Bible Commentaries
1 Corintios 16

Versículo 1

CAP�TULO XVI.

El ap�stol exhorta a los corintios a hacer una contribuci�n para

socorrer a los cristianos pobres de Jerusal�n, y les indica el mejor�

modo de hacerlo, 1-4.

Promete hacerles una visita despu�s de Pentecost�s, 5-9.

Da instrucciones sobre el tratamiento de Timoteo y Apolos, 10-12.

Y sobre la vigilancia, 13, 14.

Encomienda la casa de Est�fanas, y expresa su satisfacci�n

por la visita que le hicieron Est�fanas, Fortunato y Ac�ico, 15-18.

Env�a los saludos de diferentes personas, 19, 21.

Muestra el terrible estado de los enemigos de Cristo, 22.

Y concluye la ep�stola con la bendici�n apost�lica, 23, 24.

NOTAS SOBRE EL CAP. XVI.

verso 1 Corintios 16:1 _ La colecta para los santos...�???? ??? ??????, de ????, reunir , o recolectar traducido por la Vulgata, de collectis , contribuci�n hecha por los ricos para el alivio de los pobres. Naturalmente, podemos suponer que los cristianos que viv�an en Jerusal�n estaban muy afligidos ; como la enemistad de sus compatriotas al Evangelio de Cristo los llev� a tratar con crueldad a los que lo profesaban, y despojarlos de sus bienes; (ver Hebreos 10:34 ; y Romanos 15:26 ; y Romanos 15:27 ;) y el ap�stol aqu� ense�a que era el deber de una congregaci�n cristiana ayudar a otra cuando estaba en peligro.

Versículo 2

verso 1 Corintios 16:2 _ En el primer d�a de la semana...�El ap�stol prescribe el m�todo m�s conveniente y adecuado para hacer esta contribuci�n.

1. Todo hombre deb�a sentir que era su deber socorrer a sus hermanos en apuros.

2. Deb�a hacer esto de acuerdo a la habilidad que Dios le dio.

3. Deb�a hacer esto al final de la semana, cuando hubiera echado mano de sus ganancias semanales, y hubiera visto cu�nto hab�a prosperado Dios en su trabajo.

4. Luego deb�a traerlo el primer d�a de la semana, como es m�s probable, a la iglesia o asamblea, para que pudiera ser puesto en el tesoro com�n.

5. Aprendemos de esto que la contribuci�n semanal no pod�a ser siempre la misma , ya que cada hombre deb�a gastar seg�n Dios lo hab�a prosperado : ahora, algunas semanas ganar�a m�s; otros, menos.

6. Parece del todo que el primer d�a de la semana , que es el s�bado cristiano, era el d�a en que se celebraban sus principales reuniones religiosas en Corinto y las iglesias de Galacia ; y, en consecuencia, en todos los dem�s lugares donde hab�a prevalecido el cristianismo. Este es un fuerte argumento a favor de la observancia del s�bado cristiano.

7. Podemos observar que el ap�stol sigue aqu� la regla de la sinagoga ; era costumbre regular entre los jud�os hacer sus colectas para los pobres en el d�a de reposo , para que no se quedaran sin las cosas necesarias para la vida, y no se les impidiera asistir a la sinagoga.

8. Con el fin de hacer esta provisi�n, ten�an una bolsa , que se llamaba ????? ?? ???? Arneki shel tsedakah , "La bolsa de las limosnas", o lo que llamar�amos, la caja de los pobres . Esto es lo que parece querer decir el ap�stol cuando dice: Que guarde a su lado, que lo ponga en la bolsa de la limosna , o en la caja de los pobres .

9. Era tambi�n entre ellos una m�xima que, si encontraban dinero, no lo pusieran en su bolsa privada , sino en la de los pobres .

10. Los jud�os piadosos cre�an que como la sal condimentaba la comida, tambi�n lo hac�an las limosnas , las riquezas; y que el que no daba limosna de lo que ten�a, sus riquezas fueran dispersadas. La polilla corromper�a las bolsas , y el chancro corroer�a el dinero , a menos que la misa fuera santificada dando una parte a los pobres.

Versículo 3

Verso 1 Corintios 16:3 . A quien aprob�is con vuestras cartas... ��Por qu� iba Pablo a exigir cartas de aprobaci�n en favor de ciertas personas, cuando �l mismo iba a estar entre ellas y pod�a conocer sus caracteres de viva voz? Es probable que se refiera aqu� a las cartas de recomendaci�n que le hab�an enviado mientras estaba fuera; y ahora promete que cuando llegue a Corinto, nombrar� a estas personas, a las que hab�an recomendado, para que lleven las limosnas a Jerusal�n. Si ??????????, se lee habr�is aprobado, como hace el obispo Pearce, la dificultad se desvanece.

