Bible Commentaries
Salmos 2

Pett's Commentary on the BibleComentario de Pett

Introducción

El primer salmo analiz� al justo y su relaci�n con Dios, indicando las bendiciones que le fluyeron de Dios. Este salmo analiza al Justo y su relaci�n con el hombre. Primero es necesario considerar el trasfondo de este Salmo porque se refiere primero al Rey de Israel. Lo describe como el ungido de YHWH, Su hijo adoptivo y como el futuro gobernante mundial. Pero al final tiene en mente al Gran Rey que est� por venir, Aquel que cumplir� toda la voluntad de YHWH.

Abraham fue llamado por Dios a dejar a su familia e ir a la tierra de Cana�n. Cuando lleg�, recibi� la primera de una serie de promesas. Parte de esa promesa fue que el mundo entero ser�a bendecido a trav�s de �l ( G�nesis 12:3 ). Esto se ampli� m�s tarde para incluir el hecho de que �l ser�a el padre de reyes que gobernar�an naciones ( G�nesis 17:6 ).

Y de hecho, en el pensamiento de aquellos d�as, la �nica forma en que un hombre podr�a bendecir al mundo entero ser�a gobern�ndolo. Por lo tanto, intr�nseco en estas promesas era que los descendientes de Abraham gobernar�an "el mundo".

Un indicio de esto se incluy� en G�nesis 49:10 y N�meros 24:17 , los cuales indicaban el gobierno de un imperio por parte de los descendientes venideros de Jud� / Israel. La idea era vaga pero estaba creciendo. Pensaban en t�rminos de su "mundo".

�xodo 19:6 habla de Israel convirti�ndose en un reino de sacerdotes y esto nuevamente requer�a que las naciones debieran mirar a Israel. Por lo tanto, Israel ten�a un sentido creciente del hecho de que un d�a ser�an llamados a actuar en nombre de Dios en el mundo tal como estaba a su alrededor.

Entonces los triunfos de David provocaron la esperanza del cumplimiento del sue�o. Y fue entonces cuando se escribi� este salmo. Tomarlo solo como la descripci�n de una disputa local es pasar por alto una serie de cosas. En primer lugar, la visi�n de Israel de s� mismo; en segundo lugar, el hecho de que David fuera poeta y rey, con todos los sue�os de un poeta; y en tercer lugar, que su ascenso mete�rico, as� como sus �xitos, era muy probable que provocara hambre por m�s.

A los ojos de la mayor parte de Israel, m�s tarde casi debi� parecer el rey del mundo. Ciertamente gobern� su "mundo" y los "mundos" circundantes con mano de hierro. Y esto probablemente habr�a parecido a�n m�s en el esplendor del reinado de Salom�n. Son una imagen (cuando se ven de manera idealista) del futuro Reino Real de Dios.

As� que David se regocij� en su privilegio de haber sido hecho ungido de YHWH, y exhorta a las naciones a someterse y entregarse a YHWH. Entonces y solo entonces vendr� la bendici�n mundial. Sin duda lo esperaba en su d�a, con los ojos del visionario, o en el peor de los tiempos de su hijo. Pero habl� mejor de lo que cre�a. Porque su cumplimiento esperar�a la venida de su Hijo Mayor, Jesucristo.

Despu�s de la ca�da de Salom�n, los profetas asumieron con fuerza esta idea de la realeza futura. A sus ojos, el colapso del reino no hab�a eliminado la posibilidad, solo la retras�. Aunque la realeza parec�a estar en declive, declararon que YHWH finalmente no podr�a fallar. Dios le hab�a prometido a David una realeza eterna. Entonces vendr�a un d�a un rey de la casa de David, investido con el Esp�ritu de Dios, que se convertir�a en el ejemplo perfecto de justicia y gobernar�a el mundo, con el resultado de que las naciones ser�an transformadas ( Isa�as 9:6 ; Isa�as 11:1 con 9-10; Salmo 32:1 ; Salmo 72 ; Ezequiel 37:24 ).

