I. Este deseo de Job debe ser estudiado, no meramente como la experiencia de un individuo en circunstancias especiales, sino como una experiencia humana , cuyos g�rmenes est�n en el hombre como hombre; en otras palabras, el anhelo de Job por un mediador es el anhelo de la humanidad.
II. La demanda de un mediador est� respaldada e impulsada por dos grandes hechos interrelacionados: el pecado y el sufrimiento.
III. El anhelo de Job se satisface literal y plenamente. Al grito que proviene de ese lejano naufragio de la felicidad terrenal: "�l no es un hombre como yo", podemos responder hoy: "�l es un hombre". A las palabras: "No hay hombre de d�a que imponga su mano sobre nosotros a los dos", respondemos: "Hay un solo Dios y un solo Mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo Hombre".
MR Vincent, Dios y el pan, p. 265.
Referencias: Job 9:20 . Spurgeon, Sermons, vol. vii., p�g. 350. Job 9:33 . Ib�d., Vol. xi., n�m. 661. Job 9-10 S. Cox, Expositor, primera serie, vol. v., p�gs. 36 y 113; Ib�d., Comentario sobre Job, p�g. 118. Job 10:2 .
Información bibliográfica Nicoll, William R. "Comentario sobre Job 9". "Comentario Bíblico de Sermón". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/sbc/job-9.html.
Versículos 1-35
Job 9:32
I. Este deseo de Job debe ser estudiado, no meramente como la experiencia de un individuo en circunstancias especiales, sino como una experiencia humana , cuyos g�rmenes est�n en el hombre como hombre; en otras palabras, el anhelo de Job por un mediador es el anhelo de la humanidad.
II. La demanda de un mediador est� respaldada e impulsada por dos grandes hechos interrelacionados: el pecado y el sufrimiento.
III. El anhelo de Job se satisface literal y plenamente. Al grito que proviene de ese lejano naufragio de la felicidad terrenal: "�l no es un hombre como yo", podemos responder hoy: "�l es un hombre". A las palabras: "No hay hombre de d�a que imponga su mano sobre nosotros a los dos", respondemos: "Hay un solo Dios y un solo Mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo Hombre".
MR Vincent, Dios y el pan, p. 265.
Referencias: Job 9:20 . Spurgeon, Sermons, vol. vii., p�g. 350. Job 9:33 . Ib�d., Vol. xi., n�m. 661. Job 9-10 S. Cox, Expositor, primera serie, vol. v., p�gs. 36 y 113; Ib�d., Comentario sobre Job, p�g. 118. Job 10:2 .
Spurgeon, Sermons, vol. v., n�m. 283; Ib�d., Morning by Morning, p�g. 49. Job 10:8 . H. Melvill, Penny Pulpit, n�m. 2342; Expositor, tercera serie, vol. iv., p�g. 290.