Lectionary Calendar
Saturday, September 28th, 2024
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
advertisement
advertisement
advertisement
Attention!
For 10¢ a day you can enjoy StudyLight.org ads
free while helping to build churches and support pastors in Uganda.
Click here to learn more!
free while helping to build churches and support pastors in Uganda.
Click here to learn more!
Bible Commentaries
Título completo de la Biblia Familiar del Nuevo Testamento de Edwards Biblia Familiar NT
Declaración de derechos de autor
Estos archivos son de dominio público.
Texto Cortesía de BibleSupport.com. Usado con permiso.
Estos archivos son de dominio público.
Texto Cortesía de BibleSupport.com. Usado con permiso.
Información bibliográfica
Edwards, Justin. "Comentario sobre 1 Corinthians 2". "Nuevo Testamento de la Biblia Familiar de Edwards". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/fam/1-corinthians-2.html. Sociedad Americana de Tratados. 1851.
Edwards, Justin. "Comentario sobre 1 Corinthians 2". "Nuevo Testamento de la Biblia Familiar de Edwards". https://beta.studylight.org/
Versículo 1
No con excelencia de palabra ; ese refinamiento ret�rico, o esas sutiles discusiones filos�ficas que admiraban los griegos.
El testimonio de Dios ; sobre Jesucristo y el camino de la salvaci�n por medio de �l.
Versículo 2
no saber ; rebajarme entre vosotros como uno que no sab�a nada m�s; en otras palabras, hacer de la doctrina de la salvaci�n por Jesucristo , y �ste crucificado , mi �nico tema. Cristo crucificado como expiaci�n por el pecado, es la gran verdad central del evangelio. Otras verdades, a fin de ser correctamente comprendidas y tener el debido efecto, deben ser vistas en conexi�n con �sta ya la luz de �sta.
De ah� la gran prominencia que Pablo le dio en su predicaci�n, y que todos los ministros deber�an darle en la suya; de ah� tambi�n el lugar prominente que esta verdad deber�a ocupar en las contemplaciones de todos los que quieren crecer en la gracia, o adquirir inter�s en las bendiciones de la salvaci�n. G�latas 6:14 ; Filipenses 3:7-9 .
Versículo 3
En debilidad-miedo-temblor ; sab�a que ten�a muchos enemigos. Sent�a profundamente su insuficiencia y tem�a no tener �xito. Dios, sin embargo, que conoc�a sus dificultades, tuvo compasi�n de �l y lo anim� a seguir adelante. Hechos 18:6 ; Hechos 18:9-10 ; 2 Corintios 10:10 .
Versículo 4
Palabras tentadoras de la sabidur�a del hombre ; como los que usaban los oradores paganos para obtener aplausos.
En demostraci�n del Esp�ritu y de poder ; consisti� en esa demostraci�n de la verdad que ten�a como fundamento el Esp�ritu y el poder acompa�antes de Dios.
Versículo 5
No te apoyes en la sabidur�a de los hombres ; no descansar en el testimonio humano, sino en el divino; y ser producido no por el poder humano, sino por el divino. Cuanto m�s profundamente sientan los ministros del evangelio su propia insuficiencia y su dependencia de Dios para el �xito, m�s probable es que su predicaci�n sea asistida por el poder del Esp�ritu Santo, y as� sea eficaz para la salvaci�n de los hombres. 2 Corintios 12:9-10 .
Versículo 6
sabidur�a ; lo que es verdaderamente sabio en la estimaci�n de Dios y de los que son como �l.
Los que son perfectos ; que tienen madurez de conocimiento y discernimiento espiritual, y as� est�n preparados para recibir las revelaciones m�s profundas del evangelio.
No la sabidur�a de este mundo ; eso que los hombres mundanos llaman sabidur�a.
Que vienen a la nada ; que perecen ellos mismos, con todas sus vanas maquinaciones que oponen a la sabidur�a y al poder del evangelio.
Versículo 7
Hablamos sabidur�a de Dios en misterio ; al hablar la sabidur�a de Dios proclamamos un misterio. La palabra misterio se usa aqu�, como a menudo en otras partes del Nuevo Testamento, para denotar algo m�s all� del poder de la sabidur�a humana para descubrir.
Incluso la sabidur�a oculta ; lo que durante mucho tiempo hab�a sido en gran parte desconocido, pero ahora fue revelado en el evangelio.
ordenado antes del mundo ; propuesto desde la eternidad para revelar.
para nuestra gloria ; para que nos eleve a la gloria a los que la recibimos. El ap�stol se refiere tanto a la gloria espiritual que el evangelio otorga a los hombres aqu�, como a la eterna gloria celestial en la que termina, siendo la primera prenda y garant�a del segundo.
