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Bible Commentaries
Isaías 47

Comentario de Calvino sobre la BibliaComentario de Calvino

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Versículo 1

1. Baje y si�ntese en el polvo. Isa�as ahora explica m�s completamente lo que hab�a notado brevemente con respecto al consejo de Dios y la ejecuci�n del mismo. Describe abiertamente la destrucci�n de Babilonia; porque ninguna esperanza del retorno del pueblo podr�a ser entretenida, mientras floreciera la monarqu�a babil�nica. En consecuencia, �l ha conectado estas dos cosas, a saber, el derrocamiento de esa monarqu�a y la liberaci�n de las personas que la siguieron; porque el rango elevado de esa ciudad era como una tumba profunda en la que los jud�os fueron enterrados, y, cuando se abri�, el Se�or trajo a su pueblo a su vida anterior.

El uso del estado de �nimo imperativo, "Baja", es m�s forzoso que si hubiera expresado lo mismo en palabras simples y narraciones simples; porque �l se dirige a ella con autoridad, y como si estuviera hablando desde el tribunal; porque proclama los mandamientos de Dios y, por lo tanto, con la audacia que su autoridad le da derecho a usar, publica lo que suceder�, ya que sabemos que Dios otorg� esta autoridad a los profetas. "He aqu�, hoy te he puesto sobre naciones y reinos, para desarraigar y derribar, para destruir y derrocar, para construir y plantar". (Jeremias 1:10.) No hay poder que no se agregue a la autoridad de la palabra. En una palabra, ten�a la intenci�n de colocar el evento inmediatamente ante los ojos de los jud�os; porque ese cambio apenas podr�a ser imaginado, si Dios no tronara del cielo.

Virgen hija de Babilonia. Era una forma de hablar frecuentemente empleada por escritores hebreos, para llamar a cualquier naci�n con el t�tulo de "Hija". �l la llama "Virgen", no porque fuera modesta o casta, sino porque hab�a sido educada suave y delicadamente como "v�rgenes", y nunca hab�a sido forzada por los enemigos, como dijimos anteriormente cuando hablamos de Sid�n. (222) Y en la actualidad se podr�a decir lo mismo de Venecia y algunas otras ciudades, que tienen una gran abundancia de riquezas y lujos, y, en La estimaci�n de los hombres, se cuentan muy felices; porque tienen tan buenas razones como los babilonios tuvieron que temer tal revoluci�n de los asuntos, incluso cuando parecen estar muy lejos del peligro.

Porque ya no ser�. Es decir, "Ya no ser�s acariciado por hombres que pensaban que eras feliz".

Versículo 2

2. Tome piedras de molino. La totalidad de esta descripci�n tiende a mostrar que habr� un gran cambio entre los babilonios, de modo que esta ciudad, que anteriormente se celebr� en el m�s alto honor, se hundir� en la desgracia m�s baja y ser� objeto de ultrajes de todo tipo, y as� exhibir� una muestra llamativa de la ira de Dios. Estas son marcas de la esclavitud m�s degradante, ya que los esclavos m�s malos antes estaban encerrados en un molino. Por lo tanto, la condici�n de los cautivos que fueron reducidos a ella debe haber sido muy miserable; porque, en otros casos, los cautivos a veces reciben de sus conquistadores un trato suave y gentil. Pero aqu� describe una condici�n muy miserable, que los creyentes no pueden dudar de que se les permitir� partir libremente, cuando los babilonios, que los hab�an mantenido prisioneros, sean encarcelados. Ahora, aunque no leemos que los nobles del reino fueron sometidos a un trato tan despectivo, fue suficiente para el cumplimiento de esta profec�a, que Ciro, al asignarles las operaciones de los esclavos, los degrad� y los oblig� a abstenerse de empleos honorables.

Desata tus mechones rizados. Debido a su excesiva indulgencia en la magnificencia del vestido, nuevamente alude al atuendo de las mujeres j�venes, al mencionar "cerraduras rizadas". Sabemos que las ni�as est�n m�s ansiosas de lo que deber�an estar por esposarse el cabello y otras partes del vestido. Aqu�, por el contrario, el Profeta describe una condici�n y vestimenta totalmente diferentes; es decir, esa ignominia, y la negrura, y la suciedad cubrir�n de pies a cabeza a aquellos que antes deslumbraban todos los ojos con galas llamativas.

