Bible Commentaries
Isaías 18

El Ilustrador BíblicoEl Ilustrador Bíblico

Versículos 1-3

Ay de la tierra sombreada con alas

Los et�opes

Las personas aqu� descritas de manera peculiar son los et�opes, y el profeta profetiza el efecto sobre Etiop�a del juicio sobre Asiria que Jehov� ejecuta, como Drechsler ha probado convincentemente, y como ahora se reconoce universalmente.

( F. Delitzsch. )

Etiop�a

�De qu� tierra habla el profeta? Es sin duda la propia Etiop�a, un gran reino en la antig�edad. Porque aunque dice "m�s all� de los r�os de Etiop�a", es decir, el Nilo Azul, el Nilo Blanco y el Astaboras, el significado es quiz�s m�s exactamente "al lado" de esos r�os. En cualquier caso, la antigua tierra de Etiop�a se extend�a hacia el sur mucho m�s all� de la confluencia de esos r�os en el poderoso Nilo, incluido probablemente todo el Alto Egipto m�s all� de Filae, Nubia y la parte norte de la moderna Abisinia.

Era un pa�s f�rtil, muy rico en oro, marfil, �bano, incienso y piedras preciosas. Un pa�s densamente habitado por una raza incondicional y bien formada, "hombres de estatura" los llama el profeta, que si fueran negros, todav�a eran atractivos. Fue un reino poderoso durante muchos siglos, un rival de Egipto, a veces su enemigo, y aparentemente incluso su conquistador; un reino capaz de hacer la guerra contra los asirios, y tambi�n un reino que realizaba un gran comercio mediante abundantes mercanc�as con mucha gente. ( A. Ritchie. )

"La tierra sombreada con alas"

1. Llena de sugerencia po�tica est� la expresi�n "sombrear con alas". El pensamiento es de tierna protecci�n, ya que la madre ave se cierne sobre sus cr�as y las protege. El salmista nunca se cansa de clamar a Dios: "Esc�ndeme bajo la cubierta de tus alas". Era correcto que Israel y Jud� clamaran as� a Jehov� pidiendo protecci�n, pero no que mirasen a las alas sombreadas de Etiop�a.

As� como era pat�ticamente cierto que en tiempos posteriores nuestro Se�or dijera de la Ciudad Santa: �Jerusal�n, Jerusal�n, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados, cu�ntas veces quise reunir a tus hijos, como la gallina junta sus pollos debajo de sus alas, y vosotros no quer�is �- as� que setecientos a�os antes era cierto que Jud� no buscar�a refugio bajo las alas del Se�or, sino bajo la sombra de Egipto y la cobertura de Etiop�a. .

2. En la Versi�n Revisada tenemos el pasaje traducido, "Ah, la tierra del susurro de alas". Algunos de los antiguos comentaristas encuentran en esto una alusi�n a la multitud de abejas y los enjambres de moscas en Etiop�a, de modo que all� el zumbido de las alas nunca estuvo ausente. M�s pintoresca es otra sugerencia, que se refiere a las aguas siempre turbulentas de los r�os, que se apresuran con la corriente veloz, en r�pidos y cataratas hasta llegar al ancho seno del padre Nilo. El murmullo y el lamido de las aguas turbulentas le pareci� al poeta como el ruido que hace el vuelo veloz de muchos p�jaros, batiendo el aire con fuertes pi�ones, mientras avanzan hacia el horizonte.

3. Si nos dirigimos a la Septuaginta, el Antiguo Testamento griego, leemos el texto as�: "�Ay de vosotros, alas de la tierra de los barcos!" �Qu� son las alas de la tierra de los barcos sino las muchas velas por las que esos barcos revolotean de aqu� para all�? Uno ve ante �l una nueva imagen. Las gr�ciles dahabiehs con sus largas vergas y velas triangulares, salpican el agua por todas partes y naturalmente sugieren grandes aves marinas, con las alas extendidas, brillando a la luz de las estrellas blancas y fantasmales sobre la tranquila superficie del misterioso r�o que es la vida de Egipto.