Por lo tanto, se consideraba que el continuo ideal del 'rey por venir' estaba destinado a gobernar las naciones, llevando la bendici�n prometida a Abraham a todas las familias de la tierra. Esta era su esperanza. Este era su sue�o. Y fue necesario para cumplir las promesas de Dios para el reinado y las promesas de Dios a Abraham. Entonces, cuando David no cumpli� con el ideal, la venida de un David m�s grande se convirti� en una certeza. Y fue ese sue�o el que estaba en la mente de la gente cuando se cant� este salmo durante los per�odos del primer y segundo templo y m�s all�.

En Hechos 4:25 el nuevo pueblo de Dios se refiere a las palabras iniciales de este salmo que dice: "El que por el Esp�ritu Santo, por boca de nuestro padre David, dijo". Luego refirieron el significado del Salmo a Jes�s. Vieron el salmo hablado por el Esp�ritu Santo a trav�s de David y cumplido en la venida de Jes�s, y especialmente en la resurrecci�n de Jes�s, el cumplimiento final del salmo.

Hab�a sido tratado abominablemente por todo el mundo, tanto rey como gobernador, tanto gentil como jud�o ( Hechos 4:27 ), pero finalmente hab�a sido puesto en el monte santo de Dios como el Ungido de YHWH ( Hechos 2:34 ).

El tiempo en que se escribi� el salmo probablemente no fue mucho despu�s de la visi�n de Nat�n de parte de Dios, declarada a David en 2 Samuel 7:8 . Podemos imaginar la impresi�n que esas palabras causaron en David cuando se vio a s� mismo como el ungido de YHWH, adoptado como Su hijo, como ser�an sus hijos despu�s de �l. As�, busc� expresar el ideal en poes�a.

Cada uno era 'ungido de YHWH', pero siempre esperando a Aquel que gobernar�a el Reino eterno ( 2 Samuel 7:13 ; 2 Samuel 7:16 ).

Aparentemente, tambi�n surgi� en un momento en que hab�a una rebeli�n a fuego lento entre las naciones tributarias. Posiblemente hubo noticias de un complot en marcha para rebelarse contra David. Pero no tuvo miedo, porque sab�a que era el ungido de YHWH. Sab�a que hab�a derrotado a los poderosos filisteos, apoder�ndose de su imperio ( 2 Samuel 8:1 ), e incluso en esa etapa, la visi�n posiblemente ya estaba creciendo en su mente de un imperio 'mundial' sobre el cual YHWH gobernar�a. Si pod�a derrotarlos, pod�a derrotar a cualquiera.

As� que en el salmo se�al� la certeza del triunfo de los favorecidos de YHWH, y advirti� a todos de lo que significar�a rebelarse contra �l y su Dios. De hecho, el poema podr�a haber sido enviado a los reyes de su imperio como una sutil advertencia de que estaba al tanto de los planes que estaban en marcha. Inevitablemente, se materializar�an ante cualquier signo de debilidad. Pero cuando se cantaba con regularidad dentro del Templo, significaba una expectativa por el sue�o, el sue�o del gran y piadoso rey de la casa de David que un d�a se levantar�a, con la ayuda y el poder de YHWH, para gobernar el mundo, cumpliendo as�. Visi�n de David.

El salmo comienza con las naciones y los gobernantes enfurecidos y tramando una rebeli�n contra YHWH y contra Su rey ungido. Contin�a con la burla de YHWH de su intento de derrocar a Su ungido. Luego declara a las naciones que este contra quien se rebelan es de hecho el 'hijo' de YHWH, adoptado por �l para que pueda gobernar el mundo y traer juicio sobre los enemigos de Dios. Y finalmente llama a las naciones a someterse a YHWH ya su hijo, terminando con las palabras �Bienaventurados todos los que en �l conf�an�.

