Bible Commentaries
Isaías 14

El Ilustrador BíblicoEl Ilustrador Bíblico

Versículo 1

Porque el Se�or tendr� misericordia de Jacob

La misericordia de Dios y los conversos de Israel

I. EL PRINCIPIO DEL GOBIERNO MORAL DE DIOS - Misericordia. Este pueblo hab�a pecado gravemente.

1. Hab�an pecado contra la luz. La revelaci�n directa del cielo les hab�a sido dada como naci�n.

2. Se rebelaron en medio de privilegios. El Dios Poderoso interfiri� para protegerlos de sus enemigos.

3. Hab�an pecado a pesar de las reprimendas y los castigos. El pueblo rebelde hab�a sido llevado cautivo a una naci�n pagana.

II. LA CONSTANCIA DE LOS PROP�SITOS DIVINOS - �A�n elegir�, etc. A pesar de toda su rebeli�n, a�n tendr� misericordia de ellos. Nada puede separarse del amor de Dios.

III. LA BENDICI�N RESTAURATIVA DE LA RELIGI�N. Cuando Dios toma a un hombre en sus manos, lo restaura. En el para�so fue imagen y asociado de Dios. La salvaci�n no lo convertir� en nada m�s. El cielo contendr� elementos adicionales de alegr�a, pero el hombre ser� restaurado.

IV. EL CONTAGIO DE ENTUSIASMO. Cuando los jud�os regresaran, muchos de los paganos, dejando su propio pa�s y sus �dolos, regresar�an con ellos. "Y los extra�os se unir�n a ellos". Esto fue parte del dise�o de Dios en el cautiverio. No fue solo para castigar a su pueblo por su pecado, sino tambi�n para brindarles una bendici�n a los dem�s. Dios a menudo designa las aflicciones de su pueblo para su propia gloria, y no debemos lamentarnos, sino regocijarnos si se nos considera dignos de promover su causa.

V. EL ATRACTIVO DE LA RELIGI�N. Implica afecto y consideraci�n. Es nuestro deber hacerlo atractivo para ganar a los dem�s. ( Homilista. )

La pasi�n de Dios por Israel

Tenemos aqu� en esencia la reconfortante sustancia de los cap�tulos. 40-46. Babilonia cae para que Israel se levante. ( F. Delitzsch, DD )

Versículo 3

El Se�or te har� descansar de tu dolor

Corona del dolor

I. EL DOLOR ES LO COM�N. Aunque nadie est� siempre afligido, en la vida hay muchas ocasiones en las que la mente est� adolorida y el coraz�n magullado. Sin embargo, las personas con dolor de coraz�n a menudo cantan; encuentran alivio al respirar un himno de confianza en oraci�n. �Qu� hermoso es el buen hombre afligido! A un ni�o le duele a menudo la mente porque no se le entiende y no tiene la simpat�a sincera de quienes lo dirigen. Las mujeres tambi�n est�n tristes.

Aunque un hombre se encuentre en el estado de vida m�s afortunado, tendr� algo que herir su coraz�n. He o�do hablar de una dama cuyo marido era la adoraci�n de su mente y coraz�n; y cuando muri� en un accidente ferroviario, ella El dolor fue tan terrible que en un momento pareci� diez a�os mayor. Poco tiempo despu�s perdi� a sus hijos, y m�s tarde, por la quiebra de un banco, su fortuna desapareci�; pero soport� estas desgracias con serenidad, y su ministro. una vez pregunt�: ��C�mo es que puedes soportar tan bien la p�rdida de tus hijos y tu dinero?� Ella respondi�: �En la muerte de mi esposo, la herida m�s grande fue la primera.

�No es prudente encontrar el dolor a medias. Pero hay un dolor que debemos buscar y cultivar; es el dolor de no ser m�s piadosos. Hay otro dolor que vale la pena tener; es ese dolor de coraz�n que siente por el hombre o la mujer heridos en el conflicto de la vida. En el mundo antiguo, se consideraba que el dolor era la maldici�n de Dios, pero los primeros cristianos vieron que Dios lo consideraba una disciplina sagrada y, por lo tanto, cuando el dolor se apoder� de ellos, lo llamaron "tribulatio", usando la palabra y la imagen para establecer una verdad elevadora, a saber, la separaci�n del mal en ellos del bien.

II. Perm�tanos notar UNO O DOS DOLORES PERSONALES EN LOS QUE ALGUNOS DE USTEDES EST�N M�S O MENOS PREOCUPADOS.

1. Si tiene la mente adolorida porque ha hecho algo malo, deje que su primer pensamiento sea de gratitud, que Dios puede perdonar y perdona sus pecados.

2. Mucha gente buena tiene la mente dolorida debido a un problema f�sico o temporal. �Qu� es m�s desagradable que escuchar el chirrido de una rueda de carro cada vez que gira? Entonces, tienes en tu lote algo as� como una rueda chirriante, y cada movimiento te hace sentir la aflicci�n. Pero el aceite de la gracia divina lo curar�.

