Lectionary Calendar
Saturday, September 28th, 2024
the Week of Proper 20 / Ordinary 25
Attention!
StudyLight.org has pledged to help build churches in Uganda. Help us with that pledge and support pastors in the heart of Africa.
Click here to join the effort!

Bible Commentaries
Job 4

Comentario Popular de la Biblia de KretzmannComentario de Kretzmann

Buscar…
Enter query below:

Versículo 1

Entonces Elifaz, el temanita, respondi� y dijo:

Versículos 1-21

Habiendo as� Job cedido a su impaciencia, sus amigos pensaron que era su deber corregirlo. Pero en lugar de mostrarle en qu� sentido su posici�n era incorrecta, proceden de acuerdo con la suposici�n de que Job debe ser culpable de alguna falta o pecado especial, y lo reprenden en consecuencia.

Versículo 2

Si intentamos comunicarnos contigo, �te entristecer�s? Elifaz quer�a estar seguro desde el principio de que Job no malinterpretar�a a sus amigos si se aventuraban a hacer algunas sugerencias, que no se sentir�a insultado ni ofendido si hablaban una palabra en su nombre. Pero, �qui�n puede abstenerse de hablar? Sinti� que deb�a expresar su opini�n en este momento.

Versículo 3

He aqu�, has instruido a muchos, es decir, con palabras de amorosa reprensi�n y amonestaci�n, y has fortalecido las manos d�biles, haciendo que las manos flojas asuman sus tareas con nuevo vigor.

Versículo 4

Tus palabras han sostenido al que ca�a, y has fortalecido las rodillas d�biles, sosteniendo en pie a los hombres que estaban a punto de hundirse, en sentido figurado, con su apoyo moral, con su �nimo.

Versículo 5

Pero ahora te ha llegado y te desmayas; ahora que la desgracia, a su vez, hab�a golpeado a Job, todas sus excelentes amonestaciones a los dem�s fueron olvidadas, y estaba d�bil e impaciente. Te toca y est�s turbado, confundido, presa del terror, lleno de debilidad y abatimiento cuando el sufrimiento llega a su propia puerta.

Versículo 6

�No es �ste tu temor, tu confianza, tu esperanza y la rectitud de tus caminos? o, "�No es tu piedad, tu confianza y tu esperanza la justicia de tus caminos?" Elifaz dio a entender que seguramente Job no ten�a mala conciencia, que ciertamente pod�a y deb�a recordar la rectitud de su vida, que su amigo no estaba dispuesto a cuestionar.

Versículo 7

Te ruego que recuerdes a qui�n pereci� siendo inocente. �O d�nde fueron cortados los justos? Este �nfasis excesivo en la seguridad de los rectos muestra que Elifaz ten�a la intenci�n de expresar sus dudas sobre la piedad invariable de Job, tratando de transmitir la idea de que, despu�s de todo, debe haber habido algo que merec�a un castigo extraordinario de la mano de Dios. Este pensamiento ahora se elabora en detalle.

Versículo 8

Como he visto, los que aran iniquidad, sembrando maldad en sus campos y siembran maldad, miseria y ruina para otros, cosechan lo mismo. "Todo lo que el hombre sembrare, eso tambi�n segar�", G�latas 6:7 .

Versículo 9

Por el soplo de Dios perecen, como Dios sopla sobre ellos con ira, y por el soplo de su nariz son consumidos, como plantas que el viento abrasador quema, y ??se marchitan y se marchitan.

Versículo 10

El rugido del le�n, cuando sale para agarrar y desgarrar su presa, y la voz del le�n feroz, del rugiente que muestra su temperamento airado, y los dientes de los leoncillos est�n rotos.

Versículo 11

El viejo le�n, el que disfruta de la plenitud de la fuerza adulta, perece, deambula indefenso, por falta de presas, y los robustos cachorros de le�n se dispersan por el exterior, m�s bien, los cachorros de la leona. Se mencionan leones de todas las edades y de todas las condiciones de fuerza para representar la destrucci�n del pecador altivo con toda su casa. Elifaz saca ahora una conclusi�n que expresa con mucho cuidado.

Versículo 12

Ahora, una cosa me fue tra�da en secreto, vino a �l de una manera sigilosa y misteriosa, y mi o�do recibi� un poco de ella, un leve susurro o balbuceo, como de un or�culo, que apenas se atrev�a a pronunciar.

Versículo 13

En pensamientos de las visiones de la noche, en cuadros como los que pintan los pensamientos en los sue�os, cuando el sue�o profundo cae sobre los hombres, cuando el esp�ritu del hombre parece penetrar en reinos sobrehumanos,

Versículo 14

Me sobrevino el miedo y el temblor, encontr�ndome con �l de tal manera que lo recorri� un escalofr�o, que hizo temblar todos mis huesos, en una profunda y espantosa agitaci�n.

Versículo 15

Entonces un esp�ritu pas� ante mi rostro, desliz�ndose o revoloteando ante �l como la aparici�n de un �ngel; los cabellos de mi carne se erizaron, como en un terror repentino y extremo;

Versículo 16

se detuvo, pero no pude discernir su forma, ten�a la vaga indiferencia que crea tal impresi�n de asombro; una imagen estaba ante mis ojos, hubo silencio, y escuch� una voz, m�s bien, un murmullo ceceante y una voz, una voz ceceante o murmurante, que dec�a :

Versículo 17

�Ser� el hombre mortal m�s justo que Dios? �Ser� un hombre m�s puro que su Hacedor? El pensamiento contenido aqu� es este, que quien censura el gobierno de Dios, como lo hab�a hecho Job en su queja, afirma ser m�s justo que Dios y, por lo tanto, se vuelve culpable.

Versículo 18

He aqu�, no confi� en sus siervos, los �ngeles ministradores; ya sus �ngeles acus� de insensatez, a los mismos esp�ritus de luz les imputa error, no pueden compararse con �l en santidad y pureza;

Versículo 19

mucho menos en los que habitan en casas de barro, hombres fr�giles con cuerpos materiales, terrenales, cuyo fundamento est� en el polvo, del que originalmente fueron enmarcados sus cuerpos, que son aplastados ante la polilla? �Totalmente consumidos como si no fueran m�s que polillas!

Versículo 20

Son destruidos, golpeados en peque�os pedazos y as� convertidos en polvo, de la ma�ana a la noche, siendo su vida un lapso de tiempo extremadamente corto; perecen para siempre sin que nadie se d� cuenta, pronto mueren y r�pidamente se olvidan.

Versículo 21

�No se va su excelencia que est� en ellos? Mueren, incluso sin sabidur�a, literalmente, "�No es su cuerda arrancada?" la imagen se tom� del r�pido armado de una tienda de campa�a. Sin haber encontrado la verdadera sabidur�a en sus vidas, habiendo vivido en la miop�a y la locura todos sus d�as, los hombres mueren, son cortados y llevados, Salmo 90:9 . Al recordar esto, el cristiano se ver� obligado en todo momento a orar: "Ens��anos, pues, a contar nuestros d�as para que apliquemos nuestro coraz�n a la sabidur�a".

Información bibliográfica
Kretzmann, Paul E. Ph. D., D. D. "Comentario sobre Job 4". "Comentario Popular de Kretzmann". https://beta.studylight.org/commentaries/spa/kpc/job-4.html. 1921-23.
 
adsfree-icon
Ads FreeProfile