Ciertamente viudas, que no tienen parientes cercanos que las mantengan; y que est�n enteramente dedicados a Dios. Desolate: no tener hijos ni nietos que la alivien.
La que vive en el placer: delicadamente, voluptuosamente, en una sensualidad elegante y regular, aunque no en el uso de placeres que son ilegales en s� mismos.
Si alguno no proporciona: comida y ropa. Para los suyos - Madre y abuela, viudas desoladas. �l tiene ... Pr�cticamente. Negada la fe, que no destruye, sino que perfecciona los deberes naturales. �Qu� tiene esto que ver con acumular dinero para nuestros hijos, por lo que a menudo se alega con tanta impertinencia? Pero todos los hombres tienen sus razones para depositar dinero. Uno ir� al infierno por miedo a la miseria; otro act�a como un pagano, no sea que sea peor que un infiel.
No se escoja viuda entre el n�mero de diaconisas que asist�an a mujeres enfermas o predicadores itinerantes. Menores de sesenta - Posteriormente fueron admitidos a los cuarenta, si eran eminentes por la santidad. Haber sido esposa de un solo marido - Es decir, haber vivido en matrimonio leg�timo, ya sea con una o m�s personas sucesivamente.
Rechazar - No elijas. Porque cuando se vuelven desenfrenados contra Cristo, a cuyo servicio m�s inmediato se hab�an enganchado. Quieren casarse, y no con un solo ojo para la gloria de Dios; y as� se apartan de todo el servicio de la iglesia al que estaban antes comprometidos.
Han rechazado su primera fe, han abandonado su confianza en Dios y han actuado en contra de la primera convicci�n, a saber, que dedicarse por completo a su servicio era la manera m�s excelente. Cuando recibimos el poder para creer por primera vez, el Esp�ritu de Dios generalmente no se�ala cu�les son las cosas m�s excelentes; y al mismo tiempo, �darnos una santa resoluci�n de caminar en el m�s alto grado de severidad cristiana? �Y cu�n imprudentes somos al hundirnos en algo debajo de �l!
Por tanto, aconsejo a las mujeres m�s j�venes, viudas o v�rgenes, que no est�n dispuestas a vivir solas. Casarse, tener hijos, guiar a la familia ... Entonces tendr�n suficiente empleo propio. Y no des motivo de reproche al adversario, sea jud�o o pagano.
Que los ancianos que gobiernan bien, que se aprueban a s� mismos como fieles mayordomos de todo lo que est� encomendado a su cargo. Ser considerado digno de doble honor: una provisi�n m�s abundante, ya que los tales la emplear�n todo para la gloria de Dios. As� como fueron los hombres m�s laboriosos y desinteresados ??los que fueron puestos en estos cargos, as� todo lo que alguien ten�a que otorgar, en su vida o muerte, generalmente se depositaba en sus manos para los pobres.
Por este medio, los eclesi�sticos se hicieron muy ricos en las edades posteriores, pero como el dise�o de los donantes era otra cosa, existe la raz�n m�s alta por la que deben desecharse de acuerdo con su piadosa intenci�n. Especialmente aquellos - De ellos. Que trabajan: diligente y dolorosamente. En la palabra y la ense�anza - En la ense�anza de la palabra.
Contra un anciano - O presb�tero. Ni siquiera reciba una acusaci�n, a menos que sea por dos o tres testigos. Seg�n la ley mosaica, una persona privada puede ser citada (aunque no condenada) por el testimonio de un testigo; pero San Pablo proh�be incluso citar a un anciano con tal evidencia, ya que su reputaci�n es de m�s importancia que la de los dem�s.
Te encomiendo ante Dios - Refiri�ndote al juicio final, en el que estaremos ante Dios y Cristo, con sus elegidos, es decir, santos, �ngeles, que son los testigos de nuestra conversaci�n. El ap�stol mira a trav�s de sus propios trabajos, e incluso a trav�s del tiempo mismo, y parece estar ya como uno en la eternidad. Que observes estas cosas sin prejuzgar: no dices sentencia hasta que la causa se haya escuchado plenamente. O parcialidad - A favor o en contra de cualquiera.
No imponga repentinamente las manos sobre nadie - Es decir, no designe a ning�n hombre para los oficios de la iglesia sin un juicio y un examen completos; de lo contrario, tendr� acceso y ser� responsable de su mala conducta en su oficina. Mant�ngase puro - De la sangre de todos los hombres.
Los pecados de algunos hombres se manifiestan de antemano, antes de que se haga una investigaci�n estricta. Ir antes al juicio - Para que pueda juzgarlos inmediatamente como indignos de cualquier oficio espiritual. Y algunos ellos ... Sus pecados. Sigue despu�s - M�s encubiertamente.
Aquellos que son de otra manera - No tan manifiestos. No se puede esconder por mucho tiempo - De tu conocimiento. Por esta raz�n, tambi�n, no se apresure a imponer las manos.
Declaración de derechos de autor Estos archivos están en dominio público y son un derivado de una edición electrónica disponible en el sitio web de la Biblioteca Eterna de Clásicos Cristianos.
Información bibliográfica Wesley, Juan. "Comentario sobre 1 Timothy 5". "Notas Explicativas de Juan Wesley sobre Toda la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/wen/1-timothy-5.html. 1765.
Versículo 1
No reprendas: considerando tu propia juventud, con tal severidad que de otra manera ser�a apropiada.
Versículo 3
Honor: es decir, mantenerse fuera del stock p�blico.
Versículo 4
Que estos aprendan a recompensar a sus padres, por todos sus cuidados, problemas y gastos anteriores.