III. LA CORONA DEL DOLOR ES CONFIAR EN DIOS. �Recon�celo en todos tus caminos�, etc.

IV. Aprendamos EL OBJETO DEL DOLOR. Es ense�arnos a ser pacientes y amables. Si pones rosas en una vasija rajada de la arcilla m�s com�n, exhalar� perfume; y de la planta m�s espinosa, la espina, recolectamos las flores m�s dulces, De modo que si la paz de Dios perfuma tu coraz�n afligido, las espinas y zarzas de tu aflicci�n iluminar�n tu vida con las flores de la piedad y la caridad. Sobrelleva tu dolor con verdadero valor y sublime alegr�a, no solo por ti mismo, sino por nosotros que te miramos; porque deseamos aprender la manera de soportar nuestro dolor. ( W. Birch. )

Dios una isla cuando las fortunas se arruinan

Perm�tanme hablarles de un hombre que regres� a su casa un d�a y, sent�ndose en su sill�n, se llev� la mano a la frente como si tuviera un gran problema. Su peque�o ni�o se le acerc� y le dijo: "Padre, �qu� te pasa?" Mir�ndola con ojos de desesperaci�n, respondi�: "�Ah, peque�a Mary, estoy arruinado!" Ella dijo: "Arruinado, padre, �qu� es eso?" �l respondi�: �Bueno, hijo m�o, soy como un hombre en un bote en el mar, y durante una tormenta el bote se ha volcado y �l est� al este en una isla desolada.

Ella se subi� a sus rodillas, le acarici� la cara y, al cabo de un rato, exclam�. �Bueno, padre, ya sabes, solo has perdido el barco; no te has perdido, �verdad? Con l�grimas en los ojos, dijo: ��Ah, no, gracias a Dios! Solo he perdido el bote; mi coraz�n y mi vida permanecen! " Luego pregunt�: "Padre, �c�mo se llama la isla?" �l respondi�: �Eso es lo peor, Mary.

" "No s�." Ella dijo: �Pero, padre, lo s�; s�, s� el nombre de la isla en la que est�s; �Padre, es una linda isla! El desdichado trat� de sonre�r, y acerc�ndose la carita querida al pecho, dijo: "�Mar�a, querida, dime el nombre de la isla!" Ella respondi�: �Oh, padre, �no lo sabes? �Est�s aburrido esta noche! �Padre, el nombre de la isla es Dios! El hombre afligido estaba muy, quieto, y la peque�a Mar�a, mir�ndolo a la cara, le rode� el cuello con los brazos y le dijo: �Pobre padre, �qu� te hace llorar? �Por qu� no vas arriba y le cuentas a Dios? " Luego baj� suavemente al querido ni�o y fue a contarle a Dios el dolor de su coraz�n. Es cierto que su negocio hab�a ca�do, pero una mano divina lo sostuvo. ( W. Birch. )

Confiar en Dios en la aflicci�n

Un predicador de color ten�a la costumbre de exhortar a su pueblo cuando estaba en aflicci�n a "Truss de Lord". Cuando estaban en una gran angustia, solo ten�a un remedio, "�Brudder, braguero de Lord!" Un d�a, sin embargo, mientras el viejo p�rroco cruzaba un r�o, el bote volc� y no pod�a nadar, solt� un gran balbuceo y grit� como un loco. Despu�s de muchos problemas, lo sacaron y lo llevaron sano y salvo a la orilla del r�o, cuando uno de su congregaci�n dijo: �Predicador de Masea, �por qu� no atacaste a Lord? �Por qu� gritaste y gritaste cuando estabas en el r�o? �Por qu� no te enredaste con De Lord y fuiste paciente? El ministro oscuro exclam�: �Ah, ya sabes, brudder, es truss de Lord en la tierra, no en el agua.

�Por supuesto, cualquiera puede confiar en el Se�or cuando est� en la tierra de la paz y la comodidad; pero necesita fe y fortaleza cristianas para estar contento en las aguas de la aflicci�n. ( W. Birch. )

La actitud cristiana hacia los problemas

Los cristianos que abandonan su trabajo religioso especial porque est�n afligidos, pueden compararse con clavos oxidados en una bolsa debajo del mostrador de la ferreter�a; mientras que el hombre que sigue dando lo mejor de s� mismo, creyendo que Dios est� con �l, es un hombre en un lugar seguro, dispuesto a soportar todo el peso que de �l se cuelga. ( W. Birch. )

Versículos 4-23

Tomar�s este proverbio contra el rey de Babilonia

El "proverbio contra el rey de Babilonia"

Generalmente se piensa que Lowth no habla con exageraci�n cuando la llama la mejor [canci�n] de su tipo existente en cualquier idioma.

