Bible Commentaries
Salmos 110

Comentario de Benson del Antiguo y Nuevo TestamentoComentario de Benson

Introducción

AM 2962. BC 1042.

Est� universalmente aceptado que este Salmo fue compuesto por David; y parece estar casi tan universalmente de acuerdo en que �l no habla de s� mismo en absoluto, sino directamente del Mes�as. Esto es m�s notable, porque en la mayor�a, si no en todos los dem�s Salmos, donde �l profetiza de Cristo, hay un significado obvio, si no en todo el Salmo, pero en varias partes del mismo, que se relaciona con alguna ocasi�n particular, algunos pasaje u otro, en la historia de David; y esos Salmos deben entenderse de Cristo en un sentido secundario, aunque no menos evidente, ya veces m�s que el primero. Pero este Salmo debe entenderse completamente s�lo por Cristo; como es abundantemente evidente, tanto por el testimonio expreso del Nuevo Testamento, Hechos 2:34 ; 1 Corintios 15:25 ; Hebreos 1:13; Hebreos 10:13 ; y del consentimiento de los antiguos m�dicos hebreos. De hecho, que los jud�os antiguos entendieron este Salmo as�, y que era el sentido conocido y recibido de �l en la �poca de nuestro Salvador, se desprende de lo que pas� entre �l y los fariseos, Mateo 22:42, &C. Por lo tanto, podemos estar completamente persuadidos con el obispo Patrick, de que "este salmo es una predicci�n muy clara de la divinidad de Cristo, su dignidad real, su sacerdocio y sus victorias y triunfos", todo lo que el salmista expone con gran claridad y sublimidad. de pensamiento y expresi�n. �En efecto, si consideramos este Salmo�, dice un escritor juicioso, �como todo el mundo debe, no solo como una profec�a, sino como un poema pat�tico, no podemos dejar de quedarnos encantados, tanto con la elegancia de la composici�n, como con la est�n satisfechos con la verdad de las predicciones que contiene. Salmo 110:1 , Nuestro Se�or est� sentado a la diestra de Dios, como un lugar de la mayor dignidad que se pueda concebir; como socio de su trono y poder. Salmo 110:2Est� investido de su autoridad, al tener el cetro de su poder y un mando universal y supremo, incluso sobre sus enemigos, entregado a �l. Como consecuencia de esto, Salmo 110:3 , recibe el homenaje de sus s�bditos, las ofrendas voluntarias de su pueblo fiel, que son tan numerosas como las gotas del roc�o de la ma�ana que cubren la tierra. Salmo 110:4 , El sacerdotal se agrega al oficio real. Salmo 110:5 , El salmista vuelve a describir el ejercicio de su autoridad suprema y soberana. Salmo 110:7 , �l da una raz�n por la que fue exaltado a tanto honor, a saber, como recompensa por el acto m�s asombroso de su humillaci�n, que se expresa muy po�ticamente al beber del arroyo en el camino ".