Algunos MSS. y varias versiones unen ???????????, por letras, a las palabras siguientes, y leen el vers�culo as�: Cuando yo venga, a los que vosotros aprob�is los enviar� con cartas para que lleven vuestra liberalidad a Jerusal�n. Esto parece lo m�s natural.

Versículo 4

Verso 1 Corintios 16:4 . Y si es necesario...�Si es un negocio que requiere mi presencia, y se juzga apropiado que vaya a Jerusal�n, tomar� a esas personas como mis compa�eros. Sobre la delicadeza con la que San Pablo manej� el negocio de una colecta para los pobres, el Archidi�cono Paley hace las siguientes observaciones apropiadas:�"Las siguientes observaciones nos satisfar�n acerca de la pureza de la conducta de nuestro ap�stol en el sospechoso negocio de una contribuci�n pecuniaria.

"1�. �l niega haber recibido autoridad inspirada por las instrucciones que est� dando: 'No hablo por mandato, sino por ocasi�n del atrevimiento de otros, y para probar la sinceridad de vuestro amor.' ( 2 Corintios 8:8 .)

�Qui�n, que tuviera un prop�sito siniestro de responder por la recomendaci�n de las suscripciones, distinguir�a as�, y rebajar�a as� el cr�dito de su propia recomendaci�n?

"2�. Aunque afirma el derecho general de los ministros cristianos a una manutenci�n por su ministerio, protesta contra el uso de este derecho en su propia persona: 'As� ha ordenado el Se�or, que los que anuncian el Evangelio vivan del Evangelio, pero yo no he usado nada de esto; ni he escrito estas cosas para que se me haga as�; porque m�s me valdr�a morir, que alguien anulara mi gloria, es decir, mis profesiones de desinter�s'.�( 1 Corintios 9:14 ; 1 Corintios 9:15 ).

"3�. Propone repetidamente que haya asociados con �l en la administraci�n de la generosidad p�blica; no colegas de su propia designaci�n, sino personas elegidas para ese prop�sito por los propios contribuyentes. Y cuando llegue, a quienes aprob�is por vuestras cartas, los enviar� para que lleven vuestra generosidad a Jerusal�n; y si es conveniente que yo tambi�n vaya, ellos ir�n conmigo".�( 1 Corintios 16:3 ; 1 Corintios 16:4 .) �Y en la segunda ep�stola, lo que aqu� se propone lo encontramos realmente hecho, y hecho con el prop�sito mismo de proteger su car�cter contra cualquier imputaci�n que pudiera ser presentada en el cumplimiento de una confianza pecuniaria: Y hemos enviado con �l al hermano, cuya alabanza est� en el Evangelio a trav�s de todas las Iglesias; y no s�lo eso, sino que tambi�n fue escogido de las Iglesias para viajar con nosotros con esta gracia, (don,) que es administrada por nosotros para la gloria del mismo Se�or, y la declaraci�n de tu mente lista: evitando esto, para que nadie nos culpe en esta abundancia que es administrada por nosotros; proveyendo para las cosas honestas, no s�lo a la vista del Se�or, sino tambi�n a la vista de los hombres:' i. es decir, no descansando en la conciencia de nuestra propia integridad, sino, en tal tema, cuidando tambi�n de aprobar nuestra integridad al juicio p�blico.�( 2 Corintios 8:18 .") Horae Paulinae , p�gina 95.

Versículo 5

verso 1 Corintios 16:5 _ Vendr� a vosotros cuando pase por Macedonia...�San Pablo estaba ahora en �feso; porque casi todos admiten, en oposici�n a la suscripci�n al final de esta ep�stola que afirma que fue escrita desde Filipos, que fue escrita desde �feso: y esto es apoyado por muchos argumentos fuertes; y el octavo verso aqu� parece ponerlo fuera de toda duda: Me quedar� en �feso; es decir, estoy en �feso, y aqu� me propongo permanecer hasta pentecost�s. Aunque Macedonia no estaba en el camino directo de �feso a Corinto, el ap�stol ten�a la intenci�n de hacerlo en su camino. Y fue porque no estaba en el camino directo, sino que se encontraba en el extremo superior del Mar Egeo, y muy lejos de su l�nea directa, que �l dice: Paso por Macedonia; me he propuesto ir all� antes de ir a Corinto.

Versículo 6

Verso 1 Corintios 16:6 .�S�, e invernar con vosotros... Pensaba quedarse hasta Pentecost�s en �feso; despu�s ir a Macedonia, y probablemente pasar all� el verano; y venir en oto�o a Corinto, y pasar all� el invierno.

Para que me llev�is de viaje... Para que me proporcion�is los medios para viajar. Parece que, en la mayor�a de los casos, las diferentes Iglesias pagaban sus gastos a otras Iglesias; donde no se hac�a esto, entonces trabajaba en su negocio para adquirir los medios para viajar.

