Bible Commentaries
1 Timoteo 3

Comentario de Coke sobre la Santa BibliaComentario de Coke

Introducción

C�mo deben calificarse los obispos, los di�conos y sus esposas; y con qu� fin escribi� San Pablo a Timoteo sobre estas cosas. De la iglesia, y la bendita verdad en ella ense�ada y profesada.

Anno Domini 58.

PORQUE muchos falsos maestros estaban ahora difundiendo sus doctrinas err�neas con gran asiduidad entre los efesios, San Pablo juzg� necesario que Timoteo, a quien hab�a confiado el cuidado de la iglesia en �feso, fuera asistido por varios obispos y di�conos, bien calificado para ense�ar a la gente. Por tanto, despu�s de observar cu�n honorable es el oficio de un obispo cristiano, 1 Timoteo 3:1 - describi� las cualidades, gracias y virtudes necesarias en quien aspira a alcanzarlo; por lo que parece que un obispo cristiano capaz y fiel es una persona muy venerable por su car�cter, as� como por su oficio, 1 Timoteo 3:2 . � De la misma manera, el ap�stol describi� los requisitos, gracias y virtudes necesarias en un di�cono cristiano, 1 Timoteo 3:8 . 1 Timoteo 3:8 para que no se nombrara a estos cargos a nadie que no fuera de buen car�cter y debidamente capacitado, orden� que fueran probados, es decir, que fueran debidamente examinados, y sus nombres a ser publicado a la gente, que si alguien tuviera algo que decir en contra de ellos, podr�a tener la oportunidad de hablarlo.

Y si no aparec�a ning�n acusador, y en todos los dem�s aspectos estaban debidamente calificados, deb�an ser considerados como de reputaci�n intachable, y deb�an ser investidos con el cargo propuesto, 1 Timoteo 3:10 . A continuaci�n, da el car�cter de las esposas de aquellos que eran dignos de ocupar el oficio de di�conos, 1 Timoteo 3:11 . Adem�s, al observar que los di�conos que desempe�aron bien su oficio, compraron para s� mismos un buen grado, el ap�stol, Creo, insinuado, que el m�s fiel de los di�conos podr�a ser elevado a puestos m�s altos en la iglesia, 1 Timoteo 3:13. � Estas cosas le escribi� a Timoteo acerca de la doctrina que iba a ense�ar, los errores que deb�a refutar, la manera de realizar el culto p�blico, el comportamiento y la vestimenta de las mujeres en sus asambleas para el culto, y el car�cter y las calificaciones. de las personas a quienes Timoteo iba a ordenar obispos y di�conos, a pesar de que esperaba ir a verlo pronto, 1 Timoteo 3:14 . O, si alg�n incidente en el curso de la Providencia, impidiera su venida, habiendo escrito estas cosas en esta carta Timoteo podr�a saber c�mo comportarse en la casa o templo de Dios, ahora encomendado a su cuidado: que por lo tanto no era ni el templo de Jerusal�n, mucho menos el de �feso, sino la iglesia de Cristo en �feso, que constaba de todos en esa ciudad que crey�.

Y para animar a Timoteo a ser diligente en la ense�anza de la verdadera doctrina, celoso en oponerse al error y cauteloso en la ordenaci�n de personas a oficios sagrados, le dijo que, como la verdadera iglesia cristiana viviente es el templo en el que se adora al Dios vivo, y el preservado el conocimiento de la religi�n verdadera, y mantenida la pr�ctica de la santidad, es en realidad el pilar y apoyo de la verdad, 1 Timoteo 3:15 . � Al dar ese apelativo honorable a la iglesia cristiana, el ap�stol insin�a, como apropiado para el pueblo bajo el cuidado de Timoteo, que en �l se guarden, no los falsos misterios de ninguno de los dioses paganos, sino el infinitamente glorioso misterio de la piedad,o religi�n verdadera, para ser dada a conocer, no a unas pocas personas iniciadas como lo fueron los misterios paganos, sino a toda la humanidad. Por �ltimo, para mostrar la grandeza del misterio de la piedad que se guarda en la verdadera iglesia cristiana viviente, los ap�stoles explic� los detalles de los que consta, 1 Timoteo 3:16 . �As�, al contrastar t�citamente la iglesia cristiana con el templo de �feso, e incluso con el de Jerusal�n, y al mostrar los prop�sitos infinitamente m�s nobles para los que fue erigida, el ap�stol ha demostrado cu�n inmensamente superior es a todos los tejidos materiales m�s magn�ficos, que jam�s hayan sido criados para la adoraci�n de Dios por manos de hombres.