Versículo 1

El Se�or dijo a mi Se�or ??? ???? ?????, neum Jehov� ladoni, el dicho o decreto , es decir, yo registro el dicho o decreto de Jehov� a mi Se�or , es decir, a su Hijo el Mes�as, a quien reconozco como mi Se�or. y Dios. Este decreto, hecho en la eternidad, fue publicado a su debido tiempo, y realmente fue ejecutado cuando Dios levant� a Cristo de entre los muertos y lo llev� a su mansi�n celestial. David deliberadamente llama al Mes�as su Se�or , para amonestar a toda la iglesia, que aunque �l era su hijo seg�n la naturaleza humana, sin embargo ten�a una naturaleza superior, y tambi�n era su Se�or , como siendo Dios por naturaleza bendecido para siempre.y, en consecuencia, Se�or de todas las cosas, como se le llama Hechos 10:36 ; y por oficio, como Dios hombre, el Se�or y Rey de toda la iglesia y de todo el mundo, por causa de la iglesia. Y esto se dijo para evitar la ofensa que el Esp�ritu Santo previ� que los jud�os y otros estar�an dispuestos a sufrir por la mezquindad de la aparici�n de Cristo en la carne. La palabra hebrea ????, adon , es uno de los t�tulos de Dios, que significa su poder y autoridad sobre todas las cosas, y por lo tanto, se le da de la manera m�s adecuada al Mes�as, a quien Dios hab�a delegado todo su poder en el universo, Mateo 28:18 . Si�ntate a mi diestraT�, que durante tantos a�os has estado velado por la debilidad y la carne mortal, despreciado, rechazado y pisoteado por los hombres, y perseguido hasta la muerte; toma ahora para ti tu gran y justo poder. Has hecho tu obra en la tierra, ahora descansa y toma posesi�n de ese reino y gloria soberanos que por derecho te pertenecen; t� gobiernas conmigo, con autoridad y honor muy por encima de todas las criaturas, en la tierra o en el cielo. As� que esta frase se expone en otros lugares: ver Lucas 22:69 ; 1 Corintios 15:25 ; Hebreos 1:3 ; Hebreos 8:1 ; Hebreos 10:12 ; Efesios 1:20, &C. Es una expresi�n figurativa, tomada de la costumbre de los monarcas terrenales, que colocaban en su mano derecha a aquellas personas a quienes mostraban el mayor honor, o a quienes proyectaban para avanzar al mayor poder y autoridad: ver 1 Reyes 2:19 . Aqu� significa el dominio que Jesucristo, despu�s de su muerte, recibi� del Padre, como el Mes�as. As� dice de s� mismo, Apocalipsis 3:21 , Yo venc�, y estoy sentado con mi Padre en su trono. Hasta que haga tus enemigosHasta que, por mi omnipotente poder, te comunique como Mediador, haga a los que te crucificaron (convirtiendo a unos y destruyendo a otros) y a los paganos id�latras, someti�ndolos a tu evangelio, como tambi�n el poder del pecado y de Satan�s en los hombres. corazones, y, por fin, la muerte misma, el estrado de tus pies, tus esclavos y vasallos. Esta expresi�n, estrado de tus pies , que denota toda una subyugaci�n de enemigos, alude a la costumbre de las naciones orientales de pisar los cuellos de los reyes que hab�an conquistado, y as� convertirlos, por as� decirlo, en estrado de sus pies.

Versículo 2

El Se�or enviar� o enviar� la vara de tu fuerza

Tu vara fuerte o poderosa: es decir, tu cetro o poder real, Isa�as 10:24 ; Jeremias 48:17 . Pero entonces, como el reino de Cristo no es carnal, ni de este mundo, Juan 18:36 , sino espiritual; as� que esta vara o cetro no es otra cosa que su palabra o evangelio, publicado por �l mismo, o por sus ap�stoles y ministros, y acompa�ado con su Esp�ritu, por el cual el Mes�as estableci� y estableci� su reino: ver Isa�as 2:3 ; Isa�as 11:4 ; Miqueas 4:2 ; 2 Corintios 10:4 ; 2 Tesalonicenses 2:8 . Por eso este evangelio se llama la palabra del reino, Mateo 13:19 ; y el poder de Dios, Romanos 1:16 . David, habiendo hablado del Mes�as,Salmo 110:1 , en este vers�culo le dirige su discurso. De Sion De Jerusal�n, que con frecuencia se conoce con el nombre de Sion. Aqu� el reino del Mes�as iba a establecerse primero, de acuerdo con las predicciones de los profetas, y de ah� la vara de su fuerza, la palabra del evangelio, iba a ser enviada a todas las partes y reinos del mundo, para traer en los gentiles, que tambi�n los profetas hab�an predicho, comoIsa�as 2:3 , y en varios de los Salmos anteriores, como ya se ha observado y probado con frecuencia. Gobierna en medio de tus enemigos O, T� gobernar�s, el imperativo se pone para el futuro, como suele ser el caso en otros lugares. Cristo gobierna en parte por su gracia, convirtiendo a algunos y estableciendo su reino en sus corazones, ese reino que es justicia, paz y gozo en el Esp�ritu Santo; y en parte por su poderosa providencia, mediante la cual defiende a su iglesia ya su pueblo, y somete y castiga a todos sus adversarios; en medio de quien se dice aqu� que gobierna, para significar que, aunque deber�an hacer lo que en ellos estaba para oponerse a su reino, no deber�an ser capaces de obstaculizar la erecci�n y el establecimiento de �l, sino que deber�an traer la ruina sobre s� mismos por oponi�ndose a ella.

