Bible Commentaries
1 Corintios 4

Comentario de Benson del Antiguo y Nuevo TestamentoComentario de Benson

Versículo 1

Deja que un hombre , etc. Habiendo advertido a los creyentes en Corinto que no tengan una estima indebida por sus propios ministros, ahora procede a mostrarles en qu� luz deben ver a todos los verdaderos ministros de Cristo: y no sea que, de lo que se avanz� en los cap�tulos anteriores acerca de la inspiraci�n de los ap�stoles por el Esp�ritu Santo, estos corintios deber�an imaginar que Pablo reclamaba para s� mismo y sus hermanos una autoridad no derivada de Cristo, aqu� les dice que incluso los ap�stoles eran s�lo siervos de Cristo; obligado en todo a obrar en completa sujeci�n a �l y en obediencia a su voluntad. As� que cuenta de nosotros como de los ministros de Cristo La palabra original, ????????, significa propiamente a los sirvientes que trabajaban en el remo en embarcaciones de remo y, en consecuencia, insin�a los dolores que todo fiel ministro de Cristo sufre en la obra de su Se�or.

�Oh Dios! �D�nde se encuentran estos ministros? �Se�or, t� lo sabes! y administradores de los misterios de Dios. Dispensadores de las misteriosas verdades del evangelio. �El ap�stol da a aquellas doctrinas, que en �pocas pasadas se hab�an mantenido en secreto, pero que ahora fueron descubiertas a todos mediante la predicaci�n del evangelio, el apelativo de los misterios de Dios , para recomendarlas a los corintios. Y se llama a s� mismo el administrador de estos misterios, para dar a entender, que las doctrinas m�s profundas, as� como los primeros principios del evangelio, le fueron confiados para ser impartidos o dados a conocer �. Macknight.

Versículos 2-5

Adem�s, en cuanto a lo que queda por hacer en el desempe�o de este cargo; se exige a los mayordomos, ya que tambi�n ellos, as� como los sirvientes inferiores de la familia, est�n sujetos a rendici�n de cuentas; que un hombre sea hallado fiel para que act�e de acuerdo con su comisi�n, y no niegue ning�n privilegio o parte de la voluntad de Dios del pueblo; ni entregar sus propias nociones como la voluntad de Dios, ni tomar sobre �l m�s autoridad de la que Dios le ha dado; como tambi�n que descubre y comunica las verdades y bendiciones divinas a medida que los oyentes pueden recibirlas. Para m� es una cosa muy peque�a. Una cosa que me preocupa muy poco; para que yo sea juzgado por ti ??? ????????, para que sea examinado, como la palabra propiamente significa, a saber, para ser juzgado, o para que se dicte sentencia judicial, que es evidentemente el significado de la misma palabra en la �ltima cl�usula del vers�culo; o del juicio del hombre Un juicio dictado por cualquier hombre, aunque de la manera m�s solemne.

La expresi�n original, ?????????? ??????, es literalmente d�a humano; es decir, del juicio, en alusi�n al gran d�a del juicio. S�, no me juzgo a m� mismo. Es decir, finalmente, infaliblemente, definitivamente: mi estado final no lo determinar� mi propio juicio. Porque no s� nada por m� mismo, no soy consciente de haber hecho algo malo, o de infidelidad o negligencia en el desempe�o de mi ministerio; sin embargo, �no soy yo por la presente justificado Absuelto de toda falta a los ojos de Dios, que observa aquellas faltas en nosotros que no podemos discernir por nosotros mismos? porque � qui�n puede comprender sus errores?

Salmo 19:12 : o, no dependo de mi propia conciencia para no condenarme, como suficiente justificaci�n de m� mismo ante los ojos de Dios; pero el que me juzga es el Se�or. Por su sentencia debo estar en pie o caer. Por tanto, no juzgu�is nada antes del tiempo se�alado para juzgar a todos los hombres; hasta que venga el Se�or para juzgar al mundo con justicia; qui�n para emitir un juicio justo, que de otro modo ser�a imposible; sacar� a la luz lo oculto de las tinieblas, lo cubierto con el velo de la oscuridad impenetrable, y manifestar� los consejos del coraz�n, las fuentes de acci�n m�s secretas, los principios y las intenciones de todo coraz�n:y entonces todo hombre que sea sincero, fiel y digno de alabanza; tenga alabanza de Dios tanto elogio como recompensa.

