Lectionary Calendar
Saturday, September 28th, 2024
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
advertisement
advertisement
advertisement
Attention!
Take your personal ministry to the Next Level by helping StudyLight build churches and supporting pastors in Uganda.
Click here to join the effort!
Click here to join the effort!
Bible Commentaries
Puntuaciones de Box sobre Libros Seleccionados de la Biblia Box sobre Libros Seleccionados
Declaración de derechos de autor
Estos archivos son un derivado de una edición electrónica disponible en BibleSupport.com. Dominio público.
Estos archivos son un derivado de una edición electrónica disponible en BibleSupport.com. Dominio público.
Información bibliográfica
Box, Charles. "Comentario sobre Micah 7". "Puntuaciones de Box sobre Libros Seleccionados de la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/box/micah-7.html. 2014.
Box, Charles. "Comentario sobre Micah 7". "Puntuaciones de Box sobre Libros Seleccionados de la Biblia". https://beta.studylight.org/
Introducción
La oraci�n de Miqueas y la respuesta de Dios
miqueas siete
Miqueas no pudo encontrar un buen hombre entre los jud�os que fuera misericordioso y bueno con su pr�jimo. En una ocasi�n David escribi�: "Ayuda, Se�or, porque el hombre piadoso se extingue, porque los fieles decaen de entre los hijos de los hombres". ( Salmo 12:1 ) El "pr�ncipe", el "juez" y el "gran hombre" eran todos culpables. Hicieron el mal con ambas manos con seriedad.
Conspiraron para llevar a cabo toda clase de maldades. Los que deber�an haber sido l�deres piadosos del pueblo no eran menos que una zarza o una espina; pinchando con heridas a los que entraron en contacto con ellos.
Los tiempos eran tan traicioneros que Dios les advirti� que no confiaran en amigos, consejeros o incluso en sus propias esposas. Dios hab�a advertido: "Si tu hermano, el hijo de tu madre, o tu hijo, o tu hija, o la mujer de tu seno, o tu amigo, que es como tu propia alma, te enga�a en secreto, diciendo: Vamos y servid a dioses ajenos que no conociste ni t� ni tus padres, es decir, de los dioses de los pueblos que est�n alrededor de ti, cerca de ti o lejos de ti, desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo de la tierra; no le consentir�s, ni le dar�s o�do; ni tu ojo le tendr� piedad, ni ser�s indulgente, ni le encubrir�s; sino que ciertamente lo matar�s; tu mano ser� la primera sobre �l para darle muerte, y despu�s la mano de todo el pueblo.
Y lo apedrear�s con piedras, y morir�; porque procur� apartarte de Jehov� tu Dios, que te sac� de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. Y todo Israel oir�, y temer�, y no volver� a hacer semejante maldad entre vosotros.� ( Deuteronomio 13:6-11 ) El �nico en quien se puede confiar y admirar en todas las situaciones es Dios.
Mientras est� en Babilonia, Israel debe soportar con paciencia el castigo que se impone a causa del pecado. Aunque el pueblo estaba enfrentando castigo f�sico, Dios quer�a que fuera un tiempo de renovaci�n espiritual. Los muros fueron derribados, la ciudad y la tierra quedaron desoladas, pero bajo Ciro, despu�s de setenta a�os de cautiverio, los jud�os fueron restaurados a su patria. Dios no se olvid� de los jud�os en esta tierra extra�a.
Miqueas or� para que Dios bendiga y libere a Su pueblo. Dios har�a cosas maravillosas al restaurar a Su pueblo a su tierra natal. Muchos, con temor, se volver�an al Se�or en busca de salvaci�n. El agradecimiento por el futuro prometido para Israel hizo que Miqueas ofreciera fuertes alabanzas a Dios por su grandeza y bondad. Miqueas sab�a que el pueblo pod�a contar con que Dios ser�a fiel a sus promesas.
Versículos 1-7
Israel era muy corrupto &mdash Miqueas 7:1-7 : El pueblo de Israel era incre�blemente malvado, pero Miqueas todav�a ten�a una gran confianza en Dios. Estaba terriblemente triste por la conducta del pueblo de Dios. Describi� sus sentimientos con una v�vida imagen verbal. Se sent�a como alguien que viene a espigar en un vi�edo y descubre que ya se ha recogido la �ltima uva.
No quedaba nada para comer; sin uvas ni ninguno de los deliciosos higos. Busc� gente buena y honesta y no encontr� ninguna. Solo encontr� a aquellos que quer�an aprovecharse de los dem�s e incluso matarlos. El pueblo hizo el mal con ambas manos. Los jueces y los l�deres exigen sobornos, y los gobernantes enga�aron a la gente en la corte. Estas personas planearon hacer el mal y Dios odia especialmente una conspiraci�n para hacer el mal.
Lo mejor de ellos era peor que un parche de espinas. El d�a del Juicio de Dios y su castigo hab�a llegado. Ahora se enfrentar�an a la perplejidad y la confusi�n. El profeta les advirti� que no creyeran a nadie, ni siquiera a un amigo cercano o consejero. Incluso se les advirti� que tuvieran cuidado con lo que le dec�an a su esposa. Advirti� que los hijos piensan que sus padres son tontos. Las hijas se niegan a obedecer a sus madres. "Los enemigos de un hombre son las personas que ahora viven en su propia casa.