Versículo 3

Tu pueblo Tus s�bditos; estar� dispuesto hebreo, ????, nedaboth, disposici�n , es decir, m�s deseoso , como las palabras en plural con frecuencia significan, o ser�n ofrendas voluntarias , como la palabra propiamente significa; por lo que puede intentar dar a entender la diferencia entre el culto del Antiguo Testamento y el del Nuevo. Ellos te ofrecer�n y te presentar�n, como su Rey y Se�or, no bueyes, ni ovejas ni cabras, como hizo tu pueblo bajo la ley, sino a ellos mismos , sus almas y cuerpos, como sacrificios vivos, Romanos 12:1 , y como ofrendas de libre albedr�o, entreg�ndose a ti, para vivir para ti y morir para ti. El sentido es, Tendr�s amigos y s�bditos, as� como enemigos, y tus s�bditos no te rendir�n una obediencia falsa y fingida, como lo hacen con frecuencia aquellos que son s�bditos a los pr�ncipes terrenales o conquistados por ellos, sino que lo har�n de buena gana obedece todos tus mandamientos, sin disputa, demora o reserva. Y no necesitar�n ser presionados a tu servicio, sino que voluntariamente se alistar�n y luchar�n bajo tu estandarte contra todos tus enemigos. En el d�a de tu poder, cuando tomes en tus manos la vara de tu poder y establezcas tu reino en el mundo, ejerciendo tu gran poder en la predicaci�n de tu palabra y ganando almas para ti por ella. En las bellezas de la santidadAdornado con las vestiduras hermosas y gloriosas de la justicia y la verdadera santidad, con las que se visten todos los hombres nuevos o verdaderos cristianos, Efesios 4:24 ; Apocalipsis 19:8 ; Apocalipsis 19:14 ; y con diversos dones y gracias del Esp�ritu de Dios, que son hermosos a los ojos de Dios y de todos los hombres buenos. Desde el vientre de la ma�ana tienes el roc�o de tu juventudEs decir, tu descendencia (los miembros de la Iglesia cristiana) ser� m�s numerosa que las gotas del roc�o de la ma�ana. O, como lo expresa el obispo Reynolds, "Tus hijos te nacer�n en tanta abundancia como el roc�o que cae del vientre de la ma�ana". Con el mismo prop�sito, el obispo Lowth, en su d�cima conferencia: "El roc�o de tu progenie es m�s abundante que el roc�o que procede del �tero de la ma�ana".

Versículo 4

El Se�or ha jurado que no jur� al constituir el sacerdocio Aar�nico, Hebreos 7:21 , pero lo hizo aqu�, para que pudiera parecerle a toda la humanidad que este sacerdocio se hizo irrevocable, lo que no fue el de Aar�n. T� eres sacerdote adem�s de rey. Esos oficios, que antes estaban divididos entre dos familias, est�n unidos y investidos en ti, siendo ambos absolutamente necesarios para el establecimiento de tu reino, que es de una naturaleza totalmente diferente de los reinos de este mundo, siendo espiritual y celestial, y por tanto, requiere un rey que tambi�n sea ministro de las cosas santas. Para siempreNo ser interrumpido ni trasladado a otra persona, como lo fue el sacerdocio de Aar�n tras la muerte del sacerdote, sino que continuar� contigo para siempre. Seg�n el orden de Melquisedec O, seg�n la manera , etc. es decir, as� como �l era sacerdote y tambi�n rey, y ambos sin sucesor y sin fin, en el sentido pretendido, Hebreos 7:3 .