4. Algunos de los eruditos hebreos m�s agudos se�alan que es posible entender el lenguaje del profeta de otra manera: "�Ay de la tierra donde la sombra cae en ambos sentidos", es decir, por supuesto, cerca del ecuador, donde a veces las sombras se extienden hacia el sur y en ocasiones hacia el norte, seg�n la �poca del a�o. Si entendemos as� nuestro texto, es natural ver en �l una alusi�n a la inconstancia de los et�opes, una naci�n en la que Jud� confiaba en vano, ya que hoy ser�a un aliado y ma�ana un enemigo. ( A. Ritchie. )

El encargo del profeta a los embajadores et�opes

Etiop�a (hebreos, "Cus") corresponde generalmente al moderno Sud�n ( es decir, los negros)

. En ese momento, Egipto y Etiop�a estaban gobernados por Tirkakah (704-685). Sus embajadores est�n en Jerusal�n ofreciendo una alianza contra los asirios; y el profeta los env�a de regreso a su pueblo con las palabras: �Id, veloces mensajeros�, etc. Jehov� no necesita ayuda contra Sus enemigos. ( ABDavidson, LL. D. )

Nota

Parada completa en "aguas" ( Isa�as 18:2 ), y omite "decir". El profeta habla: �Id, veloces mensajeros, a una naci�n alta y suave. .. una naci�n todopoderosa y sometida, cuyos r�os terrestres se dividen (se cruzan) ". �Suave� puede referirse a la piel bronceada y reluciente de las personas. ( ABDavidson, LL. D. )

Vasos de juncos

Es bien sabido que la madera adecuada para la construcci�n de barcos era muy escasa en Egipto: para suplir esta deficiencia, los egipcios utilizaron juncos, o una ca�a llamada papiro, con los que fabricaban embarcaciones aptas para navegar. Los barcos y botes construidos con este tipo de materiales, extremadamente livianos y con muy poca agua, estaban admirablemente preparados para atravesar el Nilo, a lo largo de cuyas orillas, sin duda, hab�a muchos pantanos y baj�os.

Tambi�n eran muy convenientes y f�ciles de manejar en las cascadas, donde pod�an transportarse sin gran dificultad para suavizar el agua. A partir de circunstancias como estas, podemos concluir que navegar�an muy r�pido y permitir�an un transporte muy r�pido de todo tipo de inteligencia de una parte del pa�s a otra, y de Egipto a las naciones vecinas. En ellos, por lo tanto, a menudo se enviaba embajadores o mensajeros a diferentes lugares con diversos tipos de informaci�n, despu�s de haber recibido sus �rdenes en t�rminos como estos: "Id, veloces mensajeros". ( R. Macculloch. )

Fueron hechos para plegarse juntos, de modo que pudieran pasar m�s all� de las cataratas. ( F. Delitzsch, DD )

Versículo 3

Todos los habitantes del mundo. .. nos vemos

Esfuerzo misionero

Toda nuestra esperanza de �xito se basa en las profec�as de la Palabra de Dios, que declara que es Su voluntad.

Primero debemos examinar con precisi�n cu�l es el objetivo que tenemos en vista, porque si no est� al un�sono con los profetas, debe decepcionarse.

I. EL LENGUAJE DEL NUEVO TESTAMENTO SOBRE ESTE TEMA. �Qu� nos da eso raz�n para esperar bajo la presente dispensaci�n? Una Iglesia elegida, aunque en cierto sentido se la llama Iglesia universal, porque est� reunida de todas las naciones de la tierra.

II. LA EXPERIENCIA DE LA IGLESIA COMO FORTALECIMIENTO DE ESTE ARGUMENTO. Durante muchos a�os se ha predicado el Evangelio, �y cu�l es el resultado? Pero, �no est� escrito en las Escrituras que toda carne ver� la salvaci�n de Dios, etc.? Entonces, �no esperamos con raz�n la conversi�n de todas las personas de la tierra? S�, est� escrito y se cumplir�. Pero tambi�n est�n escritos los medios y el tiempo.

�Cu�les son los medios? �Qu� hora es? "Todos los habitantes del mundo y los habitantes de la tierra, �ven!" �Cu�ndo? �Cuando alza estandarte en los montes, y cuando toca trompeta, �o�d!�. Le leer� un extracto de un serm�n misionero predicado por el Dr. Buchanan poco antes de su muerte: �El estandarte que se izar� es la Iglesia jud�a restaurada en Si�n; y los misioneros jud�os tocar�n la trompeta del Evangelio, porque para ellos est� reservada la evangelizaci�n de los paganos ". Pero antes de esto ser� la venida del Hijo de Dios. ( Hugh M ' Neile, MA )

Versículos 4-5

Porque as� me dijo el Se�or: Descansar�

El resto de la providencia

Aunque existe mucha diversidad de opiniones entre los comentaristas con respecto al dise�o principal de la profec�a de la cual se toma este pasaje, solo puede haber un sentimiento en cuanto a la sublime moral que ense�a acerca del modo en que el Todopoderoso conduce Su gobierno.

Probablemente, hay momentos en la vida de todo hombre en que siente la tentaci�n del escepticismo de una manera inusualmente fuerte. Son tiempos de sufrimiento personal o de iniquidad pr�spera.

