Bible Commentaries
Salmos 34

Comentario de Benson del Antiguo y Nuevo TestamentoComentario de Benson

Introducción

AM 2962. BC 1042.

El Dr. Delaney ha dado su opini�n de que David escribi� este Salmo para la instrucci�n de aquellos hombres que acudieron a �l en Adullam, despu�s de su partida de Gat. Contiene, dice �l, los m�s nobles est�mulos a la piedad y la virtud, desde la seguridad de que todos los que son tan devotos son el cuidado inmediato del Dios Todopoderoso; como todos los de car�cter contrario son su aborrecimiento, y la se�al segura de su venganza. Y, seguramente, este Salmo, considerado desde este punto de vista, es una de las composiciones m�s nobles, mejor torneadas, mejor juzgadas y mejor adaptadas que jam�s se haya escrito. Comienza anim�ndolos a la piedad y la gratitud a Dios desde su propio ejemplo, Salmo 34:1 . Luego exhorta a otros a probar las mismas misericordias; para aprender la bondad de Dios de sus propias experiencias, Salmo 34:8; Salmo 34:9 . Luego les asegura que la fuerza y ??la magnanimidad no son garant�a de la miseria y la angustia; Considerando que la confianza y la confianza en Dios son una fuente inagotable de todo lo bueno, Salmo 34:10 . Despu�s de lo cual resume todo en una exhortaci�n muy pat�tica y hermosa a la piedad, a la virtud y a la confianza en Dios; con plena certeza de que, como �l era el guardi�n y verdadero protector de la virtud en la angustia; as� era �l el observador infalible y vengador constante de la maldad, Salmo 34:11 .

T�tulo. Cuando cambi� su comportamiento , etc. Salmo hecho en esa ocasi�n, aunque no en ese momento, cuando falsific� la locura. En lo que si pec� o no, es materia de disputa; pero es indudable que su liberaci�n mereci� este solemne reconocimiento. Abimelec llamado Aquis, 1 Samuel 21:10 . Pero Abimelec parece haber sido el nombre com�n de los reyes de los filisteos ( G�nesis 20:2 ; G�nesis 26:1 ) como Fara�n lo era de los egipcios.

Versículos 1-2

Bendecir� al Se�or en todo momento . Nunca me olvidar� de bendecir a Dios por esta milagrosa liberaci�n. Mi alma se jactar� de ella , etc. Me gloriar� en esto, que tengo un Se�or y Maestro tan poderoso y misericordioso. Oir� el humilde O el manso, es decir, el justo; y al�grate tanto por el amor que me tienen, como por el bien p�blico, que saben que yo dise�o y busco sobre todas las cosas; y para el consuelo y beneficio de mi ejemplo para ellos, en aprietos y dificultades similares.

Versículo 3

Engrandeced al Se�or conmigo. Une vuestras alabanzas a las m�as, oh humildes. Y exaltemos juntos su nombre, si no en un solo lugar, pero con cari�o y trabajo: que nuestras almas se encuentren, y nuestras alabanzas se encuentren en los o�dos del Dios que todo lo oye. O la palabra ????, jachdav , puede traducirse igualmente; es decir, con igual celo y fervor; que nadie est� dispuesto a ser superado por otro. Para magnificar o exaltan, y expresiones similares, �no significa que podamos agregar algo a la gloria del nombre o la naturaleza de Dios; sino que debemos manifestar y celebrar p�blicamente su majestad y grandeza, cuando experimentemos las interposiciones de su providencia en nuestra liberaci�n de cualquier mal amenazador. Entonces, con el salmista, debemos atribuir nuestra seguridad, no a nuestro propio artificio, sutileza o poder, sino al cuidado de Dios, que vela por nosotros �.