Es una canci�n de triunfo en forma de canto f�nebre y, por lo tanto, implica un trasfondo de sarcasmo o iron�a. ( Sir E. Strachey, Bart. )

Una oda de triunfo

Esta oda, si ha de ser admirada como se merece, debe leerse en su conjunto: su perfecci�n como obra de arte, su imaginer�a pintoresca, la delicada y sutil vena de iron�a por la que es penetrada - se llama un "Canci�n de burla" - no soportar� citas parciales o par�frasis. La l�nea de pensamiento es la siguiente. En la primera estrofa ( Isa�as 14:4 ), el profeta declara con j�bilo c�mo al fin el tirano se calma, la tierra est� en paz; s�lo se oye el sonido de la alegr�a.

En el segundo ( Isa�as 14:9 ), acompa�a en el pensamiento a la Sombra del Rey de Babilonia en su viaje al Inframundo, e imagina el saludo ir�nico que lo recibe de los labios de los otros reyes - a�n, como en la tierra, supuestamente investido con la panoplia del Estado. La tercera estrofa ( Isa�as 14:12 ) describe la humillaci�n del monarca babil�nico en toda su magnitud: el que se hubiera unido a las filas de los dioses, est� al este hasta los rincones m�s rec�nditos del pozo.

En la cuarta y �ltima estrofa (vers�culos 16-20), el pensamiento del profeta pasa al campo de batalla - de la Sombra d�bil al cad�ver insepulto y deshonrado: los transe�ntes expresan su asombro por el contraste que presenta su destino con el de otros reyes despu�s de su muerte; est� excluido del lugar de enterramiento real, arrojado a un lado como una rama sin valor, escondido entre los cuerpos de soldados rasos muertos.El profeta concluye con un ep�logo, hablado en su propia persona, y reafirmando enf�ticamente la ruina final e irrecuperable de la gran ciudad ( Isa�as 14:21 ).

El mejor comentario sobre esta profec�a es la larga y apasionada invectiva contra Babilonia contenida en Jeremias 50:1 ; Jeremias 51:1 ( Prof. ER Driver, DD ).

Destrucci�n del Rey de Babilonia

La monarqu�a babil�nica pretend�a ser absoluta, universal y perpetua, y en estas pretensiones rivalizaba con el Todopoderoso; es, por lo tanto, muy justamente no s�lo derribado, sino que se regocija cuando est� abatido. ( M. Henry. )

"La ciudad dorada"

( Isa�as 14:4 ) es una descripci�n gr�fica de esa ciudad, que era famosa por sus inmensas riquezas y el esplendor interno de las par�bolas. ( R. Macculloch. )

Liberaci�n de un dominio maligno

Si las naciones se regocijan por el derrocamiento de un pr�ncipe altivo y tir�nico y el restablecimiento de la tranquilidad y la libertad, �cu�nto mayor deber�a ser el triunfo de aquellos que son liberados del dominio de diversas concupiscencias impetuosas y disfrutan de las ganancias de descanso espiritual y eterno! ( R. Macculloch. )

"Infierno"

( Isa�as 14:9 ), como siempre en el Antiguo Testamento = el Hades griego; no un lugar de tormento, sino el �lugar de reuni�n de todos los vivientes� ( Job 30:23 ). La representaci�n del profeta se basa en las ideas corrientes entre la gente. Vea las �Conferencias sobre la poes�a sagrada de los hebreos� del obispo Lowth, Conferencia 7.

La misma idea es elaborada con mayor detalle por Ezequiel 32:17 . ( Prof. SR Driver, DD )

Una imagen del alma

La idea mitol�gica de Hades procede de la doble verdad de que qu� y c�mo ha sido el hombre en este mundo no se borra en el otro mundo, sino que se vuelve esencialmente manifiesto, y que hay una autoformaci�n inmaterial del alma en la que todo lo que el hombre individual se ha convertido a trav�s de su propia autodeterminaci�n bajo las relaciones dadas por Dios se refleja como en un espejo, y eso en una figura permanente.

Esta imagen del alma, a la que se relaciona el cad�ver como la forma destrozada de un molde, es la corporeidad sombr�a de los habitantes del Hades, en la que aparecen esencialmente, aunque en condici�n de esp�ritus, como lo que eran en este vida. ( F. Delitzsch. )

"Infierno"

El �infierno� se mueve como se mueve una ciudad cuando un gran rey es llevado prisionero all�, y todos salen corriendo de su casa para verlo. ( W. Day, MA )

Lucifer

( Isa�as 14:12 ): - En su esplendor [el Rey de Babilonia] es comparado con la estrella de la ma�ana, que era adorada por los babilonios bajo el nombre de Istar. ( Prof. J. Skinner, DD )

Impias expectativas defraudadas

( Isa�as 14:13 ): - Que �l fuera al Seol en absoluto fue un destino nunca contemplado por su orgullo alt�simo y autodeificante. ( Prof. J. Skinner, DD )

Orgullo

El orgullo y la ambici�n no conocen l�mites ( Isa�as 14:14 ). ( R. Macculloch. )

"El avetoro"

( Isa�as 14:23 ), hebreos kippod. La palabra aparece tambi�n en el cap. Sofon�as 2:14 . Se ha convertido en nutria, tortuga, b�ho, castor, puercoesp�n (RV . ). Ninguna de las representaciones propuestas es satisfactoria. El avetoro est� m�s libre de objeciones que cualquier otra ave que pudiera proponerse.