Versículo 7

Verso 1 Corintios 16:7 . Por cierto, no te ver� ahora...�De �feso a Corinto s�lo hab�a que cruzar el mar Egeo, y era un trayecto comparativamente corto.

Versículo 8

Verso 1 Corintios 16:8 . Me quedar� en �feso...�Y es muy probable que as� lo hiciera; y que todos estos viajes se hicieran como �l mismo hab�a proyectado. Ver nota en 1 Corintios 16:5 .

Versículo 9

Verso 1 Corintios 16:9 . Se me abre una puerta grande y eficaz...�???? ??? ??? ?????? ?????? ??? ???????��Se me ha abierto una puerta grande y fuerte; es decir, Dios me ha hecho una gran apertura en esas partes, que percibo que requerir� mucho trabajo; y adem�s, tendr� muchos adversarios que se me opondr�n. As� entiende el P. Pearce las palabras ???????, no como significando eficaz, sino como implicando lleno de trabajo. Puerta significa a menudo ocasi�n u oportunidad; pero aqu�, el ap�stol puede aludir a la apertura de las grandes puertas del Circo M�ximo antes de que comenzaran las carreras de carros; y los muchos adversarios pueden referirse a los numerosos competidores en esas carreras.

Dios le dio una gran oportunidad para predicar el Evangelio; pero no deb�a esperar que ni Satan�s ni los hombres malvados lo dejaran sin molestar.

Versículo 10

Verso 1 Corintios 16:10 . Ahora, si Timoteo viene...�De Timoteo hemos o�do antes, 1 Corintios 4:17 . Y aprendemos, de Hechos 19:22 , que Pablo lo envi� con Erasto de �feso a Macedonia. Es evidente, por lo tanto, en oposici�n a la muy excepcional suscripci�n al final de esta ep�stola, que la ep�stola misma no fue enviada por Timoteo, como all� se afirma.

Para que est� con vosotros sin temor...�para que sea bien tratado, y no perplejo y acosado por vuestras divisiones y celos; porque �l hace la obra del Se�or , �l es divinamente designado, como yo tambi�n lo soy.

Versículo 11

Verso 1 Corintios 16:11 . Que nadie lo desprecie...�Que nadie pretenda decir que no tiene plena autoridad de Dios para hacer la obra de un evangelista.

Pero cond�zcalo en paz...�Creo, con Bp. Pearce, que esta cl�usula debe traducirse y se�alarse as�: acomp��alo en su viaje, para que pueda venir a m� en paz (?? ??????, en seguridad), como se usa la palabra en�Marco 5:34 ; yLucas 7:50 .

Porque lo busco con los hermanos...�????????? - ????? ???? ??? ???????. Esta cl�usula no debe entenderse como si Pablo estuviera esperando a ciertos hermanos con Timoteo; pero eran los hermanos que estaban con Pablo los que lo buscaban; Yo, con los hermanos, lo busco.

Versículo 12

Verso 1 Corintios 16:12 . En cuanto a nuestro hermano Apolos...�De esto parece que los hermanos , de quienes habla el ap�stol en el vers�culo anterior, estaban entonces con �l en �feso; Yo, con los hermanos, deseaba mucho venir .

Pero su voluntad no era en absoluto venir...�Como en Corinto se hab�a creado una facci�n en nombre de Apolos, probablemente pens� que no era prudente ir all� en ese momento, para que su presencia no fuera el medio de darle fuerza o apoyo.

Versículo 13

Verso 1 Corintios 16:13 .�Vigilad... Ten�is muchos enemigos; estad siempre en guardia; sed siempre circunspectos

1. Velad contra el mal;

2. Velad por las oportunidades de recibir el bien;

3. Vigila las oportunidades de hacer el bien;

4. Velen unos por otros en el amor;

5. Velad para que nadie os aparte de la fe y la unidad del Evangelio.

Manteneos firmes en la fe... Creed a conciencia lo que ya hab�is recibido como la verdad de Dios; porque es el Evangelio por el cual ser�is salvados, y por el cual est�is ahora en estado de salvaci�n:�ver� 1 Corintios 15:1 ; 1 Corintios 15:2 .

Dejad de ser como ni�os... No se�is como ni�os zarandeados por todo viento de doctrina; dejad que vuestro entendimiento reciba la verdad; dejad que vuestro juicio determine la necesidad absoluta de retenerla; y renunciad a la vida antes que renunciar al testimonio de Dios.

