, sino porque Dios en Su poder soberano nos los ha concedido en gracia. Y cuando veamos a otros con estos dones, debemos dar gracias a Dios por ellos tambi�n y no exaltar al bendecido que haya recibido los dones.

'Estas cosas.' Ha escrito mucho y ahora repasa lo que ha escrito para poder aplicarlo a ellos. Solo menciona a Apolos y a s� mismo. Esta ha sido su pr�ctica al dar nombres como ejemplos con fines ilustrativos. Esto contrasta con 1 Corintios 1:12 ; 1 Corintios 3:22 donde se hab�a mencionado 'Cefas' (nota, no 'Pedro' sino la forma aramea) para llamar la atenci�n sobre sus divisiones partidistas, probablemente porque algunos se�alaron la ense�anza cristiana con un �nfasis jud�o.

Pero claramente tales ideas no eran en s� mismas centrales para los problemas de la iglesia o causaban dificultades doctrinales, porque en ninguna parte se mencionan espec�ficamente. Los problemas que hab�an surgido ten�an m�s que ver con el desacuerdo y la divisi�n y concentraci�n en asuntos secundarios, en una supuesta nueva sabidur�a, en detrimento de la palabra de la cruz. (Y no quer�a que pensaran que estaba atacando a los que ven�an de Cefas, o incluso a los jud�os cristianos en absoluto. Sab�an muy bien c�mo amaba a Apolos. Usarlo como ilustraci�n no inducir�a a error).

'Para que en nosotros aprendas a no ir m�s all� de las cosas que est�n escritas'. Literalmente, 'para que en nosotros puedas aprender el (a) no por encima / m�s all� de lo que est� escrito'. El griego es probablemente coloquial, pero la idea parece ser que Pablo quiere que se aseguren de que permanezcan basados ??en las Escrituras. 'Lo que est� escrito' puede referirse a las citas b�blicas y referencias que �l ha dado en el pasaje (p.

gramo. 1 Corintios 1:19 ; 1Co 1:31; 1 Corintios 2:9 ; 1 Corintios 2:16 ; 1 Corintios 3:19 ), por lo que les aconseja que busquen solo en las Escrituras o en Dios en busca de sabidur�a, o puede referirse a toda la posici�n b�blica que 'est� escrita' en general.

El 'to' (art�culo definido) usado de esta manera regularmente introduce una cita. De ah� la traducci�n sugerida, 'para que en nosotros aprendas el dicho, �No vayas m�s all� de lo que est� escrito�. El �nfasis est� en la necesidad de no dejarse llevar por cosas que no est�n fundamentadas en las Escrituras.

Versículos 6-13

Los que son fieles a la palabra de la cruz soportan el sufrimiento por Cristo. Los corintios necesitan volver a examinar sus fundamentos (4: 6-13).

Pablo ahora enfatiza que todo lo que ha dicho ha sido para ellos en mente. Lo ha hecho con dulzura, como si hablara de s� mismo y de Apolos. (Podemos ver la confianza que ten�a en Apolos). Pero realmente ha estado pensando en ellos y en los que profesan ser sus maestros. Ha querido que consideren sus caminos.

Porque la verdad es que los que son fieles a la palabra de la cruz est�n soportando el sufrimiento por Cristo, como lo demuestran los Ap�stoles y lo que soportan. Por lo tanto, la creencia de los corintios de que de alguna manera son superiores es claramente err�nea. Se creen sabios pero est�n descuidando la verdadera sabidur�a, reemplaz�ndola por lo secundario y artificial. Se est�n concentrando en diferentes aspectos de las doctrinas que ven como 'sabidur�a' y descuidando la verdadera sabidur�a de Dios que se revela a trav�s de la palabra de la cruz. Est�n fallando en ser verdaderos siervos de Cristo.

Versículo 8

'Ya est�s lleno, ya eres rico, has reinado sin nosotros. S�, y quisiera que t� reinaras, que tambi�n nosotros reinemos contigo.

Pero eso es lo que han estado haciendo, y esas ideas les han dado ideas por encima de su posici�n. Pablo habla aqu� con profunda iron�a y contrasta su visi�n de su propia posici�n con la de los Ap�stoles. Han llegado a una visi�n tan exaltada de s� mismos que se ven a s� mismos saciados de bendiciones, llenos de sabidur�a celestial, que ya tienen plenamente todo lo que Dios puede darles espiritualmente, que ya son ricos en gran sabidur�a y en conocimiento y bendici�n espirituales. , incluso como reinante.