Versículos 4-6

Busqu� al Se�or, y �l me escuch�. David ahora procede a dar razones por las que Dios debe ser alabado y glorificado; �l mismo y otros hab�an descubierto por experiencia que era un Dios que escuchaba y contestaba las oraciones. Primero menciona su propio caso. Dios lo hab�a escuchado y respondido, y lo hab�a librado de todos sus temores, no solo de la muerte que tem�a, sino de la inquietud en la que estaba sumido por el temor a ella. �Esto�, dice Chandler, �responde exactamente a la historia, que nos informa que cuando David escuch� lo que los siervos de Aquis dijeron acerca de �l, guard� estas palabras en su coraz�n y tuvo mucho miedo, 1 Samuel 21:13. Indudablemente, pens� que corr�a un peligro extremo, pero en lugar de eliminar sus sospechas y sus propios temores, ofreci�ndose a unirse a los filisteos contra su pa�s, prefiri� falsificar la locura y confiar en la Providencia con el �xito de la misma, que asegurar su seguridad por cumplimientos viles y deshonrosos ". Pero se puede decir que David fue un gran y eminente hombre; y no podemos esperar ser favorecidos como �l: �Alguna vez otros han experimentado el mismo beneficio por medio de la oraci�n? S�, muchos adem�s de �l. Porque, A �l miraron, A saber, los humildes, o los que le tem�an; buscaron y esperaban ayuda del Se�or, y fueron aliviadosConsolado y animado. El significado del pasaje, piensa Chandler, es que los humildes buscaron en Dios la protecci�n del salmista y recibieron esa luz, es decir, ese consuelo y gozo, de �l cuando David regres� a la seguridad, que se difundi� por todos sus corazones; para que sus rostros no se avergonzaran , o, como significa ?????, jechparu , �no se avergonzaran de verg�enza�, al estar decepcionados en cuanto a la esperanza que ten�an por �l. Pero podemos, con los antiguos int�rpretes, leer estas y las palabras anteriores imperativamente, como una exhortaci�n a los dem�s; Por tanto, mirad a Aquel que es, con un ojo de fe y oraci�n, y sed iluminados.Consu�late en la expectativa de misericordia de �l. Si se dijera: "Quiz�s estos tambi�n fueron personas de gran eminencia, como el mismo David, y por eso fueron muy favorecidos, o su n�mero los hizo considerables"; el salmista responde: Este pobre clam�, y el Se�or lo oy�. Una sola persona, mezquina y despreciable, a quien ning�n hombre miraba con respeto, ni cuidaba con preocupaci�n; sin embargo, fue tan bienvenido en el trono de la gracia como David, o cualquiera de sus dignos: el Se�or lo escuch�, tom� conocimiento de su caso y de sus oraciones, y lo salv� de todas sus angustias , porque Dios atender� la oraci�n. de los indigentes, Salmo 102:17 ; Isa�as 57:15 .

Versículo 7

El �ngel del Se�or , etc. �sta es otra raz�n por la que los hombres deben alabar y glorificar a Dios. El n�mero singular se pone aqu� para el plural; porque el salmista no habla de un solo �ngel, sino de una guardia de �ngeles, tan un�nimes, sin embargo, en su servicio como si fueran uno solo; Encampeth en torno a los que le temen Como salvavidas ante un pr�ncipe; y los libra Los protege de peligros por todas partes, o los rescata de ellos, y de las pruebas y angustias cuando se les deja caer en ellos: obra para la cual est�n designados por Dios, Hebreos 1:14. Dios hace uso de la asistencia de los buenos esp�ritus para proteger a su pueblo de la malicia y el poder de los esp�ritus malignos, y m�s buenos oficios que los santos �ngeles nos hacen a diario de lo que somos conscientes. Aunque en dignidad y dotes de la naturaleza son muy superiores a nosotros; aunque conservan su rectitud primitiva, que hemos perdido; aunque tienen un empleo constante en el mundo superior para alabar a Dios, y tienen derecho a un descanso y bienaventuranza constantes all�; sin embargo, en obediencia a su Hacedor y enamorados de aquellos que llevan su imagen, condescenden a ministrar a los santos y defenderlos contra los poderes de las tinieblas. No solo los visitan, sino que acampan alrededor de ellos, actuando por su bien como realmente, aunque no con tanta sensatez, como los de Jacob, G�nesis 32:1 , y Eliseo, 2 Reyes 6:17. �Toda la gloria sea para el Dios de los �ngeles!