Descubre las extremidades. Las "v�rgenes" casi nunca est�n acostumbradas a caminar en p�blico y, al menos, rara vez viajan en la v�a p�blica; pero el Profeta dice que las v�rgenes babil�nicas ser�n puestas bajo la necesidad de cruzar los r�os, y con sus extremidades descubiertas.

Versículo 3

3. Se descubrir� tu bajeza. Esta es la conclusi�n de la declaraci�n anterior. Mientras Babilonia estaba en una condici�n floreciente, conserv� su reputaci�n y fue muy honrada; porque la riqueza y el poder, como los velos, a menudo ocultan una gran cantidad de llagas que, cuando se quitan los velos, se vuelven visibles y se observan con la mayor desgracia. Y, como dice Demosthenes, cuando, hablando de la condici�n de Philip, - ????? ??? ???? ??????? ???? ??? ??? ?? ????????? ? ??? ????? ???????????? ??? ??? ?????? ?????? ??? ?? ?? ????????? ????? ????? ???????? ??? ?????? ??? ??????? ??? ???? ?? ??? ?????????? ?????? ? ???? ??? ??? ?????? ??? ??? ????????. "Porque, en nuestros cuerpos, mientras cualquier persona est� en pleno vigor, no se percibe ninguna enfermedad en ninguno de los miembros, pero si cae en la debilidad, producida por una herida o por una tensi�n, o por cualquier otra de las enfermedades a las que est� sujeto el cuerpo, el conjunto se ve afectado; as� sucede con las ciudades y los gobiernos ". (Dem., Olynth. 2.) Cuando surgen conmociones, y cuando se les quita su riqueza y tropas, las transacciones vergonzosas que yac�an ocultas quedan a la vista; por crueldad, fraude, extorsiones, perjurio, opresiones injustas y otros cr�menes, que fueron honrados durante la prosperidad, por caer en desgracia.

Me vengar� y no encontrar� (a ti) un hombre. Algunos piensan que ? (caph) deber�a ser suministrado aqu�, "Como hombre;" como si hubiera dicho: "No pienses que tienes que lidiar con el hombre, cuyo ataque podr�s resistir". Y, de hecho, en otros pasajes, cuando habla de la mano del hombre, denota cierta disminuci�n; pero aqu� quiere decir que no queda remedio, porque Dios los reducir� a nada. Otros lo traducen: "No conocer� a un hombre"; es decir, "No permitir� que un hombre se encuentre conmigo; quienquiera que se re�na conmigo, o interceda en su nombre, no les perdonar�, ni remitir� ni mitigar� su castigo ". Este significado es muy apropiado, pero la construcci�n es algo forzada; para ???? (ephgang) debe entenderse, por lo tanto, que tiene un sentido pasivo, que dif�cilmente podr�a admitirse. Adem�s, el Profeta no dice absolutamente que ninguna petici�n ser� presentada a Dios, sino que no puede ser apaciguada. La exposici�n anterior, por lo tanto, fluye m�s suavemente, en lo que se refiere al contexto; pero que cada uno elija lo que prefiere; porque, sea cual sea la exposici�n que adopte, las palabras equivalen a esto: "que el Se�or destruir� a los babilonios, y que no habr� lugar para la misericordia". Solo, digo, que prefiero el primero, porque es m�s agradable al texto original.

Versículo 4

4. Nuestro Redentor. El Profeta muestra con qu� prop�sito el Se�or infligir� castigo a los babilonios; es decir, para la salvaci�n de su pueblo, como �l hab�a declarado anteriormente. ( Isa�as 45:4.) Pero esta afirmaci�n es mucho m�s contundente, porque habla de lo que podr�a llamarse de manera abrupta, y como una persona que se despierta del sue�o, cuando ve que Babilonia est� arruinada, lo que antes no sol�a para someter a otras naciones y pisotearlas bajo sus pies; y �l muestra que esto sucede por ninguna otra raz�n que la de que el Se�or se muestra como el "Redentor" y defensor de su pueblo.

El santo de Israel. Como si hubiera dicho que no en vano eligi� a este pueblo y lo separ� de otras naciones. En esta transacci�n, ten�a la intenci�n de mostrar su poder, y. en esa cuenta se agreg� al t�tulo descriptivo de su poder, Jehov� de los ej�rcitos, la designaci�n "Santo".