Aunque posiblemente surja de una ocasi�n espec�fica, debemos recordar que esto es poes�a. Estaba destinado a ser cantado. Representaba la opini�n de David sobre la realeza dav�dica. Fue una visi�n del significado del gobierno del 'ungido de YHWH' que continuar�a a trav�s de generaciones, y fue su visi�n idealista de lo que lograr�a. David no solo se pensaba en s� mismo. Pens� en sus hijos y en los hijos de su hijo sobre un reino eterno, con todos los hombres sometidos a YHWH, como YHWH le hab�a prometido ( 2 Samuel 7:8 ). Se cumplir�a en el Hijo Mayor del gran David.

Versículos 1-3

Las naciones en rebeli�n contra YHWH y contra su Ungido

Salmo 2:1

'�Por qu� se enfurecen las naciones,

�Y la gente imagina algo vano?

Se pusieron los reyes de la tierra,

Y los gobernantes se re�nen en consejo,

Contra YHWH y contra su ungido. '

Diciendo: Rompamos sus ataduras,

Y echen de nosotros sus cuerdas.

La primera referencia es probablemente a una confederaci�n propuesta de naciones bajo su gobierno que planea derrocar al rey de Israel, el rey dav�dico, del cual el rey se hab�a enterado. David nunca estar�a al tanto de tales complots y planes Comenzaron desde el momento en que David tom� 'las riendas de la ciudad madre' (el derecho de gobernar a otros) de las manos de los filisteos y se apoder� de sus naciones s�bditas, que no lo hicieron. Sin embargo, quer�a intercambiar tributo a los filisteos con tributo a este advenedizo rey de Israel, y as� luch� por su libertad ( 2 Samuel 8:1 ).

Las tramas continuar�an en posteriores hervideros de rebeli�n de los que no se nos cuenta, tramas y planes que finalmente fracasaron. En todos los casos, ser�an vistos como un intento de evitar estar bajo el gobierno de YHWH.

Pero si es as�, se describe con palabras que miran m�s all� de las naciones locales a la situaci�n mundial de los sue�os de David. Si bien David pudo haber tenido en parte la situaci�n local en mente, tambi�n espera la visi�n m�s grande, la visi�n del mundo como se requiere para estar sujeto a YHWH y Su ungido. YHWH era Rey sobre toda la tierra ( G�nesis 18:25 ; 1 Cr�nicas 29:11 ; Salmo 22:28 ; Salmo 47:2 ; Salmo 47:7 ; Jeremias 10:10 ; Zacar�as 14:9 ).

Pero la gente no quer�a estar bajo su yugo. Quer�an ser libres para hacer exactamente lo que quer�an. De modo que vio al mundo en general tambi�n como un hervidero constante en su rebeli�n contra Dios. �l sab�a que no solo las naciones locales, sino todas las naciones del mundo ser�an llamadas alg�n d�a para estar sujetas a YHWH, pero planear�an una rebeli�n contra �l y, por lo tanto, necesitar�an ser sometidas a �l o ser tratadas sumariamente.

Esto demuestra la gran visi�n de David, y bien puede haber sido el resultado de los sue�os de David en ese momento. Posiblemente sinti� que ese era su destino, o el destino de su hijo a quien entregar�a un imperio poderoso, la sumisi�n mundial a YHWH. Su visi�n del imperio mundial no era por tanto totalmente ego�sta. Y habl� mejor de lo que cre�a. Porque, sin saberlo, habl� de Aquel que vendr�a como ungido de Dios, que de hecho ser�a rechazado y despreciado, pero que luego reclamar�a la sumisi�n del mundo a su Padre. Habl� del Se�or Jesucristo.

El estr�s est� en las naciones por estar en desacuerdo con YHWH. Las naciones se enfurecen (tiempo definido) porque no quieren estar en sujeci�n a �l. El pensamiento los enfurece. La gente sigue imaginando (tiempo indefinido) una locura al pensar que no tienen que obedecerle. Entonces fue as�. Es lo mismo hoy. Los hombres buscan deshacerse de Sus ataduras, no quieren que �l los ate.

