Lectionary Calendar
Saturday, September 28th, 2024
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
advertisement
advertisement
advertisement
Attention!
Tired of seeing ads while studying? Now you can enjoy an "Ads Free" version of the site for as little as 10¢ a day and support a great cause!
Click here to learn more!
Click here to learn more!
Bible Commentaries
Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo Testamento Comentario de Sutcliffe
Declaración de derechos de autor
Estos archivos son de dominio público.
Texto cortesía de BibleSupport.com. Usado con permiso.
Estos archivos son de dominio público.
Texto cortesía de BibleSupport.com. Usado con permiso.
Información bibliográfica
Sutcliffe, Joseph. "Comentario sobre Deuteronomy 10". Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo Testamento. https://beta.studylight.org/commentaries/spa/jsc/deuteronomy-10.html. 1835.
Sutcliffe, Joseph. "Comentario sobre Deuteronomy 10". Comentario de Sutcliffe sobre el Antiguo y el Nuevo Testamento. https://beta.studylight.org/
Versículos 1-22
Deuteronomio 10:6 . Mosera: all� muri� Aar�n. En N�meros 20:28 ; N�meros 33:38 , leemos que Aar�n muri� en el monte Hor, que estaba a siete d�as de camino desde Moseroth.
Este lugar est� lleno de dificultades. �Por qu� se mencionan aqu� a Aaron y Levi? Porque eran los guardianes del arca y de las tablas mencionadas anteriormente; y porque el Se�or hab�a perdonado a Aar�n. La dificultad con respecto al lugar de la muerte de Aar�n se explica as� por algunos que Israel, intimidado por las ventajas que el rey Arad hab�a ganado sobre ellos, N�meros 21 .
, hizo un movimiento retr�grado hacia Egipto, y lleg� dos veces al mismo lugar, lo cual no es improbable. En consecuencia, entienden que el monte Hor est� situado en el distrito de Mosera. Otros distinguen Beroth-bene-Jaakan de Bene-Jaakan, y Mosera de Moseroth, porque Moseroth-bene-Maakan es Kadesh, el trig�simo segundo campamento; pero Bene-Jaakan era el vig�simo s�ptimo campamento. N�meros 33:31 .
Por tanto, de este lugar llegaron a Mosera, o al monte Hor, donde muri� Aar�n. Hasta ahora Sinopsis de los cr�ticos de Poole. Pero Kennicott, confiado en un defecto de la copia hebrea, sigue el pentateuco samaritano, que aclara todas las dificultades. Traduce el pasaje como debajo. �Y partieron los hijos de Israel de Moserot y asentaron en Bene-Yaacan; de all� partieron y asentaron en Hagidgad; de all� partieron y asentaron en Jotata, tierra de r�os de agua; de all� partieron, y asentaron en Ebrona; de all� partieron y asentaron en Ezi�n-Gaber; de all� partieron y asentaron en el desierto de Zin, que es Cades; de all� partieron y asentaron en el monte Hor, y all� muri� Aar�n. As�, el conjunto se armoniza a entera satisfacci�n.
Deuteronomio 10:8 . El Se�or separ� a la tribu de Lev�. El servicio del santuario ser�a mejor realizado por una orden selecta de hombres. Los primog�nitos de todo Israel habr�an sido demasiado numerosos para el trabajo, y no podr�an haberse librado de sus deberes en casa. Esta tribu m�s peque�a era una figura de la iglesia, que es un sacerdocio real.
REFLEXIONES.
Mois�s habiendo hablado libremente del pecado de Israel; procede ahora a tratar de su restauraci�n. Se�ala la gran misericordia de Dios al restaurar las tablas rotas de la ley. El hombre ca�do, de mente altiva y movido por un atrevido esp�ritu de independencia y amor propio, se opone a las restricciones de la pasi�n y se niega a someterse a cualquier autoridad menos que divina. Por lo tanto, los estatutos penales de todas las naciones cristianas deben seguir el modelo del c�digo divino, para que los imp�os teman un castigo mayor que el que puede infligir el magistrado.
Pero esta circunstancia sumamente singular de que las tablas yacen rotas en el suelo y profanamente arrojadas a un lado, aunque escritas con el dedo de Dios, deber�a recordarnos c�mo hemos pisoteado profanamente las diez palabras del cielo bajo nuestros pies y provocado el fuego. de la ira de Dios para arder de tal manera que deber�a hacer que el pecador tema y se estremezca sobremanera. Y nunca dejemos de lamentarnos por las locuras del pasado, y oremos al Se�or para que nos renueve y nos restaure una copia fiel de su ley, escribi�ndola en nuestro coraz�n.
Despu�s de restaurar las tablas, Mois�s se�ala a continuaci�n que Aar�n y Lev� fueron restaurados, porque todo Israel por la rebeli�n del becerro hab�a perdido su pacto. A menos que tengamos un ministerio provisto para nutrir y alimentar nuestras almas con alimentos saludables, no podremos permanecer en Cristo ni retener la ley. Los que por negligencia menosprecian las ordenanzas de Dios, menosprecian al autor de las ordenanzas; y est� celoso de su gloria y de los afectos de su pueblo.
El legislador de Israel, habiendo ensayado las principales transacciones del desierto, y lleno su alma, mientras habla, con la grandeza y gloria del c�digo moral, civil y ceremonial, resume todo en el lenguaje m�s sublime y las aplicaciones m�s impresionantes. Y ahora Israel, �qu� hace el Se�or? Exige de ti, sino que temas al Se�or tu Dios, que andes en sus caminos y que lo ames con todo tu coraz�n y con toda tu alma.
Desde�ando un mero servicio ceremonial, una pureza congregacional, dirige que toda obediencia debe proceder del amor; que la circuncisi�n sea la del coraz�n, Romanos 2:28 ; y que los ancianos juzguen y protejan a la viuda, al hu�rfano y al extranjero. En una palabra, esa obediencia debe ser espiritual y santa en todos los sentidos.
Su mente, en un momento, parece estar llena del fin de la ley; transportarse a los tiempos evang�licos, y asociarse con Cristo al exponer esta ley en el monte a las multitudes. Que todos los hombres apunten al amor, que es el fin de los mandamientos; y que los ministros especialmente, despu�s de manifestar la pureza del precepto, conduzcan al pecador a la esperanza puesta delante de �l; y hacer cumplir con la grandeza de Dios. He aqu�, del Se�or son los cielos y los cielos de los cielos, la tierra y toda su plenitud.