Versículo 5

5. Si�ntese en silencio. Contin�a con el mismo tema y muestra que el fin de la monarqu�a babil�nica est� cerca. Como esto parec�a ser incre�ble, por lo tanto, repite lo mismo con una variedad de expresiones, y repite lo que podr�a haberse dicho en pocas palabras; y as� �l presenta esas descripciones animadas, para colocar el evento, por as� decirlo, ante sus ojos. Cuando �l le dice "si�ntate" y qu�date "en silencio", es un indicio de verg�enza o desgracia. Sin embargo, este silencio puede contrastarse con su condici�n anterior, mientras ella reinaba; porque en ese momento no solo habl� en voz alta y con autoridad, sino que llor� en voz alta, y por sus �rdenes aterroriz� a todo el Este. Pero ahora, como consecuencia del cambio de su condici�n, �l le dice "si�ntate en silencio"; porque no solo no se aventurar� a pronunciar palabras fabulosas, sino que ni siquiera se aventurar� a emitir un sonido suave. (223) Pero, como �l agrega, entra en la oscuridad, adopto voluntariamente el primer punto de vista, que denota verg�enza; porque aquellos cuya condici�n ha cambiado para peor, cierran la boca por la verg�enza y apenas se aventuran a susurrar.

Porque ya no ser�. Sabemos que la monarqu�a babil�nica se extendi� ampliamente y ejerci� dominio sobre pa�ses grandes y numerosos; porque era el jefe de muchos reinos. Por esta raz�n, las personas cautivas necesitaban ser fortificadas por estas promesas, y ser advertidas de su ca�da, para que pudieran tener la esperanza asegurada de liberaci�n.

Versículo 6

6. Estaba enojado con mi gente. Esta es una anticipaci�n, mediante la cual advierte a los jud�os, como lo ha hecho anteriormente, que la condici�n angustiosa del cautiverio era un flagelo que Dios hab�a infligido; porque, si hubiera procedido de cualquier otro, no hab�a remedio en la mano de Dios. Para poder, por lo tanto, estar convencidos de que el que los hab�a golpeado curar�a sus heridas, les ordena que lo atribuyan a sus pecados que estaban tan terriblemente oprimidos. Sin embargo, los exhorta a que tengan una expectativa favorable, porque Dios tiene la intenci�n de establecer un l�mite para el castigo; e incluso menciona esto como la raz�n por la cual los babilonios ser�n destruidos, que Dios, que es el vengador justo de la salvajismo y la crueldad, vengar� mucho m�s las heridas que le causaron a su pueblo.

No les mostraste compasi�n. En la cl�usula anterior �l llama a los jud�os al arrepentimiento, porque por sus propios cr�menes ellos recurrieron a ellos mismos tantas calamidades. Luego, acusa a los babilonios de haber aprovechado esta ocasi�n para ejercer crueldad, como si uno se convirtiera en el verdugo de un ni�o que un padre hab�a puesto en sus manos para ser castigado. De ah� se deduce que los babilonios no tienen derecho a estar orgullosos, como si por su propio poder hubieran sometido a los jud�os y los hubieran llevado cautivos; pero, por el contrario, debido a que maltrataron malvadamente la victoria y trataron cruelmente a los cautivos, �l los castigar� con justicia.

Profan� mi herencia. Cuando dice que "estaba enojado" y que esa era la raz�n por la que "profanaba su herencia", no imaginemos que hab�a cambiado su prop�sito y se ofendi� tanto como para deshacerse del cuidado de su gente y el recuerdo de su pacto. Esto es evidente tanto por el evento en s� como por su dignidad de seguir llam�ndolos "su pueblo", aunque la mayor parte de ellos estaban separados de �l y ten�a las mejores razones para "profanarlos". Pero �l respeta su pacto cuando habla de esta manera; porque �l mira su fuente y fundamento, para que los que eran descendientes de Abraham sean considerados el pueblo de Dios, aunque muy pocos de ellos realmente le pertenec�an, y casi todos se jactaban de tener un t�tulo vac�o.