Los reyes y gobernantes de la tierra tambi�n est�n involucrados. Ellos tambi�n buscan formas de escapar de las garras de YHWH. Intentan por todos los medios evitar Su gobierno. Est�n en enemistad con YHWH y con Su ungido. Constantemente se ponen (tiempo indefinido) en contra de �l y, por lo tanto, toman consejo juntos (tiempo definido) con esto en mente. El mundo y sus gobernantes est�n juntos en �l.

David bien pudo haberse visto as� como el supremo ungido de YHWH ( 1 Samuel 16:13 ; Salmo 89:20 ). Puso gran �nfasis en lo que significaba ser 'el ungido', elegido por YHWH. Por eso perdon� a Sa�l tan a menudo ( 1 Samuel 24:6 ; 1 Samuel 24:10 ; 1 Samuel 26:9 etc.).

Para �l, ser 'el ungido de YHWH', el elegido y llamado por YHWH y empoderado por �l, era el mayor privilegio que un hombre pod�a tener. Y conten�a en �l una visi�n del mundo. Por lo tanto, su negativa a someterse a �l fue en s� misma una se�al de su rebeli�n contra YHWH.

As� que vio en estas naciones locales, hirviendo en su rebeli�n, una imagen del mundo entero que no estaba dispuesto a someterse a Dios y a Su ungido, un mundo que quer�a conquistar, un mundo que deber�a someterse al gobierno de YHWH. Lo que no sab�a en ese momento era que su sue�o para s� mismo nunca se cumplir�a. Pero habr�a estado bastante contento de saber que se cumplir�a en sus descendientes y, si lo hubiera conocido, en el Ungido mayor que estaba por venir.

Entonces se reconoci� que una promesa de Dios era a menudo para un hombre y su descendencia, de modo que David estar�a satisfecho al pensar que lo que �l hab�a comenzado Otro lo tomar�a. Pero ellos tambi�n lo rechazar�an.�

'Contra YHWH y contra su ungido.' Casi podemos escuchar el tono escandalizado de David. Para David, los dos eran uno. El que fue ungido con aceite hab�a sido apartado como siervo de YHWH. �l era el ungido de YHWH y expresaba la voluntad de YHWH. As�, cuando las naciones se rebelaron contra el ungido de Dios, se rebelaron contra Dios ( 2 Reyes 19:22 ). Fue el mayor de los cr�menes, un crimen que solo merec�a juicio.

Y su mundo considerar�a constantemente la rebeli�n contra David. Dif�cilmente era posible mantener unido un imperio como el que �l gobernaba sin que fuera as�. Pero los intentos ser�an in�tiles. Los pondr�a en sujeci�n a sus pies, porque YHWH estaba de su lado. De manera similar, el mundo tambi�n rechazar�a al Ungido m�s grande, al David m�s grande, cuando �l viniera, a pesar de que �l vino como el pr�ncipe de paz.

De hecho, el Nuevo Testamento revela c�mo se enfurecieron constantemente contra �l. C�mo imaginaban cosas vanas contra �l. Los gobernantes se reunieron para tomar consejo contra �l, y 'reyes' como Herodes y Pilato se opusieron a �l. Todo esto deb�a cumplirse literalmente. Pero fue una causa desesperada. No pudieron deshacerse del Ungido de YHWH. Y ellos se enfurecen contra �l y todav�a se rebelan contra �l, y todav�a tratan de deshacerse de �l. Pero sus intentos son en vano.

"Rompamos sus ligaduras y echemos de nosotros sus cuerdas". Las naciones sometidas vieron el gobierno de David como un yugo colocado sobre bueyes listos para el uso del arado. Las bandas ataron el yugo a los bueyes para que no pudieran librarse de �l. Las cuerdas pueden haber sido similares a las riendas. Les irritaba ser guiados por las riendas de otra persona. Cuanto m�s conquistara David, m�s lo ser�a. Y las naciones no quer�an verse a s� mismas como bueyes.

