Bible Commentaries
1 Corintios 6

Comentario de Benson del Antiguo y Nuevo TestamentoComentario de Benson

Versículos 1-6

El ap�stol, tras mencionar una gran irregularidad entre los profesores del cristianismo en Corinto, procede ahora a animadvert sobre otra, es decir, su entrada en trajes de ley entre s� en los tribunales paganos: Osa alguno de vosotros que tienen tan poco respeto por la gloria de Dios, y el m�rito del cristianismo, que, teniendo un asunto contra otro Cualquier controversia sobre asuntos civiles; que ir a juicio delante de los injustos jueces paganos, que en general eran muy corruptos, y de los cuales un cristiano podr�a esperar ni justicia: y no delante de los santos �Qui�n puede decidir f�cilmente estas diferencias peque�as en forma privada y agradable. No sabesEsta expresi�n aparece seis veces en este solo cap�tulo, y eso con una fuerza peculiar: porque los corintios sab�an y se gloriaban en su conocimiento, pero su conducta no era consistente con �l. Que los santos Despu�s de haber sido juzgados ellos mismos; juzgar�n al mundo. Ser�n asesores con Cristo en el juicio en el que condenar� a todos los imp�os, as� como a los �ngeles como a los hombres, Mateo 19:28 ; Apocalipsis 20:4 .

Y si el mundo es juzgado por vosotros, �sois indignos , ineptos, incapaces para tal obra? para juzgar los asuntos m�s peque�os Diferencias acerca de los asuntos mundanos, que son de poca importancia, en comparaci�n con los asuntos espirituales y celestiales. �No sab�is que juzgaremos a los �ngeles? A saber, �ngeles malignos: como Cristo es su juez, tendremos el honor de unirnos a �l en ese juicio tambi�n, cuando todos sus enemigos ser�n puestos bajo sus pies y los nuestros. �Cu�nto m�s est�is en condiciones de decidir en estos asuntos seculares bajos y transitorios? Entonces, si ten�is juicios Diferencias por decidir; de las cosas pertenecientes a esta vida, ponlos a juzgar a quienes son menos estimados en la iglesiaIncluso los m�s d�biles de ustedes podr�an ser adecuados para ese trabajo, y ciertamente m�s aptos para ello que los paganos injustos. Hablo de tu verg�enza Para avergonzarte de tus actos. Ciertamente, el ap�stol no se propuso seriamente que pusieran personas para juzgar en estos asuntos (aunque de poca importancia, en comparaci�n con las cosas espirituales) que eran los m�s d�biles y de menor estima entre ellos, como aparece en la cl�usula siguiente; pero habl� ir�nicamente.

�Es as� que no hay un sabio entre ustedes entre ustedes que sean tan admiradores de la sabidur�a, que sea lo suficientemente sabio para decidir sobre tales causas? �Ninguno capaz de juzgar entre sus hermanos en las disputas que tienen sobre las cosas terrenales? Pero el hermano va a la justicia con el hermano. Un cristiano con otro; y que ante los incr�dulosAl gran descr�dito del nombre de pila; s�, para el esc�ndalo de toda la instituci�n cristiana; porque no pueden dejar de aprovechar la ocasi�n, de sus mutuas disputas y acusaciones, para marcar todo su cuerpo como injurioso y avaro; quienes, mientras pretenden ser tan superiores a los puntos de vista seculares, est�n tan fuertemente apegados a ellos, que, con todas sus profesiones de benevolencia universal y amor fraternal, no pueden dejar de agraviarse unos a otros.

Versículos 7-8

Ahora, pues , Pero, en verdad, es evidente que hay una falta en ti, cualquiera que tenga el derecho de su parte; que vayan a la ley unos con otros O que peleen entre s�, ya sea que vayan a la ley o no. �Por qu� no tom�is o sufr�s el mal? � Soportarlo pacientemente y sentarse con la p�rdida? �Por qu� no os dej�is defraudar en lugar de buscar un remedio de esta manera? Todos los hombres no pueden, o no quieren, recibir este dicho.

Muchos apuntan solo a esto: "No har� mal ni lo sufrir�". Estos son paganos honestos, pero no cristianos. No ????, pero est�s tan lejos de sufrir da�os y fraudes, que haces mal , o lesionas abiertamente y defraudan en privado, e incluso a tus hermanos cristianos .

Versículos 9-11

No sab�is con todo vuestro presumido conocimiento; que los injustos Es decir, no s�lo el injusta , pero los que tienen necesidad del mantenimiento verdadera justicia y santidad, la comprensi�n de las distintas clases de pecadores despu�s mencionado, el t�rmino injustos aqu�, incluyendo a todos ellos: se no heredar�n el reino de Dios Es decir, el reino de eterna gloria. �Y puedes sacrificar con satisfacci�n esta gran y gloriosa esperanza que te da el evangelio, por el bien de esos placeres del pecado que son s�lo por una corta temporada? No te dejes enga�ar por una vana imaginaci�n de que el nombre cristiano y los privilegios te salvar�n, mientras contin�as en la pr�ctica de tus vicios. Ni fornicarios ni id�latras, &C. La idolatr�a se sit�a aqu� entre la fornicaci�n y el adulterio, porque estas cosas generalmente la acompa�an. De hecho, entre los paganos, la idolatr�a no solo fue un gran crimen en s� mismo, sino que fue el padre de muchos otros cr�menes. Porque los paganos fueron animados a cometer fornicaci�n, adulterio, sodom�a, embriaguez, robo, etc., por el ejemplo de sus dioses.