Por lo tanto, la palabra amger, en las Escrituras, no debe referirse a ninguna emoci�n en Dios, que desea la salvaci�n de su pueblo, sino a nosotros mismos, quienes lo provocan con nuestras transgresiones; porque �l solo est� enojado, aunque no deja de amarnos. En consecuencia, mientras �l "profana" a su Iglesia, es decir, la abandona y la entrega como presa de sus enemigos, a�n as� los elegidos no perecen, y su pacto eterno no se rompe. Y sin embargo, en medio de la ira, el Se�or recuerda su misericordia y mitiga los golpes con los que castiga a su pueblo, y al final incluso inflige castigo a aquellos por quienes su pueblo ha sido cruelmente tratado. En consecuencia, si por un tiempo el Se�or "profana" a su Iglesia, si ella es cruelmente oprimida por los tiranos, no perdamos el coraje, sino que nos comprometamos con esta promesa: "El que veng� esta crueldad b�rbara de los babilonios no menos vengar� salvajismo de esos tiranos ".

Tambi�n debe observarse cuidadosamente que nadie debe abusar de la victoria para ser cruel con los cautivos, lo que sabemos que a menudo se hace; para los hombres, cuando ven que son m�s fuertes, dejan de lado a toda la humanidad, se transforman en bestias salvajes, no escatiman edad ni sexo, y olvidan por completo su condici�n. Despu�s de haber abusado de su poder, por fin no pasar�n impunes; para

"El juicio sin piedad ser� experimentado por aquellos que no mostraron misericordia". ( Santiago 2:13 .)

Pero se pregunta: "�C�mo podr�an los babilonios ir m�s all� del l�mite que Dios les hab�a asignado, como si sus pasiones sin ley no estuvieran restringidas?" Y qu� ser� de esa promesa,

"�Ni un cabello se le caer� de la cabeza sin el nombramiento de su Padre?" ( Lucas 21:18.)

La respuesta es f�cil. Aunque en realidad no estaba en su poder ir m�s all� del l�mite, sin embargo, mir� su crueldad, porque quer�an arruinar por completo a las personas infelices que se hab�an rendido a discreci�n. As�, Zacar�as se queja de la ira desenfrenada de los gentiles, porque, cuando "estuvo enojado con su pueblo por un momento", se precipitaron con furia violenta para destruirlos. ( Zacar�as 1:15.)

Sobre el viejo. �l declara un agravante de su culpa, que no perdonaron ni siquiera a "los viejos", para quienes la edad naturalmente busca reverencia; y de ah� saca una inferencia, lo salvaje que era su crueldad hacia los enemigos armados.

Versículo 7

7. Y dijiste que por siempre (224) ser una amante. Aqu� censura la arrogancia de los babilonios, prometi�ndose dominio perpetuo y pensando que no podr�an caer de su elevaci�n a trav�s de ning�n evento adverso. As�, los ni�os de este mundo est�n intoxicados por la prosperidad y desprecian a todos los hombres en comparaci�n con ellos mismos; pero Isa�as se burla de esta confianza, y muestra que Dios lo considera con el mayor aborrecimiento. Decir, significa aqu� concluir en la propia mente, como ser� m�s claramente evidente por lo que el Profeta dice poco despu�s; porque los hombres orgullosos no hablan p�blicamente de esta manera, sino que sostienen esta convicci�n, aunque pretenden lo contrario. Es una locura intolerable cuando los hombres, olvidando su fragilidad, se consideran a s� mismos como no compartidos en el terreno com�n; porque as� se olvidan de que son hombres. Los creyentes tambi�n tienen su convicci�n de estar seguros, porque, bajo la mano protectora de Dios, est�n preparados con valent�a para enfrentar cualquier peligro. Y, sin embargo, no dejan de considerar que son responsables de muchas angustias, porque nada en este mundo es duradero. Los hombres no religiosos, por lo tanto, se burlan de Dios cada vez que, a trav�s de una imaginaci�n tonta, se prometen una paz duradera en medio de los constantes cambios del mundo.