Versículo 8

Probad y ved que el Se�or es buenoEs decir, bondadoso, misericordioso y misericordioso, es decir, con todo su pueblo. La bondad de Dios, de la que se habla aqu�, incluye tanto la amabilidad y benevolencia de su naturaleza, como la generosidad y beneficencia de su providencia y gracia; y, al llamarnos a probar y ver esto, el salmista quiere decir que debemos considerarlo seria, completa y cari�osamente, y probarlo por nuestra propia experiencia; que se opone a esos pensamientos ligeros y desvanecidos que los hombres suelen tener de la bondad divina. No es suficiente que lo encontremos como un generoso benefactor para nosotros, sino que debemos saborear y deleitarnos en su bondad manifestada en y por sus dones, y en la contemplaci�n de sus infinitas perfecciones y amor ilimitado; y debe estar tan convencido y persuadido de su bondad, como para animarlo, en el peor de los tiempos, a confiar en �l,

Versículos 9-10

Temed al Se�or, vosotros sus santos , reverenciadlo, servidle y confiar en �l; porque com�nmente se pone temor en todas las partes del culto y del servicio de Dios. Porque nada les falta a los que le temen. Hasta ahora tendr�n todo lo bueno, como para no tener motivo para quejarse de la falta de ninguno. En cuanto a las cosas del otro mundo, tendr�n gracia suficiente para sustentar la vida espiritual. y en cuanto a esta vida, tendr�n lo necesario para sustentarla. Porque la piedad tiene la promesa de la vida que ahora es , y a los que buscan el reino de Dios y su justicia , se les a�adir�n otras cosas que son necesarias , Mat 6:33; 1 Timoteo 4:8 1 Timoteo 4:8. Los leoncillos carecen , etc. �Todas las versiones antiguas�, dice el Dr. Dodd, �excepto los caldeos, le�dos, hombres grandes y poderosos , en lugar de leones j�venes: y Houbigant convierte el lugar, los hombres ricos se vuelven pobres y hambrientos; pero los que buscan al Se�or , etc. Este sentido es indudablemente bueno: pero no veo nada que objetar contra nuestra propia lectura: porque el significado es que si Dios cuida de las bestias del campo, mucho m�s cuidar� de los que le temen, y mucho antes sufrir�n. los que mueren por falta de su presa, que �stos por falta de necesidades o por falta de su protecci�n ". No querr�s nada buenoCualquier cosa necesaria y verdaderamente buena para ellos, considerando todas las circunstancias; del cual solo Dios es juez competente. Y, por tanto, aunque suele tener especial cuidado en suplir las necesidades de los hombres buenos, y lo ha hecho a menudo de maneras extraordinarias, cuando los ordinarios han fracasado; sin embargo, sabe que las necesidades y las cruces son a veces m�s necesarias y les ser�n m�s �tiles que las cosas que puedan considerar necesarias, y en tales casos les manifiesta mayor misericordia neg�ndoles suministros que concedi�ndolos.

Versículo 11

Venid, hijos , etc. Venid aqu�, entonces, todos los que, al considerar las ventajas descritas anteriormente, que acompa�an a la religi�n verdadera, est�n deseosos de obtenerla y, por lo tanto, est�n dispuestos a ser instruidos; esc�chame con sencillez y humildad de esp�ritu, seriamente resuelto a cumplir con la voluntad divina hasta donde te sea dada a conocer; y te ense�ar� el temor del Se�or La manera verdadera y aceptable de adorarlo y servirlo, para que puedas agradarlo y glorificarlo aqu�, y ser admitido en su reino en el m�s all�.