Versículo 2

Entonces, un obispo debe ser irreprensible, - Con respecto a su car�cter moral. Los sacerdotes bajo la ley deb�an estar sin enfermedades corporales, Lev�tico 21:16 ; Lev�tico 21:24 . Los obispos de la iglesia cristiana deben tener un coraz�n y una vida sin tacha, Tito 1:6 .� el marido de una sola mujer; es decir, "uno que no se ha divorciado sin causa de su esposa y se ha casado con otra"; mucho menos deber�a tener m�s de una esposa a la vez. Ver 1 Timoteo 3:12 . Algunos entienden que el ap�stol aqu� proh�be los segundos matrimonios en el clero; pero la interpretaci�n dada arriba parece la m�s justa y razonable.

Cualquiera que sea la forma en que se interprete la oraci�n, condena claramente la pr�ctica de la iglesia de Roma, que no permite que los obispos o el clero se casen en absoluto: seguramente eso nunca puede ser coherente con el hecho de que un obispo sea ??marido de una sola mujer. �En el curso de este comentario, hemos observado con frecuencia, que en el pa�s del Este hab�a pocas casas de entretenimiento p�blico; y por lo tanto, aunque la hospitalidad es en todo momento muy loable en todos, y especialmente en los obispos y ministros del evangelio, era m�s necesario que las casas de los obispos en ese momento fueran famosas por ello, y siempre estuvieran abiertas a los que viajaban. para difundir el evangelio

Versículo 3

Sin delantero, etc. En lugar de sin delantero, el Dr. Heylin lee, no violento; No es un amante de la contenci�n, o uno que tiene tan poco gobierno de s� mismo, tan apasionadamente como para volar contra los dem�s.

Versículo 4

Uno que gobierne bien su propia casa, - Uno que fue un buen ????????????, presidente, sobre su propia familia: que era una de las calificaciones necesarias para ? ?????????, un inspector u obispo de la iglesia de DIOS.

Versículo 6

No un novato, & c.� ?? ????????; "Ninguno se ha injertado �ltimamente en la iglesia cristiana"; �l hab�a dicho antes, 1 Timoteo 3:2 . Que un obispo debe ser alguien apto para ense�ar; y, en consecuencia, debe haber ense�ado durante alg�n tiempo como anciano,o ocup� alg�n cargo en la iglesia, por lo que pudiera aparecer su aptitud para ense�ar. Sobre la frase "la condenaci�n del diablo", observar�amos que Satan�s podr�a injertar muchas tentaciones peligrosas no solo en el orgullo del hombre, sino en el informe maligno en el que podr�a haber incurrido por cualquier esc�ndalo antes de entrar en el ministerio; o intentando atraerlo a la comisi�n de males anteriores, por temor a que tuviera muy poca reputaci�n que perder con una nueva ca�da; o debilitar sus manos en esfuerzos de utilidad, por temor a que el recuerdo de esas pasadas irregularidades hiciera menos efectivos sus intentos: �pensamientos dignos de consideraci�n de todos los que se dise�an para el ministerio; y especialmente para ser recordado, cuando personas que han sido notablemente despilfarradoras desean emprenderlo o volver a �l.

Versículo 7

No sea que caiga en el oprobio, etc.� No sea que, pudiendo los jud�os o gentiles incr�dulos arruinar su reputaci�n, caiga en el reproche y la trampa del acusador, por la mala vida que llev� antes de su conversi�n. "Porque la iglesia cristiana florecer� o decaer� mucho, seg�n el car�cter o el comportamiento de sus obispos o pastores". Ver 1 Tesalonicenses 4:12 .