Hasta ahora no le has aplicado la mente. (225) Con el fin de aumentar la descripci�n de su locura, agrega que incluso un largo per�odo de tiempo no los hizo m�s moderados. Euf�rico inmediatamente despu�s de haber obtenido una victoria, no es tan maravilloso; pero volverse m�s feroz d�a a d�a, y lanzar burlas contra sus cautivos, era completamente salvaje e intolerable. Esto surgi�, como hemos dicho, del orgullo; porque no consideraron que despu�s tendr�a lugar una revoluci�n de los asuntos, o que una condici�n tan magn�fica podr�a cambiarse. En consecuencia, esta es la segunda raz�n por la cual el Se�or derroc� a la monarqu�a de los babilonios.

Y no recordaba su final. (226) Algunos piensan que hay un cambio de la persona aqu�, pero considero que es demasiado forzado; y de hecho no tengo ninguna duda de que habla del "fin" de Jerusal�n, que es la opini�n m�s com�nmente recibida. El Se�or a menudo habla de la Iglesia, a modo de eminencia, ???? ?????? sin mencionar el nombre, como lo hacemos cuando nuestros sentimientos se ven fuertemente afectados por cualquier persona. Ahora, los hombres malvados no conocen el "fin" de la Iglesia, y la raz�n por la cual el Se�or la castiga. Se burlan de las calamidades de los buenos hombres, porque desear�an que fueran completamente destruidos y arruinados, y no consideran que Dios los cuide.

Si se objeta que los babilonios no podr�an saber esto, eso no es nada para el prop�sito; porque no pod�an ignorar que �l era el Dios a quien adoraban los israelitas. En consecuencia, cuando trataban a los jud�os con arrogancia y crueldad, insultaban a Dios mismo, como si �l y el pacto que hab�a hecho con su pueblo hubieran sido pisoteados intencionalmente bajo sus pies.

Versículo 8

8. Y ahora escucha esto, mujer delicada. El Profeta nuevamente amenaza la destrucci�n de Babilonia, y emplea palabras apropiadas para fortalecer los corazones de los creyentes, para que la prosperidad de los babilonios no pueda estupirse y llevarlos al abatimiento; y, sin embargo, no se dirige a Babilonia para producir una impresi�n sobre ella, sino para consolar a los creyentes. A�ade, que ella estaba intoxicada con placeres; porque la prosperidad, siendo el don de Dios, no debe ser condenada en s� misma, pero es bien sabido cu�n propensos son los ni�os del mundo a pasar del lujo a la insolencia.

Quien dice en su coraz�n. Ahora explica lo que significa la palabra para decir, de la que hablamos en la exposici�n del vers�culo anterior, a saber, que uno se convence a s� mismo y cree que ser� as� y as�, como lo hacen com�nmente los hombres orgullosos e insolentes, aunque a menudo lo ocultan con modestia y no desean que se conozca p�blicamente.

Lo soy, y no hay nadie aparte de m�. Esta arrogancia, por la cual ella se prefiere al mundo entero, es intolerable. Primero, ella piensa que ella es; segundo, imagina que el resto del mundo no merece ser comparado con ella; En tercer lugar, se promete a s� misma un descanso eterno, porque dice que no me sentar� como una viuda. En cuanto al primero, no hay ninguno de los que se pueda decir con verdad que �l es, sino solo Dios, que tiene derecho a decir: "Soy lo que soy" ( �xodo 3:14;) porque por esta marca se distingue de las criaturas. Por lo tanto, el que piensa que subsiste por su propio poder le roba a Dios el honor que se le debe, y Babilonia, al exaltarse a s� misma, hizo la guerra con Dios. En segundo lugar, trataba al mundo entero con desprecio, cuando prefer�a hacerlo. De esta manera, los hombres orgullosos comienzan con Dios, represent�ndolo como su enemigo, y terminan convirtiendo a todos los hombres, sin excepci�n, en sus enemigos, a trav�s de su arrogancia. La tercera cl�usula, que puede considerarse como la piedra angular de su orgullo, es que considera que su condici�n es eterna, y no tiene en cuenta la responsabilidad de los asuntos de los hombres de sufrir cambios; porque los hombres superiores han sido exaltados, a veces por eso hunden a los inferiores.

Versículo 9

9. Pero esas dos cosas se te ocurrir�n de repente. Debido a que Babilonia supon�a que estaba fuera del alcance de todo peligro, el Profeta amenaza con su dolor muy fuerte. Cuando ella dijo que no ser�a "viuda" ni "sin hijos", declara, por otro lado, que ambas calamidades caer�n sobre ella, de modo que su desdicha miserable la expondr� al m�s m�nimo desprecio.