Y hoy el mundo todav�a busca deshacerse del yugo de Dios y librarse de Sus riendas. Porque la verdad es que la obediencia siempre se puede ver de dos maneras. Uno como alegre obediencia a un Padre, el otro como sumisi�n a un tirano. Y esto �ltimo fue la vista aqu�.

El mundo siempre ve a Dios haciendo demandas demasiado grandes. No quieren someterse a �l ni a Su siervo ungido. Quieren estar libres de restricciones, libres de hacer lo que quieran. Quieren deshacerse de lo que ven como sus cadenas. As� que 'las ataduras' son lo que ata el yugo a las espaldas de los bueyes, y ellos no quieren estar sujetos a Su yugo. Las 'cuerdas' pueden verse como las riendas para dirigir a los bueyes, pero no quieren ser guiados por YHWH.

Y debido a que no pudieron atacar a YHWH directamente, atacaron a Su Ungido, y todav�a lo hacen. Es una iron�a que Aquel que ofrece la libertad perfecta sea acusado de traer cadenas y cuerdas. Pero as� es como ven sus demandas.

Versículos 4-6

Dios se reir� de la insensatez del hombre y exaltar� a su ungido.

'El que se sienta en los cielos se reir�,

El Se�or se burlar� de ellos,

Entonces les hablar� en su ira,

Y los atormenta en su doloroso disgusto ('ira ardiente').

�Sin embargo, he puesto a mi rey,

Sobre mi santo monte de Sion �.

Pero Dios se reir� de la locura del hombre al pensar que puede despedirlo. Porque a pesar de su oposici�n, como se describi� tan v�vidamente anteriormente, �l todav�a pondr� a Su Rey en Su santo monte de Sion. Es cierto que cuando el Rey se present� en Marco 11:1 y paralelos, fue rechazado por todos menos unos pocos, y una vez que lo crucificaron pensaron que se hab�an deshecho de �l, pero fue �l quien tuvo la �ltima risa, porque resucit� de entre los muertos, fue entronizado y aclamado en el cielo (p.

gramo. Hechos 2:36 ; Hechos 7:56 ; Efesios 1:19 ; Apocalipsis 5 ), y descendi� en Pentecost�s en viento y fuego para establecer Su derecho al gobierno real ( Hechos 2:1 ; comparar Mateo 28:18 ), el Esp�ritu Santo d�ndole testimonio ( Hechos 2:4 ).

En ese monte sagrado de Sion que Dios hab�a prometido, se manifest� su reinado. La Regla Real de Dios hab�a venido con poder ( Marco 9:1 ).

Versículos 7-9

'Declarar� el decreto de YHWH.

Me dijo: "T� eres mi hijo,

Hoy te he engendrado ".

P�deme y te dar� las naciones por heredad,

Y los confines de la tierra para tu posesi�n.

Los romper�s con vara de hierro,

Los har�s pedazos como vasija de alfarero ".

Y despu�s de que Jes�s fue bautizado como el representante del nuevo Israel ( Mateo 2:15 ), sali� del agua y se declar� el decreto de YHWH, 'T� eres mi Hijo, Mi Amado, en quien me complazco. '. Hab�a pasado su probaci�n con gran �xito y ahora estaba encaminado a cumplir el prop�sito de Dios para �l.

Y en el monte de la Transfiguraci�n se revel� su gloria real, con Mois�s por un lado y El�as por el otro, y de nuevo la voz celestial declar�: "Este es mi Hijo amado, esc�chalo" ( Marco 9:7 ). Y no tenemos por qu� dudar de que le pidi� a su Padre precisamente esto: que le diera las naciones por herencia y los confines de la tierra por posesi�n.