Versículo 5

El Se�or a tu diestra Parece que esto debe entenderse del Mes�as, instalado en su poder real a la diestra de su Padre; y no del Padre mismo, como su ayudante y defensor, como se usa la frase Salmo 16:8 , y en algunos otros lugares. Por lo tanto, este es un ap�strofe a Dios el Padre con respecto a su Hijo. Este sentido de la cl�usula concuerda mejor con los siguientes vers�culos; porque es evidente que es la misma persona que golpea a los reyes, y juzga entre las naciones, y llena los lugares, etc. Herir� a los reyes. Es decir, har� pedazos a los poderes m�s grandes de la tierra, quienes provocar�n su disgusto por una oposici�n obstinada a su autoridad y el establecimiento de su evangelio.En el d�a de su ira, en el d�a de la batalla, cuando contenga con ellos y derrame sobre ellos el torrente de su ira.

Versículo 6

Juzgar� entre los paganos.Demostrar� a todo el mundo pagano que es su legislador y juez, y condenar� y castigar� a los que rechacen su salvaci�n y desobedezcan sus leyes, dando indignaci�n e ira, tribulaci�n y angustia a todos los que reh�sen Obedece a la verdad, pero obedece a la injusticia, Romanos 2:8 . Llenar� los lugares con los cad�veres de sus enemigos, o de aquellos poderes a quienes herir� en el d�a de su ira; y herir� las cabezas de los principales, o gobernantes, sobre o de muchos pa�sesEs decir, los propios emperadores romanos, que luego gobernar�n la mayor parte del mundo, o todos aquellos pr�ncipes que se le opongan. El lector discernir� f�cilmente que el salmista aqu� describe el ejercicio del poder real y el dominio supremo de Cristo; su conquista sobre el pecado y los pecadores, y sobre toda la oposici�n de los poderes de las tinieblas, en expresiones metaf�ricas, tomadas de las conquistas terrenales; y que este y otros pasajes similares no deben entenderse literal y groseramente, sino figurativa y espiritualmente, de acuerdo con la naturaleza del reino de Cristo.

Versículo 7

Beber� del arroyo en el camino. Es decir, dice Houbigant, el arroyo Cedron, supongo; David se�alando la pasi�n de nuestro Se�or, mediante una continuaci�n de la met�fora con la que comenz�. Jes�s fue exaltado por sus sufrimientos; por eso levant� la cabeza, Hebreos 12:2. Esta es la interpretaci�n m�s general del vers�culo. Expresa, dice Poole, �la humillaci�n y la pasi�n del Mes�as, para evitar un gran error que pudiera surgir en la mente de los hombres acerca de �l, a partir de los grandes �xitos y victorias que aqu� se le atribuyen, que podr�an inducirlos a pensar que deber�a ser exentos de todos los sufrimientos, y ser coronados con triunfos constantes y perpetuos. Para refutar esta noci�n, �l quiere decir aqu� que el Mes�as deber�a tener una gran parte de aflicciones mientras estaba en el camino o curso de su vida, antes de que llegara a su fin o descanso, y al honor de sentarse a la derecha de su Padre. mano." As�, San Pablo, que puede considerarse como un comentario sobre estas palabras, observa quesiendo hallado a la moda como hombre, se humill� a s� mismo y se hizo obediente hasta la muerte, por lo que Dios tambi�n lo exalt� hasta lo Filipenses 2:8 , Filipenses 2:8 , Filipenses 2:8 . Las aguas en las Escrituras con mucha frecuencia significan sufrimientos; y beber de ellos significa sentir o soportar estos sufrimientos. Sin embargo, hay algunos que le dan al vers�culo un significado diferente y suponen que beber del arroyo en el camino significa el socorro y el suministro de la gracia omnipotente: o las influencias del Esp�ritu Santo, frecuentemente representadas bajo el emblema. de agua, como Isa�as 12:3 ; Isa�as 55:1 ; Juan 7:38. As�, el Sr. Hervey: �Si se pregunta, c�mo se le permitir� al Redentor ejecutar los diversos e importantes oficios predichos en la primera parte de este Salmo, el profeta responde : Beber� del arroyo en el camino. No ser� abandonado apenas a su naturaleza humana, que inevitablemente debe hundirse, sino que a trav�s de toda la administraci�n de su reino mediador, y su estado encarnado, ser� sostenido con socorros omnipotentes. Beber� del arroyo de la omnipotencia: ser� sostenido continuamente por la influencia del Esp�ritu Santo, y por tanto levantar� la cabeza. Por estos medios ser� igualado en su prodigiosa tarea, superior a toda oposici�n, exitoso en todo lo que emprenda y grandemente triunfante sobre todos sus enemigos �. Hervey's Med., vol. 1. p. 129.