En su perfecci�n. Es decir, "completamente", de modo que en todos los puntos, sin excepci�n, no tendr� hijos. Tambi�n existe un contraste impl�cito entre el castigo moderado, que puede esperarse un alivio, y la terrible venganza de Dios, que no tiene otro fin que la ruina; porque, cuanto mayor es la confianza con la que los hombres malvados est�n euf�ricos, m�s severamente son castigados.

Por la multitud de tus adivinaciones. Algunos traducen este t�rmino adivinos; pero creo que denota el acto o el vicio en lugar de las personas. Algunos explican que ? (beth) significa "a causa de" y entienden que expresa una causa; y en este sentido ocurre frecuentemente en las Escrituras. Sin embargo, podr�a interpretarse adecuadamente que los babilonios no obtendr�n ayuda ni alivio de la habilidad enga�osa en adivinaciones de las que tanto se jactaban; y as� podr�a traducirse a pesar de eso; (227) como si hubiera dicho: "La abundancia de adivinaciones o augurios no impedir� que estas cosas le sucedan a Babilonia". (228) Se burla de la confianza que depositaron en sus in�tiles augurios, por lo que pensaron que preve�an eventos futuros; pero, como nos detendremos poco despu�s en gran medida en este punto, admito f�cilmente que aqu� se considera una de las causas de la venganza que se les inflige, que, como consecuencia de confiar en tales delirios, no tem�an nada. (229)

Versículo 10

10. Porque confiaste. Explica lo que dijo en el verso anterior, aunque puede extenderse a�n m�s, para ser una censura del fraude y la opresi�n y la violencia y las pr�cticas injustas por las cuales los babilonios se elevaron a un poder tan grande. Casi todos los grandes reinos son, lo que un ladr�n distinguido los declar� ser, grandes robos; porque no hay otra forma de ampliar sus dominios que extorsion�ndolos de los dem�s mediante la violencia y la opresi�n, y expulsando a los propietarios legales de sus viviendas, para que solo ellos puedan reinar en general.

En tu malicia Da el nombre de "malicia" a lo que luego adornar� con nombres m�s plausibles, a saber, sabidur�a y conocimiento. De esta manera, los tiranos generalmente disfrazan sus trucos, cuando dejan de lado toda consideraci�n a la justicia y la equidad, y enga�an astutamente a la gente; pero el Se�or los detesta y los expone; para que se haga evidente que no sirvi� para cubrir su maldad con velos in�tiles. As�, Job, despu�s de haber dicho que "los sabios son tomados en su propia sabidur�a", explica esto llam�ndolo "astucia". ( Job 5:13.)

T� dijiste: Nadie me ve. Cuando agrega que Babilonia pens� que no se ve�an sus iniquidades, esto se refiere a la indulgencia libre en el pecado; porque mientras los hombres son mantenidos en el cumplimiento del deber por temor o verg�enza, el que no teme a Dios como testigo, ni cree que los hombres sabr�n lo que hace, irrumpe en todo tipo de libertinaje. Es cierto, de hecho, que incluso los peores hombres a menudo son atormentados por los aguijones de la conciencia; pero, al cerrar los ojos, se sumergen en la estupidez como en un lugar al acecho y, en resumen, endurecen todos sus sentidos. Sobre todo, vemos que tienen la dureza de burlarse de Dios, como si por su astucia pudieran deslumbrar sus ojos; porque cada vez que desean defraudar a los simplones, piensan que no son detectados, como si pudieran imponerse a Dios. Pero sin ning�n prop�sito se halagan en su astucia, porque el Se�or se quitar� r�pidamente la m�scara de ellos. Por lo tanto, todos los hombres deber�an aborrecer esta sabidur�a, por la cual los hombres se enga�an a s� mismos y logran su propia ruina.

Yo, y no hay ninguno a mi lado. Nuevamente repite esas blasfemias, para que todos puedan comprender claramente cu�n grandemente Dios los aborrece, y cu�n cerca de la destrucci�n est�n todos los que se elevan m�s de lo que deber�an.