De hecho, se nos dice c�mo esto comenz� a suceder en Pentecost�s cuando hab�a hombres presentes 'de todas las naciones bajo el cielo' ( Hechos 2:5 ), y desde entonces hasta Hechos tenemos la descripci�n de c�mo triunf� hasta que por fin lleg� a Roma. mismo donde Pablo proclam� Su Regla Real y ense�� las cosas acerca de Jes�s ( Hechos 28:31 ).

Pero tambi�n hay otro aspecto del Rey, porque hay quienes se negar�n a aceptar Su gobierno, y Dios declara acerca de ellos: �Los romper�s con vara de hierro, los despedazar�s como una vasija de alfarero. " Porque �l ha encomendado todo el juicio a Su Hijo ( Juan 5:22 ), y aquellos que lo rechazan finalmente deben enfrentar su juicio.

Versículos 8-9

La oferta de Dios a su ungido.

P�deme y te dar� las naciones por heredad,

Y los confines de la tierra para tu posesi�n.

Los romper�s con vara de hierro,

Los har�s pedazos como vasija de alfarero ".

Aqu� queda clara la naturaleza generalizada de las promesas. A David se le promete que a �l ya su casa se le dar� el dominio mundial prometido a trav�s de Abraham. Las naciones ser�n bendecidas a trav�s de ellos y el mundo entero quedar� bajo su control. Los reyes siempre describieron sus conquistas en t�rminos de bendici�n bajo su gobierno benevolente, y a menudo las describieron como universales, pero ciertamente en la mente hay algo m�s extendido que unos pocos peque�os reyes locales. David recibe una visi�n de conquista generalizada. Pero primero habr� que conquistarlos, aunque luego Jes�s se�alar�a que debe ser con palabras.

P�deme y te dar� las naciones por heredad. La herencia original de Israel era la tierra prometida ( G�nesis 17:8 ; Deuteronomio 4:21 ; Deuteronomio 32:49 ), pero ahora la herencia se Deuteronomio 32:49 para el hijo adoptivo de YHWH.

Le dar� "las naciones" fuera de Israel. Eso luego se expande hasta llegar a "los confines de la tierra". Debe buscar mediante la oraci�n la expansi�n del gobierno de YHWH a todo el mundo conocido. �l no deb�a saber que su oraci�n se cumplir�a en Uno que no era un guerrero, ya que en todo el mundo la gente de todas las naciones se someter�a a Sus pies, dada a �l por el Padre como Su herencia ( Juan 6:37 ; Juan 6:39 ), como Su posesi�n ( Tito 2:14 ; 1 Pedro 2:9 ). �l pidi� y se le dio su herencia.

Los romper�s con vara de hierro. Esto puede indicar la gravedad del tratamiento. Golpeado y roto, no con un palo de madera, sino con una barra de hierro. O bien podr�a traducirse igualmente, 'los gobernar�s con cetro de hierro'. De cualquier manera, la idea es de un control severo, con todos los que se niegan a someterse con firmeza. El juicio vendr� sobre los rebeldes, ya sea una vez que sean derrotados o en el proceso de esa derrota. Porque siempre debemos recordar que gobernar tambi�n incluye juicio. Aquellos que no se sometan sufrir�n su ira.

La imagen de la vasija del alfarero bien puede tener en mente las vasijas que salen del horno de calidad inferior y son irreparables, y por lo tanto son deliberadamente aplastadas por el alfarero ( Jeremias 19:11 ; Isa�as 30:14 ).

Entonces lo que se exige es la sumisi�n, con la alternativa del juicio. Ambas im�genes son v�vidas y muestran el control f�rreo de Dios donde se necesita y sus juicios devastadores sobre aquellos que finalmente se niegan a someterse a su voluntad. Todos los hombres deben elegir entre la sumisi�n voluntaria o la barra de hierro

Las palabras se aplican m�s tarde espec�ficamente como Su destino al Jes�s glorificado en Apocalipsis 12:5 ; Apocalipsis 19:15 , y al pueblo de Dios perseguido en Apocalipsis 2:27 .

