Bible Commentaries
Salmos 32

Comentario de Coke sobre la Santa BibliaComentario de Coke

Versículo 1

La bienaventuranza consiste en la remisi�n de los pecados. La confesi�n de los pecados alivia la conciencia. Las promesas de Dios traen alegr�a.

Salmo de David, Maschil.

T�tulo. ?????? Maschil - Se cree que David en este salmo, siendo despertado a un nuevo sentido de su pecado en el asunto de Ur�as por la rebeli�n de su hijo Absal�n, expresa su profundo arrepentimiento por haber ofendido a Dios de esta manera atroz; y por eso se llama en hebreo, "?????? ???? ledavid maskil,El Masquil de David; es decir, la instrucci�n de David; y en la LXX, la ??????? de David, "o su regreso a una correcta comprensi�n de s� mismo. Los salmos con este t�tulo son generalmente de naturaleza moral, y est�n dise�ados para disponer la mente a la atenci�n y la reflexi�n. El t�tulo �rabe afirma que David dijo esto prof�ticamente de la redenci�n de la humanidad; y el sir�aco nos informa que trata del pecado y la ca�da de Ad�n, y contiene una profec�a de Cristo, por quien somos librados del infierno.

Y San Pablo da gran apoyo a esta afirmaci�n con su cita, Romanos 4:8 . Aunque compuesto para una ocasi�n particular, el salmo fue posteriormente adaptado al uso p�blico por la iglesia jud�a, y se repiti� solemnemente en el gran d�a de la expiaci�n, cuando toda la naci�n hizo una confesi�n general de sus pecados.

Salmo 32:1 . Cuyo pecado est� cubierto -Es decir, por Dios, y no por el hombre; quien debe confesarlo y no esconderlo. VerSalmo 32:5. Cubiertode la ira de Dios; quien no tomar� conocimiento de ello, tras el arrepentimiento del hombre y la fe sincera en el gran Mediador. Esto parece ser una met�fora, tomada de escritores que borran lo defectuoso. En cuyo esp�ritu no hay enga�o,en el siguiente vers�culo, oprevaricaci�n,significa "cuyo dolor por el pecado es sincero y afecta profundamente su mente".

Versículo 3

Cuando guard� silencio, mis huesos envejecieron. Debido a que guard� silencio, mis huesos se consumieron. Mudge y Houb. Ver Proverbios 17:22 .

Versículo 4

Mi humedad se convierte en la sequ�a del verano. Algunos han inferido, dice el Dr. Delaney, de Salmo 32:3 , etc. que David permaneci� impenitente alg�n tiempo despu�s del romance con Betsab�; pero si hubiera estado impenitente por mucho tiempo, le habr�a sido imposible decir: Mi iniquidad no he escondido; sin embargo, describe de la manera m�s hermosa y conmovedora la angustiosa condici�n en la que se encontraba antes de que se pronunciara su perd�n; su mente en el potro; su cuerpo se alter� y consumi� por el dolor. Pero, como consecuencia de su perd�n, su humedad se convirti� en la sequedad del verano.Entonces deber�a ser traducido. El cambio fue como si lo hubieran sacado de la profundidad del invierno al pleno verano; como si todas las tormentas, lluvias y nubes de aquella l�gubre estaci�n, los mejores emblemas del dolor, se transformaran a la vez en serenidad y sol; todo el cielo despejado, despejado y sonri�ndole. Esta interpretaci�n del m�dico podr�a admitirse sobre la idea de los veranos aqu� en nuestro clima; pero debemos considerar que David escribi� en uno muy diferente; y la sequ�a de la que habla es muy com�n en los pa�ses orientales.

La lluvia indiscriminada en los meses de invierno, y nada en verano, es lo m�s com�n en el este. As� ocurre en Alepo y en Argel; y los veranos en Judea suelen ser perfectamente secos. Por lo tanto, es, sin duda, a la apariencia marchita de un verano oriental en com�n, a lo que se refiere el salmista. Ver las Observaciones,pag. 4. 13 donde se da un relato de un verano sirio del Dr. Russel, que nos proporciona un comentario muy hermoso sobre este pasaje. Dice que "desde finales de mayo, si no antes, ni siquiera cae un aguacero refrescante, y apenas una nube amistosa parece resguardarse del calor excesivo del sol hasta mediados de septiembre; que el verdor de la primavera se desvanece antes de mediados de mayo, y antes de que termine ese mes todo el pa�s adquiere un aspecto tan reseco y est�ril, que dif�cilmente se pensar�a que es capaz de producir algo, habiendo muy pocas plantas que tengan suficiente vigor. para resistir el calor extremo ". En defensa de esta �ltima interpretaci�n, un escritor ha insistido en el mecanismo del salmo; porque, dice �l, esta es una de esas composiciones que, seg�n el genio de la poes�a hebrea,

Pero, si tomamos la nueva interpretaci�n dada anteriormente, la �ltima parte del vers�culo no tendr� ninguna conexi�n con la primera; es m�s, ser� directamente contrario e inconsistente con �l. Y para no decir m�s, todas las versiones antiguas y los mejores comentaristas est�n de acuerdo en el sentido que hemos dado anteriormente.