Versículo 11

11. Por lo tanto, el mal vendr� sobre ti. Continuando con el tema que hab�a presentado anteriormente, ridiculiza la tonta confianza de los babilonios, quienes pensaron que por la posici�n de las estrellas preve�an todos los eventos. Por lo tanto, dice que pronto ser�n superados por lo que la Escritura amenaza generalmente contra todos los que desprecian a Dios ( 1 Tesalonicenses 5:3) que, "cuando digan: Paz y seguridad, la destrucci�n repentina los abrumar�, "Y que al amanecer del d�a no sabr�n lo que se lograr� en la noche; y queda muy claro en el libro de Daniel que esto sucedi�. ( Daniel 5:30.)

Versículo 12

12. P�rate ahora en medio de tus adivinaciones. El Profeta habla como estamos acostumbrados a hablar con hombres desesperados, en quienes ninguna advertencia produce un buen efecto; �Haz lo que est�s acostumbrado a hacer; al final ser�s instruido por el evento; Sabr�s de qu� te sirven los augures y los adivinos. Con la palabra "soporte" alude a la costumbre de los augures, que permanecen inm�viles en un lugar hasta que se ve alg�n signo. (230) Del mismo modo, los astr�logos marcan sus divisiones en los cielos, incluso en los puntos m�s peque�os. Si se considera preferible traducir ????? (chabarim) adivinadores en lugar de adivinaciones, no tendr� mucha objeci�n; porque el significado de la palabra es ambiguo.

Si tal vez prevalecer�s. Como si hubiera dicho: "No podr�s, con la ayuda de tus augures, mitigar la calamidad que est� a punto de alcanzarte". Se burla de su perversa confianza en este terreno, de que cuando hayan hecho todos los intentos, no les seguir� ninguna ventaja.

Versículo 13

13. Te has cansado. Ahora declara a�n m�s claramente lo que hab�a expresado anteriormente en un lenguaje algo oscuro; que todos los esquemas que Babilonia hab�a adoptado previamente conducir�an a su ruina; porque ella alimentaba dentro de s� misma una vana confianza que surg�a de la creencia de su poder y sabidur�a, como si nada pudiera lastimarla.

En la multitud de tus consejos. �l los llama no solo "consejos", sino "una multitud de consejos", para declarar que no hay una buena raz�n para enorgullecerse o exaltarse a s� mismos, cualquiera que sea el ingenio o la habilidad de sus esfuerzos para enga�ar; porque sus consejos astutos, cuanto m�s numerosos y veros�miles sean, les molestar�n m�s. Esta es una declaraci�n general contra aquellos que, confiando en su propia habilidad, inventan y forman consejos de todo tipo y, confiando en su prudencia, re�nen todas las estratagemas y molestias que pueden inventarse para oprimir a otros; porque Dios dispersa todos sus artilugios y derriba sus dise�os fraudulentos, ya que amenaz� con que todos los medios ilegales no tendr�an �xito. "Se atreven", dice �l, "a buscar consejo, pero no de m�; tejen una red, pero no de mi Esp�ritu ". ( Isa�as 30:1.)

As�, las consultas de muchas personas fracasan por completo, porque no piden consejo a Dios, de quien ( Santiago 1:5) se debe buscar toda la sabidur�a; porque, cuanto m�s trabajan, mayor molestia sufren y no pueden obtener ninguna ventaja. Bien dice David (231) dice, (Salmo 127:2), que "en vano se esfuerzan los que se levantan temprano en la ma�ana, y ve tarde a descansar y come el pan de la tristeza �. porque �l habla de los no creyentes, que no ponen sus preocupaciones en el Se�or, sino que, confiando en su industria, hacen muchos esfuerzos audaces. El Se�or ridiculiza esta confianza y hace que se sientan decepcionados y sientan lo in�tiles que son todos sus trabajos y esfuerzos perversos, y c�mo de esta manera son castigados por su imprudencia; mientras que al mismo tiempo "el amado de Dios duerme placenteramente", como se dice en ese pasaje. No es que se liberen de todas las molestias, sino que no se cansen de trabajos in�tiles y se comprometan con Dios como resultado de todos sus asuntos.

