Bible Commentaries
1 Samuel 29

Comentario de Benson del Antiguo y Nuevo TestamentoComentario de Benson

Introducción

AM 2948. BC 1056.

Los pr�ncipes de los filisteos se oponen a que David vaya con ellos a la batalla, 1 Samuel 29:1 . Aquis lo despide, 1 Samuel 29:6 .

Versículos 1-2

Los filisteos se reunieron, los israelitas acamparon O m�s bien, se hab�an reunido, hab�an acampado; porque se nos informa en el cap�tulo anterior que los filisteos llegaron a Shunen, y es probable que la partida de David de su ej�rcito fuera antes de que Sa�l consultara a la mujer en Endor. Los pr�ncipes de los filisteos pasaron por centenares , etc. Cuando miraron a su ej�rcito, aparecieron los grandes hombres, algunos a la cabeza de un centenar, otros de un millar de soldados. David y sus hombres pasaron con Aquis, quien parece haber sido el general del ej�rcito, y haber nombrado a David y sus hombres su salvavidas, de acuerdo con su resoluci�n, cap. 1 Samuel 28:2. De esto podemos aprender cu�n peligroso es desviarse de la verdad y en qu� inconvenientes nos trae a menudo. Las pretensiones que David hizo a Aquis (como se relata en el cap�tulo 28) de su inveteraci�n con los israelitas, y del da�o que les hab�a hecho al hacer incursiones sobre ellos, fueron los incentivos que llevaron a Aquis a convertir a David y a sus hombres en su vida. -Guardia; por lo que David fue llevado al doloroso estrecho de luchar contra sus propios compatriotas o traicionar a su benefactor.

Versículo 3

Entonces dijeron los pr�ncipes Los se�ores de las otras ciudades eminentes, que se aliaron con Aquis en esta expedici�n. Estos d�as, o a�os Es decir, �dije d�as? Podr�a haber dicho a�os. Ya ha estado conmigo un a�o completo y cuatro meses, 1 Samuel 27:7 . Desde que cay� Rebelde, o dej� a su propio rey para volverse hacia m�.

Versículo 4

Haz que este hombre regrese a su lugar en Siclag, que estaban contentos de que poseyera. Porque con qu� reconciliarse , etc. �No deber�a ser con las cabezas de estos hombres?Es decir, de los filisteos. Razonaron sabiamente, de acuerdo con las m�ximas comunes de prudencia y verdadera pol�tica; porque con este proceder se han reconciliado a veces grandes enemigos. Pero sin duda la Divina Providencia se preocup� de sugerirles estas prudentes consideraciones; porque por este medio David fue liberado de ese gran apuro y dificultad en el que se hab�a metido, y del cual ninguna sabidur�a humana podr�a haberlo librado; ya sea de ser un enemigo y luchar contra su pa�s (como se se�al� antes) o de ser falso con su amigo y su confianza. Y, por el mismo incidente providencial, fue enviado al pasado el tiempo suficiente para recuperar a sus esposas, y las esposas e hijos de sus hombres, y su todo, de los amalecitas, que se habr�an perdido irrecuperablemente si hubiera ido a esta batalla.

Versículo 6

Aquis dijo: Ciertamente, vive Jehov�, que jura por Jehov�, a quien David ador�, que ser� m�s cre�do por �l. O quiz�s hab�a aprendido algo de David sobre el Dios verdadero, aunque adoraba a otros dioses con �l.

Versículo 8

David dijo: Pero, �qu� he hecho? Esto fue un profundo disimulo y adulaci�n en David, no hay forma de ser justificado. Pero quien, que no lo haya experimentado, puede saber cu�n fuerte es la tentaci�n que tienen los que atienden a los grandes hombres para felicitarlos y disimularlos. David, sin duda, se regocij� de todo coraz�n por esta destituci�n; pero como no sab�a cu�nto tiempo m�s podr�a verse obligado a permanecer en la tierra de los filisteos, parece haber cedido a la tentaci�n de que la prudencia le exig�a que los llevara con justicia y que fingiera tener esa preocupaci�n por este asunto. ocasi�n que ciertamente no sinti�.

Versículo 9

Aquis dijo: Eres bueno ante mis ojos como un �ngel de Dios en quien nada es digno de culpa. Los paganos reconoc�an los buenos esp�ritus, a los que tambi�n adoraban como una clase inferior de deidades, que eran mensajeros y ministros del Dios supremo; Aquis hab�a aprendido el t�tulo de �ngeles de los israelitas, sus vecinos, y especialmente de la conversaci�n de David.

Versículos 10-11

Con los siervos de tu se�or Esto da a entender que los pr�ncipes de los filisteos no confiar�an en ellos, porque todav�a los ve�an como s�bditos de Sa�l. David y sus hombres se levantaron temprano David entonces no sab�a cu�n necesario era esto para el alivio de su propia ciudad. Pero Dios lo sab�a bien y lo envi� all� en consecuencia. En cu�ntas ocasiones podemos decir: � Lo que yo hago, t� no lo sabes ahora, pero lo sabr�s en el futuro!

Información bibliográfica
Benson, Joseph. "Comentario sobre 1 Samuel 29". Comentario de Benson. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/rbc/1-samuel-29.html. 1857.