En general, tenemos en este Salmo una profec�a tan clara del Mes�as y de los oficios que debe sostener, como quiz�s podamos encontrar, en tan pocas palabras, en cualquier parte del Antiguo Testamento, y una profec�a absolutamente incapaz de cualquier otra aplicaci�n. Ahora bien, esta profec�a se cumpli� completamente en Jes�s de Nazaret, cuando resucit� de entre los muertos, ascendi� al cielo y se sent� a la diestra de su Padre; desde entonces esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies; es decir, �hasta que Satan�s, el pr�ncipe de este mundo, sea confinado al abismo; hasta que todos sus poderes perseguidores sean destruidos, y hasta que la muerte y el sepulcro no existan m�s, Salmo 110:1. El reino, al que �l avanz�, es un reino espiritual: el cetro, con el cual fue presentado en la Si�n celestial, es todo poder en el cielo y en la tierra; para ser empleado para la protecci�n de sus s�bditos y la destrucci�n de sus enemigos, Salmo 110:2 . Las leyes de su reino son las leyes del evangelio; que iban a ser publicados desde Jerusal�n: los que libremente se ofrecieron a publicar sus leyes y reunir s�bditos en su reino, fueron los ap�stoles y primeros predicadores de su palabra; quien, en unos pocos a�os, siendo investido con poder desde lo alto, difundi� su evangelio por todo el mundo y reuni� en su reino a multitudes de s�bditos de todas las naciones bajo el cielo, Salmo 110:3. Al mismo tiempo que Jes�s estaba sentado en su trono como Rey, fue nombrado Sumo Sacerdote en el santuario celestial, para interceder por su pueblo y ser su abogado ante el Padre, Salmo 110:4 . El cetro le fue dado tambi�n para la destrucci�n de sus enemigos, como protecci�n de sus s�bditos. Por tanto, cuando los potentados de la tierra se opusieron a su evangelio y persiguieron a sus publicadores, �l los destruy� con el aliento de su boca; primero, derramando su ira sobre Judea, en la eliminaci�n de sus habitantes y la subversi�n de su estado; y luego, ejecutando su venganza contra los poderes perseguidores del mundo pagano, mientras se levantaban para oponerse al avance de su reino, Salmo 110:5 ; Apocalipsis 19:11. Cuando Jes�s emprendi� su guerra contra los enemigos de nuestra salvaci�n, bebi� profundamente de la copa del dolor y el sufrimiento; pero, en recompensa por su humillaci�n, es muy exaltado al trono de igual gloria, a la diestra de Dios, para que todos honren al Hijo como honran al Padre �: v�ase Green, sobre la Oraci�n de Habacuc.

Información bibliográfica
Benson, Joseph. "Comentario sobre Psalms 110". Comentario de Benson. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/rbc/psalms-110.html. 1857.