Versículo 6

Por esto, todo piadoso te orar�: Porque esto, es decir, porque eres misericordioso, todo piadoso, verdaderamente arrepentido y sinceramente resuelto a servirte en el futuro, orar� a ti en un tiempo en que puedes ser encontrado; mientras haya lugar para el arrepentimiento y la reconciliaci�n contigo. Ver Isa�as 55:6 . El Caldeo lo rinde, en un tiempo aceptable; el �rabe, en un momento de audiencia. Hay una dificultad considerable en la siguiente cl�usula. Por las inundaciones de grandes aguas, algunos entienden peligros y angustias;agradablemente a lo que el significado es, que en las mayores dificultades y angustias que puedan rodearlo como un diluvio de agua, ellos (esas aguas o angustias) no se acerquen a �l, para tragarlo; pero al final ser� librado de ellos.

El Dr. Hammond, sin embargo, observa que las palabras pueden ser traducidas de otra manera, Pero en cuanto a la inundaci�n de muchas, o grandes aguas, (significando aqu� el hombre malvado, que, como un torrente, rompe la orilla, transgrede las leyes, y barre y se lleva todo lo que tiene delante) no se acercar�n, ni se acercar�n a �l; Dios, eso es. Corren obstinados en su curso; no se preocupan por Dios, ni lo cuidan nunca. As�, la oposici�n en la primera y �ltima parte del vers�culo parece ser exacta; tampoco es objeci�n alguna el cambio de persona de ti a �l , que es frecuente en esta escritura po�tica. Ver Salmo 18 .

Versículo 8

Te guiar� con mi ojo; d�jame aconsejarte con mi ojo hacia ti: Mudge: quien observa, que el autor se compromete a instruir a quienquiera que lo escuche, y a darle una pizca de consejo (porque eso es aconsejar con el ojo ); es decir, hacer lo que �l hab�a hecho; confesar honestamente sus pecados cuando han sido cometidos: porque el malvado, el hombre sin principios, que da rienda suelta a los cr�menes sin arrepentimiento ni confesi�n, nunca es f�cil, y siempre se siente irritado; mientras que el justo, que pone su confianza en Dios y se somete a su gobierno, siempre se encontrar� Salmo 32:10 favor, Salmo 32:10 .

El vers�culo noveno debe leerse entre par�ntesis. Es aconsejable tomar una buena pista, y no ser como el caballo o la mula, que no entienden m�s raz�n que la fuerza de la brida, y por lo tanto no se acercan a ninguno al hablar o mirarlos. Houbigant traduce la �ltima cl�usula, muy apropiadamente, O no se acercar�n a ti; porque como no son bestias peligrosas, la palabra amas es extremadamente impropia.

Versículo 11

Al�grate en el Se�or: el obispo Hare supone que este vers�culo pertenece al siguiente salmo, porque no tiene conexi�n con el vers�culo anterior ni con ninguna parte de este salmo; pero si se coloca al comienzo del siguiente, los dos primeros vers�culos concuerdan muy bien y se corresponden con gran propiedad. Como apoyo adicional a esta conjetura, se puede observar que casi a lo largo de ese salmo los versos son exeg�ticos, contienen el mismo sentido o uno similar; de donde es igualmente probable que este salmo fuera interpretado en partes por dos divisiones del coro. V�ase el obispo Hare y Mudge.

REFLEXIONES.� Primero, tenemos aqu�,

1. Una declaraci�n de la rica gracia de Dios, hecha a los pecadores que regresan en Cristo, y de ah� la bendici�n acumulada. Su transgresi�n es perdonada, aunque nunca sea tan grande, nunca tan agravada, nunca haya persistido tanto tiempo; su pecado est� cubierto; la sangre de Jes�s borra el terrible relato; Su iniquidad no es imputada, no hay acusaci�n contra ellos, porque el que no conoci� pecado, era puramente inmaculado en s� mismo, se hizo pecado por ellos, y carg� con toda la ira, que era la paga del pecado, para que pudieran ser convertidos en pecado. la justicia de Dios en �l;podr�a ser, seg�n �l lo consideraba, tratado como personas justas, que nunca hab�an ofendido: estos son bienaventurados; ning�n terrores de conciencia los desanima, ning�n temor a la muerte debe perturbarlos, ni ning�n temor al juicio los angustia; porque no hay condenaci�n para los que est�n en Cristo Jes�s. Tal es su privilegio, y su pr�ctica responde a �l: en su esp�ritu no hay enga�o; la misma gracia que justifica al culpable santifica al imp�o: son bendecidos con sencillez de coraz�n ante Dios, y se someten a la gu�a de su palabra y Esp�ritu.