S� fuerte... Poned todo el vigor y la energ�a que Dios os ha dado en mantener y propagar la verdad, y vuestra fuerza espiritual aumentar� con el uso. Los t�rminos de este vers�culo son todos militares: Velad, ??????????, vigilad, y estad siempre en guardia, para que no os sorprendan vuestros enemigos; mantened vuestros exploradores fuera, y todos vuestros centinelas en sus puestos, para que vuestros enemigos no os roben la marcha. Procurad que el lugar en el que os encontr�is est� bien defendido, y que cada uno est� alerta para cumplir con su deber.

Manteneos firmes en la fe - ??????? ?? ?? ??????-. Manteneos en vuestras filas; no se�is desordenados; estad decididos a mantener vuestras filas intactas; manteneos unidos. De vuestra unidad depende vuestra conservaci�n; si el enemigo consigue romper vuestras filas, y dividir una parte de este sagrado ej�rcito de otra, vuestra derrota ser� inevitable.

Quedaos como hombres - ??????????- Cuando os ataquen, no os acobard�is; mantened vuestro terreno; resistid; avanzad; atacad; manteneos compactos; conquistad.

S� fuerte - ???????????. Si a una compa��a o divisi�n se le opone una fuerza demasiado grande del enemigo, reforzad esa divisi�n y mantened vuestra posici�n; si se va a atacar alguna parte o intrincamiento del enemigo, reunid todo vuestro valor, sosteneos mutuamente; no tem�is, porque el miedo os enervar�. Vuestra causa es buena; es la fe, la religi�n de Jes�s; �l es vuestro capit�n en el campo de batalla; y, aunque mur�is en la contienda, la victoria es vuestra.

Versículo 14

Verso 1 Corintios 16:14 . Que todas vuestras cosas se hagan con caridad...�Que el amor a Dios, al hombre y a los dem�s, sea el motivo de toda vuestra conducta.

Versículo 15

Verso 1 Corintios 16:15 . Vosotros conoc�is la casa de St�fanas...�Vosotros sab�is que Est�fanas y su familia los han agregado a la ayuda de los seguidores de Cristo; han sido los principales instrumentos de apoyo a la obra de Dios en Acaya, de la que ellos mismos han sido las primicias.�� Romanos 16:5 .

Versículo 16

Verso 1 Corintios 16:16 . Que os somet�is a tales...�Que les teng�is el debido respeto , y los consider�is como instrumentos especiales en la mano de Dios para promover y llevar a cabo su gran obra. La sumisi�n aqu� recomendada no implica obediencia , sino conducta amable y cort�s.��Kypke reivindica este sentido de la palabra en Efesios 5:21 ; 1 Pedro 5:5 . Efesios 5:21, 1 Pedro 5:5

Versículo 17

Vers�culo 17.�Me alegro de la llegada de Est�fanas... Por ellos los corintios hab�an enviado aquella carta al ap�stol, cuya respuesta era parte principal del designio de San Pablo en esta ep�stola.

Fortunato... Se supone que este hombre sobrevivi� a San Pablo y que es el mismo mencionado por Clemente en su ep�stola a los Corintios, sec. 59, como portador de esa ep�stola de Clemente en Roma a los cristianos de Corinto.

Por lo que faltaba de vuestra parte... Esto puede referirse a comunicaciones adicionales adem�s de las contenidas en la carta que los corintios enviaron al ap�stol -cuyas circunstancias adicionales fueron proporcionadas por las personas mencionadas anteriormente, y de las que San Pablo tuvo una relaci�n m�s completa de su estado espiritual que la contenida en la carta- o a algunas contribuciones de su parte para el apoyo del ap�stol en sus peregrinaciones y trabajos.

Versículo 18

Verso 18. Han refrescado mi esp�ritu y el tuyo...�Han sido un medio para contribuir grandemente a mi consuelo; y lo que contribuye a mi comodidad debe aumentar la tuya . Este es probablemente el significado del ap�stol.

Por lo tanto, recon�zcanlos...�Pr�stenles particular respeto, y que todos sean tenidos en estima en proporci�n a su trabajo y utilidad. Cuando esto se convierta en la regla del respeto y la estima , entonces los apegos necios y caprichosos no tendr�n lugar. Entonces un hombre ser� honrado en proporci�n a su m�rito ; y su m�rito ser� estimado por su utilidad entre los hombres.

Versículo 19

Verso 19. Las Iglesias de Asia te saludan...�es decir Las Iglesias en Asia Menor . �feso estaba en esta Asia, y es claro por esto que el ap�stol no estaba en Filipos ; si hubiera estado en Filipos, como dice la suscripci�n, habr�a dicho: Las Iglesias de MACEDONIA, no las Iglesias de ASIA, os saludan . C�mo se ubican estos lugares, en referencia uno al otro, el lector lo percibir� de inmediato al consultar el mapa en Hechos.

Aquila y Priscila...�De estas personas eminentes hemos o�do antes: ver� Hechos 18:2 , Hechos 18:18 , Hechos 18:26 ; y� Romanos 16:3 .