Es un ave solitaria, y ama los lugares que les proporcionar�an los pantanos que se encontraban en los distritos de Edom, Babilonia y N�nive, como fruto de la desolaci�n que les envi�. Se alimenta de noche y se esconde durante el d�a entre la hierba alta y los juncos de sus h�bitats favoritos. ( J. Duns, DD, FRSE )

"El seno de la destrucci�n"

( Isa�as 14:23 ): - Cuando un pueblo no tiene nada entre ellos m�s que tierra e inmundicia, y no va a ser limpiado con la escoba de la reforma, �qu� pueden esperar sino ser barridos de la faz de la tierra con �el seno de destrucci�n �? ( M. Henry. )

El j�bilo de la Iglesia por sus enemigos

Seguramente, en t�rminos como estos, la Iglesia un d�a se regocijar� por todos sus enemigos, y especialmente por el gran poder ap�stata de Babilonia la Grande, la Ciudad de las Siete Colinas. Y a�n m�s, sobre el pr�ncipe expulsado de este mundo, del cual el Rey de Babilonia y otros pr�ncipes de este mundo han sido tipos y representantes. ( FB Meyer, BA )

Versículo 9

El infierno de abajo se mueve para ti

Los primeros cinco minutos despu�s de la muerte

Se cuenta una historia muy conocida de un hombre que hab�a servido a su rey y a su pa�s en muchas tierras lejanas, y en muchas experiencias extra�as, regresando a casa y hablando con sus amigos de las maravillosas vistas que hab�a visto, y las maravillosas experiencias por las que hab�a pasado.

Y cuando le comentaron sobre el tipo de maravillas que hab�a experimentado y conocido, las comprob� diciendo: "Hay algo m�s maravilloso que todo lo que he conocido hasta ahora, que todav�a tengo que experimentar", y cuando le preguntaron qu� fue, dijo, "Son los primeros cinco minutos despu�s de la muerte". �Los primeros cinco minutos despu�s de la muerte! Fue sobre lo que sucedi� en los primeros cinco minutos despu�s de la muerte que el profeta se ejercit� aqu� en esta profec�a en particular. ( Davey Biggs, DD )

Vida m�s all� de la tumba

1. El profeta cre�a que para aquellos que atraviesen la puerta de la muerte habr� reconocimiento en la vida extra�a m�s all� de la tumba. Cre�a que aquellos que habitaban ese mundo antes de que otros individuos entraran en �l los conocer�an, estar�an all� listos para recibirlos, saludarlos como en esta tranquilidad con horror, con consternaci�n, con, por as� decirlo, felicitaciones por lo que hab�a sido tir�nico en el mundo de la vida antes de que la muerte hubiera encontrado ahora, por as� decirlo, su nivel, la oportunidad de la tiran�a hab�a desaparecido.

El profeta describe la expectativa que hab�a en los corazones de aquellos que hab�an sabido lo que era estar cruelmente oprimidos en este mundo cuando su opresor vino a unirse a ellos. Muestra que la actitud de aquellos que estaban dentro de la tumba en el mundo invisible era de expectativa.

2. Hay memoria ah�, memoria no solo de nuestro yo pasado, sino tambi�n de otras personas; memoria, tambi�n, de los que viven en la tierra. ( Davey Biggs, DD )

Reconocimiento m�s all� de la tumba

Sabemos que lo que era solo una conjetura en la mente del profeta cuando pint� el infierno que agitaba a los muertos para encontrarse con Belsasar, rey de Babilonia, se ha convertido en certeza a trav�s de la revelaci�n que nos dio nuestro Se�or Jesucristo. No s� c�mo alguien puede leer la par�bola del rico y L�zaro y no sentir que, sea cual sea la intenci�n con la que se dijo la par�bola, nuestro Se�or, de paso, nos ense�a que en la vida m�s all� de la tumba la personalidad que He conocido aqu� en esta vida contin�a.

As� como la personalidad se manifiesta en la timidez, nuestro Se�or muestra que el rico y L�zaro son conscientes de su propia existencia. Tambi�n hay reconocimiento mutuo. El rico no tiene ninguna duda de qui�n es en cuyo seno reposaba L�zaro; y supongo que al menos quince siglos los separaron. De la misma manera misteriosa, Pedro, Santiago y Juan en el Monte de la Transfiguraci�n sab�an que eran Mois�s y El�as los que estaban hablando con el Mes�as.