Versículo 12

�Qu� hombre es el que desea la vida? Una vida larga y feliz, comenzada en este mundo y continuada para siempre en el pr�ximo; es decir, �qui�n es el que la desea seria y fervientemente, para estar dispuesto a realizar cualquier esfuerzo que pueda ser necesario? ser recetado a �l? porque de lo contrario la pregunta ser�a innecesaria, no habr�a ning�n hombre que la desee, al menos, fr�a y d�bilmente. Y ama muchos d�as en hebreo, ama los d�as para ver , es decir, en los cuales puede ver o disfrutar el bien , es decir, la prosperidad y la felicidad.

Versículos 13-14

Guarda tu lengua del mal, de toda forma de hablar mal, de todos los discursos injuriosos, falsos y enga�osos; y tus labios de hablar enga�os O, palabras enga�osas, contrarias a la verdad y la sinceridad, y los pensamientos e intenciones reales de tu coraz�n, y usados ??con el prop�sito de enga�ar a otros por ellos. Ap�rtate del mal, de todo pecado, y especialmente de todos los actos y pr�cticas inicuos y perjudiciales contra tu pr�jimo. Y haz el bien. Est� dispuesto a realizar todos los oficios buenos y amistosos a todos los hombres, seg�n tenga la oportunidad. Busque la paz Estudie, por todos los medios posibles, para vivir en paz y tranquilidad con todos los hombres, evitando rencores, debates, disensiones, contiendas y enemistades; y perseguirloNo s�lo lo abraces con alegr�a cuando se te ofrezca, sino que s�guelo con firmeza cuando parezca que huye de ti, y usa todos los esfuerzos posibles con palabras justas y amables, con condescendencia y con la mediaci�n o ayuda de otros para recuperarlo y componer todas las diferencias que puedan surgir entre usted y los dem�s.

Versículos 15-16

Los ojos del Se�or est�n sobre los justos. Esto se agrega para mostrar que la pr�ctica de estos deberes (Sal. 34: 13-14) es la verdadera y mejor, y de hecho, la �nica manera de ver ese bien propuesto y prometido; tanto porque esas personas justas, independientemente de las afrentas y ofensas de los hombres, est�n bajo el cuidado especial de Dios, como se indica en este vers�culo, y aquellos que cometen los males all� prohibidos encontrar�n, a su costa, que Dios es su enemigo. , Salmo 34:16 . El rostro del Se�or Es decir, su ira, a menudo llamada su rostro, porque la ira se descubre en el rostro de una persona; est� en contra de los que hacen el mal, que cometen pecado conocido en cualquier caso, especialmente en los mencionados anteriormente. Para cortar el recuerdo de ellos, &C. Absolutamente para desarraigarlos y destruirlos, y as� privarlos a ellos y a sus hijos de esa felicidad mundana, que es lo �nico que desean y buscan con sus malos caminos.

Versículo 18

Cercano est� el Se�or a los quebrantados de coraz�n, listo para escucharlos y socorrerlos; aunque, por el curso de su providencia hacia ellos, a veces les puede parecer a ellos mismos y a los dem�s que se mantienen alejados. �Dios est� cerca de todos los hombres; porque en �l viven; pero �l est� cerca de los quebrantados de coraz�n, en un sentido peculiar, ya que siempre est� listo y es capaz de ayudarlos; porque los hombres son mucho m�s capaces de ayudar a quienes valoran, cuando est�n presentes con ellos que cuando est�n ausentes; de donde se toma esta forma de hablar, aplicada a Dios �. Velero. Y salva a los contritos de esp�ritu Aquellos cuyo esp�ritu es verdaderamente humillado bajo la mano de Dios, y el sentido de sus pecados, cuyo coraz�n es subyugado y hecho obediente a la voluntad de Dios, y sometido a su providencia.