Versículo 9

Manteniendo el misterio de la fe, etc.� Los di�conos deb�an ser aquellos que tuvieran el misterio de la fe cristiana pura y sin mezcla, y que lo mantuvieran en buena conciencia y estuvieran dispuestos a profesarlo abiertamente: hombres �ntegros, y de caridad hacia los cristianos gentiles y jud�os, y que no estaban para imponerse a uno u otro. Ver G�latas 2:2 . Efesios 1:9 y Efesios 3:1 .

Versículo 10

D�jelos usar la oficina, etc.� D�jelos hacer ejercicio.

Versículo 11

Aun as�, sus esposas deben ser serias. Hab�a tantas razones para que esto se extendiera tambi�n a las esposas de los obispos ; y cuando comienza el siguiente vers�culo con que los di�conos, es decir, al igual que los obispos, sean maridos de una sola mujer, tal vez �l podr�a dise�arlo as�. Estas esposas no deb�an difamar a nadie, y especialmente no criticar el car�cter de los pobres a sus maridos, y as� aislarlos del alivio caritativo de la iglesia.

Se requiere que los di�conos mismos, 1 Timoteo 3:8 no sean s�rdidamente codiciosos; y aqu� a sus esposas se les ordena ser fieles en todo. Estas �rdenes podr�an darse, en parte, para evitar que se sientan tentados o caigan en la tentaci�n de malversar el dinero p�blico. Ver Hechos 6:1 . &C.

Versículo 13

Adquirir para s� un buen t�tulo, - Adquirir un t�tulo honorable [el de presb�tero u obispo] y una gran seguridad en la predicaci�n de la fe cristiana. Ver Heylin. El ap�stol alude aqu� a la pr�ctica de elegir a los di�conos entre los mejores entre los laicos; los sacerdotes o ancianos de los mejores di�conos; y los gobernantes u obispos de entre los mejores sacerdotes o ancianos. � Donde los jud�os incr�dulos eran tan virulentos y los gentiles tan exasperados por Demetrio y su compa��a, hab�a necesidad de gran audacia y fortaleza; especialmente en los oficiales de la iglesia cristiana, quienes generalmente son los primeros expuestos a la persecuci�n.

Versículo 15

La casa de Dios, que es la iglesia, etc.� El Dr. Benson expresa esto, que t� , que eres la base y columna de la verdad, puedas saber c�mo debes comportarte en la iglesia de Dios. El Dr. Doddridge observa, que aunque muchos buenos cr�ticos refieren esta cl�usula descriptiva a Timoteo, agradablemente a esa figura por la cual se llama a San Pedro un pilar, G�latas 2:9 . (comp�rese con Apocalipsis 3:12 .) sin embargo, �l piensa, si esta hubiera sido la construcci�n, el caso acusativo se habr�a usado para estar de acuerdo con la palabra ??, entendido; y, por lo tanto, elige leer la oraci�n de la siguiente manera: "Para que todo el sistema de la verdad evang�lica pueda considerarse descansando sobre este pilar y base,(como puede significar la palabra ????????;) para que sepas c�mo te conviene conversar en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad: 1 Timoteo 3:16 . Y, en verdad, grande es el misterio de la piedad, a saber, lo que sigue; que Dios fue manifestado, etc. "- Bengelius y otros entienden el pasaje casi de la misma manera.