Existe un maravilloso poder de reconocimiento incluso de aquellos a quienes nunca hemos conocido. Conoceremos, y nuestro Se�or Jesucristo desea que sepamos que conoceremos, a las grandes personas del pasado con quienes tenemos grandes deudas. ( Davey Biggs, DD )

Versículo 24

Seguramente como he pensado, as� suceder�

La inteligencia infinita de dios

Pensar y tener un prop�sito son los atributos de todos los seres racionales, ya sean creados o increados.

I. Dios es un ser tan infinitamente perfecto, que Sus pensamientos y prop�sitos son CO-ETERNOS CON S� MISMO. Dios no puede existir sin sus pensamientos y prop�sitos. A un ni�o en la escuela en Francia se le pregunt� si Dios razonaba o no. El ni�o hizo una pausa y respondi�: �No: Dios es demasiado perfecto para razonar. Lo sabe todo sin razonar ". El propio Newton no podr�a haber dado una mejor respuesta. Todo lo que existe en Dios ahora, ha existido en �l desde la eternidad.

II. Como Sus pensamientos y posturas fluyen exclusivamente de �l mismo, son ABSOLUTOS; son, principalmente considerados, incondicionales. �sta es una necesidad que no milita, en lo m�s m�nimo, contra la responsabilidad del hombre. Deben haber sido absolutos, o ning�n ser podr�a haber existido.

III. Los pensamientos y prop�sitos del Todopoderoso son INFINITAMENTE GLORIOSOS; en otras palabras, son infinitamente dignos de s� mismo. Es en el cumplimiento de Sus propios pensamientos y prop�sitos que �l desarrolla toda la belleza de Sus propias perfecciones; es en el desarrollo de toda la belleza de sus propias perfecciones, que confiere todo bien a la criatura. Tome dos axiomas en divinidad. Todo el bien proviene de Dios, todo el mal proviene de la criatura. Haga justicia a estas verdades y, como dos claves, desbloquear�n algunos de los pasajes m�s dif�ciles de las Escrituras.

IV. El prop�sito de Dios es REPLETO DE AMOR Y TERNURA. El prop�sito soberano de Dios, hablando con propiedad, no involucra nada m�s que bien. El mal se remonta a otra fuente. Pero, �qu� comprende principalmente? Un salvador. Se nos permiti� caer en la culpa m�s profunda, para que Dios pudiera mostrar Su gloria al m�ximo en nuestra salvaci�n. ( W. Howels. )

Los prop�sitos de Dios deben cumplirse

Las ruedas de un reloj o de un reloj se mueven una contra otra, en una direcci�n y otra en otra, pero todas sirven a la intenci�n del trabajador, para mostrar la hora o hacer que el reloj suene. Entonces, en el mundo, la providencia de Dios puede parecer contraria a Sus promesas. Un hombre toma este camino, otro corre por ese camino. Los buenos hombres van por un lado, los malvados por otro. Sin embargo, en conclusi�n, todos cumplen la voluntad y se centran en el prop�sito de Dios, el gran Creador de todas las cosas. ( R. Sibbes, DD )

Versículos 29-32

No te regocijes, toda Palestina

Filistea

Filistea era la costa suroeste de la tierra de Cana�n, a toda la cual posteriormente dio su nombre en la forma griega de Palestina, y nominalmente estaba incluida en la tribu de Jud�.

Originalmente estaba habitada por los avitas, que fueron expulsados ??por los caftorim, una raza de origen egipcio, pero que se supon�a que proced�an inmediatamente de Creta o Chipre, y que, bajo el nombre de filisteos, continuaron como una especie distinta, y en la mayor�a de los casos. parte naci�n independiente, a pesar de los esfuerzos de Israel por someterlos. ( Sir E. Strachey, Bart. )

Los filisteos

Los filisteos eran enemigos formidables de Israel en los d�as de Samuel y de Sa�l. Los reyes fuertes, David, Salom�n y Josafat, los mantuvieron en sujeci�n, pero en los d�as de Joram invadieron Jud� 2 Samuel 5:17 ; 2 de Samuel 21:15; 2 Cr�nicas 17:11 ; 2 Cr�nicas 21:16 ).