Versículos 19-20

Muchas son las aflicciones de los justos En el mundo pueden tener tribulaciones, y sus aflicciones y angustias pueden ser muchas (porque no deben prometerse a s� mismos tal prosperidad que los exima de la prueba de su fe y paciencia); pero el Se�or lo librar� de todos ellos. Es decir, a su debido tiempo, cuando ser� mejor para ellos ser liberados. Y en esto deben creerse felices, de que Dios los apoyar� en sus pruebas y tambi�n les pondr� fin cuando las haya probado suficientemente. �l guarda todos sus huesos, no solo su alma, sino su cuerpo, y todas sus partes y miembros; ninguno de ellos est� rotoDios no permitir� que le sobrevenga ning�n da�o real; aunque sea afligido a menudo, no ser� destruido. Pero estas palabras, aunque pueden entenderse de los hombres justos en general, de quienes son verdaderas en un sentido metaf�rico; Sin embargo, tienen un significado adicional en ellos, siendo dise�ados por el Esp�ritu de Dios para significar un gran misterio, a saber, que ninguno de los huesos de Cristo debe ser quebrantado cuando fue ejecutado, contrariamente a la costumbre habitual de tratar a los que fueron crucificados, cuyas piernas sol�an romperse, para aliviarlos antes de su dolor. Ver Juan 19:32 ; Juan 19:36 . La traducci�n del Dr. Kennicott de este vers�culo y el anterior hace que su aplicaci�n a Cristo sea perfectamente natural y f�cil, y bien merece la atenci�n del lector. Es por lo tanto,Muchas son las aflicciones del Justo; mas de todos ellos lo librar� el SE�OR; el SE�OR guarda todos sus huesos; ninguno de ellos se romper�. Esta traducci�n la soportar� bien el hebreo.

Versículo 21

El mal matar� al imp�o O, primero, el mal del pecado: su propia maldad, aunque dise�ada contra otros, se destruir� a s� mismo. O, 2d, El mal de la miseria. Mientras que las aflicciones de los hombres buenos tendr�n un resultado feliz, las de ellos terminar�n en su destrucci�n total y final. Los que aborrecen a los justos ser�n desolados. Los que los persiguen y traman su ruina, lo cual es una prueba de que los odian, por mucho que pretendan lo contrario. El Dr. Kennicott traduce esta �ltima cl�usula: Los que odian al Justo, Jehov� los asolar�; una predicci�n terriblemente cumplida en el castigo de los perseguidores del Mes�as, uno de cuyos t�tulos propios era este, Hechos 3:14 .

Versículo 22

El Se�or redime el alma de sus siervos , es decir, sus vidas o sus personas, de los maliciosos designios de todos sus enemigos , del poder del sepulcro y del aguij�n de toda aflicci�n. �l evita que pequen en sus problemas, que es lo �nico que podr�a causarles un da�o real, y evita que se desesperen y que se les quite la posesi�n de sus propias almas. Ninguno de los que en �l conf�an quedar� desolado ni desamparado; porque no ser�n separados de la comuni�n con Dios. Y nadie est� desolado, sino aquel a quien Dios ha abandonado, ni nadie se deshace hasta que est� en el infierno. En lugar de, ser� desolado , en este vers�culo y el anterior, el margen dice, ser� culpable; como la palabra ??????,jeshemu , aqu� utilizado, se traduce frecuente y correctamente. De hecho, incluye en �l tanto la idea de culpa como el castigo incurrido por ella. Ahora, aquellos que en el camino del verdadero arrepentimiento, la fe viva y la nueva obediencia, conf�an en el Se�or, son ambos rescatados de la culpa y del castigo al que los hab�a expuesto. Puede que no sea impropio observar aqu� que, como este es otro de los Salmos alfab�ticos, cada vers�culo comienza con una letra distinta del alfabeto hebreo, excepto el quinto, que incluye dos letras; de modo que este vers�culo es una especie de oraci�n separada, agregada, como en Salmo 25 , m�s all� del alfabeto, quiz�s para que el salmo termine con una promesa en lugar de una amenaza. Por una raz�n similar, los jud�os repiten un vers�culo al final de algunos libros del Antiguo Testamento.

Información bibliográfica
Benson, Joseph. "Comentario sobre Psalms 34". Comentario de Benson. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/rbc/psalms-34.html. 1857.