Ellos tambi�n participar�n de los juicios de Dios ( Mateo 19:28 ; 1 Corintios 6:2 ).

Versículos 10-12

El llamado a la respuesta.

'Ahora, pues, reyes, sed sabios,

Sean instruidos jueces de la tierra,

Sirve a YHWH con miedo,

Y regocijaos con temblor,

Besa al hijo para que no se enoje,

Y pereces en el camino,

Porque su ira se encender� r�pidamente.

Bienaventurados todos los que en �l conf�an.

�Se envi� este poema a ciertos reyes para tratar de lograr su sumisi�n incluso antes de que se rebelaran, un indicio de que �l sab�a de qu� se trataban sin ser demasiado directo? (Compare esta idea con Jueces 11:12 ). �O simplemente se cant� para sostener a su propia gente? No sabemos. Pero despu�s de describir la certeza de su �xito, requiere sumisi�n.

"Ahora, pues, reyes, sed sabios; sean instruidos jueces de la tierra". Pide a los reyes y sus concilios, y a otros responsables de la justicia (ver Salmo 148:11 ), que sean sensatos y acepten la reprensi�n. N�tese el �nfasis en los "dispensadores de justicia". A menos que doblen la rodilla, pronto se les har� justicia.

'Sabio' significa ser comprensivo, prudente, sensato. La palabra para "instruido" tiene dentro de s� la idea de disciplina. Que consideren sus caminos antes de que les sobrevenga un severo castigo debido a su rebeli�n propuesta.

Las palabras tambi�n ten�an en mente al mundo en general, quien a su vez se enfrentar�a a las demandas de YHWH. Que todos los reyes y gobernantes de todas partes tomen nota de sus palabras y se sometan a YHWH antes de que ellos tambi�n sean buscados para juicio. A todos los hombres se les aconseja de manera similar que consideren sus caminos. �Continuar�n con la rebeli�n o se someter�n a YHWH? Deben ser sabios, porque David ya ha revelado que se enfrentan a una fuerza invencible.

'Sirve a YHWH con temor, y regoc�jate con temblor.' Note que es YHWH a quien deben someterse. Esta es la opci�n positiva. El reconocimiento de la autoridad de Dios y un temor reverente de YHWH evidenciado por la sumisi�n al Ungido de YHWH. Esto adquiri� un nuevo significado cuando vino el humilde Rey y llam� a los hombres a someterse a Su ense�anza. Deb�an dejarse conquistar por Su palabra y estar bajo la Regla Real de Dios.

El 'regocijarse con temblor' indicaba la bendici�n que podr�an recibir a cambio de que reconocieran Su se�or�o. Si doblan la rodilla con miedo y asombro, prosperar�n bajo Su gobierno benevolente y les ir� bien. Podr�n regocijarse y tendr�n una buena raz�n para hacerlo. Esto tambi�n es cierto para aquellos que entran bajo la Regla Filipenses 2:10 de Dios (compare Filipenses 2:10 ). Ellos tambi�n deben 'temer al Se�or', y entonces su gozo ser� indescriptible.

Besa al hijo, no sea que se enoje y perezcas en el camino. Porque su ira se encender� r�pidamente '. La citaci�n es urgente. Deben besar los pies del ungido de YHWH en sumisi�n y reconocimiento de la singularidad de YHWH (comparar 1 Reyes 19:18 ; Oseas 13:2 donde los besos se dan a los �dolos), o donde sea que est�n, perecer�n. No hay tiempo que perder. En el tiempo se�alado, Su ira estallar�, y lo har� r�pidamente, sin m�s advertencia.