Y todo sin incluir a Pablo y Apolos, gracias a sus dones espirituales. Y, sin embargo, mientras tanto se han disputado acaloradamente entre s�, y han expresado su propia superioridad unos frente a otros, en detrimento de la centralidad de Cristo crucificado.

Parecer�a que lo que hab�an recibido a trav�s de sus dones prof�ticos, no probados sabiamente contra las Escrituras, les hab�a dado la idea de su propia gran espiritualidad y exaltaci�n, de modo que sintieron que pod�an dejar a Pablo y Apolos muy atr�s. Aparentemente se ve�an a s� mismos como reinando de alguna manera de una manera sobrenatural, posiblemente en vista de las expectativas mesi�nicas terrenales (compare Lucas 22:29 ).

Los cristianos imprudentes pronto pueden obtener ideas tan exaltadas de maestros imprudentes en tiempos en que todo va bien. Paul es esc�ptico. Sarc�sticamente dice que le gustar�a que ellos reinaran para que �l y Apolos pudieran reinar con ellos. Probablemente no debemos tomar este comentario demasiado literalmente, aunque si sus ideas estuvieran conectadas con la Regla Real de Dios, es posible que Pablo deseara con nostalgia que realmente llegara.

"S�, y quisiera que t� reinaras, que tambi�n nosotros reinemos contigo". Pablo desea sarc�sticamente que realmente reinaron como cristianos verdaderamente espirituales para que �l y sus colaboradores, que realmente reinaban en vida ( Romanos 5:17 ; Romanos 6:11 ; Apocalipsis 5:10 ), pudieran regocijarse y reinar con ellos. Entonces estar�an unidos como uno solo en lugar de estar divididos.

Alternativamente, la idea (en vista de lo que sigue) posiblemente podr�a ser que �l desear�a que su doctrina de la bendici�n mesi�nica presente fuera verdadera para que todos pudieran compartirla juntos. Pero contin�a se�alando que el hecho de que no fuera cierto fue demostrado por lo que estaban sufriendo los Ap�stoles.

El quiere saber que todas sus afirmaciones eran ciertamente en contraste con las expectativas de los ap�stoles, porque �l va a demostrar que� ellos �ciertamente no gozan de tal plenitud, tales riquezas, reinando como la afirmaci�n de Corintios. M�s bien se les hace desfilar, se burlan de ellos, pasan hambre y se les desnuda, se les golpea y no tienen hogar, se les trata como la inmundicia del mundo.

Por lo tanto, debe quedar claro que con sus afirmaciones, los corintios afirman ser superiores a los mismos ap�stoles. Y, sin embargo, en el resto de su carta demostrar� que, lejos de reinar, est�n revelando su continua insuficiencia moral.

Corinto era una ciudad rica, y muchos de los cristianos corintios estaban aparentemente lo suficientemente bien como para considerar que esto de alguna manera demostraba su superioridad espiritual. Posiblemente consideraron que disfrutaban de estas bendiciones debido a lo que ve�an como su estado espiritual. Posiblemente consideraron que hab�an entrado en la bendici�n mesi�nica. Pero, lamentablemente, eran como la iglesia de Laodicea ( Apocalipsis 3:17 ), pobres y miserables, miserables, ciegos y desnudos.

Hoy en d�a, hay muchos que tienden igualmente a considerar la prosperidad como un signo de su estado espiritual. Hay algunos que lo ense�an, y ellos tambi�n podr�an considerar provechosamente estas palabras, especialmente cuando hay tanta necesidad alrededor y sus hermanos cristianos pasan hambre y sufren en todo el mundo.

Pero la verdad es que su espiritualidad era un espect�culo, una simulaci�n. Su visi�n de s� mismos basada en el ejercicio y la indulgencia excesiva en los dones espirituales, no ten�a en cuenta la calidad de sus vidas. Realmente no reinaron. Caminaban a ciegas. Tropezaron y cayeron. Exaltaron personajes y degradaron a aquellos a quienes m�s les deb�an. Se dividieron en 'escuelas de sabidur�a' discutiendo entre s� sobre asuntos secundarios y criticando a los dem�s, mientras ignoraban lo que deber�a haber sido su principal preocupaci�n.