Uz�as los reprimi� de nuevo y paraliz� su poder, desmantelando sus ciudades amuralladas y construyendo fortalezas propias para comandarlas ( 2 Cr�nicas 26:6 ); y sin duda continuaron siendo tributarios durante el gobierno todav�a vigoroso de su sucesor Jotam. Pero durante el d�bil reinado de Acaz, �invadieron las ciudades de la tierra baja y del sur de Jud�; y no s�lo invadi�, sino que se instal� en ellos y sus pueblos vecinos ( 2 Cr�nicas 28:18 ): ya este estado de cosas se dirige Isa�as en esta profec�a. ( Sir E. Strachey, Bart. )

La vara del capataz

La vara del capataz es la imagen frecuente de Isa�as para el control de una naci�n dependiente y tributaria: todos los Filisteos se regocijaron cuando la vara de David y de Uz�as cay� rota de las manos de Acaz, y expresaron su gozo desperdiciando o tomando posesi�n de su tierras del antiguo amo; pero Isa�as les advierte que la vieja ra�z de Israel, que desde los d�as de Sans�n hab�a enviado muchas varas con vida de serpiente como la vara de Mois�s, pronto volver�a a producir un basilisco con su escudo real, su inevitable manantial y su mordedura mortal, para vengarse de sus enemigos. ( Sir E. Strachey, Bart. )

Ezequ�as y el Mes�as

El basilisco es Ezequ�as y el drag�n volador es el Mes�as (tal es la explicaci�n del Targum); o, lo que es lo mismo, el primero es el reino dav�dico del futuro inmediato y el segundo el reino dav�dico del futuro �ltimo. La figura puede parecer inapropiada, porque la serpiente es un s�mbolo del mal; pero no es un s�mbolo meramente del mal de las criaturas, sino tambi�n de la maldici�n Divina; la maldici�n, sin embargo, es la energ�a de la justicia penal, y como ejecutor de esta justicia como juicio de Dios sobre Filistea, aqu� se llama al rey dav�dico una serpiente en un cl�max que se eleva a trav�s de tres etapas.

Quiz�s la elecci�n de la figura fue sugerida por G�nesis 49:17 ; porque la palabra de Dan se cumpli� en Sans�n danita, enemigo ac�rrimo de los filisteos. ( F. Delitzsch. )

La ley de conquistas y exterminios

Si la difusi�n de la civilizaci�n, el conocimiento, la justicia, la virtud, la religi�n y cualquier otra cosa que distinga a los hombres de las bestias es un bien y no un mal, entonces es bueno que los hombres utilicen todos los medios que sean realmente necesarios para lograr ese fin. aunque algunos de ellos nunca sean tan rudos y desagradables; y no es menos vil en la moral p�blica que en la privada rehuir la responsabilidad de hacer lo que sabemos que es bueno haber hecho.

Si una naci�n d�bil, afeminada y degenerada puede mejorarse mediante la sujeci�n a una naci�n m�s fuerte, m�s viril y m�s virtuosa, entonces no es solo el derecho sino el deber de esta �ltima de someterla, siempre que las indicaciones de la providencia de Dios sean los de la paz o la guerra, muestran que ha llegado el momento. Y si la naci�n no es meramente degenerada sino irremediablemente corrupta, entonces no es s�lo el derecho sino el deber de alguna naci�n m�s digna de destruirla y librar al mundo de sus abominaciones. ( Sir E. Strachey, Bart. )

El Evangelio, un medio de salvaci�n nacional

El Evangelio nos ha dado, en la cristiandad moderna, medios para recuperar naciones que habr�an sido irrecuperables por cualquier medida que los griegos, los romanos o incluso los jud�os pudieran aplicar; y estamos obligados a actuar con la correspondiente dulzura y paciencia. ( Sir E. Strachey, Bart. )

"El primog�nito de los pobres"

( Isa�as 14:30 ) parece ser un modismo hebreo para el �realmente, eminentemente pobre�, como el de �Hijo del Hombre� para expresar al hombre. O el profeta puede querer decir que el primero de la pr�xima generaci�n, los hijos de los actuales israelitas deprimidos, ser�n liberados de las miserias que los filisteos est�n infligiendo ahora a sus padres. ( Sir E. Strachey, Bart. )

Versículo 32

�Qu� responder� entonces a los mensajeros de la naci�n?

La obra de Dios en la fundaci�n de Sion

El reino de Jud� estaba abatido y quebrantado; las invasiones extranjeras y las divisiones intestinales lo hab�an hecho as�. En este estado de cosas, Dios se da cuenta del gozo y el triunfo de los filisteos. Para sacarlos de su orgullo y jactancia, les hace saber que de las personas a quienes despreciaban su desolaci�n estaba cerca, aunque parec�an estar perplejos y abandonados por una temporada ( Isa�as 14:29 ).

I. Hay UNA CONSULTA. ��Cu�l responder�?�, Etc. Vienen a hacer preguntas sobre la obra de Dios entre su pueblo, y es conveniente que se les d� una respuesta. Dos cosas son observables en este interrogatorio.

1. Las naciones alrededor estar�n investigando diligentemente acerca de las dispensaciones de Dios entre su pueblo. Hay ciertos afectos y principios que est�n activos en las naciones, que los inquietar�n y los pondr�n siempre en esta investigaci�n. El pueblo de Dios, por una raz�n u otra, ser� en todas las estaciones un pueblo separado. Tan pronto, entonces, alg�n pueblo, o parte de ellos, est� as� dedicado a Dios, pero todas las naciones alrededor, y aquellos entre ellos que no est�n comprometidos de la misma manera con ellos, instant�neamente los ven como completamente separados de ellos, teniendo otros caminos, fines e intereses que ellos; siendo construido enteramente sobre otra cuenta y fundamento.