Versículo 8
Todas las personas, por grandes que sean sus ventajas, que no son ense�adas por el Esp�ritu Santo, son sumamente ignorantes de las cosas divinas. Se revelan claramente verdades de las cuales no tienen un concepto justo, porque aman m�s las tinieblas que la luz, siendo malas sus obras. En su ignorancia, pueden cometer cr�menes que traer�n males interminables sobre ellos mismos y sobre los dem�s.
Versículo 9
Como est� escrito ; Isa�as 64:4 .
Las cosas que Dios ha preparado ; es en estas cosas, que incluyen todas las bendiciones que el evangelio otorga a los hombres aqu�, y el "sobrecogedor y eterno peso de gloria" en lo sucesivo, que consiste la gloria de la que se habla en el vers�culo 1 Corintios 2:7 .
Versículo 10
a nosotros ; los ap�stoles y sus condisc�pulos, que fueron ense�ados por el Esp�ritu Santo.
Busca ; entiende completamente, y por lo tanto puede revelarnos.
Versículo 11
Las cosas de un hombre ; sus pensamientos no revelados.
Aun as� ; como los pensamientos no revelados de un hombre no son conocidos sino por �l mismo, as� las cosas no reveladas de Dios no son conocidas sino por el Esp�ritu de Dios; y s�lo �l puede revelarlos. A los ap�stoles los revel�, ya trav�s de ellos fueron revelados a otros.
Versículo 12
No el esp�ritu del mundo ; que podr�a instruirnos s�lo en las cosas de este mundo, y hacernos, como �l mismo, terrenales en todos nuestros puntos de vista y sentimientos.
Podr�a ser conocido ; por su revelaci�n.
Las cosas que Dios nos da gratuitamente ; aquellos, a saber, mencionados en el vers�culo 1 Corintios 2:9 . Como el Esp�ritu Santo est� completamente familiarizado con la mente y la voluntad de Dios, y es capaz de comunicar toda la luz necesaria a los hombres, debe ser divino.
Versículo 13
En las palabras que ense�a el Esp�ritu Santo ; el Esp�ritu les ense�� no s�lo lo que hab�a que comunicar, sino c�mo comunicarlo, no s�lo mediante la predicaci�n, sino tambi�n por escrito. As� como el Esp�ritu Santo ense�� a los escritores de la Biblia qu� verdades comunicar y con qu� palabras comunicarlas, se puede confiar en �l con seguridad como una expresi�n exacta de la voluntad de Dios y una regla perfecta de fe y pr�ctica.
Versículo 14
El hombre natural ; el mismo que es conforme a la carne, y piensa en las cosas de la carne, Romanos 8:5 ; el hombre que no est� iluminado por el Esp�ritu Santo, que no ama la verdad, y es esclavo voluntario del pecado.
No recibe las cosas del Esp�ritu de Dios ; no los aprehende ni los aprecia correctamente.
Son tonter�as ; parecen tontos.
Tampoco puede conocerlos ; necesita ser renovado e iluminado por el Esp�ritu Santo. Como sin discernimiento espiritual ning�n hombre comprender� correctamente o tratar� adecuadamente las cosas que Dios ha revelado, y como el autor de este discernimiento es el Esp�ritu Santo, todos deben buscar su ense�anza; y no s�lo atienda a las palabras en las que comunica la verdad divina, sino p�dale que les muestre su significado, haga que les d� la impresi�n correcta y sea el medio de vida espiritual para sus almas.
Salmo 119:18 ; Juan 6:63 .
Versículo 15
El que es espiritual ; el que es nacido del Esp�ritu, y por lo tanto piensa en las cosas del Esp�ritu. Romanos 8:5 .
Juzga todas las cosas ; discierne correctamente todas las cosas espirituales, ama su excelencia y juzga correctamente acerca de ellas.
�l mismo no es juzgado por nadie ; los que no son iluminados por el Esp�ritu Santo, no juzgan correctamente acerca de �l. Act�a a partir de principios con los que no est�n familiarizados.
Versículo 16
Porque �qui�n ha conocido la mente del Se�or ? nadie sino aquel que ha sido ense�ado por el Esp�ritu del Se�or. Por tanto, el hombre natural, que no ha sido as� ense�ado, no puede juzgarnos a los que somos espirituales y tenemos la mente de Cristo ; es decir, saberlo, habiendo sido ense�ado por Dios.