Toleraron, y algunos incluso practicaron, la inmoralidad. Se llevaron a los tribunales. Criticaron y atacaron a Paul y a otros como �l. Trataron la idolatr�a a la ligera, aunque hac�a tropezar a otros. Se quejaron de lo que hizo Dios. Eran ego�stas y pasaban por alto el bien de los dem�s. Muchos se emborracharon en las fiestas de amor cristianas. Otros no pudieron compartir sus cosas buenas con sus hermanos m�s pobres. Eran desconsiderados, irreflexivos y ego�stas. �Y sin embargo afirmaban estar reinando!

Esta tendencia a interpretar las Escrituras a la luz de circunstancias particulares prevalece hoy. Los cristianos en los pa�ses occidentales pueden interpretarlos a la luz de su opulencia, como lo hicieron los corintios (aunque no todos), mientras que aquellos en pa�ses donde pasan hambre, sufren y tienen pocas oportunidades, pueden verlos de manera muy diferente. La lecci�n que Pablo est� dando aqu� es que si la doctrina no encaja en todos los casos, entonces no es la doctrina correcta.

Versículos 9-10

Porque, creo, Dios nos ha presentado a los �ltimos ap�stoles de todos, como hombres condenados a muerte. Porque somos un espect�culo para el mundo, y para los �ngeles y para los hombres. Somos tontos por amor de Cristo, pero t� eres sabio en Cristo. Somos d�biles, pero t� eres fuerte. T� tienes gloria pero nosotros tenemos deshonra '.

Estos corintios aparentemente pensaron que hab�an sido puestos en primer lugar. Que fueron especialmente elegidos. Que estaban comenzando el reinado mesi�nico como los elegidos de Dios. Bien, perm�tanles considerar la situaci�n de los hombres m�s espirituales, los Ap�stoles, cuyos dones de Dios excedieron con creces los de todos los dem�s. Aparentemente, estaban haciendo lo contrario de reinar. Aparentemente, hab�an sido puestos en �ltimo lugar. Aparentemente, estaban al final de la cola cuando se trataba de prestigio, honor y gloria.

En lugar de ser exaltados, estaban condenados a muerte. Esto puede referirse al hecho de que en las procesiones triunfales de los conquistadores romanos, en las que sus cautivos eran un espect�culo, los cautivos que estaban condenados a muerte en la arena eran los �ltimos en caminar. As� que en lugar de reinar, los Ap�stoles de Cristo estaban siendo convertidos en un espect�culo a la vista de todo el mundo, tanto de �ngeles como de hombres, y eran exhibidos, por as� decirlo, como cautivos condenados, como forraje para animales.

'De �ngeles y de hombres'. Bien puede ser que la referencia a los �ngeles tuviera en mente que estos corintios se ve�an a s� mismos no solo como exaltados por encima de los hombres, sino tambi�n como exaltados a los ojos de los �ngeles, como casi los mismos �ngeles. O puede estar refiri�ndose al hecho de que los �ngeles est�n presentes para velar por el pueblo de Dios ( Hebreos 2:14 ) y, por lo tanto, son espectadores de todo lo que sucede en la tierra.

En lugar de jactarse de sabidur�a y fuerza, los ap�stoles eran considerados necios y solo pod�an jactarse de debilidad y humillaci�n. Note c�mo todo esto encaja con lo que Pablo ha estado diciendo anteriormente acerca de los que eran de Cristo ( 1 Corintios 1:18 ; 1 Corintios 1:23 ; 1 Corintios 1:26 ).

De hecho, mientras los corintios se mostraban sabios en Cristo, los ap�stoles se mostraban como necios por Cristo, como verdaderos sabios. Mientras que los corintios se regocijaban en la gloria, los ap�stoles, esos hombres especialmente elegidos por Dios, fueron despreciados y deshonrados. Eran un espect�culo para que otros se burlaran o aplaudieran.

Por amor de Cristo, los Ap�stoles estaban preparados para ser vistos como tontos, y para decir cosas y comportarse de una manera que hiciera pensar a los hombres que eran tontos, proclamando abiertamente la palabra de la cruz. Su �nico deseo era honrar a Cristo. Hab�an muerto a sus propios caminos y deseos para poder vivir para �l, y eso los hab�a llevado a la pobreza y al deshonor mundano. Claramente alguien se hab�a equivocado en alguna parte.