Ni afeminados que viven de manera f�cil, indolente, sin tomar la cruz, sin sufrir penurias. Pero, �c�mo es esto, que estas personas bondadosas e inofensivas est�n clasificadas con los id�latras y sodomitas, esos infames degradadores de la naturaleza humana? De ah� que aprendamos que nunca estaremos a salvo de los pecados m�s grandes hasta que nos guardemos de los que se cree que son los m�s peque�os; ni siquiera hasta que pensemos que ning�n pecado es peque�o, ya que cada uno es un paso hacia el infierno. Y esos fueron algunos de ustedes , a saber, de una forma u otra; pero sois lavados, liberados de la culpa y el poder de esas abominaciones groseras. Vosotros est�is santificadosRenovados en el esp�ritu de vuestras mentes, dedicados y empleados al servicio de Dios; conformado, al menos en cierta medida, a su imagen, y pose�do de su naturaleza divina, y esto no antes, sino como consecuencia de tu justificaci�n. O, sois regenerados y purificados, as� como tambi�n liberados, de la condenaci�n a la que fuisteis justamente desagradable. Vea la naturaleza de la justificaci�n explicada en las notas sobre Romanos 3:21 ; y sus frutos, sobre Romanos 5:1 .

En el nombre del Se�or Jes�s por sus m�ritos, o por su sacrificio e intercesi�n; y por el Esp�ritu de nuestro Dios Cre�ndote de nuevo e inspir�ndote con todas esas gracias benditas que son los frutos genuinos de sus influencias divinas, G�latas 5:22 . Por lo tanto, como si �l hubiera dicho, debe mantener el sentido m�s agradecido de estas importantes bendiciones que Dios le ha conferido, permanecer a la mayor distancia del pecado y ser tierno con la paz y el honor de una sociedad que Dios ha fundado por su extraordinaria intervenci�n, y en el que se ha complacido de una manera tan maravillosa de traer incluso a usted, que estaba en un estado de lo m�s infame y deplorable.

Versículos 12-14

Todas las cosas que son indiferentes en su propia naturaleza, y ni ordenadas ni prohibidas; me son l�citas O, como algunos parafrasean la cl�usula, todo lo que os es l�cito a vosotros me es l�cito. Dado que el ap�stol no pudo decir, en ning�n sentido, que absolutamente todas las cosas le fueran l�citas, la oraci�n debe considerarse como el�ptica, y lo que se quiere completar debe suplirse, a la manera del ap�stol, del vers�culo siguiente. Pero no todas las cosas son adecuadas para ser utilizadas, en cuanto a las circunstancias; como cuando ofenden a nuestros hermanos d�biles o cuando esclavizan nuestras propias almas. Aunque todas las cosas de la descripci�n anterior; son l�citos para m� , peroNo ser� sometido al poder de ning�n esclavo de nada, como para sentirme inc�modo cuando me abstenga de ello, porque en ese caso estar�a bajo el poder de ello. Carnes para el vientre , etc. Como si hubiera dicho, hablo principalmente con respecto a las carnes; particularmente con respecto a los ofrecidos a los �dolos y los prohibidos en la ley mosaica.

Estos, lo reconozco, son todos indiferentes y tienen su uso, pero es s�lo por un tiempo, porque pronto, las carnes y los �rganos que las reciben, juntos se convertir�n en polvo. Porque Dios los destruir� tanto a ella como a ellos , es decir, cuando la tierra y las cosas que contiene sean quemadas. De esto es evidente que en la resurrecci�n, las partes del cuerpo que ministran a su nutrici�n no deben ser restauradas; o, si se van a restaurar, que se suprima su uso. Ahora O mejor dicho, pero; el cuerpo no es para la fornicaci�n Como si hubiera dicho, El caso es muy diferente con la fornicaci�n; esto no es algo indiferente, sino en todo momento malo; porque el cuerpo es para el Se�or dise�ado solo para su servicio:y el Se�or en un sentido importante; es para el cuerpo Siendo el Salvador tanto de esto como del alma, y ??en consecuencia debe gobernarlo y emplearlo. Y como una prueba m�s de que el cuerpo fue hecho para glorificar al Se�or, Dios ha levantado el cuerpo del Se�or y tambi�n levantar� nuestros cuerpos y los har� inmortales como el suyo.