Versículos 6-7

Y estas cosas se mencionan 1 Corintios 1:10 , & c., 1 Corintios 3:4 , & c .; Me he transferido en una figura muy obviamente a m� mismo ya Apolos y Cefas, en lugar de nombrar a esos predicadores particulares en Corinto, a quienes usted est� tan apegado; para que aprend�is en nosotros de lo que se ha dicho acerca de nosotros; no pensar en ning�n hombre por encima de lo que est� escrito aqu� o en otro lugar, en la palabra de Dios; es decir, por encima de lo que garantiza la Escritura; No poner un valor m�s alto sobre ninguno de sus maestros, o sus dones y habilidades, que lo que he expresado, 1 Corintios 3:6, conforme a las Escrituras; es decir, que son s�lo instrumentos en la mano de Dios, y que todo el �xito de sus labores depende de su bendici�n. As�, este gran ap�stol, despoj�ndose de todo honor y asumiendo el car�cter sencillo de un siervo de Cristo , ense�� a los jefes de la facci�n a dejar de lado su jactancia y a comportarse con modestia, especialmente como todos los maestros de Corinto. no hizo nada m�s que edificar sobre el fundamento que hab�a puesto, y no ejercieron ning�n don espiritual excepto el que hab�an recibido, ya sea a trav�s de �l o de alg�n otro ap�stol.

Que ninguno de ustedes se envanezca el uno contra el otro. Que no se valoren por su relaci�n o dependencia de un maestro m�s que de otro, magnificando as� a uno y vilipendiando a otro. Porque �qui�n te distingue en dones o gracias? �O qui�n te ha hecho avanzar tanto en sabidur�a y juicio por encima de todos los dem�s creyentes, como para que puedas, por tu propia autoridad, poner a un maestro por encima de otro? �Qu� tienes que no hayas recibido de Dios, que tambi�n ha dado tanto a otros? �T�, que no hayas recibido de Dios, que tambi�n ha dado a otros tanto? �Por qu� te glor�as o te jactas del inmerecido don de su generosa bondad? como si no lo hubieras recibido? �Como si lo tuvieras originalmente de ti mismo?

Versículo 8

Ahora est�is llenos. Los corintios abundaban en dones espirituales; y tambi�n los ap�stoles. Pero los ap�stoles, por continuas necesidades y sufrimientos, fueron preservados de la autocomplacencia. Los corintios no sufrieron nada; y teniendo en abundancia todas las cosas, se complacieron y se aplaudieron a s� mismos. Y eran como ni�os que, al ser criados en el mundo, desprecian a sus pobres padres. Ahora est�is llenos , dice el ap�stol, en una hermosa gradaci�n; sois ricos; hab�is reinado como reyes Una expresi�n proverbial, que denota las circunstancias m�s espl�ndidas y abundantes; sin nosotros Es decir, sin pensar en nosotros; o, por el ministerio de sus propios maestros, sin nuestra ayuda. Y quisiera por Dios que reinarasEn el mejor sentido: Ojal� hubieras alcanzado una eminencia de gracia y santidad as� como de dones; para que nosotros tambi�n reinemos contigo, no tengamos m�s dolor en tu cuenta.

Versículo 9

Porque Dios nos ha presentado a los ap�stoles ya todos los ministros fieles; por �ltimo, por as� decirlo , alude a los espect�culos teatrales romanos, en los que esas personas aparec�an en �ltimo lugar en el escenario, ya fuera para luchar entre s� o con las fieras, que se dedicaban a la muerte; de modo que si escapaban un d�a, los sacaban una y otra vez, hasta que los mataban. Porque, de un pasaje de las Ep�stolas de S�neca, citado por Whitby, parece que por la ma�ana esos criminales, a quienes dieron la oportunidad de escapar con vida, lucharon con las fieras armadas. Pero por la tarde los gladiadores pelearon desnudos, y el que escap� solo fue reservado para el matadero para otro d�a; para que bien pudieran llamarse ????????????,personas condenadas a muerte. �Al comparar a los ap�stoles con estas personas devotas, Pablo nos ha dado un cuadro fuerte y conmovedor de los peligros que los ap�stoles encontraron en el curso de su ministerio; peligros que finalmente resultaron fatales para la mayor�a de ellos.