O los corintios ten�an raz�n o los ap�stoles. Paul est� haciendo su intento final para mostrarles lo equivocados que est�n de hecho. Est�n siendo enga�ados sobre las prioridades espirituales porque est�n pasando por alto la cruz. Necesitan dejar su estudio de la 'sabidur�a' y sus reuniones de experiencia y llevar la palabra de la cruz al mundo. Entonces pronto descubrir�an si hab�a llegado la era mesi�nica.

Qu� contraste fueron entonces estos cristianos corintios carnales y sus puntos de vista en comparaci�n con los ap�stoles. Se ve�an a s� mismos como sabios (sensatos y prudentes y con un conocimiento espiritual adicional), fuertes y gloriosos. Pero, por supuesto, todo fue una ilusi�n basada en sus circunstancias particulares. Realmente eran todo lo contrario. No eran los gigantes espirituales que pensaban que eran. M�s bien vivieron en exceso en todo, en disputas sobre diferentes Maestros y diferentes ense�anzas de sabidur�a, en mala conducta sexual (cap�tulo 5), en disputas legales, llevando a sus compa�eros cristianos ante tribunales paganos (cap�tulo 6), en fiestas y borracheras ( 1 Corintios 11:20 ), y en el mal uso de los dones espirituales (cap�tulo 14).

No ten�an un concepto real de unidad en Cristo, de castidad y pureza, de preocupaci�n por los dem�s y del uso de los dones espirituales para el beneficio de otros en lugar de para ellos mismos. Lejos de disfrutar de las bendiciones mesi�nicas, eran inadaptados mesi�nicos. No hab�an aprendido a vivir en sacrificio, como Aquel que no ten�a d�nde recostar la cabeza ( Mateo 8:20 ; Lucas 9:58 ). Y todo esto fue evidencia de que la palabra de la cruz no era preeminente en sus vidas.

'Dios nos ha presentado'. Pero deben notar lo que Dios ha hecho. Es Dios Quien ha hecho lo que tiene con los Ap�stoles. Los ha presentado deliberadamente como un espect�culo. Entonces, �c�mo se relaciona esto con la forma de pensar de los corintios?

As� que notamos aqu� que, en �ltima instancia, fue Dios quien trajo estas cosas sobre los ap�stoles. Paul no se queja. Los est� dando como ejemplo. Nadie necesita desesperarse o perder el valor porque estaba dentro de Su prop�sito y fue el medio por el cual �l llev� a cabo Su voluntad. Aquellos que no son los verdaderos siervos de Dios pueden parecer 'prosperar', pero aquellos que son Suyos pueden esperar encontrarse constantemente asaltados por pruebas y tribulaciones, (aunque su oraci�n debe ser siempre, 'no nos metas en pruebas, sino l�branos de maldad ', porque su confianza debe estar en �l y no en ellos mismos).

"Al mundo, a los �ngeles y a los hombres". Para la idea de los �ngeles como observadores de los hombres, v�ase 1 Corintios 11:10 ; Hebreos 1:14 . Como se sugiri� anteriormente, esto puede indicar que los corintios ten�an una visi�n exaltada de s� mismos por encima del estatus angelical. O bien, "�ngeles y hombres" podr�a estar destinado a definir "el mundo" en el que operamos, poblado por hombres, vigilado por �ngeles.

Versículo 11

'Incluso hasta este momento tenemos hambre y sed, y estamos desnudos y golpeados, y no tenemos un lugar seguro para morar. Y nos esforzamos, trabajando con nuestras manos. Siendo injuriados, bendecimos, siendo perseguidos, aguantamos, siendo difamados suplicamos. Somos hechos como la inmundicia del mundo, el despojo de todas las cosas, incluso hasta ahora. '

Pablo ahora define la vida del testimonio cristiano. Cu�n diferente de muchos hoy en d�a vivieron aquellos que buscaron primero la Regla Real de Dios y Su justicia, aquellos que caminaron por el camino de la cruz. No festejaron. Ten�an hambre y sed y se quedaban sin ropa, no iban vestidos a la moda sino que viv�an con ropa m�nima, no eran mimados sino golpeados, no disfrutaban del lujo sino que trabajaban duro, trabajando con las manos.

Fueron vilipendiados, perseguidos y difamados con regularidad, y con frecuencia tergiversados, porque se lanzaron a la batalla espiritual entre los incr�dulos. De hecho, fueron tratados como basura, como lo que los hombres prescinden con repugnancia. Y a cambio de su maltrato, bendijeron a sus perseguidores (ver Lucas 6:27 ), y aguantaron y respondieron de manera amistosa, y continuaron suplicando a los hombres que vinieran a Cristo.