Versículos 15-18

�No sab�is que vuestros cuerpos son los miembros de Cristo unidos m�sticamente a �l, as� como vuestras almas, si sois sus verdaderos disc�pulos, como profes�is serlo? �Tomar� entonces los miembros de Cristo, mi cuerpo, que est� unido a �l, con sus miembros? y convertirlos en miembros de una ramera unidos a ella, y sol�an complacer sus inclinaciones pecaminosas? No sab�is Necesito que os informe; �Que el que se une a una ramera es un solo cuerpo con ella? Pero el que se une al Se�or por fe y amor; es un esp�ritu con �l. �Y se har� una sola carne con una ramera? Huir de la fornicaci�nTodo comercio il�cito con mujeres, con rapidez, con aborrecimiento, con todas tus fuerzas. Todo pecado que comete un hombre. Cualquier otro pecado, excepto la glotoner�a y la embriaguez, o todo otro pecado que un hombre comete contra su pr�jimo; est� sin el cuerpo Termina en un objeto fuera de s� mismo, y no contamina tan inmediatamente su cuerpo, aunque s� su alma.

Pero el que comete fornicaci�n o cualquier tipo de lascivia; peca contra su propio cuerpoLa contamina, deshonra y degrada al nivel de las bestias brutas; y tal vez lo infecte y debilite, lo desperdicie y lo consuma, lo que estos vicios tienen una manifiesta tendencia a hacer. En la medida en que el que es adicto a la glotoner�a y la embriaguez peca contra su propio cuerpo, as� como un fornicario, y lo debilita introduciendo en �l muchas enfermedades dolorosas y mortales: en esta prohibici�n de la fornicaci�n, tambi�n se comprenden esos vicios, siendo en verdad los concomitantes ordinarios de la misma. Y la manera de huir de la prostituci�n es desterrar de la mente todas las imaginaciones lascivas y evitar cuidadosamente los objetos y ocasiones de cometer ese vicio, y mantener la templanza habitual en el uso de la carne y la bebida.

Versículos 19-20

No sab�is , etc. Como si hubiera dicho: Hay otro punto de vista en el que debe parecerles a ustedes, cristianos, la bajeza de este crimen, como consecuencia de su relaci�n con ese bendito agente, el Esp�ritu de Dios. Porque tu cuerpo es el templo de Dios dedicado a �l y habitado por �l; incluso por ese Esp�ritu que est� en ustedes Como verdaderos creyentes en Jes�s, Juan 7:37 ; Efesios 1:13 . Lo que tienes, lo que recibes; de Dios Como un regalo m�s importante y m�s necesario, sin el cual no podr�as ser de Cristo, Romanos 8:9 . Lo que el ap�stol llama en otra parte, el templo de Dios (cap�tulo 1 Corintios 3:16 ) yel templo del Dios viviente , ( 2 Corintios 6:16 ) aqu� llama el templo del Esp�ritu Santo; mostrando claramente que el Esp�ritu Santo es el Dios viviente.

Las dos cosas, como observa Whitby, necesarias para constituir un templo de Dios, pertenecen al cuerpo de los creyentes: est�n consagrados a Dios y �l reside en ellos. �Excelente, por tanto�, dice �l, �es la inferencia de Tertuliano; que puesto que todos los cristianos se han convertido en templo de Dios, en virtud de su Esp�ritu Santo enviado a sus corazones y consagrando sus cuerpos a su servicio, debemos hacer de la castidad el guardi�n de esta sagrada casa, y no permitir que nada impuro o profano entre en ella. ella, no sea que el Dios que habita en ella, estando disgustado, abandone su morada as� contaminada �. Y vosotros no os pertenec�is ni a vuestros cuerpos ni a vuestras almas. Ambos son de Dios, no solo por creaci�n y preservaci�n, sino por redenci�n, siendo comprados por un precio;y que infinitamente m�s all� de lo que puedes pretender valer, incluso la sangre preciosa de Cristo, por la cual has sido redimido de las manos de la justicia divina, y por la cual, habiendo sido puesto en posesi�n del Esp�ritu Santo, eres rescatado de esclavitud del pecado y de Satan�s, y se han convertido en s�bditos y servidores de Cristo, que de esta manera ha obtenido un dominio eterno sobre ustedes: de quien ustedes tambi�n son por una donaci�n voluntaria de ustedes mismos a �l, y una uni�n m�stica con �l como sus templos.

Por tanto, glorifica a Dios en tu cuerpo con templanza, castidad y pureza; y en tu esp�ritu por la fe, la esperanza y el amor; humildad, resignaci�n, paciencia; por mansedumbre, mansedumbre, longanimidad y benevolencia universal. O, como se pueden traducir las palabras con igual propiedad, glorif�calo con tu cuerpo y tu esp�ritu; es decir, entreguen sus cuerpos y todos sus miembros, as� como sus almas y todas sus facultades, como instrumentos de justicia a Dios; o dediquen y empleen todo lo que tienen y todo lo que son, por completo, sin reservas y para siempre, para su gloria.

Información bibliográfica
Benson, Joseph. "Comentario sobre 1 Corinthians 6". Comentario de Benson. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/rbc/1-corinthians-6.html. 1857.