No los consideran como pueblo ni como naci�n. La conclusi�n que hacen acerca de ellos es la de Am�n ( Ester 3:8 ).

(1) Est�n llenos de enemistad contra ellos.

(2) Un segundo principio, por el cual se les somete a sus preguntas, es el miedo. Les temen y, por tanto, sabr�n c�mo est�n las cosas con ellos y cu�les son las obras de Dios entre ellos ( Habacuc 3:7 ; Salmo 48:1 ). El miedo es sol�cito e inquisitivo; no dejar� nada sin buscar, sin mirar; encontrar�a el interior y el fondo de todo, en lo que concierne. Aunque cuanto m�s encuentra, m�s aumenta; sin embargo, sus investigaciones son mayores, temiendo m�s lo que no sabe que lo que sabe.

2. Los asuntos de las dispensaciones de Dios entre su pueblo ser�n tan evidentes y gloriosos, que todos, cualquiera, aunque nunca tan d�bil, si no cegado por el prejuicio, podr� dar una respuesta convincente sobre ellos a las preguntas de los hombres.

II. EXISTE LA RESOLUCI�N DADA DE LA CONSULTA. De esto hay dos partes:

(1) Lo que Dios ha hecho.

(2) Lo que su pueblo debe o debe hacer. Concluya en cualquier momento la obra de Dios y el deber de su pueblo juntos, y ser�n una respuesta suficiente a la pregunta de cualquier hombre sobre el estado de cosas entre ellos.

1. El gran designio de Dios en sus poderosas obras y dispensaciones es el establecimiento de su pueblo, y su debido inter�s, en sus varias generaciones. Para aclarar esto, previamente se deben considerar algunas cosas:

(1) El inter�s apropiado del pueblo de Dios es glorificarlo en sus diversos lugares, estaciones y generaciones: ninguno de nosotros debe vivir para s� mismo.

(2) Dios es el �nico juez apropiado e infalible, en qu� estado y condici�n Su pueblo glorificar� mejor y m�s su nombre, en sus varias generaciones.

(3) Las dispensaciones providenciales son descubrimientos de la sabidur�a de Dios al disponer de la condici�n de su pueblo, para que puedan glorificarlo mejor. Teniendo en cuenta estas cosas, es f�cil dar luz y evidencia a la afirmaci�n establecida.

2. Es deber del remanente preservado de Dios, dejando a un lado todos los dem�s prop�sitos y artilugios, dedicarse a la obra de Dios, fundando Sion y preservando el inter�s com�n de Su pueblo. �Dios fund� Sion, y los pobres del pueblo confiar�n en ella�, o se aferrar�n a ella. Somos propensos a vagar por colinas y monta�as, todos caminando en la imaginaci�n de su propio coraz�n, olvidando nuestro lugar de descanso.

Cuando Dios tra�a el poder de los babilonios sobre su pueblo, el profeta Jerem�as no pudo persuadir a toda la naci�n de que se sometiera a su gobierno, ni a muchos individuos entre ellos para que cayeran ante �l en particular. Y cuando se cumpli� el tiempo de su liberaci�n de ese cautiverio, �cu�n dif�cilmente fueron persuadidos de abrazar la libertad ofrecida! ( J. Owen, DD )

El cuidado de Dios por su pueblo

1. Las grandes cosas que Dios hace por su pueblo son, y no pueden dejar de ser, tomadas en cuenta por sus vecinos ( Salmo 126:2 ).

2. Se enviar�n mensajeros para informarse sobre ellos. Jacob e Israel han sido durante mucho tiempo un pueblo distinguido de todos los dem�s y dignos con favores extraordinarios; y por tanto, unos por buena voluntad, otros por mala voluntad, y todos por curiosidad, se interesan por ellos.

3. Nos interesa estar siempre dispuestos a �dar raz�n de la esperanza� que tenemos en la providencia de Dios, as� como en su gracia, en respuesta a todo aquel que lo pida, �con mansedumbre y temor�.

4. El resultado de los tratos de Dios con su pueblo ser� tan manifiestamente glorioso que cualquiera, todos, podr�n dar cuenta de ellos a los que pregunten acerca de ellos. ( M. Henry. )

La Iglesia fundada como refugio

A primera vista, la predicci�n que cierra el cap�tulo catorce de Isa�as parece s�lo de inter�s temporal, y hablar de juicios que en muy pocos a�os estaban destinados a caer sobre uno de los enemigos m�s empedernidos del antiguo pueblo de Dios; y, sin embargo, no puedo dejar de pensar en esos comentaristas que, siguiendo la opini�n de varios de los padres de la Iglesia, han encontrado en el pasaje una alusi�n al Evangelio ya la Iglesia de Cristo.