Eran aquellos de quienes el mundo no era digno ( Hebreos 11:38 ). Quiz�s hubo un indicio deliberado en esto de que los corintios no estaban obedeciendo a su Maestro en esto y deber�an aprender a hacer lo mismo.

En esto, los ap�stoles siguieron a Cristo. �l tambi�n tuvo hambre ( Lucas 4:2 ; Mateo 21:18 ), tuvo sed ( Juan 4:7 ; Juan 19:28 ); estaba desnudo ( Marco 15:24 ); fue golpeado ( Marco 14:65 ); no ten�a un lugar seguro para vivir ( Lucas 9:58 ); y fue injuriado, perseguido y difamado ( 1 Pedro 2:23 ; Juan 15:20 ; Marco 15:29 ).

'Trabajar duro, trabajar con nuestras manos'. Este fue un trabajo que result� en callos, cansancio y fatiga ( 2 Tesalonicenses 3:8 ), el trabajo de amor que trabaja hasta los huesos por aquellos a quienes ama ( 1 Tesalonicenses 1:3 ).

No hubo una vida de tranquilidad y relajaci�n para aquellos que sirvieron a Cristo de verdad. Y quer�an no ser una carga para los dem�s. Los jud�os respetaban el trabajo duro. Se esperaba que todos los maestros jud�os se mantuvieran solos. Pero los griegos tend�an a despreciarlo. As� fue para los esclavos y las clases bajas. Por lo tanto, Pablo est� indicando que a los ojos de los griegos se les consideraba de bajo nivel.

Note el �nfasis de Pablo. "Incluso hasta el momento presente, incluso hasta ahora". Para aquellos que sirvieron a Cristo fielmente, los tiempos de abundancia a�n no hab�an llegado, la era mesi�nica a�n no hab�a llegado, ni lo har�a hasta que los prop�sitos de Dios se hicieran realidad. Entonces, si los corintios se jactaban de su prosperidad y de su vida lujosa, no era una indicaci�n de su estado espiritual, sino m�s bien de su bancarrota espiritual.

Los corintios son una imagen de todos los que viven en prosperidad y exceso mientras el mundo languidece. Pablo est� diciendo que los evangelistas y ministros que viven en el lujo son una contradicci�n en t�rminos. Los prelados que visten espl�ndidamente son una contradicci�n del Evangelio. Aquellos que disfrutan de la fama y los aplausos no hacen m�s que demostrar su propio estado no espiritual. Aquellos que poseen propiedades m�s caras que sus congregaciones y autos m�s grandes muestran su falta de espiritualidad e incluso hipocres�a.

Porque aquellos que sirven fielmente vivir�n vidas de sacrificio y dominio propio para que Cristo pueda ser levantado. Por sus frutos (por c�mo viven y qu� producen) ser�n conocidos.

Si bien las Escrituras en ninguna parte condenan a los hombres piadosos que tienen riquezas, ciertamente condenan a los que no las usan sabiamente para ayudar a los necesitados. Considere Lucas 10:33 ; Lucas 12:18 ; Lucas 16:9 ; Lucas 16:19 ; Lucas 18:22 .

Y tambi�n nos mandan a acumular tesoros, no en la tierra sino en el Cielo ( Mateo 6:19 ) y nos dan el ejemplo de la viuda y su miseria que dio a Dios, record�ndonos que Dios no mira c�mo tanto damos tanto como cuanto nos queda ( Marco 12:43 ).

'La deslocalizaci�n de todas las cosas'. Esto describ�a cosas como la grasa y la suciedad limpiadas de ollas y sartenes. Aquello que fue limpiado y arrojado al pozo negro. Ver tambi�n Lamentaciones 3:45 .

Versículos 14-16

'Escribo estas cosas no para avergonzarlos, sino para amonestarlos, como mis amados hijos. Porque aunque tengas diez mil tutores en Cristo, no tienes muchos padres. Porque en Cristo Jes�s te hice nacer por medio del Evangelio. Por tanto, les ruego que me imiten.

Pablo ahora les asegura que escribe as� como un padre amoroso, no como un d�spota. Los est� amonestando severamente debido a su amor por ellos. Son sus amados hijos y �l quiere lo mejor para ellos. Porque al menos en una cosa es �nico, que fue �l quien primero present� a los corintios a Cristo, y por medio de quien encontraron nueva vida en �l. Esto al menos prueba su solidez y eficacia.