Con la Iglesia que est� en su casa...�Es decir, la compa��a de creyentes que generalmente rend�a culto all�. No se construyeron iglesias ni capillas en ese momento; y las asambleas de los cristianos se celebraban necesariamente en casas particulares. Parece que Aquila y Priscila dedicaron su casa a este prop�sito. La casa de Filem�n era de la misma clase; Filem�n 1:2 .

As� fue tambi�n la casa de Ninfas , Colosenses 4:15 . � Romanos 16:5 .

Versículo 20

Verso 20. Con �sculo santo...�Los antiguos patriarcas, y los jud�os en general, ten�an la costumbre de besarse cada vez que se encontraban; y esto fue una se�al de amistad y paz con ellos, como lo es el darnos la mano con nosotros. Los cristianos primitivos siguieron naturalmente este ejemplo de los jud�os. Romanos 16:16 .

Versículo 21

Verso 21. El saludo de mi propia mano, de Pablo... Esto deber�a ser traducido: "La salutaci�n est� escrita por la mano de Pablo"; ?????????, est� escrita, se entiende. Es muy probable que el ap�stol escribiera �ste y los siguientes vers�culos de su propia mano. El resto, aunque dictado por �l, fue escrito por un amanuense.

Versículo 22

Vers�culo 22. Si alguno no ama al Se�or Jes�s...�Esto se dirige inmediatamente contra los jud�os . De 1 Corintios 12:3 ,

encontramos que los jud�os, que pretend�an estar bajo el Esp�ritu y la ense�anza de Dios, llamaban a Jes�s ???????, o maldito; es decir, una persona que deb�a ser dedicada a la destrucci�n: v�ase la nota all�. En este lugar el ap�stol replica el conjunto sobre ellos mismos, y dice: Si alguno no ama al Se�or Jesucristo, sea ???????, maldito, y dedicado a la destrucci�n. Esto no se dice a modo de deseo o imprecaci�n, sino como una predicci�n de lo que ciertamente les sobrevendr�a si no se arrepent�an, y de lo que les sobrevino porque no se arrepintieron, sino que continuaron odiando y execrando al Se�or Jes�s; y de lo que todav�a les sobreviene, porque contin�an odiando y execrando al Redentor del mundo.

Se admite generalmente que el ap�stol se refiere aqu� a algunos de los modos de excomuni�n entre los jud�os, de los cuales hab�a tres, a saber

1. Niddui ????, que significa una simple separaci�n o exclusi�n de un hombre de la sinagoga, y de su esposa y familia, durante TREINTA d�as.

2. Cherem ??? que se inflig�a a aquel que hab�a soportado el niddui, y que no hab�a hecho, en los treinta d�as, una compensaci�n adecuada, para reconciliarse con la sinagoga. Esto se inflig�a con execraciones funestas, que se le informaba que todas deb�an caer sobre �l si no se arrepent�a; pero el cherem siempre supon�a lugar para el arrepentimiento.

3. Shammatha ????: esto era lo m�s grave de todo, y cortaba toda esperanza de reconciliaci�n y arrepentimiento; despu�s de lo cual el hombre no era reconciliable con la sinagoga, ni reconocido como perteneciente a la naci�n jud�a. V�anse estas diferentes formas en el L�xico Rab�nico y Talm�dico de Buxtorf, bajo sus respectivas palabras.

En el L�xico que acabamos de citar, Buxtorf da una forma del cherem, que dice haber copiado de un antiguo MS hebreo. De este terrible fragmento presentar� al lector una traducci�n.

"Por la sentencia del Se�or de los Se�ores, que P. el hijo de P. sea anatematizado en ambas c�maras de juicio; la superior y la inferior. Que sea anatematizado entre los m�s altos santos; que sea anatematizado entre los serafines y los ophanim; y finalmente, que sea anatematizado por todas las congregaciones de los grandes y los peque�os. Que caigan sobre �l grandes y continuas plagas; �con grandes y horribles enfermedades! Que su casa sea la morada de los dragones y que su constelaci�n se oscurezca en las nubes. Que su casa sea la morada de los dragones, y que su constelaci�n se oscurezca en las nubes; que sea para la indignaci�n, la ira y el fuego. Que su cad�ver sea arrojado a las fieras y a las serpientes. Que sus enemigos y sus adversarios triunfen sobre �l. Que su plata y su oro sean entregados a otros. �Y que todos sus hijos sean expuestos a las puertas de sus enemigos! �Y que la posteridad se asombre de su d�a! �Que sea anatematizado por boca de Addiriron y Achtariel; por boca de Sandalphon y Hadraniel; por boca de Ansisiel y Patchiel; por boca de Seraphiel y Sagansael; por boca de Michael y Gabriel; por boca de Raphael y Mesharetiel! Que sea anatematizado por boca de Zaafzavif, y por boca de Hafhavif, que es el gran Dios; y por boca de los setenta nombres del Rey supremo; y por �ltimo, por boca de Tsortak el gran canciller.