Versículo 16

Dios fue manifestado en carne, etc.� Ver los pasajes paralelos: El Verbo, que era Dios, habit� entre nosotros; y hemos visto su gloria, Juan 1:1 ; Juan 1:14 . �l fue manifestado y vino en carne, quien era el Hijo de Dios, 1 Juan 3:5 ; 1 Juan 3:8 ; 1 Juan 4:2 . El que ten�a la forma de Dios, y pens� que no era un robo ser igual a Dios, fue hecho a semejanza de los hombres, Filipenses 2:6 . El que est� por encima de todo, Dios bendito por los siglos, fue tambi�n de la simiente de David seg�n la carne, Romanos 9:5 .- �l fue justificado por el Esp�ritu,como haciendo aquellos milagros en la tierra, por los cuales justific� su misi�n contra todas las acusaciones de los jud�os, por el Esp�ritu de Dios, Mateo 12:28 siendo declarado Hijo de Dios con poder, por el Esp�ritu de santidad, Romanos 1:3 mediante el env�o por ese Esp�ritu despu�s de su ascensi�n al cielo, Hechos 2:33 que hab�a prometido a sus disc�pulos en la tierra, y por el cual el mundo estaba convencido de su rectitud, Juan 16:10 se-�l. ve de los �ngeles que lo Hebreos 1:6 a su entrada en el mundo, Hebreos 1:6 quienes celebraron su nacimiento y lo notificaron a los pastores, Lucas 2:9 ; Lucas 2:13quien le sirvi� en el desierto, Mateo 4:11 y en sus agon�as, Lucas 22:43 ; Lucas 24:4 que estuvieron presentes en su resurrecci�n y lo asistieron en su ascensi�n al cielo, Hechos 1:10 . Hechos 1:10 historia completa del evangelio muestra que fue predicado a los gentiles y crey� en el mundo. �Y, finalmente, fue recibido arriba en el cielo y se sent� a la diestra de la Majestad en gloria, Marco 16:19 . Lucas 24:51 . Hechos 1:2 ; Hechos 1:11 .

Inferencias.��Qu� alta estima debemos tener de las iglesias que Dios ha erigido en nuestro mundo, iglesias que �l, como Dios vivo, anima por su Esp�ritu, y en las que habita como en su propia casa! �Qu� oficiales id�neos ha designado para atender sus preocupaciones espirituales y temporales! �Y qu� admirables instrucciones ha dado sobre ellos, para que ninguna persona no calificada pueda ser elegida para puestos tan importantes, y nadie se comporte mal en ellos! �Cu�n bueno y honorable y, sin embargo, laborioso es el trabajo de tener la supervisi�n de las almas y sus preocupaciones espirituales! pero �cu�ntas son las excelentes calificaciones necesarias para ello! Las personas llamadas a este oficio deben ser h�biles en la obra de la justicia, no advenedizos rudos, sino aptos para ense�ar a otros, para que no se envanezcan con el orgullo, que fue el pecado y la ruina del diablo: deben ser hombres irreprensibles. moralidad, de prudencia, fidelidad y seriedad, generosidad y afabilidad, en todas las relaciones de la vida; mantener en buen orden a las familias y los ni�os bajo su cuidado, y gobernar sus propias pasiones y apetitos, lenguas y manos, con moderaci�n y decencia, no sea que caigan en el oprobio y Satan�s y sus emisarios se aprovechen de ellos.

�Y en cu�ntas cosas deber�an imitar los di�conos, junto con sus esposas, despu�s de ellos? Deben tener el misterio de la fe en buena conciencia y ser muy exactos en su moral: y cuanto m�s diligentes, fieles, prudentes y compasivos sean en el desempe�o de los deberes de su confianza, mayor honor y estima alcanzar�n. en la iglesia, y m�s valientes crecer�n en la profesi�n de su fe en Cristo. �Almas felices, que est�n capacitadas para actuar de acuerdo con todos estos personajes y deberes en sus respectivas estaciones! pero la forma cuidadosa se les�Que la iglesia no se hunda por no tener la verdad del evangelio como fundamento y apoyo! �Oh, la insondable profundidad, importancia y gloria del gran misterio de la piedad, que resplandece en Dios manifestado en la carne para hacer expiaci�n por el pecado; resucitado de entre los muertos para la justificaci�n de su persona y causa, y de los que creen en �l; contemplado, atestiguado y adorado por los santos �ngeles en su ascensi�n al cielo; Predic� ampliamente al mundo gentil, y crey� en multitudes de ellos, quienes lo recibieron de una manera gloriosa, adecuada a su propia exaltaci�n, como Dios-hombre Mediador en su trono.