La misma advertencia sali� cuando el mayor Ungido de Dios camin� por la tierra. No solo ofreci� misericordia a aquellos que se sometieran, recibieran sus palabras y lo siguieran, sino que tambi�n advirti� del juicio venidero para aquellos que se negaran a hacerlo, un juicio que se revela v�vidamente en Apocalipsis 19:11 . Los hombres deben estar bajo la Regla Real de Dios o bajo Su ira ( Juan 3:36 ).

Besa al hijo. Si el texto es correcto, es un uso muy inusual. La palabra para 'hijo' no es el hebreo 'ben' como en Salmo 2:8 sino el arameo 'bar'. El �nico otro uso de este �ltimo, aparte de las secciones arameas del Antiguo Testamento, est� en Proverbios 31:2 (tres veces) en un contexto donde hay otros arame�smos.

Pero ese uso advierte contra descartarlo con demasiada facilidad. Su uso puede ser deliberado aqu� para enfatizar la expansi�n de su mensaje al mundo entero. En Salmo 2:8 el 'hijo' (ben) es adoptado como el elegido de Israel, pero aqu� �l es el 'hijo' del mundo (bar), ofreci�ndose a s� mismo al mundo. El mundo en general y no solo Israel deben reconocerlo como el hijo de YHWH, 'salvo YHWH' as� como 'ben YHWH'.

Esto es a�n m�s significativo cuando se aplica al gran David. Hab�a venido para ofrecerse tanto a jud�os como a gentiles, al mundo entero, y todos fueron llamados a besar sus pies.

En lugar de "besar al hijo", la LXX tiene "aferrarse a la instrucci�n" y el Targum "recibir instrucci�n". Pero estos pueden haber surgido como una par�frasis, en parte como resultado del problema anterior, para evitarlo, y posiblemente porque no les gust� que la palabra 'bar' se aplicara a David.

Para que no se enoje. El verbo que se usa aqu� se usa en otros lugares solo para referirse a la ira de Dios. Por lo tanto, el '�l' aqu� es YHWH, enojado al pensar en el rechazo de Su ungido.

Y pereces en el camino. Eso es antes de que alcance su objetivo. Sus planes nunca se cumplir�n. Esto puede tener en cuenta las fuerzas rebeldes que ser�n cortadas mientras se encuentran en el camino para encontrarse con los ungidos de YHWH en la batalla, pero tambi�n podr�a ser para enfatizar que el juicio de Dios tomar� desprevenidos a todos los rebeldes del mundo mientras se ocupan de los asuntos de la vida. Comp�rese con Mateo 24:40 .

"Bienaventurados todos los que conf�an en �l". Pero para aquellos que respondan positivamente, habr� una gran bendici�n. Porque �l los velar� y proteger� y har� prosperar sus caminos (comparar 2 Reyes 18:31 ), porque su confianza est� en �l. As� como Abraham crey� en YHWH y se lo cont� por justicia ( G�nesis 15 ), e Israel de anta�o qued� bajo Su protecci�n cuando los llam� a �l en el pacto en el Sina�, y ellos respondieron, as� lo har�n todos en el mundo entero. los que le responden quedan bajo Su protecci�n y bendici�n. Entonces, este gran salmo finalmente apunta al triunfo final de YHWH.

Una meditaci�n.

Si bien est� muy arraigado en el entorno de la �poca, este Salmo tambi�n puede verse como claramente apuntando hacia Nuestro Se�or, Jesucristo. Y as� es, sin duda, c�mo se ve�a en el Nuevo Testamento. Se cita en Hechos 4:24 con referencia a la actitud de los jud�os hacia �l, por no hablar de las referencias a ella en las palabras pronunciadas en el bautismo y transfiguraci�n de Jes�s ( Marco 1:11 ; Marco 9:7 ; Lucas 3:22 ; Lucas 9:35 ; Mateo 3:17 ; Mateo 17:5 ). Por tanto, ahora lo consideraremos desde este punto de vista.

Información bibliográfica
Pett, Peter. "Comentario sobre Psalms 2". "Comentario de Pett sobre la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/pet/psalms-2.html. 2013.