Sus trabajos y sufrimientos fueron mayores que los de los antiguos profetas ". Un espect�culo para el mundo, para los �ngeles y para los hombres �Por los �ngeles , para quienes los ap�stoles fueron un espect�culo, algunos entienden a los �ngeles malignos, que se supone que se deleitan en la sangre de los m�rtires. Otros comprenden a los �ngeles buenos, a quienes la fe y la constancia de los ap�stoles alegraron mucho. Probablemente ambos estaban destinados. Porque debe haber animado a los ap�stoles al combatir con sus perseguidores, pensar que estaban defraudando la malicia de los esp�ritus malignos, mientras alegraban a los �ngeles en el cielo y a los hombres buenos en la tierra, por la fe, la paciencia y la fortaleza, que estaban ejerciendo en una causa tan noble ". Macknight.

Versículos 10-13

Somos tontos en la cuenta del mundo, por amor a Cristo porque nos exponemos a tantos peligros y sufrimientos por su causa; o porque predicamos las verdades claras del evangelio, y afirmamos cosas tan elevadas de uno que fue crucificado como un malhechor. Pero sois sabios en Cristo. Aunque sois cristianos, os cre�is sabios; y hab�is encontrado la manera de hacer que el mundo piense as� tambi�n; o, pens�is que hab�is descubierto una manera de obtener las bendiciones del evangelio y escapar de sus inconvenientes y persecuciones. Somos d�biles en presencia, en enfermedades y en sufrimientos; pero vosotros sois fuertes en circunstancias opuestas. Eres honorableAdornado con dones extraordinarios, en los que est�is listos para la gloria, y algunos de vosotros aparec�is en circunstancias de distinci�n exterior; pero somos despreciados, tratados con desprecio dondequiera que venimos. O se puede considerar que el ap�stol en este vers�culo repite ir�nicamente las cosas que sus enemigos en Corinto dijeron de �l, y que les atribuye, con el mismo esp�ritu de iron�a, las cualidades contrarias.

Incluso hasta esta hora presente No solo en nuestra primera entrada a nuestra oficina, cuando todo el mundo estaba en contra del cristianismo, pero a�n as�, aunque muchos miles se han convertido; tenemos hambre y sed , etc. Est�n desprovistos de la comida y la ropa necesarias, y est�n expuestos a necesidades de todo tipo. �Qui�n puede imaginar un triunfo m�s glorioso de la verdad que el que se obtiene en estas circunstancias? Cuando Pablo, con un impedimento en su habla, y una persona m�s despreciable que elegante, apareci� con un vestido mezquino, tal vez andrajoso, ante personas de la m�s alta distinci�n, y sin embargo, llam� tanto la atenci�n, �y les dej� impresiones tan profundas! Siendo injuriados, bendecimos, sufrimos, suplicamos No devolvemos injurias, persecuciones, difamaciones; nada m�s que bendici�n,Somos hechos como la inmundicia del mundo, y la limpieza de todas las cosas. Tales eran esos pobres infelices entre los paganos, que fueron tomados de la escoria del pueblo para ofrecerlos como sacrificios expiatorios a los dioses infernales. Fueron cargados de maldiciones, afrentas y ofensas, todo el camino hasta los altares. Y cuando las cenizas de esos infelices hombres fueron arrojadas al mar, esos mismos nombres se les dieron en la ceremonia.

Versículos 14-16

No escribo estas cosas para avergonzarlo p�blicamente para deshonrarlo y manchar su cr�dito con otras iglesias; pero como mis amados hijos, les advierto que les muestren de una manera suave y tierna lo que est� mal en su conducta, y les recuerden su deber. Es con admirable prudencia y dulzura que el ap�stol a�ade esto, para evitar cualquier interpretaci�n descort�s de sus palabras. Porque aunque tengas diez mil instructores para avanzar en el conocimiento de Cristo; pero no ten�is muchos padres; para convertiros a Cristo; porque en Cristo Jes�s, por su bendici�n sobre mis trabajos; Yo te engendr� por medio del evangelio He sido el primer instrumento de tu conversi�n.

Esto excluye, no solo a Apolos, su sucesor, sino tambi�n a Silas y Timoteo, sus compa�eros. Y la relaci�n entre un padre espiritual y sus hijos trae consigo una cercan�a y un afecto inexpresables. Sed seguidores de m� en ese esp�ritu y comportamiento que he declarado tan ampliamente.