REFLEXIONES.� 1�, quedando Timoteo para presidir y regular los asuntos de la iglesia de �feso, el ap�stol le da instrucciones con respecto a los que deben ser ordenados a oficios ministeriales entre ellos.

Este es un dicho verdadero: Si un hombre, movido interiormente por el Esp�ritu Santo, desea el oficio de obispo o supervisor de la iglesia de Cristo, desea una buena obra: el cargo es sumamente honorable e importante, pero a la vez muy laborioso. , y requiere calificaciones singulares para el correcto desempe�o de las mismas. Entonces, un obispo debe: (1.) Ser irreprensible; su moral irreprochable y su car�cter capaz de soportar el escrutinio m�s agradable. (2.) Si no es soltero, sea marido de una sola mujer; que nunca se ha divorciado para volver a casarse, ni vive en la poligamia. (3.) Debe estar atento a las almas encomendadas a su cuidado y residir habitualmente entre ellas. (4.)Sobrio, moderado en el uso de todas las comodidades de la criatura y moderado en todas las cosas. (5.) De buen comportamiento; cort�s, atractivo, prudente, edificante. (6.) Dada a la hospitalidad; listo para aliviar a los extra�os y ayudar a los necesitados. (7.) Apto para ense�ar; provisto de conocimiento y experiencia cristianos, y poseedor de la facultad de comunicar sus sentimientos con facilidad y propiedad para el mejoramiento de los dem�s.

(8.) No dado al vino; no simplemente no ser un borracho, pero nunca sentarse mucho tiempo en las tazas, o amar el vaso. (9.) Sin delantero; no apasionado ni pendenciero. (10.) No codiciosos de ganancias deshonestas, y sospechosos de apego a ganancias y ventajas terrenales; pero (11.) Paciente; un modelo de mansedumbre y paciencia. (12.) No es un luchador; clamoroso, contencioso y hablador: ni, (13.) codicioso; buscando el vell�n m�s que para alimentar al reba�o, y sirviendo a sueldo, m�s que por amor a las almas de los hombres. (14.) Uno que gobierne bien su propia casa, con la debida disciplina y autoridad;tener a sus hijos en sujeci�n con toda seriedad: porque si un hombre no sabe c�mo gobernar su propia casa, y se comporta all� de tal modo que preserva el orden y el decoro, �c�mo cuidar� de la iglesia de Dios, donde puede haber tantas dificultades? esperado, y se necesita mucha m�s prudencia? (15.) No era un novato, pero conoc�a y se convert�a recientemente a la fe de Cristo; no sea que envanecido de orgullo, arroj�ndose arrogantemente a un cargo para el que no est� calificado, y ambicioso de honor humano, o aplauso popular, caiga en la condenaci�n del diablo y se hunda m�s profundo desde la altura a la que pretend�a remontarse. (16.) Adem�s, debe tener un buen informe de los que est�n fuera;su conducta inmaculada con cualquier cosa que pudiera obstaculizar su ministerio; no sea que caiga en el oprobio y se vuelva despreciable y en la trampa del diablo.

Antes de que alguien se presente como candidato para el ministerio, que considere estas cosas con solemnidad. No es la facilidad, ni el honor, ni la ganancia, ni un empleo refinado, lo que debe llevarnos al servicio: son motivos deshonrosos, imp�os, imp�os. El celo por Dios, el amor desinteresado de las almas, debe calentar nuestros pechos, y la devoci�n sin reservas de nosotros mismos a Cristo debe marcar cada paso.

Y, �qui�n es suficiente para estas cosas, bien podr�amos decir? Los mejor calificados ser�n los m�s conscientes de lo cortos que son, y mirar�n constantemente a Aquel que ha prometido: He aqu�, estoy con ustedes siempre, hasta el fin del mundo. Mateo 28:20 .