"�Que sea tragado como Cor� y sus compa�eros! �Que su alma parta con miedo y terror! �Que la reprimenda del Se�or lo mate! �Que sea confundido como Actofel en su consejo! Que la lepra de Giezi sea su lepra, y que no haya resurrecci�n de sus ruinas. Que no sea enterrado en los sepulcros de los hijos de Israel. �Que su mujer sea dada a otro, y que otros se inclinen sobre ella en su muerte! En este anatema, que P. el hijo de P. sea; �y que �sta sea su herencia! Pero que Dios extienda sobre m� y sobre todo Israel su paz y su bendici�n, am�n". A esto se a�aden los versos 18, 19 y 20 del� Deuteronomio 29 ,� Deuteronomio 29:18-5 que el lector puede leer a su antojo. Hay muchas cosas en este cherem que requieren un comentario , pero este no es el lugar.

Anatema, maran-atha...�"Que sea anatema; nuestro Se�or viene". No veo la raz�n por la que estas palabras se dejaron sin traducir. La primera es griega, y ya se ha explicado; la segunda es sir�aca [Syriac] maran-atha, nuestro Se�or viene: es decir, para ejecutar el juicio denunciado. �No se refiere el ap�stol al �ltimo vers�culo de la Biblia? �No es que venga y hiera la tierra ( cherem) con una maldici�n? �Y no insin�a que el Se�or ven�a a herir la tierra jud�a con esa maldici�n? La cual tuvo lugar unos pocos a�os despu�s, y contin�a sobre ese pueblo rebelde y rebelde hasta el d�a de hoy. Lo que el ap�stol ha dicho era prof�tico, e indicativo de lo que estaba a punto de suceder a ese pueblo. Dios ven�a entonces a infligirles un castigo: vino, y fueron quebrantados y dispersados.

Versículo 23

Vers�culo 23. La gracia de nuestro Se�or Jes�s ] �Que el favor, la influencia, la misericordia y la salvaci�n procurada por Jesucristo, est�n con ustedes , prevalezcan entre ustedes, gobiernen en ustedes y sean exhibidos por ustedes, en su vida y conversaci�n! Am�n.

Versículo 24

Vers�culo 1 Corintios 16:24 . Mi amor est� con todos vosotros en Cristo Jes�s...�Parece muy extra�o que el ap�stol diga: Mi amor est� con vosotros, como dijo: La gracia de nuestro Se�or Jesucristo est� con vosotros. Podemos concebir f�cilmente lo que significa esto �ltimo: la gracia de Cristo es un principio activo, poderoso y salvador; es esencial para la existencia de la Iglesia cristiana que esta gracia est� siempre con ella; y sin esta gracia ning�n individuo puede salvarse. Pero, �qu� podr�a hacer el amor del ap�stol con ellos? �Tiene alg�n significado? Confieso que no veo ninguno, a no ser que se pretenda decir, os amo; o, os sigo amando. El pronombre ???, mi, falta en el Codex Alexandrinus, y en el 73, un excelente MS. en el Vaticano, escrito alrededor del siglo XI. Esto nos ayudar� a tener un mejor sentido, ya que o bien dice: �Que el amor prevalezca entre vosotros! o bien suministra la palabra ???? DIOS, como en� 2 Corintios 13:14 , � El amor de Dios est� con vosotros ! Esto da un sentido; porque el amor de Dios es tanto un principio� 2 Corintios 13:14�

��El amor de Dios est� con vosotros! Esto da un sentido s�lido; porque el amor de Dios es un principio de luz, vida y salvaci�n, tanto como la gracia de Cristo. Y probablemente ???, mi, es una corrupci�n de ????, de DIOS. Y esto es lo m�s probable, porque utiliza esta misma forma en la conclusi�n de su segunda ep�stola a esta Iglesia, como hemos visto anteriormente. Concluyo, por tanto, que la lectura de los dos MSS. anteriores es la verdadera; o bien que ??? es una corrupci�n de ????, y que el verso debe leerse as�: El amor de DIOS est� con todos vosotros, en (o por) Cristo Jes�s.

Am�n... As� sea: pero esta palabra falta en la mayor�a de los MSS. de renombre, y ciertamente no fue escrita por el ap�stol.