Hay una multiplicidad de Maestros (tutores esclavos) que les ense�ar�n muchas cosas, algunas buenas, otras malas. Pero no tienen las mismas calificaciones, en lo que respecta a los corintios, como las tiene Pablo, porque son sus hijos espirituales, y �l fue su padre espiritual, y la forma en que los dio a luz no fue a trav�s de la 'sabidur�a'. sino a trav�s del Evangelio ( 1 Corintios 1:17 ).

Por lo tanto, les ruega que sean imitadores de �l como un ni�o tan naturalmente es un padre, viviendo la vida cristiana como �l la vive, comport�ndose como �l se comporta (en 1 Corintios 11:1 amplifica sus palabras como 'sean imitadores de m� como Yo soy de Cristo '. No se trata de que lo imiten solo para s� mismo). Comp�rese con Filipenses 3:17 ; 1 Tesalonicenses 1:6 ). Porque como medio de conversi�n les ha demostrado, al menos esto, que disfruta del poder de Dios. �Pueden los otros profesores decir lo mismo?

Aunque es posible que tengas diez mil tutores en Cristo. Paul b�sicamente est� diciendo que esos tutores cuestan dos por centavo. Cualquiera puede establecerse como tutor. Se agolpan alrededor por el privilegio de ense�ar a los corintios sus propias ideas profesando que es en el nombre de Cristo. El tutor esclavo ten�a la responsabilidad de los ni�os de una familia acomodada. �l los cuidar�a, los guiar�a, los llevar�a a la escuela a salvo, velar�a por su moral, les ense�ar�a buenos modales, etc. Pero fue f�cilmente reemplazado si resultaba ineficiente. El que estaba realmente preocupado por su bienestar era su padre. �l era permanente.

"Sin embargo, no tienes muchos padres". Este es el hecho del asunto. Los que realmente se preocupan por ellos son relativamente pocos. Aquellos que los han dado a luz han demostrado al hacerlo que Dios est� detr�s de ellos y que realmente les importa. No buscan "seguidores", sino que intentan llevarlos a Cristo. Los j�venes estudiantes jud�os que fueron entrenados en la Tor� por un maestro lo reconocer�an como un 'padre'.

Por tanto, Pablo debe ser visto como su padre, porque les trajo y les ense�� las tradiciones de Jes�s y la verdad de las Escrituras. Les predic� la palabra de la cruz. Los tutores casuales que buscan usurpar la autoridad del padre y buscan seguidores no deben considerarse al mismo nivel.

Jes�s tuvo que advertir a los rabinos sobre la b�squeda del t�tulo de 'Maestro' y a sus alumnos al llamarlos 'padre' ( Mateo 23:8 ). Ambos deb�an mirar a Dios como siervos de Dios. Paul no est� defendiendo tal cosa. Lo que est� haciendo es enfatizar su amorosa preocupaci�n y los eventos que han revelado que �l es verdaderamente su padre en Cristo Jes�s. Por tanto, que le oigan y miren a Cristo. Fue un mal d�a para la iglesia cristiana cuando los cristianos empezaron a mirar a los hombres como su "padre". Se interpuso entre ellos y Cristo.

'Mis amados hijos'. Es cuando Pablo siente m�s profundamente y habla con m�s fuerza cuando usa tales expresiones de cari�o ( 2 Corintios 6:13 ; G�latas 4:19 ).

"Te traje a nacer a trav�s del Evangelio". Pablo se ve a s� mismo como un padre que les da vida a trav�s de la predicaci�n del Evangelio con poder, lo que resulta en que nazcan de arriba por el Esp�ritu de Dios ( Juan 3:1 ; 1 Pedro 1:23 ) y reciban nueva vida en Cristo. ( Romanos 6:4 ; 2 Pedro 1:4 ).

�l es, por supuesto, su padre en un sentido secundario, porque fue el Padre mismo quien, por su propia voluntad, realmente los hizo nacer a trav�s de la palabra de verdad ( Santiago 1:18 ; 1 Pedro 1:3 ). Paul era simplemente el canal. Pero ese es el punto de Pablo, que �l, y solo �l, era el canal a trav�s del cual Dios revel� Su poder salvador, probando as� que �l era un verdadero canal del Esp�ritu.