Segundo, tenemos,
1. El car�cter de los di�conos, cuyo oficio era principalmente cuidar de los asuntos externos de la iglesia, ayudar a los presb�teros en sus deberes ministeriales, proveer para los pobres y administrar el patrimonio p�blico.
(1.) Deben ser graves, hombres de porte venerable. (2.) No de doble lengua; deformando la verdad para agradar en diferentes empresas, y hablando con disimulo. (3.) No dado a mucho vino, pero personas de moderaci�n ejemplar. (4.) No codiciosos de ganancias deshonestas, para que no se sientan tentados a desfalcar las acciones de la iglesia. (5.) Manteniendo el misterio de la fe en una conciencia pura;aferr�ndose firmemente a la sencillez de las doctrinas del Evangelio y adorn�ndolas con una conversaci�n adecuada. (6.) Y �stos tambi�n sean probados primero; luego, que utilicen el oficio de di�cono, si se les encuentra sin culpa; habiendo sido sometidos a un examen adecuado y aprobados, que sean investidos con su cargo.

(7.) Que los di�conos sean maridos de una sola mujer, evitando todo divorcio y poligamia; gobernar bien a sus hijos y sus propias casas; d�ndoles un buen ejemplo y manteniendo el debido orden y regularidad. Porque los que han usado bien el oficio de di�cono, con fidelidad y diligencia, fieles a la confianza que se les ha encomendado, adquieren para s� un buen grado de honor y respeto en la iglesia, y gran valent�a en la fe que es en Cristo Jes�s. ; Dios bendiga tal fidelidad con un aumento de gracia y una mayor apertura y libertad en la profesi�n del evangelio ante los hombres.

2. El car�cter de las esposas de los di�conos. Aun as�, sus esposas deben ser serias en modales, vestimenta, habla y conducta: no calumniadoras; hablar mal de las personas a sus espaldas, y sembrar discordia en la iglesia: sobrios, libres de excesos; fieles en todo, para ser un cr�dito para sus maridos y adornar su posici�n.

En tercer lugar, aunque esperaba estar con Timoteo en �feso en breve, sin embargo, para que el Se�or no lo llamara a otra parte, hab�a enviado las instrucciones anteriores. Te escribo estas cosas con la esperanza de llegar pronto a ti; pero si me demoro mucho y no llego tan pronto como me propongo, te he enviado esta ep�stola para que sepas c�mo debes comportarte en la casa de Dios. , que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad;cuyas �ltimas palabras algunos se refieren a la iglesia, donde la verdad se presenta como una inscripci�n escrita en un pilar, y se mantiene con toda firmeza; otros al mismo Timoteo, que fue un firme pilar en esa iglesia; pero quiz�s, lo mejor de todo, pueden referirse a Cristo mismo, el Dios vivo, que habita en su propio templo, y su verdadero fundamento y apoyo. E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad, especialmente en los siguientes detalles: Dios se manifest� en carne y tom� nuestra naturaleza sobre �l: justificado en el Esp�ritu, cuando por su resurrecci�n fue declarado libre de toda acusaci�n, y la justicia de Dios. plenamente satisfecho: visto de los �ngeles,cuando, triunfante, ascendi� al trono de la majestad en lo alto en medio de sus aclamaciones: predic� a los gentiles, como un Salvador supremo, e invit�ndolos libremente a participar de todas las bendiciones de su evangelio: crey� en el mundo, ambos por jud�os y gentiles, a pesar de la ignominia de su cruz: recibido arriba en gloria, para poseer la recompensa de sus sufrimientos. Nota; (1.) La suficiencia total de la expiaci�n de Jes�s depende de la gloria divina de su persona. El que sufri� en la cruz era Dios y hombre. (2.) Este es uno de los misterios de la piedad, donde la raz�n debe inclinarse y la fe adorar.

Información bibliográfica
Coke, Thomas. "Comentario sobre 1 Timothy 3". Comentario de Coke sobre la Santa Biblia. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/tcc/1-timothy-3.html. 1801-1803.