I. Cu�n a menudo ha llorado el cristiano sincero con amargura de esp�ritu, PORQUE NINGUNA RESPUESTA INMEDIATA PAREC�A DARSE A SUS ORACIONES. En tales circunstancias, la seguridad de que la providencia s�lo est� descansando y considerando, es consoladora en el m�s alto grado. No es en juicio, sino en tierna misericordia, que Dios aparentemente suspende Su respuesta a las oraciones de Su pueblo. As� ejerce �l su fe, y la prueba de ella es m�s preciosa que el oro.

As� los convence de sus necesidades y la convicci�n los lleva a un mayor abandono de s� mismos. As�, despierta en ellos el sentimiento de simpat�a cristiana por aquellos que han sido probados de manera similar, y esto es mejor para ellos que el deseo del coraz�n. As� les da aquellas experiencias que, no es improbable, pueden contribuir a su felicidad en el cielo mismo.

II. Un segundo ejemplo de la providencia descansando, se puede ver en EL PROGRESO COMPARATIVAMENTE LENTO Y LIMITADO QUE EL BENDITO EVANGELIO DE CRISTO A�N HA HECHO EN EL MUNDO. La marcha de su administraci�n no es menos sublime, porque en ocasiones es invisible.

III. La Providencia descansa CUANDO LA SENTENCIA CONTRA LAS MALVAS OBRAS DE LOS HOMBRES NO SE EJECUTA R�PIDAMENTE. Cuando el misterio de Dios haya terminado, sus caminos parecer�n a la vez maravillosos y rectos. Este "reposo de la providencia" est� bellamente ilustrado por similitudes tomadas de la naturaleza: "un calor claro sobre las hierbas y una nube de roc�o en el calor de la cosecha". Has observado, en un hermoso d�a de verano, el sol descansando tranquilamente sobre el maizal, o el roc�o que cubre las plantas al atardecer.

Todo es pac�fico y sereno. Parece como si los vientos se hubieran olvidado de soplar o el trueno de pronunciar su voz. As�, tranquila y silenciosamente, el Todopoderoso �descansa en su morada�, hasta que llega el momento de la interposici�n. La paciencia de Dios es una demostraci�n de Su poder, y Su lentitud para la ira es un testimonio de Su infinita sabidur�a. La met�fora de Isa�as 18:5 debe considerarse como una continuaci�n de la anterior, y puede entenderse como una insinuaci�n de la total decepci�n de los planes que los malvados hacen contra Dios y que �l con tanta paciencia les permite madurar.

�Antes de la siega, cuando la yema est� perfecta y la uva agria est� madurando en la flor, cortar� las ramitas con podaderas, y quitar� y cortar� las ramas�. El significado es que en el mismo momento en que la probabilidad, humanamente hablando, sea mayor de que sus proyectos tengan �xito, �l se despertar� para derribarlos. Conclusi�n&mdash

1. El pasaje que estamos considerando, aunque deber�a alarmar a los enemigos, bien podr�a traer consuelo al pueblo de Dios. Que miren hacia arriba porque su redenci�n se acerca.

2. Por otro lado, no permitan que los impenitentes se adulen a s� mismos en seguridad porque su Se�or demora su venida. ( JL Adamson. )

Quietud

"Una figura de perfecta quietud". ( AB Davidson. )

El arresto de hombres malvados

Es como si Jehov� estuviera mirando tranquilamente y permitiera que los asirios hicieran lo peor. Lejos de arrestarlos, parece incluso favorecer sus planes. �l es para ellos como el roc�o para el crecimiento de las plantas. Pero antes de que se forme el capullo, �l se levanta para cortarlos. Esto probablemente se refiere al golpe fatal que aplast� al ej�rcito de Senaquerib en una sola noche. La gratitud de las naciones vecinas por una liberaci�n tan grande har�a que trajeran sacrificios al templo de Jehov� ( Isa�as 18:7 ). ( FB Meyer, BA )

Las palabras secretas de dios

Cu�n sorprendentes son esas palabras secretas, susurradas por Dios a Su siervo favorito: "El Se�or me dijo". Era como si hubiera llamado aparte a Isa�as y le hubiera hablado confidencialmente de asuntos que no deb�an ser pronunciados a o�dos incircuncisos. As� fue como Dios habl� desde la antig�edad a Abraham y Mois�s. Y en la actualidad es notable, al leer los diarios de George Fox, descubrir cu�n consciente era de las confidencias similares depositadas en �l por su siempre presente y fiel Amigo. ( FBMeyer, BA )

Dios descansando en su morada

I. EL LUGAR DE VIVIENDA DE DIOS Y SU REPOSO. D�jame preguntarte d�nde descansa la reina en su amor: debes pasar y presionar m�s all� de las insignias, m�s all� del sal�n del trono, m�s all� del consejo, m�s all� del dique, all� en la familia, en medio de sus hijos, en un c�rculo familiar encantado ... -All� descansa enamorada. �Y no tiene Dios tal c�rculo, tal morada y hogar? �El Se�or se complace en los que le temen.