Por tanto, les ruego que me imiten. Como hemos visto, 1 Corintios 11:1 agrega, 'como yo soy de Cristo'. Pero aqu� est� desafiando su voluntad de copiarlo, en lugar de la oposici�n. Eso al final ser� la prueba de su respuesta a sus palabras, y est� a punto de ponerlo a prueba en el cap�tulo 5. All� descubrir� si est�n dispuestos a copiarlo o no.

Versículos 14-21

Entonces, recuerden que �l los engendr� y que a trav�s de �l el poder de Dios fue y es revelado (4: 14-21)

Versículo 17

"Esta es la raz�n por la que te he enviado a Timoteo, mi hijo amado y fiel en el Se�or, quien te recordar� mis caminos que son en Cristo, as� como ense�o en todas partes en cada iglesia".

Es por su amor por ellos y porque es su padre espiritual que ahora les env�a a Timoteo. Note la comparaci�n y el contraste entre 'hijos amados' ( 1 Corintios 4:14 ) e 'hijo amado y fiel'. Comparaci�n porque quiere que tengan un sentimiento de compa�erismo con Timoteo, ya que todos han sido tra�dos a Cristo por Pablo, y contraste porque Timoteo se ha mantenido firme y conservado su fidelidad a la verdad, a diferencia de los corintios. Por lo tanto, est� verdaderamente "en el Se�or". De modo que Timoteo est� bien calificado para recordarles los 'caminos que son en Cristo' de Pablo.

Aqu� est� la pista definitiva de que sus caminos no est�n "en Cristo". Han elegido sus propios caminos, como �l ya ha se�alado, y lo volver� a se�alar en breve. Necesitan volver a los caminos de Cristo, los caminos de la humildad y la entrega, los caminos de la obediencia a la moral b�blica, los caminos ense�ados por Pablo en cada iglesia. Con estas palabras tambi�n deja en claro que Timoteo es su emisario de confianza.

Bien podr�an recordar la par�bola de Jes�s de la vi�a cuando el se�or que se hab�a ido envi� a su amado hijo a los trabajadores de la vi�a. Timoteo ha venido a hablar en su nombre, y habla en el nombre de Cristo.

El hecho de que Timoteo no est� incluido en el saludo inicial puede deberse a su juventud, o puede deberse a que no estaba all� con Pablo en ese momento. Es posible que Pablo le enviara dondequiera que estuviera y le pidiera que fuera a Corinto para representarlo.

Versículos 18-20

'Ahora algunos est�n hinchados como si no fuera a venir a ustedes. Pero ir� a ustedes en breve, si el Se�or quiere, y no conocer� la palabra de los engre�dos, sino el poder. Porque la Regla Real de Dios no est� en palabras, sino en poder. '

Ahora dirigi� su atenci�n a aquellos que parec�an pensar (y probablemente afirmaban) que hab�a abandonado a los corintios. Lo acusaron de ser un fugitivo y de que no volver�a. Bueno, estaban equivocados. En la voluntad de Dios, ten�a la intenci�n de acudir a ellos en breve, aunque, por supuesto, depend�a de la voluntad de Dios (compare 1 Corintios 16:7 ; Santiago 4:15 ), porque Pablo era un asistente de Cristo y no su maestro.

Y luego ver�a el poder que estos hombres que se envanec�an realmente ten�an en su ministerio. Porque al final no se trataba de palabras sino del poder de Dios. A trav�s de aquellos que fueron sus verdaderos siervos, Dios obra con poder, porque el reinado de Dios se revel� en poder ( Marco 9:1 ; Hechos 1:7 ; Hechos 3:12 ; Hechos 4:7 ; Hechos 4:33 ; Hechos 6:8 ) y continu� en el poder.

Esto incluir�a especialmente el poder, no en meras palabras, sino en la palabra de la cruz. Termina donde empez� Paul. Pero bien pudo haber tenido la intenci�n de que recordaran los milagros que Dios hab�a hecho a trav�s de �l. �Podr�an estos engre�dos hablar de lo mismo?

Est� claro que estos oponentes estaban usando cualquier t�ctica para desacreditarlo. Tambi�n trataron de degradarlo diciendo que usaba los dones que le hab�an dado para cuidar de sus propias necesidades, ponerse c�modo y tener suficiente tiempo libre ( 1 Corintios 9:3 ). Lo acusaron de malversaci�n de fondos y de tiempo cumplido.