I. Que la profec�a ser�a de PRESIONANTE E INMEDIATO INTER�S PARA LOS CONTEMPOR�NEOS DEL PROFETA es obvio por la manera en que se introduce: "En el a�o en que muri� el rey Acaz fue esta carga" (o, como deber�amos hoy en d�a digamos, esta denuncia de ira) contra los filisteos. Despu�s de pedir a los habitantes de Palestina aullar por los juicios que eran inminentes, Isa�as, hablando como fue movido por el Esp�ritu Santo, hace la pregunta y da la respuesta del texto.

Era habitual que las naciones vecinas, que eran amigas y aliadas, enviaran embajadores y se felicitaran por el �xito. Por lo tanto, cuando el triunfo venidero sobre los filisteos se conozca en el extranjero, y los enviados de estados amigos pregunten a Jud� sobre las circunstancias de su �xito, "que esta respuesta", dijo el profeta, "sea suficiente: que el Se�or ha fundado Si�n, y los pobres de su pueblo confiar�n en ella �.

II. Nadie puede leer esa promesa y no sentir que fue DESTINADA PARA TENER UN ALCANCE M�S AMPLIO para su cumplimiento que en la seguridad personal de un pu�ado de campesinos jud�os; todo el giro de expresi�n huele a tiempos evang�licos. Tales palabras nunca se verificaron completamente hasta que Cristo, el Hijo de David, fund� la Iglesia cristiana e hizo su generosa oferta a un mundo esclavizado en la m�s cruel de todas las servidumbres: �Venid a m� todos los que est�is trabajados y cargados y yo te har� descansar �. ( FEPaget, DD )

El origen celestial y la misi�n ben�fica de la Iglesia

I. �El Se�or ha fundado a Sion�; ESTA ES LA GARANT�A DE SU AMOR Y SU ESTABILIDAD. El t�tulo de protecci�n m�s fuerte y fundamental es la creaci�n. Incluso entre nosotros, nadie enmarca un objeto para destruirlo; el que hace, hace para conservar. Y si esto es as� en la naturaleza humana, �no habr� nada que se le compare en la Divinidad? Dios, en verdad, que es eterno, no puede requerir un sucesor a quien idear Sus prop�sitos de amor; pero todas las pretensiones que la cosa enmarcada puede tener sobre Aquel que la enmarc�, se mantienen con diez veces m�s fuerza cuando el objeto no es, como en nuestras obras m�s humildes, la mera aposici�n de materiales preexistentes, en los que nada es nuestro excepto el orden de disposici�n, pero es en s� misma, tanto en materia como en forma, la descendencia directa de Su propio poder y bondad inagotables.

1. He aqu�, entonces, c�mo como propio "Dios am� al mundo"; c�mo Dios ha amado a Su Iglesia, no s�lo como Suyo, sino como Suyo en dolor y angustia, y como tal, amado hasta el fondo de Su coraz�n. Habl� para ofrecer a uno, muri� para hacer que el otro existiera.

2. En esta Iglesia Suya est� Su propio honor comprometido. No ha hecho un pacto con el mundo que ahora ha de inmortalizarlo; pero ha pasado Su propia palabra para la perpetuidad de Su Iglesia. Nada as� enmarcado fue jam�s concebido para perecer; �l le ha infundido Su propio Esp�ritu, y Su Esp�ritu es vida.

3. �No se presenta la Iglesia en su m�xima perfecci�n como la recompensa misma de todos los dolores de su Se�or? y �ser� defraudado de su recompensa?

4. Hay m�s que la creaci�n para unir a la Iglesia a Cristo, m�s que una promesa, m�s que una recompensa; hay comuni�n, unidad, identificaci�n. Un hombre puede abandonar a su hijo; no puede abandonarse a s� mismo. Con tal uni�n no puede haber separaci�n; si Cristo es inmortal, la Iglesia lo es; cuando �l muera, ella perecer�, pero no hasta entonces.

II. �Los pobres de su pueblo confiar�n en �l� - o, como lo dice el margen, se acercar�n a �l: ESTE ES UN PROP�SITO DE LA MISI�N DE LA IGLESIA EN LA TIERRA: el cuidado, la ense�anza, la educaci�n, la gu�a de los pobres. ( W. Archer Butler, DD )

Dios el Protector de Su Iglesia

Le decimos a nuestro Se�or Dios que si �l quiere tener Su Iglesia, debe guardarla �l mismo, porque nosotros no podemos hacerlo; y es bueno para nosotros que no podamos, de lo contrario deber�amos ser los asnos m�s orgullosos bajo el cielo ( M. Lutero ) .

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Información bibliográfica
Exell, Joseph S. "Comentario sobre "Isaiah 14". El Ilustrador Bíblico. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/tbi/isaiah-14.html. 1905-1909. Nueva York.