D�jalos pararse ahora. Aqu� percibimos a qu� consejeros se refiere principalmente el Profeta, es decir, aquellos adivinos que se jactaban ante la gente del nombre vac�o de la ciencia; como si entendieran, todos los eventos futuros mirando las estrellas. Pero anteriormente hemos hablado de esa astrolog�a judicial y de su inutilidad. Si se objeta, que no estaba en el poder de esos hombres mitigar los peligros que se cern�an sobre ellos, respondo, los babilonios lo habr�an hecho a su sugerencia, si hubieran previsto la calamidad; y, como no lo previeron, la conclusi�n es que su arte no ten�a ning�n fundamento. Es inactivo fingir, como hacen algunos, que el Profeta reprende la falta de habilidad en el arte, y no el arte en s�; porque se dirige a los babilonios, que fueron los autores de esta ciencia.

Las carpetas de los cielos. Dice ingeniosamente que "atan los cielos"; porque pronuncian sus decisiones tan audazmente como si, al atar y atar las estrellas, mantuvieran a la humanidad encadenada. Sin embargo, si alguien elige representar el t�rmino "inchanters", el significado no ser� inaplicable, y ambos se denotan con el verbo ??? (chabar). Aunque observar la posici�n de las estrellas no es en s� mismo pecaminoso, el Profeta dice que es llevado m�s lejos de lo apropiado por aquellos que sacan conclusiones dudosas sobre eventos dudosos, y parece indirectamente contrastar a esos observadores con los profetas, en orden para hacerlos m�s detestables, porque extinguen todas las predicciones divinas; porque, cuando los hombres atribuyen a las estrellas una necesidad fatal, todos los juicios de Dios deben caer al suelo.

Versículo 14

14. He aqu�, ser�n como rastrojo. Con un entusiasmo a�n mayor, ataca a los astr�logos que fortalecieron el orgullo de Babilonia con su jactancia vac�a; porque los impostores de este tipo suelen quitar todo temor de Dios de los corazones de los hombres, atribuy�ndolo todo a las estrellas, para que nada quede en manos de la providencia de Dios. De ah� surge el desprecio de Dios y de todas sus amenazas; porque los castigos no se atribuyen al juicio de Dios, sino a alg�n destino y relaci�n de cosas que tontamente imaginan. Por esta raz�n, �l se enciende en tal indignaci�n contra los babilonios, y dice que estar�n quemando "rastrojo", que se consume r�pidamente; porque no los compara con la madera, que es �til para dar calor, sino con "rastrojo", para mostrar que nada es tan ligero o in�til.

Versículo 15

15. As� ser�n contigo. Despu�s de haber amenazado con destruir a esos astr�nomos, vuelve a recurrir a los babilonios, y amenaza con que no busquen ayuda de esa parte de la que la esperaban, y que no deber�an confiar en esos consejos vanos, con los que hab�an esperado durante mucho tiempo. y se enfadaron en vano.

Los llama traficantes o, como solemos decir, traficantes; una met�fora tomada de los comerciantes, que son expertos en innumerables artes de enga�o y en imposturas de todo tipo; porque los pr�ncipes no consultan de una manera adecuada a su rango, sino que trafican en transacciones vergonzosas. (232) Aunque podemos extender esto a todos los aliados a quienes ayudaron los babilonios, el Profeta tiene su ojo principalmente en los adivinos. Cuando agrega, desde tu juventud, agrava la culpa de Babilonia, al haber sido infectado con esta tonta creencia de una fecha antigua, y al haber mantenido este error como si hubiera nacido con ella.

Cada uno a su propio barrio. (233) Se supone que el Profeta aqu� habla del vuelo de los astr�logos, que cada uno proveer� su propia seguridad; y estoy totalmente de acuerdo con esto, pero creo que tambi�n hay una alusi�n a los "cuartos" de los cielos, que los astr�logos dividen y miden, para deducir sus pron�sticos de ellos. Por lo tanto, ridiculiza su vana jactancia. �Se retirar�n a sus habitaciones, pero se desviar�n y no habr� medios de protecci�n. Si alguien elige aplicarlo a la revuelta de aquellos cuya asistencia, Babilonia pens� que en cualquier momento podr�a obtenerla f�cilmente, no tengo objeci�n.

Información bibliográfica
Calvino, Juan. "Comentario sobre Isaiah 47". "Comentario de Calvino sobre la Biblia". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/cal/isaiah-47.html. 1840-57.
 
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