" Cosas similares ocurrir�an en la era evang�lica. ( Mateo 10:34-36 ) Miqueas aconsej� al pueblo que no confiara en su pariente m�s cercano sino que confiara en Dios. �l dijo: "Pero en cuanto a m�, velar� por lo que el Se�or har�. Esperar� en Dios, que me salva".
Versículos 8-13
Israel se volvi� a Dios - Miqueas 7:8-13 : La naci�n de Israel hab�a ca�do muy bajo. Despu�s de un tiempo de arrepentimiento y crecimiento espiritual, Dios los resucitar�a. Las cosas podr�an haber sido oscuras, pero se acercaba un d�a m�s brillante. Dios continuar�a castigando a Israel hasta que se hiciera el castigo apropiado por los pecados.
Despu�s de eso, arreglar�a las cosas para Su pueblo y castigar�a a la naci�n cruel que hab�a sido tan dura con Su pueblo. Dios castig� a Israel por sus pecados y despu�s de un tiempo de arrepentimiento por parte del pueblo, defendi� su causa contra sus enemigos. Esto les har�a entender que Dios siempre hace lo correcto. La naci�n cruel que hab�a castigado a Israel se avergonzar�a de siempre preguntar: "�D�nde est� tu Dios?"
Llegar�a el momento en que terminar�a el cautiverio e Israel ser�a restaurado. En ese momento se reconstruir�an las murallas de las ciudades y las fronteras de su pa�s ser�an mucho m�s amplias. El cumplimiento de esta promesa est� registrado en los libros de Esdras y Nehem�as. El remanente vendr�a de Asiria, Egipto y de toda la tierra. Lo desgarrador es que la gente sufrir�a mucho a causa de sus pecados antes de que llegara este tiempo de restauraci�n.
Versículos 14-17
La Oraci�n de Miqueas y la Respuesta del Se�or &mdash Miqueas 7:14-17 : Miqueas or� para que Dios gobernara y guiara a Su pueblo. Pidi� que Dios "los dejara apacentar en Bas�n y Galaad, como en los d�as antiguos". A�os antes los asirios hab�an tomado estos lugares, pero al final del cautiverio a Israel se le permitir�a vivir all� nuevamente.
Dios volver�a a cuidar de su pueblo despu�s de haber pasado por el terrible tiempo del cautiverio. El Todopoderoso sac� a Israel de Egipto y los librar�a del confinamiento babil�nico. Al liberar a los de Egipto, hizo cosas tremendas y har�a grandes cosas por su pueblo nuevamente.
Cuando Dios trajo de vuelta al remanente, eran un grupo de personas comparativamente peque�o. Sin embargo, las naciones paganas ver�an lo que Dios hizo por Israel y se avergonzar�an. Reconocer�an que sus ej�rcitos estaban indefensos contra el poder del Todopoderoso. Estar�an en estado de shock. Ser�an como personas sordas y mudas que no pueden hablar ni o�r. El temor del Se�or Dios har�a que estas naciones vinieran temblando ante �l, arrastr�ndose fuera de sus fortalezas como una serpiente fuera de su agujero. Estas naciones lamer�an el polvo o enfrentar�an una humillaci�n total. Se ver�an obligados a respetar la supremac�a del Dios vivo y verdadero.
Versículos 18-20
No hay Dios como el Dios verdadero &mdash Miqueas 7:18-20 : Miqueas dijo que no hay Dios como el Dios vivo y verdadero. Dios escogi� a Israel para ser Su pueblo, el pueblo que �l usar�a para traer al Mes�as al mundo. ��l perdona la iniquidad y pasa por alto la transgresi�n del remanente de Su heredad! Dios no siempre estar� enojado con Su pueblo, porque �l se deleita en la misericordia y la bondad amorosa.
"La caracter�stica m�s maravillosa del trato de Dios hacia su pueblo infiel es su disposici�n a perdonarlos". La expresi�n, "El dominar� nuestras iniquidades" tiene una referencia especial a c�mo su idolatr�a fue curada por el cautiverio. Dios amaba a estas personas. Le encantaba ser amable con ellos. Pisote� sus pecados y los arroj� al mar.
Miqueas sab�a que Israel pod�a depender de Dios por las promesas que �l hab�a hecho previamente. "T� har�s la verdad a Jacob, y la misericordia a Abraham, que juraste a nuestros padres desde los d�as antiguos". ( Miqueas 7:20 ) Dios hab�a prometido a los patriarcas que edificar�a una gran naci�n a trav�s de la cual nacer�a el Mes�as.
Dios hab�a hecho espec�ficamente estas promesas a Abraham y a Jacob o Israel. Dios "realizar�a la verdad a Jacob". Mantendr�a las promesas que primero le hab�a hecho a Abraham y luego las renov� a Jacob. (G�nesis 12-25) Nuestro Dios es un Dios fiel; Est� lleno de bondad amorosa y misericordia.