�Dios nos ha revelado esta gran cosa, que �l tambi�n vive en las simpat�as y afectos de Sus inteligentes criaturas. La Iglesia de Dios es Su morada. Dios desciende para morar en nosotros, mientras nosotros ascendemos para morar en �l. Me ha asaltado un pensamiento como este, cuando estaba en alguna colina tranquila de un pueblo, o en las profundidades de alg�n bosque rural, cuando, debajo de m�, o lejos de m�, todos los aldeanos estaban en las casetas de alguna feria.

Lo vi, tal vez, a mis pies, o escuch� los sonidos desapareciendo en mi o�do. As� es, cuando nos levantamos para descansar en Dios. A nuestros pies, el alboroto, el vicio, la vanidad, de las casetas de Babel, la disoluci�n y el canto, pero con nosotros la paz y la tranquilidad profundas, y el descanso del coraz�n y el alma, y ??la perspectiva de la gloria. y las vistas m�s all�; es incluso as�, ya que el mundo se encuentra debajo de nosotros y sobre nosotros difunde la calma, cuando el alma posee a Dios y Dios se hunde en el alma, �qu� mira el alma? �Qu� mira el alma hacia abajo? en qu� mira el alma: el alma una con Dios.

II. "CONSIDERAR�." "Entonces el Se�or me dijo: Descansar�". Sumamente sublimes son todos esos pasajes magn�ficos en los que la calma de la mente divina se contrasta con la pasi�n y la agitaci�n de los asuntos humanos. Esta es la conexi�n de los vers�culos anteriores (cap. 17:12, 13). Es en medio de esa turbulencia de los oc�anos de la poblaci�n que Dios dice: "Descansar� y considerar�".

III. LAS ILUSTRACIONES DE LA DIVINA CONSIDERACI�N, el amoroso y bello resultado. ( E. Paxton Hood. )

La suficiencia total de Dios

Hay algo en Dios que es un refugio y un refrigerio para su pueblo en todos los tiempos, y los arma contra los inconvenientes de cada cambio. �Es fresco el tiempo? Hay algo a su favor que los calentar�. �Hace calor? Hay eso a su favor que los enfriar�. Los grandes hombres tienen su casa de invierno y su casa de verano ( Am�s 3:15 ); pero los que est�n en casa con Dios, tienen ambos en �l. ( M. Henry. )

Cuando el cogollo es perfecto

El capullo de la flor

B - U - D - brote. Belleza; usar; dise�o, ser�n nuestros tres puntos.

I. belleza. Entre los muchos tipos de belleza que nos brinda la naturaleza, tres son muy notables:

1. Belleza de la forma.

2. Belleza del color.

3. Belleza del aroma. Y a estos el hombre ha a�adido:

4. Belleza de la asociaci�n.

II. USAR.

1. Alimentos. En la econom�a de la naturaleza, las flores son �tiles como alimento para insectos, p�jaros y hombres. �Groundsel para los p�jaros del aire! La madreselva realmente pertenece y es el hogar temprano de una polilla verde, marr�n en los bordes, con alas transparentes. Tambi�n pertenece a una oruga, que luego se convierte en una mariposa marr�n y blanca y azul opaca. Y as� podr�a darse una lista tras otra de las flores de las que se alimenta el mundo de los insectos y de las que se nutre. Una vez m�s, �es de las flores de donde las abejas recolectan la miel! As�, se puede decir literalmente que las flores alimentan al hombre.

2. Medicina.

3. Fruta. La floraci�n es una etapa en el camino hacia la fructificaci�n. �Qu� gracias cristianas tendr�s que mostrar cuando llegue el momento de la recolecci�n?

III. DISE�O. La naturaleza trabaja en un plan. �Qui�n hizo el plan, el dise�o? No puede haber un plan sin alguien que planifique; ni un dise�o sin dise�ador. El cristiano mira de la naturaleza al Dios de la naturaleza. ( CHGrundy, MA )

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Información bibliográfica
Exell, Joseph S. "Comentario sobre "Isaiah 18". El Ilustrador Bíblico. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/tbi/isaiah-18.html. 1905-1909. Nueva York.