1. La suscripci�n de esta ep�stola en nuestras Biblias inglesas comunes, y en las ediciones comunes del texto griego, es palpablemente absurda. Que no fue escrita desde Filipos, sino desde �feso, v�anse las notas sobre� 1 Corintios 16:5 ; 1 Corintios 16:8 ; 1 Corintios 16:10 ; 1 Corintios 16:19 ;

que no pudo ser escrita por Silvano, y Fortunato, y Ac�ico, y Timoteo", no necesita pruebas. Pero esta suscripci�n falta en todos los mejores MSS. y versiones, ya sea en su totalidad o en parte. En algunos se dice simplemente: La primera a los Corintios; en otros: La primera a los Corintios est� terminada; escrita desde �feso, desde Asia, desde �feso de Asia, desde Filipos de Macedonia, y enviada por las manos de Timoteo; as� el SYRIAC. Escrito desde �feso, por Est�fanas y Fortunato; C�PTICO. Escrito desde Filipos por Est�fanas, Fortunato y Ac�ico; ESLAV�NICO. Escrito, c., por Pablo y S�stenes. Escrito desde la ciudad de Filipos, y enviado por Est�fanas, y Fortunato, y Ac�ico, y Timoteo; �RABE. Existen otras variantes, que no es necesario exponer. S�lo parecen correctas las que afirman que la ep�stola fue enviada desde �feso, de lo cual no puede haber ninguna duda razonable.

2. Al concluir mis observaciones sobre esta ep�stola, considero necesario llamar una vez m�s la atenci�n del lector sobre las muchas dificultades que contiene, como excusa para cualquier cosa que pueda encontrar tratada de manera insatisfactoria. Tal vez sea de poca importancia para �l saber que esta ep�stola me ha costado m�s trabajo y dificultad que cualquier porci�n de la misma cantidad que haya pasado por encima ya sea en el Antiguo o en el Nuevo Testamento.

3. Ya se ha observado que la Iglesia de Corinto hab�a escrito al ap�stol pidiendo consejo, direcci�n e informaci�n sobre una variedad de puntos; y que esta ep�stola es, en su mayor parte, una respuesta a la ep�stola de Corinto. Si tuvi�ramos esa ep�stola, toda la dificultad se desvanecer�a en esto; pero, como el ap�stol s�lo se refiere a sus preguntas por meras palabras de captura de su carta, es imposible saber, en todos los casos, lo que las preguntas conten�an. Para ellos las respuestas ser�an claras, porque sab�an sobre qu� le hab�an consultado; para nosotros las respuestas deben ser, como lo son realmente en algunos casos, necesariamente oscuras, porque no conocemos todo el sentido y las circunstancias de las preguntas. En efecto, la ep�stola contiene m�s materia local y de aplicaci�n privada que cualquier otra del Nuevo Testamento, y en general hay menos materia de uso general que en la mayor�a de las otras partes de los escritos sagrados. Sin embargo, es muy curiosa y �til; da a conocer varias costumbres, y no pocas formas de hablar, y asuntos relativos a la disciplina de la Iglesia primitiva, que no podemos encontrar en ning�n otro lugar: se lee sobre una lecci�n muy terrible para aquellos que perturban la paz de la sociedad, hacen divisiones en la Iglesia de Cristo, y se esfuerzan por establecer un predicador a expensas de otro.

4. Nos muestra tambi�n cu�ntas cosas impropias pueden, en un estado de ignorancia o de infancia cristiana, ser consistentes con una creencia sincera en el Evangelio de Cristo, y un apego concienzudo y celoso a �l.

5. En diferentes partes de la ep�stola encontramos que el ap�stol habla muy bien del conocimiento de esta Iglesia; y de sus diversos dones y dotes. �C�mo, pues, podemos decir que sus defectos se deben a la ignorancia? Respondo que ciertamente s�lo unos pocos de los habitantes de Corinto pod�an poseer esas eminentes calificaciones espirituales; porque las cosas que se atribuyen a esta Iglesia en otros lugares son totalmente inconsistentes con ese estado de gracia por el cual el ap�stol, en otros lugares, parece darles cr�dito. La soluci�n de la dificultad es esta: Hab�a en la Iglesia de Corinto muchas personas muy dotadas y con mucha gracia; tambi�n hab�a all� muchas m�s, que, aunque pod�an ser part�cipes de algunos dones extraordinarios, ten�an muy poco de esa religi�n que el ap�stol describe en el cap�tulo decimotercero de esta ep�stola.