Versículo 5
Ciertamente viudas, que no tienen parientes cercanos que las mantengan; y que est�n enteramente dedicados a Dios. Desolate: no tener hijos ni nietos que la alivien.
Versículo 6
La que vive en el placer: delicadamente, voluptuosamente, en una sensualidad elegante y regular, aunque no en el uso de placeres que son ilegales en s� mismos.
Versículo 7
Que ellos ... Es decir, las viudas.
Versículo 8
Si alguno no proporciona: comida y ropa. Para los suyos - Madre y abuela, viudas desoladas. �l tiene ... Pr�cticamente. Negada la fe, que no destruye, sino que perfecciona los deberes naturales. �Qu� tiene esto que ver con acumular dinero para nuestros hijos, por lo que a menudo se alega con tanta impertinencia? Pero todos los hombres tienen sus razones para depositar dinero. Uno ir� al infierno por miedo a la miseria; otro act�a como un pagano, no sea que sea peor que un infiel.
Versículo 9
No se escoja viuda entre el n�mero de diaconisas que asist�an a mujeres enfermas o predicadores itinerantes. Menores de sesenta - Posteriormente fueron admitidos a los cuarenta, si eran eminentes por la santidad. Haber sido esposa de un solo marido - Es decir, haber vivido en matrimonio leg�timo, ya sea con una o m�s personas sucesivamente.
Versículo 10
Si ha lavado los pies de los santos, ha estado dispuesta a hacer los oficios m�s humildes por ellos.
Versículo 11
Rechazar - No elijas. Porque cuando se vuelven desenfrenados contra Cristo, a cuyo servicio m�s inmediato se hab�an enganchado. Quieren casarse, y no con un solo ojo para la gloria de Dios; y as� se apartan de todo el servicio de la iglesia al que estaban antes comprometidos.
Versículo 12
Han rechazado su primera fe, han abandonado su confianza en Dios y han actuado en contra de la primera convicci�n, a saber, que dedicarse por completo a su servicio era la manera m�s excelente. Cuando recibimos el poder para creer por primera vez, el Esp�ritu de Dios generalmente no se�ala cu�les son las cosas m�s excelentes; y al mismo tiempo, �darnos una santa resoluci�n de caminar en el m�s alto grado de severidad cristiana? �Y cu�n imprudentes somos al hundirnos en algo debajo de �l!
Versículo 14
Por tanto, aconsejo a las mujeres m�s j�venes, viudas o v�rgenes, que no est�n dispuestas a vivir solas. Casarse, tener hijos, guiar a la familia ... Entonces tendr�n suficiente empleo propio. Y no des motivo de reproche al adversario, sea jud�o o pagano.
Versículo 15
Algunas: viudas. Se han apartado en pos de Satan�s, quien los apart� de Cristo.
Versículo 17
Que los ancianos que gobiernan bien, que se aprueban a s� mismos como fieles mayordomos de todo lo que est� encomendado a su cargo. Ser considerado digno de doble honor: una provisi�n m�s abundante, ya que los tales la emplear�n todo para la gloria de Dios. As� como fueron los hombres m�s laboriosos y desinteresados ??los que fueron puestos en estos cargos, as� todo lo que alguien ten�a que otorgar, en su vida o muerte, generalmente se depositaba en sus manos para los pobres.
Por este medio, los eclesi�sticos se hicieron muy ricos en las edades posteriores, pero como el dise�o de los donantes era otra cosa, existe la raz�n m�s alta por la que deben desecharse de acuerdo con su piadosa intenci�n. Especialmente aquellos - De ellos. Que trabajan: diligente y dolorosamente. En la palabra y la ense�anza - En la ense�anza de la palabra.
Versículo 18
Deuteronomio 25:4
Versículo 19
Contra un anciano - O presb�tero. Ni siquiera reciba una acusaci�n, a menos que sea por dos o tres testigos. Seg�n la ley mosaica, una persona privada puede ser citada (aunque no condenada) por el testimonio de un testigo; pero San Pablo proh�be incluso citar a un anciano con tal evidencia, ya que su reputaci�n es de m�s importancia que la de los dem�s.
Versículo 20
Esos - Ancianos. Ese pecado - Escandalosamente, y est�n debidamente condenados. Reprimen ante todos - La iglesia.
Versículo 21
Te encomiendo ante Dios - Refiri�ndote al juicio final, en el que estaremos ante Dios y Cristo, con sus elegidos, es decir, santos, �ngeles, que son los testigos de nuestra conversaci�n. El ap�stol mira a trav�s de sus propios trabajos, e incluso a trav�s del tiempo mismo, y parece estar ya como uno en la eternidad. Que observes estas cosas sin prejuzgar: no dices sentencia hasta que la causa se haya escuchado plenamente. O parcialidad - A favor o en contra de cualquiera.
Versículo 22
No imponga repentinamente las manos sobre nadie - Es decir, no designe a ning�n hombre para los oficios de la iglesia sin un juicio y un examen completos; de lo contrario, tendr� acceso y ser� responsable de su mala conducta en su oficina. Mant�ngase puro - De la sangre de todos los hombres.
Versículo 24
Los pecados de algunos hombres se manifiestan de antemano, antes de que se haga una investigaci�n estricta. Ir antes al juicio - Para que pueda juzgarlos inmediatamente como indignos de cualquier oficio espiritual. Y algunos ellos ... Sus pecados. Sigue despu�s - M�s encubiertamente.
Versículo 25
Aquellos que son de otra manera - No tan manifiestos. No se puede esconder por mucho tiempo - De tu conocimiento. Por esta raz�n, tambi�n, no se apresure a imponer las manos.