De hecho, estaban difundiendo tantos rumores e insinuaciones que Paul sinti� que era necesario defenderse de la acusaci�n. Afortunadamente, ten�a la respuesta perfecta. Se ganaba la vida. Pero tambi�n deja en claro por deferencia a sus colegas que un soldado de Cristo en el campo tiene derecho a ser apoyado ( 1 Corintios 9:7 ). As� que Pablo no solo est� siendo cruel cuando habla del engreimiento. Se defiende de sus disgustos y les se�ala lo que realmente son, fanfarrones y mentirosos.

Algunos est�n inflados. Comp�rese con 1 Corintios 5:2 . Esto deja en claro que son buscadores de s� mismos, pero tambi�n es una preparaci�n para la sacudida que pronto les traer� a casa cuando se enfrente a una de las causas de su engreimiento. En 1 Corintios 8:1 dir� que 'el conocimiento se envanece'. Estos son algunos que est�n envanecidos por el conocimiento. Y esto les ha llevado a pensar demasiado en s� mismos. No ven nada bueno en nadie m�s que en ellos mismos.

No la palabra, sino el poder. Aqu� 'la palabra' representa su ense�anza. Pueden ser elocuentes. Sus palabras pueden estar bellamente juntas y parecer tener algo celestial y misterioso en su contenido. Pero, �son espiritualmente efectivos? Esa es la prueba. �Hacen santos a los hombres? En el pr�ximo cap�tulo demostrar� que ciertamente no es as�.

'La regla real de Dios'. Este es el gobierno actual de Dios entre Su pueblo, revelado en Su poderosa actividad y la vida espiritual y el servicio resultante. Comp�rese con Romanos 14:17 . Tenga en cuenta que aqu� la Regla Real de Dios est� espec�ficamente relacionada con la palabra de la cruz en poder. No tenemos derecho a separar 'el reino de Dios' del Evangelio.

Tenga en cuenta tambi�n que se expresa a trav�s del poder. Por lo tanto, se vincula con la idea de la palabra de la cruz en poder ( 1 Corintios 1:18 ).

En 1 Corintios 4:8 hab�a insinuado la afirmaci�n de estos oponentes de que eran gobernantes en las cosas celestiales y hab�a deseado sarc�sticamente que fuera cierto. Ahora deja claro que no es cierto. Carec�an del poder que suger�a que verdaderamente reinaban con Cristo bajo la Regla Real de Dios.

La referencia a la Regla Real de Dios es tambi�n una preparaci�n adicional para los Cap�tulos 5 y 6. Lo que se describir� all� est� muy relacionado con lo que se describe aqu�, y con la palabra de la cruz. La raz�n por la que pueden actuar como jueces dentro de la comunidad de la iglesia es porque la Regla Real de Dios est� aqu� y porque Dios ha hablado en t�rminos de la cruz.

Versículo 21

'�Qu� dese�s? �Vendr� a ti con vara, o con amor y con esp�ritu de mansedumbre?

As� que cierra esta secci�n dej�ndoles una opci�n. �Prefieren la severidad o el amor y la gentileza? Como padre preocupado, est� dispuesto a usar la vara de castigo ( Hebreos 12:5 compare con Proverbios 13:24 ; Proverbios 23:13 ) pero preferir�a venir con amor y mansedumbre.

Depende de ellos y depender� de c�mo respondan a su carta. La vara puede tener en mente 'la vara de hierro' ( Apocalipsis 2:27 ; Apocalipsis 12:5 ) como en Salmo 2:9 , 'el cetro de hierro' del juicio.

Este �ltimo se relacionar�a con su afirmaci�n de revelar la Regla Real de Dios en el poder. Pero el contexto sugiere m�s la vara correctora del padre. Quiz�s quer�a que algunos vieran a uno y otros al otro. Sin embargo, est� dejando en claro que preferir�a venir como padre, llegando con amor y gentileza para saludar a los ni�os receptivos. Algunos ven aqu� una referencia al Esp�ritu Santo, pero en vista del contraste, probablemente pretendemos verlo como una referencia al propio esp�ritu de Pablo.

Esto conduce inmediatamente al cap�tulo 5. Est� a punto de ejercer su autoridad paternal. Perm�tales considerar c�mo responder�n.

Información bibliográfica
Pett, Peter. "Comentario sobre 1 Corinthians 4". "Comentario de Pett sobre la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/pet/1-corinthians-4.html. 2013.