2. Describe su estado miserable, mientras el pecado reinaba en �l y sobre �l; La mano de Dios pesaba sobre �l en alguna enfermedad violenta, que resecaba su cuerpo como la sequ�a del verano; y la angustia hizo que sus huesos envejecieran, por eso parec�a tan demacrado. Nota; (1.) Miserable es el estado del pecador impenitente. (2.) No importa cu�n severo sea el azote que nos lleva a Dios, tenemos abundantes razones para besar la vara.

3. Al fin se rompi� su silencio y habl� con su lengua en una confesi�n arrepentida; con profunda e sincera humillaci�n, desnudando su pecho ante el Dios que escudri�a el coraz�n y no deseando ocultar ninguna de sus transgresiones. Nota; (1.) Es un s�ntoma bendito cuando el pecador se pone de rodillas. (2.) Quienes son verdaderamente despertados por el Esp�ritu de Dios, desean avergonzarse a s� mismos; no para paliar sus ofensas, sino en su culpa agravada reconoci�ndolas y lament�ndolas.

4. Mientras hablaba Dios, escuch� y perdon�. Dije que lo confesar�a, etc. y (posiblemente antes de que el prop�sito se convirtiera en una oraci�n) perdonaste la iniquidad de mi pecado, sellaste el perd�n a mi conciencia. Nota; (1.) Todos los que se acercan a Dios en Cristo, lo encontrar�n m�s dispuesto a perdonar que nosotros a orar; �Qu� est�mulo para el mayor de los pecadores! (2.) No es nuestra penitencia ni nuestras oraciones, sino la gracia gratuita de Dios, a la que solo estamos en deuda.

En segundo lugar, los que tienen un Dios perdonador no pueden sino regocijarse en la esperanza.
1. David profesa su confianza en Dios y lo que espera de �l. T�, el cordero sangrante de Dios, cuyas heridas est�n abiertas para m�, eres mi escondite, adonde mi pobre y pecadora alma ha huido, y donde yace a salvo de todas las acusaciones de conciencia, las acusaciones de Satan�s y el Temores de ira: no hay angustia que se acerque, pero cantos de liberaci�n me rodean, por la culpa perdonada, por la corrupci�n sometida, por el cielo abierto. Nota; Los que han huido a Jes�s en busca de refugio han encontrado motivo de alabanza eterna.

2. Mediante una dulce experiencia, ahora puede ense�ar a otros el camino del descanso y la paz, y el perd�n y la alegr�a indecibles. Yo te instruir�, etc. se�alar� el camino que yo mismo he recorrido; y en el que quien camina encontrar� la misma bienaventuranza. Nota; (1.) Los que hablan por experiencia predicar�n de la manera m�s eficaz. (2.) Un esp�ritu ense�able es el camino a la verdadera sabidur�a. (3.) La palabra de Dios y los ministros, bajo la bendici�n del Esp�ritu, son nuestros gu�as designados, y debemos escucharlos.

3. Advierte a los obstinados e incorregibles de su miseria inminente y les advierte que la eviten. No deben, como bestias brutas, ser esclavos de sus apetitos, ni refractarios contra la palabra divina y las advertencias; porque entonces sus dolores se multiplicar�an y sus tormentos insoportables e interminables.
4. Anima a los fieles a adherirse a Dios ya gozarse en �l: mientras conf�an en Dios, su misericordia los rodear�, su poder los proteger�.

Por tanto, al�grate y regoc�jate, justos; glor�ese en sus privilegios, y grite con j�bilo todos los que son rectos de coraz�n; Atribuya la alabanza a aquel a quien est� en deuda por toda la gracia que le ha sido otorgada; y mira hacia adelante, con transporte santo, al reino que �l te ha provisto, �Am�n! Am�n.

Información bibliográfica
Coke, Thomas. "Comentario sobre Psalms 32". Comentario de Coke sobre la Santa Biblia. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/tcc/psalms-32.html. 1801-1803.