6. Adem�s, no debemos suponer que las dotes eminentes impliquen necesariamente disposiciones de gracia. Un hombre puede tener mucha luz y poco amor; puede ser muy sabio en los asuntos seculares, y conocer poco de s� mismo, y menos de su Dios. Hay tanto una ignorancia erudita, como un aprendizaje refinado y �til. Uno de nuestros antiguos escritores dijo: "El conocimiento que no se aplica, es s�lo como una vela que un hombre sostiene para alumbrarse a s� mismo al infierno". Los corintios abundaban en conocimiento, y ciencia, y elocuencia, y varios dones extraordinarios; pero en muchos casos, claramente se�alados en esta ep�stola, eran groseramente ignorantes del genio y el dise�o del Evangelio. Muchos, desde su tiempo, han puesto palabras y observancias en lugar de los asuntos m�s importantes de la LEY, y el esp�ritu del EVANGELIO. El ap�stol se ha esforzado por corregir estos abusos entre los corintios, y por insistir en esa gran verdad inmutable y eterna de que el amor a Dios y a los hombres, que llena el coraz�n, santifica las pasiones, regula los afectos y produce una benevolencia y una beneficencia universales, es el cumplimiento de toda ley; y que todas las profesiones, conocimientos, dones, etc., sin esto, son absolutamente in�tiles. Y si esta ep�stola no contuviera m�s que lo que se encuentra en el cap�tulo 13, ser�a un monumento sin parang�n del profundo conocimiento que el ap�stol ten�a de Dios y un registro inestimable de la suma y la sustancia del Evangelio, dejado por la misericordia de Dios a la Iglesia, como piedra de toque para el juicio de los credos, las confesiones de fe y las observancias rituales, hasta el fin del mundo.

7. A menudo he tenido ocasi�n de se�alar que toda la ep�stola se refiere tanto a los asuntos, costumbres, formas de hablar, ceremonias, etc., de los jud�os, que supone necesariamente que el pueblo estaba bien familiarizado con ellos: de ello deduzco que una gran mayor�a de la Iglesia cristiana de Corinto estaba compuesta por jud�os convertidos, y es probable que as� fuera en todas las Iglesias de Asia Menor y Grecia. Muchos gentiles fueron indudablemente llevados al conocimiento de la verdad; pero los principales conversos eran de entre los jud�os helenistas. En muchos aspectos, la fraseolog�a jud�a prevalece m�s en esta ep�stola que incluso en la dirigida a los romanos. Si no se prestara atenci�n a esto, ser�a imposible encontrar un sentido coherente al cap�tulo 15, en el que el ap�stol trata en gran medida la doctrina de la resurrecci�n, ya que casi todas las formas y giros de expresi�n son jud�os; y debemos saber qu� ideas se atribuyen a tales palabras y formas de hablar, para poder entender el esp�ritu del ap�stol. Su ignorancia de esto hizo que un eminente escritor y fil�sofo acusara al ap�stol de "razonamiento inconsistente". Si hubiera entendido el lenguaje del ap�stol, no habr�a dicho eso; y como no lo entendi�, no deber�a haber dicho nada. Un hombre puede estar calificado para hacer grandes y �tiles descubrimientos en la doctrina de los gases o aires facciosos, que puede estar mal calificado para dilucidar el significado del Esp�ritu Santo.

8. Antes de terminar mis observaciones finales sobre esta ep�stola, debo pedir permiso para llamar la atenci�n del lector una vez m�s sobre las palabras finales del ap�stol: Si alguno no ama al Se�or Jesucristo, sea anatema, maran-atha. Estas palabras han sido tan a menudo malinterpretadas, y quiz�s tan peligrosamente aplicadas, como otro pasaje de esta ep�stola: El que come y bebe indignamente, come y bebe la condenaci�n para s� mismo. Aunque estoy dispuesto a conceder que el mal cristiano, es decir el hombre que profesa el cristianismo, y sin embargo vive bajo el poder del pecado, se encuentra en un estado muy peligroso y que aquel que, mientras acredita el cristianismo, est� indeciso en cuanto a la parte p�blica que debe tomar en su profesi�n y pr�ctica, est� poniendo sus intereses eternos en el m�s terrible peligro; sin embargo, tambi�n debo conceder que el significado generalmente puesto en las palabras en cuesti�n no es correcto. Las palabras se aplican a los jud�os rebeldes y blasfemos; a los que llamaban a Cristo anatema, o maldito; y no pueden aplicarse a ninguna persona que respete su nombre, o conf�e en �l para su salvaci�n; y mucho menos se aplican a quien descubre, por la prevalencia del mal en su coraz�n, y el poder de la tentaci�n, que tiene poco, y, seg�n su propia apreciaci�n, ning�n amor al Se�or Jes�s. El anatema del ap�stol se denuncia s�lo contra quien da el anatema a Cristo: de esto no es capaz ninguno de mis lectores. El deber de todos es amarlo con un coraz�n indiviso; si alguno no puede hacerlo todav�a, que no se desanime: si el Se�or viene a ejecutar el juicio sobre el que llama a Jes�s maldito, viene tambi�n a cumplir el deseo de los que le temen; a hacerles participar de la naturaleza divina, y a limpiar de tal manera sus corazones por la inspiraci�n de su Esp�ritu Santo, que le amar�n perfectamente y magnificar�n dignamente su nombre.