Versículo 17

Por esta causa, para que puedas seguir mejor mis pasos y te animes a hacerlo con mayor cuidado; Os he enviado a Timoteo, mi hijo amado, a quien amo con todo un cari�o paternal, como si fuera mi hijo, 2 Timoteo 1:2 . En otros lugares lo llama hermano , pero aqu� tiene lugar el cari�o paterno. Y fieles en el Se�or en la obra del Se�or ( Filipenses 2:20 ,) y en su ayuda; quien os recordar� mis caminos Mi curso cristiano de vida para que los imites, 1 Corintios 4:16 . Como ense�o en todas partesSeg�n el tenor constante de mi predicaci�n. Con respecto al env�o de Pablo a Timoteo a Corinto, el caso parece haber sido el siguiente: el gran �xito con el que el ap�stol predic� en �feso, habi�ndolo inducido a permanecer un tiempo m�s all�, despu�s de enterarse de las disensiones en Corinto, lo juzg� apropiado. enviar a Timoteo y Erasto a Macedonia, (de la cual se hace menci�n en Hechos 19:22 ) para aprender c�mo estaban las cosas en Corinto.

Y si, sobre la base de la informaci�n que recibieron, juzgaran que su presencia ser�a �til para componer los desacuerdos entre los corintios, deb�an seguir adelante e intentarlo, poni�ndolos en memoria de la doctrina y la pr�ctica del ap�stol. Sin embargo, aparece en 1 Corintios 16:10 , donde dice, si Timoteo ven�a , que no estaba seguro de si iba a Corinto o no.

Versículos 18-21

Ahora algunos se envanecen, se vuelven insolentes; como si no viniera a censurarlos por su mala conducta ya reformar los abusos; imaginando que, por haber enviado a Timothy, no voy a venir yo mismo, por tener miedo de aparecer en un lugar donde tengo tantos opositores. El ap�stol vio, con una luz divina, los pensamientos que surgir�an en sus corazones. Pero ir� a ti en breve. As� se propuso en esp�ritu,

( Hechos 19:21 ,) con la intenci�n de tomar Macedonia en su camino; si el Se�or Quien nos gu�a en todos nuestros viajes, Hechos 16:7 ; G�latas 2:2 ; y sabr� Considerar, examinar y descubrir; no el discurso de los engre�dos Su enga�osa profesi�n de religi�n y vana ostentaci�n de conocimiento y elocuencia; pero el poder Cu�nto del poder de Dios asiste a las ministraciones de aquellos que se encargan de ense�ar, y cu�nta piedad verdadera y vital se encuentra en sus disc�pulos. Por el reino de Dios Religi�n real y genuina, Romanos 14:17 ; no esta en palabraNo consiste en profesiones vac�as y vanagloriaciones, ni en pronunciar discursos elegantes y elocuentes; sino en el poder , es decir, el poder de Dios, que crea a los hombres de nuevo y gobierna sus corazones y vidas en el temor y el amor de Dios y en la obediencia a su santa voluntad.

�Qu� quer�is ? Qu�, en general, dese�is? �Vendr� a vosotros con vara para castigar con el ejercicio de mi poder apost�lico? �Me obligar�s, persistiendo en tus disensiones y des�rdenes, a venir con este esp�ritu y con este prop�sito? �O con amor, y un esp�ritu de mansedumbre, elogiando y consolando, en lugar de castigar? �Enmendar�s tus caminos y reformar�s lo que est� mal, para que yo sea bondadoso y gentil contigo? El ap�stol, al hablar de venir con vara, alude al poder que �l y los otros ap�stoles pose�an de castigar a los ofensores obstinados mediante milagros. Porque a menudo ten�an un poder tan milagroso, que se extend�a incluso en algunos casos de ofensa agravada a infligir la muerte temporal, aparece en varios otros pasajes de la Escritura; (ver Hechos 5:5 , & c .; Hechos 13:10 ; Hechos 13:10 13:14; 1 Timoteo 1:20 ;) y se menciona m�s de una o dos veces en estas ep�stolas a los Corintios; (como 1 Corintios 5:5 ; 2 Corintios 1:23 ; 2Co 10: 6; 2 Corintios 10:8 ; 2 Corintios 13:2 ; 2 Corintios 13:10.) Y aqu� vemos la sabidur�a de la Providencia al permitir que tal oposici�n surja contra S.

Paul, particularmente en Corinto; ya que le dio la oportunidad de hacer las apelaciones m�s fuertes a lo que sab�an de su poder milagroso; apelaciones que, si no hubieran estado realmente fundadas en la verdad m�s cierta y evidente, debieron, en lugar de devolverlo a sus miradas, (como encontramos de hecho lo hicieron), haber sido suficientes por s� mismas para haber arruinado toda su reputaci�n y inter�s entre los corintios, si antes hubiera sido tan grande.

Información bibliográfica
Benson, Joseph. "Comentario sobre 1 Corinthians 4". Comentario de Benson. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/rbc/1-corinthians-4.html. 1857.