Bible Commentaries
Proverbios 20

Comentario del Pobre Hombre de HawkerComentario del Pobre Hombre

Versículos 1-6

El vino es un burlador, las bebidas alcoh�licas se enfurecen; y todo aquel que en ella se enga�a, no es sabio. El temor del rey es como el rugido de un le�n; el que lo provoca a ira, peca contra su propia alma. Es un honor para el hombre cesar en la contienda, pero todo necio ser� entrometido. El perezoso no arar� a causa del fr�o; por tanto, comenzar� la siega, y no tendr� nada. El consejo en el coraz�n del hombre es como agua profunda; pero el hombre entendido lo sacar�. La mayor�a de los hombres proclamar�n a cada uno su propia bondad: pero un hombre fiel, �qui�n puede encontrar?

Cuando se hace la pregunta, d�nde se encuentra un hombre fiel, la respuesta es directa. Hay un amigo que ama en todo momento y un hermano nacido para la adversidad. Proverbios 17:17 . �Precioso Jes�s! en verdad eres un amigo, porque te has mostrado muy amistoso.

Versículos 7-9

El justo anda en su integridad; sus hijos son bienaventurados despu�s de �l. El rey que se sienta en el trono del juicio dispersa todo mal con sus ojos. �Qui�n puede decir: He limpiado mi coraz�n, soy puro de mi pecado?

Haga una pausa, lector, sobre esta solemne pregunta. �Qui�n puede decir esto? Ning�n hombre. Pero todo el mundo deber�a decir: L�mpiame, oh Se�or, de las faltas secretas. Salmo 19:12 .

Versículos 10-12

Diversos pesos y diversas medidas, ambos son igualmente abominables al SE�OR. Incluso un ni�o es conocido por sus obras, si su trabajo es puro y si es correcto. El o�do que oye y el ojo que ve, ambos ha hecho Jehov�.

�Qu� dulce pensamiento surge de este relato, que es el Se�or quien ha dado vista a los ojos y o�do a los o�dos! �Y no fue Jes�s ungido por el Esp�ritu para predicar el evangelio a los pobres, sanar a los quebrantados de coraz�n y dar vista a los ciegos? Isa�as 61:1 ; Lucas 4:18 .

Versículos 13-24

No ames el sue�o, no sea que te empobrezcas; abre tus ojos, y te saciar�s de pan. No es nada, es nada, dice el comprador; pero cuando se va, entonces se jacta. Hay oro y multitud de rub�es, pero los labios del conocimiento son una joya preciosa. Toma su manto que es fianza para un extra�o, y toma prenda de �l por una mujer extra�a. El pan de enga�o es dulce al hombre; pero despu�s su boca se llenar� de grava.

Todo prop�sito es establecido por el consejo: y con un buen consejo, haz la guerra. El que anda como chismoso revela secretos; por tanto, no te entrometas con el que lisonjea con los labios. Al que maldice a su padre oa su madre, su l�mpara se apagar� en la oscuridad. Una herencia puede obtenerse apresuradamente al principio; pero su fin no ser� bendito. T� no digas que pagar� el mal; pero espera en el SE�OR, y �l te salvar�. Los buceadores de pesas son abominaci�n al SE�OR; y un falso equilibrio no es bueno. Los caminos del hombre son del SE�OR; �C�mo puede entonces un hombre comprender su propio camino?

Nada puede ser m�s importante de saber, ni de tener una concepci�n correcta, que todas nuestras misericordias, tanto en la obra de preparaci�n como en la realizaci�n de la obra, son del Se�or. No est� en el hombre que camina dirigir sus pasos. Jeremias 10:23 . Y de todas las benditas lecciones que se nos ense�an por gracia, esta es una de ellas, que se descubre nuestra incapacidad y se da a conocer claramente la conveniencia de recibir la fuerza del Se�or.

Versículos 25-30

Es una trampa para el hombre que devora lo sagrado y, despu�s de jurar, indagar. El rey sabio esparce a los imp�os y hace que la rueda los derribe. El esp�ritu del hombre es la luz del SE�OR que escudri�a todo el interior del vientre. Misericordia y verdad guardan al rey, Y su trono est� sostenido por la misericordia. La gloria de los j�venes es su fuerza, y la hermosura de los ancianos, las canas. El azul de una herida limpia el mal; as� azota las entra�as del vientre.

Bajo las diversas im�genes aqu� representadas, el sabio pretende hacer valer la importancia infinita de las m�ximas que ven�a planteando y la felicidad de quienes las siguen.

Versículo 30

REFLEXIONES.

Espero que el Lector recopile constantemente dulces instrucciones de esta parte de la palabra de Dios; y en nada m�s que en el descubrimiento de su propia incompetencia para adentrarse en la aprehensi�n de las cosas divinas. Entre las mejoras de la gracia, esta es eminente, aprender, cuanto m�s avanzamos, mayor es nuestra ignorancia. Si en alg�n momento no encontramos el dulce sabor en la lectura de las Escrituras como hasta ahora, la conciencia de los placeres pasados ??deber�a convertirse en el entusiasmo de las expectativas futuras.

Si hemos sabido que el nombre de Cristo ha sido precioso, el dulce olor de su nombre deber�a dejar ahora una fragancia; como un rico perfume, que aunque se quita la cosa en s�, los efectos permanecen. Y aunque no vemos a Cristo, las experiencias pasadas deber�an avivar los deseos presentes. Los caminos del hombre (dice Salom�n en este cap�tulo) son del Se�or. �Estoy esperando alguna visita renovada de Cristo? �Estoy anhelando su regreso, esper�ndolo, busc�ndolo? �No es este mismo marco el estado en el que Jes�s prepara a su pueblo para la renovaci�n de su amor? Es m�s, �no hay en este mismo deseo y expectativa de su venida un goce presente en ese deseo y expectativa? Seguramente todo esto obra en un mismo esp�ritu, repartiendo a cada hombre individualmente como quiera.

�Bendito Se�or! conc�deme un dulce aroma de los placeres pasados, en ausencia de la comuni�n presente; y cuando no tenga una vista inmediata de tu gloria y las dulces comunicaciones de tu amor; que mi oraci�n, despertada por tu gracia, sea a�n la oraci�n de la iglesia; ll�vame y correremos tras de ti hasta que me lleves a tus aposentos.

Información bibliográfica
Hawker, Robert, D.D. "Comentario sobre Proverbs 20". "Comentario del Pobre Hombre de Hawker". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/pmc/proverbs-20.html. 1828.